Ying Fa Arquee la ceja al escuchar a ese sujeto, detallandolo bien ai era atractivo , pero su actitud me cayo pesada, Sahara por increíble que fue no le gruño ni nada, mas bien se le acerco y busco cariño de el rozando su mano con su hocico,. — Sáhara — dije sorprendida de ver a mi Lobezno, debio haber sentido algo en el para que hiciese eso -
Sentí sus hocico entre mis dedos, siempre me han gustado lso animales, así que correspondí acariciado su cabeza un poco. - Que linda eres - Dije sonriendo mientras la acariciaba.
Ying Fa —es macho — corregi mientras me levantaba y me sacusia el traje— eres nuevo verdad? — cueatione detallando a ese hombre. A leguas se notaba que era mexicano, me habia dado el gusto de conocer a varios de ellos, pero nunca me cayeron bien.
Si, soy nuevo - Respondi mientras seguia jugando con la criaturita - Josef de Mendoza "El diablo" La miré, era una chica muy linda y de rasgos asiaticos, sus ojso eran lindos, y su cuerpo tambien Y como te llamas? - Le pregunté -
Ying Fa — Kaylin Wei Long, pero me dicen Ying Fa significa "flor de cerezo" en chino — dije acercandome a el — el es Sahara mi lobezno — al nombrarlo Sahara ladro en forma de saludo mientras movia su cola, ¿feliz?, no lo sabia con exactitud pero de algo si estaba segura, Sahara no se le acerca a nadie buscando cariño si no le agrada, lo cual era muy raro que pasara.
La alerta tan fuerte hizo despertarme y que callera al suelo, rápidamente me vestí como siempre colocándome mi túnica mi pantalón negro, reajuste mi brazo que nada faltará y mis armas, me puse mis borsegos y corrí tan rápido como pude en busca de Kaylin a su habitación, pero ella allí no estaba, a si que me dirigí a la base de operaciones. —Malditos alienígenas hasta en mis pesadillas estuvieron—dije en voz alta aún estaba medio dormido. Mi actitud cambió a algo serio, pero amigable. Al llegar a la sala de comunicaciones allí estaba una persona y me le aserque. —Hola, ¿que tal? mi nombre es Max, sabes si han partido ya o aún esperan ¿más personas?, es que me quedé profundamente dormido—dije algo apenado. Contenido oculto VOY A LA MISION @Nyxbel . @Rojo FireRed
Ayano En la soledad de la sala de mando, estuvo escuchando música en un pequeño reproductor esperando a que llegara más gente y se empezara el debriefing. Pero antes, llegó uno de los comandos, que al parecer notó que era la única persona de frente. Y escuchó todo lo que dijo —Hola, ¿que tal? mi nombre es Max, sabes si han partido ya o aún esperan ¿más personas?, es que me quedé profundamente dormido —Ayano, y aparte de ti, somos los únicos
A lo lejos pille que había por fin llegado, lo vi hablando con una chica por lo cual me dio un poco de molestia, Sahara también lo vio y por eso corrió a el brincandole encima derribandolo y lamiendole la cara, me acerque con el ceño fruncido: — Llegas tarde — le dije obviamente molesta.
Aquella chica estaba escuchando música pero me escucho bastante bien . —Que susto pensé que otra vez no iría, me sentiría mal si esa persona fuera sin mi, mucho gusto Ayano un placer conocerte—dije educadamente, cuando de repente Sahara me saltó tumbando me al suelo. —Eeey buen chico, ¿quien es el más fuerte aquí? tu lo eres —y acaricié su cabeza mientras jugaba con él, allí frente mío estaba Kaylin. —Princesa qué alegría de verte, me asusté pensando que habías ido a esa misión sola, si llegué tarde me quedé dormido es que no dormí nada desde que hicimos lo del gimnacio—respondi alegre al verla, me levanté y quise abrazarla, pero no sabría como lo tomaría si nos ven aquí. —Al parecer llegamos primero, ¿vamos a esperar allí?—pregunté señalando unos hacientos, aliviado me tranquilicé, y miré que no me faltará nada, al parecer todo estaba en orden, exepto Kaylin que no se por que estaba o la sentía algo molesta cuando me habló. Contenido oculto @Rojo FireRed @Sweet Guardian Angel
- Que interesante son todos aquí - Me acerque riendo a Kaylin y aquel chico. Lo miré de pies a cabeza parecia alguien profesional. - Un gusto, soy Josef, pero me llaman "El diablo" - Tendí mi mano paras saludarle Contenido oculto @Raiven
Mientras hablaba con Kaylin, estaba algo distrido mirándola, derrepente un hombre se acercó —¿El diablo?—Pregunte curioso, mientras lo examinaba. —No se a que viene ese apodo, pero mucho gusto soy Max, solo "Max" ¿que puesto acupas? yo soy comando. ¡Oh! Ella es Ying Fa—dije mientras respondí tendiendo la mano para saludar, amigablemente. Contenido oculto @Fersaw @Sweet Guardian Angel
- Tambien soy un comando - Dije sonriendo - Y no te preocupes, ella y yo ya nos conociamos. Miré a Ying sonriendo, mientras saludaba a max. - Es una chica muy hermosa, ¿no cres? - Dije mirando a Max a los ojos.
—Que bien tendré compañero—luego cuando me dijo que conocía miré curioso a Kayling luego, me puse serio al escuchar de su boca que ella era hermosa, mi rostro se transformó me sentí algo celoso, mantuve mi mirada en sus ojos. —Para alguien como tú es hermosa, para mi es preciosa pero.... eso es lo menos interesante que tiene—respondí sinceramente. Contenido oculto @Fersaw
Lo miré y arquie la ceja sonriendo, luego la miré a ella. - Tienes razon, estoy seguro que ella tiene mayores virtudes que la belleza exterior, me gustaría averiguarlas en algún momento. Puse mis manos sobre los hombros de ella. - Tu que dices Ying Fa? - Contenido oculto @Sweet Guardian Angel
Ying Fa Me erice al sentir las mano s de Josef en mis hombros, voltee la mirada clavando mis rojizos ojos en los de sintiendo como un sonrojo surcaba mis mejilas . —si, claro, cuando quieras — dije sonrojada y nerviosa, . ¿que me pasaba? ¿porque de la nada tartamudeo?, mientras lo miraba Sahara por sus celos nos separa sentandose entre nosotros, nos veia inocente jadeando tal vez cansado, mientras buscaba cariño de Josef.
Observé a Kaylin, me moleste no por su respuesta sino en la forma que contestó, nerviosa, sonrojada, y tartamudeando me puse muy celoso, tanto que clavé la mirada un segundo a Josef, pero más mire a Kaylin, pues desde que se acercó Josef Kaylin me ignoró mi existencia, o al menos así lo sentí.
Me puse nerviosa al notar la molestia de Max, pero carraspee un poco y retome la compostura: — bueno, me voy a preparar para irnos, avísenme cuando sea momento de ir al Skyranger — dije algo cortante, silbe llamando a Sahara para irnos y luego me aleje de esa incomoda situación. pero de algo si estaba segura — las cosas se pondrán picantes ahora — susurre nerviosa viendo a de reojo a Josef y a Max.
Al ver a Kaylin alejarse así sin más quedando con Josef, en plena paz y tranquilidad, saqué de mi bolsillo una herramienta algo grande avientandola hacia arriba luego la atrapé mire a Josef y metí mi mano derecha bajo mi túnica, para ajustar el brazo, sentía que se había aflojado. —Nos vemos Diablo—Dije frío y serio mientras me dirigía a donde estaba Kaylin, —Esteré allí en el rincón sentado, si necesitas algo ya sabés princesa—dije tocando su hombro cuando pasé cerca de ella, luego llegando al asiento me senté relajadamente, hice sonar mi cuello, corrí la correa que tenía cruzada, para llevar adelante y arma y examinar que todo esté en perfectas condiciones, no me gustaría tener problema alguno en una situación urgente, procedí a masticar un chicle, eso calmaba mis nervios y preocupaciones. *Tendremos que tener cuidado, por ahora somos 3 comandos, y una chica más que no recuerdo a que clase pertenece, y faltan más, un médico estaría bien en el grupo, hay que examinar bien y no bajar la guardia, recuerdo que el general dijo que tienen una especie de habilidad*(Pensamiento)
Mire lo que pasaba, era interesante de alguns manera esa chica me parecia muy especial. Tome asiento pada esperar, trate de distraerme jugando con mi teléfono, pero no podia dejar de verla entre ratos
Decidí jugar con Sahara un poco, saque una pequeña pelotita de tela para jugar atrapadas — haber bonito, sentado — este me ladro moviendo la cola emocionado, me aleje a 2 metros de el, lance la pelota y el salto muy ágil atrapándola para luego traérmela — buen chico...ahora arriba — ordene y este se sentó alzando sus dos patas delanteras, me acerque y puso un pequeño huesito de juguete en su nariz — quieto, quieto — le dije mientras lo veía comicamente hacer equilibrio — ahora — lo lanzo un poco con la nariz y luego lo atrapo con su hocico — buen chico — sonreí acariciando sus ojeras y este movía la cola contento mientras mordía su juguete, en seria este lobo era el amor de mi vida.