La Leyenda de Estefani

Tema en 'Novelas Terminadas' iniciado por Ruriel, 3 Julio 2011.

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    GaaRa De La AreNa

    GaaRa De La AreNa Iniciado

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    wow ¿en serio? este fic esta buenicimo...es genial, en una sola pala ¡¡SUGOI!!
    no noto errores ni nada, bueno tanpoco digo que se soy pesima para eso, como el error que una vez puse, y luego no supe como quitarlo por que ya lo habia publicado, jajja gracioso, pero bueno, como no se muy bein, como ba la historia ya que aabo de leer el primer cap... ire desde el principio hasta el final, despues de todo, todo tiene unprincipio y un final, bueno ya me voy ¿vale?;)
     
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    Navaja

    Navaja The best people in life are free

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    Waaaw! Cada vez esta historia me gusta más *-*

    Ay, la verdad se me hizo MUY corto el capítulo >.< Quiero saber qué técnica usará Michelle *-* Ay, es una de las personajes que más me gustan de todas las historias que he leído <3 (que no son poquitas) y ese beso que le dio a Gerardo!!! *-* Que valiente y lo hizo en el momento preciso ay!! . Generalmente no me pongo tan eufórica por estas cosas, pero tu historia emana algo que me atrapa por completo :)

    Bueno, solo espero que resulten bien y que ese Silarus deje de ser tan invencible e_é.

    Oye, aunque tu historia es fácil de llevar,me faltan piezas que encajar. Por ejemplo: Estefani es la principal, hermana de Michelle y amiga de Gerardo, muy tranquila y la principal de la historia pero ¿qué mas? Agradecería que me dieras un resumen de la historia :)

    La leeria completa pero empiezo el colegio dentro de unos dias (4 en especifico) y no puedo pasar tanto rato en el Pc por problemas visuales. Bueno, ¿que dices?
     
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    Ladron de Musas

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    Hooola aqui haciendo acto de prescencia,Grrr la Universidad cada vez me quita mas tiempo,gracias por recordarmelo,me gusta mucho como se va desarrollando esta batalla aunque los cap se me estan haciendo muy cortitos les has dado un buen toque,sobre todo la quimica entre Michelle y Gerardo,vaya que este Silarius les esta dando batalla,no basta que te digan que no eres un estorbo,la situacion empeora cuando una persona que se supones deberias ayudar termina haciendo tu trabajo tambien solo que cuando queremos corresponder a veces terminamos regandola mas...espero no sea este el caso

    Am la escena del beso fue un detalle cool!,a mi no se me dan muy bien pero lo intento XD XD Avisame cuando subas el proximo,por cierto estoy preparando algo con respecto a este fic espero te guste y que tambien ayude a que no tires la toalla en cuanto a continuarlo
     
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    yanin

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    Hola Souma Oogami una disculpa por no pasar antes pero la verdad no tenia computadora pero acabo de leer todos los capitulos que dejastes y gracias por avisarme la verdad estuviueron muy interesantes los capitulos, esto cada ves se pone mas intrigante y las peleas muy buenas por cierto, yo nunca me omagine que Gualon tuvo en sus tiempos una vida feliz y una familia que amaba demasiado , por todo lo que paso guardo tanto rencor en su corazón haciendo el mal.
    No puedo creer que Michell al fin le confeso sus sentiemtos a Gerardo y mas que nada demostrandoselo con un beso, que emoción.:confused:

    la verdad no vi falta de ortografia;) solo en el nombre de Elizabeth que tu lo escribiste con "s" y es con "z" solo eso, como siempre esperare el siguiente capitulo como siempre y gracias por avisarme.

    salu2:p
     
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    Ruriel

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    La Leyenda de Estefani
    Clasificación:
    Para todas las edades
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    CAPITULO XLIX: LA EXTRAÑA COMBINACION CONTRA LOS ATAQUES COMBINADOS




    La princesa se movilizo a dúo con Gerardo para atacar a Reim, que estaba utilizando las técnicas secretas de sus compañeros Silarus. Las corridas en zigzag lograban generarle algo de confusión al demonio, aunque este contaba con la súper velocidad de Mistelis a su favor.


    — Es inútil, sus movimientos quizás estén más sincronizados, pero todavía tengo la ventaja.


    — Vaya, estoy sorprendida. Has mejorado en un abrir y cerrar de ojos tu agilidad.


    — Creo que comienzo a entender la forma de pelear que tienes, eres buena maestra.


    — No es tan así, yo no he hecho nada del otro mundo. — Le respondió muy avergonzada.


    — Ese es el poder del amor. — Agrego el conejo que estaba colgado de los cabellos de Michelle.


    — ¡Cállate Fellow! — Dijeron los dos que se morían de la vergüenza.


    —Creo que es hora de que pongamos en marcha nuestro plan Gerardo.


    —De acuerdo, estoy listo.


    — Y recuerda que solo tienes que entretenerlo, no quiero que te arriesgues más de la cuenta.


    —Si mi lady. —Respondio él en tono de chiste.


    —No lo tomes a broma, te hablo en serio.


    — Jaja, lo siento, es que digo tonterías cuando estoy nervioso.


    — Y tu Fellow, quiero que te ocultes en algún lugar lejos de aquí. No puedes estar todo el día prendido de mi cabello.


    — Si señorita. — Respondía llorando.


    — Y deja de llorar por favor, no puedo creer que hayas acompañado a Randall en sus batallas.


    —Es que con él me sentía mas seguro, tengo mucho miedo.


    — Pues gracias por tu apoyo Fellow, me alegra la confianza ciega que tienes por nosotros. Para tener amigos como tú para que quiero enemigos.


    De momento el cobarde e inservible y no sé que mas calificativos darle a Fellow, se retiro a un sitio apartado del campo de batalla, lo suficiente alejado como para estar a salvo de cualquier peligro que pudiera haber.


    Michelle por su parte se puso a recolectar energía vital, la cantidad más elevada que pudiera juntar como para poder usar a la perfección su nueva técnica. En tanto Gerardo sería el encargado de mantener ocupado a Reim, hasta que su compañera estuviera lista su carta de victoria.


    — ¿Que significa esto?, ¿porque me enfrentas tu solo?, no sé qué planearan hacer pero no les resultara. — Viendo que solamente el chico se ponía en posición de pelea contra él.


    — Yo le pedí a la princesa que me deje pelear contra ti, espero no te moleste Reim.


    —Kukuku, que gracioso eres chico. No entiendo que puedes tener de especial, pero me han dicho que no debo matarte.


    — ¿Qué?, ¿De qué hablas?


    —No conozco bien todos los detalles, pero si puedo afirmarte que tanto tu como esa chica Estefani tiene algo que Gualon quiere.


    ¨ ¿Mi hermana y Gerardo? ¨— La morena seguía concentrando su energía pero escuchaba la charla.


    — No sé de qué me estás hablando. Mejor dedícate a pelear. — El débil muchacho, como nunca antes lo había hecho se animaba a enfrentar a un enemigo poderoso como Reim, y le desafiaba a luchar.


    —Si tanto lo deseas…¨ Fuerza de la naturaleza¨ — El Silarus invoco a varias fieras salvajes sedientas de sangre, era la misma técnica que usaba Fuldac.


    — Cuantos animales salvajes, me tienen acorralado. — Veía que no había ningún lugar para escapar, debería eliminarlos para salvarse.


    — Vamos jovencito, ¿En donde esta ese valor que tenias hasta recién?


    Mas allá de la situación, Michelle no podía moverse, aún faltaba más tiempo para que estuviera lista su nueva técnica.


    ¨Maldición, aún no estoy lista. Aguanta un poco mas Gerardo, por favor no vayas a darte por vencido.¨


    Los tigres y leones se abalanzaron sobre Gerardo de uno en uno. Ante esto él fue esquivando y golpeando con sus piernas el cuerpo de las bestias. La fuerza que había adquirido el joven durante su entrenamiento con Randall era la suficiente para vencer a estas incontrolables criaturas.


    De a poco la cantidad de animales salvajes iban disminuyendo a medida que Gerardo las derrotaba. Pero la fatiga al igual que a Michelle, le empezaba a jugar una mala pasada al muchacho.


    — ¨ Ataque explosivo, armas infernales.¨ — Ahora le tocaba el turno a las famosas habilidades de Vaduan en usar todo tipo de armas de fuego para eliminar a sus enemigos. Aunque a diferencia de la armería humana, estos artefactos de guerra tenían un poder de destrucción diez veces más grande.


    El humano ahora debía evadir las balas y granadas arrojadas por Reim, inclusive evitar ser alcanzado por el fuego de su gran cañon.


    — Esto ya es mucho para mí, por favor Michelle date prisa. — Corría más que un maratonista para no ser herido por esas armas de fuego tan peligrosas.


    Luego de balas y cañonazos, Reim decidió dejar de emplear esa manera de luchar y tratar de eliminarlo de otra forma diferente.


    — Ya empieza a molestarme lo testarudo de este muchacho. Nunca hubiera creído que aguantaría tanto.


    —Ah, Ah, ¿algún otro truquito…Reim?


    —No te pases de listo imbécil, tú poder no se compara en nada al mío, ¨Espada de cristal. ¨


    —Un momento…Hey, esa es la técnica de Morgana, ¡Deja de usar los trucos de los demás!


    —No digas tonterías, para que lo sepas, todas estas técnicas las invente yo. Los otros inútiles a los que denomine Silarus, fueron creaciones mías. Lamentablemente ellos no satisficieron mis expectativas, así que supongo que debo agradecerles que los hayan eliminados.


    — Como te atreves, ¿esa es la forma de hablar de tus compañeros? — Sentía bronca de oírlo decir eso de sus camaradas, aunque fueran ellos sus enemigos, él creía que no merecían que hablaran de esa forma de los Silarus.


    — No te pongas tan sensible niño, ellos eran humanos mitad demonios, en realidad ninguno valía para nada.


    — ¿Cómo?


    — Aún puedo recordarlo. Cuando comencé a reunirlos, recuerdo bien que cada uno de ellos venía de una vida miserable, llena de sufrimiento y dolor. Lo único que hice yo fue darle la oportunidad de que se hicieran valer en base a sus poderes sobrenaturales, de esa manera obtendría el respeto y podrían vengarse de los humanos quienes le habían arruinado su existir, pero…como todos, un demonio que su mitad conserva algo humano, siempre esa parte de humanidad tendrá esos malditos sentimientos que te debilitan y hacen que seas imperfecto.


    — Que… ¿seres como tú son la perfección absoluta?, debes estar bromeando.


    — Así es, seres como yo no está atado a ningún tipo de lazo con nada ni nadie. Seres como yo se dedican exclusivamente a incrementar su poder día con día, con el fin de llegar a la perfección absoluta. Por eso mismo no perdonare a aquellos que no se guien según mis normas, como por ejemplo esa traidora de Morgana.


    — ¿Eh, Morgana?


    — Si Morgana. No pongas esa cara de sorpresa muchacho. Sé muy bien que ella se ha desviado completamente de las ordenes que recibió de mi parte, y no solo eso, también se que ella te ayudo a huir de aquel precipicio, ¿no estoy en lo cierto?


    —Si ella hizo eso ha sido porque finalmente reacciono y decidió tomar sus propias decisiones.


    — Ja, que tontería. Igual eso ya no me preocupa.


    — ¿Por qué dices que ya no te preocupa?


    — Aquel que no cumple conmigo será exterminado, por eso mismo en estos momentos alguien ha sido enviado a encargarse de ella. Espero que pudieras saludarla, porque esa habrá sido la última vez que la hayas visto con vida.


    En otro punto del inmenso reino de Sefiro, la princesa de Rilan, Morgana, efectivamente fue interceptada por uno de los aliados de Gualon.


    — Yo te conozco, te llamas Madagar, ¿No es así?, eres uno de los gusanos de Gualon.


    —Que bueno que me recuerdes, será lo último que veas antes de morir.


    —¿Ah sí?, no creo que la tengas tan fácil como crees.


    — Trataré de no hacerle demasiado daño a tu bello rostro, princesa Silarus, Morgana.


    ¿Tendrá que pagar el precio de su traición o saldrá con bien de esta pelea?




    PROXIMO CAPITULO: LAS PUERTAS DEL ARES SE ABREN, LA PELIGROSA TECNICA DE MICHELLE
     
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    yanin

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    wow!!! estuvo muy interesante el capitulo ahora fue el turno de Gerardo de pelear, la parte donde se me hizo gracisos fue donde Fellow esta llorando porque nose siente seguro con M ichell y Gerardo:D
    Ahora m dejaste con la intriga que le ira a pasar a Morgana por a ver traicionado a Reim pues esperare el siguiente capitulo como siempre.

    salu2;)
     
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    Ruriel

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    CAPITULO L: LAS PUERTAS DEL ARES SE ABREN, LA PELIGROSA TECNICA DE MICHELLE




    Teniendo en cuenta la dimensión del poder de su rival, la princesa Michelle tomo la decisión de emplear la técnica más poderosa que conocía. Su compañero Gerardo había estado de acuerdo con esto, aun desconociendo la peligrosidad de tal poder oculto.


    Gerardo por su parte estaba tratando de mantener ocupado a Reim, haciéndolo de muy buena manera por cierto. De todas formas la situación empezaba a complicarse ahora que el líder Silarus se había enfadado de verdad, debido a la tenacidad del joven.


    Reim ataco a Gerardo con la espada de cristal negro, la técnica que suele utilizar Morgana. El movimiento de un lado a otro del arma era muy ligero y difícil de esquivar para el chico, que a duras penas lograba evadirlo.


    —No haces más que esquivar ataques, ¿Solamente eso sabes hacer?


    —En vez de preocuparte por mí, deberías intentar tocarme con tu arma Reim.


    —Jeje, niño tonto. — La espada de cristal emano una fuerte energía que daño el pecho de Gerardo. El golpe fue tan cercano a su corazón, que solo milímetros lo separaban del mismo.


    — ¿Qué fue eso? — Se preguntó mientras se tocaba la herida.


    —Eso te pasa por confiarte, ¿Pensaste que soy el líder de los Silarus solo por capricho?, tú que eres apenas un inexperto en las peleas, ¿Creíste que tendrías alguna mínima posibilidad contra mí?


    ¨ Estoy en problemas, ya no sé cómo detenerlo.¨


    De a poco la morena estaba consiguiendo reunir la energía suficiente para usar su nuevo poder, ya no le quedaba demasiado tiempo, Gerardo en verdad se encontraba en apuros.


    —Pobre Gerardo, ya su resistencia se está acabando. — Ella comenzaba a desesperarse. No podía perder la concentración, pero tampoco podía dejar de pensar en el bienestar de su amigo, mucho menos ahora que al fin había logrado confesarle lo que sentía.


    —Prepárate niño. — La espada de cristal negro iba a atravesar el malherido cuerpo de Gerardo, hasta que un misterioso campo de protección salió de la nada.


    — ¿Qué es esto, una barrera de protección?


    —Eso es…es la misma barrera que me protegió aquella vez cuando estaba encerrado con Morgana.


    —¨ Estoy seguro que he visto este tipo de protección en alguna otra parte.¨ — Reim trataba de hacer memoria, le encontraba algo familiar a esa misteriosa barrera protectora. — Ahora lo recuerdo, esta protección es la que usaba ese rey que nos encerró en el inframundo.


    Gerardo estaba más confundido que Reim. Esta misteriosa energía que lo había protegido, que ya antes estuvo presente para cubrirlo de aquel derrumbe de piedras. Descocía por completo el origen de ese raro poder, ¿De dónde provenía?


    Había llegado el momento, ya Michelle estaba lista para usar su nueva técnica.


    — ¡Gerardo, ya es hora!


    Esa voz que le señalaba haber logrado su cometido pudo aliviar al muchacho, que ya no daba más en esa pelea tan desigual.


    —¨Gracias Michelle, me has salvado la vida¨. — Pensó Gerardo en su interior.


    El chico se alejo de Reim y fue hacia donde se encontraba Michelle.


    — ¿Te encuentras bien?, perdóname por haber tardado tanto. Aunque me sorprende lo fuerte que te has hecho, has logrado estar a la par de Reim.


    —Fue cuestión de suerte. — Aún pensaba en lo último que ocurrió con la barrera de luz de protección.


    —Suerte…eso vamos a necesitarlo ahora, te confieso que es la primera vez que haré esta técnica. Todavía no estoy segura de que vaya a funcionar.


    —Ya en varias ocasiones has demostrado de lo capaz que eres, se que todo resultara bien.


    La princesa se ponía feliz cada vez que Gerardo le hablaba de esa manera a ella, demostrándole toda la confianza que le tenía.


    —Me siento contenta….hace ya mucho tiempo que no estaba como lo estoy hoy en día. Sé que eso se debe en gran parte a ti.


    El miraba esos bellos ojos celestes de la morena, que deslumbrarían a cualquiera que la viera. Más allá de que en su corazón prevalecía ese fuerte cariño por Estefani, no podía negar que Michelle tenía su propia luz, que la hacía ver verdaderamente hermosa en todo sentido.


    — ¿Te pasa algo? —Le pregunto al notarlo con esa expresión seria.


    —Es que…


    —Si lo que quieres decirme está relacionado con el beso que te di, va a ser mejor que lo olvides.


    — ¿Olvidarlo?, ¿entonces también era mentira lo que me dijiste?


    Ella estaba callada y con la energía que había reunido alrededor de su cuerpo.


    —No…lo que te dije…es lo que en verdad siento.


    — ¿Pero entonces?, ¿Por qué me pides que lo olvide?, no lo entiendo.


    —Gerardo, no es momento de hablar de eso, Reim va a atacarnos en cualquier momento. — Estaba cansada de hablar sobre el asunto y quería darlo por finalizado.


    El joven no quería seguir insistiendo con el tema, ya que ella tenía razón, no era el momento para hablar de eso. De cualquier forma él se sentía algo triste por no conocer completamente la mentalidad ni el accionar de Michelle.


    Michelle no era ninguna tonta, y ella conocía el malestar de él, como no darse cuenta de que algo lo podía incomodar o poner triste, si se trata ni más ni menos de la persona que ama.


    —No te pongas así, no me gusta verte triste. — Gerardo seguía cabizbajo y decepcionado en cierta manera.


    —Está bien Michelle, no debo entretenerte con este tipo de asuntos, tienes razón no son de importancia.


    —En eso te equivocas, ya que mi amor por ti…es muy importante.


    Reim no toleraba el que lo hicieran esperar, ya estaba arto de todo. Más que sentía algo de frustración por no haber derrotado a Gerardo, un novato total en esto de las peleas.


    Con toda esa furia acumulada salió en busca de los adolescentes, que al ver que este se les acercaba se pusieron en alerta.


    — ¡Ahí viene! —Grita Gerardo.


    —Bien…aquí vamos entonces.


    La técnica de Michelle se puso en marcha. La energía tan poderosa que cubría el cuerpo de la princesa desplegaba una luz que se la podía confundir con el fuego. No por nada, todas las técnicas de la chica estaban relacionadas con ese elemento, y esta que iba a usar no era la excepción.


    xXx​
    El maestro de los muchachos estaba por irse de su placentero hogar, era el momento de que él tuviera un papel más importante en esta batalla y no solo quedarse a esperar.


    — ¿A dónde vas Randall? — Nasha observaba como el maestro se ponía su traje de combate, incluida su típica capa de color blanco.


    —Veras Nasha, yo como el maestro en combates que soy, no puedo permitir que mis discípulos tomen esta batalla como suya propia. Yo también debo aportar algo para que consigamos la victoria sobre Gualon.


    —Sí, tienes razón en eso, ¿Pero qué piensas hacer?, ¿Acaso iras al castillo de Gualon?


    —No, eso si debo dejárselo a los chicos, sobre todo a Estefani. — Se puso serio como nunca antes lo había estado. — Sabes, la posibilidad de vencer que tenemos, recaen en gran parte en los hombros de Estefani.


    — ¿Entonces de que formas planeas ayudarlos?


    —Pues iré a detener al ejército de demonios que seguramente se dirigen aquí a Ideya. Estoy seguro que la mayoría de los habitantes de los demás poblados vendrán a este lugar en busca de la protección de los guerreros de aquí.


    —Así que es eso, entonces yo también iré.


    —Temí que dirías eso, pero teniendo en cuenta la situación, va a ser un honor volver a pelear a tu lado.


    —Como en los viejos tiempos Randall. — Dijo Nasha entusiasmada.


    —Es verdad, será…como en los viejos tiempos.


    xXx​
    Del suelo comenzaba a salir fuego, con mucho impulso las llamas se elevaban del piso generando un calor infernal.


    —Ya ha empezado…este es el nuevo poder de Michelle.


    — ¿Que está pasando?, esa princesa está desplegando mucho poder, además este lugar se está pareciendo mucho al inframundo de donde vinimos.


    —Estate listo Reim, ya he abierto todas las puertas del Ares. Es hora de que sientas la fuerza de mi nuevo poder, ¨ Inferno¨.


    Los ojos de la princesa tienen el mismo brillo de las llamas.




    PROXIMO CAPITULO: HACIENDO LO CORRECTO
     
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    Yazkara

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    ¡¡¡¡HOLAAA!!!!!

    Disculpa la tardanza pero me quede sin internet, sorry.

    Me alegra mucho saber que Mechelle confeso por fin sus sentimientos a Gerardo. Y que este tenga mas confianza en si mismo para poder atacar al mas peligroso de los Silarus.

    pero la parte mas divertida fue:

    — Y deja de llorar por favor, no puedo creer que hayas acompañado a Randall en sus batallas.


    —Es que con él me sentía mas seguro, tengo mucho miedo.


    — Pues gracias por tu apoyo Fellow, me alegra la confianza ciega que tienes por nosotros. Para tener amigos como tú para que quiero enemigos.

    me pareció comico imaginarme un conejo llorando y el modo de decir que no confía en ellos del todo.

    Aun que la in prudencia de Gerardo es un factor a su favor.

    Espero que el ataque de Michelle sea lo bastante poderoso como para derrotar a Reim sin salir herida o peor.

    Por otro lado espero saber mas de los demás héroes, hace un tiempo que no sabemos de ellos y seria bueno.

    En mi ultimo comentario te dije que trataras de escribir con mas detalles y de una sola forma. A lo que tu contestaste que ``los capítulos ya los tenias escritos desde hace un tiempo´´, te puedo decir que no hace daño revisar, corregir y aumentar antes de subir los capítulos, pero solo es un consejo, comentario o como lo quieras tomar, solo te lo digo para poder disfrutar aun mas de tu historia.

    Espero saber de ti pronto, cuidate mucho y disfruta de la vida.

    oxoxoxoxo

    atte

    YAZZZZZZZ
     
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    Ruriel

    Ruriel Usuario común

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    CAPITULO LI: HACIENDO LO CORRECTO




    Madagar se interponía en el paso de la Silarus Morgana. Las órdenes eran claras, eliminar a la traidora.


    — ¿Así que a ti te corresponde matarme?


    —Créeme que va a ser placentero para mí. Desde que los volví a ver, había estado deseando acabar con ustedes. Afortunadamente la mayoría de tus hermanos resultaron ser débiles y murieron en manos de esos humanos. Solo quedas tú y Reim.


    —Acepto que digas cualquier cosa de mí, pero no te perdonare que hables así de mis hermanos.


    —Qué curioso que digas eso, tú que acabas de traicionarlos dejando ir a ese joven humano, en verdad eres una descarada.


    — ¡Yo no los traicione!, solo…que necesito creer en algo más.


    — ¿Creer?


    —Cuando yo mate a mi padre, desde ese momento mi vida como ser humano había acabado. Todas las ilusiones de tener una vida sencilla pero feliz se habían desvanecido por completo. Lo que más me dolía era que pese a todo el mal que mi padre me hizo, yo aún lo seguía amando. No lo entendía, no me explicaba porque él hizo lo que hizo. Fue después de eso que apareció Reim, con él obtuve poder o mejor dicho, aprendí a usar esa fuerza escondida que tenia dentro de mí. Pensé que era la oportunidad de cambiar mi vida en base a la venganza, me sostuve con esa idea hasta hoy, hasta que lo conocí… a ese chico…


    Morgana recordó la forma desinteresada en que Gerardo la protegía de las rocas con la barrera de luz, cuando cayeron al precipicio. No lograba entender del todo la mentalidad del muchacho, su comportamiento tan amable con alguien que se suponía era su enemigo.


    Flashback:


    Era ya un tiempo que había pasado desde que los Silarus se habían dado a conocer en gran parte del reino de Sefiro. Sus atrocidades eran muy conocidas, y eran los enemigos más crueles que existían por eso tiempos.


    Estando en uno de los tantos pueblos que estaban arrasando, Fuldac se encontró con un anciano que abrazaba a su pequeña nieta quien temblaba de miedo.


    —Que imagen tan conmovedora, no se preocupen voy a terminar con su sufrimiento. — Iba a arrojar su ataque contra ellos dos de no ser que Morgana lo detuvo de un grito.


    — ¡Espera!


    — ¿Qué pasa Morgana?, ¿Por qué me detienes?


    —No lo tomes a mal Fuldac, es solo que detesto la forma de matar que tienes, es muy desagradable.


    — ¿Y qué tiene de malo mi manera de matar, si se puede saber?


    —Nada en especial…solo que es lamentable, no tienes nada de sutileza.


    — ¿Ah no?, y que… ¿Tú tienes más clase que yo?


    —Claro que sí.


    —Demuéstramelo entonces.


    El anciano y la pequeña seguían temblando del susto mientras Morgana y Fuldac se dirimían en quien se haría cargo de ellos.


    —Ya es suficiente Fuldac, después de todo a ti te gustan más las presas difíciles. No creo que un viejo y esta niñita sean lo que más se acople a tus preferencias, ¿Me equivoco?


    —Bueno, supongo que en eso tienes razón. — Viendo a sus dos presas que se veían tan vulnerables.


    —Entonces que no se hable más, yo me ocupare de ellos. Sería mejor que tú vayas al lado sur de este pueblo, creo que allí había varios jóvenes bastantes fuertes, estoy segura que con ellos te divertirás más.


    —Está bien, pero espero que los hagas sufrir un poco Morgana. Asesinar de forma rápida no tiene nada de gracia.


    —Sí, Si, lo que digas…


    Luego de lo acordado, Fuldac se retiro de ahí, dejando a Morgana para que eliminara a esos dos indefensos.


    —Espero que estén preparados. — El anciano abrazaba con más fuerza a la niña que no paraba de llorar.


    —Abuelito, tengo mucho miedo.


    —Ya hija mía, todo acabara muy pronto. — Sus intentos de calmarla no eran suficientes para tranquilizar a la pequeña.


    Morgana hizo aparecer su espada de cristal negro, estaba lista para dar la estocara final. La Silarus movió su arma para eliminarlos, aunque en vez de clavarla en ellos, ella la dejo atravesara contra la pared en donde se arrinconaron el abuelo y su nieta.


    El anciano abrió sus ojos sin saber que estaba pasando, solo se daba cuenta que tanto él como la niña estaban en perfecto estado y veía la espada al lado suyo.


    — ¿P-Por qué no lo hizo?


    —Lárgate. — Dijo ella enojada. — Y llévate esa niña ahora antes de que me arrepienta.


    —¿ L-Lo dice en serio ? — Pregunto todavía dudando de la Silarus y con mucho temor a que fuera una trampa.


    — ¿Qué acaso no oyes bien viejo?, te he dicho que te largues de aquí, y será mejor que lo hagas cuanto antes o será demasiado tarde.


    —Gracias, gracias señorita. — Se le mostraba agradecido el anciano por dejarlo vivir a él y a su nieta.


    El abuelo se llevo a su nieta después de que Morgana les diera la posibilidad de escapar, pero antes de avanzar mucho más allá, un rayo intercepto al viejo, y provoco una herida mortal en su pecho. La niña quien había caído al suelo comenzó a llorar más que antes, al verlo todo ensangrentado y al borde de la muerte.


    — ¡Abuelito, abuelito, por favor no te mueras, no me dejes aquí sola, por favor abuelito! — Las suplicas de la niña eran conmovedoras, inclusive Morgana se sentía terrible por esa escena tan dramática.


    —Jajaja, que tristeza da esa imagen, ¿no Morgana? — De la nada había aparecido Reim, quien fue el que arrojo aquel rayo.


    Morgana estaba callada, algo confundida, ya que su pecho le dolía mucho y ese dolor había comenzado desde el momento en que vio a esa indefensa y su abuelo. Aquella niñita en cierta forma le hacía recordar algo de su duro pasado.


    —Que miseria es ver la desgracia de los seres humanos. Te soy sincero, yo aborrezco este tipo de escenas, me dan repugnancia.


    —Creí que odiabas a los humanos Reim.


    —Claro que los odio, es mas… no descansare hasta que dejen de existir.


    —Pero entonces…


    —Dije que aborrezco esta escena, pero por qué no veo lo que me agradaría ver. — Reim levanto su mano y volvió a lanzar un rayo que esta vez despedazo el cuerpo del abuelo y también el de la niña, Morgana quedo impactada completamente. — Así está mejor, esa es la imagen perfecta.


    Todo el suelo quedo manchado de sangre y las pocas partes de ambos cuerpos que aún había se encontraban desparramados en distintas partes.


    —Ya que no hay nadie más en este lugar, va a ser mejor que nos retiremos al siguiente pueblo.


    Morgana seguía sin decir nada, es mas parecía que había quedado sin habla.


    —Qué bueno que haya llegado a tiempo, ¿No te parece Morgana?, por confiarte, casi se te escapan. — Reim hablaba irónicamente, él sabía perfectamente que ella los estaba dejando huir, fue por eso que de inmediato se hizo cargo del asunto.


    La mujer Silarus había elegido ese camino, el de destruir y matar. Extrañamente una parte de ella aún se negaba a esa vida y reaccionaba como cualquier ser humano ante la más mínima expresión de dolor de los inocentes. Si bien ya en otras ocasiones Morgana había matado con sus propias manos a otras personas, nunca ella fue capaz de matar a mujeres, ni niños ni mucho menos ancianos, su parte humana se lo impedía.


    Al pasar los años su parte humana fue despareciendo y tal parecía que no volvería a surgir nuevamente, o por lo menos eso había pensado hasta que conoció a Gerardo, quien le abrió nuevamente esa parte sensible de ella.


    Fin del Flashback:


    —Reconozco que yo misma elegí este camino de odio y muerte, pero…pero… ¡quiero creer en otra forma de vivir!, esta vez quiero hacer las cosas de otra forma y tratar de compensar de alguna forma todo el daño que he hecho.


    —Qué discurso tan cursi. — Dijo burlándose Madagar.


    —Di lo que se te plazca, pero esta vez haré lo que mi corazón me dicte, esta vez…haré lo correcto.


    Una nueva Morgana que intenta borrar su oscuro pasado.




    PROXIMO CAPITULO: LA REVANCHA DE MADAGAR
     
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    yanin

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    No, no porque lo dejaste ahi me quedare con la intriga de que ira a pasar ahora, los dos capitulos estuvieron muy interesantes la verdad se me hizo triste el pasado de Morgana además ella no quizo lastimar a anciano y a la niña pero tuvo que llegar el malvado de Reim que no se tento el corazón para matarlos, es un miserabale.

    en tu ff no vi nunguna falta de ortografía además tu ff está llevando un buen giro en lo personal me gusta bastante , así que esperare el siguiente capítulo como siempre:p

    salu2;)
     
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    Ruriel

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    CAPITULO LII: LA REVANCHA DE MADAGAR




    Morgana recordaba algunas de sus batallas junto a los Silarus, y en especial en uno de esos pueblos conquistados donde se encontró con un abuelo y su nieta. Ese día ella fue incapaz de hacerle daño a esos dos, y por lo tanto les había permitido escaparse.


    Sin embargo, Reim no tenía los mismos planes para el anciano y la niñita. Al ver que ellos comenzaban con la huída, de inmediato el líder Silarus actuó y elimino a las dos indefensas presas humanas.


    Esa jornada marco un quiebre en la vida de Morgana y todo daba a entender que ella jamás se recuperaría, por lo menos eso pensó por mucho tiempo.


    — ¿Dices que harás lo correcto?


    —Así es, no volveré a cometer atrocidades nunca más.


    —Que gracioso, ¿tratas de decir que tu actual comportamiento es el indicado?


    —No sé si sea el indicado o no, pero estoy convencida que me llevara por un mejor camino que el de vivir con odio.


    —Jajajaja. — Madagar comenzó a soltar carcajadas sin parar. — No puedo creer lo que ven mis ojos, una Silarus arrepentida, esto sí que no se ve todos los días.


    —Búrlate si lo deseas, pero eso no cambiara mi manera de pensar.


    —Es degradante.


    — ¿Que dices?


    —Hay muchas cosas en esta vida que no soporto y una de ellas es ver como un poderoso guerrero se rebaja a lo que tú eres ahora. Te estás convirtiendo en un ser débil, debido a relacionarte tan de cerca con esos seres humanos.


    —Los sentimientos humanos no son un factor de debilidad Madagar. No niego que alguna vez yo creí también que si lo eran. Pero hubo una persona en especial que me ha demostrado que sentir algo muy grande por otro y el querer protegerlo te puede hacer verdaderamente fuerte.


    —Entonces estas perdida Morgana. Si en cierto que para hacerte fuerte tú necesitas proteger a alguien, eso quiere decir que no tienes la mas mínima posibilidad, ya que tu…no tienes nada que proteger.


    Morgana no podía contestarle, ya que él estaba en lo cierto. Ella había abandonado a los Silarus, que en cierta manera era lo único más cercano a una familia que la mujer tenía. No encontraba a nadie que reuniera esas cualidades para que pudiera llamar familia o amigo.


    — ¿Qué pasa?, ¿Por qué no dices nada?, ¿Es duda la realidad no es cierto?, en estos momentos tú estás completamente sola. Pero tranquila, yo voy a… ¡terminar con tu angustia!


    Madagar no dudo en atacar a Morgana, que estaba totalmente dispersa en su mente por todo lo que le había dicho el sirviente de Gualon.


    La Silarus esquivó el primer golpe que lanzo Madagar con su puño, este de inmediato con una patada golpeo su estomago y mando a volar muy lejos a Morgana. Con claridad ese primer ataque fue muy fuerte, de igual manera ella pudo levantarse y siguió afrontando al malvado demonio.


    —Eres…fuerte.


    —Tú también lo eres Morgana, aunque dudo que puedas aguantar mucho tiempo.


    —No creas que soy una Silarus por nada, yo recién comienzo a ponerme seria, ¨Espada de cristal negro.¨


    — ¿Así que te pondrás seria?, que bien…porque yo también. ¨ Polvo metalizado¨— La técnica empleada por Madagar consiste en arrojar polvo de metal al aire que provoca severas heridas


    —No puedo ver nada. — La falta de visibilidad era solo un pequeño problema para Morgana, a los pocos segundos comenzó a notar como su cuerpo era dañado por ese polvo de metal. — ¿Qué es esto?, esto no es polvo común y corriente.


    —Qué bueno que lo hayas notado Morgana. Esta técnica que acabo de hacer no es una simple distracción, es un poder que lentamente va desgarrando tu cuerpo hasta que quedas hecha un esqueleto.


    —¨ Maldición, este tipo tenía una técnica así ¨.


    Voy a castigarte como la antigua miembro de los Silarus que eres, vas a pagar por haber destruido a mi gente, y lo pagaras con tu propia vida.


    La fuerza del viento comenzó a incrementar el daño que le provocaba el polvo metalizado, el cuerpo de Morgana estaba recibiendo heridas cada vez más graves y profundas que hacían que la sangre brotara por todas partes.


    — ¡Muere Morgana!


    —¨ Gran lanza de bronce.¨ — Una enorme lanza arrojada desde lejos golpeo las manos de Madagar, impidiendo que pudiera continuar con su técnica.


    — ¿Quién se atreve?


    —No puedo permitir que un gusano lastime así a una mujer, por más que ella sea una Silarus, jamás te lo permitiremos. — Habían aparecido en medio del combate Estefani y la dueña de la lanza que regreso por si sola hasta donde estaba Demetria, su propietaria.


    Morgana miraba confundida a las personas que la habían salvado, y a una de ellas la pudo reconocer rápidamente.


    —Tú…tú eres la chica de aquella vez. —Le hablaba a Estefani y hacía referencia al momento que se infiltro como Justine para asesinar a la rubia.


    —Veo que todavía me recuerdas Justine, o Morgana, o como quieras que te llames.


    — ¡¿Qué crees que haces?, ¿Por qué me ayudas?!


    —Como dijo la impulsiva que tengo a mi lado…


    — ¡¿A quién llamas impulsiva?!


    —Bueno, bueno, como sea. Como acaba de decir Demetria, no importa si eres una de los Silarus o si en algún momento intentaste matarme. Pero ninguna de las dos podemos permitir que se trate a una mujer de esa forma, porque...esa es nuestra manera de hacer las cosas.


    Los dichos de Estefani le recordaban a Morgana algo de lo que Gerardo anteriormente le había hablado sobre la amistad, y de que nunca abandonaría a alguien que considere amigo. Sin lugar a dudas ella encontraba varias similitudes en sus discursos.


    —Je… ¿Por qué creo que he escuchado algo como eso antes?


    —Morgana, por lo que veo…tu ya no estás con los Silarus, sino Madagar no te estaría atacando, ¿Acaso me equivoco en algo?


    —Eso no tiene nada que ver contigo, déjame en paz princesa de pacotilla.


    El comentario agraviante hacia a Estefani molesto a Demetria, la cual se arrepintió de haberla salvado a Morgana.


    —Ja, eso nos pasa por salvar a cualquiera Estefani, debimos dejar que ese sujeto la eliminara.


    — ¿Quienes se creen que son?, para que lo sepan, yo en ningún momento les pedí su ayuda, rayos… ¿Es que acaso todos los humanos son como ustedes o Gerardo?, en verdad me hacen enfurecer.


    El oír el nombre de Gerardo, con rapidez puso en alerta a Estefani.


    — ¿Gerardo?, ¿Dijiste Gerardo?, ¿Dime Morgana, tu lo has visto?, ¿Él está bien?


    — ¿Eh?, a cierto…me había olvidado que tu eres su amiga. No tengo por qué responder a tu pregunta princesa.


    —Te lo advierto Morgana, será mejor que no le hayas hecho nada, si no yo…


    —No me amenaces princesa, y para que lo sepas ese perdedor está con vida, así que deja de fastidiar con tus preguntas.


    Escuchar que su amigo continuaba con vida había relajado a la princesa, que hacía mucho que no sabía de él.


    —Menos mal…me alegra oír eso.


    —Jejeje, princesa Estefani. — Interrumpió la conversación Madagar. — No creo que deba alegrarse demasiado.


    — ¿Cómo dices?


    —Usted y sus amigos han cometido el terrible error de meterse con mi señor. Debo decirles, que por más que hasta ahora hayan podido sobrevivir… ¡Ninguno podrá escaparse al castigo que les dará lord Gualon!


    —No creas que nosotras le tememos a Gualon, no somos perros falderos que obedecen a su amo como tú. — Demetria no le demostraba ningún respeto a Madagar y sus palabras no hacían más que enfurecerlo.


    —Te arrepentirás muchacha, voy hacer que te comas tus palabras.


    — ¡Inténtalo!


    Demetria logra su cometido haciendo enfurecer a Madagar.




    PROXIMO CAPITULO: LAS CARAS DE LA LANZA KEIGA
     
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    Sheccid

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    ¡¡Eso!¡¡Estefani y compañía no son perros falderos como tu Madagar, maldito cobarde!(Respirando y calmandose) ¡Que padres capítulos! Y yo me pregunto ¿A quien elejira Gerardo? Cómo Jack ya esta muerto (Y que triste :() Estefani ya no tiene otro pretendiete. Además ¡Morgana sobrevivirá? Sólo vi una faltita de ortografía:h artar
    Bueno, hasta la proxima (y perdón de nuevo por la tardanza)
    P.D: Me gusta tu imagen
     
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    Ghea Kurai

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    Si! por fin aparecio Estefani, aunque temo por la vida de Michelle... jum! Esta de lo más entretenido el relato, y hasta nos torturas con los momentos de suspenso, espero ansiosa el prox cap. :eek:
     
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    yanin

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    Wow!! El capitulo estuvo muy interesante y emocionante a la vez Morgana ha decidido cambiar y remediar su pasado, pero Madagar es muy malo.:mad:
    Que bien que llegaron a tiempo Estefani y Demetria para salvar a Morgana, esperemos que ella acepte ayuda de ella ya que la princesa a pesar de que la intento matar en el pasado le ayudo sin condición.:)
    Pues no vi ninguna falta de ortografía sigue así, esperare el siguiente capítulo.
    Salu2
     
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    Ruriel

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    CAPITULO LIII: LAS CARAS DE LA LANZA KEIGA




    Demetria y Estefani habían llegado justo a tiempo para evitar que Madagar asesinada a Morgana, la cual está gravemente herida por los ataques del discípulo de Gualon. Ahora una nueva confrontación estaba por iniciarse y la valiente guerrera de Nasha, estaba lista para pelear.


    —No sé quién eres mujer, pero te arrepentirás de tus palabras.


    Demetria comenzó a hacer extrañas posturas, algo ridículas por cierto, y se presentaba ante Madagar.


    —Lamento no haberme presentado de manera adecuada, son la guerrera numero uno de la gran Nasha, yo soy…Súper Demetria.


    —Súper…Demetria. — La miraba Estefani.


    — ¿Qué clase de presentación es esa? — Se pregunto Morgana.


    Los rostros de Morgana y Estefani lo decían todo, o Demetria era muy valiente o en verdad era una idiota.


    —Oye Demetria, por favor, ya no hagas esas cosas, en verdad me avergüenzan.


    —De que hablas Estefani, lo que pasa es que tú no sabes nada sobre las presentaciones. Una gran entrada ante tu enemigo da muestra de tu talento. Que lista que soy, ¿no lo crees?


    —Creo…que estas mal de la cabeza.


    Madagar estaba rabiado, pensaba que esas niñas les estaban tomando el pelo.


    — ¡Niñas tontas, pónganse serias, estamos en medio de una pelea!


    —Ya, no te saques de quicio, allí voy. — Demetria se puso seria nuevamente y se preparaba para luchar contra el demonio.


    —Demetria. — Le llamo Estefani. — ¿En verdad vas a pelear tu sola contra Madagar?


    —Claro que si Estefani, la última vez que estuve en una pelea me salvaste de Fuldac. Pero quiero hacerlo por mi misma esta vez, sino…sería una gran deshonra como discípula de Nasha.


    —Huh, si tu lo dices.


    —Tú relájate y observa a una guerrera con todas las letras. Deberías revisar las heridas de ella. — Refiriéndose a Morgana. — Mientras yo me hago cargo de ese sujeto espantoso.


    —Está bien, pero será mejor que le ganes.


    —Ja, no hace falta que me lo digas, precisamente eso iba a hacer.


    Estefani se arrimo a Morgana que estaba mal herida. En tanto Demetria se encontraba batallando contra Madagar en un combate muy parejo.


    —Déjame ver tus heridas Morgana.


    — ¿Te has vuelto loca?, ¿Cómo se les ocurre venir a rescatarme?


    —Qué curioso que digas algo así, ya que si has estado con Gerardo, deberías saber que nosotros no abandonamos a nadie, sin importar de quien se trate.


    Morgana la miraba a Estefani sin decirle nada, la forma de expresarse de la princesa era idéntica a la de Gerardo.


    —Dime una cosa. —Dijo Estefani. — Gerardo… ¿De verdad se encuentra bien?


    —Ja, claro que lo está, ese perdedor en verdad es muy resistente. Él es alguien importante para ti, ¿No es cierto?


    Ella seguía atendiendo las heridas de Morgana y respondió…


    —Si…es alguien…muy importante.


    —Ya lo suponía, cuando me fui me dijo que se dirigía al castillo de Sefiro, por cierto…él no estaba solo.


    — ¿Qué?


    —Tu hermana…Michelle, estaba con él.


    La rubia quedo cabizbaja y se le notaba un dejo de tristeza en su mirar.


    —Con que…Michelle estaba con él. Es raro, pero sospecho que ella cada vez está más cerca de Gerardo, aún mucho más que yo.


    —Estefani, acaso tu estas…


    De repente una gran explosión se escucho, y era motivo de la gran pelea que estaban llevando a cabo Madagar y Demetria. Los poderes de los dos eran increíbles, en especial sorprendía las habilidades de la chica, que parecía que era una habladora pero al parecer ella realmente era muy fuerte.


    —No puedo creer, lo fuerte que eres. — Decía agotado Madagar.


    —Lo mismo digo, por lo visto…tú también eres muy poderoso. — Contestó igual de agotada Demetria.


    —Mereces que tener una muerte honorable, así que… prepárate jovencita.


    —Lo siento Madagar, pero creo que soy muy joven aún para morir. Hay muchas cosas todavía que me faltan hacer, como poder igualar a mi maestra, o encontrar un hombre fuerte con quien me pueda casar. En fin, no me parece que deba morir todavía.


    Madagar uso su poder ¨ Polvo metalizado¨, planeaba ponerle fin a Demetria, al igual que había dejado fuera de combate a Morgana. Pero la orgullosa guerrera no pensaba darse por vencida y tenía idea de contraatacar.


    —Bien, es momento de que cambies, ¨ Gran lanza de Keiga, segunda cara.¨ — El arma de Demetria estaba cambiando del bronce a una lanza de plata.


    —Su arma, ha cambiado… — Dijo Madagar. — Muchacha, sin importar que tu juguete haya cambiado, de todas formas no podrás derrotarme.


    —Si crees que no ha cambiado significativamente, entonces compruébalo por ti mismo.


    — ¡Eso hare!


    Cuando Madagar comenzó a atacar a Demetria esta lo detuvo golpeándolo con su lanza en la espalda, el daño dejo severamente herido al demonio que no podía creerlo.


    —Como puede ser…no pudo haberse vuelto tan poderosa esa arma solo por cambiar de metal.


    —No es un arma ordinaria Madagar. Esta lanza tiene su propia energía y se va adaptando según el oponente.


    — ¿Qué se adapta al oponente? , ¿Tratas de decirme que esa lanza tiene vida propia?


    —No precisamente, lo que quise decir es que esta lanza se desarrolla a medida que la pelea va avanzando. Eres un gran oponente Madagar, y mereces que te de un final digno.


    — ¡Deja de parlotear! — El demonio continúo lanzando golpes y todos eran detenidos con la lanza, cada vez se agilizaba más los movimientos de Madagar y se le complicaba detener los poderosos puños del general de Gualon.


    La pelea entraba en un momento decisivo y ambos sabían que no podían continuar por mucho más en ese nivel tan alto sin agotarse antes.


    Un tanto apartadas, Estefani quien curaba las heridas de Morgana, veía expectante junto a la Silarus el combate de Demetria y de lo bien que se estaba desempeñando contra semejante rival.


    —Es grandiosa, nunca creí que fuera tan hábil. — Estefani estaba maravillada con la guerrera tan habladora, aunque ahora se podía dar cuenta que no era solamente una chica charlatana.


    —Yo tampoco lo creo, una humana le puede hacer frente de esa forma a un demonio como Madagar, ni siquiera yo le pude ser rival parea él.


    —No te sientas mal Morgana, seguramente estabas cansada y por eso no pudiste con él, debe ser eso.


    La rabieta de Morgana no tardo en estallar.


    — ¡No intentes hacerme sentir bien!


    —Tranquila, tranquila, para nada intento eso. —Una brillante sonrisa salió del rostro de Estefani. — Sabes…me alegro que no luches contra nosotros ahora.


    Morgana quedo sin palabras, y miró los vendajes que Estefani le había puesto.


    —Tienes razón que ya no quiero pelear con ustedes, pero no quiere decir que desde ahora seamos amigos.


    —Lo sé Morgana. — La rubia continuaba con esa sonrisa.


    —Aunque…te agradezco que me hayas salvado.


    Estefani sentía que había ganado una nueva compañera, por más que Morgana lo negara.


    Mientras tanto, Demetria se dispuso a acabar con su pelea.


    —Bien Madagar, ya que tanto me has hecho cansar, creo que te has ganado el derecho de ver la última cara de mi lanza.


    — ¿Cómo has dicho?


    —¨ Gran lanza de Keiga, tercera cara.¨ — La lanza de nuevo volvía a cambiar y el metal plateado paso al dorado en un abrir y cerrar de ojos. — Estoy lista, venceré.


    Demetria preparada para enorgullecer a su maestra.




    PROXIMO CAPITULO: OSCURO SECRETO
     
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    yanin

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    Wow!! Estuvo muy interesante y entretenido el capitulo la verdad me gusto bastante, Michelle es una chica muy fuerte.
    Además Estefani se puso feliz al saber que al saber que su hermana y Gerardo están bien pero me he quedado con una gran duda al saber que estaban juntos ellos se puso triste:( a la vez acaso si siente algo por Gerardo creo que esto cada vez se pone más interesante de ahora en adelante.
    Esperare el siguiente con ansia para saber en que terminará la batalla entre Demetria y Madagar ya que a pesar que es una chica bastante habladora y todo esto, es muy fuerte y decisiva.

    Salu2.:)
     
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    Ruriel

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    CAPITULO LIV: OSCURO SECRETO




    La lanza de Demetria había cambiado otra vez, en esta ocasión su metal se había vuelto de oro. Era la última y más poderosa metamorfosis del arma de la orgullosa guerrera.


    —Se ha hecho de oro….Esa lanza es muy extraña. — Veía Madagar con asombro el repentino cambio del arma.


    —Te diré algo Madagar, ahora voy a darle punto final a este combate, espero que estés preparado.


    — ¡Eres una brabucona, voy a cerrarte la boca para siempre!


    Habiendo estallado de bronca, Madagar empleo su técnica de polvo metalizado por última vez, a diferencia de las otras oportunidades que uso este poder, la técnica había solidificado pedazos muy grandes de metal que serian arrojados como cuchillas.


    —Ha cambiado mucho esa técnica, el polvo ahora parece ser que son metales muchos más gruesos y filosos. El daño que me provocaría seria mortal.


    —No podrás escapar de mi poder, ¨ Explosión de metales de acero¨


    —Ni pienses que me quedaré esperando tu ataque Madagar, Gran lanza, ¨Relámpago de oro.¨— Fue inevitable que las dos técnicas se cruzaran, Demetria estaba desprotegida ante la técnica de Madagar, luego de usar su relámpago, y varios de los metales de acero impactaron en todo su cuerpo.


    Pero los daños no solo serian para la guerrera, por su parte Madagar tampoco pudo evitar ser interceptado por el Relámpago que lo fulmino prácticamente en un instante.


    Luego de vencer al temido demonio, las chicas, Estefani y la ya recuperada Morgana, se acercaron a Demetria quien estaba tendida en el suelo.


    —Demetria, ¿estás bien? — Estefani trataba de levantar a Demetria.


    —Q-Que tonta, como si pudieran matarme así como así. — Con todo el daño que había recibido y extremadamente cansada, la orgullosa discípula de Nasha se quedó dormida, pero afortunadamente ella estaba a salvo.


    —Que valiente fue, realmente me dejo sorprendida. — Comentaba Morgana viéndola ahora durmiendo y sin una gota de energía.


    —Todos tratamos de hacer lo imposible por salvar a la gente de Sefiro. He de ahí la fuerza sorprendente que personas como Demetria logran sacar a la luz.


    —Al ver a personas como ella pelear de esa forma, más segura estoy de que tome la decisión correcta.


    —Que bueno oírte decir eso.


    —De todas formas te aclaro que yo también detesto a las rubias.


    —T-te doy la razón Morgana. — Acotó con lo poco de voz que le quedaba Demetria.


    La cara amigable de Estefani cambio rotundamente con lo dicho por Morgana.


    —Te hubieras ahorrado ese comentario Morgana.


    —Y también…quisiera que desde ahora me llamen Justine, después de todo ese es mi verdadero nombre.


    Tanto Estefani como Demetria se pusieron muy feliz de escucharla hablar así a Morgana, quien desde ahora le llamarían por su nombre de humana, Justine, su nueva compañera.


    xXx​
    Gente de diferentes partes de Sefiro y pueblos de los alrededores, se reunían en las cercanías de la ciudad de Ideya, conocido por muchos como el hogar de los fuertes. Este sitio parecía ser la única escapatoria de los habitantes del mundo para conseguir huir a los demonios de Gualon.


    Grupo de niños, ancianos y personas de todas las edades, huían despavoridos de la amenaza que los estaba persiguiendo desde distintas partes del mundo. Habiendo entrado en la ciudad, la gente con suma facilidad se pudo encontrar con varios guerreros que ya estaban preparados para hacerles frente a los monstruos, ya que estos seres eran una amenaza para todos los humanos.


    En todo el alboroto que se genero entre miles de hombres y demonios luchando entre sí, un pequeño niño de unos cinco años, intentando escaparse del lugar de la pelea, había caído el suelo, lo que le provocó una herida en su pierna que no le permitía escaparse. Para empeorar la situación, uno de los demonios se dirigió hasta él para atacarlo.


    El niño muy asustado comenzó a chillar sin parar, pero nadie lo escuchaba, el monstruo estaba por matarlo y no había nadie quien lo protegiera.


    — ¡Joensuu! — La poderosa energía exterminó al demonio y su propietario acompañado de una bella mujer con atuendo de guerrera, se arrimaron al niño para ayudarlo a ponerse de pie. — ¿Te encuentras bien pequeño? — Pregunto Randall a niño que le dio una respuesta afirmativa con su cabeza.


    —Ya no temas pequeño, pronto haremos que te encuentres con tus familiares, ahora ven conmigo, yo te protegeré. —Nasha tomo de la mano al niño para llevarlo a algún sitio seguro hasta que todo terminara.


    —Nasha por favor, intenta reunir a todas las personas que te sean posible y llévalos a algún lugar donde no corran peligro.


    —Está bien Randall, yo ni bien ubique un sitio seguro para ellos vendré a ayudarte.


    —No es necesario que hagas eso Nasha, en este lugar hay muchos guerreros dispuestos a pelear con los demonios de Gualon, y aparte…este tipo de criaturas no son rivales para mí.


    —Deja de presumir, se que tu eres mucho más fuerte que estos monstruos, pero ten en cuenta que en número nos superan considerablemente.


    —Mucho mejor así, sino sería muy aburrido.


    —Veo que siempre serás igual, tonto. — Ella se retiró y dejo el asunto en manos de Randall, que después de muchos años volvería a mostrar sus virtudes.


    xXx​
    El castillo de Sefiro también era un sitio en el que se empezaba a haber muchos movimientos extraños, en especial de alguien muy cercano a Gualon.


    —Señorita Veris, que curioso verla por este lugar. — Miskyn se encontraba con la hechicera en uno de los corredores del castillo.


    —Y tu como siempre estas arrastrándote por todo el palacio.


    —Es mi trabajo señorita Veris, debo supervisar todo los movimientos sospechosos que vea.


    — ¿Estas tratando de decirme que desconfías de mis movimientos?, ten mucho cuidado de tus palabras gusano, yo no soy tan blanda como Madagar, al próximo insulto de tu parte voy a hacerte polvo sin dudarlo.


    —No es para que se ponga así señorita, solo tenía curiosidad de saber a dónde se dirigía.


    —Para que lo sepas me dirigía hasta la biblioteca, ¿crees que hay algo sospechoso en eso?, si quieres puedes venir conmigo.


    —No hace falta señorita Veris, usted es de la entera confianza de mi señor.


    —Como no…— Veris se iba a dirigir a la biblioteca hasta que quiso preguntarle algo al gusano mitad hombre. —A propósito Miskyn, ¿en dónde diablos esta Gualon ahora?, no lo he visto desde hace un buen rato.


    —Mi señor en estos momentos debe estar atendiendo unos asuntos con un visitante, aunque creo que ya debe haber terminado con eso.


    —Huh, ya me imagino de qué tipo de asuntos se trata.


    Veris se marcho hacia la biblioteca, mientras que Miskyn por unos segundos se quedo viéndola con un gesto de duda.


    —¨ Me pregunto si la señorita Veris está ocultando algo.¨


    A paso lento y sin hacer demasiado ruido para que nadie más a parte de Miskyn la pudiera ver, Veris ingresaba al lugar en donde se encontraba la biblioteca. Se trataba de un inmenso cuarto repleto de libros de toda clase de autores y bien separados según el tema del que trataban.


    —Es increíble, esta biblioteca es incluso mucho más grande que la que tenía yo en mi castillo.


    La hechicera comenzó a buscar en el sector en donde estaba los libros de hechicería, se trataba de un libro en particular, uno que había usado hacía varios años atrás.


    —Aquí esta. — Dijo Veris, ella había encontrado lo que buscaba. Se trataba de un libro muy viejo, cuya portada tenia la marca de un extraño símbolo. —Sabía que en semejante biblioteca encontraría algo como esto, el libro que los antiguos sabios consultaba para encontrar la respuesta del origen del poder supremo, el poder de…Lyra y Endinium. Pobre de ti Gualon, una vez que obtenga la respuesta a esto, ya no voy a necesitarte, Jajajaja.


    Un plan oculto incluso para Gualon.




    PROXIMO CAPITULO: EL TITIRITERO ENTRE LAS SOMBRAS
     
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    Ruriel

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    La Leyenda de Estefani
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    CAPITULO LV: EL TITIRITERO ENTRE LAS SOMBRAS




    En medio del campo desolado, la escena que había quedado después de un duro combate era muy desalentadora. Un terreno marcado por la destrucción de los ataques y el cuerpo de un joven que llevaba apenas unos minutos desde que perdió su valiosa vida.


    En otros territorios, un par de muchachas acompañadas por una ex enemiga, se venía acercando al lugar donde se hallaba el cuerpo sin vida del ladrón. Ninguna de ellas, mucho menos Estefani, podría imaginarse lo que se encontraría más adelante.


    xXx​
    El aura de energía iba creciendo a cada minuto que pasaba. El poder que Michelle había reunido era abrumador, toda la zona quedo prácticamente convertida en un infierno terrestre.


    —Que poderosa energía emana del cuerpo de Michelle. Es incluso mucho más grande que el poder que tiene Reim. — Decía Gerardo viendo como estaba quedando todo en los alrededores debido a la fuerte descarga de poder de la morena.


    —¨ Esta niña… ¿De dónde saca tanta fuerza?, lo peor de todo es que mi cuerpo no me responde, ¿Qué demonios está ocurriendo? ¨ — Michelle no había empleado ningún truco para inmovilizar al Silarus. La única razón por la que su cuerpo no se movía era por el miedo, si algo raro, el miedo detenía al líder de los poderosos demonios.


    — ¿Qué sucede Reim, te noto algo nervioso?


    — ¡Cállate, sin importar el truco que hagas, yo voy a eliminarte!


    —Por lo visto tú nunca dejas esa arrogancia, como sea…esto pronto se va a acabar.


    — ¡No digas tonterías, tu jamás estarás a mi altura!


    Pero las palabras de Reim lejos estaban de ser ciertas, ya que en ese preciso instante la ventaja en la pelea era a favor de Michelle.


    Apartado del peligro Gerardo seguía observándola, él ya había hecho su parte de detener al enemigo mientras la princesa iba juntando energía vital para usar su nuevo poder. Pese a todo, aun se seguía sintiendo algo frustrado, todavía no había podido ser participe en algunos de los combates por sí mismo, siempre que hubo la oportunidad de combatir, siempre había alguien quien lo ayudaba.


    —Viéndola a Michelle me puedo dar cuenta lo inútil que sigo siendo en esta batalla. — Él comenzó a recordar la vez que Estefani y Jack lo salvaron el día que fue secuestrado por unos bandidos. También se le acerco a su cabeza el recuerdo de cuando Morgana le ayudo a salir del precipicio, en esa ocasión ellos habían trabajado en equipo, pero gran parte del trabajo fue en manos de la Silarus. — Siempre me pasa igual, yo termino siendo un verdadero estorbo, ¿Por qué…Por qué no puedo progresar?


    —Porque eres débil muchacho… — Una voz interior respondía a su pregunta.


    — ¿Quién dijo eso?


    —Muchacho…no hay manera de que tú te conviertas en un verdadero guerrero, la única escapatoria que tienes es…que uses mi poder.


    — ¿Tu poder?, pero dime… ¿quién eres?


    —Yo soy una parte de ti Gerardo, para que lo entiendas mejor, nuestra energía ha estado estrechamente vinculada desde el día en que naciste.


    —Pero…no lo entiendo.


    —Falta poco…muy poco para que yo pueda despertar completamente.


    —¡Un momento!, ya que no me quieres decir que eres ni lo que quieres, por lo menos déjame saber tu nombre, porque tienes un nombre,¿ verdad?


    —Endinium. — Contestó la voz interior. —Mi nombre es Endinium.


    — ¿Qué?, no…es posible


    Dejando de lado al sorprendido Gerardo, volvamos a la pelea que daría su definición cuanto antes ya que Michelle estaba lista para usar su técnica. Al estar muy concentrada, la morena no pudo darse cuenta de lo que pasaba con su compañero, cosa que si notó con rapidez Reim, ya que de un momento a otro una extraña energía maligna se adueño del joven.


    —¨ ¿Que habrá sido eso?, podría jurar que ese muchacho estaba rodeado de energía maligna.¨


    —Te das el lujo de distraerte Reim, pues ese será el último error que cometas.


    — ¡¿Qué?!


    —Mi energía demoniaca propia, ¨Inferno¨


    —No lo conseguirás, te detendré con mi ¨Exterminio molecular¨


    El ataque más fuerte de Reim, líder de los Silarus, no era suficiente para detener la avasallante fuerza de Inferno, la técnica más poderosa de Michelle. El poder de la morena inutilizo el golpe del demonio y este nada pudo hacer para protegerse del impacto destructor de las llamas infernales.


    Logrando su cometido, Michelle por fin pudo relajarse y tomar algo de aire. Sus sentidos habían sido exigidos al máximo, aun así el esfuerzo fue necesario y afortunadamente estos brindaron sus frutos.


    Gerardo que se había despertado de su trance, se acerco con rapidez a la chica para ver como estaba.


    —Michelle, reacciona, por favor. — Le suplicaba Gerardo al verla en esas condiciones.


    —N-No te preocupes Gerardo, estoy muy cansada pero…me repondré pronto.


    — ¿Lo dices en serio?


    —Claro…solo dame unos minutos. — Ella se le quedo observándole la cara de sufrimiento que tenia. — ¿No me digas que vas a llorar?, eso no es de hombres.


    —Son lágrimas de alegría, y no es cierto que los hombres no lloren.


    —Puedo pedirte un favor.


    —Sí dime, ¿De qué se trata?


    —Viendo que estamos por lograr nuestro cometido…he estado pensando que…


    — ¡¿Qué?, dímelo!


    —Es que me gustaría que algún día de estos pudiéramos… salir, como amigos claro, sin compromiso. Será…una salida de amigos, ¿Qué dices?, ¿Aceptas?


    —Ja, no puedo creer que pidas algo así. —Él se quedo mirándola a los ojos con una enorme sonrisa. — Aunque…me encantaría que podamos salir algún día.


    Ella a eso le respondió también con una sonrisa, para luego abrazarlo con fuerza, como no dejándolo ir.


    —Jovencitos… —De pronto se escucho la voz agonizante de Reim, quien llamaba a los muchachos, estos no dudaron ni un segundo y se acercaron a él.


    —No puedo creerlo, ¿Aún sigues con vida? — Se sorprendió Michelle con la resistencia de Reim.


    —No es necesario que te asustes princesa, mi tiempo se está terminando, pronto moriré. Yo solo quería…decirles algo.


    — ¿Decirnos algo?


    —Es con respecto a Gualon, y a lo que está pasando aquí.


    Los chicos estaban sorprendidos y expectantes a lo que dijera el Silarus.


    — ¿Qué es lo que sabes Reim?, dínoslo por favor.


    —Es sobre la persona que origino este conflicto.


    — ¿Quien lo origino?, pero eso ya lo sabemos, Gualon comenzó con esta batalla.


    —Eso no es cierto. — Reim contradecía a Gerardo. — Quizás a simple vista ustedes ven a ese tal Gualon como el autor principal de todos los sucesos que han venido sucediendo. Pero yo sé…que no es así. Detrás de esto hay alguien más y ese alguien se ha estado ocultando todo este tiempo.


    — ¿Alguien más?, ¿Pero quién…quien es ese alguien?


    —Esa persona ha estado trabajando entre las sombras, haciéndose pasar por una aliada de Gualon, cuando en realidad…ella tenía sus propios planes.


    — ¿Ella?, no me digas que te refieres a…


    —Sí, me refiero a Veris, ella es… la sombra que está detrás de todos nosotros.


    Una confesión que empieza a aclarar las cosas.




    PROXIMO CAPITULO: EL SENTIDO DE LA PELEA
     
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    Sheccid

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    Ahora si me quede con el ojo cuadrado
    :
    ¿A sí ue Veris es la que contro lo todo desde siempre? Wow esa no me la esperaba.
    Respecto a Endimión ¿Entonces se apoderará de Gerardo?¿Lyra también tomará el control de Estefani?¿ La princesa esta enamorada de Gerardo? Ahora ya no se, cómo murió Jack (resentimiento y tristeza en la voz)... Pero Michel también ama a el humano...¿Cómo se solucionará todo?
    Nos vemos en la continuación, un gusto leerte
     
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    Ruriel

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    CAPITULO LVI: EL SENTIDO DE LA PELEA




    Luego de vencer a Reim, Michelle intentaba recuperar sus fuerzas, a su lado estaba Gerardo quien le había sido de ayuda a ella en la pelea, haciéndole algo de tiempo mientras la morena acumulaba energía.


    Una vez vencido el líder Silarus, finalmente la princesa Michelle, Gerardo y Fellow, se preparaban para ir directamente al castillo y enfrentar a Gualon. Antes de ello Reim sintió la necesidad de confesarle un secreto, una verdad que puede aclararles muchas cosas sobre lo que venía sucediendo.


    —Dime Reim, es verdad lo que acabas de decir.


    —Así es princesa, Veris es la que está detrás de todo esto.


    — ¿Intentas decirnos que Veris está traicionando a Gualon? — Le preguntaba Gerardo aún sin creerlo.


    —Precisamente eso dije joven.


    —Es que nos resulta difícil creerlo Reim, dudo que alguien se atreva traicionar a Gualon, ni siquiera Veris.


    —No les culpo que no me crean chicos, pero es la pura verdad.


    — ¿Y tu como sabes esto Reim?, ¿De dónde sacaste esa información? — Preguntó el joven.


    —Esto lo sé desde hace poco tiempo, fue después de una charla que tuve con su discípulo Madagar.


    Flashback:


    Gualon acababa de encontrarse con los Silarus, luego de ponerse de acuerdo en que trabajarían juntos con el propósito de derrotar a los humanos. Luego que el siniestro soberano de Sefiro se marchara de aquel lugar, y que la mayoría de los Silarus a excepción de Reim y Madagar, se retiraran también del escondite del grupo. En aquella cueva que serbia como lugar de reunión para los demonios, el sirviente de Gualon y Reim, se encontraban solos en el oscuro lugar.


    —Espero que su fama no sean solo comentarios urbanos. — Le decía Madagar a un Reim que lo miraba muy serio.


    —Dime una cosa Madagar, si tú maestro y tú son tan capaces de hacer todo por si solos, ¿Por qué vienen a nosotros en busca de ayuda?


    —No creas que los necesitamos tanto, pero la persona más cercana de mi amo le dijo que era buena idea contar con sus servicios.


    — ¿La persona más cercana?


    —Me refiero a Veris, ella es una hechicera que ha estado colaborando con Lord Gualon desde hace ya bastante tiempo. Según se por el estúpido sirviente de mi maestro, ella ha estado al frente de muchos asuntos importantes, en realidad en la mayoría.


    —Debe ser alguien de su entera confianza imagino.


    —Tal vez si…tal vez no.

    —Huh


    —En el círculo en el que nos movemos los seres como nosotros, no existe la palabra confianza. Siempre tenemos que estar prevenidos…en caso de una traición. — Luego de decir eso, Madagar se fue de allí dejándolo pensante sobre esa respuesta a Reim.



    Fin del flashback:


    —En aquella ocasión yo no le preste demasiada importancia a las palabras de Madagar, es que en realidad muy poco me importaba el asunto. Pero mientras nosotros comenzamos a trabajar con ellos, fue ahí donde me di cuenta que detrás de ese poderoso ser llamado Gualon, existía alguien aún más perverso.


    —De todas formas eso no prueba mucho que digamos, solo estas sacando conclusiones sin ninguna prueba fehaciente.


    —Si, además ella necesita estar del lado de Gualon. De enterarse que Veris quiera hacer algo en su contra, ese demonio la eliminara de inmediato.


    —Por lo visto siguen pensando como chiquillos. El hecho de que Gualon sea muy poderoso, no quiere decir que no pueda ser engañado por otra persona. A veces una mente brillante y maligna puede ser un arma más peligrosa que la fuerza misma.


    —Pero…si es cierto lo que dices, ¿Entonces qué es lo que está tramando Veris? —Le pregunto la princesa ya creyendo un poco más en lo dicho por Reim.


    —No se tanto como eso princesa, pero algo es seguro, sea Gualon o Veris su enemigo, el resultado no cambiara en lo absoluto para ninguno ustedes.


    —Reim, ¿Por qué…nos dices esto? — Preguntaba Gerardo algo extrañado con la confesión del Silarus. —Hasta hace unos momentos tú estabas tratando de matarnos, no entiendo lo que tratas de hacer.


    —Es sencillo, antes de conocerlos yo tenía una clara idea en mi cabeza, y eso era de que los humanos eran seres despreciables sin escrúpulos, pero…mientras estaba peleando pude darme cuenta que en sus corazones había una fuerza interior que los impulsaba a continuar, sin importar que sus posibilidades de vencer fueran pocas, nunca…se dieron por vencidos. Al verlos me comencé a preguntar si lo que yo creía tan firmemente estaba acertado, fue ahí donde supe…que me había equivocado.


    Esas palabras fueron las últimas que soltó antes de morir.


    —Él…ha muerto. — Dijo Michelle.


    —Oye Michelle. —Le hablo Gerardo.


    —Sí, ¿Qué pasa?


    —Sabes…no es la primera vez que siento esto, pero a veces me da la sensación que estos seres…Los Silarus, creo que ellos en algún punto tenían razón.


    — ¡Qué diablos estás diciendo Gerardo, ¿Estás loco?! —Le reprochaba furioso Fellow al joven.


    —Tranquilo Fellow, no es que justifique las acciones de los Silarus, nunca haría eso. Pero creo que en algún punto ellos peleaban por algo que iba más allá de la conquista o del frio e insensato asesinato de humanos. No sé explicarlo bien, pero…pero…


    Escuchándole hablar de esa manera la hizo recapacitar un poco a Michelle, ella se daba cuenta a donde quería llegar Gerardo con todo esto.


    —Gerardo, creo entender cuál es tu punto. Imagino que tú te has sentido algo identificado con alguno de ellos, ¿No?


    —Identificado dices…


    —Posiblemente hayas visto en los ojos de ellos, algo del sufrimiento que tú has vivido en persona a causa de otros seres humanos, ¿Me equivoco?


    Gerardo no dijo nada, solo la miraba con algo de tristeza, como confirmándole su suposición.


    —Tus ojos…parecen que dijeran que estoy en lo cierto. Es verdad que hay muchas personas que nos causan dolor, que en muchas oportunidades hacen lo posible por complicar nuestra existencia, hacen lo imposible por causarnos sufrimiento. No puedo culparte de que sientas rencor hacia esa gente, creo…que yo también me sentiría como tú, si estuviera en la misma situación. Hace algún tiempo…conocí a alguien que sufría posiblemente lo mismo que tú. Cuando lo vi por primera vez me dio mucha lástima ver como los demás se burlaban de él, lo dejaban de lado en todo momento. Me daba bronca ver esa situación y me decía a mí misma, ¿Qué tan crueles podemos llegar a ser?, pero ese chico…nunca dijo nada, siempre se guardaba su dolor, y mantenía esa expresión que tanto me gustaba cada vez que me veía, y eso era….su sonrisa.


    Flashback:


    Los chicos del salón como siempre se burlaban del introvertido Cristian, luego de que este pasaba al frente a resolver un problema. El chico volvía a ocupar su asiento, curiosamente acompañado de la chica más popular de allí.


    —No te entiendo Cristian, ¿Cómo puedes soportar que todos estos tontos se burlen de ti?, si yo estuviera en tu lugar ya les habría dado su merecido.


    —La violencia nunca resuelve nada señorita Michelle.


    — ¿Qué?


    —Si siempre a algo que no nos gusta lo resolvemos con violencia o agresiones verbales, eso de nada nos serviría para ser felices. Creo que la mejor solución a los problemas es…dar siempre la otra mejilla. —Dijo con una radiante sonrisa.


    —Huh, por lo visto tu nunca quieres afrontar tus problemas y deja de decirme señorita.


    —Aparte que se equivoca en algo…


    — ¿Eh?


    —No todos son tan malas personas, ya que si no usted… no sería mi amiga.


    Ella se puso contenta por la forma de pensar de su compañero, se sentía muy orgullosa de él.


    —Supongo…que tienes razón.


    Fin del flashback:


    —Gerardo, no luches por las personas sin corazón que te hirieron, si quieres no luches por aquellos rufianes que son abusivos por su poder adquisitivo o por quienes matan, mienten o engañan. Si vas a pelear por una buena causa, que sea por aquellos a los que amas, lucha por sus sueños y el tuyo propio y siempre que creas que no puedes hacerlo por tu desdicha, no bajes los brazos, porque lo mejor que puedes hacer cuando recibes un golpe es…dar la otra mejilla. — Le dijo con una sonrisa.


    No hay motivos para dudar, chicos…salven a Sefiro del mal.




    PROXIMO CAPITULO: EL DOLOR DE ESTEFANI
     
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