The Hunger Games Nuestra última esperanza.

Para la actividad "Defensores del fuego" que organiza @Fenix Kujo gracias por la actividad y tolerar mi retraso. Se que sabrás quien es <3



Me sacudía en su espalda por la gran velocidad a la que nos estábamos moviendo, huyendo de la neblina que solo daba como resultado una muerte inminente. Sentía su sudor caer por su cuello en el cual me sostenía y sus latidos rápidos en su pecho.

Veo a Katniss enfrente y mi mente se va a volar al día en que me llegó una carta infiltrada en mi caja de anzuelos. Una rebelión para derrocar al capitolio, no había remitente a menos que aceptara la propuesta junto con los demás tributos del distrito. Pero ellos sabían nuestra respuesta de antemano por lo cual habían mandado esto.

Miro afuera por la ventana y veo a un pequeño niño buscar entre mi basura. Una ira me invade, esto es lo que teníamos, miseria, hambre, muerte, enfermedades, decadencia. Todo eso era lo que nos entregaban al nacer y con eso moríamos; si llegabas a ir a la arena no había ninguna esperanza de que regresaras casa.

Sonrío y destruyo la carta como habían indicado en esta, esta era nuestra única esperanza.

Pero nadie esperaba que el vasallaje regresaran los vencedores.

“Como un recordatorio de que ni los más fuertes tienen esperanza, los tributos serán elegidos entre la lista de vencedoras ya existente…”

El plan explotó y un nuevo se elaboró en su lugar, solamente tenía que pasar todo debajo de la tierra. Ella iba a matar a cualquiera que quisiera hacerle algo a Peeta y teníamos que complacerla para que hiciera lo que todos esperábamos, liberarnos, ser el Sinsajo.

Regreso a la realidad cuando Finnick de detiene cuando Katniss no puede seguir porque la neblina la ha alcanzado, le pide cargar a Peeta pero él estaba cargándome a mí.

Sonrío al saber que hacer, todo para poder ser libres. Me acerco a mi adorado rubio y lo tomo del rostro sintiendo su rostro con mis manos, tan suave y cuidado, lo miro a los ojos transmitiéndole todo mi amor y diciéndole que se cuide. Me acerco y le deposito un dulce beso a los labios.

Me alejo sin más y camino hacia la niebla que viene por nosotros, siento la mano de Finnick rosando mi brazo pero me obligo a seguir caminando. El ya estaba bastante afectado y solo era una carga, todos sabíamos nuestro trabajo ahí.

Un estremecimiento recorre mi cuerpo y un dolor en mi pecho se impregna cuando grita mi nombre una y otra vez, entro a la neblina con una sonrisa y siento el dolor más insoportable invadir cada célula de mi cuerpo pero evito soltar algún grito mientras la vida se escapa de mi cuerpo.



Ella era nuestra última salvación, la chica en llamas, nuestro sinsajo.