Clase de Juicio #1

Reconstrucción de hechos

—Todo comenzó luego de los videos del Parque Jabberwock…

—Aika regresó a su habitación, y al llegar allí encontró una carta citándola al Rancho Usami…

—Al no poder encontrar su camino, terminó en el Aeropuerto, donde se encontró con Monomi…

—Monomi le indicó el camino hacia el Rancho y… Aika entonces llegó al granero en busca de S…

—Pero no era S quien la esperaba… sino que el asesino. Y entonces… entonces el asesino la apuñaló con el rastrillo…

—Aika murió instantáneamente, y el asesino estaba a punto de marcharse cuando…

—Cuando el walkie-talkie comenzó a hacer ruido, ¿verdad?

—Sí, la sangre de Aika había impregnado su sudadera, y al aparato que estaba dentro de ella…

—Entonces el asesino lo apagó, y luego decidió deshacerse del arma asesina…

—Para eso se la llevó del granero a su habitación…

—Pero entonces, ¿la malfunción de las gallinas fue una coincidencia?

—No; el asesino debió causarla para distraernos y hacernos pensar que allí se encontraba el arma asesina, así no revisaríamos las habitaciones…

—Y el asesino se marchó del granero, pero entonces…

—Cierto, entonces fue cuando Nagito llegó al granero…

—Pero al ver la escena, por alguna razón… decidió alterarla; decidió mover el cuerpo de Aika…

—Para hacer eso, Nagito apiló los fardos de paja y…

—Y luego colgó al cuerpo de Aika de la viga, para simular un suicidio…

—Pero eso no fue todo… Nagito luego debió de escribir la carta de suicidio, para aumentar las sospechas de que fuera un verdadero suicidio…

—Y entonces sí, después de eso…

>> Nagito trabó las puertas del granero

>> Alteró la programación de las gallinas

>> Nagito abadonó el granero

>> Nagito colgó a Aika de la viga

 

Rin Takuya

—Después de eso Nagito abandonó el granero. Ya constatamos que lo de la "traba" era una treta suya y que sólo nos engañó para hacernos creer que estaba cerrada —dije mirando a Komaeda severamente.

 

—No, él… él debió haber hecho algo más antes de abandonar el lugar…

¡Rin pierde una vida!

Contenido oculto

Vidas restantes:

Crow: 1
Evangeline: 0
Karen: 3
Daniela: 3
Ziro: 2
Rei: 3
Celia: 2
Jackson: 1
Alethea: 1
Joseph: 2
Ren: 2
Hugo: 2
Rin: 1
Adam: 3

Reconstrucción de hechos

—Todo comenzó luego de los videos del Parque Jabberwock…

—Aika regresó a su habitación, y al llegar allí encontró una carta citándola al Rancho Usami…

—Al no poder encontrar su camino, terminó en el Aeropuerto, donde se encontró con Monomi…

—Monomi le indicó el camino hacia el Rancho y… Aika entonces llegó al granero en busca de S…

—Pero no era S quien la esperaba… sino que el asesino. Y entonces… entonces el asesino la apuñaló con el rastrillo…

—Aika murió instantáneamente, y el asesino estaba a punto de marcharse cuando…

—Cuando el walkie-talkie comenzó a hacer ruido, ¿verdad?

—Sí, la sangre de Aika había impregnado su sudadera, y al aparato que estaba dentro de ella…

—Entonces el asesino lo apagó, y luego decidió deshacerse del arma asesina…

—Para eso se la llevó del granero a su habitación…

—Pero entonces, ¿la malfunción de las gallinas fue una coincidencia?

—No; el asesino debió causarla para distraernos y hacernos pensar que allí se encontraba el arma asesina, así no revisaríamos las habitaciones…

—Y el asesino se marchó del granero, pero entonces…

—Cierto, entonces fue cuando Nagito llegó al granero…

—Pero al ver la escena, por alguna razón… decidió alterarla; decidió mover el cuerpo de Aika…

—Para hacer eso, Nagito apiló los fardos de paja y…

—Y luego colgó al cuerpo de Aika de la viga, para simular un suicidio…

—Pero eso no fue todo… Nagito luego debió de escribir la carta de suicidio, para aumentar las sospechas de que fuera un verdadero suicidio…

—Y entonces sí, después de eso…

>> Nagito trabó las puertas del granero

>> Alteró la programación de las gallinas

>> Nagito abadonó el granero

>> Nagito colgó a Aika de la viga

 

Reconstrucción de hechos

—Todo comenzó luego de los videos del Parque Jabberwock…

—Aika regresó a su habitación, y al llegar allí encontró una carta citándola al Rancho Usami…

—Al no poder encontrar su camino, terminó en el Aeropuerto, donde se encontró con Monomi…

—Monomi le indicó el camino hacia el Rancho y… Aika entonces llegó al granero en busca de S…

—Pero no era S quien la esperaba… sino que el asesino. Y entonces… entonces el asesino la apuñaló con el rastrillo…

—Aika murió instantáneamente, y el asesino estaba a punto de marcharse cuando…

—Cuando el walkie-talkie comenzó a hacer ruido, ¿verdad?

—Sí, la sangre de Aika había impregnado su sudadera, y al aparato que estaba dentro de ella…

—Entonces el asesino lo apagó, y luego decidió deshacerse del arma asesina…

—Para eso se la llevó del granero a su habitación…

—Pero entonces, ¿la malfunción de las gallinas fue una coincidencia?

—No; el asesino debió causarla para distraernos y hacernos pensar que allí se encontraba el arma asesina, así no revisaríamos las habitaciones…

—Y el asesino se marchó del granero, pero entonces…

—Cierto, entonces fue cuando Nagito llegó al granero…

—Pero al ver la escena, por alguna razón… decidió alterarla; decidió mover el cuerpo de Aika…

—Para hacer eso, Nagito apiló los fardos de paja y…

—Y luego colgó al cuerpo de Aika de la viga, para simular un suicidio…

—Pero eso no fue todo… Nagito luego debió de escribir la carta de suicidio, para aumentar las sospechas de que fuera un verdadero suicidio…

—Y entonces sí, después de eso… Nagito trabó las puertas del granero, utilizando aquel líquido azul…

—Colocó aquel líquido azul en las puertas del granero, de modo que cuando las cerró, las puertas quedaron selladas…

—Y al dejar aquella madera partida allí, entonces parecería que había sido cerrada desde adentro…

—Y de esa forma dejó el granero, dejando un crimen de cuarto cerrado casi perfecto…

¡Reconstrucción completa!

—Vaya, vaya… ¡parece que ya han ordenado todos sus hechos! —exclamó Monokuma, dando un pequeño salto de entusiasmo—. Esto significa que… ¡es hora de la votación! ¿Ya tienen en mente a su sospechoso? Aunque tengo la impresión de que se a quién votarán todos… ¡bueno, a ello! ¡Hora de votar al asesino!

 

La votación no tomó mucho tiempo. Todos los estudiantes, agotados del extenuante juicio, quisieron terminarlo lo antes posible. Rei Amantinae se mantuvo en silencio, mirando al suelo, como si todo espíritu hubiese abandonado su cuerpo. Nagito Komaeda también se mantenía en silencio, pero tampoco sonreía como lo había hecho antes; parecía más serio que nunca. Pero entonces…

Monokuma dio un salto bien alto en el aire. Hubo un pequeño sonido y un montón de papel picado cayó del cielo, como si fuese una especie de celebración. Y a lo mejor lo era… ¿eso significaba que la votación había salido bien?

—¡Felicitaciones, súper estudiantes! —exclamó Monokuma; parecía radiante de felicidad por alguna razón—. En efecto, han logrado dar con el asesino con esta votación… ¡Rei Amantinae, el Súper Informático de Preparatoria! Lo que significa que… ¡es momento de la ejecución! Upupupupu…

—Tal desesperación… es una tristeza de ver… —musitó Nagito.

—¡C… cállate, Nagito! ¡Todo esto es tu culpa! —exclamó Rei, súbitamente recuperando su voz. Diminutas lágrimas resbalaban por su rostro—. Yo nunca quise… si tan sólo no te hubiese visto… ¡yo sólo quería protegerlos! ¡Sólo quería proteger a Aika, y a todos aquí! ¡Sólo quería protegerlos de ti! Porque… lo que realmente vi fue…

Contenido oculto: Recuerdo de Rei

—¿Nagito? —preguntó Rei, confundido—. ¿Qué estás haciendo por aquí?

Rei había abandonado su habitación. Lo que había visto en los videos simplemente no lo dejaba dormir y… pensó que quizás caminar un poco le ayudaría a despejar su mente. Pero en cuanto abandonó su habitación, lo vio… aquella silueta que dejaba la puerta de una de las habitaciones de las chicas. Y al aproximarse notó que se trataba de aquel muchacho de cabellos blancos…

—Rei, buenas noches —le sonrió Nagito—. Simplemente pasaba a dejarle esta nota a Aika para que nos reunamos en el Rancho…

—A-ah, ya veo… —musitó el súper informático—. Si no molesta que pregunte… ¿para qué van a reunirse?

—Para asesinarla, por supuesto —replicó Nagito, sin borrar la sonrisa de su rostro.

—E… ¡¿eh?! —exclamó Rei, atónito—. Ey, Nagito, eso no es gracioso… con todo lo que está pasando, esa es una broma de muy mal gusto.

—No estoy bromeando —dijo el otro joven; repentinamente, su rostro se había tornado completamente serio—. Rei, suceda lo que suceda… estos asesinatos van a comenzar. Y si no es a Aika esta noche, mataré a alguien más en alguna otra ocasión. Pero tenlo por seguro… me encargaré de que los asesinatos comiencen en esta isla.

Y con esas palabras, Nagito dio media vuelta y se marchó, dejando pronto atrás al estupefacto Rei.

—N… no, ey… espera… ¡espera!

—Yo… yo me apresuré en llegar al Rancho Usami… mi intención era matar a Nagito, intentar que él matara a Aika o a alguien más —musitó Rei con tristeza—. Pero, pero… ¡estaba tan oscuro! No había nada de luz y… cuando aquella figura entró, creí que era Nagito y… y…

—Y resultó ser Aika —completó Nagito; aunque serio, su rostro no parecía mostrar ni la más mínima empatía ante el otro chico—. Pero… ¿no te parece cruel, mentir hasta el final, Rei? Porque se sincero… una parte de ti estaba esperando que esto resultara de otra forma, ¿verdad? Podrías haber advertido a Aika o alertado a los demás de mi amenaza, pero… preferiste actuar por tu cuenta e intentar matarme, lo que provocaría una clase de juicio sí o sí… una parte de ti deseaba poder salirte con la tuya y poder escapar de esta isla, ¿no es cierto?

—Yo… y-yo… ¡argh! —lloró Rei; intentó contenerse, pero fue en vano, las lágrimas escaparon inevitablemente—. Yo sólo quería… perdón, perdón a todos… perdón, Aika…

>> Aunque… creo que podré pedirle perdón en persona muy pronto, ¿no? Heh… su-supongo que este es el adiós, compañeros… yo, lo siento, lo siento tanto… por favor, cuidense y… tengan mucho cuidado con este lunático… tengan cuidado, y asegúrense de que algo como esto no suceda nunca más… que nunca tengan que volver a entrar en esta sala…

—¡A-bu-rri-do! —intervino Monokuma de repente—. ¡Aburrido! ¡Ya basta! Ya es momento… ¡es hora de la ejecución!

 

Monokuma volvió a su trono de un salto. Cuando se sentó allí, una especie de gran botón rojo apareció frente a él. Tomando un pequeño mazo, el oso lo oprimió dramáticamente y… y entonces sucedió…

¡Ejecución de Rei: Bomber Time!

Desde la pared, súbitamente, un largo gancho salió y agarró a Rei. Lo atrapó del cuello y lo arrastró en la dirección de aquella pared, que se abrió para revelar que existía otra habitación detrás de aquellas paredes, hacia la cual llevó al chico capturado forzosamente, arrastrándolo por el suelo mientras el joven forcejeaba, intentando soltarse. Todos siguieron en aquella dirección y vieron una sala amplia y muy iluminada, rodeada por una gran cerca metálica muy alta.

Una puerta se abrió y Rei fue arrastrado dentro del cerco; la puerta se cerró inmediatamente, dejando a todos excepto a él del lado de afuera. Pero no estaba solo… Monokuma se encontraba dentro con él. Montado sobre lo que parecía un enorme tanque de guerra. ¿De dónde había sacado aquel tanque? Parecía ser otro más de los misterios de la isla…

El gancho soltó súbitamente a Rei, y entonces el muchacho quedó libre, pero aún seguía atrapado dentro del cerco. Monokuma se asomó por la puerta del tanque y, sonriendo maliciosamente, mostró una enorme bomba negra, la cual cargaba entre sus manos. Rei, aterrado, comenzó a correr en la dirección opuesta… y Monokuma lanzó la bomba.

A lo largo de todo el cerco había algunas paredes y algunos escombros altos, entre los cuales el muchacho podía esconderse. Los estudiantes desde afuera, sin embargo, podían ver todos sus movimientos, aunque costaba un poco seguirlo porque Rei corría a toda velocidad, escondiéndose en diferentes lugares, intentando evitar la amenaza de Monokuma, desesperado. La bomba explotó entre dos paredes no muy lejos de él, y Monokuma lanzó una segunda. La segunda explotó un poco más cerca, y Monokuma comenzó a lanzar más y más bombas…

Finalmente, quedó una sola pared, detrás de la cual Rei se encontraba refugiado. Cerró sus ojos con fuerza y apretó sus puños, intentando ser fuerte, pero… cuando volvió a abrirlos, vio que Monokuma había lanzado otra bomba, y esta había caído justo en frente de él…

Se escuchó la explosión más fuerte de todas, y el cerco se llenó repentinamente de humo por la explosión, bloqueando la vista de todos brevemente. Para cuando pudieron volver a ver… Rei Amantinae ya no se encontraba allí dentro. O bueno, en realidad sí… partes de él se encontraban allí dentro. Pudieron ver parte de sus piernas y un brazo junto a la pared destruida, parte de su torso chamuscado no muy lejos, dedos y lo que parecían ser parte de sus tripas esparcidas por el suelo, el cual estaba lleno de sangre y polvo… y su rostro, chamuscado y casi irreconocible, había terminado junto a la entrada del cerco, donde todos los estudiantes podían verlo…

Al mismo tiempo, se oyó un sonido mecánico a sus espaldas. La puerta del lugar se había abierto, y la escalera habían descendido. Ahora podrían, finalmente, dejar aquella condenada sala…

Contenido oculto

Fin de la clase de juicio.

¡Habéis sobrevivido a la clase de juicio! Todos viven excepto el asesino, Rei Amantinae, el cual fue ejecutado por Monokuma.

Como recompensa por sobrevivir, los estudiantes recibirán MonoMonedas como premio; las mismas se otorgarán en razón de cuánto y qué tan bien hayan participado en el juicio. Se les añadirán a sus fichas a la brevedad.

¡Sigamos con el rol! Pueden continuar roleando normalmente ahora, posteando sus reacciones y eso, o aquí o directo en el Monte Monokuma (que será a donde saldrán si salen por la puerta de la sala), como prefieran :3

 

Jackson Mervin

Hace ya años, al comienzo de mi adolescencia, la curiosidad hacia la influencia que llevaba a ciertos escritores a escribir gore de una forma tan precisa me hizo encontrar en internet contenido que habría preferido no haber visto nunca. En resumen, pagué con una semana de insomnio la experiencia, y obtuve un respeto por internet que me llevaría a ser mucho más precavido en futuras investigaciones del área.

Sin embargo, aunque lo que había visto en su momento era más explícito que lo que acababa de presenciar, fue incluso peor para mi organismo. Aquel chico había estado con nosotros solo minutos antes, derrotado y sin esperanzas, pero vivo. Y ver a alguien a quien había conocido siendo el material de diversión de aquel oso de peluche, y luego ser testigo del momento justo de su ejecución, fue demasiado para mi. Por lo menos puedo decir que pude controlar mis arcadas hasta encontrarme lejos de los demás estudiantes, pero al final no tuve mas remedio que vomitar en la esquina de la habitación. Mi garganta ardía y sentía que me faltaba aire en los pulmones, pero en ese momento no era capaz de sentir más que un profundo disgusto.

Ni siquiera un ápice de vergüenza por mi poco control tenía lugar en mi mente, todo era eclipsado por la pena que sentía hacia la muerte de Rei Amanantinae y la confesión de su motivo para matar a Aika. En todo este tiempo no me había dado cuenta del verdadero peligro de la isla. El miedo y paranoia de la noche anterior me sabía a despreocupación comparado a la realidad que veía en este momento. Y todo esto lo había logrado Monokuma en su idea de hacer pública la ejecución de Rei, como si de una corrida de toros de tratase.

Me alejé de la esquina donde me encontraba, y solo con gran autocontrol logré que dejaran de temblarme las manos. Evité contacto visual con los restos de Rei que habían caído cerca de nuestro lugar de observación, mientras mi cerebro se ocupada en bloquear las peores escenas de la muerte de Rei de mis recuerdos para evitar volverme loco.

Para cuando me reintegré al grupo, una sola parte de la confesión de Rei quedaba en mi cabeza, y las palabras se repitieron una y otra vez, amargandome la existencia y neutralizando el miedo, convirtiéndolo en ira.

—¡Tú!—grité, mirando a Nagito Komaeda. Y aunque yo era en escencia pacífico, lo agarré desde su suéter y lo empujé hacia la pared mas cercana.—¡¿Cual es tú maldito problema?!

Nagito, quien había creado la situación que llevo a Rei a cometer su asesinato. Su sola presencia en esa sala comenzaba a darme náuseas.

>>¡¿Que fue todo eso de querer iniciar los asesinatos?! ¡Si alguien merecía acabar en aquel lugar estallando en mil pedazos, eras tú!

 

Evangeline Jones

Jamás hubiese deseado que nadie, ni incluso la persona más horrible que pudieses encontrar, presenciase con sus propios ojos la masacre de la que yo misma acababa de ser partícipe. El olor a pólvora mezclado con el de la sangre se extendía en el aire, y el humo provocado por las explosiones ya no limitaba nuestra visión. Con un simple vistazo a través del cerco, podías ver con una horrible nitidez lo que quedaba del chico que acababa de ser masacrado.

En mis oídos aún resonaban sus gritos agonizantes, rogando por su vida segundos antes de salir despedido por los aires.

Aparté la mirada, llevando una mano temblorosa a mi rostro. Reprimiendo las arcadas que el propio ambiente cargado y las vísceras esparcidas por el suelo me estaban ocasionando. Sentía que de un momento a otro caería al suelo, siendo mis piernas incapaces de seguir sosteniendo mi cuerpo. Por más fuerte que quisiese mantenerme, por más estabilidad que creyese tener, mi cuerpo no podía dejar de temblar con fuerza.

Todo el alivio y valentía que había adquirido a lo largo del juicio se esfumaron de inmediato, y fui consciente de mi verdadera realidad. Que aquel término tan lejano como la muerte lo era para un adolescente estaba tan cerca de mí, que nada me diferenciaba del alumno que acababa de morir ahora mismo. En ese momento, sentí en mi propia piel lo que era el verdadero terror.

Los ojos se me humedecieron, y tuve ganas de esconderme tras mis manos y descargar todas aquellas horribles emociones a través del llanto. Pero nadie escucharía mis lamentos. Nadie me sacaría de aquí. Al menos, Rei me había abierto los ojos en ese sentido.

Lentamente, las voces del resto de estudiantes llegaron hasta mis oídos. Me giré, casi sin fuerzas, para ver cómo el escritor descargaba su dolor a través de la ira sobre Komaeda. Apreté los puños, impotente, porque yo también me sentía así y comprendía su dolor. Porque yo también tenía ganas de cruzarle la cara de una bofetada, pero era consciente de que aquello no solucionaria nada en absoluto.

Y casi sin darme cuenta de ello, corrí hacia el muchacho y coloqué mis manos sobre las suyas, tirando en la dirección opuesta en un intento por que liberase de su agarre a Nagito, antes de que aquel enfrentamiento llegase a mayores.

—Déjalo, en serio. No vale la pena —alcé la voz, dirigiéndole la mirada con cierta seriedad, a pesar de encontrarme tan dolida como él. Podía notar mis orbes enjugados por las lágrimas que había tratado de contener, en vano. En el momento en el que conseguí que ambos se separasen me coloqué en medio, con mi atención puesta en Nagito esta vez. No merecía ni que le mirase a la cara—. Que no se te pase por la cabeza convivir con nosotros. Por tu culpa han muertos dos personas, por lo que está de más decir que nadie te quitará el ojo de encima.

>>No es seguro tenerte rondando junto a nosotros.

Contenido oculto

Yo voto porque se le ate como en el videojuego (?)

 

—¡¿Que fue todo eso de querer iniciar los asesinatos?! ¡Si alguien merecía acabar en aquel lugar estallando en mil pedazos, eras tú!

—Por supuesto que alguien como yo merecería acabar así en lugar de alguien talentoso como Rei —asintió Komaeda, sin inmutarse por las duras palabras de Jack—. Ya lo dije en el juicio; sé que soy un ser insignificante, y con gusto moriré si es necesario… todo sea para crear la más grande y más fuerte esperanza… ¡y sé que la muerte de Rei los volverá a todos más fuertes! ¡Esto es sólo un peldaño más para que ustedes se conviertan en los símbolos de la esperanza que deben ser!

Pero en ese instante, Evangeline intervino, separando a ambos muchachos. La chica logró separarlos, pero en ningún momento miró a la cara de Nagito, hablando hacia él sin atreverse a mirarlo. A mirar aquellos ojos donde la esperanza y la desesperación habían sido crudamente mezclados, y ahora era imposible determinar qué era él exactamente.

—Bueno, ya he dicho; con gusto moriré si es lo que se necesita —aceptó Nagito, cruzándose de brazos—. ¡Incluso ayudaré a mi asesino a crear una escena de crimen perfecta! Sólo tienen que pedírmelo, claro…

>> Pero creo que no tiene caso hablar de eso ahora mismo. Será mejor que me retire a mi habitación. Ah, aviso por si alguien está planeando asesinarme, allí es donde estaré. Incluso dejaré la puerta sin llave.

—¡Bwahahahaha! —la estridente y fría risa de Monokuma invadió el lugar; el oso había regresado, colocándose entre los estudiantes sin que ellos lo advirtieran—. Oh vaya, ¡eso fue fantástico! ¿Y bien? ¿Disfrutaron del show?

>> Bueno, ahora que ha concluido la primer clase de juicio, ya tienen una idea mejor de lo que es esta isla, ¿verdad? Ah, ha pasado mucho tiempo, no falta mucho para el amanecer… ¡será mejor que regresen a sus habitaciones! Si es que pueden dormir, claro, upupupupu… ¡los esperaré a todos por la mañana en el Restaurante del Hotel Mirai! Tengo una pequeña sorpresa para todos ustedes mañana… upupupupu…

Con aquellas ominosas palabras, Monokuma desapareció del lugar. Parecía ser que había llegado el momento de abandonar el lugar. Sin mas, el joven de cabellos blancos pasó de largo de Evangeline y Jackson para retirarse por la puerta de la sala. Quizás lo mejor era seguir su ejemplo y dejar de una vez aquella escena tan macabra… con la esperanza de nunca más volver a entrar.

Contenido oculto

¡Comienzo de Vida Diaria!

Finalizado el juicio, comenzará ahora la Vida Diaria… hasta que haya un nuevo asesinato, claro. En cualquier caso, por ahora pueden rolear sus reacciones y sus acciones hasta que se haga el anuncio de día de Monokuma, en cuyo momento deberán ir al restaurante del Hotel Mirai para recibir un pequeño "regalo" de Monokuma ;) Suerte a todos.

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