2012, El año del Fin del Mundo.

Tema en 'Relatos' iniciado por Solsti, 21 Enero 2010.

  1.  
    Solsti

    Solsti Usuario común

    Cáncer
    Miembro desde:
    22 Octubre 2008
    Mensajes:
    297
    Pluma de
    Escritora
    Título:
    2012, El año del Fin del Mundo.
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    1631
    2012, El año del Fin del Mundo.

    2012, El año del Fin del Mundo.
    2012, el año del final según el antiguo calendario Maya.
    Mi novio me sostenía la mano mientras veíamos comos una increíbles olas provenientes del Mar Argentino, azotaban nuestras casas, mía y del resto de la provincia y un poco más.
    Mi madre me llama a gritos. Yo estaba en shock al ver tal catástrofe.
    Mi novio me arrastra a la guarida para salvarnos. No pudo ser posible. Una enorme ola se lo llevó… Lo mató. Como a otras personas, vecinos, amigos y gente de confianza.
    Lloraba sin consuelo cuando mi mamá cerró la puerta de aquel lugar que supuestamente nos tendrían que salvar de la catástrofe… De la muerte.

    3 Minutos pasaron desde aquel principio de dolor, al ver partir a unos de mis seres más queridos.
    Un reloj hacia: <Tic, Toc, Tic, Toc> continuamente, yo estaba viendo pasar el tiempo.
    Una pequeña fuga hacía que el agua y el frío viento entrara donde nos encontrábamos nosotras dos. En silencia, alcé la vista para ver el rostro de mi madre, triste, vacío y sin vida. Eso era lo que podía contemplar.

    Un ruido, parecido al de un golpe muy duro, sonó en la puerta. Mi mamá, curiosa, abrió un poco la puerta.
    Vi que mi madre entraba una persona, un sobreviviente, para que nos haga compañía. Lo sento en un banco que había al frente mío.
    Poco a poco fue abriendo los ojos. Nos miramos mutuamente, era un chico de la secundaria; no teníamos trato entre nosotros. Conocíamos de la existencia del otro pero solo de una que otra vista cuando el tenía que venir a buscar algo a mi salon y alli estaba yo. Nunca cruzamos palabra, pero al verlo me hipnotizó. Sus ojos no eran en nada iguales a los de mi exnovio, que ahora descanzaba en paz; el tenía un deje de chico malo que me atrajo de inmediato. Observe que comenzaba a salirles unas cuantas gotas de sangre de una cortada en su mejilla. Agarré rapidamente unas vendas que teníamos por si acaso y comenze a desinfectarlo.

    Ese hacercamiento fue uno de los pocos momentos buenos de ese día, cuando el sol no salio.
    Me veia como a un bicho raro. No sabía por que cada vez que me mirada hacia eso. No lo toleraba. Todos me veian como a una persona digna de confianza, un excelente confidente o una gran amiga. Eso me encantaba de todas las personas que me rodeaban, pero él era muy distinto a los demás.

    En un rapido movimiento, me agarra la mano. Nos miramos a los ojos. En ese momento me siento culpable. Mi novio había muerto hace poco más de 3 minutos y yo solo quería ver a este chico a los ojos, me moría por hacerlo. Me sentí debastada.

    Él susurro algo poco audible, un <Tu novio era mi hermano Esteban y yo soy Billy. Tu eres Chiqu ¿No?> Lo mire con confusión, me conocía y no yo a él. Su mirada era tan penetrante que desvié mi vista para abajo, su remera manga corta negra y su pantalón negro, junto a sus zapatillas All Star del mismo color mojadas y un tanto rasgadas. Todas nuestras ropas estaban en ese estado.

    Hasta ese momento, todavía me sostenía la muñeca en su mano. El silencio se impregno en el lugar, cuando me soltó.
    Mi madre –que hasta ese momento me había olvidado de su presencia.- toma una bandeja con dos gaseosas y una bolsa mediana de papas fritas. A continuación, no las da a nosotros dos con una palabras juntas; <Abajo las tensiones, Arriba los ánimos.> Era lo que siempre me decía para alentarnos. La mire y luego me senté en el banco junto a Billy. Abrí mi gaseosa y el la suya, tomamos en silencio y luego al intentar agarrar una papa frita, nuestras manos se entrelazaron y cuando las vimos estaban juntas. Seguí con lo mío, desviando mi cara con un notorio sonrojo mientras él desvia su rostro. Nuestras manos seguían juntas y mi madre, convenientemente dijo <Ire a dormir un rato, me tardare ya que estoy cansada.> Lanzó un pequeña carcajada y se retiro.

    Observe el reloj y logre leer que habían pasado 4 minutos desde que habíamos entrado mi madre y yo. El de repente dice algo.

    -Tienes manos tibias.- Me sonrojo con violencia y le suelto la mano aunque hubiera deseado no haberlo hecho.

    -Perdón.- Un nudo en la garganta aparece dentro de mí. Comienzo a tiritar por que en ese refugio, no había calefacción alguna y todo estaba muy frío gracias al desuso.

    -Te estas congelando.-Me pone una manta que había debajo del banco y me enncierra en una prision provocada por su brazo. No quiero que desaga eso, me siento como en el paraiso con él… ¿Me abre enamorado?
    Luego, continúa diciendo.- Es raro estar aquí contigo. Se perfectamente que no me toleras en absoluto.- Una sonrisa gatuna aparece en ese bello rostro que posee.

    -Yo te tolero, pero el que me mira mal aquí eres tu. Vos nunca me dirigiste la palabra.-

    -¿Y eso te pone triste o feliz?-

    -Yo nunca me pondría feliz por eso… Y al no hablar contigo es como si un futuro amigo desapareciera.-

    -Un futuro amigo…- Repite y para mi sorpresa su semblante se pone tan triste, como supongo que esta el Mio.

    -¿Qué te ocurre?- Yo me preocupo por el, aunque antes no lo conocía se que esto es amor… Por lo menos de mi parte.

    -Nada, es que… No se como explicarte esto sin que me odies. Es muy difícil por que estaría decepcionando a mi hermano y eso es…- No lo dejo terminar de hablar por que recordar a lo que una vez fue una relación muy feliz ahora es insoportable.

    -No tienes por que hablar de ello si tu no quieres. Solo quería ayudar a un futuro amigo.- Intento poner una sonrisa en mi rostro aunque se nota que es muy falsa.

    -¡No quiero ser tu amigo!- Me lo escupe en la cara. ¿Tan mala era? Mejor le pregunto.

    -¿Tan mala soy que no quieres ser mi amigo?- Mi semblante triste volvió. Ahora se que mi amor no es correspondido.

    -No entiendes lo que quiero decirte. No sos mala, todo lo contrario. Yo no puedo explicarte.- Su semblante no cambo desde hace varios segundos.

    Mi mal genio sale a flote y la rabia que siento por este mal amor y por la no comprensión de él me enfurece.

    --¡Entonces dime que rayos quieres…!- Algo me acalla en ese grito. No se lo que era pero después de 2 segundos reacciono, son sus labios.

    Perfectos, tibios y esperanzados por tener los míos. No tardo en continuar con ese perfecto acto de amor y de un tímido y cobarde beso, aparece uno apasionado y con ganas de nunca acabar.

    La maldita falta de aire nos invade a los dos y por eso nos separamos. Él comienza a hablar de nuevo.

    -Ahora entiendes a lo que me refería.- Estaba confundida y cabizbaja.

    -Ahora estoy más confundida que antes.- ¿Cómo reaccionara? Es lo que me pregunto.

    -¿No lo entiendes? Nos comenzamos a cruzar cuando tú ya estabas de novia con Esteban. No podía decirte lo que sentía y ahora, por causa del destino termine a parar aquí. Entiendes que yo… Te amo con todo mi corazón y mi alma.-

    No entro en mí de la felicidad que me asecha. Por fin algo prefecto en este momento de finalización del mundo.
    Comienzo a susurrar un <Eh… Yo…> pero termino diciendo.

    -Desde que contemple esos ojos, tus ojos. Supe que eras esa persona perfecta para mí.- Ahora lo difícil.- No es que no haya amado a Esteban, el era mi vida. Pero lo que él me hacía sentir no se compara con nada a lo que siento yo ahora por ti.-

    Nos enmudecimos. Observo, nuevamente el reloj, 8 minutos pasaron.

    Billy suelta algo que jamás olvidaría de seguro.

    -Te amo… ¿Quieres ser mi novia?- Mis ojos se abrieron como platos y yo dije:- Nada me haría más feliz.-

    Nos damos otro beso que duro 2 minutos exactos. Desde afuera se escuchan gritos y destrucción. Un terrible sonido asecho y todo, luego, en calma.

    Mi madre, recién levantada de la cama, mi novio y yo salimos a ver que ocurrió. Me shokie de nuevo cuando vi la increíble catástrofe que ocurrió.

    ----------------------------------------

    Después de eso pasaron dos semanas. Buscamos sobrevivientes, 27 personas encontramos. Entre ellos había 14 hombres y 13 mujeres. Nadie había sufrido una grave herida y ahora sabemos que esto ocurrió para que los males del mundo hayan acabado y gente buena y honesta pueda reconstruir y repoblar el planeta.

    Solo somos nosotros 30 y un enorme planeta que poco a poco, esta comenzando a vivir de nuevo.

    -----------------------------------------------------------------------


    Bueno como todos sabemos (y si no tambien hay una peli) "supuestamente" en el año 2012 se acaba todo, el día del juicio final. Por eso les traje esta historia que hice hace unos dias, espero que les haya gustado. :)
     

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso