One-shot Malos pasos [Mao y Kenzaburo | SamuraiSenso]

Relato para la actividad "Un canción, un drabble: Anniversary Version", día 2.
El personaje de Kenzaburo pertenece a rapuma
Los personajes son del rol de Samurai Senso.

Le pongo +16, solo por que menciona muere y cosas así (?)

Contenido oculto: Lace

Malos pasos​

Miedo,

ira,​

dolor.​

La tensión que se generó opacó la pena de la noche anterior. Las miradas, que intercambiaron las figuras altas, eran peligrosamente afiladas. Un forastero sosegado, el cual no lograba ser intimidado por la vibra de peligro que emanaba el viejo.

Y ahí estaba ella, mirándolos anonadada, ajena.

Palabras a las que no les encontró sentido salieron de los labios de Kenzaburo, pidiéndole prometer abandonarlo. ¿Cómo a sus hermanos?, ¿cómo al destino que le había dictado los Taira? Escapar del peligro, huir de la muerte.

Observó con lágrimas en los ojos, como nuevamente una figura familiar se alejaba de ella. Inalcanzable... ¿en verdad no podía hacer nada?

¿Debía permitirlo?

No, sus pies se movieron sin pensarlo, sigilosos tras la silueta de quién perseguía la muerte. No sabía si aquel extraño era peligroso, pero lo que más le preocupaba era la voz de su acompañante. La sentencia en ella, el absolutismos de sus decisiones.

La amenaza, pero... ¿Para quién?, ¿por qué?

Algo no andaba bien, desde ayer que no andaba bien... o tal vez desde el inicio; ni con él, ni con ella. El color sangre vibraba en sus recuerdos. Demasiado lenta, o ellos muy rápidos; llegó a la escena tarde, en el ocaso de los acontecimientos, alguien iba a morir.

Y no iba a ser el viejo ni la joven, porque el placer de descansar en paz o por la eternidad... No podía permitírselo.

Observó como el charco carmín se extendía bajo el cuerpo gélido, aquel cuerpo muerto por culpa de una katana... Pero... el alma del individuo, ¿dónde quedaría? Tras la espalda de Mao, quien había tomada una decisión cegada por el miedo.

Que muriera el samurai convertido en ronin por traición, hubiera sido un alivio para muchos; o que aquel inminente peligro fuera eliminado por las manos de Kenzaburo, quien a pocos les importaba cuanta inocencia quedara en él, hubieran sido desenlaces creíbles...

Pero al final, fue Masuyo quién terminó manchándose nuevamente las manos, siendo ella quien dio la estocada final. La que arrebató el último aliento, de alguien que ni siquiera conocía, ni sabía cuanta maldad portaban sus actos.... Asesinando solo con el objetivo de proteger a un asesino. Uno despiadado.

Estaba condenándose así misma, y parecía dispuesta a cargar con aquel peso... Y no parecía importarle en que se convirtiría, porque...

Kenzaburo nunca iba a temerle, ¿no?