Tanto tiempo llevo sin escribir un fanfic que seguro a mis manos les crecerían unas telarañas... Pero decidí salirme de mi zona de confort (Pokémon) para traer algo que se me ocurrió en el momento. Agradecimientos a "El Reviewer Random" por la idea. Visiten su canal de Youtube. Apoyen a un compatriota chileno. https://www.youtube.com/c/ReviewerRandom Sin más preámbulo, al escrito... ================================================================ ¡RATEROS! En algún lugar del Distrito Federal de México, en las oficinas del Grupo Chespirito para ser más precisos. Un hombre cincuentón con prominente frente, pelo corto, amplias orejas y nariz ligeramente achatada le habla a su sobrina, una mujer de no más de treinta y dos años con facciones parecidas y pelo ondulado y con largo casi a los hombros. — ¿Ha habido suerte con la extensión del plazo? — No mucha — Respondió ella — Solo cinco participantes y un magro total de veintidós imágenes. Posterior a ello, la joven soltó un suspiro de hartazgo — ¿Deberíamos ampliar el plazo? — Hazlo — Decretó firmemente aquel varón. — Necesitamos a tres artistas más que quieran unirse a nuestra noble causa. — De inmediato — Atendió la mujer, y comenzó a crear un nuevo afiche, para avisar que… “El plazo se ha extendido hasta el…” Y luego, procedió a utilizar la herramienta para crear un gráfico que indicara la nueva fecha límite para los plazos: sábado 23 de julio Pero cuando estaba por colocar esa dichosa fecha, hubo un apagón y la computadora dejó de funcionar. — ¡Tío! ¿De nuevo se te olvidó mandar a alguien a pagar la luz? — Reclamó la tipa — No, esta vez no es mi culpa — Se defendió el aludido. — Son cosas que pasan… Él se dirigió hacia la puerta, a la par que instruyó a su sobrina que revisara por la ventana si hubo algún accidente cerca, puesto que estaban en un quinto piso. — En tanto, veré si pasó algo con los fusi- No terminó la frase, ya que al abrir la puerta, vio algo… no, a alguien que nunca esperó. Era su padre. Roberto Gómez Bolaños ¿Pero acaso no había muerto hacía ya más de siete años? Se veía relativamente saludable, vestido de forma casual, como si fuese un día cualquiera como para comprar una cervecita… Pero también se veía furioso. Si las miradas matasen, él lo podía mandar al infierno unas seis veces antes de que pudiera tocar el piso — ¿¡Qué le han hecho a mi creación!? — Exclamó como trueno aquella aparición Eso bastó para llamar la atención de su nieta también. Por alguna extraña razón, ella también podía verlo, claro como el día mismo. — ¿¡Abuelo!? ¿Realmente eres tú? — ¡¡Nada de “Abuelo”, pequeña rata de dos patas!! — Le refutó el famoso comediante… o más bien, su espíritu — ¡¿En serio crees que yo me podía quedar descansando eternamente mientras mancillas mi reputación con esa estafa llamada NFT?! — Te equivocas, abuelito querido — Ella intentó defenderse, hablando con una temblorina —Los NFT son el futuro y pueden abrir posibilidades infinitas. Pueden agarrar precios de mercado muy… — ¡¡Mercado mis polainas!! — Contestó ofendido el famoso creador del Chavo del 8 — ¡Solo es un montón de basura informática que es usada para estafar a gente inocente! ¡No valen ni un solo centavo realmente! ¡Todavía menos que la Vecindad del Chavo! Él apuntó su dedo a su nieta y soltó un: “¡¡Eres una deshonra para la familia!!” Ella se quedó en blanco. No podía refutar nada a la aparición de su abuelo… — Y en cuanto a ti, chamaco malcriado — Ahora Chespirito hablaba a su hijo — ¡¡Tu madre y yo no te criamos para que promocionaras fraudulentamente un sistema de cable usando la imagen de mi personaje estelar!! — Pero papá… Dish es un servicio muy… — Intentó defenderse el cincuentón. — ¡¡Muy obsoleto!! ¿¡A quién le interesa hoy en día televisión por satélite cuando el streaming se está devorando esa industria!? ¡Y ni siquiera transmiten El Chavo! ¡Estafador desgraciado! El aludido no pudo sino guardar silencio. En el fondo, era verdad lo que decía su padre… — Oh, pero aún falta lo peor… ¡¿Qué fue esta porquería de “Historias del Ocho”?! ¡¿Tan poco aprecio le tienen a mi creación insignia que mandaron a unos pobres becarios a hacer esa horrenda animación?! ¡¡Miserables pedazos de hez fecal!! ¡¡Por gente como ustedes los mexicanos tenemos esa pésima imagen de haraganes y chanchulleros!! Repentinamente, Valeria encontró algo de valor para contestarle a su abuelo — ¡Entiéndenos, abuelito! ¡No le estamos haciendo un mal a nadie! Solo ayudamos a que la gente recuerde al Chavo del Ocho y podamos brindar una sonrisa a quien lo necesite… Chespirito, en tanto, comenzó a remedar — Ni li istimis hicindi in mil i nidi… ¡¡Mis narices!! ¡Solo buscan dinero fácil a costa de mi reputación! ¡Se han convertido en cerdos codiciosos e insaciables! No son más que unos… ¡¡RATEROS!! En cuanto el súper-comediante soltó ese trisílabo, apareció Angelines Fernández también, sentada en la silla giratoria que hasta hacía poco, Valeria usaba para promocionar su proyecto de NFT. Sin levantarse del asiento, ella lanzó una mirada fulminante a ambos descendientes de Chespirito y repitió aquella palabra ¡¡RATEROS!! Al lado de la máquina dispensadora de agua, se apersonó el espíritu de Rubén Aguirre, el legendario “Maistro Longaniza”, con su mítico habano característico en la boca. Y cómo no, también soltó su ¡¡RATEROS!! Por último, pero no menos importante, Ramón Valdés también hizo acto de aparición, vestido como el personaje más querido de toda la franquicia. El inigualable Don Ramón. ¡¡RATEROS!! Él también decidió unirse a la tiradera hacia esos dos individuos que habían mancillado la imagen de Chespirito. ¡¡RATEROS!! Incluso Raúl “El Chato” Padilla se hizo tiempo para salir de su hermosa Tangamandapio… para aparecer cerca de la puerta por donde había entrado Chespirito, con todo y su bicicleta. ¡¡RATEROS!! Los cinco fantasmas gritaban sin piedad, cada uno a su tiempo. ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! La psiquis de los dos descendientes del “pequeño Shakespeare” no podía aguantar un segundo más… aquel trisílabo retumbaba en sus cabezas, y los sumergía en la más profunda locura. Tanto así que intentaban rogar para que se callaran. Todo era en vano. Los fantasmas no paraban de acusarlos de rateros. ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! ¡¡RATEROS!! Tanto así que ambos tomaron una drástica decisión… Lanzarse por la ventana hacia un veloz final a sus vidas. Saltar de un séptimo piso o seguir escuchando a aquellos famosos actores tratarlos de rateros… estaba claro cuál era la opción menos dolorosa. ====================================================== Y por eso, estimado público, como diría el Chavo... lo importante es tener una conciencia limpia siempre. ¿Ustedes la tienen? ==Nathan estuvo aquí== (2010 - ????)
El final no se compara a nada. XD Bueno, bueno, bueno, ¿qué te puedo decir? Es curioso que hayas escrito algo sobre esto, porque, por supuesto que me he imaginado a Roberto Gomez Bolaños retorciéndose desde su tumba después de ver todo lo que ha pasado y han hecho con su legado después de su muerte, pero, escribir algo sobre ello, o mejor dicho, expresarlo, de una manera muy interesante, porque en lugar de escribir sencillamente una critica, haz hecho una historia, y admiro esa capacidad. Muy entretenido. Saludos. :3
