2030

Tema en 'Relatos' iniciado por Fernandha, 26 Noviembre 2013.

  1.  
    Fernandha

    Fernandha Maestre Usuario VIP Comentarista destacado

    Acuario
    Miembro desde:
    17 Agosto 2010
    Mensajes:
    3,169
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Título:
    2030
    Clasificación:
    Para niños. 9 años y mayores
    Género:
    Ciencia Ficción
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1005
    El día de hoy se nos preguntó cómo sería la humanidad en un futuro no muy lejano, y los avances de la tecnología y ciencia que pueden existir; nosotros, después de imaginar un tanto, decidimos que si la humanidad ha cambiado hasta la actualidad, en aquél futuro incierto es muy probable que otras cosas cambien también.


    María Rosario Villeda Jiménez

    Lizeth Hernández Martínez

    Mónica Pérez Luna

    María Fernanda Reséndiz Morales


    Alumnas de tercer año grupo D.


    Miércoles 18 de Septiembre del año 2013


    Notas actuales: No cambié nada referente a la trama, dejé todo tal cual, simplemente retiré las imágenes que habíamos adjuntado al texto y decidí darle una buena limpia a la ortografía. Esto era (y es) el borrador a una historia más compleja y de varios capítulos (la cual no publicaré… aún, debido a que necesito “limpiarla”), tomándose como un “prólogo”; pese a esto disfruten de la pequeñez que esto representa, me parece suficiente por ahora y sé que entenderán la idea en general.


    Martes, 26 de Noviembre de 2013


    2030


    Caminé por las calles, angustiado y dolido; recién regresaba del hospital en el que mi esposa reposaba desde hace ya diecisiete años, pues ella había caído en coma desde el año 2013. Y el cuerpo que en algún momento representó la más bella de las juventudes ahora se deterioraba, marchitándose cual flor por falta de cuidado.

    Caminé, sin rumbo fijo, con la mente nublada de pensamientos hirientes, rememorando aquellos días en los cuales podía sonreír sin sentir aquél peso de culpa en los hombros.

    Caminé, porque era la única forma en que podía sentir que seguía vivo… roto pero vivo a fin de cuentas.

    Sólo que ahora no era como las veces anteriores. Mi pecho dolía… Cerré los ojos y me recargué en un edificio —que parecía como una de esas camisas andrajosas que había en el fondo de mi armario: deteriorado, inservible...— con el que, en mi camino incierto, me había topado.

    Me sentía como un niño asustado, abandonado a su suerte sin saber cómo sobrevivir a un mundo que día a día avanzaba un poco más, haciendo que muchas cosas nuevas vieran la luz de su existencia en tan poco tiempo que a veces lograba poner en duda la realidad del ser humano sobre lo que la tecnología había logrado en éste tiempo.

    Sin poderlo más me dejé caer contra aquella dura pared, sintiendo cómo mi espalda recibía los golpes de construcciones ya viejas, con ladrillos rotos o mal colocados. Y lloré, maldecía mi vida en toda lengua que se me fuera conocida… pues mi esposa, la bella mujer que me llenó de anhelos es ilusiones, había muerto.

    .

    .

    .

    Al cabo de una semana, de ida y venida entre el velorio y funeral, tomé una botella de Mezcal*, abrí la puerta de mi apartamento y sin importar ya nada me dirigí al cementerio.

    Entre tragos que hacían escocer mi garganta y tropiezos que me propinaban un buen golpe contra superficies cercanas es que llegué a la entrada de aquél lugar que sólo me hacía recordar crudas verdades. Una burla silenciosa a mi dolor. Una inclemente burla que me golpeaba al caminar entre diferentes tumbas para llegar a la indicada.

    Donde yace uno de las mejores peones que pudo jugar en el tablero de la Vida, siendo ésta la reina del mismo, y el Destino coronándose como el rey”

    Rezaba el epitafio.

    —¿Sabes? —le digo a la fría tierra—. Desde que te fuiste de manera mental siempre tuve la ilusión de que despertarías —arrastro las palabras, la boca se me adormece y la lengua se me traba.

    La amargura me inunda el paladar y me repugna.

    —¡La tecnología avanzó tanto, cariño, hasta el punto de ser medio robots! ¿Recuerdas? Todas aquellas charlas sobre un futuro de automóviles que vuelan, robots de limpieza y hasta máquinas del tiempo; de ciencias que pueden descubrir enfermedades con tan sólo investigar a una sola persona, de gente feliz y tranquila —le grito a la nada, porque quería desahogarme—. La vida mejoró, sí, cierto. Se volvió dependiente de estos avances, por supuesto. Más para el gobierno que nadie… pero eso no importa —me agacho en dirección a la lápida, tirando el Mezcal en la tierra sin ser plenamente conciente de ello.

    Delineo con la yema de los dedos una vez más el epitafio.

    —¿De qué interesan tantos avances si no servían para mantener a una persona viva y cuidada?

    Me dejo caer, sintiéndome asqueado de mi conducta, pero no pudiéndolo evitar; la tecnología se había vuelto un ser de raciocinio independiente hasta el punto de ser fundamental para vivir, y el llorar me recuerda que sigo siendo humano y no un robot. Que pese a todo aún puedo sentir y soñar, quizá con un viaje en el tiempo que me permita cambiar éste final.

    Sin importar qué me acomodé en aquella fría tierra, comencé a cerrar los ojos y esperar a que aquél invento que me permita no perder a nadie más exista. Por lo tanto ahora sólo me quedo aguardando, en aquella fría tierra, abrazado a la nada y temblando por la tenue manta de frío a la que la burla de la muerte me somete.

    Por que ayer fue 2013.

    Hoy era 2030.

    Y mañana muy probablemente llegaríamos al 2060 antes de estar cien por ciento seguros de que no era una broma, y que con tanto avance la muerte también comenzaba a jugar sus cartas. No dudaba del día en que, de alguna forma, tanto desarrollo ilimitado termine por perjudicar lo poco natural que nos queda.



    .

    .

    .


    Notas finales:


    Mezcal:

    ·Es el nombre de una bebida alcohólica tradicional mexicana, que puede producirse en 8 estados diferentes del país, elaborada a partir de la destilación de la penca del agave. Existen diferentes tipos de agave, y cada uno produce una versión diferente de mezcal; una de las más conocidas, aunque no responde exactamente a la definición tradicional del mezcal, es el tequila.
     
    Última edición: 26 Noviembre 2013
    • Me gusta Me gusta x 1

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso