Todo lo hago por ti [hina]

Hola aquí esta otro cap y gracias a tus cometarios one-chan y también agradezco a Clary Winslow y AdriiHyuga =)

Empecemos

Cap#6 Nueva Hinata

En el salón de clases todo estaba ruidoso o eso pensó Hinata. La morena se quedó en el marco de la puerta observando todo el alboroto y escándalo del aula. Todos hacían los que querían pero especialmente las chicas que saltaban y gritaban cosa que ella no entendía hasta que, divisó a sus amigas que estaban cerca del escritorio del profesor.


Vio a una rubia despampanante sentada de piernas cruzadas sobre el escritorio del profesor apuntando con el dedo índice, acusadoramente, a una exótica pelirosa, y esta, se encontraba de brazos cruzados con el rostro ruborizado y la mirada en el piso. En medio de estas se encontraba una castaña de ojos negros y de estatura pequeña (un poco más baja que Hinata) que estaba inclinada ligeramente como para poder ver el rostro sonrojado de Sakura más de cerca.


Hinata pensó que le estarían diciendo a tal hermosa oji-jade para que la mantuvieran en ese estado. Entonces por impulso de su cuerpo, ya que siempre lo hacía antes de entrar al salón, desvió su mirada hacia el penúltimo puesto de la columna que estaba junto a la ventana y observó a cierto rubio conversando amenamente con su mejor amigo Sasuke( este estaba atrás de Naruto).En lo poco que quedo viendo notó que Naruto estaba sonriendo .Entonces lo que llevó a la morena a pensar que no se acordaba lo de hace rato.


Ella era tan insignificante en la vida de Naruto que ni siquiera se acordaba de que le hizo daño en su brazo. Instintivamente se tocó el antebrazo izquierdo con su mano derecha haciendo presión ligera. Como la vida puede ser tan injusta “yo amándote en secreto y tu…”.sus pensamiento fueron interrumpidas por una voz fémina.

¾ Hinata-chan que haces parada en la puerta¾ dijo la rubia hermosa saludando de la mano (aun sentada sobre el escritorio)¾ ven entra!!

La ojiperla solo acertó a sonreírle de manera cálida y caminó hacia donde estaban sus tres amigas.

¾ Ohayō gozaimasu Ino-chan, Sakura-chan, Matsuri-chan¾ haciendo una leve reverencia al final.

¾Ohayō Hinata-chan¾ respondieron al unisonó las tres bellas chicas

¾ Hinata-chan por que estabas parada en la puerta¾ preguntó una curiosa castaña

¾ B-bueno etto yo…estaba viendo el desorden del salón¾ dijo la Hyuga

¾Ah no seas mentirosa Hinata-chan si te caché mirando a Naruto¾ habló la rubia en forma de burla.

¾ N-no claro q-que no Ino-chan estas e-equivocada¾ defendió nerviosamente la ojiperla colorada por el comentario.

¾ Ino-cerda deja en paz a Hinata. No vez que no somos como tú, que siempre piensa en chicos a pesar que tienes novio¾ remató la pelirosa y sonrió de manera triunfante.

¾ No seas boba frentona. El hecho de que haya dicho en Itachi-san es lindo no significa que me guste solo es una apreciación femenil.¾ dijo la ojiazul ¾ Además yo no fui la que casi se desmaya con solo verlo y pensar que te gustaba Sasuke-kun¾ poniendo su cara ganadora y pícara a la vez.

¾Itachi-san?¾ dijo la morena a la castaña

¾Es que no sabes Hinata-chan¾preguntó incrédula la castaña y por respuesta recibió un movimiento de cabeza negativa de parte de la morena.¾ Pues bien. Es que paso algo tan kawai!!! Hinata-chan lo hubieras visto. El vocalista de la banda Akatsuki visito nuestro colegio ¾con cada palabra a Matsuri le salían corazones de los ojos e irradiaba tanta dulzura con solo mencionarlos.

A Hinata le salieron tres gotitas detrás de la cabeza por la actitud tan empalagosa de la castaña. Y así entendió por también las chicas del curso estaban haciendo un completo alboroto.


¾Por eso es que estaban los alumnos amontonados en la entrada del colegio¾ recordó la ojiperla.

¾ Exacto. Y también porque besó la mano de Sakura-chan.¾ Señalando a la mencionada y esta se pudo roja como el tomate.

¾¡Q-que d-dices Matsuri-chan! ¾ se trató de defender la pelirosa.¾ S-si sabes que m-me g-gusta Sasuke-kun¾ dándose cuenta de lo que dijo. Se tapó la cara con ambas manos en señal de vergüenza.

¾ Que mentirosa eres Sa-ku-ra. Te gusta Itachi-san. Te gusta Itachi-san. Te gusta Itachi-san¾ se burló la rubia, aunque ella bien sabe el amor abnegado que tiene su mejor amiga hacia el pelinegro, pero solo lo hacía por joda.

¾ No es cierto!¾ dijo una molesta Sakura

¾Si es cierto!¾ siguió burlándose Ino

¾No!

¾Si!

Mientras ocurría esta pelea de sí y no, Hinata y Matsuri quedaron en segundo plano. Se sentían depresivas.

¾Que no!¾ Saco la lengua Sakura de forma infantil¾ Ino-cerda!

¾Que si!¾ también imitando a la pelirosa solo que ella agregó el cruzado de brazos¾ Frentona!

¾ Chicas por favor dejen de pelear¾ entrando Hinata para participar en la discusión

¾Está bien¾calmada¾ Pero dile a Ino-cerda que no diga… que no diga… lo que no es verdad!!!¾ Argumentó la Haruno.

¾Pero si son verdades¾ resopló la rubia

¾ Hinata-chan si ves! tu tratas de calmarla y no se deja¾ añadió la pelirosa


Comentario que molestó a Ino y dando comienzo a otra nueva pelea. Pero aunque pelearan es su forma de decirse “eres mi mejor amiga”.Esto fue motivo de una cálida y sincera sonrisa por parte de Hinata y con ello recordó que Ten-ten y ella eran así a veces (solo a veces). La morena en su cerebro pensaba en la manera como contarle a Ten-ten sobre el pequeño problema con Naruto. No sabía cómo reaccionaría su amiga ya que ella suele ser, como decirlo, explosiva.

¾ Chicas y-ya vamos a nuestros p-puestos que ya viene el profesor¾ insistió la dulce Hinata


¾ Si chicas apúrense que el maestro viene subiendo las escaleras.¾ habló una chica.

Hinata se quedó pasmada sabía exactamente de quien era la voz de la fémina

¾ Ohayō Hyuga-san¾ saludo de forma cortés Shion y caminó hasta su puesto sin esperar la respuesta de Hinata dejándola con el saludo en la boca.

¾ Srta. Hyuga puede irse a su puesto.¾ una voz masculina y profunda fue la que la saco de ese estado de sorpresa.

¾E-etto G-gomen-nasai Asuma-sensei¾ retirándose a su puesto junto a Shion.


En la clases de Asuma-sensei ósea literatura envió una tarea de hacer un poema, para la próxima semana. Problemático pensó Shikamaru. Además de esto la tres primeras horas restantes solo dieron clases y no mandaron tareas. Toco el timbre de receso.



En el receso decidió contarle todo a Ten-ten. Pero antes tenía que decirles a su amigo Kiba y a sus amigas que no comerían con ellos.

¾ Kiba-kun hoy voy a comer con Ten-ten ¾ dijo contenta la morena

¾ Ehhh!! ¿ por qué?¾ Contesto un incrédulo chico perruno.

¾ No seas egoísta Kiba. Ella nació sola y debe de hacer lo que ella quiere.¾ dijo repentinamente un chico encapuchado de lentes oscuros.

¾Shino ¡No te metas! Y yo no soy egoist…¾no acabó la palabra el castaño

¾ Ve Hinata anda come con Ten-ten.No pasa mucho tiempo con ella. Y deberías aprovechar el receso.¾ Ignorando de manera olímpica a Kiba.

¾Esta bien Shino-kun. D-demo Kiba –kun está enojado¾ dijo preocupada la ojiperla

¾¡Claro que estoy enojad…!¾ insistió Kiba pero fue tapado de boca por una mano

¾ Es tu imaginación Hinata. Nos vamos. Adiós Hinata¾girándose dispuesto a marcharse, ante el forcejeo de Kiba. Pero lo detuvo una mano.

¾Gracias Shino –kun por entenderme¾ le dedicó una sonrisa radiante.

¾De nada para qué son los amigos¾ se marchó arrastrando a Kiba a su paso.

Ya solo faltaban decirles a las chicas. Las encontró en la cafetería comprando para comer.

¾ Chicas voy a comer con Ten-ten ¾ comentó la morena¾ No les molesta.

¾Claro que no Hina-chan!. Puedes ir no más, no hay problema¾ dijo la bella pelirosa.

¾Además Matsuri está acompañando a Gaara.¾ Argumentó Ino de manera pícara.

¾Tu todo piensa mal Ino. Si bien sabemos que es su trabajo¾ defendiendo a Matsuri.

¾Si ya sé. Solo era una bromita. Nada más.


Nadie, aparte de nosotras, sabe que Matsuri trabajo como sirvienta en la casa de Gaara y que gracias a la familia del pelirrojo de ojos aguamarina ella puede estudiar en una buena escuela. Aunque más por trabajo Gaara y Matsuri se llevan como dos buenos amigos. Ya con el permiso de sus amigas buscaba por todos los lados a Ten-ten hasta que la encontró comiendo sola en césped detrás de las canchas de tenis.


¾ ¡Hola Ten-ten! ¿Qué haces comiendo sola?¿Dónde está Neji-Nissan?¾ Pregunto mirando hacia todos lados buscando al castaño.

¾Hola Hinata. Pues Neji está en una reunión del consejo estudiantil¾ media desanimada¾ Pero ahora que estas aquí no voy a comer sola. ¿compraste tus comida ya?¿Yo traje emparedados y jugo de naranja?¾ dijo ofreciéndole una bolsa a Hinata.

Ahora que se acordaba tanta fue la prisa de buscar a su amiga que olvido pedir su comida. Así que la recibió con suma alegría.

¾Arigato Ten-ten¾ sonriendo.

Terminado su comida la ojos-chocolates miraba a Hinata y esta tenía la mirada perdida, comía mecánicamente. Eso fue motivo de preocupación

¾Hinata que pasa. ¿Me quieres contar algo?¾ Puso una mano en el hombro de la morena de forma maternal.


Y esta se quedó con el emparedado en la entrada de la boca. Dio un mordisco, masticó, tragó y bebió el jugo tan despacio hasta acabarlo.


¾Etto Ten-ten … N-Naruto-kun y yo¾ trató de explicar la ojiperla juntando sus dedos índices


Pero Ten-ten proceso de una manera errónea la situación. Y se puso contenta por el triunfo de su amiga en el amor. “Hasta que por fin Naruto dejo de ser tan tonto” pensó la oji-chocolate. Sin previo aviso esta se paró y cogió a Hinata por el brazo lastimado y si querer puso tal presión que Hinata chilló de dolor. Cosa que preocupó de sobre manera a la castaña


¾ ¿Qué paso?¿Te lastimé Hinata? ¡Déjame ver!¾ Preocupada.


Hinata no la miraba y Ten-ten creyó que fue su culpa así que, subió las mangas de su blusa y la castaña observó un morado intenso que se marcaba imponente en la clara piel de la ojiperla. Ten-ten no creía que hizo tal fuerza que dañó a su amiga.



¾ Amiga… no es tu culpa ¾ habló serenamente la morena para continuar¾ Sentémonos y te cuento.


Cada cosa que contaba Hinata la oji-chocolate apretaba los puños y chocaba sus dientes uno con otros. La morena relataba lo sucedió cabizbaja y arrodillada sobre su rodillas.


¾¿¡Que!? ¿Qué te hizo qué? Yo creía que Naruto era un bobo pero ahora se ganó el premio mayor al más estúpido del planeta.¾ Suspirando ruidosamente como un toro apunto de atacar.¾ ¡Esto es inaceptable!. Dónde… dónde está ese estúpido. ¡Lo voy a descuartizar vivo!


La chica estaba dispuesta a pararse pero la morena la detuvo y dijo:

¾ Por favor. Por favor Ten-ten no le hagas nada¾ derramando un poco de lágrimas.¾No es fue su culpa.

¾Que no fue su culpa. Pero si te lastimó

¾Él solamente no estaba en sí. Un error lo comete cualquiera. Por favor no le hagas daño.¾ Rogaba la Hyuga.


La castaña no lo asimilaba ella prefería a Naruto antes de que ella misma. Eso le molesto de sobremanera y levantó con una sola mano del suelo a Hinata y le dio una fuerte cachetada que retumbó en todo el campo vacío de tenis. La cachetada tiro a la Hyuga al piso.



La morena se quedó pasmada en el suelo tocando su mejilla. No lloraba sus lágrimas se estancaron en sus ojos. Estaba en shock que no podía llorar. La ojiperla levantó su cabeza y vio a una castaña que tenía sus ojos cristalinos pero reflejaba impotencia y furia.


¾Escúchame bien Hinata yo te quiero demasiado tanto que te quiero como la hermana que nunca tuve¾agachándose hacia Hinata y sobándole la mejilla roja por el golpe¾Y no soporto que seas tan compasiva que hasta llegas a humillarte a tí misma por el bien de los demás. No te golpee por gusto solo hice algo que de alguna manera entres en razón. Te quiero amiga-hermana del alma.¾ Besándole la cabeza de forma maternal.


Hinata escuchaba cada palabra de su amiga, tan llenas a de amor pero al mismo tiempo de dureza que podía cortar hierro. Así era ella. Todo lo que dijo su amiga era verdad. Así que abrazó a la castaña. Tenten definitivamente era su one-san. Ya que ella no tenía hermanas, era hija única. Solo tenía a su primo Neji y a su padre. Porque su madre falleció dando a luz y llevándose consigo la vida del pequeño ser que entonces sería su hermana.


En el pecho de Tenten la ojiperla se recostó. Y en ese momento entendió que antes de amar a una persona tienes que amarte a ti mismo. De ahora en adelante ella se amaría y protegería primero, antes de amar y proteger a otra persona.


¾Gracias. Tenten te quiero mucho. Y no te preocupes ya no voy a ser tan “compasiva”. Voy a amar a Naruto-kun pero no voy a dejarme humillar. Por él ni por nadie.

¾Me lo prometes Hinata¾ sobándole suavemente la cabeza de morena.

¾Te lo prometo hermana.


Así las dos se levantaron y la castaña con un poco de maquillaje ocultó la marca roja de la mejilla de la Hyuga. Dándole como resultado que se viera realmente hermosa cosa que avergonzó a la morena. Entre risas y bromas pasaron el tiempo del recreo. Así tocó el timbre que dio por terminada la hora. Se iban retirando a sus aulas juntas pero su amiga dijo que tenía una cosa que hacer “de vida o muerte”.Asi que la entendió y ella se fue a su curso sola.



En la quinta hora después del receso tocaba matemáticas con la terrible Anko-sensei (como la llamaban todos en el instituto).Notó algo extraño, bueno no tanto ya que siempre era costumbre, Naruto no estaba en la clase. Eso le preocupó ya que a la sensei era muy, muy estricta con respecto a la llegadas tarde. No es que estuviera rompiendo la promesa que le hizo a Tenten pero tampoco podia dejar de preocuparse por el rubio.


¾D-disculpe Anko-sensei p-por la t-tardanza. Me da permiso para entrar.


Entró repentinamente el dueño de los sueños de Hinata. Se veía agitado pareciera que hubiese corrido bastante. La maestra se le quedo viendo con una ceja alzada y una mirada penetrante que atravesó la pared (figuradamente).



¾¡Sr. Namikase se da cuenta de la hora que es!¾ dijo señalando el reloj encima del marco de la puerte detrás de Naruto¾ son las 11:00am ,te has pasado quince minutos de mi clase. ¡Sabes cuantos conocimientos has perdido Namikase!.

¾Bueno y-yo m-me q-quede h-haciendo algo i-importante¾ trató de defenderse el rubio. Se sentía intimidado por la profesora.

¾Que tan importante puede ser como para perderse mi valiosa clase niñito mimado de mami.¾ Acusó la mujer.

¾Y-yo …¾ pero de repente la mirada azulada se posó sobre la hermosa morena de ojos perla que quedo cohibida ante esta mirada. Su mirada transmitió “culpa”. Que extraño pensó Hinata.

¾¡¡¡¡¡Entra de una buena vez!!!. Y en la otra que llegues tarde tendrás tarea para toda tu millonaria vida. ¡Entendiste Namikase!

¾S-si s-srta Anko-sensei¾ de verdad da miedo pensó el rubio. Dirigiéndose a su lugar.

¾Como siempre legas tarde por eso eres un do-be¾ se burló un guapo azabache

¾Cállate Sasuke-teme.

¾¡Se van a callar! O quieres morir tan jóvenes¾ dijo Anko con una aura asesina a su alrededor.

¾S-sí. Nos callamos.¾ Dijeron al unísono los dos jóvenes.

Todo el salón se empezaron a reír de los chicos. Pero se callaron al instante que vieron a la maestra lanzar esa mirada asesina.

¾Si están tan energéticos como para reírse. Van hacer los ejercicios de la página tres. Y les digo en total son treinta.¾ empezó a reir como loca la maestra.


Durante el transcurso de las cuatro ultima horas. Hinata sentía una mirada sobre su espalda. Y resultó ser que la observaba Naruto. No podía ni concentrase en sus clases. Ya al término de estas salió directo a ver a su primo. Pero se encontró con la sorpresa que se quedaría por asuntos escolares y su mejor amiga Tenten se fue temprano por motivos familiares. Y ahora que recordaba había dicho en su casa que no la fueran haber en la limo. Buscaba a sus otras amigas y ya tenían planes se había ido en el instante en que ella se había ido a buscar a su primo.


¾Que mal tendré que irme sola en el metro¾ dijo Hinata saliendo del portón del colegio.

¾Hinata si quieres te puedo llevar. Y podamos hablar. Te parece

Una voz masculina se hizo oír. La morena la reconoció al instante esa voz era de…

¾N-Na-naruto-kun!!!!!!

Continurá…

Bueno gracias por haber leído es te capitulo

¿Qué les pareció?

¿Qué parte le gusto más?

Y si quieren decir algo mas pueden escribirlo ( no soy buena haciendo preguntas jjijij)

Sayonara!!!!

 

Este capítulo es uno especial ya que narra partes de la historia que no pongo

Porque si lo hago me desvío del tema y pierdo el hilo

Cap#7 ESPECIAL GAAMATSU

En la hora del recreo, Matsuri se encontraba junto a su amo Gaara. Sentados sobre el pasto verde en un lugar un tanto alejado del edificio escolar donde disfrutaban de una deliciosa comida. Matsuri parloteaba como nunca puesto que estaba tan emocionada porque no hace mucho había podido ver de cerca al vocalista de la banda “Akatsuki”.

¾Gaara-sama no cree que hoy es un día sumamente lindo…¾ Decía la castaña con sus manos entrelazadas sobre su pecho.

¾Claro¾ dijo el guapo pelirrojo

¾ Oiga Gaara-sama el grupo Akatsuki va a dar un concierto privado en la empresa de Uchiha-san.¾ Decía la castaña acercándosele al pelirrojo para quedar frente a frente.

Este se al ver el acercamiento de la ojinegra se quedó con el pan en la entrada de la boca.

¾No Matsuri no sabía. No soy adivino para saberlo todo y peor aún si es un grupo tan malo.¾ Dijo metiéndose a la boca un sanduche.

¾Está muy equivocado amo…¾ lo dijo para fastidiar a Gaara.

Puesto que a él no le gustaba que le dijeran así. El aceptaba que le dijera Gaara-sama, pero detestaba que le dijeran amo. Él pensaba que era denigrar a una persona. La castaña retrocedió un poco para quedar sentada en frente del pelirrojo. Esta chica puso su mejor cara de madre regañona.

¾Usted no sabe nada de las bandas de hoy. Solo le gusta escuchar esa música tan aburrida que hasta me duermo. Como se llama…¾ dubitativa

¾Se llama música clásica.

¾Eso música clásica. Están aburrido. No sé cómo soporta esa tonadas tan extremadamente pacíficas. Yo no la aguanto. A mí me gusta el rock…

La castaña de repente se puso de pie e instantáneamente apareció una tarima y ella era la guitarrista. Entonces ella hacia como si tuviera la guitarra en su manos y la tocaba con tanta pasión, a su alrededor enseguida se llenó de público entonces, Gaara miro atónito la situación con una gota detrás de la cabeza al estilo anime. Se preguntaba cómo es que ella podía hacer eso.

Al terminar, Matsuri bajo del escenario (imaginario) y firmo autógrafos a personas (imaginarias) que a aclamaban a gritos. Todo esto le pareció una total ridiculez al pelirrojo.

¾Si ese es mi sueño conocer a la banda de Rock más cooooll del siglo 21.

“Que no se habrá dado cuenta del tremendo show que protagonizó. O será que por tanto andar con ella me hizo efecto y me estoy volviendo loco” Pensó el pelirrojo.

¾Gaara-sama me escuchas.

¾Así claro ¿que decías?

¾Que si podemos ir el sábado al concierto de Akatsuki. ¡Onegai! ¾ poniendo la cara más tierna y dulce que pudo.

¾No

¾Pero…

¾Eh dicho que no. No ves que no me gusta ese tipo de música del diablo. Además vas a estar gritando como loca. Y todavía soy muy joven para quedarme sordo.¾Dijo el pelirrojo de manera cortante.

¾Está bien si no quieres ir yo si iré. No me voy a perder la oportunidad de conocer a Sasori-san.¾ Le sacó la lengua.

¾No sé qué le ves a ese cantantucho de Rock¾ dijo de manera burlona.

¾¿Qué es lo que le veo?¾ Enojada¾ Pues sencillamente es guapísimo, me gusta su cabello rojo encendido. Nunca había visto un cabello tan rojo en mi vida.

“Qué y el mío qué. Acaso lo tengo púrpura” pensó Gaara tocándose el cabello.

¾Sasori es alto, bello, hermoso, y tiene una mirada que te atraviesa el corazón.¾ En este punto la castaña tenia dibujado corazones en sus ojos.

¾¿Y?¾ Contestó de manera arrogante el pelirrojo, con cierto grado de “celos”.

¾¿Y qué? Gaara-sama no me diga que tiene celos de Sasori-san.

¾Claro que no!

¾Pues yo creo que si¾ dijo la castaña codeando al chico

¾Como voy a estar celoso de alguien tan…tan arrrgggghhhh¾ Gruñó Gaara.

¾Lo sabía esta celoso. Esta celoso se te nota en la mirada¾ cantó la castaña

¾Si vas a seguir comportándote como una niñita mejor me voy¾ agregó un molesto Gaara.

¾P-pero Gaara-sama solo es una bromita nada más¾ dijo dándole una palmada en la espalda¾ Relajase si…

¾Estoy relajado Matsuri. Pero no soporto que digas cosa lindas de otros chicos ¾ el chico se paró de donde estaba y se cruzó de brazos

Respuesta que dejo atónita a cierta chica de ojos negros. No creía que Gaara estuviera enojado solo porque dijo que su favorito de la banda Akatsuki era el guapo y extravagante pelirrojo Sasori-san.

“Uy no metí la pata, porque tuve que abrir mi bocota. Por qué lo tuve que decir de esa manera.”

¾Gaara-sama no se preocupe que yo siempre voy a ser su amiga. Entendido. Aunque me guste una estrella de rock siempre voy a estar a su lado.

Dijo la dulce chica abrazándolo por detrás a Gaara. Acto que le erizo la piel al pelirrojo.

¾Discúlpeme por molestarlo. ¾ dijo separándose del pelirrojo hasta posicionarse en frente de él.

¾Está bien Matsuri. Asunto olvidado.

¾Estoy contenta de ser lo mejores amigos del mundo. Ni aunque nos casemos no dejare que se pierda nuestra amistad. Te quiero Gaara-sama.

Entonces sin previo aviso abrazó otra vez al chico y este le correspondió al abrazo lo que desconcertó a Matsuri porque este nunca respondía a eso actos de cariño. Pero lo paso por alto. Estuvieron un rato así bueno eso es lo que pensó Gaara, pero ya tenían bastante tiempo en esa posición. Toco el timbre pero, parece que la única que lo escucho fue Matsuri por que el pelirrojo ni siquiera se inmuto en lo absoluto.

¾Gaara-sama estoy feliz de que me abrace. Pero ya tocaron el timbre que da el final del recreo.

El chico dándose cuenta de lo que hacía, enseguida se separó abruptamente empujando a Matsuri. Pero fue más rápido y la cogió del brazo y la haló. Quedando los dos, mirada con mirada. El chico se perdió en ese par de ojos negros como la noche. Ojos que Gaara nunca quería que se fueran de su lado. Él sentía que ese par de simple ojos pudieran transmitirle paz y dulzura en tan solo instantes. La chica ignoraba la situación que pasaba el pelirrojo en ese momento.

Ella solo lo miraba con ojos expectantes. Mientras él se deleitaba con cada expresión que le brindaba la pequeña Matsuri.

¾Tenga más cuidado la próxima vez Gaara-sama. Casi me rompo la cabeza¾ exageró Matsuri.

¾Está bien. Vámonos ya

¾Pero antes que todo ¾ la castaña miró hacia el horizonte y dijo¾ Una carrerita. ¡Tú las traes Gaara-sama!.

Entonces la castaña empezó a correr a toda máquina. Y como no si ella es una muy buen atleta.

¾¡Vamos amo alcánzame!¾ Gritaba una y otra vez Matsuri.

Lo último le disgusto al pelirrojo. Entonces este salió corriendo dejando todo lo que habían comido tirado en el piso. “Mejor lo recojo antes de que no metamos en problema”.

¾Gaara-sama deje eso para después. Para que están los conserjes. Tienes que ser más impulsivo como lo es Naruto-kun sino nunca se va a divertir. Alcánzame.¾ Gritó las castaña ya muy lejos del chico.

“Pequeña y gritona. Esta tan lejos pero hasta acá se le oye su dulce voz”. Pensó el pelirrojo.

¾Ya voy ya voy. Y no creas que voy a ser como ese problemático de Naruto. Me oíste Matsuri.

Pero las palabras se la llevo el viento ya que la chica ya ni se la veía. Capaz y ya estaba en el curso.

¾ Esta chica corre tan rápido.

Gaara fue directo al curso y allí estaba la castaña riéndose de él por no haberla alcanzado.

¾Llegas tarde tortuga otra vez. Llegas tarde tortuga otra vez ¾ La cantaba una y otra vez la pequeña castaña.

El pelirrojo solo sonreía y se fue a su puesto sin prestarle atención a Matsuri. Cosa que hacía solo para molestarla.

¾Sabaku No vuelve aquí y responde¾ dijo la chica al no conseguir respuesta.

Él bien sabía que a ella le molestaba ser ignorada.

Las clases pasaron hasta que llego la clase de Anko-sensei. Dicha profesora que les mando a resolver treinta ejercicios para el día siguiente. “Que fastidio”.Tendré que decirle a Gaara-sama que me ayude. ¿Y si no quiere? No si querrá. Si somos mejores amigos. Y los mejores amigos se ayudan, cierto.” Estas y otras cosas pensaba la castaña mientras veía de reojo a cierto pelirrojo que estaba a lado suyo.

Ya al término de las clases todos se dirigieron a sus casas pero en el caso de estos niños ricos a sus mansiones.

¾Chicas saben dónde se fue Hinata¾ preguntó la pelirrosa

¾ Creo que dijo que iba a buscar a su primo Neji.¾ Contestó la castaña.

¾Ah.

¾Chicas adiós. Nos vemos mañana.¾ Dijo una muy sonriente rubia

¾Claro adiós Ino-cerda.¾ Contestó una animada pelirrosa

¾Te respondería pero tengo que irme con mi amado novio ¾ saliendo del salón cogida de la mano del moreno Sai. Y este por despedida les dedico a Sakura y a Matsuri una sonrisa falsa.¾

¾¡Bueno adiós Ino!¾ gritó la castaña.¾ Adiós Sakurita. Te veo mañana.¾ se despidió la oji-negra de su amiga rosa.

¾Adiós Matsuri. Y adiós Gaara-kun.¾ Este no más asintió con la cabeza.

La chica rosa salió del salón y los dos chicos se quedaron solos.

¾Bueno ya vámonos que tengo mucho que hacer¾ dijo rápidamente la ojinegra.

¾Ya¾ fue lo único que pronuncio el pelirrojo.


Ya en la mansión Sabaku No siendo las nueve en punto de la noche Matsuri se agarraba la cabeza con las dos manos y tiraba de sus cabellos debido a que no podía resolver ni la mitad de los ejercicios de matemática que le había mandado Anko-sensei.

¾Vaya por qué me quede callada debí haberme atrevido a preguntar a Gaara-sama si me ayudaba en todos estos problemáticos ejercicios. Vaya creo que se me ha pegado lo de Shikamaru- kun.¾ Sonrió por este comentario.

Vio su cuaderno de matemáticas con puros tachones y borrones. Miro a su alrededor su cesto de basura estaba lleno de hojas de papel.

¾No hay forma tendré que decirle.

Salió de su cuarto para dirigirse a donde el pelirrojo. Tocó la puerta de su cuarto y como no respondieron gritó

¾¡Gaara-sama necesito pedirle un favor!

Solo como respuesta se oyó un ¡Ya voy!

“Esta chica que querrá a estas horas. No será que…” pensaba el pelirrojo pero sacudió su cabeza para evitar otros pensamientos. El chico abrió la puerta encontrándose con la dulce chica con una pijama azul de ojo rojos era de pantalón largo y abrigo.

¾Que necesitas Matsuri. Te das cuenta de que hora es

¾Si lo sé Gaara-sama¾ la ojinegra rasco su nuca en señal de nerviosismo.¾

Q-quería decirle si me p-podría ayudar con la t-tarea de m-matemáticas.¾ con la otra mano levantada enseñando su cuaderno lleno de borrones.

¾¿La tarea de matemáticas?¾ Asintió la castaña¾ Esta bien te ayudare sólo porque se me había olvidado de hacerla. Así podemos hacerla juntos. Te parece.

¾Me parece perfecto.

La castaña no se sorprendió al entrar al cuarto de Gaara. Amplio y ordenado pues claro que estaría ordenado si ella lo arreglaba. Sus paredes eran de color plomo con un rojo cobrizo. La daba un aspecto elegante. Era bastante grande ya que tenía un escritorio con una laptop encima, una pantalla de plasma, su inmenso ropero, y un estante lleno de Cds de música clásica. Su cama era amplia de sábanas blancas con almohadas de forro plomo.


Se ubicaron en el escritorio donde comenzaron a realizar la tarea. Gaara le explicaba todo lo que tenía que hacer para resolver cada ejercicio y ella como un buen aprendiz lo oía atentamente. Terminaron de hacer los treinta ejercicios. La castaña se desperezó y vio en su celular que eran las diez y cuarenta y cinco de la noche.

¾Gaara-sama gracias por haberme ayudado con todo esto.¾ Sin previo aviso besó la mejilla del pelirrojo y a este lo tomo por sorpresa.¾ Buenas Noches. Y por cierto me gusta su cabello Rojo.

La castaña se levantó rápido de su sitio abrió la puerta y salió los más veloz posible para que no le reclamara nada el chico por haberlo besado.

El chico se tocó la mejilla. Aun sentía los labios húmedos la chica sobre su mejilla.Ademas se sintio feliz porque le dijo que le gustaba su cabello rojo.
Si lo aceptaba se había enamorado de Matsuri desde que llego a la casa, eso lo tenía bien presente. Pero tenía que conformarse con ser amigos.

¾Buenas Noches mi dulce Matsuri.


cuénteme... ¿que les gusto?
escriban todo lo que les gustó.

 

Hola!!!!

Gracias `por seguir leyendo mi fic y Gracias a los comentario de:

AdriiHyuga:)

Astrid;)

Anabella Noviembre:D

Alisse Madness:p


Cap # 8 Perdon

¾Que mal tendré que irme sola en el metro¾ dijo Hinata saliendo del portón del colegio.

¾Hinata si quieres te puedo llevar. Y podamos hablar. Te parece

Una voz masculina se hizo oír. La morena la reconoció al instante esa voz era de…


¾N-Na-naruto-kun!!!!!!

—No te asustes tanto Hinata-chan. Te eh buscado por todo el colegio en estos últimos quince minutos. Eh corrido bastante. —decía el rubio muy animado.

Cosa que le pareció muy raro a la hermosa Hyuga ya que no mas en la mañana la había tratado muy mal, después la había ignorado como si no pasara nada, y en la clase de matemática no había dejado de mirarla. Ahora estaba actuando como el Naruto de siempre “Feliz y rebosante de energía” así era como le decía la ojiplata al rubio. La morena se le quedó viendo a Naruto como ida no entendía el comportamiento tan extraño del rubio.

¾ ¿Por qué me estabas buscando Naruto-kun? Y ¿Por qué quieres hablar conmigo?— Dijo de forma cortante la ojiplata.

Lo que dijo ella sorprendió al rubio pero más a ella misma pues nunca le había contestado de esa manera a alguien. Se parecía a su primo. Fue una respuesta tan fría que ella misma se congeló (literalmente).

La pregunta le calló como agua fría al ojiazul. Su expresión paso de contento a una serio y con algo de culpabilidad. Esto causo cierto malestar en el corazón de la morena. Pero algo muy en su interior le decía que esa era la manera de hacer las cosas. Esa voz más bien era la de su mejor amiga.

¾ Hinata eso es por que…

Flash Back

Dos apuestos jóvenes estaban disfrutando de su delicioso lunch pues estaban en el receso. Aunque el rubio solo comía lentamente ya que todavía se sentía vacío por el abandono de su amor.

— Vamos dobe ya paso. Fue ayer déjala ir. Ya olvídala es alguien que no vale la pena. — dijo uno de los chicos que estaban en ese lugar el cual tenía un cabello negro azabache.

Aunque no le gustaba admitirlo le molestaba y dolía ver que su mejor amigo estuviera asi por el amor de una mujer. Que para él no valía la pena. Si así era Sasuke Uchiha un chico que no se demostraba como era realmente ante nadie. Sólo que con Naruto siempre actuaba de esa manera. Ósea preocupado.

— Sasuke es que no es fácil olvidarme de ella.— dijo recostándose sobre piso de la terraza.

— Pero lo tiene que hacer. Es más bórrala de tu corazón— dijo el azabache arremedando la posición de su amigo.

— Nunca te has enamorado Sasuke es por eso que te parece fácil.

— Y para que enamorarse es una pérdida de tiempo. Y creo que te mereces a alguien mejor. — solucionó el azabache.

El único amor que tenía el moreno era su bellísima. madre era a la única mujer que amaba de verdad. Aparte de ella a ninguna mujer él ama. Él tuvo novias pero solo para pasar el rato. Solo eso.

—Pérdida de tiempo— repitió el rubio contando las nubes con sus dedos en el aire.— Alguien mejor— otra vez repitió el ojiazul.

Los dos apuestos chicos seguían acostados conversando de los pesares por los que está pasando el rubio. Como dos buenos amigos. Muchos decía que eran la peor y rara combinación de amistad que haya existido, eran tan… tan diferentes.

— Sabes Sasuke muchas gracias necesitaba hablar con alguien…— levantándose el rubio de su lugar para acercarse al barandal de la terraza.— Se nota que me quieres Sasuke- teme.

Se burló el rubio riéndose a carcajadas. El azabache molesto por esto se levantó y empezaron una pelea de “amigos”. De pronto se oyó el sonido de la puerta abrirse. Dando paso a una silueta femenina.

— Que interrumpo algo— dijo una bella chica de ojos chocolates con las cejas alzadas y con sus brazos puestos en jarra.

— No nada que ver Tenten— dijo Naruto de manera extrañada.

— Y por qué lo dices— hablo esta vez el guapo moreno.

— Pues…— dijo mirándolos detenidamente.

Cuando los dos amigos cayeron en cuenta de que Sasuke estaba encima de Naruto cogiéndolo por el cuello de la camisa. Al instante se separaron.

— Viste Dobe lo que haces pensar de nosotros con tus bormitas. — dijo molesto el moreno.

— Ay Sasuke no seas tan dramático además sabes que yo no le voy a eso.

— Como sea Naruto necesito hablar contigo ahora.— dijo la castaña haciendo sobresaltar a los dos chicos que allí se encontraban. Y estos cruzaron miradas.

— Como dices Tenten. Quieres hablar conmigo.

— Además de tonto eres sordo— dijo molesta la castaña— Sasuke por favor déjanos solo.

— No tengo porque hacerte caso Tenten.— dijo un frio Sasuke

— Pues deberías. Ahora vete de una vez.— hablo contradiciendo al moreno de forma fría también

— No tu no me mand…

— Sasuke— hablo serio Naruto. El azabache vio la expresión en el rostro de su mejor amigo y decidió salir.

— Ahora dime de que quieres hablar conmigo Tenten— habló de seriamente el apuesto rubio.

— Pues de Hinata. Voy hacer clara. Te pido que te disculpes con ella por lo que le hiciste.— acercándose peligrosamente al ojiazul.

— Disculparme por lo que le hice a Hinata- chan. ¿Qué le hice yo?— pregunto un confundido rubio.

— No seas baka. Le dijiste cosas muy feas e hirientes y no es justo que te desquites con ella solo porque terminaste con tu novia. — concluyó molesta la castaña.

— No sé de qué me hablas enserio Tenten. Yo nunca le haría daño a un amigo. — Dijo el rubio.

— Pues ahora si eres bobo por completo. Que no te acuerdas que en la mañana le dijiste que era débil y de paso le agarraste tan fuerte el brazo que le causaste un moretón. — Hablo a punto de reventar en furia la ojichocolate. — Recuerda. No puedo creer que fuera tan baka. Discúlpate con ella y hasta que no lo hagas yo te considerare como un desconocido.

Dicho esto la castaña se retiró retumbando muy fuerte la puerta. El timbre toco pero Naruto se quedó pasmado por lo que le acababa de decir Tenten. Ahora lo recordaba él había insultado y hasta agredido a su dulce amiga. Pero ¿porque lo habría olvidado?¿Por qué?. Acaso estaba tan perdido que se me nublan mis recuerdos. No sé lo que me pasa. Estaré tan pero tan enamorado de Shion que es en lo único que pienso. Que es lo que le hice a Hinata. Con esto último en mente despertó a la realidad. Y se dijo enmendar este terrible y grave error.

FIN DEL FLASH BACK

—Eso es porque…— pero antes de decir cualquier cosa, desvió la mirada, se dio media vuelta y dijo — Sígueme. Por favor Hinata-chan.

—Por qué habría de hacerlo— otra vez hablo con un tono frio. No se podía controlar. El chico no había volteado.

—Por favor…— esta vez se dio vuelta y la vio con ojos de súplica.

Dicho esto el ojiazul se encamino. La morena no tuvo otra opción que seguirlo. Hinata impulsivamente respondía de esa manera tan fría. Acaso muy dentro de ella le molestaba la presencia del rubio. Era por lo que le hizo. Le daba escalofríos llegar a pensar que ella odiaría a su amor el ojiazul. Sin darse cuenta la ojiplata llego hasta el parqueadero de la escuela, y vio que estaba justo en frente del auto de Naruto.

— Anda sube Hinata-chan— dijo el rubio abriéndole la puerta.

— …… — no dijo nada la ojiperla solo se subió sin mirarlo.

Naruto por su parte solo suspiro y también se subió al carro. Arrancaron mientras iban allí nadie hablaba. Solo miraban hacia donde no estuviera el otro. En el recorrido fueron hacia un lugar apartado de la ciudad. Exactamente donde estaba el mirador de Konoha. Hinata abrió los ojos perpleja. El auto se detuvo y el primero en bajar fue el ojiazul y este camino hacia la otra puerta del auto para abrírsela a la morena.

— Llegamos— exclamó el chico volviendo a su personalidad habitual con una sonrisa. Esta sonrisa contagio a la chica pero solo hizo una leve media sonrisa.

— Para que me trajiste aquí Naruto-kun— dijo bajando del auto.

— Te dije que teníamos que hablar. Y que mejor si es en un lugar como este.

Naruto con señas hizo que la morena lo siguiera. Como el auto no avanzaba hasta la punta del mirador lo tuvo que dejar al comienzo de las escalinatas del monte. Hinata iba detrás del rubio quien estaba con la manos sobre la nuca subiendo las escaleras de forma despreocupada. La Hyuga nunca había visitado este lugar, pese a vivir casi toda su vida en Konoha, jamás lo había hecho. Todo era hermoso mientras subía unas escaleras que estaba llenas de flores con un poco de verde debido a la humedad del habiente y que decir de sus árboles a su contorno le daban un ambiente como dijo su rubio “tranquilo” y con cierto toque mágico. Iba tan embobada por el paisaje que no se dio cuenta que Naruto se detuvo y chocó con su espalda.

— ¡Ay!— susurró la chica frotándose su nariz.

— Llegamos por fin!— dijo el rubio con una dulce sonrisa. Sorrajando a la Hyuga. Apartándose del rubio abriendo los ojos y quedando impactada por la vista.

El paisaje que le ofrecía la naturaleza era sencillamente hermoso. Había una pequeña banqueta con un techo de madera y flores de diversos colores enredadas en la patas y techo de la misma. Le daban un toque romántico. Y qué decir del pasto verde claro que se había formado por todo suelo con flores blancas, pero a excepción de un pequeño caminito dirigido hacia la banca. Era totalmente bello y despampanante. Se quedó parada allí con sus manos sobre sus pecho y suspirando, a la vez de percibir el más delicioso aroma de lirios tan fragante y fresco.

— Esto es hermoso…— mencionó la morena dando pasos en dirección a la banqueta que estaba cerca del barandal del monte.

La chica dejándose llevar se encamino hacia los límites del monte que eran los barandales, fue a apreciar el paisaje completo de toda la ciudad que le brindaba este lindo mirador.

— Ahora que ya estas clamada y relajada. Hablemos. — dijo el rubio haciendo que la morena saliera de su ensoñación.

— Que quieres decirme Naruto-kun.

— Pues…— se acercó a Hinata lentamente.

Entonces sin previo aviso el rubio tomo una de las blancas, suaves manos de porcelana de la ojiplata, envolviéndolas con sus dos manos. Y viéndola con ojos sinceros.

— Hinata-chan perdóname por lo que te hice por favor…— dijo el Namikase haciendo salir de sus hermosas pupilas azules una fina capa de líquido cristalino y salado, que bajaba por su rostro.

La ojiperla reacciono con un súbito sonrojo al contacto de la piel con Naruto pero cuando vio los ojos del rubio y puedo apreciar sus sinceridad en ellos. Las lágrimas del chico le transmitían algo que hacía que su corazón se quebrace en partecitas. Por impulso la Hyuga con la mano libre la puso sobre las manos del rubio y también con ciertas lágrimas rebeldes que competían por salir.

Por tanto Naruto en su cabeza pensaba que la ojiplata no le iba a perdonar por lo que le hizo. Quien iba a perdonar tremendos insultos. El motivo por el cual el la había llevado ese lugar era para que Hinata siquiera lo llegara a perdonar por sus actos. Su mente se contradecía una parte decía que la ojiperla lo iba perdonar porque eran amigos y la otra parte, la que tenía la razón, decía que no le iba a perdonar, y quien en sus cinco sentidos perdonaría a una persona que la maltrató y la insultó.

— Naruto-kun yo… Te perdono.— dedicándole una cálida y dulce sonrisa que derretiría los polos.

Estas palabras cogieron de sorpresa al rubio. Estaba en shock, como alguien podría perdonarlo así de fácil, sin recriminarlo sin reclamarle sin golpes o por lo menos una cacheta. Pero no, nada de eso lo único que recibió a cambio fue una dulce sonrisa. Entonces al fin se dio cuenta que la morena era una verdadera amiga y además una chica muy especial.

— ¡En serio Hinata-chan!— se dirigió a la chica con una sonrisa resplandeciente que podía iluminar la noches oscuras. La morena solo asintió con la cabeza.

Naruto se emocionó tanto que deshizo su agarre de manos y abrazó a Hinata. Esta ojiperla se quedó petrificada por la acción del rubio. Sentía las manos de Naruto sobre su espalda este acerco su boca a su oído para susúrrale.

— Gracias Hinata-chan. Te prometo que nunca más voy a volver a herirte de ese modo.

— No te preocupes Naruto-kun.— dijo también susurrándole al oído

— Me haces cosquillas Hinata-chan. Tu vos es demasiado suave y delicada que me hace cosquillas.— Dijo el ojiazul, todavía abrazado con la morena, con un sonrisa enmarcada en su rostro.

La ojiperla solo se sonrojo por el comentario. Si bien había escuchado le dijo que tenía un voz suave y delicada. No quería desmayarse en estos momentos. Ya había madurado lo suficiente como para solo sonrojarse. Lo de desmayarse quedo en sus niñez. La ojiperla no deshizo el abrazo es más ella iba a corresponder a ese abrazo, puesto que estaba estática, pero no conto con que Naruto se separara de ella. Se sintió frustrada la morena.

— Entonces Hinata-chan amigos de nuevo— extendió su mano ofreciéndosela a la ojiplata.

— Amigos… Naruto-kun — esta recibió la mano gustosa.

Tuvieron las manos en esa posición. Estaban en una distancia no muy lejana como uno veinte centímetros de distancia uno del otro. De repente el celular de Naruto sonó alterando de sobre manera a los chicos. Soltó el agarre de manos y contesto su celular que estaba en su bolsillo derecho en la parte trasera de su pantalón.

— Hola. Habla Naruto ‘ttebayo!

— Hijo veo que estas muy contento

— Mamá. ¿Qué haces llamándome?

— Que son esas formas de contestar Naruto. Te eh dicho mas de mil veces que no seas grosero.

— Si ya lo sé Mamá. Que quie… Que necesitas mamá— hizo una mueca, que le hizo salir una pequeña sonrisa a la morena.

— Así está mejor. Bueno Naruto quiero que vengas a la casa en este mismo instante y sin reproches vienes o vienes. Chao amor. — despues de esto colgó.

— Vaya después me dice a mí que no sea grosero y ella es la que cierra el teléfono sin esperar a que conteste.— refunfuñaba el chico, guardando su teléfono en su lugar habitual.

— Etto N-Naruto-kun que t-te dijo t-tu mamá— el aludido alzó la ceja sorprendido — a bueno s-si no me quieres d-decir está bien…— esta agachó su cabeza sintiéndose boba por entrometerse.

— No es eso sino empezaste a tartamudear. Y hace rato no lo hacías.— dijo de manera inquisitiva.

— B-bueno etto… es porque…—“ de una cierta manera estaba molesta contigo” pensó la ojiperla.

— En fin Hinata-chan. Te invito a almorzar a mi casa.

— Q-que?— Sorprendida


— Que te invito a almorzar a mi casa. Ya que mi mamá quiere que vaya en este momento a la casa y es malo hacerla enojar. — dijo el rubio pensando en la incontables veces que su madre se pone muy furiosa cuando no hacen lo que ella dice. — Y después paso a dejarte a tu casa en cuanto terminemos. Por favor Hinata-chan acepta. — rogaba el rubio con ojos de un cachorrito.


— Está bien Naruto-kun. — dijo alegremente.


— Pues bien entonces vamos Hinata-chan.


Antes de bajar del monte, la morena le dirigió una última mirada al paisaje tan hermoso que presenciaban sus ojos perlas. Ya llegando a la mansión Namikase, después de cinco minutos de viaje en los que el rubio y la morena conversaron amenamente y se revelaran ciertos secretos como que a la ojiperla le tenía miedo a las alturas y él le tenía pavor a los insectos.

— N-no puedo creer que l-le tengas miedo a los insectos N-Naruto-kun— se burlaba la ojiperla.

— Si suena inconcebible pero es cierto además solo los saben el teme de Sasuke, mi mamá, mi papá y ahora tu Hinata-chan.

Que divertido es pasar con Naruto-kun, pensó la ojiperla. Estando en la puerta de entrada hacia la mansión. Que por cierto era una mansión imponente con amplios jardines que podía dar cabida a cien autos, pero esto no sorprendió a la Hyuga puesto que ella también vivía en una enorme mansión. Aunque de algo si se diferenciaba entre la casa del rubio y la de ella, era ese no muy pequeño invernadero con diversos tipos de flores en la frentera izquierda de la mansión Namikase.

Naruto toco dos veces la puerta que fue suficiente para que le abrieran. Salió una de las sirvientas de la mansión.

— Hola. Bienvenido a casa joven Namikase. Pase por favor— la chica de cabellos azul y ojos celeste hizo una reverencia. — Disculpe mi imprudencia. Pase por favor usted también Srta. Hyuga. — Dijo la criada dándose cuenta de que no sólo el rubio había entrado.

La ojiperla solo le dedico a la chica una dulce sonrisa y esta hizo lo mismo. Los chicos pasaron al interior de la no muy humilde morada.

— Donde estará mi madre. Me hizo venir casi volando.— gruñía el rubio mientras pasaba a lo largo de la sala de estar.

— P-pues creo que d-debería estar en la cocina. Porque parece que se o-oyen voces desde e-ese lugar.

— Es cierto Hinata-chan. Eres muy lista.

— Gracias.— tuvo como reacción la ojiperla un sonrojo

Encaminándose a la cocina. Naruto iba al frente y Hinata detrás de él con la mirada en diversos puntos de la casa como observando cada detalle para no olvidarlo. Esta era una de las pocas vece que visitaba la casa de su amigo, eso dejo de hacerlo desde el día en que murió su adorada madre. La mamá de ella y la de Naruto junto con la mamá de Sasuke eran las mejores amigas, ya que cuando ellos tenía más o menos cinco años solían jugar los tres cuando sus madres hacia sus dichosos días de “chicas”. Sonrió ante esos recuerdos en los que su madre seguía con vida.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por un sonoro grito y luego un estruendoso sonido como que algo cayese a piso. Y sin más abrió sus ojos, ya que los tenia cerrados por la impresión, vio a sus amigo y/o amor platónico tirado en el piso con una chica sobre el abrazándolo por el cuello y besándolo melosamente por todo el rostro. Y el rubio solo acertaba a tratársela de quitársela de encima pero parecía que esa chica ponía mucha presión.

— ¡Bienvenido a casa primito querido del alma!— chilló la chica.

— ¡Primo!— repitió la ojiperla sorprendida y con un poco de recelo.

Bueno hasta aquí el cap

Espero que les haya gustado.

¿Les gusto?

¿Les gusto el modo en que Naruto se disculpó con Hinata?

¿Quién será la prima de Naruto?

Gracias por leerlo =) n_n:D;):)

 

GRACIAS A TODOS SUS COMENTARIOS

Acertaste AdriiHyuga ( creo que me lees la mente jajjaj ) Especialmente tus cometarios me llena de emoción y de ganas de hacer un buen trabajo, así que este capítulo lo hice para ti.:D

Alisse Madness tu cometario también estuvo fenomenal.;)

Agradesco también a ::D

Akarui sora

Spirity

Elizabeth Valentine

Sasaaral-chan

Gracias a sus cometarios estoy aqui:):):):):)

Cap 9 LA FAMILIA DE NARUTO

— ¡Bienvenido a casa primito querido del alma!— chilló la chica.

— ¡Primo!— repitió la ojiperla sorprendida y con un poco de recelo.

— Si es mi primo. Que hay algún problema con eso— dijo la pelirroja con cierto tono de molestia, con una mirada afilada detrás de sus lentes.— Y por cierto… ¿tú quién eres?— Mirándola de pies a cabeza, todavía encima del rubio. — ¿Que acaso eres Blanca Nieves?— rio la pelirroja por el apodo que le puso la desconocida (bueno en el caso de ella).

La morena se quedó quieta, estática, la manera de hablar de esa chica le era muy familiar. Será porque es sobrina de Kushina- san y ella también llamaba a su mamá Blanca Nieves. Por qué razón la llamaba así no lo sabía.

— B-blanca Nieves— repitió la ojiperla confundida y negando con la cabeza.— Yo me llamo Hyuga Hinata— chocando sus dedos, señal de nervios.

— Eres una Hyuga. Debí saberlo por tus ojos perlas y la manera tan refinada de hablar. — dijo la pelirroja a manera de burla. Haciendo sonrojar ligeramente a la ojiperla.

— Karin de una buena vez levántate que me estas aplastando.— gritó el ojiazul molesto, con sudor en la frente.— Ya bájate de mí Karin que pesas más que una vaca— agregó el ojiazul.

La aludida dejo de mirar a la morena y clavo sus ojos en su primo que estaba debajo de ella. Pero no era una simple mirada, esa mirada era penetrante, esto causó que una corriente eléctrica atravesara la espalda del rubio.

— Na-ru-to te arrepentirás de haberme dicho eso primito que-ri-do— deletreó cada palabra con cierto sarcasmo.

Ahora le recordaba, ella era la niña pelirroja que siempre estaba pegada a Naruto desde que eran muy niños. Antes cuando tenía cinco años Karin era gordita., rehonchita y siempre tenía una funda de chocolates en las manos. La forma tan graciosa que tenía su mejilla café a causa del chocolate. Esto le hizo salir una pequeña risita a la morena. Que no pasó desapercibida por Karin. Quién subió su mirada hasta la chica dueña de ojos perlas.

— De que te ríes Blanca Nieves. — desafío la chica de anteojos

— B-bueno e-etto y-yo s-solo— trataba de hablar la ojiperla.

— Me ocupare de ti más tarde. Ahora es turno para que mi primo reciba su castigo por decirme gorda. Estas listo Narutito. — Agregó la chica dulcemente.

Cuando su prima hablaba de esa manera tan dulce era porque estaba en serio problemas. Que le haría pensel rubio. La última vez que Karin se molestó no hizo nada en ese mismo instante y le pareció raro pero, al siguiente día amaneció en con todo y su cama en la piscina oyendo claramente como su querida prima decía a los lejos “Que bueno que decidas bañarte tan temprano Narutito”. Este pequeño recuerdo hizo temblar todo su cuerpo. Su prima levanto el brazo, el ojiazul solo acertó a cerrar sus ojos. Pero de repente…

— Hinata-chan puedes venir por favor— dijo tiernamente la pelirroja, levantándose del piso de donde tenía preso a Naruto.

Esto dejo descolocados a Hinata y a Naruto, quien por cierto estaba agradecido de no haber sido golpeado. La nombrada se alteró de sobre manera al pedido que le hizo la prima de su rubio amigo.

— Y-ya v-voy— dijo de manera atropellada la morena.

— Primito levántate por favor— el rubio palideció

— S-si K-Karin.

Karin acercó al rubio y a la ojiperla quedando los dos frente a frente, claro no podía faltar el sonrojo de la Hyuga. La pelirroja se puso en medio de los dos colgada del cuello de ambos.

— Como ustedes dos se rieron— mirando a la morena— y burlaron de mí— mirando a ojiazul.— Me tendrán que acompañar — los dos retenidos estaban nerviosos por lo que iba a decir la chica de lentes. — a ir de ¡compras!.

— Ehhhh!!!!!! — fue la respuesta de los dos chicos. Separándose de inmediato de la pelirroja.

— Tienen que recompensarme de alguna forma por haberse burlado de mi. — empezando a chillar con falsas lágrimas en los ojos y cierta aura depresiva.

— No creerás que me comeré ese cuento Karin— dijo el rubio.

— Y-yo lo siento Karin-san p-por haberme r-reído — habló la ojiperla sonriendo— Y no t-te preocupes, te a-acompañaré.

— En serio me acompañaras ¡Blanca Nieves!— exclamó la de ojos rojos felizmente.

— Le creíste Hinata-chan.—la nombrada asintió con la cabeza— Ella es una embustera ¡Solo mírala!.— señalando a su prima. — Hace un momento estaba triste y ahora le brillan los ojos. No te dejes manipular.

— B-bueno N-Naruto-kun tu prima se ve sincera.

— Eres muy buena conmigo Hinata-chan— decía Karin corriendo a abrazar a la ojiperla, quien se sintió cohibida ante el gesto tan cariñoso que le hizo la pelirroja.— Serás mi amiga Blanca Nieves.

— Y-yo t-tu a-amiga K-Karin-san— balbuceó la morena.— E-esta b-bien s-seremos amigas.

— ¡Que feliz me siento!. Tengo otra nueva amiga. Llámame Karin nada más. ¡Sí!.

— Está bien lo hare Karin-s… Karin

Su prima sí que era el colmo. Era demasiado bipolar, primero se enoja después se pone tan dulce, ¿¡qué le pasa a su prima!? y ahora es amiga de Hinata. Pero qué le vamos a hacer es su prima, además es una Uzumaki.

— Que pesada— murmuró el rubio. Sonriendo, pero en buena forma.

— ¿¡Que dijiste Naruto!?— reclamó la pelirroja, dejando a un lado a la morena. Yendo hacia el ojiazul.

— No es lo que piensas. No te lo dije por lo gorda sino porque eres demasiado molesta. — eso no fue una buena elección de palabras. Pensó el rubio. Estoy muerto.

— Ahora si sobrepasaste los limites primito querido. — habló enojada la pelirroja.

— K-Karin-san tal vez Naruto-kun no lo dijo con esa intención — Trató de ayudar a su amigo la ojiperla.

— No cambiara nada. — dijo decidida la chica de lentes.

La pelirroja tenía su mano directa hacia Naruto. Este otra vez cerró sus ojos.La morena también imito al rubio.

— ¡Ahhh Karin me duele!— chillo el ojiazul.

— Ya no lo lastimes más Karin— hablo la ojiperla con un hilo de voz. Pero ella la abrir los ojos se encontró con algo que no se esperaba.

Karin sostenía muy fuerte de las mejillas del rubio, causándole a este un dolor intenso con lágrimas en sus ojos. Al ver esto se le formo una gran gota al estilo anime detrás de la cabeza a Hinata, acompañado de una risita nerviosa.

— Ya no sigas que me duele. Ya no sigas prima. — suplicaba el chico.

— Quiero oír la palabra mágica.

— Lo siento Karin

— Ves cómo se arregla rápido las cosas pidiendo una disculpa.

Esto hizo que el joven ojiazul y la morena se pusieran serios de pronto. Era cierto, solo con una simple palabra podían arreglarse las cosas. Que tan efectiva era esa palabra para borra todo rastro de rencor. Instintivamente la ojiperla y el rubio se miraron.

— Que dije algo malo. — espetó la pelirroja.

— Karin porque molestas a nuestro primo y a su hermosa amiga— dijo una voz varonil.

La morena se volteo a ver al chico perteneciente a esa voz. Se encontró con un joven de más o menos veinte años de edad, recostado sobre su hombro en el marco de la puerta, con una pierna detrás de la otra típica pose de galán. Pensó Hinata de cabellera roja hasta más abajo de las orejas, con ojos lilas claros con un iris violeta, estaba vestido de traje negro con corbata roja.

— No te metas Nissan. Esto no te incumbe.

Nissan. Acaso había oído bien dijo hermano. También se la hacía conocida esa voz, tan calmada y sin preocupaciones.

— Pues claro que me incumbe. No ves que ahuyentas a nuestra invitada. — Viendo a la morena. — Al verte me recuerdas mucho a tu madre Hinata-chan.

— C-como s-sabes m-i n-nombre— agregó la morena confundida— Y c-como s-sabes d-de mi m-adre.

— Ya no te acuerdas de mi Hinata-chan— asintió negativamente la ojiperla. —Pues yo era el que iba a tu casa cuando venía de visita a Konoha a degustar el delicioso pastel de limón que hacia tu mamá. No te da gusto de volverme a ver. Hasta me llamabas Nagato-sempai.

— N-Nagato-sempai— Ya lo recordó, él era el chico de cabello rojo que le encantaba comer vario y varios platos del pastel de limón que preparaba su madre cuando la familia de Naruto venia de visita. — Hola Nagato-sempai.

— Hasta que te acordaste mi querida Hime— dijo el chico añadiendo una sonrisa al final. — Te has vuelto muy hermosa. Hinata-chan.

— ¡A-Arigato Gozaimasu!

— Ya pues Karin ya te pedí una disculpa déjame libre que se me pones los cachetes morados ¡dattebayo!— reclamo molesto el rubio al borde del llanto.

Después de esto Hinata, Karin y Nagato empezaron a reír cada uno a su modo por la forma tan infantil en que se sobaba sus mejillas y lloraba.

— No se rian-ttebayo. Tú también te ríes Hinata-chan.

— Y-yo etto N-Naruto-kun. E-es que es t-tan g-gracioso — decía entre sus delicadas risas la morena.

Ante todo esto no le quedo de otra a Naruto que reírse también, pues ya saben a su manera escandalosa.

— Hola a todos ya llegamos-ttebane!— gritó la mamá del chico de ojos azules.— Naruto amor veo que ya saludaste a tus primos.

— Konichiwa tía— dijo Nagato y Karin

— Konichiwa Kushina-san— saludo amablemente la Hyuga.

— Hola Hinat…— interrumpida

— Mamá por que llegas recién. Yo pensaba que ya estabas aquí. Me haces venir tan rápido solo para encontrarme como mi loca prima y mi primo amante del pastel de limón. — dejo salir todo el estrés el rubio.

— ¡Baka!— dijo Kushina dándole un golpe en la cabeza a su hijo— Te eh dicho más de mil veces que no seas grosero— gritando la pelirroja dueña de ojos violetas.— No sé a quién le aprendiste a gritar de ese modo. Si en esta casa todo es pacífico. — se cruzó de brazos la Uzumaki.

Este comentario de Kushina hizo caer al piso a más de uno de los presentes. Cosa que provocó que a la madre de Naruto le diera un tic en la ceja.

— Que pasa Kushina porque está molesta— preguntó amablemente Minato.

— Bueno es que… — interrumpida.

— ¡Padre por fin llegaste-ttebayo!— chilló el rubio menor.

— Q-que pasa Naruto— dijo preocupado Minato.

— Pues no te has dado cuenta llegaron tus sobrinos. — dijo el rubio señalando a los nombrados.

Estos por su parte saludaban a su tío de la mano pero cuando Naruto dijo eso de “sobrinos”, Karin se enfadó.

— Como que “tus sobrinos”— reclamaba la chica de lentes

— Pues y entonces que son para mi padre— se cuestionaba el rubio.

— Naruto si serás baka — golpe en la cabeza (de nuevo) — podrías haber dicho “mis primos”. Se oyó muy grosero de tu parte.

— Otro golpe. Ya no más. ¡Me duele-ttebayo!

— Si no fueras tan malcriado no te golpearía. — se defendió Karin.

— Tú serás la maleducada por estar golpeando a tu primo de esa manera.

Otra vez va empezar a pelearse. Pensó la ojiperla.

— C-como yo maleducada ahora si no la cuentas Naruto.

— Ya basta chicos de una buena vez. Ya están lo suficientemente grandecitos como para dejar esas peleas de niñitos- ttebane. — argumentó ya apunto del colapso nervioso Kushina. Con sus cabellos levantados en nueve mechones con un aura roja a su alrededor.

Los chicos amenazados se achicaron en ese momento, Naruto se escondió detrás de Hinata y Karin detrás de Nagato con las piernas temblándoles.

— Amor por favor cálmate si — dijo el rubio mayor sosteniéndola por los hombros a su amada. — Que tal si ya vamos a comer. Me muero de ganas por probar el dulce que dejaste haciendo esta mañana como postre para el almuerzo.

— ¡C-claro-ttebane!— respondió nerviosa la ojivioleta ligeramente sonrojada.

— Bueno chicos vamos a comer— hablo para todos los presentes con una sonrisa al final.

Karin y Naruto salieron de su escondite siguiendo a Kushina que iba muy feliz por el comentario que le hizo su esposo. Nagato los siguió de cerca pero no sin antes dedicarle una sonrisa a Hinata.

— Si ya se lo que piensas Hinata-chan esta es un familia muy escandalosa y rara. — Le dijo Minato quien se había quedado atrás. — Aunque seamos así. Me agrada la forma en que nos tratamos. — siguió hablando el rubio mayor— No lo crees Hinata-chan.

— ¡S-si!

Valla la familia de Naruto-kun si que es muy divertida, me agradaría ser parte de ellos. Con esto en mente ella se visualizó a si misma casándose con el rubio menor. Que cosas estoy diciendo. Pensó la ojiperla con un fuerte sonrojo en el rostro.

— ¿Te sucede algo Hinata-chan?— pregunto de forma casual el esposo de Kushina mientras caminaban a través de la cocina hacia el comedor.

— N-No. No me s-sucede n-nada.

— Hinata-chan ven rápido. — gritaba el rubio desde su asiento de la mesa.— Te sentaras junto a mí

— Y-ya v-voy N-Naruto-kun— dijo con nervios y sonrojada. El padre de Naruto se quedó viendo a la ojiperla solo por segundos.

En el transcurso del almuerzo esta familia y la Hyuga rieron de muchas cosas.

— Blanca Nieves pásame la sal. — dijo la chica de lentes despabilando a la morena que estaba concentrada en su comida.

— S-si ya v-voy— dijo la ojiperla pasándole la sal. Esta pelirroja estaba al frente de Hinata. — T-toma Karin.

— Se dice “pásame la sal por favor” hermana— habló repentinamente el pelirrojo situado a lado de Hinata.

— Si Karin y ya deja de llamarla Blanca Nieves— dijo Naruto defendiéndola a su morena amiga. — Que la incomodas.— este cometario causo un cierto sonrojo a la ojiperla— Y a todo esto ¿porque la llamas así? — Cuestionó el rubio a su prima.

— Pues ver…— interrumpida.

— Yo te lo digo hijo mío— respondió emocionada la mamá de Naruto— Hinata-chan es muy parecida a su madre como ya se han dado cuenta.— dijo alegremente la pelirroja mientras tomaba un poco de agua del vaso.

Todos en la mesa asintieron.

— El caso es que a su mamá también la llamábamos Blanca Nieves. — recordó la ojivioleta.

— ¿Y eso por qué?— otra vez el ojiazul menor preguntó.

— Buen hijo eso es muy sencillo. Le atribuimos ese nombre porque su mamá era muy blanca, con cabello oscuro, labios rosados brillosos y por cierto era muy adorable. Y ya que Hinata-chan es idéntica a ella— tomo un respiro— Y creo que Karin oyó ese nombre de pequeña por eso le dice así a tu amiga. Naruto. — Concluyó Kushina.

— A ya veo— dijo el rubio menor mirando a Hinata detenidamente como analizándola, y esta chica pues claro sonrojada con sus manos sobre sus rodillas y la cabeza baja por la vergüenza.

Pasado los minutos…

— No se olviden chicos me tiene que acompañar a ir de compras— dijo muy entusiasta Karin.

— ¡Qué aburrido!— exclamó el ojiazul menor.

— Irán sí o sí. Me lo prometieron— habló amenazante la pelirroja.

— Pero para que quieres ir de compras si tienes demasiada ropa Karin. — se quejó el rubio.

— Que no te lo ha dicho mi tía. — anunció Karin alzando una ceja.

— No. Y que me tendría que decir. — Resopló Naruto.

— No te lo he dicho porque quería que fuese una sorpresa. Pero ya que.—habló tranquilamente la madre del rubio.— ¡Ella estudiara este y el próximo año aquí en Konoha-ttebane!— continuó alegremente.

— ¿¡Q-q-q-queeee!?— gritó Naruto levantándose de la mesa. — P-porque va estudiar ella aquí mamá.

— Porque yo quiero— dijo Karin sacándole la lengua a su querido primo.

— Que pesadilla— murmuró el ojiazul sentándose de nuevo para terminar con su comida.

— N-no es t-tan malo N-Naruto-kun que Karin e-estudies con n-nosotros — argumentó la Hyuga.

— Si tienes razón Hinata-chan.

— Como que no es tan malo Hinata— reclamó la chica de lentes. Par que después todos en la mesa incluido Minato se rieran.— No es gracioso.— se acomodó sus lentes.

— No es gracioso cuando te lo hacen a ti One-chan— hablo Nagato riéndose de su hermana, y la mencionada estaba sonrojada.

— No te rías Narutito que dormiré en el cuarto que está al frente del tuyo— la risa del rubio se le acabó.

Después de esto otra vez todos rieron haciendo de este almuerzo algo muy ameno.

∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞

— Hijo se van en tu auto o en la limosina— pregunto Minato desde el marco de la puerta de entrada.

— Nos vamos en mi auto papá. — Contestó el ojiazul menor. — Sube Hinata-chan. Karin también sube que nos vamos.

— Y-ya espera un momento N-Naruto-kun— dijo la ojiperla dirigiéndose hacia los padres su amigo. — A-Arigato por la c-comida Kushina-san. Su p-postre e-estuvo delicioso.

— No hay de que puedes venir cuando quieras que estará gustosa de recibirte en mi casa. — le sonrió de manera maternal.

— De verdad puedo venir otro día — preguntó casi sin creerlo la morena.

— Si claro que es verdad-ttebane. Y en especial si eras hija de una de mis mejores amigas.

— Arigato… Hasta luego Kushina-san. — le hizo una leve reverencia. — Hasta luego Minato-san. — hizo el mismo gesto.

— Hasta luego Hinata-chan— dijeron al mismo tiempo los esposos

— Naruto cuida de tu prima y de Hinata-chan.— gritó la pelirroja— No llegues muy tarde que aún no has hecho tu tarea— seguía gritando la ojivioleta.— Me estas escuchando Naruto.

— Si ya oí mamá — resopló el rubio desde su auto.

Después de esto el automóvil Ferrari naranja del ojiazul arrancó a toda marcha dejando una capa de humo a su paso. Y también por su parte Nagato lo siguió desde su auto.

— Estos niños crecen tan rápido— reflexionaba Minato abrazando de la cintura a su amada.

— Sí. Pero qué le vamos hacer es la ley de la vida. — dijo Kushina para después cambiar su estado de animo de normal a una actitud coqueta. — Estamos solos Minato— el rubio mayor se puso nervioso y sonrojado como entendiendo lo que dice su esposa. — Te tengo solo para mí.

Con esto Kushina besó a Minato quien gustoso lo recibió.

— Te amo Kushina. — dijo el rubio entre besos.

— Te amo Minato. — contesto la ojivioleta con un tono sensual.

Después de esta muestra de amor se adentraron a la casa. Pero no se dieron cuenta que una sombra se movió de entre los arbustos.




Fin de este cap
¿Les gusto?
¿ Les agrado los primos de Naruto ( Nagato y karin ):)?
¿ Que personaje les gusto mas de la familia de Naruto?
¿Que les parecio el nuevo sobrenombre de Hinata?
¿No es una conqueta Kushina?
Gracias por leerlo :D:D:D:D Proximo cap esta historia dara lugar en el centro comercial:p

 

Gracias por sus cometarios
Alisse Madness
AdriiHyuga
Chii-san
Elizabeth Valentine
:D:D:D:D:D



Cap 10 En el centro comercial

Los tres chicos iban en el auto de lo más entretenidos, en especial cierta ojiperla que estaba en el asiento del copiloto junto a su Naruto. Mientras que Karin iba en el asiento de atrás molestando al rubio.

— Oye Naruto si te acuerdas cuando te perdiste en Italia en el parque de diversiones y lloraste como una nena.― dijo en tono burlón la pelirroja.

— ¡No estaba llorando-ttebayo!.— replicó el ojiazul molesto y sonrojado.― Solo era que me hinque el ojo nada más.

— No es cierto eso primo. — dijo con intención de hacerlo enojar más. ― Pero me gustaba más ese Naruto tierno y llorón. Que este Naruto rebelde y malo con su prima.― dijo al tiempo que se levantó de su asiento le daba besos en la mejilla a su primo.

— ¡Ya basta Karin deja de besarme!― habló el chico pero no molesto.― Chocaremos.

— Pero primo quien se resistiría a besarte si eres tan guapo.― decía la chica de lentes en tono empalagoso.― Es verdad lo que digo o no Hinata.

— E-etto y-yo.― decía la morena. “Porqué me tuvo que preguntar” pensaba.

— Dilo Hinata sí o no ― presionaba Karin.

— B-bueno e-es v-verdad― “al fin lo dije” pensó la morena con todo su rostro sonrojado.

— Si vez Naruto que es verdad.― dedicándole una sonrisa al mencionado.― Tienes otra fans.

— No claro que no.― habló el rubio con su habitual tono de voz.― Hinata-chan no es de esas chicas. Además ella es mi amiga.― concluyó el rubio mirando a la morena con su sonrisa de siempre.

Este comentario fue una punzada en el corazón de la ojiperla. Entonces no había posibilidad de ser algo más que amigos. En serio en la vida de Naruto no va a ser más que una simple “amiga”. Se sentía rechazada. Pensó la morena con una mirada triste en su rostro que fue notada solamente por la chica del asiento de atrás que desde ese momento la observaba constantemente.

∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞

— Vaya es muy lindo es centro comercial— argumentaba Karin con brillos en su ojos.

Este gran centro comercial era de tres pisos más la plata baja y un subterráneo para los vehículos. Tenía muchos locales a su alrededor donde ofrecían su productos y demás cosas. Había tiendas de todo tipo por ejemplo de mascotas, de ropa, de zapatos, había heladerías, restaurantes, el cine y también muchos supermercados dentro de ese centro comercial.

En la entrada principal de centro comercial, que tenía puertas automáticas, estaba una preciosa fuente de agua con una estatua de piedra que era una niña de pie con un hermoso kimono revestido de piedras preciosas rojas y verdes. La niña tenía el cabello corto y entre sus manos tenía una flor revestida de piedras esmeraldas. Y se parecía mucho a…

— Mira eso Naruto esa estatua de la fuente se parece mucho a Hinata— decía la pelirroja sorprendida acercándose a aquella fuente.

— Claro pues si es ella misma. — contestó el rubio como si fuera de lo más normal. — Cierto Hinata-chan.

— Si e-esa soy yo cuando tenía d-doce años. — contestó la morena sonrojada.

— ¿Que tu padre es el dueño de esto?— preguntó la chica de lentes

— ¡Así es! ...pero este centro en uno de los tanto que tiene mi padre en Japón— respondió ella.

— ¡Oh qué bien! Oye y sabes eras muy linda de pequeña. — dijo Karin mirando a la estatua y a ella como comparándolas. La morena se sentía cohibida ante la inquisitiva mirada de la pelirroja.

— Pero ahora está mucho más hermosa. — admitió el ojiazul como si nada. La elogia se le subieron todos los colores a la cara tapándola con sus dos manos.

— Arigato chicos— dijo la morena sinceramente con sus manos todavía en su bello rostro.

— Blanca Nieves apúrate o te dejamos— gritó Karin desde arriba de la escaleras eléctricas junto con un rubio sonriente.

— ¡Espérenme chicos!

La morena se fue hacia las escaleras eléctricas donde llegó hasta el primer piso en donde diviso a sus amigos entrar a una tienda donde vendían útiles escolares. Esta chica se dirigió hacia ese lugar donde fue recibida cordialmente.

— Gusto en tenerla aquí Srta. Hyuga — saludó una de las empleadas del local. — En que le puedo ayudar— dijo amablemente.

— Bueno yo no necesito nada por ahora. — contestó de forma gentil. — Solo estoy buscando a unos amigos. — dijo alzando la mirada por encima de la cabeza de la empleada para poder encontrar al par de chicos.

— Aquí estamos Hinata-chan — habló un rubio saludando con las manos.

Hinata lo vio y fue en dirección del chico pero no sin antes hacerle un leve reverencia a la empleada del lugar y esta hizo lo mismo.

— Entonces… ¿dónde está Karin? Naruto-kun— preguntó la chica ojiperla.

— Pues mírala está allí — contestó él señalando a un estante donde habían diversos cuadernos. — Está comprando demasiados cuadernos ¿ Como si lo fuera a utilizar todo?— dijo con sarcasmo el ojiazul.

— Te estoy escuchando eh Naruto— dijo molesta la pelirroja desde el estante.

Hinata solo escuchaba y reía con dulzura por la bromita de Naruto.

— Ya no se rías Hinata.

— Está bien no lo haré — dijo poniéndose seria para después reír pero más bajo. — Pero es inevitable. — reía más ella ya con más confianza.

Por su parte Naruto la observaba. Tiene una sonrisa encantadora se parece mucho a la sonrisa de Shion pensó él y por instinto se le dibujo una sonrisa. Pero en que rayos estoy pensando debo olvidarla. Ella me traicionó se dijo así mismo. Pero qué debo hacer si estos días no hago más que pensar en ella, en sus besos, en sus caricias, en sus palabras cargadas de amor. No era más que un simple títere del amor. Se sentía tan solo, pero ¿Por qué? Si tenía amigos que lo apreciaban, tenía a un padre y a una madre que se preocupaban por él. ¿Por qué el amor tenía que ser tan doloroso?. A veces quería de todas la formas olvidarla pero no podía. Simplemente Shion se había quedado tatuada en su corazón. La sonrisa del rubio se desdibujo y mejor decidió salir del lugar.

— Las espero afuera chicas. — dijo no muy animado.

— Ya ya— dijo Karin de espaldas todavía escogiendo cuadernos.

Esto hizo que la morena se le acabe la risa y lo viera salir cabizbajo. Que le habrá pasado a Naruto-kun se preguntaba una y otra vez la morena.

— Hinata ya sé que te gusta mi primo pero no es para que te lo quedes viendo hasta lo último. — dijo sorpresivamente Karin de manera cómplice.

— Aja— dijo la menciona sin siquiera inmutarse. Esto causo que la chica acompañante alzara una ceja incrédula.

Hinata estaba tan preocupada por su rubio amigo que sino hasta después de treinta segundos que recién escucho realmente lo que dijo la prima de Naruto que su cara se puso totalmente roja.

— Q-Quien te dijo eso K-Karin— dijo nerviosa la Hyuga al borde del desmayo.

— Pues es obvio cuando lo miras— habló como si nada.

— ¿Cuando lo miro?— repitió incrédula la morena.

— Aja. Es como si tu ojos dijeran “Yo estoy enamorada de Naruto Namikase Uzumaki”— dijo dramáticamente la pelirroja con una que otra risita. — Así de tan obvia eres. Y yo no sé porque el baka de mi primo ni siquiera se da cuenta. Eso comprueba que es un baka totalmente— rio a carcajadas en lo último.

— Pero de qué sirve estar enamorada de él si tiene a otra persona en su corazón— dijo tristemente Hinata.

— Que te refieres a su novia— como respuesta la ojiperla asintió con la cabeza. — A esa tal Shion. Nunca la acepte como novia de mi primo— dijo con frustración.

— ¿Y por qué?— preguntó la Hyuga.

— Porque cuando la conocí me pareció tan falsa. Como si ocultara algo— recordó Karin— Era… como decirlo mmmmm— pensaba ella— Ya se perfecta.

— Si es una chica perfecta — reflexionó la ojiperla tristemente como anhelando ser como ella. — Por eso Naruto-kun se enamora de ella.

— No te sientas mal. — la animó la pelirroja dándole palmaditas en la espalda. — Tú eres mucho mejor que ella en un cien por ciento.

— ¿¡E-en serio!?

— Si claro que si— respondió contenta la chica de lentes. — Y si algún día tu llegaras a ser la novia de mi primo— dijo confiada ella— Yo los apoyaría en todo— con lo último sonrió.

— Arigato Karin— dijo Hinata feliz. Por fin un rayo de esperanza pensó ella.

— Además no hay personas perfectas. — argumentó la nombrada. — Si no que hay persona que esconden perfectamente sus imperfecciones. — concluyó.

— Karin tu pareces una chica muy superficial y mandona— comentó la ojiperla haciendo que a la menciona le cayera un balde de agua fría. — Pero eres una persona muy amable y sincera.

— Bueno supongo que tengo que decir gracias— comentó la prima de Naruto— Gracias Hinata.

Después de eso rieron las dos amenamente mientras seguían con la compras de útiles escolares para Karin. Y en transcurso de las compras la pelirroja se enteró que su primo había terminado con la novia. Por momentos ella se sintió feliz pero después al ver la cara de preocupación de la morena por el estado de Naruto ella también se quedó pensativa.

Ya terminaron de comprar todo lo necesario como maleta, cuadernos, bolígrafos y demás cosas escolares. Que los tres decidieron ir a tomar un helado claro que cada uno pidió su sabor favorito. Hinata pidió uno de fresa. Naruto eligió uno de chocolate. Y Karin escogió uno de vainilla. Se sentaron en una pequeña mesa de la heladería y conversaron. Pero la pelirroja noto algo extraño en su primo. “No está hablando mucho” pensó ella.

Ya terminaron sus helados. Y como Hinata es casi dueña de ese centro comercial así que se ofreció a pagar la cuenta pero claro los dos primos no accedieron fácilmente pero la ojiperla insistió que no le cobraban nada porque era la hija del dueño y con esa excusa los dos accedieron a que ella pagara.

— En la próxima invito yo ok— dijo con una media sonrisa el rubio

— Está bien— respondió la Hyuga.

— Chicos iré un momento al baño— dijo Karin— No se vallan sin mí. Se los advierto.

— Te esperamos Karin. No te preocupes— aclaró la ojiperla.

Karin se dirigía al baño de chicas que quedaba en ese mismo piso sino que era “tan lejos” según ella. La pelirroja tenías muchas ganas de ir al baño desde hace rato. En el baño se retoco un poco “Una chica siempre debe estar linda para cualquier chico jeje” pensaba ella mientras se ponía base rubor y todo lo demás que necesitaba una chica “Que linda soy” decía mientras se miraba al espejo.

Ya saliendo del baño se dirigió a donde se encontraban su primo y su amiga. Llagando al lugar donde no los encontró. Estaba furiosa.

— Donde se habrán metido estos dos— decía una y otra vez una molesta Karin con llamas en sus ojos. — Les dije que me esperaran. Seguro que Naruto se entretuvo con algo y por eso no están— imagina una que otra cosa. — Ese baka me la va a pagar. O tal vez me está jugando una broma.

Entre tantas cosa murmuraba la chica que toda las personas se le quedaban viendo. Caminaba con pasos pesados, iba al primer piso así que tomo las escaleras. Bajaban tan estruendosamente que se oían los sus tacos del zapato. En una de esas piso tan fuerte que se le quebró el taco haciéndola perder el equilibrio y caer a no más cinco escalones de llegar a la planta baja. Karin cerró sus ojos fuertemente esperando el tan doloroso golpe. Pero nada sintió de dolor. Solo que unos fuerte brazos la sostenían y percibió un aroma a … ¿frutas?. Abrió su hermosos ojos y diviso primero unos colmillos saliente y ojos turquesas y cabello blanco con destellos celestes.

— Oye ten cuida la próxima vez. Que no siempre voy a estar aquí para salvarte. Preciosa. — dijo el chico que la sostenía con una sensual sonrisa.

— ¡Qué arrogante eres!— gritaba la pelirroja.— Ni te creas el héroe.

— Pues si soy el héroe. Y por lo menos di un “gracias” Srta. Gritona.

— S-señorita g-gritona.— repetía ella— Quien te crees que eres para llamarme de esa forma. Ni siquiera te diré gracias.

— Pues eres alguien muy mal educada.— decía el peliblanco alzando una ceja.

— ¡Mal educada!

— Pero a pesar de ser mal educada eres muy hermosa.— dijo él haciendo sonrojar a la pelirroja— Además tiene muy tersas las piernas.

— Bájame ya Baka- Hentai— gritaba la ella golpeándole el pecho, que por cierto estaba bien trabajado pensó pícaramente la pelirroja.

— Está bien ni que fueras una súper modelo— dijo sin más aquel chico dejándola en su lugar.

— Tú te lo buscaste baka-hentai— después de esto le dio se lanzó para darle una cachetada al chico. Pero este la esquivo. La toma de la mano y la acercó a mas a él.

— Está llena de energía primor— habló él susurrándole al oído. Esto causo un cierto temblor en la chica.

— Q-que baboso y m-molesto eres— replicó la ella soltándose del agarre del chico— Eres un baka baka baka— grito la pelirroja haciendo que la personas la vieran extrañados.

— ¿Cómo te llamas?— hablo el este chico de colmillos.— ¿Dame tu numero celular?

— ¡Que te importa!— que chico tan descarado y pervertido. Encima de fastidiarme me pide mi nombre y de paso el número de celular. Ese si es un chico cara dura. Pensó Karin.

Esta chica ya se cansó de buscar a lo chicos. Hasta que se acordó de un aparato electrónico que sirve para localizar a las personas. Si exacto el celular”. Se decía así misma que era tonta a tal punto que se comparaba con su primo. Pero todo esto es culpa del pervertido y sexy chico. Pero que es lo que acabo de decir que era sexy. Después de esto tendré que descansar, mi mente está colapsada. Pensaba todo esto Karin mientras se tiraba levemente de los cabellos.

Sin más saco de su cartera su celular y llamó a su primo. Pero nada no contestó. “Que rayos” espetó esta chica ya desesperada. Se le ocurrió llamar a Hinata pero no tenía su número. “Que día tan maravilloso” repitió en su mente sarcástica.

Ya cansada de “buscarlos” decidió sentarse y como estaba en el tercer piso del centro comercial. Se dirigió hacia la gran ventana de cristal donde se podía divisar todo la ciudad. Escogió una banqueta propicia. Se sentó y espero hasta que pasaran las cosas. Así que recostó su cabeza en el respaldo de la banqueta. Cerró sus ojos por un par de minutos, entonces por sumas casualidad abrió sus ojos y diviso de cabeza a alguien que estaba subiendo en el ascensor que estaba atrás de ella. Esa o esas personas eran nada mes y nada menos que su tonto primo y su amiga. Al verlos casi se cae de cabeza contra el piso.

— ¡Naruto hasta que apareces!— gritó esta chica ya harta de este día.

El chico se dirigió hacia donde se encontraba su prima y dijo con una sonrisa.

— Lo siento prima es que estaba haciendo algo importante— dijo èl despreocupado.

— Que tan importante es como para dejarme sola.

— Pues veras Karin — comenzó hablando la el rubio— Estuvimos ayudando a un niñito que se había perdido. Tuvimos que buscar a su abuela que había venido con él. Dábamos vueltas por todos lados hasta que ya encontramos a su abuela. Y eso es un breve resumen de lo que paso.

— ¿Y por qué no contestabas el celular?— preguntó la chica de lentes. — Que se te perdió cuna do estabas con el niño.

— No si no que se me cayó en fuente. Eso pasó. — dijo Naruto con cierto recelo.

“Naruto-kun porque no le dices la verdad” Pensó Hinata que estaba detrás de los chicos en acto de oyente.

— ¿Cómo que se te cayó en la fuente?— repitió confundida la ella.

— Que parte no entiendes de que se cayó y ya. Mejor ya vámonos, que no quiero estar ni un segundo más aquí.— bramo molesto el chico llendose del lugar.

— ¿Y a este que le pasa?— murmuro la pelirroja sorprendida por la actitud de su primo. Y busco con la mirada a la ojiperla como buscando una respuesta. Esta solo simplemente la ignoro. — Que paso Hinata.

— Deberíamos irnos Karin o si no Naruto-kun no deja.

Se quedó más confundida. Le cambio de tema o fue su imaginación. Que raros se comportan estos chicos. Pensó la pelirroja siguiéndolos hacia el ascensor.


En la mansión Hyuga.

— Buenos adiós. Nos vemos Blanca Nieves— dijo burlona Karin desde el auto de su primo.

— Adiós Karin. — dijo dulcemente la tímida chica sonrojada. — Que duermas bien. A-adiós Naruto-kun.

— Claro… adiós Hinata-chan— dijo el mencionado no con una muy convincente sonrisa.

Hinata los veía retirase en el Ferrari de “su rubio”. Se metió a su casa y fue recibida por las sirvientas. Las saludo felizmente. Por lo que constato su primo ya estaba en casa. Se fue hacia su dormitorio para tomar una relajante y refrescante baño en la tina. Después del baño se vistió y bajo a cenar. Hay de sorpresa estaba su padre cenando tranquilamente junto a su primo Neji en el gran comedor.

— Buenas noches hija. — dijo fríamente el Hiashi Hyuga.

— Buenas noches Oto-san.¿ Y por qué esta aquí?— lo dijo lo mas posible sin parecer grosera.

— Que no puedo venir a mi casa.

— ¡No!... no es eso. Yo lo esperaba a más tardar el viernes. Padre— habló para después comer un poco.

— Hinata-sama lo que ocurre es que su padre ya termino el trabajo que tenía que hacer. — dijo Neji calmadamente en su posición seria.

— Mmm… Ya veo.

— Hinata hija como te fue hoy en el instituto— preguntó el Hyuga mayor haciendo que Neji y ella intercambiaran miradas y luego lo vieran sorprendidos.

— Me fue bien padre. G-gracias por preguntar.— “Que raro esta hoy” pensaron al mismo tiempo los chicos.

— Y tu Neji como vas con tu novia— esta otra pregunta dejo mas descolocados a los Hyugas menores.

— B-bueno tio. Estamos b-bien. Es m-màs excelentes— Estaba màs que nervioso. Su tío pregúntalo sobre su novia lo ponía nervioso.

Estas dos preguntas fueron las únicas que dijo el Hiashi, de allí nada más. Se dedicaron a deleitarse con la exquisita comida. Después del suceso “inesperado” los primos se fueron a su cuarto. No sin antes conversar del extraño comportamiento de su padre y tío. Hinata iba a hacer otras cosa pero se acordó recién de la tarea de matemáticas que le dejo la temible profesora Anko. Se puso la pijama y se sentó en el escritorio a hacer la tarea. Pero cada cinco minutos recordaba de la tan maravillosa tarde que paso con Naruto y sonreía tontamente. Pero de lo que más recordaba y meditaba eran las palabras de Karin. “No hay personas perfectas. Si no que hay persona que esconden perfectamente sus imperfecciones.” ¿Que verdad tenía esa frase?. Y se emocionó más al saber que si Naruto y ella fueran novios Karin los apoyaría. Que felicidad.

Pero lo que le preocupaba era porque el ojiazul había arrojado su celular a la fuente después de haber recibido un mensaje. No lo sabía y eso frustraba porque no podía ayudar a su “amigo”. Y también volvió a su mente el momento en que Naruto salía de la tienda todo cabizbajo. Co un fin de pensamientos prosiguió a terminar su tarea. Termino de hacerla y se dispuso a dormir. Mañana será otro día dijo ella, para finalmente caer en los brazos de Morfeo.


Bueno hasta aquí el cap espero les haya gustado.
¿Te ha gustado este cpa?
Ya pronto publicare la actualizacion de mi otro fic:p
Besos!!!!!;)