Conjuros de Kattari

Conjuros de Kattari

"Bien, bien, veo que vienes a formalizar el contrato con la Orden de Seider, ¿no es así? Entonces atiende, por favor: convirtiéndote en miembro de nuestra hermandad, sabrás de las maravillas que los verdaderos conjuros, los conjuros de Seider, albergan. Espero que soportes su poder...".

Kattari puede enseñaros Conjuros de Seider, una sección especial de conjuros que, aunque mucho más limitada, son extremadamente poderosos. Eso sí, usar estos conjuros por parte de novatos en el manejo de los mismos es algo peligroso, pues consumen parte del éter propio... motivo por el que estos conjuros consumirán, cuando los uséis, no solo PC, sino PS. En general, sin embargo, son versiones mucho más poderosas de los conjuros comunes, con algunos únicos, incluso.

Aprender un conjuro de Seider implica que firmáis el contrato de hermandad con Kattari, formando a pasar parte de los Seguidores de Seider, la Hechicera Olvidada.

Contenido oculto

- Doble flecha de éter: Seider tomó como base para su primer conjuro el más básico de todos los originales, pero añadió el uso del éter del propio hechicero para mejorarlo, hasta el punto de que estas flechas no solo son más poderosas... sino que se fragmentan en dos al atacar.
Fuerza: 30 daño mágico, -5 ST, -15 PC, -30 PS. Golpea dos veces, pudiendo ser una a un enemigo y otra a otro distinto o ambas al mismo.
Requisitos: 21 de inteligencia.
Escalado: B en inteligencia.
Precio: 500 éter

- Sable de Seider: tomando de base el conjuro del Sable de éter, esta versión de Seider, mucho más letal y rápida, es usada con un sable de éter que bebe no solo del éter del aire, sino del del propio usuario. Por eso mismo, su hoja es mucho más grande, motivo por el que un tajo horizontal abarca mucho más que cualquier intento de imitarlo por parte de los conjuros normales.
Fuerza: 25 Daño cortante, 25 daño de magia. -20 PC, -5 ST, -30 PS. Ataca a todos los enemigos que se encuentren ante el usuario.
Requisitos: 17 de inteligencia y 12 en habilidad.
Escalado: B en inteligencia, D en habilidad.
Precio: 500 éter

- Dardos de Seider: conjuro único que versiona la flecha de éter con un enfoque totalmente innovador: en lugar de canalizar el éter en un solo punto, se secciona en pequeños trozos y se dispara todo en conjunto hacia delante en una andanada de proyectiles. La energía de estos proyectiles causa alucinaciones a los enemigos.
Fuerza: daño de magia dependiente de inteligencia, golpea 3 veces. -20 PC, -5 ST, -20 PS. Acumula 5 de lucidez por proyectil.
Requisitos: 19 de inteligencia.
Escalado: C en inteligencia.
Precio: 500 éter

- Lanza de Seider: usa el éter del propio usuario par enfriarlo y congelar su brazo. Pese a que es doloroso y deja la sangre helada, hace surgir alrededor del brazo una lanza puntiaguda y larga, hecha de hielo, que puede usarse para atacar al rival. Los Seguidores de Seider solían usar este hechizo para dotarse a sí mismos de un arma ofensiva. Aunque la magia es potente, en las distancias cortas siempre conviene tener algo con lo que apuñalar a tu enemigo, ¿no?
Fuerza: crea una lanza por -40 PC y -35 PS. Con dicha arma, se podrá atacar como si fuese un arma normal durante dos turnos, con 20 Daño de embestida, 40 daño de de hielo. -15 ST. Mientras la mano esté ocupada con la lanza, en dicha mano no se podrán usar más armas.
Requisitos: 22 en inteligencia, 15 en habilidad.
Escalado: C en inteligencia, C en habilidad.
Precio: 700 éter

- Iceberg: versión hecha por Seider del patético pilar de cristal de los Originales. Este hechizo no solo es mucho más grande, sino que, gracias a que usa el éter del usuario, es más potente y letal.
Fuerza: 30 daño de hielo, -10 ST, -20 PC, -30 PS, golpea en área.
Requisitos: 22 en inteligencia.
Escalado: B en inteligencia.
Precio: 700 éter

- Canalizador: dado que a Seider y sus seguidores no les importaba sufrir dolor y usar parte de su esencia en los conjuros, tampoco tenían miedo a la hora de usar su propia vida para aumentar la posibilidad de lanzar más conjuros. Al fin y al cabo, ¿para qué quiere uno usar patéticos brebajes cuando puede beber de sí mismo?
Uso: pierde 70 PS a cambio de recuperar 40 PC. Queda inmóvil para el turno siguiente.
Requisitos: 23 inteligencia.
Precio: 700 éter.

- Conversión de éter: hechizo avanzado desarrollado por Seider, que utiliza el éter de uno mismo para modificarlo y transformarlo en energía alterada. El proceso es muy doloroso para el usuario, pero a cambio le permite usar el éter de formas imprevisibles.
Uso: por dos turnos, cambia el elemento de flecha de éter, lluvia de éter, sable de éter, oleada de éter, doble flecha de éter y sable de Seider a uno al azar entre: fuego, hielo, electricidad y oscuridad. Si sale oscuridad, el elemento sigue siendo magia, pero cada golpe acumula 10 de vaciado. -5 ST, -35 PC, -50 PS.
Requisitos: 25 de inteligencia.
Precio: 600 éter

- Burbuja de cristal: conjuro avanzado creado por Seider, rechazado por la escuela de los originales por el riesgo que implicaba su mal uso. El cristal generado con éter podía llegar a ser irrompible y encerrar de por vida al usuario, o podría romperse y los cristales dañar gravemente al mismo. Sea como sea, a los de la escuela de Seider nunca les importó un poco de riesgo, ¿verdad que no?
Uso: genera una esfera de cristal que recubre al usuario por dos turnos. Si recibe daño elemental, la esfera lo bloqueará responderá con un rayo de hielo de 30 de daño de hielo. Si recibe daño físico, la burbuja estalla y daña al que la usó y a quienes estén cerca, amigos o enemigos, con 60 de daño plano -sin escalado-, acumulando 50 de hemorragia. -40 PC.
Escalado: A en inteligencia.
Requisitos: 23 en inteligencia.
Precio: 600 éter

Contenido oculto: Conjuros oscuros

- Hacha negra de Seider: uno de los conjuros oscuros prohibidos, que no solo fueron vetados de la escuela de los originales, sino que la propia Seider decidió que era demasiado peligroso seguir utilizándolo y optó por reservarlo solo a sus más cercanos allegados. Y para Seider opinar así, realmente debía ser peligroso...
En particular, el hacha negra emula el Sable de Seider, pero el usuario se vacía de éter en el proceso. Es así como el éter se oscurece y pudre, y la hoja que se genera deja de ser una fina y alargada, para convertirse en una terrible hacha demoníaca que aplasta todo a su paso.
Fuerza: 70 Daño contundente, 70 Daño cortante, acumula 20 de vaciado, golpea hasta a dos enemigos en fila, a corta y media distancia. -40 PC, -30 ST, el usuario acumula 20 de vaciado en sí mismo, ignorando inmunidades. Stagger: 6
Escalado: S en fuerza.
Requisitos: 19 fuerza, 26 inteligencia
Precio: 1000 éter

Quienes sean hermanos de la Orden de Seider, para lo cual se necesita comprar, al menos, un conjuro de Seider, podrán acceder a servicios exclusivos. Concretamente, Kattari ofrecerá dos servicios: uno de intercambio de éter por cúmulos, cobrando un pequeño interés, lo que será útil para almacenar el éter sin miedo a perderlo o para comerciar entre vosotros; y otro de potenciación etérea, esto es, Katari os hará subir un nivel gratuitamente, sin coste de éter. No obstante, este último servicio es limitado.
Un hermano puede entregar a Kattari un rastro de éter para que ofrezca más conjuros de Seider y para renovar y ampliar los servicios exclusivos a miembros de la orden.

Contenido oculto: Intercambio de éter

- Pequeño cúmulo de éter (+300 éter)
Precio: 350 éter

- Cúmulo de éter (+600 éter)
Precio: 700 éter

- Gran cúmulo de éter (+900 éter)
Precio: 1050 éter

- Cúmulo de éter gigantesco (+1200 éter)
Precio: 1400 éter

- Gigacúmulo de éter (+1500 éter)
Precio: 1750 éter

Contenido oculto: Potenciación etérea

- Subida gratuita: sube gratuitamente un nivel a tu antojo.
Disponibles:
- Kashya: 2
- Espella: 1
Usado por:
- Kashya (2)
- Espella (3)

 

Kattari comenzó a reír.

—Ah, sabía que terminarías viniendo a mí en busca de fuerza, pero no esperaba que fuese tan pronto. Bien, bien, como desees; como hermana de la orden de Seider que eres ahora, te debo prestar mi apoyo y ayuda siempre que pueda, claro.

Y así, la hechicera alzó sus manos, y una energía oscura comenzó a manar de ellas. Dicha energía, lentamente, comenzó a penetrar en Kashya.

VACIADO: 35/100 (Kashya)

—... siente cómo el éter empieza a revolverse dentro de ti... cómo sale de tu cuerpo —susurró Kattari, que, en efecto, parecía estar logrando eso: extraer el éter de Kashya. Cuando la oscuridad que entró en ella comenzó a salir, lo hizo acompañada de fragmentos visibles, condensados, de éter. La estaba vaciando por completo.

VACIADO: 70/100 (Kashya)

Y siguió extrayendo más y más éter, sin parar. Kattari lo empezó a moldear con las manos, haciéndolas girar, y el éter se empezó a condensar en una bola formada por la espiral que el movimiento circular de las manos de la hechicera provocaba.

VACIADO: 99/100 (Kashya)

Cuando estuvo a punto de extraer todo el éter de Kashya, quedando esta completamente ida por unos segundos, la oscuridad manó de nuevo de las manos de Kattari, y, en pequeñas cantidades, empezó a unirse con el éter de la chica. Así pues, la elegida vio cómo Kattari, añadiendo ese ápice de oscuridad, movió de nuevo todo el éter de vuelta al cuerpo de Kashya, que, poco a poco, volvió a la normalidad.

VACIADO: 0/100 (Kashya)

—... listo. La energía dentro de ti debe estar ahora reforzada. Quizá no lo notes, pero... créeme, ahí está. El poder de Seider ha fluido por tu cuerpo.

Tu inteligencia sube en un punto.

 

Espella

Analizó profundamente a Kattari con la mirada, examinándola todo lo que podía. Ella y su orden resultaban en un enorme peligro para Espella, podía intuirlo, pero si jugaba sus cartas con precisión y sin cometer ningún error, quizá podría sacarles provecho.

—Me gustaría unirme a su orden y aprender el conjuro Sable de Seider —dijo, con voz perfectamente calmada.

 

Kattari sonrió con cierta malicia.

—Excelente... tú también pareces una maga poderosa, podrás dominar los conjuros verdaderos, sin duda. Muy bien. Con esta lección de hechicería, te conviertes en miembro de la Orden de Seider.

Hizo una reverencia tras enseñarle a Espella a usar aquel conjuro, y luego volvió a esbozar aquella sonrisa.

—Bien... ahora, como hermanas que somos, debemos ayudarnos mutuamente. Te ofrezco mis habilidades de manipulación de éter... y, a cambio, anhelaré expectante a que me traigas uno de esos rastros de éter. No los consumas ni los entregues a aquella vieja. Dáselos a tu hermana, ¿sí? Es lo que, como hermana de la Orden, debes hacer.

Desbloqueas los servicios especiales de Kattari.

 

Espella

Hacía ya bastante tiempo que no se pasaba con su "hermana" Kattari. No le gustaba deberle favores a nadie, mucho menos que a alguien tan peligrosa como lo era aquella maga. Sabía que estaba a años luz de distancia de ella en cuestión de conocimientos mágicos, y saltaba a la vista que la mujer no era precisamente trigo limpio. De todos modos, necesitaba de esos mismos conocimientos para reforzar su arsenal.

—Confío en que pronto te podré traer un rastro de éter hermana Kattari —dijo, inexpresiva—, pero para que eso sea posible necesitaré que me prestes tu fuerza.

>>Potenciación etérea (inteligencia) + Doble Flecha de éter

 

Espella

Busqué a Kattari con la mirada, y pronto la encontré. Tan sombría como siempre, parecía feliz de verme. Probablemente sabía ya que llevaba un rastro conmigo.

—Congratúlate hermana, que te he traído justo lo que que querías: Un rastro fresco de éter. Es uno muy curioso, seguro que podrás sacar jugo de él —dije—. Aunque antes —sonreí maliciosa—, ¿Qué tal si me ayudas un poco con esa potenciación de éter tuya, sí?

>>Potenciación etérea (Vitalidad) + Entregar rastro de éter

 

Kattari sonrió con tremenda malicia y, a la vez, cierta satisfacción y orgullo al ver el rastro de éter que le entregaba Espella. Lo recogió entre sus manos, sonriente, la capucha ensombreciendo su rostro pálido.

—Magnífico. Sabía que podía contar contigo, hermana mía. Has demostrado que realmente eres leal a Seider... y, como tal, igual que tú me ayudas, yo te ayudaré a ti. Te revelaré más de los conjuros sagrados de Seider. Asegúrate de aprenderlos bien...

>> Ah, pero antes, hagamos esa potenciación, ¿sí?

Y, de nuevo, Kattari extrajo la energía de Espella, sonriendo mientras tanto, sacando todo su éter. Introdujo oscuridad en el centro de todo el éter y, mientras Espella notaba cómo su vida se le iba, pronto regresó todo a ella, sintiéndose... distinta.

Nivel subido.

Tras eso, Kattari sacudió sus manos, satisfecha. Y miró, brazos cruzados, a Espella.

—... ¿sabes? He pensado... que quizá pueda interesarte formar parte oficialmente de los Seguidores de Seider. Hasta ahora has sido un hermana de forma... extraoficial. Pero me has demostrado lealtad. Y por ello, te ofrezco, aquí y ahora, que sigas la senda de los Seguidores de la Hechicera Verdadera. Ayúdame, únete a mí, y hagamos resurgir, juntas, la grandeza de nuestra Señora Seider. Que los que la desprestigiaron, y sus hijos, y los hijos de sus hijos, y todos sus descendientes... sepan cuál es su lugar: la basura. Los excrementos. La miseria —mientras pronunciaba eso, se vio más sombría que de costumbre, apretando su brazo con una de sus manos entrecruzadas, soltando su rabia a través de ese gesto. Pero pronto lo relajó, y miró a Espella: había oscuridad en los ojos de la maga, sin duda. Una profunda oscuridad—. ¿Qué me dices? ¿Quieres ser miembro oficial de los Seguidores de Seider y unirte a mi cruzada por devolverle al nombre y honor de la Hechiera Verdadera lo que siempre le correspondió? ¿O prefieres, por el contrario, seguir ayudando como hermana, siendo una mera colaboradora?

>> Poder extremo te espera si te unes a mí. Pero si prefieres seguir colaborando, bien. Siempre que no traiciones mi confianza... cualquiera de las dos opciones me es válida.


¿Unirse al juramento "Seguidores de Seider"?

 

Espella

Kattari estaba sumamente satisfecha con aquel rastro, accediendo a potenciar aún más mi poder. Sentí como introducía, una vez más, aquella oscuridad en mi interior.

Entonces, al acabar con el ritual me ofreció unirme de manera oficial a los seguidores de Seider. Al parecer, hasta ahora solo habíamos sido miembros extraoficiales.

Recuperar la reputación de Seider y castigar a aquellos que supuestamente la mancillaron no era algo que me interesara a nivel personal, pero la oferta de obtener poder extremo era tentadora. Sabía que Kattari sin duda lo poseía.

La locura de la mujer, sin embargo, era bastante peligrosa. Se notaba que tenía una fascinación extrema por la tal Seider, y un odio profundo por sus enemigos. Pero aunque la mujer poseía un poder inconmensurable, aquellos sentimientos por la antigua hechicera eran una cadena que no iban a dejar a la seguidora de Seider pasar de cierto límite.

Límite que yo no tenía; sólo debía seguir la corriente hasta que tuviese la suficiente fuerza para convertirme yo misma en la hechicera suprema.

—De acuerdo hermana, deseo unirme a la orden y seguir el camino que nos guíe a restaurar el lugar que le corresponde a la Hechicera Verdadera. Muéstrame el camino.

>>Unirse

 

—Fantástico. Sublime... justo lo que esperaba. Ah, hermana, cómo me alegro de que me acompañes en esta senda, la correcta y verdadera. Serás una auténtica hechicera, como debe ser. Conocerás lo que es la verdadera magia y la palabra de Seider, la Hechicera Verdadera. Presta atención, porque te revelaré ahora muchos de nuestros secretos. Tómalos bien, y guárdalos. La traición se paga con sangre, recuerda eso. Ven, déjame que te cuente...

Y Kattari se acercó a Espella, contándole, muy cerca, todos aquellos... secretos.

Recibirás por MP las instrucciones de tu juramento.

Cuando terminó, se retiró de ella, y le tocó con una mano. Una energía extraña fluyó por el cuerpo de Espella.

—Bien. Ya lo sabes... ahora, te he concedido el poder de usar las herramientas para... perseguir nuestra causa. Espero grandes cosas de ti. Ah, y, claro, esto no acaba nuestro otro contrato, el de colaboración; me trajiste un rastro de éter, y, si bien eres libre, tú y tu otra amiga, de hacer lo que queráis con otros rastros... esperaré con impaciencia a que me deis más, si tenéis a bien hacerlo. Quien quiera conocer las virtudes de la magia de Seider, que me entregue esos rastros. Solo así revelaré todo ese poder.

>> De momento, tu próxima tarea como colaboradora será la misma que tu tarea como Seguidora: cumple con la tarea que te he encomendado. Tráeme un poco de eso que te he pedido. Y luego seguiremos... hablando.

Se actualizarán pronto los conjuros de Kattari.

 

Kattari sonrió al ver llegar a Kashya y pedirle que usase sus... "poderes" con ella.

—Oh, acudes a mí de nuevo para aumentar tu poder, ¿eh? Está bien. Te haré ese favor, si gustas.

Y, así, la potenciación etérea sucedió de nuevo, y... Kashya notó la oscuridad fluir por su cuerpo.

Nivel subido.

 

Espella

—Qué alegría es volver ver a mi hermana de la orden de nuevo —me mofé—, espero que estés satisfecha con mi desempeño. Así que, como ayuda a una hermana tan devota, ¿Por qué no me llenas un poco más con esa oscuridad tuya que tienes, uhm?

>>Potenciación etérea (Fe)

 

Espella

—Veo que sigues tan sombría como siempre —le dije a Kattari, despreocupada—, hay un hechizo que le he visto a mi otra hermana de juramento que se ve muy útil, así que me gustaría que me lo enseñases. Seguro que me es muy útil para cumplir el encargo que me dejaste~

Comprar Dardos de Seider

 

Espella

—Alégrate un poco hermanita~ —canturrié con sorna, acercándome a la líder de la Orden—, que hoy te traigo un botín bastante grande. No todos los días se ve un rastro de éter tan potente como este, ¿No es así? —levanté la mano para mostrar el orbe concentrado de éter que recién acababa de conseguir—, todo para ti y la orden a la que tanto me gusta servir.

>>Así que, ¿Por qué no me enseñas unos cuantos más de esos hechizos tuyos? Esto segura de que aún no me has mostrado todos los que nuestra adorada Seider desarolló, ¿No es cierto? Quiero sentirme más cerca de nuestra maestra, después de todo~.

Entregar Rastro del Elegido Furioso

 

Kattari vio llegar a Espella con un nuevo rastro y alzó una ceja, sorprendida a la par que satisfecha.

—Oh... vaya, vaya... qué tenemos aquí. Me traes un nuevo rastro —lo tomó en sus manos, y empezó a reír ligeramente—. ¡Vaya! Es uno maravilloso, sí. Tocado por los dioses. Una maravilla, cargada de recuerdos dolorosos, y anhelando justo descanso.

Pronto apretó la mano, fragmentándolo en pedazos sin piedad. Pareció absorber todo el éter para sí misma...

—... y listo, entonces. Su portador no lo echará de menos. Quedará bien en mi colección, retorciéndose tras cada conjuro.

>> Ah, bien hecho, hermana. Muy bien hecho. Tú y yo nos entendemos, ¿verdad? Deja... que te muestre más hechizos, entonces. Te enseñaré hechizos que hasta a la propia Seider daban miedo. ¿Qué me dices...?

Nuevos conjuros disponibles.

 

Kattari miró a Kashya cuando se acercó. Pero no la miró con alegría, ni con esa sonrisa suya, sibilina y aprovechada. No. La miró con ira. Auténtica rabia.

—... escoria humana —le espetó, mano dirigiéndose presta hacia su estoque, sin llegar a desenfundarlo, pero la mano puesta ya en la empuñadura—. ¿¡Tienes la poca vergüenza de venir aquí, después de traicionar a la Orden de Seider!? Te di poder, te di la marca de Seider... te di todo, a cambio de un mero acuerdo de intereses. Y tú pisoteaste ese regalo que te hice. Ah, pero te advertí... la primera vez ya te advertí. Y, con todo, insististe en borrar la marca. Y aquí estás, ahora, ¿¡demandando aprender los conjuros verdaderos!? Sucia escoria, aléjate de mi vista. Si no quieres que te pulverice.

>> La Orden no perdonará esto. Grábalo a fuego en tu mente.

No puedes usar este comercio porque has dejado de ser una hermana de la Orden.