Larga Distancia [Sakura & Syaoran]

Realizado para mi Tabla, con la palabra "Cartas". Este es el primer escrito que realizo para este desafío :)

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Tomoyo pudo verlo desde el momento en que la correspondencia de la familia Kinomoto llegó a manos de la más joven integrante de la misma. La forma en que se iluminó el rostro de la chica tan sólo podía significar que su sospecha tenía una base sólida, y que se trataba exactamente de lo que ella creía.

—¿Algo interesante en el correo, Sakura? —preguntó Tomoyo casualmente.

—Ehm... no... nada, nada de nada Tomoyo —contestó su amiga, haciendo un pésimo esfuerzo por esconder sus nervios, pero Tomoyo decidió ser una buena amiga y dejarle creer que la había convencido—. Tengo que ir arriba un momento, esperen aquí.

La joven Kinomoto subió las escaleras a velocidad récord y se encerró en su habitación. Kero, que hasta el momento había ignorado a las chicas y se dedicaba a devorar una porción de torta, levantó la mirada y miró a la única restante en la habitación completamente confundido.

—¿Qué le pasa a Sakura?

Tomoyo le sonrió en respuesta, y se llevó un dedo índice a los labios como indicando silencio.

—Cosa de chicas.

Escaleras arriba, Sakura miraba el sobre que contenía la primera carta que Syaoran Li le enviaba desde Hong Kong. Tras darse coraje a si misma, la joven se decidió a abrirla, se echó sobre la cama, y finalmente comenzó con la lectura.

La letra de Syaoran se encontraba algo gruesa y rara, como si le costase escribir las palabras que había escrito. Se lo imaginó avergonzado e intentando pensar que escribir, y simplemente no pudo resistir sonreír ante esa imágen.

Abría la carta disculpándose con la demora en escribirle, diciendo que había querido escribirle desde que regresó a Hong Kong tras el incidente con la última carta Clow pero que no había sabido que poner en ella exactamente. Incluso le había pedido ayuda a sus hermanas, pero sus consejos no lo convencieron y al final decidió poner simplemente lo que sentía. Eso era muy valiente de su parte, opinaba Sakura, y no se lo imaginaba de otro modo.

Hablaba del viaje de regreso, y de su vida ahora en su país natal, y finalmente admitía que la extrañaba. Ella también lo extrañaba, y leer sus palabras no era lo mismo que tenerlo frente a él. Añoraba poder conversar con él... pero por ahora, esto era lo que tenía, a lo que debía aferrarse si quería mantener una relación a distancia con el chico que quería. La distancia entre ambos era larga, y la correspondencia una forma de hacer de esa distancia un poco más corta.

No era un pensamiento muy alentador, y sin embargo se encontró sonrojada y sonriendo, llena de felicidad, y sin encontrar otra manera de expresar tanta dicha se olvidó de absolutamente todo y se sentó en su escritorio.

Era hora de enviar una carta.

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