Mi cristal (advanceshipping y más)

Hola! Hoy les traigo mi primer fic que contendrá: Advanceshipping, GeekChicShipping, Littlebrothersshipping y algo de Belleshipping. Empezemos!
Capítulo 1: Batallas nuevas, suerte nueva


El sol se alzaba por encima de las montañas y un nuevo dia empezaba. Los Pokémon ya salían de sus hogaras y empezaban a aprovechar de un nuevo dia aparentemente normal para todos y cada uno de los habitantes de Ciudad Luminalia. Pero... hoy no era un dia normal como los otros.

En los sectores industriales de las afueras, donde regnaba el olor a comida enlatada y a zumo de baya Meloc, habían construido unos meses antes un edificio gigante que se lo catalogaban como la madre de los estadios. Gigantesco e imponente, el estadio acogeria a nuevas batallas Pokémon en pocos dias. Dentro era aún más imponente: Las gradas se dividian en cuatro; Una zona por pared de el estadio, que era cuadriculado. El campo de batalla ocupaba el centro y varias pantallas gigantes ofrecerían vistas de las batallas a los desafortunados que habian conseguido los peores asientos. Unas puertas pequeñas conducian a los vestuarios y zonas de descanso para los coordinadores.


Aquel mismo dia el estadio estaba abarrotado de jóvenes, y no preisamente para visitar sus instalaciones. Venían para inscribirse a la famosa liga llamada La liga del Cristal.
La cola era tan larga que muy pronto habían descargado nuevas mesas para que todos y cada uno de los aspirantes a la inscripción pudieran realizar ese sueño tan anhelado.


Precisamente había un joven en mitad de la fila que agitaba los brazos, saltaba y de tanto
en tanto pegaba carcajadas. Muchas migas de pan y de otros alimentos le rodeaban y dejaban un rastro que podían conduciar a qualquiera hacia él. Sus cabellos eran de color azabache y terminaban en punta. Una gorra de color rojo regnaba en su cabeza y lucía una chaqueta de color azul, pantalones grises y unas deportivas del mismo color que su gorra. Un Pikachu reposaba en su hombro


El joven parecía bastante entusiasmado por el hecho de estar a punto de inscribirse. A lo mejor después de esa competición podría cumplir finalmente su sueño: Ser un maestro Pokémon. Desde el momento en que inició su travesía en Pueblo Paleta tenía claro que algun día sería un auténtico entrenador, de esos invencibles y que sorprenden. Lo intentó mucho tiempo, participó en todas las ligas, siguió adelante, conoció a personas maravillosas y lo mas importante: Hasta en los peores momentos, sonreía y decia “Estoy bien”. Quizás era su optimismo el que le había llevado tan lejos.


Después de que un chico moreno terminara con el papeleo, dio un paso adelante. Estaba
muy feliz, ya que finalmente era su turno... O eso se suponía. Camino hacía delante y pisó una cosa blanda. . Sorprendido, agacho su mirada para averiguar que era lo pisado... Pero lo descubrió antes de verlo. Un Fennekin saltó inmediatamente y le lanzó un lanzallamas al azabache. Su cabello quedó quemado y su ropa se ensució y quedó medio carbonizada. ¿Pero a quien le pertenecía ese Fennekin?


Una chica de cabellos marrones largos llegó corriendo. Se agachó ligeramente y tomó al Pokémon de tipo fuego, para luego estrecharlo entre sus brazos:


—¡Oh, lo siento mucho! Fennekin tiene esos arranques a veces, no lo ha hecho a propósito, lo prometo.— dijo la castaña, que lucía un sombrero rosa , camisa, falda roja, medias y unas deportivas.


Ash se levantó lentamente y miró a la joven. ¿¡ Pero si ella era...?!

—¿¡Serena?! Que bien volver a verte!— Dijo el azabache mirando a la chica.


—¡Ash! Ha pasado mucho tiempo. Desde que ganaste la liga Kalos y yo decidí convertirme en una Modelo Pokémon— dijo Serena estrechando la mano con su antiguo compañero.


—¡Si! Es cierto. Pero, ¿tu también te has venido a inscribir?— Dijo el chico confundido rascándose la cabeza.


—No, yo he venido a acompañar a una amiga mía. En esta liga también habrán combates de concurso así que mi amiga decidió venir, y yo la acompañaré. Así podré lucir mi nuevo traje de animadora.—


—Hmm, ¡suena bien! Me gustaría conocerla. De seguro es una buena coordinadora.


—Si, es muy buena coordinadora, y quiere mucho a sus Pokémon. ¡Imagínate que ganó el Gran Festival de Johto! —Dijo Serena mientras los ojos le brillavan. Claramente, sentía admiración por su amiga.


—Disculpad. —La recepcionista, que llevaba rato esperando a el azabache, se había enfadado por la espera y decidió abrirle los ojos un poco.— Deberías inscribirte, joven.


—Oh, disculpe,ahí voy. Adiós, Serena. ¿Después me puedes presentar a tu amiga?


—¡Oh, claro! ¡Nos vemos! —Dijo la castaña observando al azabache alejarse y disculpándose con la recepcionista, bastante enfadada por el retraso.


—Esa chica que te presentare... —dijo Serena —Tu ya la conoces, Ash.

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—¿De veras quieres hacer esto?


Una chica de cabellos naranja recogidos en una coleta por encima de la cabeza caminaba por Ciudad Luminalia estrechando entre sus brazos a un Marril. Miraba expectante a la chica de cabellos azules que caminaba a su lado, que tenía la cara enganchada a una tienda de ropa. Maniquís en los escaparates lucían vestidos de tonos rosados y azules. Algunos largos, otros muy cortos. Pero todos con sombreros a juego.


—Vamos, Misty, no me digas que estos vestidos no estan lindos. Me sentirian de maravilla.—Dijo la peli azul haciendo poses como si una cámara de televisión la grabara.


—No digo que no, pero deberías ir a inscribirte para la Liga Cristal, se te hará tarde.— Su Marril asentió con la cabeza a la peli azul.


La peli azul, que aquel día lucía un gorro blanco, bufanda rosa y un vestido de tiras negro le ignoró completamente y se metió en la tienda. De seguro sería una mañana muy divertida. Su amiga Misty suspiró y la siguió. Le esperaba una mañana muuy larga...

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Serena y Fennekin se dirigieron a un banco algo alejado del estadio, justo al lado de una máquina expendedora .Allí, una chica de cabellos marrones cortos estaba sentada mientras se comía un bocadillo de queso fundido. La chica del gorro se acercó sonriente y se sentó a su lado.

—¿Los nervios te traen hambre, eh? No te preocupes, todo va a salir bien. —Dijo la chica del sombrero sonriendo a su amiga. Ella le conrrespondió la sonrisa.


La chica lucía una pañoleta roja como un lazo por encima de la cabeza, una camisa roja, deportivas y unos pantalones cortos negros, además de una bandolera atada a la cintura. Poseía unos ojos de color zafiro y una sonrisa de bondad muy bonita. En sus rodillas reposaba un Swablu dormido. Había tenido un entrenamiento duro.


—Muchas gracias, Serena. Es solo que después de tanto tiempo sin participar en concurso me siento un poco insegura... Pero sé que todo irá bien. Gracias a tu apoyo, Serena.


La Fennekin de la chica le miró ofendida, como si desde un principio hubiera sido invisible para la Princesa de Hoenn, o May Balance. La chica de la pañoleta le sonrió a la Pokémon y la agarró en brazos:


—¡Y también gracias a Fene- fene!


La coordinadora fue la primera en soltar una larga carcajada, para que después la Modelo Pokémon se le uniera, sonriendo como no lo hacían desde hacía mucho tiempo.

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El azabache ya había terminado de el papeleo. La recepcionista le había reñido mucho y le había atendido de mala gana, básicamente porque tenía a muchos entrenadores esperando y había perdido unos veinte minutos para solo un entrenador. Había recibido instrucciones para ir rápida, pero no lo había hecho...


—Vaya, Pikachu, la competencia sera dura. ¡ Solo se pueden inscribir personas que hayan participado en dos ligas o Gran Festivales! Todos lo tendremos duro...¡Pero todo irá bien!——Dijo el azabache sonriendole a su compañero. Él,obviamente, hizo lo mismo.


—Pika, pika!— Dijo el ratón eléctrico señalando la máquina expendedora.


—Claro! Iremos a buscar algo de comer, ¿estas hambriento, no?


El azabache se dirigió con paso firme hacia la máquina, pensando en que comería: ¿Unas galletas saladas? ¿Un dulce de chocolate? Pikachu miraba a su entrenador suspirando:En esos momentos, lo unico que le pasaba por la cabeza era la comida. ¿Tan dificil era tomar la decisión en el momento de comprarlo? Tan difícil era su decisión que ni siquiera había prestado atención a las dos chicas que esataban sentadas en el banco y conversaban tranquilamente. Fennekin al ver a Pikachu, su amigo con el que viajó por Kalos se alegró y se acercó hacia donde estaba el. Pikachu saltó del hombro de su entrenador y empezó a jugar con la Pokémon de tipo fuego.


—Pikachu, ¿conoces a este Fennekin?— Dijo el azabache mirando algo escéptico al Pokémon.— Espera, este Fennekin me suena mucho...


Serena, que estaba ocupada hablando con May, no se dió cuenta de que su Pokémon sehabía ido a jugar con Pikachu, así que se alarmó cuando no la vio en sus rodillas.


—¿¡Donde está Fennekin?!— Exclamó la chica del sombrero alarmada.


—¡Tranquílizate, Serena! ¿No la metiste en su Poké-ball?

La chica de la falda reviso en su mochila y sacó la Poké-ball de Fenekkin, pero, en efecto,estaba vacía. Su cara se puso pálida como la leche Mu-mu. ¿Que había sucedido allí?


—Tampoco está ahí —dijo la modelo de Pueblo Boceto


La coordinadora miró a todos lados. Finalmente reparó en el Pikachu junto a el Pokémon, y suspiró tranquila. Pero el corazón le latió ligeramente al pensar a quien le podía pertenecer ese Pikachu. La modelo se dió cuenta de que May estaba ruborizada mientras miraba a otra dirección e hizo lo mismo: Ahí estaba su Fene-fene, junto al Pikachu de...


—¡Ash!— Serena se acercó y agarró a su Pokémon en brazos


—Hola, Serena. Este era tu Fennekin, por lo que veo. Hace mucho que no le habia visto.


—Desde que nos separamos, para ser exactos. — Dijo la castaña acompañada de una risa suave como una nube.


La chica de la pañoleta se acercó lentamente. ¿Era acaso aquello un sueño? ¿Su amigo estaba realmente ahí? Llevaba mucho tiempo deseando verle, después de verle en Sinnoh hablaron poco, para después finalmente perder el contacto, dios sabrá porqué.

—Hola Ash. Ha pasado mucho tiempo...— dijo la coordinadora saliendo de detrás de la espalda de Serena.


—Si, ya hace mucho, desde que tu ya no me llamaste más dijo el azabache tendiendole la mano. Con sorpresa, May no le dió la suya. Le miró con una expresión extraña, entre confundida y enfadada. ¿Que habia dicho Ketchum? ¿Que ella había...qué? Y se lo dejó bien claro:


—Te equivocas completamente. Tú fuiste el que no me llamaste más. Yo te llamé, pero no lo cogías. Pensé que te había sucedido algo.


—Fue al revés. Yo te llamé, y nada. Así que seguí adelante con mi vida. No me iba a detener por algo como eso.


—¿Estas diciendo que nuestra comunicación era una tontería?— Dijo la castaña muy sentida.


Serena y Fennekin miraban a ambos mientras discutían. ¿Pero que había sucedido? No era normal ver al azabache hablando tan fríamente, como si no tuviera sentimientos. “No puedo dejar que sigan así” pensó Serena antes de dar un paso en medio de los dos.


—¡Deteneos! ¿Pero que sucede aquí? ¿Vais realmente a discutir por esto?


La castaña miró a otro lado claramente enfadada y muy sentida.


—Me siento muy mal porque ha considerado que hablar conmigo era una tontería...— dijo la castaña antes de romper a llorar y salir corriendo del lugar. El azabache la miró triste.
Se sentía fatal: Había hecho llorar a May y para postres, Serena le había mirado muy mal y había salido corriendo detrás de la coordinadora


—Vaya, Pikachu —dijo el chico apellidado Ketchum A una chica con pocas palabras la puedes poner muy mal.


Su fiel amigo le miró con una expresión de “Ya lo sé” para después comer una manzana que había cojido de un árbol. Su entrenador le miró sonriente y se sentó para pensar que haría ahora.

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—¡Fue una mañana taan divertida!

Misty Waterflower se encontraba sentada al lado de su amiga Dawn en un taxi. Habían pasado toda la mañana de compras. La prueba era solo ver la infinidad de bolsas que la rodeaban: Alrededor de quinze!

—No sé si era necesario comprar tanto...—dijo la chica de ciudad Cerulean.

—Lo es. Si no, no me veré bien para los concursos.

Waterflower estaba a punto de protestar pero el taxi se detuvo delante del estadio. Dawn bajó del taxi mucho antes de que este frenara. Estiró los brazos y miró el paisaje. Bonito lugar para celebrar una competición tan importante como la de esos días. Su Piplup estaba en el suelo a su lado y miraba, igual que la coordinadora de Sinnoh, al estadio.

—¡Vaya, pero si es Ash!—dijo la chica de pueblo Hojas Gemelas para despues correr hacia él.

El susodicho levantó la mirada al escuchar que alguien gritaba su nombre. Bertliz llegó corriendo en pocos instantes y se detuvo muy sonriente delante de Ash.

—¡Ash, que bueno verte! ¿Pero que ha sucedido? Pareces preocupado—dijo la chica del gorro blanco dtendiendole la mano— Sabes que puedes contar conmigo para lo que sea...

—Hola Dawn. Es que discutí con May... ¿Me puedes ayudar?

La coordinadora de Sinnoh le miró muy sorprendida. ¿Ash había discutido con May?
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Sé que quizás el capítulo ha siudo corto pero el próximo sera mas largo lo prometo! Responded a estas preguntas porfavor! ¿Dawn encontrará la manera de reconciliar a Ash y a May? ¿Como reaccionará May cuando descubra que Dawn y Misty han llegado? ¿Y Serena? Gracias por llerme!

Capítulo dedicado a Steve Stone, por sus consejos, ayuda y por ser la inspiración de este fic con el suyo. Gracias, Steve-o!