Pandora’s apocalypse (universo alterno)

Tema en 'Fanfics abandonados TV, Cine y Comics' iniciado por Daryuka, 3 Marzo 2015.

  1.  
    Daryuka

    Daryuka Escritora de L.E.A.F

    Escorpión
    Miembro desde:
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    Escritora
    Título:
    Pandora’s apocalypse (universo alterno)
    Clasificación:
    Para adolescentes. 13 años y mayores
    Género:
    Acción/Épica
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    5860
    He aquí mi primer intento de narrar sobre héroes de este ámbito, para la actividad infinity, creada por fénix Parker…intenten no vomitar plss..

    [one-shot] (no encontre la barra para poner la clasificacion, lo siento]


    Pandora’s Apocalypse:

    General POV:


    En el centro de la ciudad un alma, un ¿fantasma? No…Un espectro veía como todo se movia desde uno de los puntos más altos de Centra City, el ente poso una última mirada en otra alma, que se movía rápidamente por las calles, pero esta, estaba atrapada en un cuerpo, quien vestía formalmente, tenía una maleta en mano y un terno negro que se camuflaba en la noche con el mismo tinte. Antes de desaparecer, el espectro cambio la mirada a una posible oportunidad para vivir en el campo en el cual estaba situado, y se desvaneció, poseyendo un periódico que volaba por el lugar…

    Mientras tanto, a unos metros en el suelo, un hombre caminaba tranquilo, hasta que vio su reloj de pulsera, el cual marcaba las 10:35 de la noche, empezando a correr, el respirando a grandes bocanadas el aire frio que le calaba hasta los huesos, tan solo le quedaban 2 cuadras para llegar a su destino. Cuando llego, paró en seco en la entrada, empezó a bajar sus revoluciones y a arreglarse lo más que pudo, mientras de su maletín, de entre todas sus cosas, sacaba un delantal blanco y se arreglaba su tarjeta de identificación de la división científica criminal y forense del departamento policial* de la ciudad, aunque no lo pareciera, él era todo un cerebrito, sumado a su buena capacidad de congeniación y calma al hacer las cosas, se había ganado el título de asistente científico, lo que, tanto su padre y hermana, estaban orgullosos, termino de arreglarse y tomo aire en sus pulmones, para después soltarlo y abrir la puerta para encontrarse con un mesón que le llegaría hasta el pecho y ver a una joven rubia, con traje de secretaria escribiendo en una hoja de papel, datos que en este momento no tenían importancia, el hizo sonar la campanita que tanto le gustaba, la cual estaba a un lado del mesón, para llamar la atención de la señorita, la cual, lo miro con sus orbes verdes, y ante eso sonrió algo molesta, él sabía, que ya empezaría el típico reproche.

    —“Bartolomé Allen, ¿acaso crees que los científicos de primera de la unidad de North City está aquí para esperarte?”—Dijo con una voz acorde a su cuerpo la secretaria.

    —“Lo se Nelly, pero una señorita mayor necesitaba transportar sus cosas a su auto”— la miro con cara de perrito moribundo, para que ella rodara los ojos y bufara molesta.

    —*Suspiro* “Para que me molesto contigo, solo pierdo saliva, eres demasiado bueno en un mundo en caos, como sea, largo…Sala de pruebas 42, como sabes, 3er pasillo a la izquierda”

    —“Eres la mejor, Nel”—Le dijo sonriente, retomando su carrera en la dirección indicada, ella solo retomo su trabajo, para volver a escribir, sin antes decir, sonriente —“Ese Barry” —

    El volvió a parar ante una puerta reforzada, la que era su destino, y pasó la tarjeta de identificación para que esta se abriese. A paso rápido entro para encontrarse en la sala de pruebas, la cual, gracias a los adelantos tecnológicos, era como si estuvieras parado en un prado normal de unas 3 hectáreas de longitud, pero en el centro, una enorme máquina, lo dejo maravillado, era su trabajo de los últimos dos años, y hoy, iba a ser probado, junto a su jefe, el aclamado Dr. Claymore y otros dos científicos de elite provenientes de North City, quienes miraron de pies a cabeza al joven que se les aproximaba, era alto, un metro y ochenta, aproximando, cabello negro, y ojos color café encerrados en un aumento de 2.7 por culpa de una miopía, era muy pálido, al punto que daba miedo, y algo flacucho, si se podía describir así, cuando llego al lado de los otros científicos, uno algo bajito y regordete, con una ligera barba platinada como su cabello y ojos olivos, junto a su asistente, era un poco más alto, con cabello café castaño y ojos del mismo color, no dudo en estrechar las manos de ambos con una amplia sonrisa.

    —“Asistente Allen, es un gusto conocer al novato estrella de la división científica del crimen de esta ciudad, soy el Dr. Von Traken y él es mi asistente Warren Cárdenas”—Dijo estrechando la mano de Barry, y el aceptándola gustosamente—“Lo estábamos esperando para probar esta belleza”—Dijo señalando la enorme máquina atrás suyo, Barry se acercó a esta, poniéndose en la posición ensayada de antemano, mientras su jefe, el Dr.Claymore, se unía a él en otra computadora alterna, mientras los otros dos visitantes veían impresionados al científico principal cuando este comenzó con la introducción:

    —“Buenas noches a nuestros invitados”—Saludo una persona de unos 48 años, con estatura promedio, con cabello negro con un par de cabellos canosos y una amplia sonrisa—“Se preguntaran que es esto”— Dijo apuntando a la maquina con su mano derecha—“Pues verán, durante décadas, nuestro departamento, se ha centrado en buscar posibles formas de exterminación de las criaturas tras este campo. Ya que nuestro país ha perdido contacto con el resto de pedazos de tierra con al menos una masa mínima de humanidad, desde aquel día, en que la luz del astro rey nos dejó, asomándose solo una luna color carmesí”—Se detuvo para dar el suspenso—“Mostrando que la caja de Pandora había perdido su sello milenario, soltando así…El apocalipsis. Pero nos logramos volver a poner de pie en contra de los espíritus llenos de rencor que salían de ese artefacto demoniaco, cuando nuestro solemne Papa, Leandro lll levanto un campo bendito, para reprimirnos en seguridad, que nos ha mantenido a salvo por décadas…Pero ahora, nuestro país está empezando a quedar pequeño, por eso, durante estos dos arduos años de trabajo, mi asistente y yo en mayor parte—Dijo con su típica autosuficiencia, de la cual Barry ya estaba acostumbrado— “Descubrimos que era mejor evadir que interactuar, Logrando oponernos ante esta cruel realidad, creando, un acelerador de partículas, permitiendo la conexión masiva entre países alejados, gracias a la tecnología, se lograra algo hasta hoy, imposible, la teletransportación multicelular” — Levanto los brazos y tomo aire—“Esto será un nuevo paso para el ser humano, además, de una nueva era, pero, antes, se hará una demostración”—Bajo los brazos, y miro a ambos científicos, quienes habían tomado asiento en unas sillas, ellos miraban maravillados aquel espectáculo, mientras el Dr. Claymore le daba una señal de su ayudante, mientras se ponían un traje protector, para que comenzaran con el experimento. El asistente Allen estaba a un costado de la máquina, en donde se controlaban los fluidos radioactivos necesarios para la energía, él ya se había cambiado a su traje de seguridad, y tecleaba la computadora. Cuando termino de revisar el porcentaje de concentración de la sustancia radioactiva Gamma, señalo con un pulgar arriba para que su jefe procediera a poner un conejillo de indias enjaulado a la cabina de teletransportación. Las chispas no dejaban de salir, y hasta se pudieron ver rayos de poca frecuencia, mientras todos veían expectantes y que el doctor en jefe del proyecto gritara “¡funciona!”. Pero fue muy temprano para cantar victoria, ya que Barry empezó a ver desperfectos en el área evaporativa de la cabina electromagnética, empezó a hacer señas a su líder, pero este le hizo caso omiso, estaba embobado con el resultado, por consiguiente, el sobrecalentamiento causado por la gran cantidad de energía radioactiva creo una cantidad masiva de vapor de agua desde la zona de enfriamiento, y como era una sala de prueba a escala real de un prado normal, al igual que las capacidades atmosféricas, en un abrir y cerrar de ojos, se empezó a formar una nube. Allen, ya había visto que su jefe no le haría caso, por lo que empezó a intentar parar el suministro de la energía, pero fue demasiado tarde, ya que el asistente Cárdenas, grito al cielo—“¡Cuidado, una Cumulonimbos!” —Para salir corriendo junto a su doctor. Y tan pronto como se fueron comenzó a llover muy poco, Allen ya había cortado la energía, y su doctor miraba maravillado la escena.

    —“He creado una máquina del clima, esto es alucinante”—Dijo alzando los brazos nuevamente

    —“¡Doctor, Debemos salir de aquí!”—Dijo Barry, algo alarmado, pero manteniendo en cierto grado su calma característica

    —“¡No! Es mi creación, no dejare que tomes el crédito novato”—Dijo el doctor, ya parece que enojado, ya que empujo a su asistente, para darle permiso a los controles para volver a activar el suministro, mientras, el joven tropezó con el resbaloso barro causado por la tenue lluvia, haciendo que cayera de bruces a un costado de la máquina, cayendo sentado y, para el colmo de su suerte, se enredó en su propio traje de seguridad anti-radioactiva, haciendo que la cremallera de su traje de goma, se abriera por donde no debería, dejando técnicamente desprotegido de la radioactividad, su pecho. Al caer en la máquina, su cuerpo se cargó eléctricamente, del signo opuesto a la masa eléctrica del cielo, atrayendo lo que sería…su condena.

    Fue rápido, como alma que lleva el diablo, un rayo le dio de lleno en el único lugar que no tenía una protección de mala conducción, su pecho, el gritó y escupió sangre, mientras, veía horrorizado, como la máquina, que en menor grado había recibido el impacto, se resquebrajaba y dejaba caer las enzimas que le daban energía a la maquina encima de su persona, para que casi automáticamente…cayera inconsciente.

    News POV:

    Al día siguiente:

    “Noticia de impacto, accidente radioactivo en la División Científico Criminal y Forense del Departamento de Policía* de Central City, en donde, según el testigo principal, el Dr. Claymore, sentenciaba a uno de los afectados de gravedad por la catástrofe, según él “Un arrebato de ira, sumado a la codicia por el crédito” lo conllevo a desatar el fatal desenlace, en donde el autor conocido como su asistente y mano derecha, Bartolomé Allen, quien, luego de ser expuesto a variadas sustancias peligrosas, y recibir una descarga eléctrica, quedara sumido en un coma inducido, fue internado en el hospital clínico de Holy Cross, no fue encontrado ninguna otra víctima ya que los acompañantes provenientes de la unidad del norte alcanzaron a escapar antes del desastre, se investigaran los hechos, mientras el supuesto autor este en coma.

    Marylin Moreno, desde la central de la división científica y forense del departamento policial* de Central City, para el CN, Central News, buenas noches.

    General POV

    3 meses después:

    Ya han pasado tres largos meses desde que inculparon a Barry por hacer algo que no hizo, aunque él no ha despertado para dar su punto de vista, pero sus conocidos sabían bien que el alma pura y honesta de su amigo, hermano, hijastro, o lo que sea para ellos, no sería capaz de hacer eso por crédito, obviamente había otras razones, y quedaba la opción de las mentiras, muy comunes por cierto, del doctor Claymore, quien luego del impacto, una semana después, sufrió una baja de azúcar, pero nadie se esperó que terminara con una esquizofrenia grave, terminando internado en el centro psiquiátrico de la ciudad.

    Como ya era de costumbre, entraba al cuarto de Barry una pelirroja con un ramo de flores, quien las dejaba en el velador al lado de la cama de su querido hermanastro y sonreía al ver que, al menos, aun tenia pulso, ella era Iris West, era tres años menor que Barry, con ojos café chocolate y una bonita figura, ella se había convertido en la mejor amiga de Barry, desde que los padres de él murieron en una expedición y el padre de ella lo adoptó por ser amigo de los padres de él. A ella le gustaba ir a conversar con el cómo los viejos tiempos, aunque si, lo hiciera sola, y todos la miraban como bicho raro al ver que se reía o lloraba de la nada, pero con el tiempo los paramédicos ya se habían acostumbrado a sus visitas constantes, a veces sola, o a veces con su padre Joe West, aclamado ex investigador del departamento alterno al de la división científico criminal, sino investigación policial*. Aunque pocos lo saben, la justicia queda normalmente a cargo de una sub ramificación de ese ámbito, mientras que el prefijo “policial” con la marca del asterisco (*), al igual que el ya ex trabajo de Barry, es solo un nombre de fachada para las personas corrientes, el prefijo oficial, un secreto a voces, es “anti-demoniaco” y conjugaciones...

    Ella esta vez había venido sola y como siempre contaba sus anécdotas

    —“Y ¿recuerdas cuando Karin metió su cara al bote de basura, y salió con una cascara de naranja en la cabeza?¡Se veía tan idiota!, solo para llamar la atención del patán de Jack”—Como siempre su risa contagiosa llego hasta los oídos de Barry y haciendo que este sonriera…Esperen ¡QUE!…Ella vio ese cambio en sus facciones se quedó helada, para luego empezar a tocarle la cara con el dedo índice como toda una niña pequeña e inmadura que parecía ser, hasta que casi se cae de espaldas cuando en uno de sus toques, los ojos de Barry se abrieron de sobresalto, para luego verla a ella, pero algo había cambiado, sus ojos tan cafés como los de ella, ya no eran de ese color, sino, de un frio azul cielo, sumado a su físico, que, por las sustancias a las que fue expuesto, se había tornado algo más forzudo, perdiendo así su endeble contextura. Cuando despertó, llevo su mano a la cabeza, y comenzó a mirar a todos lados.

    —“¿Do…dónde estoy?—Hablo al fin, además de poner una cara de extrañado al escuchar su voz la cual era mucho más grave que la última vez que se escuchó.

    —“Te pegaste muy fuerte en la cara si no lo recuerdas, cerebrito”—Dijo Iris, con sus típicos arranque de alegría, lanzándose contra Barry en un abrazo—“Me preocupaste, imbécil, estuve como boba esperando a que despertaras”—Se notaba que empezaba a llorar, mientras que Barry le acariciaba suavemente la espalda.

    —“Ya, ya paso, estoy bien, pero me gustaría que me pusieras al día”—dijo rompiendo el abrazo, para mirarla fijamente, ella simplemente se limpió las lágrimas, tomo aire y le conto todo a su “hermano” sobre su acusación falsa, el estado del doctor, entre otros detalles triviales, cuando termino, el soltó un suspiro y se comenzó a parar de su cama, para ser detenido por su “hermana”.

    —“Hey, hey ¿a donde te crees tú que vas?”—Le detuvo por los hombros

    —“¿Dónde más? A contar la verdad, después podría ir a dormir en mi suave cama, digamos que esta no es muy de mi estilo”—Dijo divertido

    —“Mejor te pones a dormir que te acabas de despertar de un coma”

    —“Pero llevo mucho dormido, además me gustaría seguir hablando contigo”—Dijo con un puchero, recordándole a su juventud.

    —“Tu sí que no cambias ¿eh?…Bien, pero no te pongas a conversar con todo el mundo”—Dijo ella quitando sus manos de los hombros de su hermanastro y permitiendo el paso de este para que se parase pero, nuevamente fue interrumpido, mientras de la entrada, venían unos 5 policías del área investigativa y policial (real), quienes tenían el arma en mano, apuntándole.

    —“Las manos en alto, Allen”—Siseo uno de los soldados mientras el resto quitaba el seguro a su pistola y mientras Iris la tomaban del brazo, alejándola—“Estas arrestado por presunto intento de homicidio por incidente”—Dijo decidido el guardia, quien miraba que el imputado estaba confundido.

    —“Pe…pero, yo no hice nada caballero”—Dijo Barry con su tono formal de siempre, pero el que apuntaba el arma principal, le hizo callar de manera brusca—“¡Silencio!, más vale que tengas un buen abogado, si intentas hacer algo, disparo”.

    Barry, no acostumbraba a estar nervioso, él era demasiado relajado en su vida cotidiana, lo que hacía que llegara tarde a sus conferencias o cosas por el estilo, aunque esta vez tenía sus razones para estarlo como esas armas de fuego apuntándole, por un segundo el deseo estar fuera, de todo, estar lejos, su corazón latía a mil por hora, cerrando los ojos, sintió el gatillo apretarse, sintiendo el impacto en su hombro, pero rápidamente su dolor se desvaneció, extrañado abrió los ojos, para encontrarse con un desierto de noche, casi suelta un grito, pero se tranquilizó rápido, ya que vio unas masas blancas con un punto negro que resaltaba en el área del pecho, justo en el corazón, vio que se acercaban a él. Por lo que salió corriendo, y aun mayor fue su sorpresa, cuando vio a sus pies casi ardiendo en fuego, él no lo sentía, pensó que se debía a la fricción contra el aire, pero eso solo era a gran velocidad, se dio cuenta de ese pensamiento y empezó a ver el suelo, en efecto, iba a una velocidad alucinante, su ojo crítico aproximaba unos 200 kilómetros por hora, e incluso más, el no entendía nada, pero vio su hombro y vio que el impacto de bala había desaparecido. Cuando vio que nada o nadie lo seguía, paro lo más rápido que pudo, y empezó a inspeccionarse, en verdad, en estos meses, había adquirido mayor musculatura, hasta se sentía mas alto y se dio cuenta que veía borroso, se sacó los lentes, y se impresiono al ver que ya no los necesitaba, sumido en preguntas sin respuestas recordó el incidente, para luego recordar su niñez en la cual había tenido una cierta afición a los comics de superhéroes, eso logro hacerle click en la cabeza, para volver a ver su cuerpo. —“Las sustancias, el rayo…me dieron superpoderes, ahora soy súper”—Dijo al punto de la emoción, tomando aire y saliendo disparado a velocidades incalculables. El gritaba de alegría al ver que sus sueños de la niñez se volvían realidad, hasta por un segundo creyó seguir en coma, por lo que intento despertar, con una simple zancada que le hizo romper la barrera del sonido, ante esto sonrió triunfal y comenzó a bajar la velocidad, hasta volver a parar e instintivamente vio su reloj, y este marcaba las nueve, despreocupado, vio que era temprano y dio un paso a la derecha, para ver que la manecillas cambiaban su posición a ser las doce y media, empezó a girar y las dos manecillas cambiaban, no como un reloj, sino, como una brújula. Se pasó varios rollos por su cabeza, y termino corriendo en dirección a la más grande, estuvo así por un buen rato, hasta que volvió a parar, cuando vio un destello rojizo viniendo de la tierra a unos kilómetros, tras una duna, esta vez el decidió ir más lento y silenciosamente, pero lo que vio, lo dejo simplemente sin habla, eso era…La caja de Pandora, lo que los investigadores habían buscado por generaciones como para hacer sobrevivir a la humanidad, Barry se dijo a si mismo que si no la cerraba ahora, sin que nadie lo viera, no habría otra oportunidad, por lo que se sentó tras la duna, y comenzó a idearse un plan, ya que esta estaba más que vigilada por los espíritus y demonios provenientes del inframundo de la caja. Estuvo un buen tiempo pensando, el único problema fue que fue descubierto por una de las criaturas, y esta dio un aullido que haría que te sangraran los oídos, pero él ya había salido corriendo, viendo como las criaturas se amontonaban a donde él estaba, mientras el apareció cerca de la caja, puso su mano con ademan de cerrarla, pero no se esperó que, un dolor lo amenazo en su mente, confundiendo sus sentidos, adormeciendo sus piernas, quemando su mano, había fallado, ahora la humanidad no podría descansar en paz, una de las criaturas, rápidamente se acercó a él, y con sus sucias garras, le atravesó el costado derecho, aunque gracias a eso, logro alejarse de la caja, para recomponerse antes de volver a ser atacado y luego tomar rienda suelta a su velocidad, corrió y corrió, cuando se curó de sus heridas, paro rápidamente para ver que nada lo seguía, por un segundo casi vomita al recordar las cosas que le había mostrado la caja, la muerte, la sangre, el dolor…pretendió olvidarlo decidiendo seguir la manecilla pequeña de su reloj, él pensó que al reloj también le había caído una sustancia radioactiva, lo que explicaba que por eso este marcaba las dos fuerzas electromagnéticas más grandes, una, por mucho, era la caja de Pandora, y la otra, la más cercana, el país Holy Cross. País situado en un lugar del insípido desierto, que alguna vez fue un precioso bosque, según las leyendas de hace años las cuales provenían de unas cuantas colonias de humanos sobrevivientes después del apocalipsis de Pandora, hecho ocurrido hace 73 años, donde el sello de Pandora se deshizo y acabo con la vegetación del mundo, ante ese hecho, el papa Leandro lll puso un campo bendito alrededor de 5 ciudades, puestas en forma de cruz, apuntando a cada punto cardinal y recibiendo su nombre de este, unidas por Central City.

    En simple pestañeo, Barry ya estaba en West City, al lado oeste de Central City, lugar donde se hospedaban, por obvio que parezca, la familia West, y familia adoptiva de Barry, cuando a temprana edad, sus padres, investigadores de la rama de expedición externa policial*(anti-demoniaca), en un intento de encontrar la caja y terminar el sufrimiento de los humanos, murieron a manos de un demonio, dejándole el cargo de padrastro a uno de sus amigos, quien no pudo ir a esa expedición en donde también murió su esposa, por una enfermedad pulmonar que pronto le haría retirarse, y cuidar de los niños, Iris West y Barry Allen quienes rápidamente se volvieron amigos y hermanos.

    Barry abrió la puerta trasera de la casa color ambarino de dos pisos de los suburbios de West City, asegurándose que no era seguido por ningún policía o espectro, para entrar directamente la sala de estar y encontrarse con Joe, quien miraba la televisión y respiraba por su “Mochila Tritón” era como la llamaba el, que era técnicamente un filtro para que el respirara oxigeno más puro para sus ya gastados pulmones, Barry se acercó a él y se sentó a su lado, para que este último lo mirara exaltado, y lo abrazara como su casi padre que era, y con varias lágrimas en los ojos, apagó la televisión, y se sentó con su ya querido “hijo”.

    —“¡Barry! han pasado meses, ya me habías preocupado, estas irreconocible”— Dijo Joe acercándose con una sonrisa a su hijastro.

    —“Si lo sé, Joe, *suspiro* durante estas horas han pasado cosas muy raras, luego vio la cara de Joe, quien pasaba de sonreír a soltar un par de carcajadas pequeñas—“Y ¿Qué es tan gracioso Joe?”—Dijo algo extrañado al ver que el volumen de la risa aumentaba.

    —“¡Jajaja! Niño tonto, no han pasado ni treinta minutos desde que Iris me llamo, diciendo que habías despertado, y que por alguna razón desapareciste, ahora ella debería estar cerca de aquí, por cierto, ¿Dónde estabas?, ella casi se desmaya al ver que te esfumaste.

    —“Oh…Cierto, creo que debo contártelo, todo, lo que viví en esta media hora…”—Y le dijo todo a su “padre”, este cada vez sonreía más al ver la imaginación de su “hijo”, pero esta sonrisa se esfumó, cuando llego a la parte de la caja de Pandora, cuando acabo la historia, le mostro el reloj/brújula y le explico el plan para cerrarla, terminada ya la narración de su “hijo”, el, en silencio, se paró y con las manos dijo que lo siguiera, Barry solo se dignó a obedecerle, fueron al cuarto de Joe, el cual se caracterizaba por tener un enorme librero, Joe solo saco un libro color azul oscuro con líneas doradas y con una vista bastante vieja, el abrió la primera página, para ver el índice y dirigirse a la página 564 en donde un título en letras góticas, llamo la atención de Barry, quien no dudo en preguntar.

    —“¿Qué es eso Joe?”—Pregunto el ya ojiazul hacia su enfermo “padre”.

    —“Si dijiste que encontraste la caja, esta es la forma de sellarla”—Le dijo Joe a su “hijo”, para luego continuar—“Pero te digo que esto será muy peligroso, esa cosa, creada por los dioses de un mítico lugar llamado Olimpo, de un mundo paralelo, procedente a un agujero de gusano en el espacio, fuera de este lugar, contiene los deseos más impuros de la humanidad conocida, eso fue lo que causo un apocalipsis en ese mundo, y si no se cierra, lo causara aquí, pero, quiero que des aviso al escuadrón policial* de búsqueda externa, ya que no estaré dispuesto a que tu pierdas tu vida, como lo hizo mi esposa o como lo hicieron tus padres”.

    —“Lo siento Joe, pero tendré que hacerlo solo, sé que no quieres ver mi sangre derramada, pero gracias a este accidente, tengo más fuerza que ese escuadrón del que hablas, creo que mis padres lo entenderían

    —“No, no lo harán, tus padres eran de la elite, y aun así…”—Su voz se empezó a quebrar, obviamente por recordar ese suceso que lo dejo solo y viudo

    —“Yo te agradezco por ayudarme a salir adelante, y agradezco a mis padres por darme la vida, pero yo quiero que ustedes vivan libres, no encerrados como aves.” —Dijo poniendo la mano en el hombro de su “padre” tratando de consolarlo, Barry lo conocía, él estaba angustiado, pero lo pasó por alto y comenzó a dirigirse a la salida, pero escuchó unos tosidos por parte de Joe, él intentó acercarse, pero Joe lo detuvo.

    —“Ve…vete…de aquí, hijo…están aquí…”—Dijo con la voz entrecortada, poniendo su mano en la garganta, Barry, alarmado, puso su mano en la espalda de su “padre”, este tenía la cabeza gacha, y de un momento a otro, dejó de toser, y miro fijamente al ser que se hallaba a su lado, Barry se asustó al ver que los ojos chocolate de su “padre” se habían vuelto rojos color sangre, y comenzaba a reír de manera, cómo decirlo…sádica.

    —“Joe, ¿¡Que pasó!? Joe”—dijo Barry retrocediendo unos pasos por el susto, retrocedió otros más cuando escucho lo siguiente.

    —“Tu…”—La voz grave y profunda de Joe había cambiado a una aguda y distorsionada, haciendo que a Barry se le pusieran los pelos de punta—“Supiste de Pandora, debes morir”— Dijo al final la voz de lo que, al parecer, poseía a Joe, eso era otra de las razones por la cual la humanidad se arriesgaba por cerrar Pandora, ya que, a veces, últimamente más seguido, los demonios o espectros más poderosos, lograban cruzar el campo, poseyendo un objeto inerte o una persona capaz de mantenerlos por un rato, ya que el demonio cambiaba poder por vitalidad en un campo bendito, el problema era que la persona moría después, por tener dos almas en un cuerpo, causando hemorragias múltiples.

    —“No, papá, ¡responde!”—Dijo algo alterado Barry cuando recordó lo de la posesión demoniaca, al ver que su “padre” sangraba por la nariz, ojos, boca y orejas.

    —“Matar…matar a la esperanza, matar…”—Eso era lo único que decía el cuerpo de Joe mientras intentaba enterrarle a Barry, la navaja suiza que Joe normalmente tenía en su bolsillo, Barry, con su velocidad, y sus reflejos, lograba esquivar los aleatorios ataques del poseído Joe, estuvieron así un corto tiempo, ya que, Joe al parecer estaba peleando en su interior, porque se veía que el demonio con dificultad se movía, y a veces, se golpeaba solo, hasta, que en una de sus estocadas, el demonio se dio de lleno en el pecho, soltando así un agudo alarido que rompió la ampolleta de la lámpara de lectura del cuarto de Joe, luego de eso, este se cayó al suelo, para que Barry se acercara a él, al parecer, había vuelto en sí, ya que sus ojos volvían a su color normal, pero este supo que no le quedaba mucho, ya que tomo la mano de su hijo y hablo sus últimas palabras.

    —“Creo que tienes razón… Se derramara más sangre si va ese, débil escuadrón… Ve, y cierra Pandora, no dejes que mi esfuerzo, y el de tus padres... *tosiendo* quede en vano…Eres mi hijo, y el de Henry y Nora Allen…y estamos, orgullosos de ti…

    Te quiero” —dijo con su típica sonrisa, para luego soltar la mano de su lloroso hijo, quien cerraba los ojos de su ya muerto padre.

    —“Yo también…Papá”—Dijo entre sollozos, para luego sacarse de su cuello una cruz bendita, cosa que varios usan en las ciudades como amuleto de fortuna para intentar no ser poseídos. Y dársela a Joe y luego rezar. Cuando termino, este se puso de pie, tomo el libro, y salió del hogar por la puerta trasera, con su modificado oído, que al igual que sus otros sentidos, se habían amplificado, escucho la cerradura girar, para luego, oír el grito de dolor de su hermana, al ver su padre muerto, esto le acuchillo su bondadoso corazón mientras se alejaba de West City, para volver a parar en una banca, en una plaza que marcaba la salida de West City hacia el desierto, acto seguido, se puso a leer detenidamente la página que había puesto su difunto padre, era la página de un sello, en el cual, debías pronunciar unas palabras mientras tocabas la caja para invocar de esta, a la esperanza, la cual te ayudara a sellarla, pero la esperanza necesita un sacrificio para disuadir las tinieblas, y ese sacrificio era el invocador, Barry arranco la página, y dejo el libro en la banca, y comenzó a correr en dirección a Pandora con su reloj, el usaba sus sentidos para navegar, mientras se memorizaba su plan, y las palabras para la invocación.

    No demoro mucho cuando llego a la duna que lo había escondido hace menos de una hora, respiro hondo, volvió a leer fugazmente el papel y, con una liga que tenía en su billetera, arrugo silenciosamente el papel y lo aventó a una dirección opuesta, haciendo que los espectros, se lanzaran en contra de este, se dio las gracias a sí mismo, cuando volvió a la ciudad, ya que en el trayecto al lugar, se mojó con agua bendita, tanto a él cómo al papel que ahora volvía ciegos a los demonios, ya que el agua bendita podía hacer invisible, tanto a la vista como al olfato de los demonios, las cosas que tocaba y purificar los malos espíritus, aunque no del todo, pero fue lo suficiente como para que el tocara la caja dudando un poco, pero al ver que no tenía tiempo, lo hizo de todos modos, esta le volvió a mostrar toda la agonía del mundo, lo que casi hizo que soltara un grito, pero este se concentró, y se apegó a esos miedos, recordando, la muerte de su padre adoptivo, el grito de su hermana, el dolor sufrido por ese rayo, acostumbrándose al dolor, recito todo a la perfección, mientras los demonios se habían dado cuenta de su presencia por culpa de sus jadeos y se abalanzaban contra él, justo en el momento en el que terminaba el conjuro, las bestias fueron vaporizadas por una luz amarilla la cual salía de la caja, el sintió el calor que emanaba eso a su piel y recordó las leyendas sobre lo que hace generaciones se había perdido, ese algo llamado sol.

    —“La esperanza…”—Dijo el soltando a la caja y cerrando sus ojos para sentir ese embriagante calor—“Necesito tu ayuda, quiero cerrar a Pandora”—dijo levantando sus manos a modo de plegaria, la luz se convirtió en una ente sonriente, como formada por las leyendas del astro rey y la cosa del manto arco iris, para mirarle y responderle.

    —“Pero sabes lo que perderás, ¿verdad?”—Dijo al parecer ella, con una melodiosa y suave voz

    —“Si, lo sé, perderé mi vida, porque no quiero perder a quienes amo”—Dijo soltando unas ligeras lágrimas, y al parecer ella comprendió

    —“Entiendo y acepto tu humilde corazón, desde ahora, la esperanza del mundo será el candado, y tu coraje serán las cadenas para la protección de aquello que amas… ¿listo?”—Preguntó el espíritu, para luego dirigirse al pecho de su invocador

    —“Estoy listo señorita”—Dijo con una sonrisa y su típica cortesía, para de esa forma, empezar el ritual, en el cual, el mismo talismán que estaba en la página, se marcara en la tierra con la sangre de Barry, el ente, ahora con un destello rojo, por las manchas de sangre de su invocador, empezó a decir un conjuro, junto a su invocador, el cual ya se había recuperado de la herida, pronto, la tierra comenzó a temblar, y el cielo, a despejar, Barry sentía como su cuerpo se rompía a diestra y siniestra, sin darle tiempo para recuperarse, el dolor era insoportable, prefería morir, aunque su regeneración lo mantenía con un hilo de vitalidad, pero pronto eso se perdió en los ojos chocolatosos de Iris, los de Joe, y por una milésima, en los de sus padres, eso último le hizo soltar una cálida sonrisa, mientras la caja se volvía a cerrar y el, junto a la esperanza y la caja de Pandora, eran evaporados por el aire, y movidos de un lado a otro por el viento, mientras, se veía como ese mito llamado sol, renacía de las cenizas y un alucinante cielo color azul claro, hacia desaparecer la oscuridad, las tinieblas, mientras, los gritos de felicidad de las personas ahogaba de regocijo su espíritu mientras desaparecía entre la inmensidad del gran universo.

    3 años después

    Iris POV:

    “Ahora yo ya tenía la misma edad que Barry, desde el día en que el cielo se volvía claro y una mancha amarillenta nos daba calor, supe que había sido mi hermano, cuando vi que en la estantería de papá faltaba un libro, el que más llamaba mi atención por ser el más viejo, un día lo leí de curiosa y supe que era la historia y un sello para cerrar a Pandora. Cuando papá murió, y mi hermano desapareció, me mude a Central City y estudie criminología, desde pequeña, soñaba con ser como mamá, pero el día que ella murió, papá me lo prohibió. Pero ahora, debía cumplir cuentas con sus sacrificios, y con los de mi hermano, todos murieron por la humanidad, y yo…Quería seguir sus pasos, los pasos de mis héroes, de los héroes incognitos del mundo entero…

    Y mi amada familia”

    Fin…

    Eso fue todo, si no fuera por Fenix Parker, no me hubiera enterado que Barry Allen era el segundo Flash, yo tenia entendido que habia ayudado con la liga de la justicia, no mas que eso, pero bue...
    Gracias x leer!!!
     
    Última edición: 3 Marzo 2015
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  2.  
    Kiros Lionheart

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    Me encantó ;) es largo pero al mismo tiempo entretenido, por eso mismo no podría ser de otra manera. Me gustó este universo alterno, por otra parte desconozco algo sobre lo que está basado, aunque la inclusión de la caja de Pandora es algo bastante buena así como los otros elementos manejados en la historia.

    También me encantó aquellas reseñas del periódico que aparecieron a lo largo de la historia, se que quizás me falto decir cosa mas, pero hoy no me siento bien.. de todos modos me gustó del todo :)
    Saludos

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    Última edición: 4 Abril 2015
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    Fushimi Natsu

    Fushimi Natsu Fanático

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    Pese a que la historia transcurrió de una forma muy rápida, me gustó mucho. Fue interesante de principio a fin y, aunque acabó de cierta manera triste para Iris quien quedó sola y sin familia, lo disfruté mucho porque plasmaste a la perfección su esperanza y deseos por vivir a pesar de todo :)

    No entiendo por qué le agregas comillas a los diálogos, en realidad es innecesario. Sólo basta con los guiones los cuales manejas bien. También te recomiendo que hagas un poco más cortas las oraciones porque, sin que te des cuentas, estás uniendo muchas ideas en un sólo tramo y eso le va quitando emoción al relato. Pero por lo demás ha sido una gran historia y, como tú, también me enteré de la existencia de este segundo Flash. Realmente las actividades de Fenix son de lo mejor.

    Bueno, saludos :D
     
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    Fénix Kazeblade

    Fénix Kazeblade Creador de mundos Comentarista destacado

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    Muy interesante y genial está historia, no lo sé demasiados elementos al mismo tiempo tal vez esos sucesos narrados consecutivamente y de diversos temas, se sintió un poco forzado de pronto que apenas obtuviera poderes y de renglones después ya iba tras él objetivo, en algunos puntos fue paso a paso y luego este mega parrafote fue un tanto desproporcionada la estructura.

    Fue curioso poder ver un universo alternativo de DC que comúnmente no se extrema tanto en realidad y tu supiste darle un buen sentido.

    Por allí a alguien les falta sus símbolos.

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