Kengan Ashura [Días de Abecedario] Before the Doom

Tema en 'Fanfics de Anime y Manga' iniciado por Eternatus, 7 Marzo 2020.

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  1. Threadmarks: A de Ataraxia
     
    Eternatus

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    Escritor
    Título:
    [Días de Abecedario] Before the Doom
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    2
     
    Palabras:
    754
    He decidido que participaré en la actividad Días de Abecedario con una serie de 27 drabbles o one-shots, que serán independientes entre sí, so podrán leerse por separado en cualquier orden que se quiera. Habrá momentos en los que sale hacia atrás o hacia adelante en lo que al canon se refiere, pero mayoritariamente me situaré en Kengan Omega. Muy posiblemente todos los escritos contengan SPOILERS tanto de Kengan Ashura como de Kengan Omega, be warned.




    Día 1: A de Ataraxia.

    ataraxia

    Del gr. ἀταραξία ataraxía.

    1. f. Fil. Imperturbabilidad, serenidad.


    Advertencia: SPOILERS del capítulo 50 de KO en adelante.

    Before the Doom
    — Ataraxia —
    A través del pitido en sus oídos, Koga cree escuchar voces. Y es que es en el momento entre la inconsciencia y la viglia que parece sentir con más claridad. Aunque el dolor esté presente en cada nervio de su cuerpo, todos sus sentidos se magnifican.

    El aire, por alguna razón, huele a gasolina, y a lo lejos, muy a lo lejos, el joven puede distinguir el distintivo ruído de las aspas de un helicóptero desplazándose a gran velocidad. Toda su piel arde, y más allá del dolor Koga siente vendas en su cuerpo. Todavía no puede mover los dedos, pero la sábana que sus manos parecen estar tocando es extremandamente agradable al tacto.

    Su mente trabaja lentamente, y el luchador no se plantea que está drogado, ese pensamiento ni siquiera pasa por su cabeza. Como tampoco lo hacen las preguntas típicas que cualquiera haría en su situación (¿dónde estoy? ¿qué está pasando? ¿Dónde está Yamashita-san?)

    ¿Por qué siquiera iba a preguntarse donde estaba su benefactor?

    Tan pronto como no se pregunta eso, su mente vuelve a un estado de embotamiento y equilibrio al que Koga no está acostumbrado. Ahí, en el momento justo antes de despertar y enfrentarse al mundo real, Narushima Koga se siente en paz.

    Su ser entero se reduce únicamente a lo que puede sentir, y el dolor, tan presente en su cuerpo, carece de importancia. No hay memorias, ni pasado, presente o futuro. En ese pequeño momento, solo existe Koga.

    Y el joven se permite disfrutarlo, sin percatarse de esa pequeña parte de su mente que le grita (lejos, muy lejos, como el helicóptero) que algo está mal. Es, sin embargo, la parte curiosa e inconformista de su mente la que consigue hacerse con las riendas, y es esa parte la que le ofrece un nombre a su situación.

    Ataraxia.

    Koga cree haberlo leído alguna tarde aburrida en uno de sus libros de dichos y frases famosas.

    No hay deseos, no hay pasión ni turbación alguna. Simplemente equilibrio y seguridad, y una calma infinita que se extiende a través de él como un océano.

    Su mente conjura entonces un escenario acorde a su pensamiento, y Koga se ve a sí mismo flotando en un mar infinito.

    Curiosamente, no se ahoga. Tampoco teme hacerlo, ya que en su mente existe la certeza de que, ahí abajo, nada puede hacerle daño.

    La luz se filtra a través de la lejana superficie, y a su alrededor todo está en silencio. No hay movimiento alguno, y el luchador se permite disfrutarlo. Por primera vez en toda su vida, Koga tiene el control de su alma, de su razón y sus sentimientos.

    El joven inspira, y en vez de agua llenando sus pulmones siente como la brisa más fresca del principio de primavera lleva oxígeno a su cuerpo. Es entonces cuando el joven, aún sin noción de tiempo alguno, comienza a moverse.

    Sus movimientos no son agresivos, pero para un observador externo la finalidad se ve clara. Violencia.

    Kata tras kata Koga se mueve a través del agua, desarrollando su propio estilo en segundos que parecen extenderse milenios. Cuando termina, una eternidad o un instante más tarde, el joven se percata que ha cerrado los ojos.

    Algo le toca el brazo.

    Koga abre los ojos, y el mundo real lo recibe. Antes de que el dolor lo consuma todo y llene su visión de agonía, el joven ve con claridad a alguien que pensaba no volvería a ver en su vida.

    Tokita Ohma le suelta el hombro, y lo mira con ojos estoicos pero extrañamente vivos. La calma lo abandona como si de un globo pinchado se tratase, y la furia ruge en sus venas, quemándolo como lava fundida.

    Narushima Koga grita, y se lanza sobre su presa.
     
  2. Threadmarks: B de Bestia
     
    Eternatus

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    Título:
    [Días de Abecedario] Before the Doom
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    2
     
    Palabras:
    638
    Spoilers de Kengan Omega.

    Día 2: B de Bestia.

    bestia

    Del lat. bestia.


    3. f. monstruo

    bestia negra

    1. f. Persona que concita particular rechazo oanimadversión por parte de alguien.


    Before the Doom
    Bestia
    La noche, a pesar de ser tranquila, albergaba horrores que debían ser aniquilados. Así era la justicia. O, por lo menos, así era la justicia para Akoya Seishu. Vestido aún con su uniforme de patrullero el hombre camina en el espacio entre luz y sombra, sentidos completamente centrados en sus alrededores.

    Aquella noche era una noche de caza, una noche para castigar el crimen. Por suerte o por desgracia, el nombre tenía nombre y apellidos, y Akoya estaba subrepticiamente feliz por haber logrado un objetivo concreto, después de meses de duro trabajo que no había servido para nada.

    El policía antidisturbios se detiene en la intersección entre dos calles, oculto bajo las sombras de una construcción sin terminar. Frente a él se extiende un barrio repleto de enormes edificios, todos ellos diseñados para alojar al mayor número de personas en el mínimo espacio posible. No era un barrio particularmente malo, pero todo era ordinario y no había nada que destacara especialmente. El mejor escondite para una presa del calibre de Xia Ji.

    El maestro de espionaje caería pronto. Lo que Ohma y Raian habían fallado en hacer, Akoya estaba seguro de que podía lograrlo. El luchador espera unos minutos, y tras de sí algo parece moverse en las sombras.

    Una terrible sonrisa se extiende por su rostro, y el aire a su alrededor se hace más pesado. Esto no parece detener al recién llegado, que se acerca, su propia sed de sangre comparándose a la del policía.

    Gaoh Ryuki se detiene y clava su mirada en el sonriente antidisturbios. Como tantos meses atrás, el terror congela sus venas durante unos instantes, pero la ira reemplaza el miedo con el ardiente deseo de venganza. Ayoka no pierde la sonrisa en ningún momento, y es él quien habla primero.

    — Finalmente has decidido unirte a mí. Desde que nos conocimos, Gaoh Ryuki, supe que me acompañarías en mi cruzada por la justicia. — Su voz es terrible, monstruosa, pero Ryuki no se amedrenta. No hay duda alguna en sus palabras, y la afirmación suena como una victoria. Gaoh inspira profundamente y cierra los ojos.

    Es en esos segundos, en ese instante en que Akoya decide dejar de sonreír y de inundar el aire con su sed de sangre, que algo en Ryuki despierta. La bestia abre los ojos y clava la mirada en el policía, reconociendo un monstruo equiparable a sí mismo. Entonces, Ryuki contesta.

    — Worm. Necesito encontrar a los hombres que atacaron a Koga. Tú vas a ayudarme a encontrarlos. — La orden corta la tensión en el ambiente como si de un cuchillo se tratase, pero el policía lo permite.

    Por fin tenía un compañero, deslices como aquel serían corregidos con el tiempo, todo por el bien de su cruzada por la justicia.

    Akoya se gira y señala uno de los edificios.

    — Sexto piso, puerta 62.

    La conversación muere en ese instante, y ambos hombres se dirigen sin prisa alguna al lugar señalado. La luz de una farola los ilumina durante unos segundos, y, si alguien hubiera mirado en ese momento, habría escapado sin siquiera poder gritar.

    Las sombras de Ayoka y Ryuki se alargan con el ángulo de la luz que incide en sus cuerpos, y algo oscuro y violento parece deformarlas. Pesadillas, pesadillas y terrores antiguos, sería la descripción que cualquiera haría.

    Si es que no se volvía loco antes.

    Así, monstruo y bestia, dos criaturas dignas de pesadilla, se deslizan nuevamenteentre las sombras, sin hacer ruido alguno. La caza había comenzado.
     
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