Microrrelato Caza

Tema en 'Nano y Microrrelatos' iniciado por Atl, 19 Marzo 2012.

Estado del tema:
No se permiten más respuestas.
  1.  
    Atl

    Atl Usuario popular

    Géminis
    Miembro desde:
    30 Abril 2011
    Mensajes:
    902
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Título:
    Caza
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    372
    Nos conocimos una tarde, tal vez no fue el mejor momento de nuestras vidas, tú estabas asustado por los de mi especie, gritaste al verme acercar a ti, el miedo invadía tu cuerpo, te paralizaste cuando me acerque tanto que te podía oler.

    —No te preocupes- te dije.

    Un ruido sordo se escuchó cuando tu cuerpo tocó el suelo, había arrancado la vida de un ser que necesitaba más que nada, en cada momento después de morderte me he arrepentido de mi acción, aunque regresara en el tiempo en el que tú estabas vivo mi condena sería grande ´porque en mi memoria seguiría plasmado el recuerdo de que alguna vez te hice daño. Si me dieras una sonrisa martillaría mi corazón, pensaría en el momento que tu última mirada murió para siempre.

    Y hoy de nuevo volveré a cometer tan atroz acto, pero con una persona diferente, no es mi elección, es mi destino. Mi único consuelo es que algún día cuando mi vida termine volveré a verte y aunque sea por sólo un segundo nuestras miradas se volverán a cruzar y sabrás lo que sufrí y lo mucho que te extrañé.

    —Es hora de irnos- me dijo mi padre.

    Salimos de nuestro oscuro escondite esperando tener la suerte de encontrar la comida que odiamos, mas nos es necesaria para vivir.

    El viento ocultaba nuestras pisadas, la luna se escondía y desaparecíamos en la noche, los árboles cubría nuestras sombras, la naturaleza nos ayudaba porque era ella la que sufría al tener que soportar a esos bestiales animales a los que pertenecías. Fue el consuelo que tuve cuando tu carne tocó mi boca, no verías el fin de tu especie y los que amabas.

    Varios estaban en el lugar indicado uno a uno los míos acabaron con ellos.
    Faltaba uno. Era mi turno. El momento llegó, no tuve el valor de hacerlo, sus ojos aquellos orbes llenos de desesperación aunque diferentes a la vez eran iguales a los tuyos.

    Quizá tarde demasiado, quizá era la hora de mi fin, no importa que fue. Caí en las garras de nuestro enemigo y lo vi alejarse como lo hiciste hace tiempo, pero era yo la que me dirigía a la dirección del no ser.
     
    • Me gusta Me gusta x 1
Estado del tema:
No se permiten más respuestas.

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso