Mini-rol Mikawa Matsuri | UA (Genshin Impact)

Tema en 'Salas de rol' iniciado por Gigi Blanche, 13 Enero 2023.

  1.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    6,952
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Bannercito.jpg

    El bosque Chinju, ubicado al pie del Monte Yougou, es uno de los lugares más enigmáticos de la isla Narukami: por alguna razón, en su interior transcurre una noche eterna; nunca sale ni se pone el sol. Algunos creen que se debe a una maldición antigua, otros, al poder espiritual de los árboles. Acorde a las leyendas, este páramo abandonado antaño fue el hogar de cientos de yokai, y acorde a los rumores, aún a día de hoy ocurren fenómenos extraños allí dentro. Salpicaduras repentinas en el agua, graznidos de cuervos fantasma, risas entre el susurro del viento y pisadas traviesas. Pocos se atreven ya a cruzar el bosque Chinju, al menos no sin compañía.

    Por ello, fue el lugar elegido especialmente por la Comisión Yashiro para llevar a cabo uno de sus eventos culturales. Los detalles se desconocen pero la gente habla rápido, y aparentemente se tratará de una prueba de valor. Extraño, ¿no? El clan Kamisato suele organizar festivales.

    Quizá su líder tenga uno o dos trucos bajo la manga.


    Etihw ehe
     
    • Fangirl Fangirl x 3
  2.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    6,952
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Haru

    Olfateé el aire, separando ligeramente la espalda del tronco para echar un vistazo entre el follaje. Incluso si la brisa soplaba desde el mar, al bosque nunca lo alcanzaba su aroma salado; era extraño. Repasé los alrededores, aunque aún todo se mantuviera tranquilo y no hubiera indicios de actividad. Silencio, quietud y el característico dulzor de las criptomerias, todo sobre el manto azulado de la noche eterna.

    El Señor me conocía bien.

    Acabé sentándome sobre la rama en la cual me había ubicado, de altura considerable, para relajar la espalda y cruzar los brazos bajo el pecho. Pasados unos minutos, percibí una ligera alteración que no consiguió alarmarme; semejante sigilo sólo podía pertenecer a otro de los Ocelos o, en su defecto, algún viejo amigo del bosque. En definitiva, ninguna amenaza.

    —¿Tienes algo que reportar? —indagué, sin abrir los ojos.

    —"¿O sólo vienes a molestar?" —La voz femenina, casi aniñada, completó mis pensamientos y deslicé la mirada hacia la izquierda, encontrando a Nora sobre la rama contigua; estaba sentada, balanceando sus piernas—. El bosque permanece tranquilo como siempre, no tienes por qué vivir tan alerta.

    —Es mi trabajo, y tu hogar. Además, es el puente que conecta hacia la Comisión Yashiro.

    —"El Señor hace bien dejándome a cargo", ¿cierto?

    Suspiré ligeramente, volviendo a cerrar los ojos, y oí la risilla de Nora. Sentí su presencia un buen rato más, hasta que eventualmente desapareció, también, sin hacer ninguna clase de sonido. Ya estaba habituado a aquella dinámica; los yōkai se aburrían e interferían en mis labores. Al principio sólo me habían crispado los nervios, pero viendo que no planeaban dejar de hacerlo conseguimos una suerte de... pacto, quizá. Nora había sido la primera.

    —Ah. —Su voz reapareció de improviso, logrando que me sobresaltara y abriera los ojos de golpe; lucía encantada con su pequeña hazaña—. Me pareció oír que tu hermana estaba buscándote. Quizás hicieras bien bajándote de los árboles por una vez.

    Volví a suspirar, Nora se deslizó en perfecto silencio hacia abajo y, pese a no hacerle caso, sí mantuve la oreja parada. Cuando Aya apareciera, podría oírla y descender a su encuentro.
     
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Adorable Adorable x 1
  3.  
    Etihw

    Etihw ghost Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,606
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Ayako

    Avancé a paso lento por el bosque, escuchando los suaves murmullos de las hojas de los árboles mientras el viento las mecía. Cada vez que venía a este lugar podía sentir cómo cualquier peso en mi pecho se aligeraba, y mi respiración se acompasaba al ritmo de mi corazón.

    El aire fresco rozaba mis mejillas mientras murmuraba el nombre de mi hermano, sabiendo que podría escucharme a la perfección si estaba por los alrededores.

    —¿Haru? ¿Haruuuu? —seguí murmurando sin dejar de caminar, observando tanto arbustos como ramas de los árboles, acercándome de tanto en tanto con cuidado, como si estuviésemos jugando al escondite tal cual niños—. Pensándolo, ahora que es tan bueno escondiéndose... ¡yo acabaría perdiendo siempre!

    Con un mohín me crucé de brazos, arrugando el ceño con mi propio pensamiento. Admitía ser la más infantil de los dos, ¡pero los juegos hay que tomarlos igual de seriamente que cualquier otra cosa! Solo que no estábamos jugando. O al menos no hasta ese momento.

    —¡Pues yo también me voy a esconder!

    Y como si escuchase en mi mente una cuenta atrás me puse a corretear hasta encontrar un lugar en medio de unos arbustos, agachada, sin importarme mucho si manchaba la ropa.


    Yo los juegos me los tomaba muy en serio

    Aunque estuviese jugando yo sola.

    A lo mejor Haru en verdad no estaba cerca o no me escuchaba, o a lo mejor me quería gastar una broma. O, quizá, solo estaba usándolo como excusa para rodar por el suelo y cerrar los ojos mientras olía el relajante olor a naturaleza que me rodeaba.

     
    • Adorable Adorable x 3
    • Fangirl Fangirl x 1
  4.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    6,952
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Haru

    Tal y como había estimado, varios minutos después el murmullo del viento trajo consigo una voz muy familiar. Se fue acercando de a poco, hasta que pude comprender lo que decía, y me removí lo suficiente para ver el suelo desde lo alto del árbol. Ahí estaba Aya, husmeando entre los arbustos y estatuas, buscándome. A veces, cuando lo pensaba con cierto detenimiento, me sentía como uno de los tantos espíritus del bosque. Había algo tan reconfortante como solitario en el simple hecho de habitar allí, en silencio, mientras la vida de los demás transcurría; lo suficientemente cerca para apreciarlo, y lo suficientemente lejos para no formar parte.

    No me ocurría a menudo, pero haber conocido a Nora y a los demás lo volvía presente.

    Oí sus pensamientos en voz alta, la tontería me dibujó una imperceptible sonrisa en el rostro y la seguí con la mirada, mientras correteaba y se escondía entre unos arbustos. Aguardé a que hubiera acabado su juego, descendí del árbol sin hacer ruido y, con el mismo sigilo, fui hasta su posición. Apoyé la mano en el tronco lindante, me incliné y la vi, acuclillada y ensuciando su kimono.

    —Te encontré —murmuré, apenas divertido, y mi mirada se suavizó al dar con la suya—. Perdiste.

    Ni siquiera había tenido chance para empezar, pero esos eran detalles.
     
    • Adorable Adorable x 3
  5.  
    Etihw

    Etihw ghost Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,606
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Ayako

    Me había tapado los ojos con ambas manos, con una pequeña sonrisa dibujada en mi rostro, como si hacer aquello me volviese completamente invisible. Si yo no veía nada, nadie me veía. ¿La lógica? ¡Hay que tener imaginación!

    Era consciente de lo tonta que podría verme a ojos de otra persona, escondida en medio de unos simples arbustos de un ninja que conocía a la perfección el lugar, con buenos reflejos y un gran oído. Pero, lo dicho, ¡imaginación! ¡Así es como uno se divierte!

    Y nadie me verá. Nadie me ve. Haru no me va a ver.

    Pensando eso apreté un poco más las palmas de mis manos contra mi rostro, pero pronto las alejé alterada apenas escuché su voz a mi lado. Caí al suelo con gran sorpresa plasmada en mi rostro, y mi expresión cambió a la de confusión.

    —Vale, ¿desde cuándo estás ahí? —Arrugué el ceño tan pronto escuché que perdí, hinchando mis mejillas—. ¿Me has escuchado desde el principio?

    Aparté mi mirada, fingiendo molestia. Solo con él podía permitirme ser tan infantil e incoherente como quisiera, y no solo eso. Estar en el bosque en su compañía era lo más cercano al significado de la palabra "paz". Me sentía arropada en una manta cubierta de emociones cálidas que me abrazaban.

    Volví a mirarlo, esta vez con una gran sonrisa en mi rostro. Una sonrisa que solo él me sacaba.

    —Sé que siempre me vas a encontrar, pase lo que pase, esté donde esté.
     
    • Adorable Adorable x 3
  6.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    6,952
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Haru

    Por la forma en que estaba sumamente inmóvil y hasta tapándose el rostro (¿eso era prudente?), supe que hablarle de repente la espantaría. Supongo que eso me volvía un poco cruel, nada nuevo bajo el sol. De la sorpresa acabó yéndose al suelo e hice un esfuerzo grande por no reír, recibiendo su gesto enfadado o confundido, ya no sabía yo.

    —¿De veras quieres que responda a eso? —repliqué, con la diversión aún latente en mi rostro.

    Aya desvió la mirada, enfadada, pero supe que era puro teatro y por ello, aún así, me incliné y le extendí la mano, pretendiendo ayudarla a incorporarse. Encontré sus ojos azulinos de nuevas cuentas, algo más oscuros que los míos, y la tontería que soltó me estiró una sonrisa genuina en el rostro. Le acaricié la cabeza en un gesto vago, regresé la mano a mi espacio y exhalé. No era mentira.

    Porque junto al miedo latente de la soledad siempre estaba ella.

    —¿Te fue bien hoy? ¿Saliste con la Señorita?
     
    • Adorable Adorable x 3
  7.  
    Etihw

    Etihw ghost Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,606
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Ayako

    Se me escapó un sonidito de pura felicidad cuando sentí su mano en mi cabeza, me daba una sensación muy reconfortante que no cambiaría por nada del mundo. Cogí su mano con gran cariño y en vez de levantarme tiré un poco de él para incitarlo a sentarse conmigo junto a la hierba. No iba a ser la única ensuciándose.

    —Nos volvieron a confundir por alguna razón, quiero decir, ¡solo nuestros ojos y nombres son parecidos! Bueno, y los apodos. Y... puede que me haya apetecido vestirme con colores similares. Y quizá, solo quizá, me até el pelo de una forma parecida.


    Jugueteé con mis manos algo nerviosa. No sabía cómo explicarle que le había propuesto a Ayaka pasárnoslo bien juntas confundiendo a propósito a la gente por una vez. ¡Incluso me planteé conseguirme una peluca! Algún día... Algún día la tendré.

    —Bueno, vale, fue idea mía. ¡Y por eso nos lo pasamos tan bien! Y oye, ¡ella aceptó! No hicimos nada malo, fuimos serias cuando tocaba y todo salió bien.

    Me di cuenta entonces de la situación y lo miré preocupada.

    —Perdona, sigues vigilando, ¿no?
     
    • Adorable Adorable x 2
    • Gracioso Gracioso x 1
  8.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    6,952
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Cintita Haru.png

    Aya prefirió jalarme en vez de levantarse, cosa de la cual dudé una fracción de segundo pero acabé por aceptar. Eché un vistazo alrededor y tomé asiento a su lado, en el césped. Considerando que nunca había salido de su escondite, ahora los dos parecíamos ocultos de Narukami sabe quién y era, cuanto menos, gracioso. Dejé las piernas medio flexionadas y los brazos descansando en mis rodillas, mientras Aya comenzaba a relatarme su día. Una brisa sopló desde el Oeste y trajo consigo el aroma de la montaña.

    Había una calma absoluta allí dentro.

    Toda la cuestión giró en torno a la gente confundiéndolas, cosa que ya era broma frecuente dentro del clan. Que el peinado, la ropa, me confesó que había sido idea suya y solté una risa nasal, divertido. Podía imaginarlo incluso sin necesidad de que subiera al estrado, después de todo la Señorita era más correcta y seria que mi hermana. Más vergonzosa, además.

    —A este paso, tendrán que salir de Narukami para seguir gastándole bromas a la gente —comenté en voz baja, tranquilo, y recibí su pregunta desviando la mirada al bosque—. Sí, pero llevo horas aquí y, como siempre, no ha pasado nadie. Ni un alma.

    Algunos veían descabellado el tiempo que gastaba vigilando el Bosque Chinju, pero el Señor apoyaba la iniciativa y eso era lo único importante. Además, aquí se encontraba un importante punto de encuentro de los Ocelos; claro que esa información pocos la manejaban, y de ahí el desentendimiento de la mayoría.

    —Me alegra que te hayas divertido —agregué, mirándola con una pequeña sonrisa, y luego relajé el semblante—. Por cierto, ¿me estabas buscando?


    *enmarca la cintita porque es su mejor trabajo en generaciones*
     
    • Adorable Adorable x 3
  9.  
    Etihw

    Etihw ghost Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,606
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Cintita Aya.png


    —Salir de Narukami es una excelente idea para la próxima vez. ¡Bien pensado, hermanito!

    Solté una risotada de esas que a una le sale cuando le hace mucha ilusión algo. Porque sí, salir de Narukami y olvidarse del agotador día a día que teníamos era algo que incluso Haru necesitaba. No podía solo pasarse la vida entera en alerta por cualquier cosa, ¿era eso incluso sano? Un día paseando, todos juntos, divirtiéndonos. No sonaba mal.

    Lo apunté mentalmente como mi próximo objetivo.

    Pero primero, mi peluca.

    —Te buscaba para que me ayudes con algo que se me ocurrió. Como quizá ya sabes… pronto es el cumpleaños de nuestra querida princesa. Y no solo eso, ¡también se acerca el Festival Floral! Me parece maravillosa la fecha elegida para el festival, a lo mejor no es casualidad. ¡Podemos tomar ventaja de ello!

    Miré sus ojitos con gran ilusión, y los aparté al poco tiempo algo avergonzada. Quizá me estaba emocionando demasiado pronto. No tenía una idea clara en mi mente todavía, pero sí las ganas de que suceda algo muy especial para quien nos cuidó tanto.

    —No te preocupes, ya le he preguntado a Ayat- digo, al Señor… sí, al Señor, si estaba bien si planeaba algo. ¡Y está de acuerdo! Creo que le hace feliz la idea, quién sabe, quizá nos ayude si lo necesitamos.

    Tras unos segundos de silencio me tiré a sus brazos y lo balanceé de un lado al otro, con una sonrisa de oreja a oreja y ojos brillantes.

    —¡Venga, di que sí! ¡Pensemos en algo para nuestra princesita!



    Preciosas cintas te lo juro, te luciste, te amo <3 Gracias por serme paciente
     
    • Adorable Adorable x 3
  10.  
    Gigi Blanche

    Gigi Blanche Equipo administrativo Game Master

    Piscis
    Miembro desde:
    1 Abril 2019
    Mensajes:
    6,952
    Pluma de

    Inventory:

    Escritora
    Cintita Haru.png

    Mi idea fue aceptada por Aya y la miré un poco por encima cuando se rió, lucía contenta. Claro que no imaginé que la chiquilla estuviera incluyéndome en sus planes mentales pues, al soltar la propuesta, ese detalle jamás apareció en la imagen. ¿Abandonar la isla para pasar un día libre con mi hermana y la Señorita? No sonaba a algo que yo haría, eso seguro.

    Su razón para encontrarme me quedó resonando en la mente. ¿Cómo se relacionaban el cumpleaños de la Señorita con el festival? No tenía idea, pero suponía que precisamente ahí radicaba la idea de Aya. No era la primera ni sería la última vez que buscara implicarme en sus ocurrencias y una parte de mí lo agradecía, incluso si no era de mucha ayuda ni le aportaba demasiado entusiasmo al asunto. Quizá se tratara simplemente de la tranquilidad de saber que las personas no se rendían contigo, por complicado que fueras.

    Las personas que nos importaban, quería decir.

    Sus ojos estaban llenos de ilusión, se me asemejó a un cachorrito o una cría de zorro, de esas pequeñitas y peludas que tantas veces había conseguido ver gracias a mis eternas patrullas silenciosas. La vida se sucedía frente a uno con una claridad diferente cuando simplemente te dedicabas a observar, y puede que ese fuera uno de mis aspectos favoritos del mundo.

    Aya mencionó que el Señor estaba de acuerdo, cosa que no me sorprendía si se trataba de la Señorita, y me quedé pensativo. No dudaba si rechazarla o aceptarla, eso no entraba en discusión, sólo quería darle una respuesta con algo más de sustancia; pero la niña, de ansiosa como podía ser, no pudo esperar y se me lanzó encima, intentando convencerme. Llevé las manos a su espalda e intenté afirmarla en medio de sus balanceos algo imprudentes, cosa de no ir a comer el suelo.

    —Va, va —solté con cierto apremio, puede que incluso exasperado, aunque su abrazo no me significara realmente una molestia—. No iba a decir que no, Aya, sólo estaba pensando.

    Apenas pude, encontré sus hombros y la separé de mí con cuidado. La tontería me había sacudido las neuronas y solté el aire por la nariz, volviendo a enfocarme.

    —¿Quizás un evento conmemorativo? Donde ella sea la invitada de honor. Aunque no sé si resulte de su preferencia.

    La Señorita era una muchacha recatada y algo vergonzosa; su diligencia la convertía en una figura pública de la ciudad pero eso no significaba que precisamente disfrutara la exposición. Solía ponerse muy nerviosa antes de cada evento, de hecho. ¿Cómo combinar un festival multitudinario con su cumpleaños?

    —Tú la conoces mejor que yo. ¿Hay algo del Mikawa Matsuri que le entusiasme particularmente?
     
    • Fangirl Fangirl x 2
    • Adorable Adorable x 1
  11.  
    Etihw

    Etihw ghost Comentarista empedernido

    Cáncer
    Miembro desde:
    9 Julio 2013
    Mensajes:
    2,606
    Pluma de

    Inventory:

    Escritor
    Cintita Aya.png

    En cuanto fui apartada de Haru me tumbé en el suelo, cerrando los ojos. Estiré mis brazos y mis piernas, relajándome en la comodidad de la hierba, en el dulce aroma de las flores y la reconfortante voz de mi hermano.

    —Te pedí ayuda precisamente porque o no se me ocurre nada, o me asaltan mil ideas en mi mente. Y estoy casi segura que me negarás todas ellas.

    Abrí mis ojos, observándolo con preocupación, y me di la vuelta, apoyando mis codos en la hierba y mis manos en mi barbilla.

    —Yo también pensé en algo de ese estilo, con lo que me encantaría que hubiese un festival dedicado a ella. Me habría divertido tanto confundiendo a la gente con mi preciosa peluquita… —Suspiré con una tristeza momentánea, y volví a sonreír como siempre—. Pero definitivamente no lograríamos hacer que se relaje ni que se lo pase bien. ¡El punto es ese! Nada de presión. Nada de trabajo. Nada de nervios. Nadita.

    Volví a sentarme algo inquieta y me acerqué a Haru, rodeando su brazo y apoyándome en este, algo cabizbaja.

    —También había pensado en un pequeño viaje con los mejores guardaespaldas del mundo, es decir, nosotros. Sería super cortito pero seguro le agobia dejar solo a Ayato a cargo de la comisión. ¡Así que pensé llevarnos a los dos! ¡Piénsalo! No puede haber comisión de la que preocuparse así.

    Saqué la lengua juguetona y negué con la cabeza, dándole a entender que era una broma. Una broma que había pensado con gran seriedad en algún punto, eso sí.

    —Luego, para no ser tan extremo, pensé en simplemente celebrarlo entre nosotros y regalarle un reloj de arena. ¡Pero no uno normal y corriente! ¡Será grande, muy grande! Y en él estará grabado un texto que diga “Para que te tomes tu tiempo y disfrutes de la vida.” —Dicho esto volví a mirarlo, esta vez con el ceño fruncido y soplé—. ¡Sois igualitos, eh! Quizá debería darte uno a ti también, a ver si pasas más tiempo conmigo.

    Me quedé en silencio por un rato, sintiéndome bastante serena. Había dicho eso, pero los momentos como este en los que estábamos juntos eran los más preciados para mí.

    —Lo que le pueda entusiasmar del festival… Puede que divertirse como todos, como cualquier otra persona. Como “Ayaka”, ¿me entiendes? —Con un sonoro “hmmmm” masajeé mis sienes con mis dedos, pensando con fuerza, y otra idea asaltó mi mente. Una idea que no estaba segura de si sería ideal, pero al menos era más normal. Quizá—. ¿Sabes? Gastar bromas en el festival puede ser divertido. ¿A quién no le gusta hacer travesuras de vez en cuando?
     
    • Adorable Adorable x 2
    • Ganador Ganador x 1
Cargando...
Similar Threads - Matsuri (Genshin Impact)
  1. Gigi Blanche
    Respuestas:
    96
    Vistas:
    4,027

Comparte esta página

  1. This site uses cookies to help personalise content, tailor your experience and to keep you logged in if you register.
    By continuing to use this site, you are consenting to our use of cookies.
    Descartar aviso