Botineras (SasuSaku, NaruHina, NejiTen, GaaMatsu, ShikaTema, SaiIno & JiraTsuna)

Botineras (SasuSaku, NaruHina, NejiTen, GaaMatsu, ShikaTema, SaiIno & JiraTsuna)

¡Hola mis amadas lectoras! Con todo esto del mundial (que en mi opinión gana argentina, obvio) se me ocurrió escribir un ff que girara en torno a este deporte, el fútbol. Ya se, parezco un pibe más, pero bueno, me gusta la idea :D
Este fic no esta relacionado de ninguna manera con la novela “Botineras”, pero sí al concepto de las tan famosas botineras argentinas. Las botineras son aquellas mujeres que se casan con futbolistas sólo por su dinero. Y se me ocurrió inventar este fic a partir de esa idea, les dejo el prólogo y si les gusta ya empiezo con el primer capi:
Bye!
Rocio

Botineras​

Prólogo​

Cantidad de palabras: 707



“Konoha Fútbol Club”, también conocido como “Konoha F.C.”, es el equipo de fútbol más popular y exitoso de todo Japón. Este equipo se constituye de, como a sus miembros les gusta llamarlo, un grupo de amigos fanáticos del fútbol. Y esto se debe a la gran pasión que estos muchachos sienten por este deporte.
Ahora, vamos a presentar a los deportistas. Comencemos con las dos estrellas del equipo, Naruto Uzumaki y Sasuke Uchiha. Naruto lleva el nueve, un rubio de ojos celestes muy simpático y amado por la prensa, con una habilidad y destreza incomparables.

Sin embargo, el capitán del equipo, Sasuke, no se queda atrás, no sólo se destaca por su estado físico y su buena conducta durante los enfrentamientos (esto último es la razón por la cual Naruto no fue designado capitán), sino también por ser un jugador nato, el diez del equipo marca por lo menos un gol en todos los partidos. El joven de cabello negro azabache es, además, muy popular con las chicas, tiene su propio club de fans, y también su propio club de acosadoras, aunque a veces es difícil distinguir uno del otro.

Luego tenemos al arquero, o portero como lo llaman en algunos lugares, Shikamaru Nara. Este joven con cabello castaño que ata en forma de piña es un vago por naturaleza, siempre que la pelota esta en el otro extremo pone sus manos en sus bolsillos y se queda mirando las nubes, pareciera que fuera a dormir. Sin embargo, esto no quita que ataje todos los tiros al arco que le lanzan.

El equipo cuenta con tres defensores de primera, Chouji Akimichi, Kankuro Sabaku No y Gaara Sabaku No. A pesar de estar algo rellenito, Chouji no deja pasar a ningún oponente más allá del área, no tiene un bueno control sobre la pelota pero no le cuesta quitar la pelota al contrario y pasársela a Shikamaru, con quien forma un buen dúo, a diferencia de Kankuro con su hermano menor.

Gaara es un pelirrojo de tez blanca como la nieve, y es frío como la nieve, pero un gran defensor con mucha paciencia (Una habilidad importante en partidos difíciles, de la cual Naruto carece), a diferencia de su hermano, también pelirrojo, que prefiere ir a buscar la pelota en lugar de esperar que el contrario se acerque. Los pocos goles que le meten a Konoha F.C. son, en su mayoría, culpa de Kankuro, y éste es abucheado por todos en ese momento, en especial por Gaara.

Los números cinco y seis están impresos en las camisetas de Rock Lee y Neji Hyuuga, una peligrosa combinación de hiperactividad (Lee) y tranquilidad (Neji) que cuando cooperan uno con el otro pueden llegar a esquivar a los once contrarios. Sin embargo, es sabido por todos los grandes celos de Lee hacia Neji, que junto con Sasuke es de los más populares con la tribuna femenina.

El siete del equipo se graduó de la Facultad de Medicina en insectología, pero la propuesta de formar parte del equipo le tentó. Shino Aburame es, sin duda, el “bicho raro” del grupo, juega en pantalones largos y con anteojos sin importar la temperatura, una vez jugó un partido en Río de Janeiro, Brasil, y tuvo que salir cuando se desmayó por el intenso calor.

Por último, pero no menos importante, tenemos a dos chicos también famosos entre las señoritas, pero que ellos en realidad lo ignoran. Se trata del número once, Kiba Inuzuka, y del número ocho, Sai. El Inuzuka es increíblemente orgulloso y quien participa de más peleas de todo el equipo, y Sai se caracteriza por siempre estar sonriendo, aunque la mayoría de las veces esta sonrisa sea falsa.

Y no nos olvidemos del manager del equipo, Jiraiya, un hombre de unos cincuenta años aproximadamente (no le gusta decir su edad) con cierto gusto por las mujeres jóvenes y voluptuosas, y por supuesto esta el director técnico, o DT, llamado Asuma Sarutobi, de unos treinta años con cabello castaño oscuro y siempre con un cigarrillo en su boca.

Los problemas para este exitoso equipo comienzan cuando entran en sus vidas siete mujeres llevadas por el interés y el dinero….¿o puede llegar a convertirse en amor verdadero? Pues, esto esta por verse….

Continuara…..


Dejen su opinión, por supuesto, me encantaría que lo hicieran. En el primer capitulo, hacen su aparición las botineras. Ojala les haya gustado. Adiós a todos y gracias por leer!

 

Re: Botineras (SasuSaku, NaruHina, NejiTen, GaaMatsu, ShikaTema, SaiIno & JiraTsuna)

Bueno, tomó su tiempo pero aquí les dejó el primer capitulo de este fic que espero llegue muy lejos :D
Queria agregar que soy semi-daltonica, por lo que siempre crei que el cabello de Kankuro era pelirrojo (o por lo menos desde que lo vi en Shippuden ya que no vi antes) lamento haberme equivocado alli :(
Bueno, da igual, ya lo tomare en cuenta para la proxima.
Word dice que no hay errores gramáticos, pero no le creo, asi que disculpen si ven algun error ok? :)
Adios chicas, disfruten el capi :D

Botineras

Capitulo 1​

El hospital “Kunoichi” no podía darse un respiro ese día. Se encontraba repleto, con muchas tareas por hacer y poca gente que las realizara, además de que el tiempo era escaso y preciado como el oro.
Una joven iba de aquí para allá, moviendo sus caderas al caminar con su blanco uniforme de enfermera. El cabello de esta mujer era una constante discusión, algunos le creían que era natural y otros pensaban firmemente que se lo había teñido. Y es que no se ve a una chica con cabello rosado todos los días, con dos bellas piedras de jade como ojos y una delgada cintura que resaltaba con su uniforme. Aunque Sakura Haruno no es una enfermera cualquiera, ella es la jefa del departamento de cirugías del hospital, un cargo de mucho peso e importancia dentro de la institución.

—Sakura-san — la llamó un médico con una planilla en sus mano

—Camina conmigo — le pidió la joven, colocándose unos guantes para la operación a corazón abierto que le tocaba ahora — ¿Qué sucede?

—La doctora Shizune esta enferma, no podrá presentarse para la operación de mañana — informó el hombre

—Que irónico, una doctora enferma — dijo la joven — Sólo dile que se mejore cuanto antes, mándale flores, bombones, una tarjeta, esas cosas. Ya sabes, como si fuera tu novia.

—Pero yo soy gay, Sakura-san — le recordó el médico

—Entonces, como si fuera tu novio — se corrigió ella rápidamente y el hombre se fue, para dar lugar a otro médico que caminó junto a Sakura.

—Sakura-san, los pacientes de la sala de espera se estan impacientando, ¿qué hago? — le consultó él.

—Sólo diles que esperen su turno en orden o no serán atendidos jamás — le ordenó la mujer y el hombre se fue. — Tú — Señaló a un médico que tomaba café — ¡¿Qué haces descansando?! No hay tiempo, ve a ayudar a la preparación del quirófano. ¡Corre, corre, vuela!

—Que cruel eres, frente de marquesina — rió una vocecita burlona tras ella, mientras el tercer hombre salía disparado hacia el quirófano.

—Ino-cerda, estoy ocupada — la atajó Sakura, sin dejar de caminar. Ino Yamanaka era no sólo una reconocida médica del hospital, sino también la mejor amiga de Sakura. Con unas curvas infartantes, ojos azul eléctrico y largo cabello rubio, Ino era el prototipo ideal de una enfermera sexy.

—Sí, pero esto es más importante, Tsunade nos llama a ambas — le contó la rubia, siguiendo a su apresurada amiga

—Va a tener que esperar, tengo que operar ahora — le contradijo la de cabello rosado, pero Ino la detuvo.

—No frentona, te suplantan, Tsunade dijo que esto es de vital importancia, vamos — la joven de ojos claros tomó a su amiga por el brazo y la arrastró a la oficina de Tsunade, directora del hospital y, por lo tanto, jefa de las dos chicas.




Mientras tanto, nuestro siguiente escenario es el programa de chimentos “Sueltos”, conducido por Kakashi Hatake, Maito Gai y Kurenai Yuhi. El trio hoy se encontraba presentando a cuatro nuevas modelos.

—Vamos a presentar a la primera de las chicas, ¿Gai? — le pasó la palabra Kurenai

—Muy bien — Gai tomó una tarjeta y leyó la información de la joven — Ella es originaria de China, una morena con ojos chocolates imperdibles. ¡Les presento a Tenten Ama!

La joven salió al programa vistiendo elegante ropas blancas y su cabello atado en dos chonguitos. Saludó a los conductores y tomó asiento.

—Ahora, vamos con al segunda, ¿Kakashi? — dijo la conductora

—¿Qué? Ah sí — recordó Kakashi, tomando la tarjeta — Ella es una dama del desierto, una rubia curvilínea que ama tanto las coletas que usa cuatro de ellas. Dénle la bienvenida a Temari Sabaku No.

La rubia de cuatro coletas fue recibida con aplausos y más de un silbido del público. Saludó a los conductores y tomó asiento a la derecha de Tenten.

—Ahora le toca a la tercera — agregó Kurenai y tomó su tarjeta — Una joven algo tímida, pero con todos los atributos de una diosa de la belleza. Su cabello azulino y sus ojos perlados son una combinación única, adelante, Hinata Hyuuga.

La bella Hinata salió a la vista, se notaba que estaba algo sonrojada por su primera vez en televisión. Caminó lentamente para no tropezarse de los nervios, saludó al público con la mano y se sentó a la izquierda de Tenten

—Bien, ahora última pero no menos importante — empezó Gai — Les presentó a una joven algo más joven, una joven castaña de verdadera belleza. ¡Pasa a escena, Matsuri!

La más joven de las cuatro entró al programa luciendo un vestido rojo muy bonito. Iluminando al público con una amplia sonrisa, Matsuri saludó a los conductores como habían hecho las demás y tomo asiento junto a Hinata.

— Muy bien gente, si quieren saber más de estas bellezas, tendrán que quedarse con nosotros, porque vamos a ir a una pequeña pausa — anunció Kurenai, y comezó el corte para comerciales.





—Adelante — les permitió la autoridad máxima del hospital Kunoichi en cuanto oyó los suaves golpeteos de Ino en su puerta. La rubia ingresó al despacho de Tsunade acompañada por su amiga de cabellos rosados.

Tsunade era una mujer de unos cincuenta años aproximadamente, pero aparentaba muchos menos gracias a un par de cirugías estéticas a las que se sometía de vez en cuando. Su cabello rubio lo llevaba atado en dos coletas, y su más notable atributo eran sus enormes pechos, los cuales semejaban dos balones de basquet.

—Tsunade-sama, ¿me mandó llamar? — le preguntó Sakura a su superior.

—Así es. — admitió la mujer — Como deben saber, Shizune esta muy enferma. Pues, ella siempre me acompañó a las cenas benéficas que se organizan en el elegante salón “Tsuki”, pero estando enferma obviamente no le es posible asistir. Sakura, Ino, yo estoy muy feliz con todo su trabajo en el hospital…

—No se ve muy feliz que digamos — comentó Ino, estudiando el serio semblante de Tsunade.

—Es el botox, no podré sonreír por las próximas dos horas y media, pero no viene al caso — explicó la directora del hospital — He decidido que esta noche me acompañarán a la cena benéfica. Nos encontraremos allí a eso de las diez, si no asisten considérense despedidas. ¿Algúna queja?

—Ninguna, Tsunade-sama — dijeron las dos chicas al unísono.

—Entonces, regresen al trabajo — les ordenó la mujer, y las dos muchachas se retiraron.

Una vez fuera de la oficina de Tsunade, las dos jovenes médicas decidieron planear la noche mientras caminaban de regreso al ala oeste del hospital, donde les correspondía atender.

—Creo que tengo un vestido muy elegante en casa, ¿lo recuerdas Sakura? — intentaba recordar Ino — Ese que use para seducir al millonario del casino.

—Ah, lo recuerdo, el rojo — recordó Sakura, y su amiga asintió con la cabeza — Sí, me acuerdo perfecto, ¿qué paso con ese tipo?

—Salimos un par de veces, me compró unas ropas y terminamos — simplificó la rubia

—Siempre tan materialista — suspiró la joven de ojos jade.

—Mira quien habla, frentona, ¿o no fuiste tú la que salió con un nerd multimillonario sólo para ver una película antes de que saliera en cines? — la interrogó la Yamanaka con mirada acusadora y tono burlón.

—¡Era Eclipse, no cualquier película! ¡Cualquier fan de la saga Crepúsculo lo haría! — se defendió la chica de cabello rosado. — Además, él no estaba tan mal.

—Sí, claro. — dijo Ino con sarcasmo — Da igual. Ven a casa esta noche y salimos juntas para Tsuki.






—¡Buena práctica, muchachos! — les felicitaba Asuma a sus once jugadores., dando una pitada a su cigarrillo marca “Marlboro”.

Todos los chicos se acercaron al entrenador, quien les dio su charla de cierre, por así decirlo.

—Asuma, ¿podrías dejar de fumar un poco? — le pidió Shikamaru, tapándose los ojos con sus guantes de arquero.

—Les quiero decir algo muy importante — les anunció Asuma — Esta noche, hemos sido invitados a una fiesta benéfica en el salón Tsuki, ya que somos los campeónes regionales. Deben estar allí alrededor de las diez.

—¿Es obligatorio? — preguntó Sasuke, a quien no le agradaban mucho las fiestas.

—Claro que sí, Sasuke, su asistencia es obligatoria. No pueden faltar — les dijo Jiraiya, quien acababa de llegar a la cancha. — Incluso Asuma y yo debemos ir.

—Que fastidio — suspiró Shikamaru

—Dicen que el salón Tsuki tiene una gran variedad de comida — comentó Chouji, relamiéndose los labios.

—También oí que iran muchas mujeres solteras — agregó Kankuro con una sonrisa pícara, mirando a sus amigos — Y sí hay sake, hay que mantenerlo alejado de Lee. — Y todos estallaron en carcajadas.

—¡Sólo fue una noche! — se defendió Rock Lee — ¡Y no fue para tanto!

—Sí para tí no es tanto obligar al DJ a poner el tema “Toxic” y ponerte a bailar como Britney Spears, entonces no es tanto — le dijo Neji, con su expresión tranquila de siempre, y todos rieron aún más, recordando el momento.

—¡Ja Ja! Bien muchachos, eso es todo, nos veremos en la fiesta benéfica — Asuma paró de reír para decir esto — ¡A las duchas todos!

Los muchachos se pusieron de pie, saludaron a su entrenador y manager y luego se dirigieron todos juntos a quitase el sudor, ya que encima era un día de un calor intenso y veraniego. El tema de discusión fue, naturalmente, la fiesta de esa noche.


—Yo creo que puede ser divertida, de verás —opinó Naruto, sacándose su camiseta para luego dejarla dentro de su casillero.

—No lo creo, seguro estará lleno de viejos ricachones y molestos fotógrafos — fue la fría opinión de Gaara

—Hermano, no seas así, yo opinó igual que Naruto — dijo Kankuro desde la ducha. Gaara le lanzó una mirada asesina, y su hermano no habló más.

—Yo también, además quien sabe, puede que haya varias mujeres bonitas que necesiten ser conquistadas por mí — comentó Kiba pícaramente, saliendo de la ducha para que entrara Shino.

—Saben, de hecho van varias mujeres — dijo Sai. Se puso una toalla alrededor de la cintura, y se disponía a entrar a la ducha pero antes agregó — Según la revistas de farándula "Gente", siempre asisten modelos, conductoras, bailarinas, y más creo.

—Bueno, supongo que lo averiguaremos esta noche — dijo Sasuke sin mucho ánimo, quitándose su camiseta.

—Viejo, pero que fastidio — soltó Shikamaru, que se encontraba en cuero.






—Chicas, este ha sido un programa estupendo, gracias por venir — le decía Gai a las cuatro modelos.

—No, gracias a ustedes por invitarnos — le agredeció Tenten con una sonrisa

—Ha sido un honor para nosotras que nos invitaran — agregó Matsuri

—Entonces, nos despedimos y los dejamos con el noticiero. ¡Adiós público, y gracias por elegirnos! — finalizó el programa Kurenai.

—¡Ya no estamos al aire! — reveló el camarógrafo

—¡Buen programa chicas! — las felicitó Kakashi con una sonrisa (que no se podía ver por su máscara, pero parecía ser una sonrisa)

—Saben, como modelos que son, deberían asistir a la fiesta benéfica de esta noche — las invitó Kurenai, dándole un papel a Hinata — Cuando comenzé mi carrera, asistí a una fiesta en este lugar donde conocí a mi manager.

—¿Fiesta benéfica del salón Tsuki? — leyó Hinata, impresionada. Parecía una fiesta muy elegante

—¿No necesitamos invitación para entrar? — preguntó Temari

—Si sus nombres están en la lista de invitados, no, yo se los pondré en la lista — les dijo Gai, guiñándoles un ojo a las jovenes.

—¡Muchas gracias! — dijeron Tenten y Matsuri al unísono. Era la oportunidad de sus vidas, asistir a una fiesta así. Temari estaba insegura sobre que vestimenta y peinado usar, y Hinata sólo se mantuvo callada.

Las cuatro chicas salieron del estudio donde se grababa el programa de chimentos, y subieron al auto deportivo de Temari.



Continuara….

 

Re: Botineras (SasuSaku, NaruHina, NejiTen, GaaMatsu, ShikaTema, SaiIno & JiraTsuna)

¡PERDON POR LA DEMORA!!
estuve sin internet......otra vez. Esto es lo que odio de las mudanzas :(
Aqui les dejo la conti, por ahora solo hay NejiTen y SasuSaku
Pero para el proximo capi les prometo que habra JiraTsuna, GaaMatsu, SasuSaku, y tal vez algo de ShikaTema.

Botineras

Capitulo 2 ​

Sakura Haruno salió por fin del quirófano. Se secó el sudor de la frente y procedió a quitarse los guantes descartables y tirarlos en el primer tacho de basura que vio.

Se sentó en una de las butacas negras para espera del pasillo. Por suerte, ya su trabajo había terminado por hoy, y gracias a Kami era viernes. Este pensamiento la alivió un poco, había sido un día difícil en el hospital, una operación no dio éxito y la joven de cabello rosado fue la encargada de pasarle la dolorosa noticia a los familiares del paciente, que falleció en el acto.

—Esa es la parte que odio de mi trabajo — suspiró Sakura, recordando el doloroso momento.

Pero no tenía caso quedarse sentada allí, debía ir a casa de Ino y luego ir a la fies…

—¡Pero que tonta soy! — exclamó la Haruno, haciendo que unos hombres que pasaban por allí la miraran como una demente — No estoy loca, solo estresada — Les explicó a los sujetos antes de salir corriendo.

Corrió tan rápido como le daban las piernas y llegó a su oficina, en la que casi no estaba por su trabajo. No era nada del otro mundo, era simple, pequeña, acogedora, con un bonito escritorio de madera en el centro. Apenas ingresó, se abalanzó sobre su teléfono celular, un Motorola V3 negro que tenía desde hace años. Ino tenía el mismo, pero en turquesa (Según la rubia, era muchísimo más bonito que el de Sakura). Dejaba su celular en la oficina siempre, ya que en el trabajo no se le permitía usarlo. Llamó a Ino de inmediato.

—Hola frente de marquesina, ¿ya saliste del hospital? — la voz risueña de su amiga demostraba que acababa de despertar de su siesta. “Yo trabajando y ella durmiendo lo más bien” se decía Sakura para sus adentros con envidia.

—Ino-cerda, ¡hay tal crisis! — estalló la Haruno — ¡Acabo de recordar que no tengo ningun vestido o ropa elegante para esta noche!

—¿Ésa es tu crisis? — preguntó la Yamanaka — No hay tal crisis. Revisemos mi armario, algo de seguro encontramos.

—Eso espero — comentó la joven de cabello rosado por lo bajo al colgar el teléfono.





—¡Qué no lo haré! — repitió Kiba por enésima vez. Sus amigos intentaban convencerle de que se pusiera un traje, ya que iban a una fiesta benéfica muy elegante, no a un boliche barato.

El Inuzuka estaba en boxers tirado sobre la cama de Kankuro, ya que estaban en el departamento que compartían los Sabaku No, e insistía en ir con un jean roto y una remera que no parecía estar muy limpia.

—Kiba, no seas necio, sabes que debemos ir así — intentó explicarle Naruto, abotonándose su traje azul marino, el cual resaltaba sus ojos claros.

—Sí, yo tampoco quiero ir, pero es una obligación — le recordó Sasuke, que estaba eligiendo entre una corbata negra o una gris que combinara mejor con su traje color negro noche. Se decidió por la negra, y le arrojó la gris a Kiba. Luego agregó — Debo ir afuera un momento a hacer una llamada. — Y salió del departamento de los Sabaku No.

—No es que no quiera ir, pero no me va todo lo elegante — se explicó Kiba.

—Que problemático — suspiró Shikamaru, quien acababa de salir de la ducha del baño de Kankuro y ahora se vestía y al mismo tiempo prendía la computadora de Kankuro — Sí no te vistes rápido y vienes a la fiesta, es probable que Asuma no te ponga como titular en el próximo partido.

Ante este pensamiento, Kiba tomó la corbata gris y salió corriendo al cuarto de Gaara, donde se encontraba su ropa. En la sala principal, Lee jugaba un partido de Winning Eleven contra Sai, y este último iba ganando siete a cero. Sai jugaba con Argentina y Lee con Alemania, y no tardó mucho en aparecer un octavo gol, marcado por Gonzalo Higuaín. Shino se encontraba haciendo el nudo de la corbata de Gaara, que la esperaba pacientemente, sentado al lado del Aburame. Chouji, por su parte, asaltaba el refrigerador, mientras Kankuro bebía un poco de sake y le comentaba al joven gordito sobre sus expectativas de esa noche. El único que faltaba era Neji, que no iba a ir con sus amigos pero dijo que se encontrarían en la fiesta. Si es que Neji llegaba….






—¡Maldición! — exclamó Neji, bajándose de su carísimo auto deportivo azul oscuro, su más reciente adquisición.

El Hyuuga decidió que aunque en la calle no había un alma, era mejor mantener la compostura. Pero el problema era su auto, que ya no tenía gasolina y se encontraba demasiado lejos de una estación de servicio. Y para colmo, había terminado en una calle deshabitada. Aún tenía que conducir de alguna manera a a la fiesta, se lamentó de no haber ido a lo de Kankuro con los demás.

—¿Ahora qué haré? — el chico estaba desesperado. Si había algo que no podía hacer, era fallar a sus compromisos. Neji Hyuuga jamás fallaba a su palabra. — ¿Será cosa del destino?

Sí era cosa del destino, entonces el destino estaba de buen humor, porque se apareció un Gol blanco último modelo al final de la calle y avanzaba en dirección al joven de cabello largo.

—¡Ayuda, por favor! — exclamó el chico, haciendo señas con sus manos. El auto gradualmente bajó la velocidad hasta detenerse junto a Neji. El joven se acercó a la ventanilla del conductor, que estaba polarizada, mientras ésta se bajaba.

—Gracias por detenerse — le agradeció Neji — Necesito ayuda, mi auto se quedó sin gasoli…

Al bajarse la ventanilla, el joven Hyuuga quedó boquiabierto al contemplar a la más bella chica que sus ojos perlados jamás hubieran visto. Sus ojos eran de un chocolate fuerte y oscuro, su cabello estaba arreglado en dos chonguitos al estilo chino y brillaba como si tuviera a su alrededor un halo de radiante belleza. La joven llevaba un vestido color crema elegante pero sencillo, y un maquillaje sutil que la hacía quedar como una diosa al natural.

—¿Sin gasolina? — completó la frase la chica, riendo, ya que Neji se había quedado pasmado.

—Sí, disculpa, estoy nervioso, nunca me había pasado — el Hyuuga se recobró rápidamente y recuperó su serenidad usual. — ¿Podría ayudarme, si no es mucha molestia….?

—Tenten. Ese es mi nombre — se presentó la joven. Apagó el auto, quitó las llaves y salió a la calle, donde Neji pudo observar sus zapatos, tacos negros de unos cinco centímetros. Además, dentro del auto dejó una cartera color plata preciosa, marca “Louis Vuitton”. — Veamos, creo que tengo una manguera en mi baúl, puedo pasarte algo de nafta, acabo de cargar.

—Se lo agradezco mucho, Tenten-sama — le agradeció él, mientras ambos se dirigían al baúl del Gol.

—Dime Tenten a secas — le pidió ella, con una sonrisa. Abrió el baúl y se encontró con una manguera, la cual conectó a su tanque de nafta para pasarle combustible al auto de Neji —¿Vas a una fiesta esta noche? — agregó luego para romper el hielo, se había formado un tenso silencio entre ellos.

—Sí y debo ser puntual, ¿cómo lo supiste? — se sorprendió Neji

—Por tu atuendo, pareciera que fueras a un evento elegante — la joven de ojos chocolate señaló al muchacho, que vestía un traje puramente blanco marca “Etiqueta Negra” pero sin corbata — ¿No usarás corbata?

—Debo usarla, esta en el auto, pero realmente no se hacer el nudo — tuvo que admitir él con un dejo de verguenza

—Permíteme, yo lo haré — se ofreció Tenten.

Él dudó al principio, pero luego sacó la corbata del auto y se la entregó a la joven. Ella pusó la deshecha corbata alrededor del cuello del chico y comenzó a hacer el nudo. Cada movimiento la acercaba más a Neji, podía oír su respiración, que se volvía más agitada debido a su cercanía con la hermosa joven. Finalmente, ella terminó con su tarea, le acomodó la prenda dentró del saco blanco y se alejó de él, levemente ruborizada.

—Creo que ya está — dijo ella, volviendosé para ocultar su sonrojo.

—Sí, es suficiente, no se como agradecerle — le agradeció nuevamente Neji

—No hay problema, fue un placer ayudarte….— Una pausa vino después de la respuesta de Tenten. — Esta es la parte donde tú dices tu nombre.

—Neji Hyuuga — respondió el aludido. — Será mejor que vaya partiendo, no quiero llegar tarde. Adiós, y gracias nuevamente.

—Fue un placer — le sonrió Tenten, viéndolo subirse al auto y partir. Subió a su vehículo, pero antes de partir a su destino exclamó — ¡Está bien bueno!






—¡Por favor Ero-sennin! — le rogaba Sasuke al hombre del otro lado del teléfono. — ¿No puede hacer una excepción por mí?

—Por última vez Sasuke, no. Lo siento, pero debes asistir — le respondio Jiraiya, quien luego cortó la comunicación telefónica.

Sasuke soltó una serie de insultos a continuación, en contra de su manager y todos los miembros de su familia, totalmente inapropiados para un público familiar. Luego se relajó un poco. Pero de verdad detestaba las fiestas, nunca la pasaba bien. En la última fiesta, tuvo que escaparse por la ventana del baño cuando hizo su aparición su club de fans/acosadoras, todas las cuales intentaron llevarse a casa un pedazo del Uchiha, desde trozos de ropa hasta mechones de cabello. Sin embargo, parecía ser que esta vez no le que quedaba más opción que asistir a regañadientes.

Justo en ese momento, un grito femenino lo sacó de sus pensamientos y lo trajo de regreso a la Tierra. El joven de cabello azabache salió disparado como una bala al lugar de donde había provenido el alarido. Se encontró con una escena inesperada.

Una joven de cabello rosado corto hasta sus hombros, se encontraba sobre un robusto hombre completamente de negro, mirándole con furia asesina y a punto de clavarle la punta de su zapato izquierdo, que era un taco aguja de siete centímetros de altura, en la espalda. Sasuke miró a ambos, sin comprender nada, hasta que la chica apoyó su calzado sobre el hombre y este gritó. El grito del hombre, era el grito femenino que Sasuke había escuchado. “Marica” pensó el Uchiha.

—Sí intentas robarme de nuevo, te mató — le susurró la joven al hombre al oído. Ella se apartó y el muchacho corrió tan rápido y lejos como le era posible. La muchacha se volvió hacia Sasuke — ¿Se te ofrece algo?

—Oí un grito, creí que había alguien en problemas — explicó él.

—Sé pelear muy bien, me entrené durante dos años en combate pero luego lo dejé por la medicina — le contó ella, mientras examinaba al chico de arriba a abajo. “¡Sí que es lindo!” se decía para sus adentros la joven. — Mi nombre es Sakura Haruno, por cierto.

—Sasuke Uchiha — se presentó con su usual frialdad. — ¿A dónde te diriges?

—A lo de una amiga, a unas cuadras de aquí — comentó Sakura.

Como Sasuke era un hombre, un caballero, y un Uchiha, no pudo negarse a acompañar a su destino a una joven que por poco y no fue asaltada recientemente. El trayecto consistió en que Sakura no paraba de hablar y hablar, mientras Sasuke oía y asentía con la cabeza de vez en cuando.

—Y por eso creo que la medicina es la mejor carrera de todas — finalizó la Haruno tras una larga explicación — En cuanto a sus distintas ramas…

—Eres una molestia — suspiró él.

—¿A quién llamas molestia? — se ofendió la joven de ojos jade.

—Mis ojos se dirigen a tí y eres la única persona aquí, ¿eso te da alguna pista? — dijo el Uchiha secamente.

—Eres un… — comenzó ella. — ¿No hablas mucho con mujeres, verdad?

—¿A qué viene eso? — se sorprendió el joven.

—Lo sabía. ¿A cuántas niñas has besado? — preguntó Sakura con tono infantil. El helado silencio de Sasuke fue su respuesta. Si la chica había metido la pata, no era nada comparado con lo que diría ahora. — ¿Eres gay, verdad?

—¡¿QUÉ DICES?! — tronó el joven de ojos negros. Si había algo que no se podía hacer, era dudar de la sexualidad de un Uchiha, era algo que él jamás toleraría ni de sus amigos.

—Bueno, no es para tanto — intentó relajarlo Sakura, consciente de que lo había arruinado todo. “Ahora seguro me odia” pensó ella, apenada. — Aquí es, gracias por acompañarme.

—Hm — fue su sencilla respuesta. “Está enfadado” pensó ella, mordiéndose el labio inferior.

—Adiós — se despidió la Haruno. Se acercó a Sasuke y besó su mejilla en forma de despedida. El sentir los labios de la chica sobre su rostro cambió el humor del Uchiha. Se sintieron cálidos, suaves, tiernos, una sensación que el joven no sentía hace mucho tiempo. Ella sonrió y se encaminó al edificio detrás de ella, al departamento de su amiga Ino, mientras Sasuke se llevaba la mano al lugar que Sakura había besado, queriendo volver a sentir esa bella sensación de nuevo.



—¡Ino-puerca, abre la puerta! — llamó Sakura, golpenado la puerta del departamento de su amiga.

—¡Llega cuando quieras! — le recriminó su amiga, abriéndole la puerta. Ya estaba bañada, cambiada y maquillada, con su vestido color rojo que tenía un escote bastante provocador. — ¡Tenemos poco tiempo!

—Ya, tuve un pequeño inconveniente en el camino, después te cuento — explicó la joven de hebras rosáseas, ingresando al hogar de la rubia. — ¿Encontraste algún vestido?

—Eh…Estaba en eso — mintió la Yamanaka. Su tono la delató frente a su amiga, que la conocía demasiado bien. — Oh vamos, seguro debe haber algo. Mira, eso es perfecto.

—¡Ino, eso es una toalla! — exclamó Sakura, tomando la toalla mojada de la cama de Ino.

—Bueno, entonces eso — la rubia le señaló lo primero que vio.

—Ese es un disfraz de Halloween — suspiró la Haruno — ¿Sabes qué? Me ire a bañar, y tú das vuelta el armario. ¿Ok?

—¿Yo sóla debo dar vuelta el armario? — se sorprendió Ino, mirando su enorme y pesado armario.

—No literalmente, Ino-cerda — comentó Sakura, pasando al baño.

—Ya lo sabía, frente de marquesina — mintió la Yamanaka descaradamente.






—¿Dónde estará Tenten? — preguntaba Hinata, preocupada por su amiga.

—No te preocupes, llegará pronto — le aseguró Matsuri, volteando las hojas de su revista de chismes en busca de algo interesante.

Las chicas se encontraban en la casa de Temari, ya completamente listas para partir a la fiesta, excepto por un pequeño detalle. Tenten, la única con auto ya que Temari había chocado la semana pasada, aún no había llegado. Hinata estaba preocupada por su amiga, que no tendía mucho a llegar tarde. Matsuri estaba relajada, mientras Temari se encontraba en su cuarto, dándose unos retoques finales. La fiesta “Tsuki” las esperaba, y habían recibido un llamado de Maito Gai hace unas horas confirmándoles que tenían el acceso prometido al evento.

Y mientras Hinata se muerde las uñas del nerviosismo, Temari ya hacia tiempo que había terminado de arreglarse, pero se encontraba realizando una actividad diferente. Estaba sentada frente a su computadora, chateando con un sujeto que conoció hace un par de días en un chat online. No era de las que hacían esas cosas, pero se encontraba sola y aburrida una noche, y Tenten le recomendó esa página web (www.cupidoninja.com) así que la Sabaku No decidió probarla.


Tema dice: Estoy con unas amigas, preparándome para una fiesta.

Nube dice: Ya veo, las chicas sólo quieren divertirse. Yo también saldré con mis amigos.

Tema dice: Por cierto, ¿por qué tu nick es Nube? No es muy masculino que digamos.

Nube dice: Sólo te dire que no tenía muchas ganas de pensar un apodo, y me agradan las nubes. ¿El tuyo qué vendría a ser?

Tema dice: Tema por Temari, mi nombre. ¿Cómo es el tuyo?

Nube dice: Realmente prefiero decírtelo en persona, ¿nos encontraremos algún día de estos?

Tema (Mordiéndose el labio fuera de la pantalla): No lo sé, me agrada más el anonimato.

Nube dice: Te espero mañana en el parque “Kakashi Garden” a eso de las doce, para almorzar. Hay un muy buen restaurant por allí.

Tema: …



—¡Perdonen la tardanza! — el grito de su amiga de ojos chocolate en la entrada sacó a Temari de su estupor.

—Vayamos partiendo chicas, o llegaremos tarde — sugirió Matsuri, tomando su cartera colorada.

—Tengo algo que contarles en el camino — agregó Tenten, entusiasmada.

—¡Enseguida voy! — anunció Temari. Se paró de su silla y salió tras apagar su computadora. Más no sin antes escribir: “Allí estaré”.



Continuara….




Aclaraciones:
1) La frase de Tenten en cuanto Neji se va realmente la dice en un capitulo del anime, aunque lamentablemente no hablaba del lindo de Neji-san :(
2) En el capitulo 3, comienza la fiesta Tsuki :D