Historia larga Crónicas de una Maho Shoujo

Luego de un tiempo ausente finalmente les traigo la nueva historia de Esme Maho, hahahaha a decir verdad este capítulo está bueno xD, me divertí escribiéndolo :3 sin más demora acá está :3



Historia 8: ¡Duende feo!

—¡Vuelve aquí! —exclamó Wendy, la chica corría por las calles como loca con su traje de chica mágica, sus pasos rápidos dejaron desconcertados a los transeúntes que solo miraban la extraña escena con una gota invisible detrás de sus cabezas.

—¡No me atraparán con vida! —Un pequeño duendecito regordete escapaba a toda marcha, el individuo vestía un pantalón de tirantes negro y un gorro blanco, sus botas puntiagudas le daban aspecto de gnomo jardinero. No obstante, el condenado llevaba ya buen rato escapando.

—Ese tipo es demasiado molesto. —Magical Luz interceptó al duende cerca de un terreno baldío, pero éste rápidamente dio un salto de dos metros para evadir cualquier intento de atraparlo. La persecución parecía no tener fin, las ramas que Esmeralda usaba mágicamente no podían aprisionarlo, el tipo era demasiado escurridizo.

¿Cómo llegaron nuestras heroínas a esta situación?

Horas antes se escucharon reportes de un enano pervertido que subía las faldas de las mujeres, robaba caramelos a los niños y obstruía el tráfico realizando bailes absurdos a media carretera. La policía intentó atraparlo a base de trampas y patrullas, no obstante, el duendecillo era demasiado listo para caer en esos trucos baratos.

Era un sujeto muy fastidioso, poseía una voz chillona que podría sacar de quicio a cualquiera, sin contar que también se metía a lugares indebidos, como los probadores femeninos en las tiendas de ropa, aguas termales para damas y no olvidemos los café maids. ¡Menudo guarro!, muchas chicas intentaron defenderse de sus perversiones, pero no consiguieron tocar al duende.

—Soy demasiado para ustedes, ¡jamás me tocarán! —Para colmo cargaba un celular moderno para tomar las fotos de las faldas que levantaba, las bragas y los rostros enojados de las mujeres, ¡definitivamente todo un malvado!

Esmeralda y Wendy recorrieron toda la ciudad intentando capturarlo, por desgracia, el bastardo estaba siempre un paso adelante. Primero trataron un ataque sorpresa dentro de un balneario, después del todo, el duende era un pervertido, así que lugares con chicas en bikini eran lo más parecido a un hábitat natural para él.

—¡Ya eres mío! —Magical Fénix cargó contra el duende sin ningún tipo de estrategia, un error que le salió caro, pues su antagonista simplemente se desplazó hacia la derecha “toreando” a Wendy directo al agua.

—Mala suerte, pequeña, te faltan unos cien años de entrenamiento para poder detenerme.

—¡Maldición!, ¡Esmeralda, ataca! —exclamó Wendy.

—No escaparás… —Esmeralda saltó con un flotador en forma de llanta, su objetivo era capturarlo usando dicho objeto, no obstante, el duendecito saltó casi tres metros sobre el aire hasta caer sobre la tabla de clavados.

—Oh, qué buena vista. —El duende sacó fotos con zoom a todas las chicas que hacían uso de la piscina, ellas al sentirse invadidas decidieron salir del agua muy avergonzadas, terminando así un día de diversión por culpa de ese maníaco. Esmeralda lanzó nuevamente sus ramas con toda intención de atraparlo, pero éste volvió a saltar por los cielos. Aún así, Wendy le siguió el paso a pesar de tener la ropa mojada, su frustración crecía y eso tampoco ayudaba a la persecución.

Durante las siguientes horas el duende hizo de las suyas, estuvo espiando a cada mujer joven de la ciudad y molestándolas usando fotografías comprometedoras. No obstante, también se dedicó a joder parejitas enamoradas en los parques, cuando veía a dos amantes rápidamente se interponía entre ellos y mojaba al novio con una cubeta de agua sacada mágicamente.

¡Menudo problema!

—No podemos dejar que se escape. —Esmeralda también comenzó a sentir la frustración, nunca antes lidiaron con un enemigo tan escurridizo.

—¿Y de dónde salió este cabrón? —Wendy soltó palabrotas y no era para menos, las ganas que traía de meterle un buen coscorrón sobraban, por culpa de él su vestido yacía mojado y arruinado, necesitaría un buen secado mágico para regresarlo a la normalidad.

—¿Qué pasa?, ¿ya están cansadas, niñas mágicas? —bufó el duendecito, a pesar de haber corrido por varias horas no sentía ni una huella de cansancio, quizá por su protección mágica y control de la naturaleza, pero lo que realmente le daba fuerzas era fotografiar chicas lindas. ¡Con ese poder ni siquiera Alastor podría detenerlo! (si entendieron, denle manita arriba).

Nuevamente su adversario corrió hacia el parque abandonado, frente a la intersección que estaba por la casa de Esmeralda. Las chicas no tuvieron más remedio que seguirlo, después de todo… ¡No podían dejar libre a un pervertido tan peligroso!, ¡merecía la pena capital!, bueno, quizá no, con una regañada y zape seguro se arreglaba todo.

—No tienes escapatoria, ¡ríndete de una vez! —exclamaron las dos chicas al mismo tiempo, las dos se veían fastidiadas y con ganas de irse a casa, para colmo, Pablo Casanova pasó caminando por ahí.

—Eh, ¿qué sucede acá? —cuestionó el muchacho sin mucho interés, al verlo el duendecito se escondió detrás suyo y lo miró a los ojos.

—Tú eres un chico, seguro que entiendes mi propósito en esta vida, ¡fotografiar chicas lindas en poses indecorosas es mi pasión! —Pablo Casanova soltó un suspiro lleno de resignación, posteriormente volteó a ver a las dos heroínas.

—No sé lo que seas y la verdad no me interesa saberlo.

—Vamos, ¡si me rescatas te daré unas cuantas fotos!, tengo también de chicas que estudian contigo, ¿no quieres ver su lado oculto? —interrogó el duendecito.

—¿Acaso me crees un pervertido?, jamás haría ese tipo de cosas —contestó Pablo con rectitud, además, mostrarse de manera vergonzosa con dos chicas mágicas tampoco era una idea muy inteligente.

—¡Así se hace, ciudadano! —Wendy alteró su voz para no ser reconocida, Esmeralda por tanto solo sonrió con amabilidad, ya que no sabía cambiar del todo su voz y también lucía cansada por la persecución.

—Entonces no me dejan más remedio que usar mi técnica secreta: ¡Ráfaga de viento! —El duende utilizó un hechizo elemental de bajo nivel, en teoría debería ser capaz de provocarles cortes profundos con la vibración del viento, no obstante, prefirió nada más sacar una brisa traicionera como las que había cerca del mar.

Wendy predijo su movimiento a tiempo, ya que formó una barrera de fuego que impidió el paso de la brisa, por desgracia, Esmeralda no tuvo tanta suerte. Magical Luz recibió directamente el vientecito, de inmediato su falda se levantó completamente, dejando al descubierto sus bragas frente a Pablito.

—Eh… ¿¡Las has visto?! —Magical Luz se sonrojó como un tómate, Pablo sí vio sus bragas, de hecho las apreció con todo su esplendor, eran blancas y combinaban a la perfección con el vestido que portaba.

—Eh, n-no, no he visto nada —mintió, el muchacho dio unos pasos hacia atrás y luego volteó a ver a Magical Fénix como si estuviese buscando ayuda.

—Creo que deberías irte, esto se va a poner intenso. —Wendy tragó saliva, un aura oscura rodeó el cuerpo de Esmeralda, su mirada inocente y dulce fue reemplazada por una repleta de rabia ciega. Pablo no era un tonto, salió corriendo para no verse envuelto en el coraje de Magical Luz.

—Por tu culpa, por tu culpa… ¡Han visto mis bragas!, ¡un chico vio mis bragas! —Unas lágrimas de vergüenza aparecieron sobre los orbes de Esmeralda, segundos más tarde cientos de ramas aprisionaron al duende por todos los flancos, impidiéndole escapar o reaccionar —. Y no fue cualquier chico, ¡fue un compañero de clases!

—Que importa, ¿no es él quién te gusta? —El duendecito sacó un montón de fotos donde Esmeralda veía embobada al pelirrojo, Wendy las tomó y miró por un segundo.

—Oye, este pervertido tiene razón.

—¡Él no me gusta! —gritó Magical Luz, la chica perdió por completo el control ya que todas las ramas empezaron a darle pequeños zapes al criminal en miniatura —. N-No me gusta en absoluto.

—¿Entonces alguno de ellos te gusta? —El duendecito sacó más fotos mágicamente, ahí yacían Ryo y Rance —. Has interactuado con ellos recientemente, ¿será qué te mueve alguno?

—Yo también quiero saber. —Magical Fénix no estaba ayudando, en vez de rematar al duende se unió a él para interrogar a Esmeralda, el rostro de nuestra heroína parecía un sol a punto de explotar, ya que la coherencia y lógica desaparecieron de su diccionario personal.

—¡Que no! —Los zapes se volvieron más constantes, aún así el duende siguió resistiendo para joder a Esmeralda.

—Auch, ¡ya sé!, ¿te gusta una chica?

—OMG, ¿eres lesbiana, Esmeralda?, ¿o acaso bisexual? — ¿De qué lado estaba Wendy?, en lugar de ayudar a su compañera también anduvo jodiéndola un buen rato, tanto que el duende parecía estar disfrutando su castigo.

—¡No!, ¡ya cállate! —Y finalmente la chica usó sus ramas mágicas para mandar a volar al pervertido miles de kilómetros al aire, terminando así con la amenaza del duendecito por el momento. Magical Luz deshizo su transformación inmediatamente, en seguida volteó a ver a su amiga que todavía seguía transformada —. Estoy molesta….

—Ugh… —Wendy volvió a la normalidad también, no obstante, seguía asustada por el modo furia de Esmeralda, el cual jamás había aparecido hasta este momento. Una nube se posó imaginariamente sobre la cabeza de su amiga, al parecer el malestar de Esmeralda todavía estaba iniciando, ¡tenía que detenerlo antes de que fuese demasiado tarde!

—¿Tienes algo qué decir en tu defensa, Wendy? —La joven de cabellos negros infló sus cachetes, se veía tan adorable que incluso enojada su poder moe incrementaba. Aún así, Wendy sintió el aura malvada que rodeaba a su inocente compañera.

—Sí, ¡barrera anti Esmeralda! —Wendy de la nada trajo a Pablo, el chico ni siquiera se dio cuenta de cuando fue arrastrado hacia el parque otra vez. La joven rubia volvió a joder las leyes de la lógica y la coherencia narrativa con sus acciones.

—¿Eh?, ¿cómo llegué aquí?, ¿no había terminado ya mi escena?

—Eh, P-P-Pablo… —susurró Esmeralda ruborizada otra vez.

—Ni sé que hago acá, hace rato las chicas mágicas andaban siguiendo a un duende, ¿sabes si ya lo atraparon? —preguntó sin saber que Esmeralda era Magical Luz.

—N-No lo sé…

—Es una pena, seguro sí lo atrapan, ese sujeto era muy perturbador, ¿tú qué haces aquí, Wendy?, eh, ¿Wendy? —En una maniobra inteligente la chica huyó para no ser víctima de Esmeralda.

—Más vale aquí corrió que aquí murió. —Wendy ya estaba a casi un kilómetro de distancia, su escape fue perfecto, ¡nunca antes había pensado de una manera tan precisa!, la barrera anti Esmeralda resultó ser todo un éxito, además, su mejor amiga perdió todo el enojo que traía cuando vio al muchacho. Un arma de ganar-ganar, sin duda alguna.

—Supongo que se fue —contestó Esmeralda muy apenada.

—Ya veo, por cierto, no te ves muy bien, tienes la cara roja, ¿estás enferma? —Como si fuese un cliché de algún manga shoujo barato, el pelirrojo tocó a Esmeralda en la frente.

—Estoy bien —respondió cortantemente.

—No lo creo, estás enrojecida y muy caliente. —En realidad, Esmeralda estaba caliente por haber corrido todo el día, era sudor lo que traía, pero Pablo no sabía ese pequeño detalle. Contra todo pronóstico el pelirrojo tomó a Esmeralda en brazos, como si fuese una princesa o recién casada.

—¡Eh!, e-estoy bien, no es necesario que me cargues, en serio.

—¿Qué clase de chico sería si te dejo así?, además, soy tu compañero de clases y amigo, deja de quejarte y acepta el aventón. Además, e-esto es vergonzoso para mí también. —Esmeralda fue testigo de un hecho sin igual, ¡Pablo Casanova se había sonrojado!, el chico más impopular, inútil, bastardo, mala onda, imbécil y demás adjetivos calificativos negativos también era capaz de avergonzarse frente a una chica.

En verdad, esa fue la primera vez que Casanova Pablo se sonrojó por una mujer…

—Y-Y-Ya que insistes, aceptaré tu amabilidad —tartamudeó Esmeralda, fue así como el día llegó a su final.

Fin de la historia 8

Eso ha sido todo por el momento xD, ¿qué les pareció el capítulo?
¿Cuál escena les gustó más?

Y una pregunta en general, ¿qué personaje secundario ha sido su favorito y desean verlo en el siguiente cap?, están la bruja del pescado, el duende, Patricia, Rance, Ryo, Víctor, Casanova Pablo o quieren uno nuevo :3

 

Saludos, ahora les traigo la siguiente mini historia, no diré más para dejarlos en suspenso :3



Historia 9: Una realidad escolar

¿Qué era realmente la realidad?

¿Cómo saber si nuestros días no estaban marcados por una vil mentira?

Para esas cuestiones existían las teorías de conspiración, algunas más exageradas que otras, en su mayoría ninguna tenía un fundamento teórico que pudiese ser demostrado. No obstante, de tantas tonterías que circulaban en la red seguramente alguna debía ser real, ¿no es así?

Esmeralda de la Luz era una chica mágica, usaba sus poderes para salvar la ciudad de los seres sobrenaturales que ahí existían. Su rutina consistía en la siguiente: Levantarse temprano, ir a la escuela, charlar con los amigos, practicar sus habilidades de combate, pelear contra algún villano (opcional), regresar a casa, hacer sus deberes, navegar por la red, charlar con su padre (opcional) y finalmente ir a dormir.

Aquella rutina quedó marcada en su interior y no solo en el de ella, todas las personas en el mundo seguían un patrón preestablecido que los mantenía en la línea de la realidad y cordura. Después de todo, los humanos poseían la capacidad de pensar, dicha habilidad les permitió sobrevivir en medio de tantas bestias gigantes durante la antigüedad.

¿Pero todo esto era real?

¿Cómo saber si lo qué sucede a nuestro alrededor no es más que una ilusión?

No hay forma de comprobarlo, porque nadie ha vivido un fraude, de lo contrario, podrían identificar cuál es la diferencia entre una realidad falsa y una verdadera. Por lo tanto, no existe algo como una falsa realidad, ya que la falsedad individual puede convertirse en verdad colectiva si más de uno vive dentro de su propio mundo.

Un razonamiento complicado y tedioso, ¿pero no funcionaba así la mente humana?

Proceso, análisis, resultados, conclusiones…

¿Cómo poder identificar tanta información qué existía a nuestro alrededor?

Esmeralda se levantó de la cama y alistó sus cosas para ir a clases, antes de partir saludó a Víctor con una sonrisa, posteriormente mantuvieron una plática normal y en seguida caminó hacia la escuela. El clima cálido era sofocante, las personas traían ropas ligeras debido al intenso calor, muchos autos iban con las ventanas cerradas, pues traían consigo el aire acondicionado a todo motor.

La fecha de su teléfono marcaba: 3 de noviembre, un día común, sin ninguna efeméride sorprendente a nivel nacional, internacional o sobrenatural. Al entrar al instituto saludó a Wendy.

—Buenos días, Wendy.

—Hola, Esmeralda, ¿hiciste la tarea de matemáticas?, porque yo no. —Una sonrisa se mostró en los labios de la chica, Esmeralda por otro lado soltó un suspiro lleno de resignación.

—Deberías ser más responsable con tus trabajos —argumentó, de inmediato la joven heroína sacó de su mochila un cuaderno rosado —. Toma, te prestaré mis apuntes para que puedas hacer el trabajo, pero no te acostumbres tanto.

—¡Gracias!, eres un amor, Esmeralda.

Una conversación casual, sin ningún sobresalto o novedad, lo mismo pasó con las clases que tomaron junto al docente. Fueron repasos generales de temas que ya sabían, un mero refuerzo a los conocimientos adquiridos durante el semestre, nada que ganar, tampoco perder. Podría decirse que fue un día poco productivo en cuestión académica.

Aún así, Esmeralda tenía una sensación diferente, como si ya hubiese estado ahí en otro lugar y tiempo. Sonaba extraño y hasta redundante: Obviamente ya estuvo ahí el día anterior, pues iba a la escuela de lunes a viernes, también vio los temas con anterioridad, por lo tanto, era natural que tuviese dicha familiaridad con el entorno.

Entonces… ¿por qué andaba de esa manera?

De repente todo se volvió negro, Esmeralda sintió una sensación (válgame la redundancia) parecida al desmayo, pero no perdió la consciencia, más bien volvió a recuperarla. Se encontraba en su habitación, con sus pijamas y el cabello despeinado, no tenía ningún malestar, tampoco alguna marca de energía mágica sobre su cuerpo.

—¿Qué pasó? —Ella tenía memorias de lo que hizo durante la tarde-noche de ayer, fue a casa, preparó unos huevos y se quedó viendo televisión. Aún así, ella no creyó haber hecho esas cosas, pues esas imágenes parecían un mero producto de la imaginación antes que recuerdos reales.

Todo se volvió más confuso cuando revisó su reloj…

3 de noviembre del 2010…

La misma fecha de ayer se volvía a repetir, no obstante, cuando revisó las noticias checó que los acontecimientos sucedidos en el mundo no eran los mismos que los de “ayer”, entonces, revisó los relojes y anuncios mundiales en Internet. Todos los números marcaban lo mismo: XXX-XXX-XXX, solamente ella y sus dispositivos electrónicos-manuales contenían la misma fecha.

¿Acaso era un error?, ¿se habrían dañado los relojes?, pensó.

Por desgracia, esa era una posibilidad negativa, ya que ocho relojes no podían descomponerse al mismo tiempo. Esmeralda trató de analizar la situación, ¿por qué el tiempo solo se detuvo en su hogar?, ¿fueron hechizados de alguna forma?

No, ese no era el caso tampoco, de haber sido hechizados desde la distancia habría rastreado el conjuro desde la raíz. Para no retrasarse alistó sus cosas, revisó el contenido de su horario y efectivamente, era el mismo que el de “ayer”, no hubo ningún cambio significativo.

Al desayunar la misma cosa y recorrer el mismo sendero con el mismo ritmo (usar siempre una palabra es agotador, pero le da mejor ambiente, creo que debería dejar de hacer anotaciones, ya parezco Wendy) se dio cuenta de un detalle particular.

Sus demás compañeros también repetían el ciclo, avanzaban inconscientemente sin enterarse de lo que ocurría, de lo contrario habrían perdido la razón.

Nuestra heroína llegó a la escuela y se encontró con Wendy, ella la recibió con las palabras que utilizó el día anterior, al parecer su amiga todavía no se daba cuenta de la irregularidad que tenía la realidad. Por un momento pensó en revelarle todo, no obstante decidió no hacerlo, ya que todavía no encontraban al culpable. Wendy era muy mala para guardar secretos y las misiones en sigilo, si le contaba la verdad la joven rubia seguramente haría un escándalo, llamando la atención del culpable.

Esmeralda no quería mostrar irregularidades en su comportamiento, pues tenía cientos de preguntas acumuladas en su cabeza…

¿Quién era el responsable de esta irregularidad?

¿Por qué lo hizo?

Y lo más importante… ¿Por cuánto tiempo ha sido 3 de noviembre en esta escuela?

El docente dijo lo mismo, las clases resultaron aburridas porque Esmeralda ya sabía lo que sucedería. Durante los periodos repitió el mismo proceso para buscar algún cambio significativo, un eje corrupto que destruyera el ciclo encadenado, por desgracia nada fue alterado, las mismas cosas que sucedieron ayer volvieron a pasar hoy. Sin variaciones, ni alteraciones, una copia perfecta del día 3 de noviembre.

Aún así, cuando el reloj marcó las cinco de la tarde el día volvió a reiniciarse, Esmeralda despertó en su habitación, con los relojes marcando el día 3 de noviembre del 2010. Pero hubo un cambio, las memorias que tuvo el día anterior luego de haber reiniciado eran diferentes, a pesar de no sentir esos recuerdos como suyos, las imágenes cambiaron totalmente.

En ellas, se veía a sí misma peleando contra la bruja del pescado y comiendo pizza con Wendy, un día divertido a decir verdad.

¿Por qué las memorias luego de las 5: PM variaban?

Esmeralda tuvo una hipótesis: el día 3 de noviembre solo duraba hasta las 5 de la tarde, cuando la escuela terminaba. De ahí el tiempo volvía a su curso y luego se reiniciaba en la mañana del día siguiente, volviendo así a la fecha antes mencionada. Una teoría aceptable, pues el “reinicio” no sería uno como tal, sino un final.

Sonaba confuso y tedioso, pero Esmeralda no encontró otra respuesta igual de satisfactoria como esa. Con la información imprecisa ella pensó en un plan para encontrar al culpable. Lo primero que se le ocurrió fue faltar a la escuela y transformarse en Magical Luz para entrar en combate, no obstante, descartó esa posibilidad casi de inmediato.

La persona que controlaba el tiempo seguramente mantenía una estricta vigilancia sobre los estudiantes, por lo tanto, llamar la atención rompiendo el ciclo no era buena idea. Sin embargo, otra posibilidad igual de llamativa rondó por su cabeza durante unos instantes.

¿Y si él deseaba qué alguien rompiese el ciclo?

En fin, reflexionar tanto no iba a traer una solución real, por ende, Esmeralda se puso en marcha y siguió los mismos pasos para no llamar la atención del responsable. Durante las siguientes dos horas nada cambió, Esmeralda no pudo encontrar una variación que le permitiese entrar en acción, además, carecía de pista alguna para encontrar al culpable.

El docente de matemáticas colocó cinco problemas que resolvió en tres minutos, fue ahí cuando la primera variación del tiempo ocurrió, ya que anteriormente nuestra protagonista tardaba media hora. De inmediato la joven de cabellos negros salió corriendo del salón, al hacerlo sintió como el mundo a su alrededor comenzó a tambalearse.

—Sabía que si alteraba el curso algo pasaría, pero no creí que fuese tan repentino. —Esmeralda se detuvo y aguantó el malestar en su cabeza, debía pensar rápidamente en dónde se localizaba el responsable…

Lo primero que se le vino a la mente fue la habitación que usó Patricia para hechizar la escuela, no obstante, aquel lugar era muy desventajoso. El responsable de este misterioso ataque no cometería errores tan graves como ese, de hecho, parecía ser un profesional entrenado y no una persona que aprendió hechicería por Internet.

—¿En dónde puede ocultarse? —volvió a cuestionarse…

¿Cuál sería el último lugar dónde se le ocurriría buscar?

—¡La oficina del director! —gritó Esmeralda, la chica rápidamente se dirigió al lugar con tal de buscar al culpable. El porqué llegó a esa conclusión resultó más simple de lo que aparentaba, una dirección era donde los papeles importantes de la institución se resguardaban, además, las juntas importantes y el destino de la escuela normalmente se llevaban a cabo en ese salón. Controlar la realidad y tiempo desde una dirección escolar tenía sentido si se analizaba simbólicamente.

Cuando Esmeralda llegó a la dirección no había nadie trabajando dentro, los papeles yacían tirados por el piso, las computadoras encendidas mostraban números relacionados a cuentas bancarías y demás asuntos administrativos. No obstante, en la silla del director había un hombre misterioso, tenía el cabello negro largo, éste cubría sus ojos lo que le daba un aspecto tenebroso. Vestía un enorme saco morado que cubría todo su cuerpo, botas negras y pantalones del mismo color.

—¿Eres tú quién ha causado esta alteración? —cuestionó Esmeralda, al hacerlo se transformó en Magical Luz.

—Supongo que mi experimento dio frutos, precisamente, Magical Luz, yo he creado una esfera de tiempo dentro de esta escuela. —El hombre sonaba como un fantasma carente de emociones, tras responderle se levantó de la silla y extendió sus brazos hacia el techo.

—¿Por qué lo hiciste?, ¡dame una explicación!, no puedes jugar con la vida de los estudiantes de ese modo.

—Al igual que tú, yo soy un hechicero, mi experimento mágico consiste en la manipulación del tiempo determinado en un espacio cerrado. —La voz del sujeto poco a poco fue ganando emoción —. ¿Cuántas posibilidades tiene un día?, cuando pienso en eso mi mente vuela más allá de la imaginación para obtener la respuesta, aún así, fue decepcionante que el mismo ciclo se repitiera muchas veces.

—¿Qué quieres decir?, no te entiendo para nada.

—Cuando repetí el día 3 de noviembre del 2010 quería ver si alguien era capaz de romper la ecuación, buscar un resultado diferente para el día 3 de noviembre sin tener que avanzar. Por ejemplo, que un estudiante levante su mano en la clase de matemáticas, aún cuando no lo hizo en el día original, encontrar esas pequeñas divergencias fue lo que motivó mi experimento al principio. —El hechicero retomó su asiento y cruzó sus piernas, al hacerlo Esmeralda dio un paso hacia el frente con gran molestia.

—¿Pero por qué?, ¡por qué lo haces!

—El tiempo y la realidad ofrecen infinitas posibilidades, piensa por un momento, ¿qué pasa cuando alguien muere en el tiempo real?, pero vuelve a estar vivo al repetir el 3 de noviembre. ¿Esa persona está viva o muerta?, ¿cómo podemos decir qué alguien murió si está presente ahora mismo?, dentro de esta esfera temporal que he creado. De igual forma, ¿cómo podemos asegurarnos qué la realidad no es otra esfera de tiempo?, no hay ninguna prueba contundente para descalificar mi realidad.

—Descalificar la realidad, ¿acaso dices qué esto no es una ilusión? —Esmeralda se confundió más, aún así, no bajó la guardia mientras realizaba sus cuestionamientos.

—Tus cinco sentidos funcionan adecuadamente acá, de ser una ilusión no serías capaz de pensar por tu cuenta, además, el tiempo transcurre incluso mientras hablamos. Mi plan es hacer que sea 3 de noviembre eternamente, así cuando el mundo termine eventualmente este fragmento de realidad seguirá en pie, además, con todas las variaciones que saldrán ahora qué tú rompiste el ciclo podría ser capaz de crear una realidad nueva, totalmente distinta a la que hay en nuestro plano existencial. —Las palabras de ese hechicero confundieron más a Esmeralda, ella no entendió un pepino de lo que dijo su antagonista, de todos modos, no estaba de acuerdo con el uso de humanos para experimentos mágicos.

—Quizá tus razones no sean malvadas precisamente, de todos modos, ¡voy a detener esta esfera de tiempo!, las vidas de mis compañeros no son juguetes para que pruebes tus teorías, ¡te detendré aquí mismo! —exclamó Esmeralda, la chica rápidamente invocó un sello mágico en forma de pentagrama, al hacerlo un rayo dorado salió disparado hacia el pecho del hechicero.

—Es inútil. —La técnica de Esmeralda se deshizo a pocos centímetros del hechicero enemigo —. Yo soy Vortex, el maestro del tiempo y el espacio, tus débiles ataques no son rivales para mí.

—¡Aún no he terminado! —Una rama de árbol salió del piso y tomó a Vortex de los tobillos —. ¡Golpe de Gaia! —Una segunda rama apareció detrás del hechicero con toda la intención de empujarlo hacia la pared, por desgracia, las ramas “desaparecieron” de la nada y se convirtieron en polvo.

—¿Aún no lo entiendes?, yo domino el tiempo dentro de esta escuela, puedo hacer que un ataque se retrase o adelante por segundos y minutos. Tu golpe de Gaia fue enviado al futuro. —El hechicero se movió unos pasos a la izquierda, segundos más tarde las dos ramas reaparecieron y chocaron entre sí, destruyendo parte del mobiliario.

—Rayos, en verdad eres muy fuerte…

—Sí, ¡me ha hecho feliz pelear contra ti, Magical Luz!, pero el tiempo sigue su marcha, si el ciclo es el adecuado nos volveremos a ver.

Vortex tronó sus dedos, al hacerlo el tiempo se reinició y Esmeralda volvió al principio, la habitación de su cuarto, con todos los calendarios de su casa marcando la misma fecha: 3 de noviembre del 2010.

Esta historia continuara…

Como ven, es la primera historia que termina en continuación, esperen la parte 2 y final de esta mini saga en el próximo capítulo :3, como dije en el primer post, a veces habrán sagas como ésta, ya sean cómicas o serias, así que esperen con ansías.

¿Qué les pareció el capítulo?, ¿cuál escena les gustó más?

 

Acá el capítulo nuevo, es medio tarde así que solo lo dejo.



Historia 9 parte 2: Intruso inesperado, pero afortunado


La misión de asalto fue un completo fracaso, Esmeralda volvió al inicio, todos sus esfuerzos resultaron en vano. Sin embargo, una nueva posibilidad se abrió frente a ella: Podía intentar un segundo ataque, no obstante, si repetía la secuencia pasada corría el riesgo de ser reiniciada hasta su cuarto nuevamente.

3 de noviembre del 2010…

Una fecha que estaba siendo repetida durante la mitad del día, Esmeralda pasó todo el desayuno pensando en una manera de vencer a su formidable oponente, ideó varios planes, entre los cuales resaltaban dos: Atacarlo por sorpresa o luchar continuamente contra Vortex, con el objetivo de encontrar algún punto débil en él.

—¿Debo pedirle ayuda a Wendy? —Su amiga rubia era ideal para entrar en combate, quizá explicarle la situación podría ser un poco difícil, debido a su nulo intelecto, aún así, sus puños no debían ser subestimados y a la hora de la verdad podrían marcar la diferencia —. Solo le diré a quien debemos vencer, si le explico los detalles no acabaré nunca —comentó Esmeralda para sí misma, tras repetir la misma secuencia de actividades se dirigió al colegio.

La carretera presentó a vehículos diferentes recorriendo la ciudad, por un momento pensó que la esfera de tiempo se vio afectada, por desgracia, los alumnos y docentes eran los únicos que repetían el ciclo. Es decir, que todas las personas del mundo vivían sin darse cuenta de que una pequeña parte de la población se encontraba atorada en el 3 de noviembre del 2010.

Cuando Esmeralda llegó a la escuela se dio cuenta de que nada cambió, a pesar de haber roto el ciclo las demás personas continuaban haciendo las mismas cosas que los días anteriores. O al menos eso creyó, en primer lugar, el docente llegó a clases unos segundos más tarde, era una diferencia poco notoria, quizá de no haber enfrentado a Vortex ayer ni se habría dado cuenta de esa variación.

Otro detalle interesante fue el vestido de Wendy, normalmente ella venía con el último botón de su uniforme desabotonado, sin embargo, ahora traía todo su atuendo bien arreglado, algo raro de ella y más aún con la esfera de tiempo activada. Conforme fue pasando el día notó muchos detalles que antes dejó inadvertidos, como el peinado del docente, las respuestas de los alumnos durante las pruebas e incluso las pláticas de los compañeros.

¿Por qué empezaron a mostrarse alteraciones?, Esmeralda recordó las palabras de Vortex: “Ahora que has roto el ciclo, un nuevo mundo de posibilidades se abre detrás de esta gran esfera de tiempo”, ¿a qué se refirió?, ese cuestionamiento quedó en la mente de nuestra heroína por bastante rato. A diferencia de ayer no saltó directo al ataque luego de la prueba de matemáticas, simplemente se quedó sentada en su pupitre mirando al cielo.

—Tiene que haber un método para ganar —vociferó suavemente, de inmediato regresó su cabeza a la mesita y suspiró. Wendy notó ese comportamiento, por lo tanto sonrió y tomó a su amiga de los hombros, un gesto nuevo que no hizo durante las repeticiones pasadas.

—¿Sucede algo?, te veo medio enferma —comentó la chica.

—Sí, es difícil de explicar, vamos por un refresco, muero de sed. —Las dos jovencitas caminaron hacia la cafetería cuando la clase terminó, Esmeralda se compró una lata de cola y se la fue tomando todo el camino, Wendy hizo lo mismo con una bebida de naranja. El día transcurría lento, la rubia ni siquiera se daba cuenta de lo que sucedía a su alrededor, ¡menuda cabeza hueca!

—Oye, ¿qué pasa si juntamos a dos gatitos con un perro? —preguntó Wendy.

—Ni idea —respondió Esmeralda con una mirada extraña.

—Los gatos tienen un día de perros, ¡no es genial! —El chiste malo de Wendy provocó que Esmeralda sacara su celular y pusiese el tonito de “chiste malo”, tras hacerlo agarró su lata nuevamente. No obstante, lo que encontró fue sorprendente, horrible y fascinante a la vez…

¡El refresco estaba sin tomar!, todo el contenido que bebió Esmeralda durante el camino reapareció dentro del empaque, aún así, la chica tenía la sensación de haber tomado casi toda la cola disponible. Fue un fallo espantoso de la realidad, una contradicción que no debería estar ahí, pues rompía todas las leyes de la lógica.

La chica dio unos sorbos a la bebida y ésta le provocó la misma sensación que haber tomado el refresco por primera vez. Aún así, la primera “sensación” del refresco seguía presente dentro de su paladar, es decir, que no se reescribió el recuerdo de haber comprado el refresco, más bien se antepuso de mala manera y acabó por crear un error de lógica que podría llegar a males mayores.

—Oye, ¿no sientes algo raro? —Wendy vio como las paredes empezaban a parpadear, de hecho, varios estudiantes notaron que la pintura de las aulas se volvió azul en vez del blanco natural de siempre. Era imposible pintar todo el campus en una sola hora, por ende, las personas empezaron a volverse más inquisitivas con los pequeños detalles a su alrededor.

El club de soccer por ejemplo, encontró todos sus balones de fútbol cambiados por pelotas de baloncesto, ¿por qué habían ese tipo de bolas ahí?, la escuela ni siquiera tenía equipo de baloncesto. Sí contaban con unos pocos y también tenían aros de metal, (básicos e informales), aunque el número de pelotas era apenas de cinco. Dentro del almacén de fútbol encontraron más de cuarenta pelotas y ningún balón de soccer.

La realidad y el tiempo se estaban distorsionando, la esfera de realidad poco a poco fallaba y Esmeralda no logró entender el porqué.

—La esfera de tiempo se está rompiendo, ¡tenemos qué encontrar a Vortex ya mismo! —exclamó Esmeralda, posteriormente se transformó en Magical Luz, dejando a Wendy anonadada.

—¿Eh?, no entiendo, ¿qué está pasando?, ¿quién es Vortex?

—Es cierto, necesito decírtelo antes de empezar cualquier movimiento. Hemos estado atrapadas en una esfera de tiempo los últimos días, repitiendo el 3 de noviembre indefinidamente. Ayer encontré al culpable, pero fue muy poderoso y no pude vencerlo, quizá si luchamos juntas podamos ganarle. —Esmeralda sonrió confiadamente, a decir verdad no tenía la seguridad de pelear contra Vortex, ya que la diferencia de poder era significativa, sin embargo, contar con refuerzos e información previa le daba cierta ventaja.

Wendy elevó su ceja todavía más confundida.

—¿Esfera de tiempo?, ¿y eso qué pedos?

—Tardaré meses explicando, mira, vamos a vencer a un tipo, todo lo que tienes qué hacer es pegarle, ¿estás de acuerdo? —cuestionó Esmeralda, la chica soltó un suspiro lleno de resignación, ya que la cabecita de Wendy era incapaz de entender hechizos tan complejos como la esfera de tiempo.

—¡A patear traseros! —Y así, Wendy se transformó en Magical Fénix, posteriormente se pusieron en marcha para buscar al causante de la distorsión temporal.

Las dos chicas mágicas recorrieron el campus sin importar las miradas de curiosos o chicos que les silbaban guarradas, aparte, no era el momento de perder el tiempo con tonterías. Vortex era un hechicero peligroso, alguien que no debía ser tomado a la ligera, incluso los paladines tendrían precaución con un sujeto tan preparado como él.

El primer lugar que buscaron fue la oficina del director, pero ya no había nadie ahí, así que pasaron al cuarto que usó Patricia para encantar la escuela, por desgracia, no hubo suerte. Tampoco la tuvieron en las canchas, el auditorio escolar y las cafeterías.

¿En dónde podría ocultarse Vortex?

Para colmo, los errores de realidad se hicieron presentes durante la búsqueda, ya que no había pizarrones en algunos salones, luego las porterías desaparecieron también y fueron reemplazadas por raquetas de tenis. Todo se estaba volviendo un revoltijo, las cosas empezaron a perder sentido como tal.

—Oye, tengo una idea, Wendy. —Esmeralda se detuvo en seco, de inmediato su amiga de cabello rojo hizo lo mismo (Magical Fénix).

—Soy Magical Fénix, no lo olvides, si alguien nos escucha sabrá quienes somos, en fin, ¿qué piensas?

—Lo siento, mira… ¿Qué tal si regresamos a la dirección y buscamos otra vez?, tengo un presentimiento. —Esmeralda tuvo una hipótesis, a lo mejor Vortex seguía escondido ahí, pero no podían verlo por culpa de un hechizo, además, ya habían recorrido toda la escuela y no había pistas de él.

—Vamos.

Al llegar a la dirección notaron un patrón inusual, ayer, Esmeralda vio muchos estados de cuenta en los ordenadores, sin embargo, todos estaban con pantalla azul, descompuestos e inoperantes. Las chicas mágicas revisaron los documentos, transacciones y calificaciones, pero no encontraron nada o al menos eso creyeron, ya que Wendy notó una mancha roja en la ventana.

—Magical Luz, tienes que ver esto. —Wendy señaló unas gotas de sangre en la ventana, precisamente sobre en cristal de fuera.

—Sangre y no creo que sea por error de la realidad. Vortex estuvo aquí, ¿habrá matado a alguien? —cuestionó Esmeralda.

—No lo creo, habríamos visto un cadáver, aparte no huele a muerto. Si hay sangre del otro lado de la ventana deberíamos revisar el estacionamiento, creo que no nos hemos pasado por ahí —afirmó Wendy, de inmediato a Magical Luz se le prendió el foquito de las ideas.

—¡Eso es!, buscamos en el campus y las canchas, pero nunca en el estacionamiento, ¡debe estar ahí! —Nuestras heroínas saltaron por la ventana para llegar a su destino más rápido, gracias al hechizo de impacto lograron caer sin hacerse daño, entonces recorrieron cuidadosamente el lugar. A pesar de no haber visto a ningún docente, los coches seguían estacionados ahí, un dato bastante raro que las dos alcanzaron a notar.

Y fue ahí donde encontraron a su objetivo, Vortex yacía recargado sobre una camioneta con góndola, el hechicero tenía su brazo derecho con una herida profunda, de hecho, sangraba y tenía que usar la mano zurda para detener la hemorragia.

—Veo que me han encontrado, señoritas. —A pesar de su herida, Vortex no mostraba el más mínimo signo de debilidad, su voz seguía cargada de voluntad y determinación. Aún así, era evidente que estaba herido.

—¡Venimos a detenerte, Vortex!, no amenazarás la paz ni la justicia de esta linda escuela. —Magical Luz hizo su pose de victoria, dicha coreografía consistía en llevar sus dos manos a sus caderas y guiñar el ojo izquierdo, unos movimientos muy cliché pero lindos a la vista.

—¡Ríndete por las buenas!, no nos gusta pelear con oponentes lesionados. —Wendy mostró su típica altanería, ella no sabía de lo que Vortex era capaz de hacer, en su mente chiquitita solamente había lugar para los golpes. No obstante, en esta ocasión esa mentalidad le jugaba a su favor, ya que no se sugestionaba con los enormes hechizos de Vortex, simplemente peleaba.

—Menuda fortuna, ¿quién diría qué una tercera persona saldría de la esfera?

—¿Tercera persona?, ¿quién te atacó, Vortex? —Esmeralda de inmediato se alertó, si Vortex fue atacado entonces esa persona podría querer luchar con ellas también, entre los hechiceros renegados se atacaban y mataban mutuamente para robarse las investigaciones, no fue raro que hubiese sido atacado dentro de su propia esfera de tiempo.

—Eso no les importa —respondió —. Un ataque sorpresa y bien ejecutado, supongo que no me molesta ser golpeado por una táctica tan majestuosa, siempre fui fanático de las emboscadas.

—Maldición, ahora tenemos doble problema. —Wendy frunció el seño, al hacerlo preparó su estancia de batalla, Vortex hizo lo mismo con una sola mano.

—Debemos concentrarnos en vencer a Vortex y romper la esfera de tiempo, ya habrán más días para descubrir al intruso. —Esmeralda rodeó el estacionamiento con sus sellos mágicos, todo estaba listo para la confrontación directa, era cuestión de dar el primer golpe nada más.

—Oh, hablan con demasiada arrogancia, muy bien, seré su oponente para este combate. Van a conocer el poder de un verdadero hechicero…

Vortex empezó a levitar por los cielos, debido a su herida no pudo subir más de tres metros, no obstante, fue distancia suficiente para que tuviese ventaja de terreno. Esmeralda sacó de los sellos mágicos varias ramas gigantes que amenazaron con tomar al hechicero de los tobillos, por desgracia, la energía mágica que emanaba Vortex fue suficiente para repeler el primer ataque de Esmeralda.

—¡Golpe de Gaia! —Nuevamente las ramas aparecieron y fueron lanzadas con más fuerza, ésta vez rodeando cada salida y ángulo, Wendy aprovechó esa oportunidad para rodearse a sí misma de fuego.

—¡Carga del fénix! —Wendy saltó de rama en rama hasta colocarse frente a Vortex, el hechicero ya no tenía escapatoria, pues todas sus salidas fueron bloqueadas. No obstante, prefirió evadir la carga de Magical Fénix y recibir de lleno el golpe de Gaia.

—Ahora es mi turno, ¡hechizo de levitación! —Vortex levantó los coches estacionados por los cielos, entonces los lanzó hacia las chicas mágicas a gran velocidad. Wendy dio un puñetazo cargado con fuego, al hacerlo derritió el vehículo que amenazaba con aplastarla, Esmeralda se cubrió con sus ramas mágicas y nuevamente se colocó en instancia defensiva. Aún así, Vortex aprovechó esa pequeña distracción para ganar más de distancia entre sus contrincantes.

La herida en su brazo le impedía usar su mejor carta: el control del tiempo, odiaba admitirlo, pero su potencial se vio mermado totalmente. Vortex era un hechicero impresionante, un genio moderno para la época, alguien cuyo talento no se volverá a ver en más de cien años. Sin embargo, tenía un punto débil, él como hechicero normal no era la gran cosa…

Su manejo de tiempo le permitió resaltar rápidamente en la academia de hechiceros, ya que nadie más contaba con esa habilidad, fue tanto su talento que terminó volviéndose arrogante y obsesivo, desertó del gremio mágico en búsqueda de un destino más grande.

Aparte de gastar energía en su lenta curación y pelear con las chicas, Vortex tenía que mantener su esfera de tiempo. Ese esfuerzo adicional mermó todavía más su capacidad, volviéndolo todavía más débil, de haber estado sano, con la esfera de tiempo a salvo y una planeación de antemano, este combate habría terminado en menos de un parpadeo. Pero no, ahora estaba en desventaja y su máxima prioridad era escapar de ambas heroínas.

—¡No escaparás! —Wendy lanzó una bola de fuego contra Vortex, el hechicero apenas pudo evadir el ataque gracias a su levitación, sin embargo, se vio golpeado nuevamente por una rama que salió detrás de él. Los sellos mágicos de Magical Luz estaban por todas partes, de ellos salían ramas o rayos energéticos que causaban mucho daño.

—¡Eres mío! —Magical Luz tronó sus dedos, al hacerlo cinco pentagramas rodearon a Vortex —. ¡Toma esto! —Los rayos morados salieron disparados hacia órganos no vitales y músculos en general, total, su intención era vencerlo, no matarlo.

—Esto se pone feo. —Vortex junto una enorme cantidad de energía mágica y la colocó sobre todo su cuerpo, al hacerlo un escudo de acero apareció levitando junto a él. Los rayos impactaron con su defensa y se desviaron a otra parte, permitiendo al hechicero contraatacar —. ¡Hechizo de presión-levitación! —Las ventanas de los coches se rompieron gracias a una onda expansiva que Vortex creó, gracias al hechizo de presión.

—¡Magical Luz, ponte detrás de mí! —Esmeralda hizo caso a la orden de Wendy, segundos más tarde los cristales salieron disparados como balas de ametralladora hacia las dos chicas. Magical Fénix formó un enorme muro de fuego que las protegió del bombardeo enemigo, en seguida contraatacó liberando una llamarada en dirección al hechicero.

—Si eso no funciona… —Vortex regresó al suelo, evitando así la llamarada, no obstante cargó contra Wendy con toda la intención de darle una patada en la cabeza. Esmeralda dio un salto hacia atrás, después de todo, el combate cuerpo a cuerpo no era su especialidad.

—¡Interesante! —Wendy atacó también con una patada de frente, chocando así su ataque con el de Vortex —. Si un hechicero recurre al combate físico es que está desesperado, ¿no es así?

—¿Quién sabe?, a lo mejor también puedo combinar ambos rasgos. —El antagonista hizo levitar tres llantas que estaban tiradas por ahí, posteriormente disparó los proyectiles en dirección a Magical Fénix. Pero eso no fue todo, una milésima de segundo más tarde volvió a cargar en contra suya.

Aún así, había cometido otro error fatal: ¡Olvidó a Esmeralda!, cuando Vortex alistaba su carga sintió como unas ramas lo tomaron de los tobillos, después fue levantado dos metros sobre el suelo e impactado fríamente en el concreto. Magical Luz usó el hechizo de levitación temporal para dar un salto de cinco metros en el aire, al mismo tiempo sus manos brillaron con un resplandor rosado que parecía una joya deslumbrante. Debido a ello, las llantas fueron incapaces de tocar a Wendy.

—¡Golpe de Gaia definitivo! —Una técnica poderosa, Esmeralda combinó su energía natural con la del planeta tierra, formando así una conexión poderosa pero inestable.

—Maldición, ¡esto no ha terminado! —Vortex finalmente perdió la calma, en un intento desesperado por escapar forzó su cerebro para lanzar un hechizo explosivo hacia el cielo. En sí la técnica no fue la gran cosa, sencillamente sobrecalentó las corrientes energéticas para formar una explosión que redujera el daño proveniente de Esmeralda.

Vortex estaba acorralado, sin su control de tiempo los únicos hechizos que sabía eran versiones avanzadas de los básicos: explosión, choque, levitación e invocación. Un repertorio bastante pobre para alguien de su talento, ¡era la desventaja definitiva contra las chicas mágicas!, nuestras heroínas podrían no ser las mejores en ningún rubro, pero tenían hechizos capaces de cubrir todas sus desventajas.

Aquel pequeño y minúsculo detalle le costó a Vortex la victoria.

Wendy lanzó una serie de patadas encadenadas contra el hechicero, éste apenas pudo esquivar retrocediendo y dando saltos, su resistencia llegó al límite, a lo mucho le quedaba un minuto de energía. En ese tiempo necesitaba encontrar la manera de escapar, por fortuna, Esmeralda rodeó el estacionamiento con pentagramas cargados de energía.

—No escaparás, ¡ríndete de una vez! —ordenó Esmeralda.

—Por supuesto que no. —Vortex intentó una última jugada, con sus últimas energías redujo la duración de la esfera cuarenta segundos, quedando nada más veinte —. ¡Control de tiempo! —El hechicero trató de retroceder en el tiempo, justo antes de ser emboscado por las dos chicas, todo iba según el plan hasta que sintió un terrible dolor en el brazo. Al parecer, forzar mucho su cuerpo destruyó las pocas articulaciones que todavía servían y para colmo, ese dolor acabó por distraerlo en un momento clave.

Esmeralda aprovechó ese instante, justo antes del salto temporal golpeó a Vortex con una de sus ramas provenientes del suelo. El hechicero no pudo más, la esfera de tiempo se deshizo, lo que pasó después fue literalmente surrealista…

Las chicas escucharon el ruido de un cristal rompiéndose, entonces el estacionamiento desapareció, no, no fue solo el estacionamiento. Cada parte de la escuela se fue deshaciendo, como un telón bajando de golpe a media obra, en seguida la oscuridad acabó por engullir la realidad. Magical Luz no dio crédito a lo que sintió, fue una experiencia sobrenatural sin ningún tipo de explicación aparente.

—¿Eh? —Esmeralda yacía sentada en su casa, el reloj marcaba las siete de la noche, a su lado estaba Wendy, ambas habían regresado a su forma civil.

—¿Qué pasó? —cuestionó la rubia —. ¿Dónde está Vortex?

—Eso me pregunto yo, déjame ver el calendario… —Nuestra protagonista revisó los calendarios de la casa, todos marcaban la siguiente fecha: 15 de noviembre del año 2010.

—No entiendo qué sucedió, a ver… ¿Estuvimos atrapadas en un solo día?, ¿o cómo estuvo? —Wendy llevó su mano diestra al mentón, la pobre chica trató de pensar en lo sucedido, no obstante, solo ganó una fastidiosa jaqueca.

—Me tardaré más de medio día explicándote, para serte sincera yo no comprendo muy bien lo que acaba de pasar, solo alégrate, ¡hemos vencido al malo! Y a uno poderoso, Vortex es quizá el antagonista más fuerte hasta el momento, ¡merecemos un premio! —Esmeralda sonrió alegremente, Wendy le siguió la corriente y así, ambas estuvieron dando saltos por toda la sala.

Mientras tanto…

Vortex se arrastró hasta un callejón oscuro, su vida ya no corría peligro, pues no tenía que sostener más la esfera de tiempo. El plan terminó en fracaso, al final no pudo crear su nueva realidad a base de posibilidades, tampoco tuvo conclusiones interesantes en el flujo de tiempo, simplemente aprendió que la percepción humana contaba con un mecanismo de defensa muy fuerte, capaz de sobreponer imágenes precargadas para no darse cuenta de las cosas sobrenaturales.

—Menudo desperdicio… —Y sin decir más, el hechicero comenzó a desaparecer, nunca más volvería a ese pueblo, pues no había nada que ganar en primer lugar.

En tanto, Esmeralda y Wendy recordaron un detalle de suma importancia.

—Esmeralda, ¿quién fue el intruso?, de no ser por esa persona no habríamos podido ganar. —Wendy dejó de saltar y se acomodó de nuevo sobre el sofá, Esmeralda también hizo lo mismo, a pesar de haber ganado no era tiempo de dormir en los laureles.

—No lo sé, ¿cómo sabemos si es un aliado o un enemigo?, existen muchos hechiceros renegados allá afuera, muchos capaces de irrumpir en una esfera de tiempo. Tenemos que permanecer alerta, Wendy.

—Es verdad…

El incidente del hechicero del tiempo llegó a su fin, nuestras heroínas consiguieron su más gloriosa victoria hasta el momento. Por desgracia, todavía quedaban muchas interrogantes qué responder, aún así, ya habría tiempo para ello más tarde, por ahora solo deseaban descansar tras una semana llena de repeticiones.

FIN

¿Qué les pareció la parte 2?
¿Cuál fue su opinión general de este arco?
¿Magical Luz o Magical Fénix?, ¿a cuál aman más? <3

Los veo en la siguiente mini historia :3