One-shot de Naruto - A diario [Kisame].

Tema en 'Fanfics Terminados de Naruto' iniciado por Laile, 10 Agosto 2010.

  1.  
    Laile

    Laile Usuario común

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    A diario [Kisame].
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    A diario [Kisame].

    Ya, ha pedido de mis queridAs niñas -Anne, Lacry-fea, Ali- publicaré esta cosa con la cual gané tercer lugar en el concurso de: "One-shots de Naruto: Universos Alternos". Me gustó, sí, pero nunca pensé que ganaría con esta cosa y menos con el personaje que me tocó ;______________; Aparte de querer tener el logo antes de publicarlo :o.

    Sin más preámbulos, la ficha:

    Autor: Lilinette
    Título: A diario.
    Pareja: Kisame-centric. Itachi & Kisame (NO romance).
    Género: Friendship & Humor (?
    Sumario: <<Al terminar de tomar sus medicinas, se paró con lentitud y dificultad…ya no era el hombre hábil de antes.>>
    Tipo: One-shot.
    Clasificación: K+.

    Advertencia: UA. Escrito para el concurso de KuroiA. Donde me tocó "Edad Adulta"
    Agradecimientos: IKST.
    Dedicado a: Anne-bonita porque me jodió mucho para publicar esto y porque le gusta el pescado grande :llorar1:. KiorA porque sufrió igual que yo, sorry por no publicar junto contigo D: Andy... por felicitarme y asdf, te quiero niña. Y a KuroiA por ser una genialosA jueza :3.

    _________________________________

    A diario​


    Los internos de ese lugar siempre cuidaban de alguien. Sí, así era pero lastimosamente habían algunos jóvenes de mala suerte y les tocaba cuidar a ancianos dementes y con problemas psicológicos e Itachi no era la excepción. Cuidaba de un anciano de unos 92 años pero con la diferencia de otros; ese espécimen de tiburón estaba totalmente cuerdo.

    Dio un medio giro a la manilla de la puerta y la abrió con su mano izquierda, ya que su otra mano estaba ocupada por una bandeja. Sus facciones se suavizaron y prosiguió a dar el saludo que daba cotidianamente.

    —Kisame, ¿cómo estás? —preguntó el joven hacia el hombre del frente que estaba recostado en el mullido colchón. La habitación era color café pastel, con un velador al lado de la cama y al frente de ésta había un mueble. Itachi se deslizó y dejó la bandeja en el mobiliario.

    Kisame mostró una sonrisa ladina, esas de las que acostumbraba a emplear.

    —Considerando que estoy en este deprimente lugar, ¿cómo crees que estoy? —dijo de forma lenta y con voz patosa.

    —Te traje el medicamento, recuerda que hoy juegas una partida de poker con Deidara y Hidan.

    — ¡Ja! Era lo único que faltaba, al estúpido chico de cabello de niña le ganaré en menos de dos minutos y al canoso de Hidan también. —aún, cuando era un viejo, todavía seguía teniendo ese característico humor sarcástico.

    —Bien, ahora tómate el medicamento.

    Kisame, tenía 92 años y estaba internado en un “Hogar de Ancianos”. Las pocas cosas que se sabía de él, era que su único hijo, Suigetsu; lo había abandonado en este lugar. El viejo había mascullado: “él no es mi hijo” y que desde pequeño, siempre fue discriminado por su extraña deformidad. Alto, con aire amenazador, piel extrañamente celeste con ojos de pescado y cabello azul; ese era Kisame.

    Cuando había llegado al lugar, tenía aproximadamente 65 años y lucía de manera diferente. Sí, su piel no era tan celeste como en ese momento. Aún recordaba lo que había sucedido… no maldecía el momento en que había apostado con Deidara, es más; le encantaba su apariencia de pescado gigante.

    Ese lugar no podía ser mejor para Kisame. Él era aceptado porque ahí todos eran raros, una familia anómala pero feliz. En sí, eran pocos los “locos dementes” como llamaba Deidara. Hidan, Kakuzu, Sasori, Zetsu, Tobi y él, eran cuidados por: Deidara, Konan, Pein e Itachi. El joven Uchiha desde el primer momento, fue el interno que cuidaría de él hasta morir.

    Era una persona abrumadora pero bastante simpática si le llegabas conocer; era su amigo.

    Al terminar de tomar sus medicinas, se paró con lentitud y dificultad…ya no era el hombre hábil de antes. Poco a poco se levantó, apoyando sus manos en la cama. Pasó por el lado de Itachi paulatinamente pero éste le bloqueó el paso.

    —¿No se te olvida algo?

    —Tan listo como siempre, Itachi —señaló satíricamente el anciano mientras que daba la vuelta y se dirigía al lugar donde recientemente había estado.

    Sus manos tiritaban a causa del tambaleo que le causaba caminar. Divisó el objeto de 1.20 metros, largo y café con la punta de arriba doblada a un lado. Lo tomó de ese lugar y recargó su peso en él. Era un bastón, el cual tenía que usar porque tenía un problema en la columna; causada por su vejez. Con el querido bastón podía golpear a Deidara cuantas veces quería, también a Tobi. Como le gustaba ser un maldito sádico con esos internos.

    Observó a Itachi mirarlo con autoridad y sonrió.

    —Bien, bien ya me la pondré.

    Kisame llegó hasta el velador y ahí estaba la bandeja, había un vaso con agua y dentro de él, se encontraba… ¡una dentadura! Oh, pero si al viejo le gustaba usar sus dientes de tiburón y más cuando los utilizaba para asustar y torturar a Deidara. Podría tener bastantes años pero su mente seguía intachable y su forma de pensar era igual de cuando era joven. Maquiavélico, irónico. Malo, así era él.

    La tomó entre sus manos y se dispuso a ponérselo en su boca. Sonrió nuevamente y con paso lento fue hasta Itachi para ir a su rutina habitual.

    El varón menor fue el primero en salir de la habitación y fue seguido por el mayor. La mayoría de veces, Itachi tenía que ir a paso lento por los pasillos, ya que el hombre con rasgos de tiburón caminaba de forma pausada.

    Observó a todos los lados; las paredes tapizadas de blanco como un hospital. En los pasillos no se encontraba ningún ser humano y ellos se dirigían al jardín. Kisame pensaba en cómo ganarle a Deidara y a Hidan, porque si vencía, ya tenía pensado lo que les obligaría a hacer a ellos. Itachi seguía distante y callado, era lo común en él.

    No muchos sabían lo que al chico le había sucedido, por lo que la mayoría se preguntaba ¿por qué Itachi Uchiha, hijo de un gran empresario; se encontraba trabajando en un ancianato? Fácil, el mayor de los Uchiha quería una vida normal, no una donde tienes que tener cautela con lo que haces.

    Cuando llegaron al jardín, se encontraron en el centro a todos los que constituían el lugar. Sentados en una mesa circular, estaban los ochos. El jardín era bastante grande con diversidad de flores y todo verde. Absolutamente, esa decoración la había hecho Konan.

    El primero que se dio cuenta de la presencia de dos personas más, fue un rubio de cuencas azules como el océano. Su ojo derecho estaba tapado con un mechón de su cabello. Con alegría y burla, saludó:

    —¡Hey, Itachi! ¿Ya vienes con el anciano? ¿O es que quiere que le ganemos? —sus irises azules se mostraban alegres y con la característica mofa con la que se dirigía a Kisame. La sonrisa sarcástica apareció en el anciano.

    —Pero mira quién habla, si no fueras amigo de Itachi ya te hubiera golpeado.

    —¿Tú? ¡¿A mí?! Mírate, te apoyas en un bastón, tus dientes falsos; piel de tiburón y lo peor, ¡no tienes estilo! Aprende de mí, que soy toda una escultura perfecta, ¿verdad Sasori-san? —el rubio se enfocó a su acompañante que se encontraba a su lado.

    —Hn. Supongo.

    —Bien, ya deja de hacer teatro. Quiero ganarte rápido y a Hidan también. —Kisame se encaminó a una de las sillas que se encontraba vacía e Itachi lo siguió. Se sentaron y se acomodaron.

    Los demás que se encontraban en silencio, estaban sumisos en sus cosas pero Hidan tomó la partida. Tomó entre sus manos las cartas y las revolvió. Él era un hombre, más bien anciano y era muy religioso, antes no le gustaba apostar pero desde que había entrado a ese lugar, tuvo una adicción con aquel juego. Era un hombre de cabellos blancos, todos creían que eran canas aunque él había afirmado que sólo se había teñido el cabello. Tenía 80 años y la persona que se encargaba de él, era Konan.

    —¿Qué apostaremos ahora? —preguntó.

    —Bueno, si tú pierdes quiero que me des dinero para comprar arcilla aunque tengas que robarle dinero a Kakuzu. Y Kisame… quiero que admitas que yo soy lo más genial y que soy hermoso. —Deidara hablaba con mucha seguridad, Hidan puso los ojos en blanco y Kisame reía estrepitosamente.

    —Vas a perder. Si yo gano, quiero que Hidan limpie mi cuarto todos los días por dos meses y Deidara, ¡que ocupe mi dentadura! —habló el hombre de piel celeste.
    Deidara hizo un signo de repulsión.

    —¡Qué asco! Pero accedo, sé que voy a ganar.

    —Y yo, quiero que los dos me lleven a la iglesia a rezar los días de la Pascua.

    —Me comprometo .

    —¡Claro que acepto! Les ganaré idiotas.

    El juego comenzó y todos los demás pusieron atención. Hidan era ayudado por Kakuzu y Pein, a Deidara lo ayudaba Sasori y Kisame jugaba junto a Itachi. Lo extraño era que Tobi estaba muy concentrado observando unas moscas y estaba muy silencioso.

    La suerte estaba de su lado con Itachi acompañándole; podía ganar cualquier juego de mesa. Y es que el joven Uchiha era capaz de deducir las cartas de los otros. Todos estaban atentos y Kisame dio golpe final. El anciano había ganado y eso no le había agradado a Deidara.

    —¡Les gané! Ahora tienen que cumplir lo prometido. —exclamó con picardía. Deidara hizo un ademán de irse pero Kisame lo detuvo. Hidan aceptó a regañadientes e Itachi sonreía, después de todo, gracias a él; había ganado.

    —Hoy en la tarde, los quiero a los dos en el “campo de batalla”, es decir aquí para cumplir las apuestas. ¡Nos vemos luego, idiotas!

    —¿Qué? ¡Pero no es justo! Siempre ganas y sólo es porque Itachi te sopla nuestras cartas, ¡maldito anciano tiburón! —parecía un berrinche y era justamente Deidara.

    Kisame no le tomó atención y se paró, ya era hora de su “siesta”. Al tener esa edad, no podía estar hasta tan tarde ahí afuera y menos con esos ánimos. Con un cierto dolor en sus articulaciones, se paró de la silla pero necesitaba ayuda. El Uchiha lo tomó por un brazo y con una de sus manos, le pasó el bastón y en él, Kisame se apoyó.

    —Bueno, me iré a dejarlo a su habitación y luego regresaré. —habló Itachi.
    Los demás asintieron y ellos partieron hacia el cuarto del tiburón.

    El camino hasta la estancia fue silencioso. El mayor pensaba muy animado para que llegara ya la hora. Cuando llegaron al cuarto, el interno llevó su mano hacia la manija de la puerta y la abrió. El anciano entró con parsimonia y escuchó a Itachi.

    —No hagas ese tipo de apuestas. Si llegas a perder, Deidara te haría cualquier cosa y tendrías que cumplirla. No estás en edad ni en forma para hacer esas estupideces, Kisame. —con voz seria, aconsejó al nonagenario y se fue.

    El aludido se sentó en su cama después de dejar su bastón apoyado en la pared y sé quedó pensativo, lo que Itachi le había dicho era cierto, pero tampoco quería quedarse en un cama por el resto de los días. No, él no se quedaría quieto esperando la muerte, no culpaba al muchacho por lo que le había dicho, sólo era un niño y no sabía de muchas cosas.

    Cuando tenía alrededor de 50 años, se encontraba viviendo con su hijo Suigetsu, él era una persona que no lo dejaba salir para ningún lado porque Kisame tenía una enfermedad y por esa razón debía permanecer en casa. Su hijo, renegaba de su padre, en otras palabras; sentía vergüenza de él.

    Por eso había decidido, desde que había entrado a ese hogar, viviría la vida al máximo como el temible hombre diabólico que era en su juventud.

    Por último, llevó sus manos a su boca y quitó su dentadura; la dejó en el vaso que estaba en el velador, su boca se secó un poco y comenzó a chuparse los labios. No tenía dientes, con el paso del tiempo se le había caído uno por uno, todo por causa de su envejecimiento.

    Se dispuso a acostarse en el blando colchón y cerró sus ojos para tomar la siesta que tomaba a diario.
    _______________________________

    Cantidad de palabras: 1869.

    YAAAAY! ¡Ahí está! ¿Y qué pensaron? ¿fue merecedor del 3er lugar? ¿en verdad... tiene humor xD?
    Próximamente seguiré publicando mis escritos con los cual concursé en los concursos ;).

    Saludos, Lili.
     
  2.  
    LacrymosA

    LacrymosA ShikaTemaDai<3 Comentarista empedernido

    Leo
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    Pluma de
    Escritora
    Re: A diario [Kisame].

    ¡Lili!

    ¡Dios mío que te tardaste mujer! :mad:

    ¡Pero valió la pena la espera!*---------------------------------------------------------------*

    ¡Me gustó todo, pero TODO! ¿Sabes lo que quiero decir con "todo", no? ¡Pues es eso! ¡TODO!
    ¿Humor? ¡Me morí de la risa! Desd que Kisame es un anciano que vive en unacilo hasta que Deidara cuida ancioanos con Itachi y los demás. Que Hidan es un religioso que se vició con las apuestas y que el malvado de Suigetsu abandonó a su padre en ese lugar.

    ¡La actitud y dichos de Deidara me mataron de risa en seriooooooooooo!
    Me súper-mega reí con esto:

    ¡Morí con eso! x'DDDDDDDDDDDDDDDD Ya puedo imaginarme a Tobi en ese estado de trance xD

    También está:

    Jajajajaja x'DDD

    Me gustó/encantó/maravilló y todo lo demás.
    Tienes muy merecido tu logo :llorar1: Sigue así y serás grande *-*

    Te veo después.

    ¡Adiós!

    PD:

    ¿Cómo es eso? D: xD (?

    Te quiero, bella :corazon:
     
  3.  
    Alita

    Alita Entusiasta

    Sagitario
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    25 Marzo 2009
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    128
    Pluma de
    Escritora
    Re: A diario [Kisame].

    LiliA-bonitA ¡Yo sabía! ¡Sabía que te ganarías el logo! Yo lo dije y se cumplió..., o sea, mis palabras son mágicas :si:

    Aww, yo también te quiero niña hermosA e ingeniosA :o (LL~
    Gracias por la dedicatoria xD

    En tanto al fin ¡Fue Genial!
    Te merecías taaanto ese logo para tu grandota colección y al fin tienes uno en Fanfics :sonrisota:

    Kisame ganó gracias a Itachi porque es un chismoso ¡Le soplaba a Kisame! JAJAJAJAJA, eso es tener ingenio. Y entiendo que Itachi quiera cuidar a los ancianos porque no le gusta la vida en una oficina pero ¡¿por qué Deidara y Pein también?! I don't undertand o.ó

    LOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL
    La narración fue buena y además que me gustó cómo describías los escenarios y asdfgh, en eso sí que atrapaste *D*

    Noté este error de repetición y uno que otro más por ahí que ya no recuerdo.
    Es mejor que uses sinónimos como sujetó, por ejemplo ;)

    Te felicito por toooodo. Al final pensé que sería sobre el mundo ninja y la SUPER-SEXY-TRANSFORMACIÓN tiburonezca de Kisame, pero no tenía ni idea de que te había tocado la edad media así que ese fue otro rollo.

    Me imagino que Kisame estará todo arrugadito xD (??)
    LOOOOOOOOOOOOOOOOOOL

    Ok, nos estamos leyendo. Te quiero muchi, Lili y ahí hablamos luego :'3

    Chao♥~
     
  4.  
    Anneliese

    Anneliese Usuario popular

    Géminis
    Miembro desde:
    15 Octubre 2006
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    Pluma de
    Escritora
    Re: A diario [Kisame].

    Lili, Lili x'D

    Lo habia leído pero se me olvido comentar. Lo voy a hacer ahora mismo :si:
    Me encanta Kisame, en serio. Sólo él derrotaría a los otros ancianitos de manera tan powah, pues estoy segura que Itachi no hizo nada por él. Ok, no xD
    Me dio risa cuando pusiste que Suigetsu lo dejo en el asilo de anciano ¡Que malo! Pero se la vera conmigo el muy... él :mad:
    También me causo gracia lo que propusieron en caso de ganar Deidara, Hidan y Kisame, lo mejor fue cuando gano Kisame y Deidara pensó en ponerse la dentadura...
    ¡Y tobi con su distracción me dio risa!
    Te quedo bien. Si hay unos errores muy notables y de cuidado, pero me gustó lo que propusiste en la historia y el cuidado de los personajes :si:

    Y felicidades por tu tercer lugar :si:
    Kisame sexoso ♥

    P.D: ¿Tu nick se pronuncia "Lilinetto", cierto? :RISITA:
     
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