Él lo cambió todo

Tema en 'Fanfics abandonados sobre Libros' iniciado por JessCullen, 6 Julio 2011.

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    JessCullen

    JessCullen Usuario común

    Virgo
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    6 Julio 2011
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    Título:
    Él lo cambió todo
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    22
     
    Palabras:
    677
    Resumen:

    Bella Swan es una joven adolescente cansada de su aburrida vida de siempre.
    Pero todo cambiará cuando, en un horrible accidente, se vea obligada a dejar todo cuanto conocía y emprender un nuevo camino.
    Un traslado, tristeza, un orfanato, gente que le hará la vida imposible y un difícil y extraño amor son sólo algunos de los obstáculos con los que tendrá que aprender a convivir.

    Él lo cambió todo

    Capítulo 1: Asco de vida

    Uff.. tranquilidad. Tranquilidad al fin.

    Llevaba todo el día en el instituto. Sin duda, los exámenes finales. ¿Cómo narices era posible estudiar y tener vida social al mismo tiempo? Vale, se supone que debemos prepararnos para nuestro futuro, bla, bla, bla. Pero venga! Esto ya era demasiado. Ya hacía casi 3 meses que no salía de casa.

    El instituto de Forks no se caracterizaba por someter a los alumnos a periodos excesivos de estudio, pero tampoco nos librábamos del estrés.
    Desde bien pequeña soñaba con entrar en este gran edificio, sentirme como una persona adulta, al estilo de una película adolescente. Ahora odiaba esto.
    Gracias a dios, dentro de 1 semana nos largaríamos para dar pie a nuestras vacaciones de verano. Ya era hora! No tendría que volver a preocuparme por aprovar hasta... bueno vale, hasta el año que viene, en mi último curso.

    Lo mejor es que sólo faltaban 4 meses, más o menos, para mí 18 cumpleaños. Sería mayor de edad, sí! Pero en verdad, le temía un poco al hecho de verme sola ante el mundo real. Ahora tenía el apoyo de mis padres, Renée y Charlie. Ellos me mantenían. No teníamos mucho dinero y nuestra casa tampoco es que fuese una mansión. Pero para mí ya estaba bien. Lo justo y necesario para vivir en condiciones.

    -¡Bella! ¡Ya estás bajando a poner la mesa!- gritó mi madre desde el piso de abajo.

    ¡Oh! Genial... Día de tareas... ¡Lo que me faltaba!

    Renée nos había organizado una tabla con las tareas diarias de cada miembro de la familia. Y los viernes era mi turno para preparar el mantel, los cubiertos y los vasos, fregar las vajillas sucias y acabar de limpiar la cocina.
    No me apetecía en absoluto.

    Será mejor que bajes antes de que se ponga pesada.-me aconsejó mi conciencia.

    ¿Desde cuándo escuchaba yo esa estúpida y pesada voz? Ah sí, desde que tengo memoria.
    Siempre hago lo que me dicta la mente, que según la gente es lo correcto. Odio llamar la atención y por eso me resigno a seguir las normas de la sociedad.

    -¡Isabella Marie Swan! ¡No te lo volveré a repetir! ¡Baja inmediatamente!

    Sin otra opción, me dispuse a afrontar a mi madre e intentar acabar pronto el día. Sólo quería una cosa; dormir de una vez.

    Nota de la autora:

    Espero que os haya gustado este primer capítulo. Es un poco personal. Más bien desde el punto de vista de Bella. Simplemente he decidido presentar a pequeña escala su vida. En los próximos comenzará la trama, serán más largos y habrá mucho más diálogo, lo prometo.

    Att:
    JessCullen
     
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    JessCullen

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    Él lo cambió todo
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    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    22
     
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    Capítulo 2: Su último aliento...

    -¡Bella, te he dicho que no!- intentaba concluir mi madre.

    -¡¿Porque me tratas como si tuviese 3 años, mamá?!- no me daría por vencida tan fácilmente.

    Renée cruzó la cocina con dos platos sucios de aquel mismo medio día. Los colocó en el lava-vajillas y continuó debatiendo conmigo.

    -Haber hija. ¿ Te vas a Port Ángeles, dices?

    -A dar una vuelta, mamá...- repetí por décima vez.

    -¿Y a donde vas a dar esa vuelta?- subió el tono de voz.- ¡¿No entiendes que no puedo dejar que te vayas a donde te dé la gana, Bella?!

    -Lo que tú no entiendes, es que soy lo suficientemente madura como para salir con mis amigos un sábado por la tarde. ¡Eso, mamá, es lo que tú no entiendes!- se me estaba agotando la paciencia.

    Mi madre volvió a cruzar la estancia, esta vez para coger unos vasos y comenzó a fregarlos.

    -¡¿Pero me estás escuchando, a caso?!- le grité, dando un golpe en la mesa de la cocina.

    Te acabas de pasar- me regañó mi conciencia.

    Habían pasado horas desde que empezamos a debatir y aún no habíamos avanzado nada.

    -¡¿Que ocurre aquí, Bella?!- me giré para ver a Charlie, recostado contra el marco de la puerta, mirándome fijamente y con los brazos cruzados.

    -¡Oh, venga! ¡Sólo voy a salir una tarde y eso ya os parece demasiado!- agité los brazos de un lado para otro sin contener mi rabia.

    -Haber Bella; vas salir una tarde. ¿Se puede saber con quién y a donde?- mi padre parecía tener más paciencia que yo.

    Respiré hondo antes de hablar.

    -Vamos a Port Ángeles. Eric, Jessica, Ang y Mike. Daremos una vuelta por allí, Jess quiere comprarse zapatos nuevos o yo que sé que me ha dicho. Y después... bueno, Mike se entera de todo y le han dicho que hay una discoteca nueva cerca del descampado sur. Nos pasaremos por allí.

    -¡¿Discoteca?!- gritó mi madre. Dejó de fregar los vasos y se encaró conmigo. Iba a abrir la boca pero Charlie la interrumpió.

    -Bella, tienes 17 años. Además, esa discoteca nueva es para mayores de 18. A caso alguno de tus amigos es ya mayor de edad?- me miró esperando un "no" por respuesta.

    -Papá, sólo me quedan 4 meses para poder entrar legalmente. No nos pillarán. Mike dice que el portero es un inútil. Pasaremos en cuanto veamos que entra un grupo con mucha gente, no nos parará a todos en la entrada, asique nos escabulliremos y...- contaba todo aquello como si se tratase de un plan de guerra.

    -Ya basta. Eso es ilegal y tú lo sabes. Sube a tu cuarto ahora mismo, porque hoy no saldrás.

    -¡¿Claro y los dejo plantados no?! He quedado con ellos a las 5 en punto. Son..- miré el reloj- ¡¡Menos cuarto!!

    -¿Y exactamente como ibais a llegar a Port Ángeles?- aquella pregunta me pilló desprevenida y solté, sin querer, la verdad.

    -Mike casi tiene el carnet.- seguía atontada mirando el reloj e intentando organizar el tiempo para arreglarme y llegar a la hora.

    La acabas de fastidiar, imbécil- otra vez mi conciencia. Lo que me cabreaba es que tenía razón.

    -¡Ah, genial! ¡Vais a ir en coche también ilegalmente! ¡Perfecto, Bella!- Charlie se estaba pasando con tanto sarcasmo.

    Suspiré. Tenía mis manos agarradas fuertemente al mármol de la cocina y la cabeza gacha para ocultar las lágrimas de rabia que caían por mis mejillas.
    Subí a zancadas las escaleras y pegué un portazo con toda la frustración que encontré.

    ¡Imbéciles! ¡Estúpidos sobre-protectores! ¡Ojalá cumpla ya los 18 para irme de ésta mierda de casa!

    Entre insultos en mi mente, una parte de mí cavilaba para llegar a tiempo al encuentro.
    Finalmente lo decidí. Me daba igual lo que dijeran mis padres. Tenía 17 años y no me quedaría en casa ni un minuto más aguantando sus bobadas sobre la madurez y ahora, gracias a la información que jamás debería haber salido de mi boca; sobre las acciones ilegales.

    Me vestí en 5 minutos, cogí mi mochila para salir y metí en ella 20 euros de mis ahorros.

    Si corres todo lo que puedas y no te paras, aunque hagas ruido no podrán alcanzarte a tiempo.-por una vez, mis pensamientos me ayudaban.

    Pero antes debía tener informados a mis amigos, para que en cuanto me vieran aparecer por la calle se preparasen para salir con el coche enseguida.

    -Jess. Hola, necesito un favor.- procuré hablar bajo por el móvil.- Escucha, mis padres no me dejan salir pero me da igual. Voy a salir pitando de mi casa, asique en cuanto me veáis arrancad el motor. Para cuando me suba en el coche, tenemos que desaparecer de allí porque mis padres me seguirán. Es lo más probable.

    -Está bien, Bella. Pero si tus padres se cabrean, nosotros no nos hacemos responsables, eh? A sido idea tuya y sólo tuya.- respondió ella.

    -Sí, sí. No te preocupes por eso. Venga, díselo a los demás y estad preparados.- colgué después de aquello.

    Con una mano en el picaporte de la puerta y con las piernas preparadas para echar a correr, abrí la puerta de golpe y, sin mirar atrás, casi volé hasta la salida.
    Noté como mi padre se levantaba del sillón cuando pasé por delante del comedor y como mi madre gritó "Que es eso?". Pero para cuando se dieran cuenta de que pretendía fugarme, yo ya estaría lejos.

    Corrí con todas mis fuerzas por la calle de mi casa, hasta girar la esquina. Me dirigí a casa de Mike, no muy lejos de la mía. Tal vez a dos manzanas de distancia.
    Cada vez a más velocidad, casi alcanzaba la última calle que me quedaba por recorrer. Menos mal que correr era la única actividad física que se me daba bien.

    -¡¡Bella!!- escuché una voz grave detrás de mí.

    ¡Oh, no!

    Charlie estaba acostumbrado a perseguir criminales. Al menos los pocos que había en el pueblo de Forks. No tendría problemas en correr tras su hija de 17 años.

    -¡¡¡Bella, detente ahora mismo!!!- parecía que se estaba quedando sin voz.

    Yo seguía molesta y no pretendía abandonar mi plan de fuga. Ahora podía ver a Angela hacerme señales con la mano y a Eric reírse al contemplar la escena.
    Aceleré el paso y me subí de un brinco dentro de la furgoneta de Mike. Bueno, más bien de su madre.
    Mientras intentaba recomponerme dentro del vehículo, Eric cerraba la puerta antes de que el jefe de policía Swan (papá, como yo le llamaba) pudiese alcanzarnos.

    -Bella respira! Te va a dar un infarto, loca.- continuaba carcajeándose Eric.

    -Muy gracioso.- dije entre alientos y sin pizca de humor en la voz.

    A partir de aquello mis amigos no pararon de comentar lo increíble que había sido la escena de persecución y de reírse por los malos chistes de Mike.
    Pasamos la tarde de aquí para allá. Jess se compró un bolso nuevo, mientras Ang y yo la seguíamos sin interesarnos por la ropa. Únicamente para no dejarla sólo en la tienda. Los chicos esperaron fuera.
    La tarde transcurrió entre risas y bromas, hasta que llegó la hora de la fiesta.

    "Disco Paradise"

    El cartel del local es lo que mejor recuerdo. Enorme, con luces brillantes de color verde y azul.
    Tal y como Mike nos había asegurado antes, el portero era algo corto de mente, y tuvimos muchas oportunidades para colarnos.
    Una vez dentro, recuerdo que bailé y grité hasta quedarme sin fuerzas. Jessica decidió probar por primera vez el tabaco, pero a mí no me iba ese rollo, asique pasé.
    Mike y Eric pillaron una borrachera de película.

    La discoteca cerró a las 2 en punto y la mayoría, con ganas de marcha, continúo armando jaleo en la calle. Mis amigos estaban muy animados y simplemente, yo les seguía el juego. Pero realmente estaba algo cansada después de tantas horas.

    En seguida nos enteramos de la noticia; una carrera de bólidos en el descampado de al lado. Asique allí acabamos todos, muchos borrachos vomitando por el camino y otros cantando cosas estúpidas e incomprensibles.

    Casi había conseguido olvidarme de todo, cuando un coche de policía irrumpió en el barullo y se paró justo a mi lado, dejando la ventana del conductor frente a mí.
    No necesitaba que bajaran la ventana para saber quiénes eran los dueños.

    -¡Isabella estás castigada de por vida! ¡No me puedo creer lo que has hecho! ¡Nos has decepcionado y mucho! ¡¡Entra ahora mismo en el coche!!- mi padre estaba montando otro numerito.

    -Pero..- intenté quejarme.

    -¡Bella haz caso a tu padre!- me ordenó Renée.

    -Es que..- volví a interrumpir.

    -¡¡Ahora!!- aquel gritó me sobresaltó. Jamás había visto a Charlie de tan mal humor.

    Cerré los ojos con fuerza. El dolor de cabeza me estaba matando.

    -Dejadme en paz. - concluí. Y me giré en dirección contraria.

    Caminaba con los ojos cerrados cuando lo oí.
    El estallido fue impresionante. Como el de una bomba. Para cuando me giré, el coche de mi padre había desaparecido para convertirse en un montón de chatarra aplastada. A duras penas se distinguían los dos coches que acababan de chocar. Uno era el bólido negro brillante que había visto aquella noche en el descampado y el otro.... el coche patrulla... el coche patrulla de... de mi padre.

    A partir de ese momento no lo recuerdo bien todo. Sólo sé que se escuchaban gritos, ambulancias y móviles sonando por todas partes. La gente empezó a amontonarse y poco a poco sólo se veían sombras corriendo de un lado para otro.
    No sé cómo, la policía me encontró y me llevó hacia uno de los coches patrulla. Yo no quería irme. Mis padres estaban allí. Pero por mucho que lo intentaba no conseguía que saliera ni un sonido de mi boca.

    Todo fue tornándose borroso, hasta que la oscuridad me invadió.
     
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  3.  
    rosalinda

    rosalinda Entusiasta

    Acuario
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    Hola gracias por invitarme a leer tu fic.
    Quiero decirte que la trama de tu historia es muy interesante. Pero lo que le resta interes de continuar leyendola es como manejas la esencia del personaje como el de Bella, porque en tu fic la haces ver como una chica rebelde y extrovertida, cuando Bella en apariencia, en la saga. es más introvertida, tímida, torpe algunas veces, pero sobre todo muy amable con los demás.
    Con esto no te digo que este mal, toma en cuenta que solo es una opinión o una sugerencia para mejorar ok, No te desanimes!!!! ok sigue adelante que el comienzo siempre es así yo te lo digo por experiencia propia;).
    Sin más me despido y estaré esperando el próximo capítulo.
    Un beso, bye.
    Espero que seamos amigas ok;)
     
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  4.  
    JessCullen

    JessCullen Usuario común

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    Jeje :$ Es que pensé que Bella podría ser así al principio del fic, pero en la continuación cambia. Era todo un "plan" xDD En cuanto suba los demás capítulos ya veréis por que =P
    Gracias por tu opinión de verdad =) Y claro que seremos amigas ;) jaja
    Un abrazo

    JessCullen
     
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  5.  
    norma

    norma Iniciado

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    WoW te quedo super y gracias por invitarme a leerlo
    no sabes como me ha encantado tu fic Jess- san(o prefieres JessCullen)
    sebe muy interesante aunque la actitud de Bella me
    parece muy ruda por asi decirlo y ya me
    puse isterica (no se si se escribe asi :p)
    por saber que pasara en el sig. capitulo ya que nos dejas con
    las ancias de saber que pasara. Y sin más que decir tienes
    mi apoyo para lo que necesites y espero y podramos
    ser buenas amigas :)
    :padios y besos:p=P
     
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  6.  
    Blood Dupre

    Blood Dupre Usuario VIP

    Tauro
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    Hola gracias por invitarme, verdaderamente me ha encantado la trama, pero no soy muy fanática del Ooc, pero ya mencionaste que iras cambiando la actitud de Bella, en cuanto a mí critica te comiste algunos signos de admiración y abusas demasiado del punto, además de que utilizas el guión corto en lugar del guión largo, para colocarlo en tú computadora se presionan las teclas: Alt+0151, en fin espero la continuación. Adiós.
     
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  7.  
    lupus

    lupus Usuario común

    Libra
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    Gracias por invitarme a leer tu fic. Realmente se me ha hecho muy raro ver a una Bella rebelde sin causa pero ya has explicado que la irás cambiando así que no insistiré más en ello. Si los padres normales ya pueden resultar muy controladores con sus hijos, un padre policía es...una pesadilla.

    Sin embargo, es lamentable lo del accidente. Seguro que la protagonista se arrepiente de haberles desobedecido.

    Espero la conti.
     
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  8.  
    Sylar

    Sylar Usuario común

    Leo
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    Gracias por invitarme a leer tu fic; el segundo capitulo tuvo un final impactante pobre Bella el no poder decir nada es como si hubiera tenido un fuerte impacto psicologico =(... esperando ansiosamente el siguiente capitulo que sin duda lo leere tan pronto lo coloques (si es que mi hermano no ocupa antes la PC XD), hasta entonces =).
     
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  9.  
    JessCullen

    JessCullen Usuario común

    Virgo
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    Capítulo 3: Escogida

    Odio esto.

    -¡Isabella, querida, date prisa!- gritó Sasha, una de las monitora, desde las escaleras.



    -¡Enseguida voy!- sabía perfectamente que estaba mintiendo.

    Desde que llegué aquí, yo misma estaba deseando marcharme en cuanto fuera posible. Pero ahora que tenía la oportunidad, me aterraba la idea.

    Llegué a este orfanato a mis 18 años recién cumplidos. Tras aquel accidente (prefiero no recordarlo), pasé días en comisaría. Intentaban encontrar aunque fuese sólo un familiar cercano, pero fracasaron. Mis abuelos murieron hacía ya muchos años y únicamente sabía de la existencia de una tía desaparecida.

    Cuando los agentes se dieron por vencidos, estuve meses trasladándome de una casa de acogida a otra. No me voy a quejar, algunos anfitriones eran realmente amables, pero al final todos acababan cansándose de mí o ponían pegas en cuanto al gasto económico que conllevaba mantenerme.

    La última opción que quedaba era mandarme a un orfanato. Uno de esos lugares a los que van los niños sin familia, de los que ya se ha perdido toda esperanza por retornarles una vida más o menos aceptable.

    Por tanto, allí "celebré", dentro de lo que se entiende por celebrar en un orfanato, mi 18º cumpleaños.
    Al principio, a los recién llegados como yo nos animaban asegurándonos que encontrarían alguna familia que nos adoptara. Pero los meses iban pasando y todos acabamos igual de amargados.


    Me fui acostumbrando a los días interminables entre los muros del edificio, a las sosas comidas de la cocinera Mary y a las bromas pesadas de Tanya y su grupito. Esas tres siempre encontraban alguna manera de sacar de quicio a quien se les cruzara. Supongo que era su forma de pasar el rato. No las culpo, las horas pasaban muy lentas allí dentro.

    Recuerdo que una de las veces consiguieron sacarme de mis casillas mentalmente, pero también fue así como conocí a gente simpática en aquel agujero al que todos llamábamos "casa".

    Era tarde, casi la hora de subir a las habitaciones para dormir. Senna, la más callada de por aquí, y yo éramos las encargadas de recoger el comedor aquella noche cuando Tanya, Kate e Irina aparecieron como sombras por la puerta. Sabía perfectamente que pasarían de Senna y vendrían a fastidiarme a mí. A la "rata de biblioteca" como me llamaban esas arpías. Ya os contaré porque.
    El caso es que no se les ocurrió otra cosa que tirar todas las banquetas que yo me había apilado cuidadosamente en una esquina del comedor. El ruido fue excesivo y resonó por todos los pasillos del orfanato, estoy segura.
    No podía ser de otra manera, las tres se fueron disparadas hacia la salida con una maquiavélica sonrisa en el rostro. Si su misión era conseguir que me castigaran, lo consiguieron.
    Estuve tres semanas limpiando el sucio patio trasero con más "delincuentes", que para mi sorpresa resultaron ser gente muy maja.
    Mi personalidad había cambiado mucho desde... desde aquel verano, a veces ni yo misma me reconocía, así que fueron "ellos" los que me hablaron a mí.
    El primero a quien conocí y con el que hice buenas migas fue Seth. Más tarde me presentó a su hermana gemela, Leah. Los dos habían acabado aquí tras el abandono de sus padres.
    Poco a poco trabé amistad con ellos y con Jacob, Quil y Embry. Las semanas eran más llevaderas a su lado. Al menos siempre sabían cómo sacarme una sonrisa.
    Ellos también conocieron a Bella, la "rata de biblioteca", pero a pesar de todo parecían aceptarme.
    ¡Ah! Ese mote viene a mis incalculables horas de lectura. El orfanato, menos mal, disponía de una salón de estudio y los libros me ayudaban a sacarme un poco de este mundo. La gente acabó dándose cuenta de que apenas se me veía salir del lugar y como no, Tanya se inventó ese "ocurrente" mote para mí.

    -¿Querida, porque tardas tanto?- preguntó con impaciencia Sasha.- ¡No tardarán mucho en llegar!- ahora parecía emocionada. Desde luego más que yo seguro.


    -¡Un momento! ¡Estoy acabando de guardar mi ropa!- hice saber, de nuevo mintiendo. Cuanto más se retrasara el momento, mucho mejor.

    Hacía dos días me dieron la noticia de que alguien había aceptado integrarme en su familia. Por lo que en breve me vería abandonando este lugar para siempre.
    Llevaba horas preparando la maleta, bueno, el caso es que ya la tenía lista hace rato. Ahora intentaba prepararme mentalmente.

    ¿A quién demonios le apetecería adoptar a una adolescente de 18 años?

    Los nervios me comían por dentro.
    Decidí no aplazar más el momento. Miré por última vez aquellas cuatro paredes blancas, la cómoda de madera donde antes descansaba una foto de mis padres, ahora muy bien guardada en mi maleta, y la cama de sábanas azules donde me sentaba. Cogí una bocanada de aire antes de bajar con el equipaje en mano y un abrigo.

    -Ya era hora, Isabella.- Sasha me cogió la maleta para ayudarme a bajarla.

    No respondí.
    Lo sé, lo sé, la Bella de hacía unos meses habría respondido bruscamente, pero ésta no era yo. Al menos ya no. Lo que pasó me dejó destrozada por dentro y mis contestaciones extrovertidas habían sido substituidas por tímidas sonrisas y el mínimo número de respuestas posibles.

    En el piso de abajo me esperaba la puerta de salida y dos figuras, una mucho más alta que la otra. En acercarme más no dude de quienes eran.

    -¡Bells!- Jacob me abrazó con fuerza.

    Le devolví la sonrisa y un abrazo a mi manera.

    -Por aquí te vamos a echar de menos, afortunada.- Seth, sin embargo, chocó las manos conmigo como siempre.

    Sonreí.

    -La que os va a echar de menos soy yo.- respondí con el tono de voz más lastimero que encontré. El justo para no echarme a llorar.


    -¡Vamos! ¿Quien decía que jamás saldríamos de este "pozo sin fondo"?- Jacob sabía imitar muy bien mi voz. Le di un golpe en el hombro, a sabiendas de que no le haría daño.- Flojucha.- soltó en voz baja.

    Le dediqué una mirada asesina con las que se solía reír.

    -Aún así la que va a salir soy únicamente yo. No me parece justo.- volví al tema.


    -No te preocupes por nosotros. Alguien ha de mantener a raya a Quil y Embry.- soltó Jacob.



    -Y yo tengo que vigilar a Leah.- Seth se otorgó el papel de hermano responsable por una vez.


    -¿No será que ella tiene que controlarte a ti?- le dije entre risas.


    -¡Venga, Bella! ¡Un poco de confianza! Soy perfectamente capaz de sobrevivir sin su ayuda.- se llevó una mano al pecho.

    Nos reímos un rato más, hasta que llegaron noticias de mis supuestos padres adoptivos.

    -Isabella, es hora de irse querida.- Sasha esperaba en la puerta con mi maleta. Asomé un poco la cabeza pero sólo conseguí distinguir dos sombras detrás de una puerta de cristal translúcido.


    Una sensación de inseguridad y hormigueo se apoderó de mi estómago.

    -Bueno, Bells, no te olvides de nosotros. ¿Vale?- Jake me mostró su mejor sonrisa.


    -No me voy a olvidar, os lo prometo. Acordaos de vez en cuando de la "rata de biblioteca" también.- bromeé.


    -¡Por supuesto!- está vez Seth me dio un abrazo, muy fuerte para ser tan bajito.

    Mientras me dirigí hacia la salida, grité "¡Cuidaos mucho!". Luchaba porque las lágrimas no cayeran, al menos no hasta estar a solas.
    Sasha me sonrió y me paró unos centímetros antes de traspasar el portal.

    -Querida, todas esperamos que seas muy feliz, porque te lo mereces cariño.- la que no podía evitar llorar era ella.


    -Gracias.- respondí mientras me estrechaba entre sus brazos.

    Dispuesta a encontrarme con la realidad, caminé hasta toparme de cara con dos personas.
    Uno de ellos era un hombre alto y algo musculoso. Sus cabellos rubios se peinaban de manera formal hacia un lado y su ropa bien planchada parecía nueva.
    La otra era una mujer más bajita, pero adorable a la vista. Su cara tenía la extraña forma de un corazón. Sus ojos castaños me traspasaban y me hacían sentir seguridad. Ella también iba muy bien vestida.

    ¿Familia rica?

    -Isabella, estos son los señores Cullen.- me indicó con la mano mi monitora.


    -Hola, preciosa. Soy Esme.- la mujer hablaba con tanta dulzura que por un momento me sentí querida.


    -Encantado, Isabella. Puedes llamarme Carlisle.- el hombre me saludó con un apretón de manos.

    Que gente más educada... Yo no pinto nada aquí.

    -¿No vas a decir nada, cariño?- me animó a hablar Sasha.- Es algo tímida.- informo en voz baja al ver que no salía ninguna palabra por mi parte.

    Me había quedado en shock. Aún me costaba asimilar que mi destino ya estaba marcado. Pasaría el resto de mis días con aquellos dos extraños. ¿Realmente quería eso? No estaba segura. Pero tampoco quería morir de asco en aquel orfanato.
    Está bien, tenía a Jake, a Seth, a Leah y a los demás. Pero me faltaba algo. Una familia. Ojalá nunca... ¡No! No podía volver a culparme por todo aquello. Lo pasado, pasado estaba y no podía reprocharme los hechos que sucedieron.

    -¿Me dejas que suba tu maleta al coche?- preguntó amablemente el señor Cullen.


    -Em... sí. Gracias.- fue lo único que dije. El hombre sonrió y se llevo consigo mi equipaje.

    Le seguí con la mirada y vi como abría el maletero de un Mercedes negro brillante. No entendía mucho de coches, pero sabía perfectamente que aquella cosa no era nada barata. O al menos no tenía la impresión de serlo.

    -Bueno, será mejor que vayamos con mi marido.- la señora Cullen avisó a Sasha.- Ven, preciosa.- pasó su brazo por mis hombros. Al fin y al cabo era casi de la misma estatura que yo.- En casa podrás ducharte, te enseñaremos tu habitación y prepararemos la cena.

    Asentí con la cabeza. Nunca en mi vida me había quedado tan trabada como en este momento. Todo estaba sucediendo demasiado rápido.

    -Ya está todo listo.- concluyó el señor Cullen.- Adelante. Ahora nuestro coche, es tu coche.- la señora Cullen miró a su marido con una sonrisa.

    Subí a los asientos traseros del vehículo y volví a mi estado de shock. Menos mal, mis padres adoptivos no me volvieron a dirigir la palabra durante el trayecto. En algunos momentos vi como la mujer pretendía girarse para charlar, pero su esposo le hacía un gesto negativo con la cabeza.
    Me alegraba que fueran comprensivos conmigo. No tenía ganas de hablar con nadie en estos momentos y supongo que mi estado de ánimo se vería reflejado en mi rostro.

    Pasado un rato y sin aspecto de llegar pronto a nuestro destino, cerré los ojos apoyándome contra el respaldo de los asientos. Era tan cómodo que pronto perdí el conocimiento.

    ..................................................................................................

    -¿Isabella?- oí una voz femenina algo distorsionada.- Preciosa ya hemos llegado.- continuó la voz.

    Pestañeé varias veces, hasta que abrí los ojos. El sueño me había dejado medio aturdida.

    -Has estado dormida un buen rato. ¿Cómo te encuentras?- preguntó el señor Cullen.


    -Cariño, no es uno de tus pacientes.- le recriminó su mujer.- Perdónale. Está acostumbrado a su trabajo en el hospital.- me sonrió mi nueva madre.

    Hice un gesto con la cabeza para demostrar que no había tenido importancia y salí de allí. Así que mi nuevo padre era médico... Debía tener mucho éxito para poder permitirse un modelo de automóvil así.

    Fuera, el aire parecía más puro y las estrellas brillaban con intensidad. Ya habíamos llegado a mi nueva casa o eso suponía yo. Miré a mí alrededor. Bosque, bosque y más bosque.

    ¿Viven en mitad de la nada?

    Pero de repente unas luces se encendieron detrás de mí. Eran unos farolillos colgados en un porche. Un gran porche por lo que se veía. El señor y la señora Cullen caminaron hacia él y yo les seguí con cuidado. En ese momento caí en que mi maleta seguiría en el coche, pero el doctor ya la llevaba en su mano.

    Que atenta es esta gente.

    Continué adelante sin expresión en el rostro. No sabía exactamente qué era lo que sentía en esos momentos.
    Conforme nos acercábamos más, la casa se iba haciendo más visible. Era enorme, con paredes blancas y de un marrón como el del parquet. La rodeaban unas cristaleras que, con la oscuridad, no dejaban ver el interior de las estancias. Se veían claramente dos pisos, cada uno con muchas habitaciones.

    Para ser un matrimonio sin hijos, les gusta mucho tener espacio.

    Entonces nos paramos justo en la entrada. La puerta se veía moderna y a la vez majestuosa. El doctor Cullen sacó una única llave de su bolsillo y la metió en la cerradura. Se detuvo un poco para abrirla. Cómo si tuviese especial cuidado en no romper nada. Finalmente la abrió.

    En ese instante yo misma pegué un brinco.
    Las luces de la casa se encendieron de golpe, cantidad de voces gritando "¡Bienvenida!" sonaron en la habitación y tres jóvenes aparecieron a mi alrededor.
    Me quedé sin palabras, pero de reojo vi como a los señores Cullen les aparecieron anchas sonrisas. Debían saber todo esto.

    -¡Hola! ¡Bienvenida! ¡Soy Alice!- una chica se abalanzó sobre mí.

    Cuando se separó un poco la observé. Tendría tal vez uno o dos años menos que yo. Su pequeña estatura y su voz la daban un aspecto de duendecillo. Las puntas de su pelo, cortado por la altura del cuello, miraban hacia todos lados y sus ojos eran grandes y de un negro azabache encantador para su cara.

    Pudiendo únicamente sonreír, se me abalanzó otra persona. Ésta vez consiguió levantarme del suelo y casi dejarme sin respiración.

    -¡¿Qué tal?!- gritó.- ¡Yo soy Emmett! O como todos me llaman: ¡El increíble Emmett!- presumió bromeando. Aquello me hizo reír con ganas.


    -Ya, claro.- la pequeña chica le sacó la lengua.

    Miré esta vez a Emmett. Era enorme y musculoso. Su pelo castaño oscuro no destacaba nada en su rostro, lo llevaba muy corto y medio tapado con una gorra de baseball.

    No me dio tiempo a procesar toda la información, cuando la señora Cullen se me acercó.

    -Isabella, cariño, éstos son tus hermanos. Son también adoptados como tú, así que no tienes por qué sentirte diferente.- me estrecho un poco el brazo amablemente.- ¡Ah! También está Edward, es un poco... tímido, no te preocupes.- me sonrió.

    No me había dado cuenta hasta ahora de que detrás de mis dos hermanos adoptivos quedaba un tercero. El único que no había venido a saludar.
    Era muy alto, tal vez incluso más o igual que el doctor Cullen. Tenía un cabello muy peculiar, de color broncíneo y despeinado, dándole un look desgarbado. Me miraba con unos ojos verdes, que por alguna razón no podía dejar de observar. Eran increíbles, profundos y misteriosos al mismo tiempo. Estaba parado, apoyado contra la pared, con las manos metidas en los bolsillos de su pantalón.

    -¿Edward, no vas a venir a saludar a tu hermana?- la pequeña Alice formuló la pregunta exagerando un poco el tono de voz.

    El chico la miró y rodó los ojos.

    -Hola.- fue lo único que salió de sus labios.


    -Hola.- respondí con la mirada gacha. Me era imposible hablarle frente a esos ojos, me incomodaban.

    Los Cullen prepararon una cena deliciosa y confirmando mis sospechas; eran una familia muy rica.
    En acabar, subimos al piso de arriba y Alice me enseñó mi nueva habitación. Aquella chica parecía sacar fuerzas de donde no las había. Tenía una energía desbordante y era muy alegre.

    En cuanto me dejó para que me acostara, al principio escuché a Emmett hablando desde el piso de abajo. Se le veía muy bromista. Como el hermano mayor que nunca tuve. Finalmente todos apagaron las luces.

    Me quedé un rato analizando la habitación. Ésta era muchísimo más espaciosa que la del orfanato. Tenía unas paredes color crema, con muebles modernos imitando la mejor madera tallada. Unas cristaleras al fondo dejaban ver la inmensidad del bosque que rodeaba la casa. En un lado del cuarto había una puerta que daba a mi propio baño. Gigantesco, con azulejos blancos, estanterías con champús, geles y todo cuanto necesitara, una ducha y una bañera que, en cuanto la observé mejor, tenía programación para ser un jacuzzi.
    Lo último que vi fue la cama. En cuanto me hube enfundado mi viejo pijama gris, me tumbé en aquel colchón. Era mullido y muy cómodo. Me quedaría dormida en seguida, pero justo antes de cerrar los ojos rebusqué entre mis cosas de la maleta y encontré lo que buscaba; la foto de mis padres. Ahora descansaba sobre la mesita de noche, justo a mi lado.
    Les miré una vez más antes de dormir y me adentré en un sueño profundo.
     
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  10.  
    Titiritero de almas

    Titiritero de almas Usuario común

    Sagitario
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    ok, concuerdo con ella, pones ooc, y bella es algo... mmm como decirlo, matalas cayando por así decirlo, es cayada, pero no tonta, también te faltan algunos puntos, describir mejor a lo personajes, signos de puntuación, y vi que el ff tiene imagenes, como sólo di click en el enlace que me diste no se si esté en el área de crepúsculo o en el de historias ilustradas, de ser que esté en área de crepúsculo sería mejor que estuviese en el de historia ilustrada.
    la trama me pareció buena, y al final me gustó el cuarto♥
    ok, espero conti ;)
     
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  11.  
    Arleet

    Arleet Fanático

    Aries
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    Vaya... me gusta la tematica que estas abordando, eh observado algunos pequeños errores ortograficos pero estoy segura que los solucionaras. Por cierto, ¿porque no usas mejor el guion largo en vez del corto? te quedaria mucho mejor! :D Espero la continuación.

    Atte. Michy Cullen
     
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  12.  
    Blood Dupre

    Blood Dupre Usuario VIP

    Tauro
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    Me ha gustado la continuación, tienes unos cuantos errores, nada grave, pero ten más cuidado, el guión largo es este: —, observa la diferencia entre guiones, guión corto:-, guión bajo:_ y guión largo: —, en fin espero el próximo capítulo. Adiós.
     
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  13.  
    Aomecita

    Aomecita Usuario popular

    Piscis
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    Hola gracias por invitarme a leer tu fic siento apenas comentar demasiadas notificaciones n_nUu
    bueno primero que nada dejamé decirte que me encanta la Saga De Crepúsculo y amo a Edward *o*
    Ejemmm lo siento volviendo al fic el título me parece interesante y el cambio de la trama ni se diga por que
    bueno el que Bella fuese rebelde si me sorprendió un poco pero lo que si no me esperaba era que viviera en
    un Orfanatorio al haber quedado huerfana pero más aun que los Cullen la adoptaran a ella precisamente
    ¿Por qué habra sido? Y mi Edward sexy ¡Timido! Oh dios eso tengo que verlo me encanto en serio
    espero conti cuidate sayo...
     
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  14.  
    Kai

    Kai Usuario VIP

    Géminis
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    Hola Jess!! Gracias por invitarme tenía mucho sin pasarme por el foro de crepúsculo y me alegre ver a un nuevo integrante por aquí. Bienvenida!
    La trama de la historia es buena, y como muchas dijeron al principio, la personalidad de Bella no era así…Pero la mejoraste. Veo que has usado muchas descripciones del libro, te recomiendo que te aventures un poco más y pongas más de ti en las descripciones. Sé que hay cosas inevitables, ejemplo: Alice es la duende, la forma de la cara de Esme y cosas así. No digo que no lo pongas ni menos que lo cambies, lo que sugiero es que pongas parte de ti en ello, que busques tu esencia de escritora, todos tenemos algo que nos identifica…Hazlo relucir más.

    Lo del guión largo *fastidioso como ninguno* antes, y ahora, en mi notebook no sale, ya que ese código es con el teclado numérico, ¿qué hacía yo? Bueno copiar y pegar… Después que lo tengas copiado, sólo dale a ”ctrl+v” y listo. Sino insértalo en Word… Normalmente, cuándo colocas dos guiones cortos seguidos lo trasforma en un guión largo pruébalo así.

    PD : Quita las imágenes. La verdad ya se ha visto y así desarrollas más tu imaginación. Si no pasaran el tema a fic’s ilustrados y casi nadie pasa por allí *creo*
    PD2 : Bueno, aquí viste mi lado más profesional, procuro que mi primer post, sea, algo fuerte por decirlo así, pero el resto *normalmente* es fangirlismo puro. *Y más si sale Jake *¬* jaja* Nos leemos.
    Sayo. Gracias por invitarme.
     
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  15.  
    Sylar

    Sylar Usuario común

    Leo
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    Asi que en esta version de "crepusculo" ella es "adoptada" por la familia vampirica, muy interesante sin duda, el agregado de fotos le queda excelente, esperando el siguiente capitulo =).
     
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  16.  
    Arleet

    Arleet Fanático

    Aries
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    Sobre eso, para ponerlo es como un conjunto de teclas. Mira, tiene que apretar primero Alt + 0151 no lo pongas todo junto de una sola vez, primeto "Alt" y sin dejar de precionarlo, sigue con los numeros uno por uno. Espero haber respondido tu duda.

    Atte: Michy Cullen
     
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  17.  
    norma

    norma Iniciado

    Leo
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    31 Marzo 2011
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    Escritora
    Hola Jess-san, perdon por haberme perdido
    este capitulo es solo que mi compu me esta fallando
    pero dejando eso a un lado el capi. te salio genial, pero
    respecto a las imagenes podrias hacer lo que te
    dicen rosalinda o anime no hime, es solo una
    sugerencia.
    Pero ¡¡kyaaaa!! esta Bella siendo adoptada por los Cullen
    que emocion ya quiero saber que pasara con Edward
    en el sig. capi y como se llebara Bella con todos los Cullen.
    :pAdios y Besos:p =)

    P.S: ¡¡Tú fic me encanta!!
     
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  18.  
    flor de papel

    flor de papel Entusiasta

    Libra
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    5 Junio 2011
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    hola gracias por la invitacion como prometi ya estoy aqui, me gusta mucho la saga y me encanto tu invitacion
    bueno dividire mi comentario en tres partes...

    ortografia,estilo y blabla: en 1 ten cuidado con las imagenes, quizas el tema deberia estar en historias ilustradas por eso
    2 en una parte del primer cap pusiste el nombre de la discoteca a colores esta prohibido escribir a colores
    3 se te pasaron algunos signos y pues lo del guion que ya te dijeron asi que omitire eso.

    trama: esta parte es mas mi especialidad, creo que fuiste un poco rapido, te falto describir mas el dolor que Bella sufrio al perder a sus padres, este tipo de situaciones te pueden ayudar a escribir mucho y lo redusiste en gran medida, te falto describir un poco mas a los personajes, si es cierto me guio por la pelicula y eso pero dales tu toque personal, eso llamaria mas la atencion y mejoraria la calidad, la historia es atrapante solo necesitas narrar un poco mas pero eso se soluciona facil

    locuraa personal: me encantaaa tu historia!!!! amo el hecho de que manejes a Edward con ojos verdes, me parece que su personalidad callada es tan atractiva, aunque fisicamente creo que es mejor Jacob, se podra una mezcla de las dos?

    bueno ya me voy me avisas de la conti y espero mi comentario te sirva de algo
    cuidate mucho y suerte :)
     
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  19.  
    Miss Adidas

    Miss Adidas Spameadora (?)

    Piscis
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    Hola!!!
    Bueno me ha encnatado la temática , y en serio está muy interesante. Has tenido algunos errores ortográficos (ya mencionados ) y por cierto yo también soy una gran fan de la saga ( y también de los pingüinos ) pero eso no viene a cuento. Además que bien que Isabella haya sido adoptada por los Cullen ( seguro que no hay mejor hogar para ella )
    Bueno espero que haya conti pronto
    Att : MariaIsabella Swan
     
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  20.  
    blackrose18

    blackrose18 Usuario VIP Comentarista Top

    Piscis
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    22 Diciembre 2006
    Mensajes:
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    NO se permite el uso de imágenes. Y no puedes responder todo comentario que te ponen, has una sección de respuestas al final del capítulo y responde ahí
     
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