El Pueblo Inscripciones

[Adelantar al 1:46]
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El pueblo es un lugar tranquilo; rodeado de un bosque extenso que llega a los pies de unas montañas que separan la frontera con Francia. En el pueblo no hay señal de gps y con frecuencia hay avistajes de extraños seres que los pueblerinos adjudican a ovnis y monstruos fantásticos como pie grande.

Más que los susurros de un gentío, ignorante al mundo exterior, llegaba como una suave brisa a los centros del mundo. Pero ahora, cuando un peligroso criminal parecía haber escapado en su traslado por el bosque del pueblo, las autoridades se alarmaron. La noticia sacudió el pequeño lugar como una tormenta de verano y pronto todas las miradas se pusieron en él.

Las noticias son aún más inquietantes sobre lo sucedido: encontraron a los guardias de ma caravana de traslados mutilados por animales o eso se especula... pero sin rastros de António Degustini, culpable del asesinato de diez personas a sangre fría. El Jeep que trasladaba al preso y a los guardias se encuentra volcado, con los cadáveres esparcidos por el bosque. El operativo se armó en menos de diez horas, intentando que los rumores no vuelen a los noticieros pero fue imposible, la noticia explotó como pólvora.

La policía local adjudica el crimen de los guardias al convicto y cerró el caso de buena gana, pero el FBI intervino y el caso volvió a abrirse: era físicamente imposible que António, esposado de pies y manos, pudiera desmembrar a dos guardias armados y en mejores condiciones físicas.
Es por eso que enviaron al campo a dos de sus agentes, uno de ellos era Norman Jayden, negociador de rehenes y con su primer caso de homicidio y desaparición en carrera; la promesa de la agencia.


También un detective privado se interesó en el caso, el aclamado Jon Thorne, alcohólico y ya no tan famoso en su trayectoria. Tomó el caso como una posibilidad de limpiar su historial.

Pero la piedra que rebalso el vaso fue que la iglesia tomó su propia mirada en el caso. Enviaron a un cardenal joven, hombre religioso y de ciencias, que estaría acompañado de un discípulo el cual próximamente tomaría su lugar.

¿Quién resolvería el caso de António Degustini?

Pero tanto la iglesia, cómo el FBI y los detectives no se imaginarian la tenebrosa red que se tejia en la oscuridad del pueblo. Una red que quizá los atrapé para siempre....


Rol para tres personas, cada uno con un compañero NPJ que controlaré en la trayectoria del rol.

El sistema de batalla se dirá en el momento en que ocurra una, de ser necesario, para defenderse o actuar ante una situación.


Fichas!

Nombre y apellido:
Edad:
Descripción psicológica:
Imagen o descripción física:
Historia personal:
Posición: (FBI, detective privado o discípulo de cadernal)


Nekita Gigavehl Gigi Blanche Liza White The Papuh Insane Yáahl Liza White Lady Azulina Insane Reual Nathan Onyrian
satellite y no se me ocurre quién más!!!

Los espero para matarlos! Es decir... para divertirnos :)

 

Guardo cupo para FBI uwu/ Me da mucha curiosidad saber qué puede salirme.

 

Guardo cupo para el discípulo del cardenal. El pobre rapu llegaba siempre tarde a las inscripciones, veremos ahora como se manejar como GM :D

 

Quiero decir que la ficha de Gigavelh está lista para la acción! Y que esñeroas fichas de Lizy y Reual para comenzar el rol!!!! :) Si alguien realmente se quedó con muchas ganas de rolear podría ser un policía local del pueblo! Esto es para los interesados que no llegaron con tiempo!

 

Claro que sí! Tu ficha será relacionada a la policía local del pueblo. Para que tengas datos, tu superior en jefe se llama Walter Blacke y tú compañero de patrulla es Nash Ríos! :) A darle átomos

 

Raios, llego tarde ;w;

Hay puesto para one more?
PD: La alerta no me llego tampoco, llegué flotando sólito.

 

Claro! Y con esto cierro las inscripciones!

A vos y a Gigi les mando un mensaje privado!

Y como recordatorio es bueno decir que las imágenes de los personajes sean REALES y no de animé; imágenes de personas reales o imágenes casi realistas como hay mucho muy buenos en Pinterest.

Saludos y espero sus fichas! :D

 

Nombre y apellido: Isaac Foster (O Aquiles, el sobrenombre que se ha ganado entre los agentes).

Edad: 34 años

Descripción psicológica: Aquiles posee las cualidades requeridas para toda persona con pretensiones de formar parte de las filas del Buró Federal de Investigaciones: es un líder nato, un hombre sin escrúpulos capaz de mantener la cabeza fría y los nervios de acero con tal de llevar a buen puerto sus operaciones; posee ciertos TOC's referidos al orden que le convierten en una persona sumamente organizada y ordenada, así como sus acciones son movidas constantemente por un fuerte sentido del deber que en ocasiones sobrepasa la ética y la moral comúnmente aceptadas. De ideas firmes y con una terquedad inamovible, Aquiles no cree en supersticiones ni en criaturas fantásticas, y ello le llevará soltar por lo general respuestas irónicas y burlonas acerca de los avistamientos en el pueblo. Por lo general, la ley del "si no lo veo, no lo creo" formará parte de su modus operandi.

Le incomodan las relaciones afectivas, y detesta ser sincero con otros. Mantiene cierta distancia a pesar de su actitud dicharachera con sus compañeros de trabajo, debido a que una de las normativas que debe seguir es el trabajo en equipo, y debe forzarse a mantener relaciones cercanas para asegurar el éxito en su vida laboral. Nunca habla de su vida personal, y cuando lo hace simplemente deja entrever leves bosquejos incongruentes que no permiten a sus interlocutores formarse una idea de quién es en verdad Isaac Foster. Tan solo la de un hombre volcado por completo con su trabajo, pero cuyos ideales y objetivos son desconocidos para el resto.

Cabe destacar que a pesar de lo perfecto que pueda parecer, su Talón de Aquiles (y el motivo por el que recibió el sobrenombre) es su aerofobia, a la que debe hacer frente en sus innumerables destinaciones laborales.

Imagen o descripción física:

Contenido oculto

Historia personal: El trabajo de agente encubierto es, posiblemente, uno de los más peligrosos y aterradores al que una persona se pueda dedicar. Te dejan solo en los lugares más hostiles para infiltrarte en las organizaciones criminales más violentas y paranoicas, sometido a la inmensa presión de tener que extraer información sin acabar brutalmente asesinado. Eso es algo que Aquiles ha tenido que aprender por las malas en sus innumerables infiltraciones como agente del FBI, y a lo que estuvo concienciado durante su preparación para poder hacerse un lugar entre sus filas. Desde pequeño sentía una gran fijación por las películas de espías, de detectives privados que resolvían casos de formas extraordinarias y vivían la vida al límite. Y siendo Aquiles un ferviente seguidor de la adrenalina y de los deportes de riesgo, encontró su vocación perfecta al combinar esto con su afán por hacer justicia. Adquirió un título en leyes que le equiparía con el conocimiento para investigar violaciones de cualquier ley federal existente en los Estados Unidos, y tras arduos años de preparación logró un puesto entre los miembros del FBI.

Poco se conoce sobre la vida personal de este individuo. Rumores entre los agentes aseguran que su aerofobia surgió por un accidente de algún pariente cercano, pero por mucha insistencia que ejerzas, poco descubrirás de la vida de Isaac Foster. Según sus propias palabras: "viví una vida común, en un barrio común, con una familia común y siendo un chico común. No sabría añadir más".

Posición: FBI

 

Genial la ficha de Liza!!!! :)

Ahora solo falta la ficha de Gigi Blanche The Papuh y Reual Nathan Onyrian y entramos en acción!!! :)

 

Nombre y apellido: Jonathan "Jonah" Niles
Edad: 45
Descripción psicológica:
Jonah es de carácter cruel, sarcástico y a veces macabro, otras tantas parece un demente, pero un demente agradable, le encanta jugar con su trabajo. No le importa realmente la opinión de otros, tampoco sigue al pie las reglas que le dan. Pero cuando consigue un rastro, no hay forma de quitarle la jodida sonrisa de la cara o de pararle hasta finalizar el caso, como un perro obsesionado por encontrar su hueso.

Es fanático del cine fantástico, de fumar en todo momento y lugar, pero como todo buen hombre, cuando los testigos de jehova llegan a su puerta, se atrinchera y apunta su rifle contra la puerta mientras espera en silencio a que se larguen por su cuenta... si saben lo que les conviene.

Descripción física:

Contenido oculto: Imagen

Quiero poemas del hombre araña! (?)

Historia personal:
Jonah es un hombre viejo, testarudo y con un sentido del humor demasiado siniestro, incluso para Walter o Ríos. Piensa con la cabeza en frió y se mantiene vagando de un lado a otro llevando algo para fumar siempre entre los bolsillos. Su sentido del deber es indiscriminado aunque puede pecar en muchos momentos de tener una metodología bastante fuera de lo normal, le encanta hacer el papel de policía malo.

No es residente natural del pueblo, llego allí debido al trabajo cuando otro oficial fue retirado por vejes y estando interesado en los diferentes casos que ocurrieron al rededor de esa localidad, decidió mudarse para ver un poco mas de cerca que clase de cosas pasan allí realmente... han pasado mas de diez años desde su llegada, y sigue pensando que la mayoría son pueblerinos locos y aveces, aveces... no están tan locos, aunque quisiera que si lo fueran.

"He visto cosas raras en mi carrera, chico... ¿pero esto? diablos, parece una escena de Evil Dead. ¿Llamamos primeros a los caza fantasma, al cura, a la CIA o a la señora que limpia la oficina? esto esta demasiado rojo... y no sé que hace un pedazo de carne pegado del techo del auto."

Posición: Policía Local

 

Contenido oculto

Me da gracia como todos están con sus fríos, metódicos y malhablados personajes, y yo con un cinnamon roll que solo quiere repartir felicidad.

Nombre y apellido: Tristán Adriano Alarcón

Edad: 32 años

Descripción psicológica: A pesar de que su aspecto y porte regio puedan dar a suponer que Tristán es una persona sumamente estricta y seria, el sacerdote es una persona en contraste dulce y alegre. Las apariencias ciertamente engañan con este joven, hasta que deja el semblante severo para dar paso a una radiante sonrisa y a un suave tono de voz, deseándote unos buenos días y preguntándote si todo se encuentra bien, si necesitas ayuda con algo, o hay alguna cuestión que te incomoda. Tristán es de esas personas que le sonríen a la lluvia, y al agresor la otra mejilla; el que se arremanga y se entierra hasta las rodillas en el barro para ayudar en lo que sea. Tristán es alguien que se encuentra profundamente agradecido por la vida y por las oportunidades que recibe, y está más que dispuesto a repartir ese agradecimiento y felicidad al resto. La sonrisa nunca deja de estar en el rostro de Tristán, no importa cuanto la vida lo golpee. Pues el hombre es de aquellos que tienen esperanza en que al final, todo saldrá bien.

Tristán disfruta de realizar actividades físicas al aire libre, como así también mantener su persona pulcra y aseada, al igual que el ambiente a su alrededor. Es muy metódico con su limpieza personal y con las de sus habitaciones, pues dice que un cuerpo puro ayuda a mantener un alma pura. Además, es un lector ávido, y suele pasar los ratos en los cuales no está ocupado con sus labores de servicio sacerdotal, ejercitando o ayudando en el pueblo, enterrado en la biblioteca del cardenal, leyendo todo tipo de escritos: tratados teológicos y filosóficos, libros científicos, y hasta que alguna otra novela de aventuras para despejar la mente.

Imagen o descripción física: Tristán posee ojos del color del cielo, que usualmente cambian dependiendo de la luz del ambiente. Su cabello del color del trigo suele estar prolijamente peinado con una raya al costado, y posee un lunar sobre su pómulo derecho. Su porte recto y su apariencia pulcra suele dar la impresión de que es alguien estricto, y su rostro serio no hace más que sumar a esta visión. Siempre posee el cuidado de mantener su cara limpiamente afeitada, lo que deja ver su barbilla partida.

Tristán es un hombre alto, midiendo 1.85 metros de altura, y también ancho de hombros. Se mantiene en buena forma, haciendo ejercicio regularmente. Tiene una leve cojera, producto de un accidente cuando era joven. Suele vestir usualmente con sotana negra, con estola sobre el hombro, y rabat. Debajo de ella, utiliza una camisa celeste y pantalones de vestir, junto con un cinto de cuero y zapatos cómodos, de cuero también. Sobre la camisa porta un rosario, cuyas cuentas son piedritas de colores.

Contenido oculto

Historia personal: A pesar de lo feliz que puede verse a Tristán estos días con su vocación, el hombre no siempre deseó ser parte de la Iglesia Católica como ministro. En su juventud, el andaluz quería ser boxeador. Su padre lo fue, y desde pequeño fue inculcado que debía seguir los pasos de su padre. Cabe destacar que don Alarcón nunca se dedicó al boxeo profesional, sino que su círculo siempre se conformó de boxeadores amateurs. Y es en ese ambiente en el cual el joven Tristán tuvo su infancia y su adolescencia. Si bien su familia siempre fue religiosa, con su madre rezando un rosario antes de cada pelea de su padre, y el hombre instruyéndolo para que siempre fuera un instrumento de Dios en la Tierra, el muchacho nunca pensó siquiera en dedicarse al sacerdocio, o en alguna actividad similar. Su vida transcurría sin demasiados problemas ni sobresaltos, intercalándose entre la escuela, entrenamientos, ida a misa y la ocasional salida con sus amigos y compañeros.

Sin embargo, todo esto cambió cuando su padre perdió una pelea por knock out. El hombre no se despertó desde ese entonces, permaneciendo en un estado de coma permanente, para luego fallecer dos años después. Durante ese año, su madre, con una niña que recién había nacido unos meses antes de la fatídica pelea, y él mismo, comenzaron a buscar ayuda en dónde sea, para intentar pagar el tratamiento de su padre. El muchacho no se dedicaba de forma “profesional” al boxeo todavía, y no tenía ningún ingreso, al igual que su madre, que debía quedarse en casa para cuidar de su hermanito recién nacido. Pero todo pedido de ayuda cayó en oídos sordos. Nadie parecía querer juntarse con la familia en desgracia. Nadie, excepto el cura del pueblo. Él decidió alojarlos en el templo, y organizó colectas y pidió ayuda a organizaciones vecinas para suplirlos con lo que hiciera necesario. Y fue en la estadía en la Casa de Dios que el joven Tristán tuvo su “despertar religioso”, como a él le gusta llamarlo. Allí fue donde sintió la llamada del Padre, al cual decidió seguir toda su vida. Fue difícil, su madre quería que se casara y le diera nietos, extendiendo el apellido y demás cosas de las que se preocupan las madres de pueblo. Al final, y con la ayuda del sacerdote local para convencer a su vieja madre, el muchacho logró entrar al seminario.

Grande fue su sorpresa cuando, quince años después, Jacob Pedro Ibáñez, un cardenal famoso por sus varias particularidades, se acercó a él para pedirle que lo acompañara en un viaje, una misión del Vaticano. Tristán había llegado al mismo hace cinco años, para profundizar en sus estudios y en su comunión con Dios, y aunque se había vuelto conocido en poco tiempo por su personalidad alegre y servil, no era la primera persona que se le venía a la cabeza para ser asignado como compañero de tan peculiar ordenado. Y aún mayor fue su sorpresa cuando el hombretón le explicó que también buscaba a alguien a quien impartirle sus conocimientos sobre lo ultraterreno, aquello que la gente llamabra sobrenatural. ¿Acaso él era el adecuado? Decidió dejar entonces todo en manos de Dios, y acompañar al cardenal en su misión. Siempre había que mantener una mente abierta en la vida. De esa manera, uno se enriquecía más. Quien sabía, tal vez el viejo Jacob tenía razón, y aquí ocurría algo que escapaba de la comprensión lógica. Algo que solo podía ser resuelto mediante la fe.

Posición: Discípulo de cardenal