Colección Besos de Sangre

“Hay que morir y renacer más fuertes que antes, como el ave fénix”
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El viento soplaba fuerte anunciando la llegada del tan bravo invierno.



Una familia esperaba con ansias el nacimiento de su primogénita.
El padre de la criatura se sentía abatido, lleno de preocupación, pues el feto tenía un problema y debilitaba demasiado a la futura madre.



Temía que su esposa muriera cuando diera a luz. Deseaba salvarla a toda costa, pero sabía que su mujer no le perdonaría si algo le llegase pasar a su hija.



Estaba metido en un gran lió y ya no sabía qué mas hacer. Habían tratado con tantos médicos les era posible, pero ninguno les daba explicaciones del porque el embarazo no era normal.



Estaba claro que la ciencia no lo ayudaría, y por eso opto intentar con la magia, aunque eso hiciese que perdiera la cabeza.



Fue con una bruja poderosa que habitaba en lo más alejado del bosque. Estaba dispuesto a dar lo que sea con tal de salvarlas a ambas, pero lo único que consiguió fue perder su libertad.



Si tengo que entregar mi vida lo haré- anuncio el- ¡se debe poder hacer algo!



No es tan sencillo- exclamo la bruja- mis poderes tienes un límite, yo no puedo salvarlas, pero el mundo sobrenatural si



Lo pensó mucho, no era una decisión para tomar a la ligera pero ya no le quedaba mucho tiempo, tenía que ser ahora o nunca. Con ayuda de la bruja se puse en contacto con un vampiro, y a cambio de su total lealtad hacia el y su clan, fue mordido y convertido en uno de ellos, lo mismo le paso su mujer, solo así se salvaría.
Lo que no advirtieron fue que eso afectaría a su hija de una manera única jamás antes vista que despertaría luego la envidia y codicia de lo todos.

 

“Hasta en los momento más difíciles la más mínima gota de esperanza, motiva a las personas y remueve el alma”
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Poco a poco comenzó a abrir sus ojos, los párpados le pesaban. Estaba cansada pero a la vez con muchas más fuerzas que antes.
Tardo un poco en acostumbrarse a la luz blanca que la iluminaba.
Con dificultad se sentó en la cama en la que antes se encontraba acostada. Se sentía desorientada sin saber exactamente que paso, lo único que recordaba fue sentir un fuerte ardor en su cuello como si le clavasen dagas filosas en el.


Una vez que su vista se normalizo, pudo notar, que se encontraba en una habitación de hospital con una etiqueta en el dedo gordo de su pie derecho. Lo retiro, y leyó lo que en este estaba escrito:

"Nombre: Pandora Jerking​

Día: 12 de noviembre de 1642​

Hora de la muerte: 23:05 pm."​

¿Que, como era eso posible?, ¿acaso había muerto?, ¿era ahora ella un fantasma?. No entendía nada pero era claro que muerta no estaba ni mucho menos era un fantasma, ¿pero, que hacía en ese lugar si ella estaba viva?.
Se llevó la mano a su cuello y comprobó que tenía una herida en el, dos puntos bien marcado como si se tratasen de colmillos.

Algo en su mente se activó y recordó entrar a la zona de parto, estaba por tener a su bebé, cuando un tipo vestido de enfermero ingreso a la habitación, se acercó a ella muy lentamente mostrando sus brillantes ojos carmesí como la sangre.
Jamás había tenido tanto miedo en su vida, pero no temía por ella sino por su bebé, no soportaría si algo malo le pasase.

Al pensar en su hija volvió a la realidad e inmediatamente se tocó el vientre, este estaba más chato, ¡Su hija ya había nacido!, ¿Y si el tipo la lastimó a ella también?. Al solo pensar en esa posibilidad salió deprisa de la sala buscando desesperadamente a su bebé.

Más de un enfermero y personal del hospital se quedaron atónitos al verla, se suponía que esa mujer había muerto hace más de nueve horas, pero ahí estaba, viva, buscando con desespero alguna señal de vida de su pequeña hija.

¿Pandora?- al escuchar esa voz conocida se giró, buscando al portador con la mirada y se encontró con su marido, quien llevaba un pequeño bulto entre sus brazos.

Magnus...- se limitó a decir ella, y enseguida se acercó a él para alzar a su hija entre sus brazos- lo lograste cariño, ¡nos has salvado a ambas!

No iba a dejarte sola en esto- ambos se miraron compartiendo miles de sentimiento y emociones. Estaban juntos como familia y nadie los iba a separar, o eso es lo querían creer.

 

Habían pasado unos meses del nacimiento la pequeña Melanie Jerking, como habían decidido ponerle a su hija. Pandora y Magnus vivían tiempos felices, pero como todo cuento ese final no duró mucho. Pues cuando el clan se enteró de que tenían una hija los expulsaron por temor a que la neofita se descontroló y les causara problemas.



Ellos sabían que no iban a poder ocultarlo por mucho tiempo, pero no esperaban que los de su propia especie le dieran la espalda sin explicaciones.
Pero antes de tomar aquella decisión, Suetonio el jefe del clan pidió una conferencia con Magnus para darles la oportunidad de volver a cambio del sacrificio de la bebé



Los niños vampiros deben ser asesinados Magnus, ¿acaso no olvidas lo que paso con Olivia Wilde?- Suetonio trataba de hacerlo razonar, pero Magnus estaba convencido de que su hija podría controlarse



El caso de esa niña es diferente, ella fue mordida mi hija nació siendo un vampiro- estaba decidido a defender a su pequeña con puño y sangre



Nadie te asegura de lo que es capaz de hacer, una niña mordida no controla su sed de sangre ¡abre tus ojos ella matara a todos!- le grito por última vez creyendo que así lograría hacerlo cambiar de opinión, pero no lo logro- bien cuando eso pase no vengas pidiendo ayuda



No pensaba hacerlo, es mi responsabilidad, y si, soy consciente de que solo no podre protegerla pero haré mi propio clan con vampiros que sí están dispuestos a ayudar a quienes lo necesiten, no que se esconden como cobardes cuando aparece un nuevo problema- diciendo estas últimas palabras se retira del lugar con la intención de no volver nunca más.



¿Señor?, ¿acaso lo dejará ir?- el nombrado se giró a ver a uno de sus subordinados listo para atacar si su jefe lo ordenaba, pero este hizo todo lo contrario



No, Patrick reúne algunos vampiros del sur para que se unan a Jerking- el vampiro no daba crédito a lo que oía, su jefe jamás era de tener piedad hacia nadie y mas si lo desafiaban. Pero Magnus Jerking logro lo que ningun otro ser pudo lograr obtener, el total respeto y admiración del gran vampiro Suetonio Cornelius Drácula, nieto del gran Conde Drácula el vampiro original, quien alguna vez cuando aún estaba vivo le dijo una frase que se grabó a fuego vivo es su mente:

"Hasta las cosas imposibles se vuelven posibles"
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Tal Vez Melanie era esa imposibilidad de la que tanto le hablaba su abuelo, de por sí es imposible que ella estuviera viva. Ella nació del cadáver de su madre, y lo más raro nació viva con la toxina vampiro corriendo por sus venas. La pequeña rompió con los esquemas tradicionales de un vampiro, pues estos para vivir tienen que morir antes. Pero en ella fue todo diferente.



Necesitaba respuestas por lo que fue con la única persona quien podría aclararle sus dudas, la misma bruja a quien Magnus había acudido en un principio



Te estaba esperando, has tardado mas de lo que creí- habló la anciana invitándolo a sentarse



¡Tu sabias que vendría!- acusó serio comprendiendo que la bruja tenía más que ver en todo esto de lo que imaginaba- no lo enviaste conmigo sin ninguna razón, ¿verdad?, ¡sabias lo que pasaria!



Todos tenemos una razón del porqué hacemos las cosas que hacemos, y la razón que buscas no lo sabras este día, tendrás que ser paciente- habló con serenidad colocando un viejo y polvoriento libro sobre la mesa- todo lo que necesitas saber está aquí



La leyenda de la creación de City Death, la gente evita ir a ese lugar hasta los sobrenaturales les temen, ¿que tiene que ver este lugar con la niña?- preguntó



Tu abuelo hacia las mismas preguntas, el creyo que podia desafiar al creador- dice apuntando al cielo- hizo un pacto con Satanas, el le ofreceria un ejercito de monstruos feroces y fuertes a cambio de que Drácula domine la tierra cubriendo todo de oscuridad



Pero eso no paso- Suetonio sabía de las ambiciones de su abuelo por conquistar a los humanos, creía que no debían existir porque los veía como seres inferiores y débiles- algo debió salir mal



El Pacto se hizo, pero tu abuelo no advirtió algo, Satanás no es alguien a quien puedes engañar fácilmente, cuando se dio cuenta de que tu abuelo lo uso para obtener el poder y la gloria para él solo puso en su encontra a los monstruos. Dios utilizó esto a su favor y unió a todas las criaturas sobrenaturales para que destruyeran juntos a los invasores



Lo lograron?- la mujer se mantuvo en silencio confirmando la respuesta- ¿que paso entonces?



Lo único que lograron hacer fue devolverlos a su mundo sellando la única entrada existente entre la tierra y el infierno, sobre ese lugar se levantó City Death- termino de relatar dejando aun mas confundido a su interlocutor



Comprendo todo lo que me dices pero aun no entiendo cómo encaja la hija de Magnus en esta historia- miró a la bruja esperando una explicación



A su tiempo lo sabras, solo te dire que Melanie tiene un gran futuro por delante y lo que pasó en el pasado marcará su futuro, "El pasado no va a desaparecer solo se mantendrá oculto hasta que salga a la luz" Deben Cuidarla otros querrán su poder- con esas últimas palabras la bruja se desvaneció en una nube de niebla dejando al vampiro solo y más confundido que antes.