Long-fic de Naruto - ADAPTACIÓN. TITANES DEL PÀCIFICO

Esta es una adaptación de un película que me encantó. Pacific Rim. Con los personajes de Naruto. Espero les guste y ya me falta el ultimo capitulo de terminar. DISFRUTEN
Los personajes de Naruto no me pertenecen y la trama de la película fue una inspiración ya que fue fenomenal.
CAPITULO #1

TODOS PENSABAMOS QUE LOS EXTRATERRESTRES VENDRIAN DEL ESPACIO, PERO NOS EQUIVOCAMOS. YA QUE EL TERROR SE ABRIÒ PASO EN LA PROFUNDIDADES DEL OCÈANO PACÌFICO

Todo comenzó el 12 de diciembre a las 12 pm del año 2012. Conocido como la hora cero. La historia ya es sabida por todos, es más no hay ni un solo habitante sobre la tierra que no lo sepa. El día en el que mundo conoció el miedo y desesperación. Ese día normal en la costa de San Francisco apareció una bestia enorme que pisaba las profundidades del mar y aún así se podía ver su torso y cabeza, en forma de prisma. Su piel lisa de verde negruzco. Emitió un rugido tal que todo el puente rojo de aquella ciudad vibró. De una esa bestia diò un cabezazo y atravesó el puente matando a personas a su paso. El medio día se había convertido en el llamado “Comienzo del Fin”. Nada podía detenerlos iban apareciendo uno tras otro pero no inmediatamente. Entonces en un periodo de 5 años casi la especie humana fue llevada a la exterminación total. Pero las naciones más poderosas del mundo se reunieron con todo su financiamiento y para acabar con estas bestias que llamaron “kaijus”. Para estas colosales bestias los humanos fabricaron colosales máquinas denominadas Jaeger que en alemán significa cazador.

Entonces ya los kaijus empezaron a caer y los humanos a resurgir. El lugar por donde salían estos monstruos estaba ubicado en el océano pacifico al polo norte. Las personas construyeron grandes muros y las bestias seguían evolucionando y con eso también los cazadores.

Los humanos seguía y seguían luchando, los niños ahora se preparaban para luchar contra estas bestias. El día cero ese día mi padrino tenía 10 años.,él qué perdió a su madre y padre ese día, y creció en un refugio hasta los 15 años. Cada día se preparó intensamente para luchar contra los kaijus. Mi padrino es el todavía conocido “El Héroe Pervertido” y, su mejor amiga Tsunade, la Reina de los Kaijus”. Aunque no sabia , ya después de conocerlo en persona a Ero-sennin que era mi padrino. Estos se conectaban por un puente neuronal donde todos sus recuerdos y pasados podrían ser vistos por el compañero con quien lo compartían.

Dentro de todos los que pasaron eran conocidos por ser lo más poderosos y junto con ellos, la humanidad se sintió salvada. Todo volvía a la normalidad. Las cinco principales puntos de concentración de la humanidad vivían rodeados de muros de 200 m de grosor y 1 km de alto. Y el sexto punto de concentración que estaba en el pacifico en una isla donde se preparaban todo los aspirantes a ser los nuevos cazadores y custodiaban la entrada del abismo.

Han pasado 47 años desde el día cero. Y algo más grande y terrorífico se acercaba…

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Año 2049 Konoha (zona 2), sector 35.

Un rubio corría apresurado por la calles de su barrio natal. Se había quedado dormido, como siempre. Ese día solo pasaba cada año, un día de 24 horas. Se iba poniendo su camisa naranja sobre su cabeza. Iba pidiendo disculpas porque siempre tropezaba con alguna persona. Vio a una anciana cargando una carreta muy pesada así que la ayudó y perdió cinco minutos.

— Me quedan doce minutos para las seis de la mañana. Pero llegaré. — y corrió con lo que más podía, sus deportivos negros y su pantalón jeans no lo aligeraban.

— ¡Hijo! — gritó alguien y el rubio se detuvo con una enorme sonrisa. — Te vas presentar con el estómago vacío — dijo un anciano fuera de local con un delantal de cuero blanco y una sonrisa amable. — Ven come algo. — el señor sin más entró y el joven no iba a ir pero su estómago gruño.

— Buenos días viejo— y se sentó en un banco alto de cobertura roja. El local no era más ni nada menos que su favorito Ichiraku Ramen. El señor le sirvió un platón grande de la sopa ramen especial para el joven. — Gracias. — tan pronto como se lo sirvieron lo comía a toda velocidad y se atoró. El señor le pasó rápidamente un vaso de tè de hierbas.

— Cuando aprenderás a comer como se debe Naruto. — le regaño un chica de veinte dos años, vestía una sencilla blusa amarilla de tiras finas y un pantalón de mezclilla. Le daba fuertes golpes en la espalda.

— No tengo tiempo, hoy es el día.

— En serio, lo había olvidado hoy reclutan más jóvenes para ser cazadores. Suerte.

— Gracias, Ayame. — y con eso terminó su comida. — Ya verán que no volveré hoy, sino que regresaré como un verdadero Jaeger. Lo juro. O me dejo de llamar Naruto Uzumaki. — Ambas personas sonrieron.

— Te deseo lo mejor. Seguro serás mejor que todo lo anteriores y los presentes. —

— Gracias por lo animo viejo. Nos vemos. Rayos me quedan seis minutos. — Entonces se levantó con una gran sonrisa e hizo el saludo de soldado, se puso la chaqueta que tenía envuelta alrededor de su cintura y se la puso. Corrió aún más rápido que antes.

— Él va a ser mejor que sus padres.

— Seguro hija, y va a ser el remolino más fuerte incluso más que lo Kaiju.

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6:10 am - Lugar de reclutamiento

— Los novatos por favor fórmense en diez columnas de 10 filas— decía un señor de treinta años que tenía un pañuelo en la mano y luego tocia .En ese lugar habían como cien jóvenes de toda la zona 1. Todos de 18 años hasta 25 años. Todos los jóvenes raudos lo hicieron. Estaban custodiados por veinte policías locales. — En estos momentos son reclutas y solo se escogerán a seis personas de entre todas. Superaran pruebas físicas y mentales. — Todos lo reclutas gritaron emocionados pero el sargento lo mando a callar. — Fuera muy bueno que todos tuviéramos ese don de poder y relación neuronal, y que esto generalmente es de hermanos y no de personas tomadas al azar. Pero este es un proyecto desde que el Rayo amarillo fuere descubierto en esta misma zona, un día como hoy hace ya 22 años.

Pov Naruto
El Rayo Amarillo de Konoha para ser exactos…se me esa historia como la palma de mi mano. Hasta ese entonces no reclutaban así, sino que como dijo el Sargento era de líneas de hermanos, de la familias más poderosas con desarrollo neural filial muy fuerte. Si no que este joven sobresalió más que los hijos de las familias poderosas en las pruebas de niño que cada años realizaban como método de distracción. Pasando los años este niño se convirtió en pupilo de Jiraya pero nunca pensó que iba a ser tan especial. Hasta que un día el señor se dio cuenta de su capacidad. Y un año más tarde ese joven con apoyo de maestro, consiguieron una prueba simulador. Desde allí ese joven se convirtió en héroe que venció a un Kaijus tipo 3. — Tanto que me la contabas Iruka-sensei.

— Continua la fila torpe— le apresuró de mala gana un chico de veinte años. — Es tu turno. — Estaba tan absorto en su pensamiento que no notó que seguía la fila.

— El que sigue— ordenó el Sargento Segundo que estaba sentado tras una mesa a unos diez metros. Nervioso se acercó el rubio. — Tu nombre, tu edad, sector.

— Naruto Uzumaki, 18 años, sector 35.

Una vez dijo eso fue llevado por un agente a la gran sala de combate. Cada Recluta tenía tres oportunidades para acumular puntos. Tenía que probar en una prueba de fuerza, velocidad y táctica. En la de fuerza tenía que golpear un saco de boxeo pero con medidores de fuerza. Supero esa. Velocidad, tenía que esquivar las flechas que venían e iban junto con un grupo de setenta. Después en la táctica tenía que huir del enemigo sin ser visto pero antes llevándose su tesoro. El cual solo quedaron cincuenta y ocho. En la prueba mental, tuvo el resultado sobre lo necesario pero lo pasó. En la penúltima prueba era una lucha cuerpo a cuerpo. Solo quedaron veinte. Y en la última que era psicológica, la final. Te introducían a un cuadro de tus peores miedos, con cables conectados a su cabeza. En la visión del rubio salían las caras de sus padres borrosas cuando lo abandonaron, o eso el siempre creyó. Pero parecía tan real.

— Aléjate niño de mi vista. — le decía el padre.

— Fue un error haberte concebido…. — sollozaba la madre. El joven rubio casi cai en un mar de confunciòn, quedándose atrapado en los recuerdos.

— Voy a desmostarles que no fui un error. — y con eso pudo despertar.


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— Hola, si?

— Soy Naruto, Iruka-sensei. — dijo el rubio con voz muy emocionado.

— ¡Naruto!¿Y qué tal, pasaste?— preguntó el señor de cabello castaños.

— ¡Si !Lo logrè y gracias usted.

— Me alegro por tì. Por favor cuídate y regresa siendo el mejor cazador de todos.

— Eso haré, lo prometo, dattebayo! Y con el dinero que gane lo invitaré a comer muchos ramens. — el señor suspiró con nostalgia y no pudo contener una lágrima de felicidad al saber que Naruto cumpliría su sueño. —Ey viejo estas allì.

— Que no me digas viejo, apenas tengo treinta y un años. — gritó de manera molesta. — ¿Cuándo partirás?

— A la media noche de hoy, solo me dejan llevar pocas cosas. Más tarde nos vemos en Ichiraku.

— Sí, nos vemos.

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Llegó las diez de la noche después que el rubio durmiera dos horas tras el día intenso de pruebas metales y físicas. Se levantó agotado. Se duchó. Y se vistió con la ropa que le entregaron porque había pasado la prueba. Constaba de una camisa negra, pantalones de camufle verde oscuro, botas altas negras de cordones. Una gorra del diseño camuflaje. Se colocó su cadena de plata típica de militares. Se miró al espejo del baño y se tocó la cabeza como tratando de buscar el cabello que le cortaron. (Estilo como en The Last). Igual se veía bien. Afeito un poco su barbilla de pequeños vellos rubios.

— Hoy empezaré a cambiar el mundo. — mirándose al espejo.

Solo tomo de equipaje, una foto donde estaba con Iruka-sensei y otra donde estaba con el viejo Teuchi y su hija en el restaurant. Una bufanda verde que la tenía desde que nació. Hasta donde el sabia, no le faltaba comida, al parecer los huérfanos no quedaban del todo desamparados. Había pasado toda su vida sin tener amigos. Solo Ayame que se acercaba a su edad la consideraba su amiga. Pero había ya conocido como es estar con una mujer, por curiosidad y era era una chica que vino de visita a esta zona. Pero igual lo disfruto. Según las chicas él es atractivo, pero el ojiazul no se fijaba mucho en eso a revisar si era verdad o no.

Paso un rato ameno con su maestro de entrenamiento de toda la vida, el viejo Teuchi y su hija. Todos al final lloraron porque el rubio partía. Y no lo volverían a ver hasta quien sabe cuándo. Disfrutaban de un pastel de chocolate con crema de durazno en celebración al logro del Uzumaki. Después Ayame le regaló un buzo naranja negro confeccionado por ella mismo.

— Sabes Naruto, siempre te he considerado como mi hermano. — Comenzó diciendo colocándole una mano en el hombro del muchacho. — Me tarde mucho haciendo esto, así que cuídalo. Ojala te quede, no es la gran cosa pero le puse mucho cariño. — Cuando estaba diciendo esto, el rubio se puso la chaquete y le quedó perfecto.

— Yo te considero también como mi hermana mayor, Ayame. Gracias. Muchas gracias. — y la abrazó, él era más alto.

— No sé en que momento creciste tanto, Naruto.

— Fue por el ramen. ¿O no viejo?— y se volteó pero el señor miraba hacia el piso. — ¿Qué pasa, viejo?

— Se va mi mejor cliente, uno infaltable. — Naruto sonrió. — Pero será mejor que cualquier otro. Eso lo sé. — y le dio al rubio palmaditas en el espalda.

— Naruto, siempre será para mí ese pequeño niño revoltoso que me causaba problema día y noche. — empezó Iruka— Pero que voy a hacer ahora, mi vida será aburrida.

— No, para nada. Además sé que estas comenzando a salir con una compañera de trabajo. No me lo habías contado— su maestro se puso colorado y le dio un golpe en la cabeza por su atrevimiento.

— Cuantas veces te he dicho que no seas imprudente y quisquilloso. — Estaba rojo de ira.

— Ya, ya cálmese Iruka-sensei. Igual ojala ya dé el siguiente paso. — Ayame y su padre estaba viendo la escena con nostalgia y riendo. Ya que puede ser la última vez que la vean.

— Ya cállate Naruto. — Naruto era perseguido con él por todo el restaurante, se subía a la mesas y le hacía gesto como que se besaba con alguien. Eso ponía a su maestro más enojado. — ¡Naruto!.

De eso ya se dio la hora de irse.

— Se los prometo, no moriré hasta acabar con cada Kaiju de este mundo.

Con esa promesa en las memorias de cada uno, el rubio partió a su destino.



Aqui esta el primer cap! Si les gustò haganmelo saber! =) Y si pueden pasen a leer mi otras historias.

 

CAP #2

4 am

Todos los que habían pasado la prueba de aspirante a soldados eran seis, aunque Naruto solo se vio a él solo. ¿Qué habrá pasado con los otros? Se preguntaba. Y como dijeron partieron a las 12 am en punto y ya casi llegaban a la isla, claro después de pasar por la zona 1 que era KirIgakure , otras de la concentraciones pobladas del mundo. Y era casi igual como su Konohakure rodeado de muros. Y ese lugar estaba más cerca del peligro, pero tenía una ventaja estaba rodeado de 3 kilómetros de agua turbias. Y al parecer nadie salió escogido de allí para soldado.

Viajaban en un enorme buque que trasportaban víveres, autos, maquinarias y muchas cosas más. Hasta puedo ver una cabeza de un Kaiju pequeño que lo transportaban al centro del buque en profundidad. En su camarote veía las noticias ya que de la emoción no podía dormir. Entonces pasaron las noticia que un Kaiju nivel 2 se acercaba a Sunagakure o zona 4. Eso estaba bastante lejos de Konoha unas tres horas. Pero antes que penetrara el muro dos jaeger lo interceptaron y lucharon. Esos dos eran muy conocidos. Los hermanos Sabaku No. Uno lo pilotaba dos hermanos mayores y el otro el hermano menor. Los combatieron.

— Gaara te admiro muchísimo pero voy a ser mejor que tú, mejor que todos. — Se decía el mismo, aunque solo había visto sus grandes hazañas por televisión le tenía competencia de ser el mejor.

6 am – Zona 0

Tocaban incesante su puerta del camarote (estilo como en la película).

— Ya voy. — gritó, y lo abrió. — Buenos días. — estaba con los ojos cerrados pero cuando lo abrió quedó impresionado por la belleza que tenía enfrente. Una hermosa joven de cabello rosa, ojos jade. Ella bestia el típico traje de soldado. Tenía el emblema de ser Cabo Primero.

— Buen día, soldado Uzumaki. Me acompaña por favor, en cinco minutos llegaremos a la zona 0. — Él no podía ni respirar. No había visto una mujer más hermosa en su vida.

— Si, si claro. Sakura. — lo dijo porque vio un cafete plateado con su nombre.

— Soy Haruno para usted. Respete que soy superior. Entendido soldado Uzumaki. — El asintió. Y regresó a dentro para ponerse su chaqueta que le dio Ayame, su cadena de soldado se la colocó.

Estando en la superficie pudo ver la isla en frente. Corrió y paso a través de los pocos solados que allí había. Lo que vio lo dejó asombrado. La zona 0. Donde los Jaeger estaban, donde se convertiría en el héroe de este mundo.

— Sígame. — le ordenó Sakura. Naruto la seguía desde atrás. Su cabello estaba recogido en una coleta alta. Al parecer él no era el único que notaba su belleza, cada hombre la miraba. Pero no le decían nada.

— Señorita Sakura, cuando salimos a cenar. — le dijo un cabo. Ella le mirò. Le entregò y dejo su carpeta en el piso. Y dio dos pasos a su izquierda.

— Por enésima vez, soy Haruno Sakura, Cabo Primero. — y golpeò al hombre, un sonoro puñete que le partió el labio.

— Lo sentimos, mi superior. Lo sentimos. — lo amigos del joven se lo llevaron. Ella le dirigió una mirada molesta y corrieron asustados.

— Ya sè porque no se le acercan, no tendré que hacerla enojar. — Pensó el rubio tembloroso. Ella se volteó y él se petrificó.

— ¿Qué haces allí parado como idiota? ¡Sígueme!— él apresuró el paso. “No la mires a los ojos”.


7:30 am – lugar de reuniones

Después que Sakura le enseñara todas las instalaciones de la isla aunque no donde estaban las maquinas ni el cuarto de control. Pero era muy grande. Muchas personas. Pero había casi el noventa por ciento hombres y el diez por ciento mujeres. “Puedes seguir viendo si quieres pero a las 8 am te llamaré y vendrás donde te indique, ¿De acuerdo?” eso fue lo que le dijo la chica pelirrosa. Aunque ella es mandona, se preocupa por lo demás. Buena chica pero de carácter demasiado fuerte pensó Naruto. Toda la isla era como una cúpula. Caminaba por las instalaciones y se encontró con el complejo de piscina. Al parecer solo estaban dos personas. Que nadaban los 40 metros de longitud. Y el vio salir a un joven de cabello blanco con su pantalón negro de baño y unos gafas para el agua.

— Suigetsu ya deberíamos alistarnos, en unos momentos es la reunión donde conoceremos a los nuevos.

— Si, lo sè. Ojalà venga una chica guapa. Ya estoy cansado de tantos hombres de aquí y allá. Además algunos como Sasuke son demasiados estirados. — se quejaba el joven que al parecer tenía la misma edad que el rubio. — ¡Hola, tù!

— Hola, que bien nadas. — dijo Uzumaki alegre por conocer nuevas personas.

— Eso ya lo sé. — Que arrogante, pensó el rubio. — Dime eres nuevo ¿por aquí?. No te había visto. — El conversaba mientras se secaba el cabello. El mayor de todos hacia lo mismo pero en silencio.

— Sí, soy el nuevo soldado.

— Vaya, que bien. ¿De dónde vienes?

— De Konoha.

— ¿Konoha?— se quedó pensativo. Naruto estaba en el filo de la piscina viendo el agua agitarse un poco. — Hace ya muchos años que no oía alguien ser escogido de allí a no ser que se de una familia - filial neuronal.

— Sí. Pero lucharé y daré todo por ser el mejor. — el peliblanco rió.

— Me gusta tu confianza, ese tipo de confianza le hará sacar canas verdes al amargado de Sasuke. — Naruto se extrañó. Pero igual sonrió. — ¿No conoces a Sasuke Uchiha? ¿Vives en una roca o qué?

Uchiha claro, como no conocerlo. Al poderoso Clan Uchiha. Unas de las familias más poderosas filiamente. Solo los había visto por televisión.

— Claro que sí, los hermanos Uchiha.

— Podrías decir que no los conoces enfrente de ellos, es que quiero molestarlos. En fin, mi nombre es Suigetsu Hōzuki , y el viejo que estaba atrás tuyo es mi tío Kisame Hoshigaki, mi compañero neuronal.

— Suigetsu, sigues comportándote como un idiota. No parecer ser un jaeger. — le reprendió el mayor de todos, que le jaló la oreja.

— Ya entendí tío.

— Son los Espadachines de la niebla…—aclaró el rubio.

— En efecto…— contesto Kisame.

— Ah sì soy Naruto Uzumaki. — “Uzumaki” quedó pensativo el señor.

— Sabes chico, te me haces familiar…y tu personalidad también. — razonó Kisame.

— Tù todo lo sabes tío, te parecer a Itachi.

— Ya cállate y vámonos a cambiarnos. — él se adelantó. — No vemos, Naruto. Espero podamos combatir.

— Seguro que sí-ttebayo.!— Suigetsu le hizo de la mano. Y el muchacho quedó solo.

Ayame no me creerá cuando le cuente que conocí a los espadachines de la niebla. No importa a quien conozca, voy a superar a todos, ese mi sueño.

Su celular sonó, el que le habían dado por ser soldado. Apenas si lo estaba empezando a acostumbrar.

— Hola, soldado Uzumaki—

— Si, Sakura

— ¿Qué dijo?

— Perdòn, perdón. Cabo Primera, que desea.

— Así me gusta. Ven al lugar que te señalo ahora. Olvidé darte algo.

— Está bien. Ya me colgó. — entonces resopló. — Vamos a ver a donde quiere llevarme.

Iba corriendo ya que se detuvo para ayudar a una secretaria que se le habían caído los papeles al suelo. Rubia de lentes, pero linda. Sakura lo mataría. Cuando iba a girar al pasillo derecho tropezó con alguien. Pero hizo maniobras para no caer y tomo a la persona por la cintura. Era una mujer, eso lo supo percibió el aroma dulce y enigmático.

— Lo siento mucho, señorita. — le dedicó una sonrisa. Tenía a la chica bien agarrada de su fina cintura.

— No se preocupe, está bien. Yo fui la despistada. — dijo ella sin levantar la vista y en cuanto lo hizo, ambos se miraron por segundos. Hubo una conexión. Ambos la sintieron pero no dijeron nada.

Un ángel, me tropecé con un ángel bello de ojos perlas y larga cabellera negra. Y hermosa voz.

— Disculpe joven, podría…— ella señaló el brazo del rubio que la tenía fuertemente abrazada a su cintura.

— Si, si claro. Lo siento. Disculpe.

— No es nada. — Ella era mucho más baja que él. Cuando ella pasó a su lado no pudo evitar seguirla con la vista. También usaba el traje de soldado. Alguien paso por su lado. Sintió que lo perforaba con la mirada. Era un muchacho parecido a la chica que acababa de ver, solamente que su cabello es castaño oscuro. El chico lo observó por dos segundos pero después siguió su camino.

— Un poco más y me mata. Pero esa chica es muy hermosa…además creí que sentía algo muy fuerte entre ambos. — Se tocó el corazón y notó que palpitaba como loco. — Quisiera volverla a ver.


8: 00pm Sala de reuniones

Sakura estaba sentada junto a Naruto. Era una gran mesa de veinte sillas. Una cuarto de paredes blancas. Un televisor en cada pared de plasma. Un laptop por cada silla. Estaban ocupando el segundo y tercer puesto de lado al frente de la puerta. Cosa que podía ver quienes entraban sin tener que voltearse.

— Primero tiene que aprender a sentarse y hablar como se debe, ¿Que no te enseñaron modales?. — dijo Sakura regañándolo ya que estaba mal sentado. El muchacho se acomodó.

— No sé porque eres tan correcta y todo lo demás. Relájate. — le dijo a modo de broma.

— Me estás diciendo que me relaje. A mí nadie me dice que me relaje.

— Ya, ya está. Mira eres una mujer muy bella. Solo habla y no seas grosera ni gruñona. Ah me olvidaba, mandona. — eso dejo a Sakura súper enojada. Naruto recién callo en cuenta con lo que dijo.

— Voy a matarte.

— De tì, yo corro. — Apenas notó que Suigetsu había entrado junto con su tío. Sakura iba golpearlo contra la mesa pero sonó su celular.

— Hola, Tsunade Shishou. Si, aliste todo. Aún faltan. Está bien, nos vemos. — Todo eso lo dijo con una extensa sonrisa que no había visto Naruto. —En donde estábamos…ah sí. — empezó la pelirrosa.

— Buen día señorita Sakura. — dijo un hombre. Suigetsu y su compañero se sentaron a lado de Naruto.

— Tienes demasiada suerte Naruto. — comentó el peliblanco a modo de broma. — Hola Sasuke-dormilón. — se burló el chico nadador.

La persona que había saludado a Sakura era el hermano mayor de Sasuke. Itachi Uchiha, pensó Naruto. Los hermanos Uchiha, hazañas como vencer a un Kaiju tipo 3 y dos Kaiju tipo 2 a la vez.

— Hola, Itachi. Buen día. — le saludó con un beso en la mejilla. — Hola Sasuke — pero este la miró y se fue a sentar.

— No te preocupes, ya sabes que mi hermanito se levanta con mal humor, las mayoria de las veces. — Itachi sonrió. Ella un poco decepcionada, asintió.

— Itachi— llamó Sasuke. Todo serio y frio.

El mayor de los Uchiha se sentó en frente de Suigetsu y Sasuke enfrente de Naruto. El rubio se sintió un poco enojado porque el chico de cabello negro y ojos negros de piel blanca ignoró muy arrogantemente a Sakura. Al parecer él es un cretino, a diferencia del hermano mayor.


FLASH BACK
Cuando Sakura me llamó antes de la reunión era para que leyera la hoja de vida de cada Jaeger, según ella para no quedar como un idiota.

— Naruto, por ahora atiéndeme y escucha.

— Me llamaste Naruto— Se sorprendió.

— ¿Qué? Ese no es tu nombre o debería llamarte idiota, ese te queda mejor. — Es bipolar esta chicas, muy bipolar.

— No, no. Llámame Naruto.

— Ok. Atiende. — Y le empezó a dar hojas.


Como primero reconoció a Suigetsu leyó primero el de él. Mientras el rubio observaba en la sala de reunión los observaba uno por conforme estaban llegando.

Suigetsu Hōzuki

· Edad: 19 años

· Peso: 57.0kg

· Fecha de Nacimiento: 18 febrero

· Sangre: B

· Altura: 177 cm

· Compañero: Kisame Hoshigaki (Tìo)

· Origen: Kirigakure

· Jaeger: Diablo Intercept. Modelo-2

— A mi parecer es un indiferente, pues sólo presta atención a un par de cosas a su alrededor. Tiene la costumbre de cortar las extremidades del kaiju antes de decapitarlo. Y es un loco que colecciona espada. — Dijo Sakura. —Y un pervertido sexual.

• Nombre: Kisame Hoshigaki
• Edad: 36 años
• Origen: Kirigakure
• Peso: 83,1 kg
• Fecha de Nacimiento: 19 marzo
• Sangre: AB
• Altura: 195 cm
• Compañero: Suigetsu Hōzuki (sobrino)
• Jaeger: Diablo Intercept Modelo-2

— Le encantaba pelear, no duda en mutilar a sus oponentes. Él también se destaca por ser analítico, capaz de deducir rápidamente los conceptos básicos detrás de la técnica del Kaiju. Tiene su orgullo pero no como su sobrino. Es el mejor amigo de Itachi. — decía Sakura. Naruto ya vio de manera diferente al señor. Parecía ser una persona totalmente diferente.

• Nombre: Sai Shimura
• Edad: 19 años
• Origen: Konohakure
• Peso: 53.3 Kg
• Fecha de Nacimiento: 25 Noviembre
• Sangre: A
• Altura: 176 cm
• Compañero: Shin Shimura (Hermano)
• Jaeger: Cherno Alph Modelo 1

— Este chico aunque a veces quiero matarlo por insultarme, pero tiene una personalidad agradable, amable y atenta, ayudando a sus compañeros cuando estos lo necesitan y divirtiéndose en situaciones sociales, pero sin dejar totalmente de lado su seriedad y franqueza. A su vez, también le cuesta entender aún ciertas cosas.

• Nombre: Shin Shimura
• Edad: 21 años
• Origen: Konahakure
• Peso: 55.4 kg
• Fecha de Nacimiento: 6 septiembre
• Sangre: B
• Altura: 174 cm
• Compañero: Sai Shimura (Hermano)
• Jaeger: Cherno Alph Modelo 1

— De él puede decir que es amable, le gusta hacer amigos. Aunque últimamente ha estado enfermo pero seguro ya se recupera.

• Nombre: Itachi Uchiha
• Edad: 24 años
• Origen: Konohakure
• Peso: 58.0 kg
• Fecha de Nacimiento: 9 junio
• Sangre: AB
• Altura: 178 cm
• Compañero: Sasuke Uchiha (hermano)
• Jaeger: Nova Imperion. Modelo-4

— Hermano compasivo y una gran persona. No pierde del todo su compostura. No es arrogante. Increíblemente poderoso, Itachi tiene una inteligencia igual de impresionante, y ha demostrado ser muy sabio. Gran intuición

— ¿Que te gusta èl?

— ¿Por qué lo dices?

— Hablas muy bien de èl.

— Es porque es verdad, además es atractivo. Sigamos.

• Nombre: Sasuke Uchiha
• Edad: 19 años
• Origen: Konogakure
• Peso: 52.2 kg
• Fecha de Nacimiento: 23 julio
• Sangre: AB
• Altura: 183 cm
• Compañero: Itachi Uchiha (hermano)
• Jaeger: Nova Imperion. Modelo-4

— Él, bueno, dejémoslo así. Ya lo conocerás.

— ¿Por què?— estaba preocupado, había sentido que Sakura se ponía triste.

— Dije que después

— Ok, Sakura-chan. — Ella dejo pasar el hecho que la había llamado así.

• Nombre: Gaara Sabaku- No
• Edad: 18 años
• Origen: Sunagakure
• Peso:50 kg
• Fecha de Nacimiento: 19 enero
• Sangre: AB
• Altura: 170 cm
• Compañero: Solo
• Jaeger: Shukaku- Modelo Especial

— Siempre me pregunté porque él era el único que lo manejaba solo.

— Eso es porque nadie puede alcanzar su poder de conexión neuronal y solo con puede abastecer a uno Jaeger. Además su Jaeger también es especial.

— Ni siquiera es filial con sus hermanos. — Sakura asintió. El rubio le llamó la atención eso.

— Lo han intentado muchas veces pero siempre hay inconvenientes y los hermanos se desmayan o se lesionan.

— Ya veo.

— Y creo que por eso es emocionalmente retraído, casi silencioso. Y se siente responsable de la muerte de su madre cuando lo parió. Busca siempre la forma de saciar su sed de sangre. — La pelirrosa lo dijo en forma de tristeza, al parecer eso le afecta de un modo.

• Nombre: Temari Sabaku No
• Edad: 22 años
• Origen: Sunagakure
• Peso: 47.9 kg
• Fecha de Nacimiento: 23 agosto
• Sangre: 0
• Altura: 165 cm
• Compañero: Kankuro Sabaku No (Hermano)
• Jaeger: Gipsy Danger . Modelo-3

— Con ella a veces chocamos pero si nos llevamos bien. Unas de las pocas mujeres que sabe mandar. Temari es pasiva e inteligente. Es una muchacha de carácter orgulloso y agresivo cuando se la hace enojar. — Sakura sonriò. — Ella maternal con sus hermanos y siempre trata de cuidarlos y de resolver sus disputas internas.

— Una súper mujer— completo Naruto. — Además es linda.

— Que no te escuche Shikamaru.

— ¿Shikamaru?

— Si, el novio. Después te digo quien es. — Naruto asintió obediente.

• Nombre: Kankuro Sabaku No
• Edad: 21 años
• Origen: Sunagakure
• Peso: 61.2 kg
• Fecha de Nacimiento: 15 mayo
• Sangre:B
• Altura: 175 cm
• Compañero: Temari Sabaku No (hermana)
• Jaeger: Gipsy Danger . Modelo-3

— Este tipo a veces me saca de quicio. Pero es buena persona. Suele ser bravucón, algo engreído e imponente, es un buen apoyo para su familia y tiene un lado simpático. Es un guerrero implacable, astuto, engañoso y calculador que no muestra compasión por los kaijus.

• Nombre: Shikamaru Nara
• Edad: 19 años
• Origen:Konohakure
• Peso: 53.4 kg
• Fecha de Nacimiento: 22 septiembre
• Sangre: AB
• Altura: 177 cm
• Compañero: Choji Akimichi- Ino Yamanaka
• Jaeger: Echo Saber - Modelo-4

— Un Jaeger de tres…— no comprendía Naruto. — Siempre me lo pregunté.

— Si este es el único. Ya que conforman el equipo INOSHIKACHO por varias generaciones. — Naruto no entendía. Sakura viró los ojos. — Hasta ahora hay dos tipos de relación filial con conexión neuronal. Una de tipo sangre y la otra de tipo emocional.

— No sabía que existía la otra. Es interesante.

— Shikamaru tiene una fuerte moral y un sentido del compromiso hacia sus compañeros y amigos. No le gustaba entusiasmarse y que sólo le observaba las nubes e incluso las envidiaba por lo libres que eran.

— Le gustan las nubes…

— No sabes cuánto, además déjame seguir. — respiró . —Prefieres no involucrarse en las actividades “problemáticas” o “fastidiosas” para así evitar la responsabilidad. Tampoco le gusta la lucha, por considerar que, como lo hace la mayoría de las cosas, es “problemático”. Aunque es un líder en bruto. Y cuando se lo propone es implacable. además de ser unos de los más inteligentes a nivel de mis superiores.

— Este es más raro que lo otros.

— Si tiene razón, además es perezoso.

• Nombre: Choji Akimichi
• Edad: 19 años
• Origen: Konohakure
• Peso: 87.5 Kg
• Fecha de Nacimiento: 1 mayo
• Sangre:B
• Altura: 176cm
• Compañero: Shikamaru Nara - Ino Yamanaka
• Jaeger: Echo Saber - Modelo-4

— Choji es muy amable, cortés y detallista. Se enfurece mucho cuando alguien lo llama “Gordo “. Así que Naruto ¿que no tienes que hacer?

— Nunca llamarlo Gordo.

— Vaya si ves que puedes ser listo. — Eso fue al directo al orgullo de Naruto

• Nombre: Ino Yamanaka
• Edad: 19 años
• Origen: Konohakure
• Peso: 46 Kg
• Fecha de Nacimiento: 23 septiembre
• Sangre:B
• Altura: 165 cm
• Compañero: Shikamaru Nara - Choji Akimichi
• Jaeger: Echo Saber - Modelo-4

— Es algo superficial, siempre pensando en los chicos guapos y la esperanza de que las dietas puedan hacerle bajar de peso y de esa forma hacerse más atractiva. También es muy segura de sí misma, amable y abierta, no tiene miedo de decir lo que piensa, y, a veces, sugiere que Choji debería bajar de peso. En su equipo, Ino tiende a “mandar a los otros”, aunque claramente se preocupa por ellos, gran nivel de inteligencia y perspicacia. Y lo mejor es mi mejor amiga.

— Vaya la conoces bien.

— Si desde que llegué estoy con ella. Ahora me falta un equipo.

Cuando Sakura-chan me pasó la siguiente hoja, mi corazón empezó a latir como loco. Era ella. Y esa hermosa y frágil mujer conducía ya un jaeger.

• Nombre: Hinata Hyuga
• Edad: 18 años
• Origen: Konohakure
• Peso: 45 Kg
• Fecha de Nacimiento: 27 diciembre
• Sangre: A
• Altura: 163 cm
• Compañero:
• Neji Hyuga (Primo-hermano)
• Jaeger: Crimson Typhoon- Modelo-4

— Hina la chica más dulce, y mi amiga. La más pequeña de todas. Hinata se caracteriza por ser tímida, reflexiva, serena, muy educada, bondadosa y algo inocente, es muy trabajadora. — Sakura quedó observando a Naruto. — ¿Te gustó?.

— Eh, claro que no. Es hermosa pero no.

— Si mejor así. Sino toda la familia Hyuga te asesina y más te asesinará aun cuando ya mueras, su primo Neji. Ella es la princesa Hyuga como las llama el pueblo y su familia. — Naruto tragó saliva.— Que no te engañe su apariencia, se ve frágil. Pero es muy fuerte.

• Nombre: Neji Hyuga
• Edad: 20 años
• Origen: Konohakure
• Peso: 54.2Kg
• Fecha de Nacimiento: 3 julio
• Sangre:0
• Altura: 1.72
• Compañero: Hinata Hyuga (prima- hermana)
• Jaeger: Crimson Typhoon- Modelo-4

— Neji. Es mi compañero. No deja que sea su amiga. Siempre me aleja…así como…Bueno. Se preocupa más en el trabajo en equipo y en lograr de la mejor manera posible el cumplimiento de las misiones y la seguridad de sus compañeros a la vez. Antes se burlaba del esfuerzo de lo demás pero su prima lo hizo cambiar. Él es llamado el “Genio de la familia Hyuga”.

— Genio…una familia bastante influyente.

— Todos lo que he nombrado llevan luchando desde los quince años. A excepción de Itachi desde los doce.

— Pero si era demasiado pequeños como entraría en la máquina.

— Son ajustables a tu tamaño. Naruto. — le dijo en un tono obvio.


FIN FLASH BACK


8:15 am - Sala de reuniones

No llegaban todos los jaeger, apenas Suigetsu, su tío. Itachi y Sasuke. Todos conversaban y Sakura le seguía explicando al rubio sobre los demás soldados nuevos y dos equipos de ya señores. Pero dejò de escucharla cuando su nariz percibió el aroma familiar. Era ella Hinata Hyuga.

— La Princesa Hyuga…— susurrò.

— Si asì la llaman. — contesto Suigetsu divertido. — Pero deberían llamarla. Princesa de los pechos. — Naruto enrojeció y Kisame le golpeó la espalda. — ¿Què?

— Te dije que no le dijera así a la señorita Hyuga. Por lo menos comportante aquí. Suigetsu.

— Está bien, está bien. — se cruzó de brazos.

Pero era verdad Naruto ya se había dado cuenta de muy bien proporcionado cuerpo de la pequeña Hyuga. Una cintura pequeña que se notaba claramente bajo la blusa negra, sus caderas, su trasero y sus senos voluptuosos. No había visto semejante cuerpo jamás.

— No sé, si te has dado cuenta Naruto…pero si no quitas la mirada de Hinata. Neji te va a matar. — le advirtió el peliblanco cerca de su oído. Y en efecto Neji lo perforaba con la mirada al rubio. El ojiazul se sobresaltó y dirigió su mirada a Sakura. — Ni siquiera yo me acerco a Hyuga.

— Entiendo…entiendo. — Sakura rió, y por sorpresa una risa dulce. Eso alejo el pensamiento de temor del Uzumaki.

— Naruto tu rostro fue épico.

— Me alegro que rías. Sakura, tienes una linda sonrisa. — La pelirrosa se puso colorada.

— No digas babosadas. Naruto. — Le golpeó el hombro. — Pero gracias. — el chico adolorido asintió. Ahora sintió que un lazo se formó entre él y chica bipolar.

— Ya tortolos, dejen algo para más tarde. — gritaba el peliblanco y Sakura despues de un Shannaro le partió la boca.

Al cabo de diez minutos llegaron todos a la sala. Todos lo que había dado la ficha Sakura. El equipo de Temari, Shikamaru había llegado. A las ocho y media llegó la General Tsunade Senju, ex Jaeger, una de las más poderosas. Que ahora ocupa el máximo cargo en la milicia del mundo.

— Buen día con todos, bienvenidos los nuevos soldados. Y a los vantiguos ya me conocen. Esta reunión es solamente para que lo nuevos soldado escojan a su compañero. — Empezó la rubia. — Cabo primero Haruno, por favor lo nombres de los nuevos.

— Hai. Rock Lee, 19 años Konohakure, 1,77 m de altura, 54.7 Kg, A de sangre.

— Buenos días a todos los presentes. Prometo dar lo mejor de mí en cada batalla. — era un joven de corte en hongo, cabellera negra, ojo negros. Vestido con el traje de soldado. La general asintió.

— Tenten 20 años, Konohagakure, 1,66 m, 47.3 kg, sangre B.

— Hola, espero poder cumplir con sus expectativas y mejorar mucho más.

— Karin

— Buen día mi general, buen día compañeros.

— Kiba Inuzuka 19 años 171 cm, 52.kg. Sangre A.

— Buen día con todos. Agradezco que me seleccionaran y no lo defraudaré.

— Shino Aburame 19 años, 178 cm, 56.6 kg. Sangre AB— el chico no más asintió.. — Naruto Uzumaki 18 años, 1.80 m, 50.9 kg, sangre B.

— Mi meta a alcanzar es asesinar a cada Kaiju sobre la tierra y volverme en el mejor de todos los Jaeger, mejor que Ero-sennin, mejor que el Rayo Amarillo de Konoha y mejor que cada uno de ustedes. — con una radiante sonrisa. Tsunade le diò un dejavu. La mayoria se sonrió para sus adentros ante tal altanería del nuevo soldado.

— Es un idiota…— pensaron al mismo tiempo Temari, Sakura e Ino. Tenten sintió vergüenza ajena. Suigetsu no aguantó y se rio a carcajadas. Hinata lo miró con sorpresa pero sonrió por su confianza.

— Tu niño, ni siquiera has luchado con un Kaiju y ya te crees mejor que todos los que están aquí. ¿Por qué lo dices? ¿Acaso eres inmortal?.

— No, mi general. Yo nunca me doy por vencido, si algo quiero lograr lo intento, así me caiga mil veces, mil veces me levantaré.

— Aquí no puedes equivocarte chico. ¿Qué harás si un compañero muere por tu culpa?— eso tomó desprevenido al rubio, pero sonrió. Siempre sonría.

— Eso no pasará, porque antes de que un compañero muera yo iré a salvarlo, lucharé y lo salvaré. No importa que. Itachi.

— Y si mueres salvándolo no cumplirás tu meta. — acotó Kisame.

— Yo no moriré, yo lo salvaré. No moriré hasta logar mi sueño. Esa es la promesa me propuse. — todos en esta instancia lo miraban analizándolo. Sasuke lo miró de reojo, pero hizo su típico sonido de desprecio.

— Niño pero por lo que tengo entendido, tus padres desaparecieron y no tienes hermanos. ¿Así que por qué luchar?¿No tienes familia?¿No tienes amigos?— dijo la general tajante. Por un momento el rubio no supo que responder, hizo un mueca.

— Yo lucharè por cada personas que se ha sacrificado en este mundo, luchare incesante por cada niño que no crecerá con sus padres. No me rendiré hasta que los niños ya no tengan por entrenarse desde pequeños para batallar a muerte con los Kaijus. — a la rubia de enormes delantera, le brillaron los ojos. Hinata sintió que su corazón vibraba. Sakura, que lo miraba sin quitarle la vista sonrió. — además se equivoca al decir que no tengo familia…no tengo un padre pero tengo un maestro que me guió una mejor personas, no tuve un abuelo pero tuve a un señor que me daba consejos, no tuve una hermana de sangre pero tengo una hermana que siempre me protegía y regañaba. Y sí no tengo amigos, eso es verdad. Pero espero tenerlos pronto. — dijo esto dando una rápida mirada a Hinata y después a Sakura.



11 am – sala de entrenamientos.

— Ese chico va a ser de esos problemáticos…— dijo el Nara mientras corría en la caminadora con el torso desnudo.

— Si, va ser bastante problemático. — decía su novia con un sonrisa.

— ¿Qué pasa?

— Pues, vi como lo mirabas, y dime dedujiste lo mismo que yo. Amor. — él también sonrió. Y detuvo la máquina.

— A ver…deduje que con la llegada de èl muchas cosas van a pasar, y una de ellas es que Neji va a matarlo pronto, será la competencia firme de Sasuke y que se parece mucho a al señor Jiraya.

— Si lo mismo deduje yo, pero hay más verdad?— èl asintió. Ella le había rodeado con sus brazos el cuello del joven Nara y le repartía besos en lo que alcanzaba del torso a pesar de esta sudado. — No me digas, que sea un sorpresa.

— Si sigues haciendo eso, tendré que tomarte.

— Hazlo. — Nunca se cansaría de ella, tan directa, sin rodeos, sabe lo que quiere y cuando lo quiere.

— De inmediato Temari.



GRACIAS POR LEER!!!!!


Comente si les agradó y como se desarrolla la historia.

 

CAP # 3


— El resto del día no había novedad de Kaijus. En estos últimos años han aumentado su número de venida, antes venia uno. Ahora dé a cinco hasta el nivel 4, que habían sido dos recién. Según mis análisis desde la 24 semanas que aparecían han ido disminuyendo, 20 semanas, 16 semanas, y seguirá bajando la frecuencia. Hasta el día en que llegué uno cada segundo. Y después la extinción total. Eso es todo mi general. — Dijo Shikaku Nara, el papá de Shikamaru mariscal de campo que era un cargo especial.

— Así que eso tenemos… hay 7 equipos Jaeger, y con los nuevos tenemos 3 más, en total 10 jaeger.

— Pero no podemos asegura que tenemos 10, no sabemos si son compatibles neuralmente. — acotó el padre de Ino. Inoichi Yamanaka mariscal también un rango especial.

— Tsk!. ¡Esto me vuelve loca!— y golpeo su escritorio.

— Te olvidas de nosotros Tsunade. Gai y Yo. Ah y además No te olvides de Obito y Rin. — agregó Kakashi, también un jaeger con experiencia.

— Ah sí, tenemos entonces 12 jaeger. Lo siento. Estos Kaijus hasta cuando nos molestaran. — Suspiró, ella como una ex jaeger, sabía muy bien que no acabaría a no ser que cerraran el portal. Pero ya lo había intentado y habían fallado. Y con eso se llevaron la vida de dos grandes Jaeger.

— ¿Cuánto tiempo tenemos hasta la llegada del próximo Kaiju? Con exactitud 12 semanas 13 horas.

— Bien suficiente para preparar a los novatos. ¿Y el de hoy a qué hora aparecerá?

— El que combatio Gaara y sus hermanos era el primero Otachi (lit. Espada grande) de categoría 4. Faltan tres que suelen aparecer, pero puede ser que aparezcan mal, en un rango de 3- 5. Las categorías no la puedo asegurar. Pero hace ya bastante tiempo que no tenemos un categoría 1. Debemos estar preparados para los de categoría 2-3 y por si acaso que vengan del 4 aunque ya vino. Ese es el informe de hoy mi general. — termino Shikaku.

— Ok. Dile a los Hyuga y al equipo de Obito y Rin para que estén preparados.

— Hai— contestaron los tres hombres presentes.

— Pueden retirarse. Y por favor Kakashi llámame a Jiraya.

— A la orden

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1 pm patio de comidas.

— Que buen sueño tuve. Estaba exhausto y muero de hambre. — decía Naruto desde el borde de su cama del cuarto. Se talló sus ojos. “Hinata” pensó para sus adentros. Quería saludarla pero Neji se interpuso. — Un primo celoso.

— Naruto, rápido. Tienes que ir a comer. — gritaba Sakura desde el otro lado de la puerta.

— Ya voy — Tomó su camisa pero no se la puso. — Aquí estoy, vamos. — ya estaba fuera de su cuarto pero la pelirrosa no estaba sola.

— Serás baka, no ves que no estoy sola. Aparte de idiota eres un indecente. — Y con esto le golpeo.

La persona que la acompañaba era Hinata. Que estaba tan roja.

— En serio lo siento, es que tú me apuras Sakura-chan. — se defendió el rubio. Se acercó a la pelinegra. Vaya era mucho más baja que él. — Discúlpeme señorita Hyuga. — se agachó para verla, y ella también lo miro. Frente a frente.

— No se p-preocupe. — él sonrió.

— Me alegro, ¿comerás con nosotros?. — ella asintió. — Entonces vamos. Sakura-chan. — Agarró a la pelirrosa por los hombros. Él iba en medio, Hinata a su derecha, y Sakura su izquierda. La Haruno lo dejaba ser, por primera vez él no quería algo más con ella que solo amistad. Naruto no era como los demás hombres.


Ya llegado al comedor común, Naruto buscaba de todas la formas comer ramen pero no servían allì. Es un pecado, pensó Naruto. Y se sentó en la mesa de los nuevos juntos con Hinata y Sakura. A tras de ello estaban los demás jaeger y el resto de soldados de la zona 0.

— Hola Naruto, que rápido eres. Ya estás haciendo punto, que bueno— alentaba Suigetsu desde la mesa de al frente.

— Cállate idiota. — le gritó Karin.

— Bruja nueva, ni siquiera te conozco y me dices idiota. — reclama el peliblanco. Ella se paró de su mesa y lo encaró, lo tomó de la camisa y lo tiró al piso.

— No me vuelvas a decir eso además tú fuiste el pervertido que entro a las duchas.

— Pues que yo iba a saber que estaba en el baño…

— No seas tonto, si dice mujeres es de mujeres. — y termino por pisarle la camisa.

— ¡Ya basta los dos! ¡Shannaro!— grito Sakura. — Karin estoy a cargo de tì y todos los nuevos así que por favor limítate a obedecer, sino te expulso. — el peliblanco rió. — Y a ti te suspenderé tres salidas a combate si lo haces de nuevo. — Eso si no le gusto al chico. — Sr. Kisame por favor ayúdeme. — el tío sonriò torpemente con sus colmillos y lo tomo de la camisa y se lo llevó fuera del lugar.

De allí todo transcurrió normalmente, Naruto conoció a todos los nuevos. Kiba era muy agradable, Shino callado pero al parecer se llevan bien. Tenten es muy alegre pero Rock es súper que intenso y apasionado. Naruto y Rock Lee compitieron por quien come más papas fritas y al final gano Rock Lee ya que Naruto se había comido una hamburguesa completa y su ración de papas.

— Son unos cerdos…— dijo Ino asqueada de la situación. — Comporta a tus patos Sakurita.

— Lo estoy intentando. — se quejó la pelirrosa.

— Deberías hacerlo mejor entonces — y eso molesto a la Haruno. El que había lanzado ese comentario fue Sasuke. Que también estaba en la mesa, por obligación de su hermano. Ella levanto la vista y lo miró. — Y no lanzar sus porquerías hacia mí. — Y en efecto a lo que Karin golpeo lanzó una la mayonesa cayéndole al Uchiha menor en la camisa negra. — Si no lo controlas tú, yo lo haré. Por qué se ve no sirves para eso. — Todos se quedaron estupefactos. Cuando Sasuke habla o está enojado o simplemente quiere asesinar a alguien. Solo se levantó y sonó fuertemente la silla. Itachi no está, le había dicho que comiera con sus compañeros, y Sasuke solo obedecía a su hermano a pesar de todo. Pero el nunca controlaría como tratar a las demás personas.

— ¡Oye tú, Sasuke-teme, detente!— le exigió Naruto. Y el rubio se acercó a él. El pelinegro se volteo ya enojado.

— Mira tú, dobe. No vuelvas a insultarme. O si no te golpearé.

— Y te parece bien insultar a Sakura-chan, no ves que la haces llorar. — le grito molesto el rubio. Sakura está con las lágrimas a flor de piel, era consolada por Hinata. Pero se limpió el rostro. Y camino hacia los dos chicos. — La próxima vez que insultes a Sakura- chan no me importará quien seas, te golpearé.

— Inténtalo. — estaban ya en posición de pelea pero se detuvieron.

— Naruto, no. No lo hagas. Déjalo así por favor. — la pelirrosa se puso en medio de los dos. — Vuelve a sentarte. — él no iba a hacerle caso, pero vio lo ojos jades tan tristes y lo hizo.

— Si no quieres que te pase nada ve a encerarte en tu cuarto pero no difames mi trabajo. — y ella también volvió a su silla. Sasuke se sorprendió, y más enojado aún se fue. — Gracias Naruto.

— No es nada Sakura-chan. — y la abrazó por los hombros.

Entonces sonó la alarma de Kaiju y los equipos que ya fueron avisados con anterioridad.

— Atención el equipo 2 y el equipo 4 a prepararse

Naruto no sabía bien lo equipos así que para su sorpresa Hinata tenía que irse. Neji como siempre tan callado solo le dirigió una mirada. Se levantaron de sus mesas. Igual todos lo Jaeger tenían que estar en la sala de control.

— Vamos todos…!— dijo Shikamaru.

— También los nuevos — aclaró Temari.


1: 35 pm

Norte de la Zona 3 Iwagakure

— Aparición de dos Kaijus un Onibaba (lit. Bruja demonio o Abuela ogro): de categoría 2. Un Knifehead (lit. Cabeza de cuchillo): de categoría 3; y dos Karloff: de categoría 1. — dijo Sakura cuando todos estaba en la sala de control. — Es raro hace ya casi seis años que no hay ninguno de categoría 1. — todos lo Jaeger estaba en sus respectivo puesto viendo en la pantalla de televisión grande.

— ¿No son muchos para dos equipos?— se inquietó Tenten.

— Ya vera que no, son muy experimentados. — le respondió Shin sonriéndole. Ella asintió.

— Bueno me escuchan equipo 2 y equipo 4— decía la general por el micrófono.

— Hai

— Diríjanse con los de categoría 2 que son más rápido y están a 25 km cerca de la zona 3. Los otros kaijus vienen más atrás. Equipo dos va con el Kaiju categoría 3. El equipo 4 con los dos de categoría 1.

— Sí, mi general.

La cabeza de lo jaeger tenía cámaras internas así que podíamos ver los que pasaba con los pilotos. Y siempre los acompañaban cinco helicópteros por cada máquina. Para transportarlo y grabar todo. Y el mundo vea.

— ¡Es hora de hacer conexión!— y empezaron el proceso de puente neural. Por primera vez lo iba a ver Naruto.

Lo que observo fue que en las grandes cabinas de las maquinas cada piloto tenía un control de forma esférica que tenía un centro azul nebuloso. Una luz azul los rodeo a Hinata y a Neji.

— Hyuga conexión 100% completada. Equipo 2 conexión 100%completada— aviso Inoichi.

Y cuando lo jaeger se empezaron a mover fue mágico para el rubio, no lo había visto en vivo. Y alcanzó a ver hasta cuando se lo elevaron por los aires y se lo llevaron a la zona de destino. Por alguna razón Naruto sintió una terrible sensación de preocupación.

— Ella estará bien, lleva haciendo tres años seguidos. — le calmó Sakura.

— Y el equipo 2 que tal?— la rosa sonriò.

— Pues el hombre de 33 años se llama Obito Uchiha y tio de Itachi y Sasuke. Gran experiencia. Es mejor amigo de Kakashi-sensei. La chica se llama Rin Okimura, de 33 años y es la esposa de Obito.

— Pero…como se enlazaron….si no son familas…entonces son amigos.

— Antes de ser esposos eran amigos, mejores amigos y su lazo se hizo fuerte. O sino pregúntaselo a su hijo.

— ¿Tienen un niño?— se metió Rock Lee.

— Si, tiene siete años. Ahora debe estar con su nana. Ya te lo dije Naruto enlace emocional.

— No sabía…— expresó Tenten. Los nuevos se quedaron más observadores a este nuevo planteo de situaciones.

Cuando llegaron los equipos a enfrentarse al Kaiju categoría 2 este avanzo más rápido. Estaban en el océano pacifico. Los dos equipos combinados luchaban. En una de esas el Kaiju embistió al eq4. Naruto hizo puño sus manos. Pero lograron derrotarlo después de cinco minutos. Y al instante vinieron los tres restantes. Fue una batalla intensa los Kaiju tipo 1 cayeron. El Kaiju tipo le hecho acido al eq2 que no pudieron esquivar. Entonces lo embistió y ese Kaiju salto por encima de ellos y le arrancó parte de la cabeza.

— ¡Obito!— gritò Rin, la mujer de cabello castaño con rayas rojas en las mejillas. A vista de todos el Kaiju se había comido a su esposo. — No, No. No. Maldito— ella desgarrada por el dolor intentó matarlo pero no pudo. El eq 4 fue en su ayuda pues ese Kaiju lo había dejado sin un brazo.

— ¡Rin-san!— gritó Hinata. Al parecer era el lado del brazo de ella. Tenía fisurado el húmero.

— Cuando envían refuerzos. — decía Naruto al borde del colapso no soportaba ver a las personas…morir

— Todavía no…— decía la general.

— Pero van a matarlos a todos

— Niño quédate tranquilo y observa.

Entonces sucedió, un golpe especial con un mano de la familia Hyuga lograron vencer al Kaiju cat3. Pero perdieron a uno. Vieron como Neji socorrió a Hinata después que ella cayera inconsciente por el dolor causado.

— Shizune ve. — ordenó la general a un chica de cabello negro.

Al cabo de diez minutos regresaron los jaeger. Hinata herida e inconsciente, Neji con un golpe en la frente. Rin tres costillas rotas y Obito…fallecido.

La señora Uchiha lloraba incansable y después la alcanzo Kakashi, el mejor amigo de Obito. Hatake se sentía impotente, vio morir a su mejor amigo. Lo defraudó.

El mundo quedaba sin soldados…se sentían cada vez más desprotegido.

Kakashi perdió a su mejor amigo…no pudo hacer nada.

Rin perdió a su mejor amigo, su esposo, su amor, su familia, al padre de su hijo, todo en una solo persona.



3:30 pm
— ¿Encontraron el cuerpo?— preguntó Kiba a Naruto.

— Dicen que una Kaiju cuando se come a un humano nunca encuentran el cuerpo. Parece que desaparece.

— No puedo quitarme esa imagen de mi mente…no puedo. — decía Tenten. — los nuevos los mandaron a la sala que estaba en sus dormitorios.

— Tranquila mi linda florecita…todo saldrá bien. — calmaba Rock Lee. Ella se acurrucó más a su torso.

— Naruto…— llamó Sakura. Ella pareció por la puerta principal y salieron al pasillo. — Hinata está bien, solo perdió muchas sangre y por eso se desmayó.

— Y la señora Uchiha…?

— Pues está mejor. Ya se tranquilizó.

— Sakura, dime porque…porque tienen que morir las personas…— ella lo mirò con tristeza.

— No lo sé Naruto…no lo sé.

El mismo día se llevó a cabo la ceremonia en memoria de Obito Uchiha. Naruto nunca lo vio en persona. Pero se hacía familiar la forma de seguir delante de él mientras lo veía luchar. El vio claramente que se sacrificó por la vida de lo tres que estaban en peligro. Él lo veía claramente. Sakura le comentó que él se parecía mucho al fallecido y también se lo dijo la señora Rin.


1 semana después - 13 semanas antes del ataque Kaiju.

9: am.

Los primero días fueron difíciles para Naruto, porque no era compatible con nadie de los nuevos. Kiba quedó de compañero con Shino. Tenten Rock Lee armaron otro equipo. Solo quedaban él y Karin pero ella no soportaba su carga neural.

— Es algo monstruoso…no puedo resistirlo. Si hasta me sangra la nariz. — decía Karin a sus superiores. Naruto estaba totalmente mal. No puede ser que ya estando aquí no pueda hacerlo. ¿Por qué?.

Naruto es compatible con Karin pero después era tan fuerte su puente neural que terminaba por extraer todo el puente neural de Karin, y se pasaba eso seguido, la pelirroja perdería sus recuerdos, o peor quedaría en coma.

— Hola, Naruto-kun— saludó la pelinegra ya recuperada.

— Hola. — y le sonrió. — ¿Y Neji?

— No te preocupes el está compitiendo con Rock Lee.

— Al parecer se han hecho muy cercanos. —completó el rubio. — Es que también el cejotas le encanta competir y hacerlo hasta ganar. Y ya le ganó a Neji. — ella negó con la cabeza.

— La prueba de hoy en golpear más veces la bolsa de box sin descanso. — suspiró. — Ya llevan media hora haciendo eso. Y no quiero que se lastimen.

— Son fuertes, eso no les hará mayor daño.

— Me refiero a Sakura, cuando se entere que se estas sobre exigiendo en ejercicios. No le gustara eso.

— Tienes razón Hime.

Ambos estaban en un pequeño jardín en la terraza de los dormitorios. Se podía ver la parte sur de la Zona 0. Cada día entrenaba su mente y su cuerpo pero no podía encontrar con quién hacer conexión. El rubio se había hecho amigos de casi todos, solamente los únicos con quien tenían roces era con Sasuke Uchiha. Después del primer encuentro que tuvieron a casi golpearse ya lo habían hecho un segunda vez, y por la misma razón. “El muy teme trata mal a Sakura”

— ¿Cómo están tus entrenamientos?— preguntó Hinata al ver al chico tan absorto en sus pensamientos.

— Muy malos…no puedo conectarme con nadie y me dijo Kakashi-sensei que si no consigo poder hacerlo. Tendrán que retirarme del programa. — comentó decepcionado.

— Lo siento…

— No tiene por qué hacerlo. Yo sé que lo lograré. Ese es mi sueño. — ella sonrió.

— ¡Naruto!— gritó Sakura que venía corriendo con una sonrisa en su rostro. Al parecer venia cansada. Ambos voltearon— ¡Naruto, es una buena noticia…!¡Jiraya-sensei!

— Que me dices Sakura-chan…— no entendía.

— No seas baka. — y se agacho lo suficiente como para estar a la altura de él. — La leyenda que quieres superar, te va entrenar. — el rubio se le abrieron los ojos de felicidad. Hinata sintió también su felicidad. El chico tomó a la pelirrosa por la cintura y la alzo como si fuera de pluma. Ambos reían.

— Sakura-chan por eso es que te quiero. —Naruto sobre entendió que ella había hecho algo o convencido a alguien y le plantó un beso en mejilla a la chica. — Nos vemos Hinata. Gracias por acompañarme. — le hizo de la mano para despedirse de ella.

— No lo eches a perder— dijo por lo bajo pero él ya había cruzado la puerta de la terraza. — Ese chico me debe una— a decir verdad ella nunca pensó llevarse bien con Naruto. Pero en el transcurso de esta semana él ha sido como escudo protector de la ofensas de Sasuke — Bueno Hina, te quedas un rato aquí.?

— Claro Sakura.

Sala de entrenamientos especiales
El rubio ya había llegado. Estaba el gimnasio vacío. Este era de amplios ventanales que dejaban ver el mar en todo su esplendor y un jardín de flores rojas y blancas.

— Casi me caigo tres veces por venir pronto. — Sakura le envió por el celular donde tenía que ir, ya que salió tan apurado que no le preguntó. El muchacho espero casi diez minutos. Él era impaciente así que ya se retiró. — Este viejo pervertido me dejo plantado. Ahora sí me botaran del programa.

— Oye copia y mezcla de Kushina y Minato, no me digas así. — el rubio volteó y lo vio. Un señor de unos cincuenta y tantos años más. Pero no llevaba el uniforme. Su ropa típica del ejército. Y Naruto siempre se preguntó donde estaba él. Y los pocos soldados que transitaban por aquel pasillo, lo observaban con respeto pero no al señor sino quién estaba detrás de él.

— Jiraya, te dije que mantuvieras tu boca cerrada. Él no sabe nada. — regañó fuertemente la general Tsunade que lo golpeó en el hombro. — Así pase semanas sin verte sigue están de igual de torpe y descuidado. Ah claro igual como este niño. — Naruto se sintió en un ambiente familiar…y asustado por el carácter de la general.

— Tranquila mi Lady, esto se soluciona dentro de unos momentos. — y le sonrió. — Naruto Uzumaki, tenemos que hablar.


Dormitorio de Gaara Sabaku No
— Entonces tendré que entrenar junto a él y enseñarle como usar su conexión neuronal.

— Si— Le comunicó Rin Uchiha. A pesar de todo lo que pasó tenía que trabajar. Eso tenía en mente Obito. Liberar al mundo de la opresión de los Kaiju. “Obito…” pensaba día y noche desde su muerte. — Escucha Gaara-kun, se que te cuesta relacionarte con lo demás chicos a parte de tus hermanos pero sabes que cuentas conmigo. Eres el hijo de una buena amiga mía y te cuidaré. Tus hermanos y yo no te vamos a dejar solo jamás. Somos amigos ¿verdad?— le dijo y le dio pequeño toquecito en el hombro. El chico pelirrojo con una tan minúscula sonrisa.

— Lo haré, señora Uchiha.

— Eso es, buen chico. Además este podría ser el comienzo de la liberación del mundo. — el muchacho se reincorporó pues estaba recostado en su cama, escuchando música.

— Nadie más sabe de esto.

— Solo los del rango mayor.

— Entiendo. — se colocaba sus botas. Cuando ya salieron del dormitorio caminaron juntos a la sala de juntas.


11 am dormitorio de Sasuke Uchiha

El pelinegro estaba leyendo un libro cuando alguien toco la puerta muy fuerte. El sin responder fue a abrir la puerta. Estaba sin camisa.

— Sasuke-kun, te solicita la general. Y por favor puedes decirle a tu hermano.

— No, no quiero. Avísale tú, es tu trabajo o no?— la miró fijamente. — Y por cierto, dile a ese sujeto que tiene por amigo que me deje de fastidiarme. No entiendo la intención de ese sujeto conmigo.

— Si fuera menos arrogante y un orgulloso sin una pizca de tacto como me tratas, el dejaría de hacer eso. Además yo le agradezco a Naruto por eso. — Sasuke rió por aquello.

— Ah eso espero, mejor para mí así ya no vuelves y pasas la noche conmigo vete y distráete con él. — eso fue todo, Sakura golpeó un cachetada al pelinegro.

— Sabes muy bien el amor que yo siento por tì, y me dices todo eso. Pensé que por lo menos fuera un poco caballeroso. — ella estaba llorando, gruesas gotas de lágrimas rodando por su mejilla. — Yo me entregué a tì por amor pero claro, eso no significo nada para tì. Ya fue suficiente de todo esto. Desde ahora solamente te hablaré por cuestiones laborales.

— No te hagas la inocente bien que no fue tu primera vez, yo creí que lo iba ser.

— ¿Cómo me puedes decir eso?

— Además bien que…

— Sasuke ya cállate de una vez. — le dijo su hermano mayor que estaba sosteniendo a Sakura por los hombros. — No puedo creer que todo lo que te enseñó mi madre no lo emplees. Ve a la reunión que allá nos vemos y después hablamos. — Itachi se llevó a Sakura. Y el menor de los Uchiha entró a su cuarto se puso la camisa y salió como una bola de furia.


11:30 am sala principal de juntas

— Chicos esta es una reunión urgente…— se pasó la mano por la cara en seña de frustración. — Ante la atacada intensa de los Kaiju al parecer hemos decidido retomar la misión de sellar el abismo. — todos los jaeger en la sala se quedaron sorprendidos. Esa misión se llevó a cabo hace 18 años y fracasó.

— ¿Porque esta repentina decisión?— objetó Shikamaru.

— Tenemos un arma especial, cierto Gaara?— la general dirigió la vista al pelirrojo.

— ¿Tú sabes algo de esto hermanito?— le preguntó Temari a su lado. El chico asintió.

— Bueno presten atención y después las preguntas si — dijo Shikaku que estaba al lado de la general.

— Gracias. Primero quiero presentarles a Naruto Namikaze— el rubio que se mantenía callado y al lado contrario de la rubia, estaba con la cabeza gacha y al parecer perdido en sus pensamientos. Todos en la sala lo miraron al él de nuevo. Hinata lo miraba con entendimiento, podía percibir la confusión, tristeza del joven que tenía enfrente. “Naruto-kun”. — Todos conocemos la historia del rayo amarillo de Konoha pero solo hasta nada más. Lo que se ha mantenido en secreto es que el estaba casado con una mujer llamada Kushina Uzumaki

— ¿Kushina?— se sorprendió Karin, había oído ese nombre pero de la boca de madre, y decía que era su hermana menor.

— Silencio, chica loca. — fue Suigetsu el del comentario por lo bajo. Ella lo fulminó con la mirada.

— Kushina era originaria de una región muy apartada de las cinco zonas de protección mundo que fueron evacuadas aquí en Konoha. Ella se caracteriza por tener un gran puente neural. Muy poderosa, pero el día trágico llegó. El día en que la enviamos a esa misión con su esposo, ella conducía su propio Jaeger así como lo hace Gaara. El día de esa misión ella había dado a luz. Fue un día que los Kaiju salieron de improviso y ella a pesar de su estado quizò proteger al mundo. Por poco cerraron la brecha pero lamentablemente no pudieron. Justo antes de que el jaeger de Kushina y Minato acompañado por su compañero, fueran devorados. — todos estaban atentos.

Naruto estaba como ido, no tenía capacidad de reacción. Hace poco no más se lo habían contado pero seguía sin contener tantos sentimientos encontrados. De un día a otro, era huérfano de la guerra en contra de los Kaiju y ahora su padre era el rayo amarillo de Konoha.

— Y como su madre, Naruto heredo ese poder y con eso tenemos a dos jaeger especiales. Y ese fue el error de nosotros, no teníamos el poder suficiente. Pero ahora lo tenemos. — añadió Inoichi. — Solo falta el entrenamiento adecuado junto a Gaara y al señor Jiraya que conoció más que nadie a Kushina. Y…

— Ya basta — Naruto se puso repentinamente de pie. — Lo que todavía no entiendo… Por qué razón toda mi vida he vivido tan apartado de mis recuerdos. No entiendo por qué mis padres me dejaron…y usted sabio pervertido ha sido mi padrino y nunca he sabido de usted. Yo sinceramente no entiendo, no entiendo porque si sabían de mi existencia no me lo dijeron. ¿Por qué?.— su rostro era de frustración total y enojo.

— Naruto, sígueme. — llamó el señor Jiraya. Lo siguió.

— ¿Dónde está Sakura-chan?— le preguntó a Ino cuando paso por su lado. Ella negó con la cabeza.

Y así salieron de la sala. Y al final del pasillo se detuvieron.

— Naruto, lamento mucho que hayas estado solo durante todo este tiempo.

— Pero…

— Escúchame. — le paró el señor— Todo lo que hicimos fue protegerte. Si el mundo se hubiera enterado que hubieras nacido del Rayo de Konoha los cargos mayores te hubieran explotado en esa instancia. Tu poder fue desde el nacimiento, a diferencia de Gaara que fue después de su nacimiento. Tu poder es innato. Además Iruka ha hecho bien su trabajo.

— ¿Iruka-sensei sabía de esto?

— No precisamente, pero el solo te cuidó. El solo sabía que le ordenaron cuidarte pero no vayas a creer que fue por obligación, él lo hizo a voluntad. La última voluntad de su madre fallecida de cuidar al hijo de su amiga. Tus padres te amaron tanto que pusieron toda su fe en cerrar esa brecha…eso es todo lo que puedo decirte.


Solo pidió dos minutos para pensar. Justo que quería saber quiénes eran sus padres ahora lo sabe. Minato y Kushina. Iruka-sensei siempre le dijo que tenía que seguir su corazón.

“Toda mi vida he tratado de conocer mi verdad, ya la tengo. Al fin puedo decir que tengo un padre y madre. Puedo decir al fin que estoy consiguiendo amigos. Por fin puedo decir que con todo mi corazón salvaré al mundo. Lo haré.”


— Entonces Namikaze que decides. Huir como cobarde y morir o quedarte sabiendo que morirás por salvar a toda la humanidad. — dijo la general seriamente, una vez que el rubio había entrado. Todos estaban a la expectativa.

— Ni lo uno ni lo otro. — La confusión se apoderó de la sala. — No moriré, yo salvaré al mundo. — La rubia sonrió, nadie la había visto sonreír tan ampliamente.

— Una vez dicho esto. Comenzamos los entrenamientos. — dijo Shikaku.

 

CAP #4

13: 00 pm

— Espero sepas manejar bien a tu Jaeger. — comentó Sai. Los soldados estaban almorzando. Naruto lo miró de mala cara. — ¿Qué? Solo dije la verdad.

— Sí, no vaya a ser que a última hora te de miedo. — dijo Kiba.

— Lo peor sería que te quedaras atrapados en tus recuerdos… y sufrir. — ahora habló Shino.

— Sí y que una mala instrucción de tu mente acabaría por destruir toda la isla. — este Suigetsu hablo más siniestro. Todos estos comentarios hacia que el rubio estuviera con temor, sudó frio. Todos estaba presentes. Hasta los de mayor rango. Los señores se reían por lo bajo.

— Pero eso no pasará, no es posible. — trató de mantener la compostura el chico.

— Claro que puede pasar, y nosotros no podremos hacer nada para detenerte. — insistió Kakashi desde la mesa contigua. Naruto quedó asustado. Y los demás rieron a carcajadas. Hinata rió por lo bajo, porque sabían que era una tradición asustar a los novatos.

— ¿Hasta tu Hinata? No me lo creo.

— No, no Naruto-kun. — ella estaba diagonal a lado de él. Neji de comer para observar al rubio. — Solo dicen en forma de bienvenida.

— Si, tranquilo Naruto. Si te sales de control tendré que matarte. — dijo Gaara tan serio. Naruto palideció esperando a que alguien dijera, “Es una broma” Miraba a todos los lados y Hinata lo miró con tristeza. El comedor quedó en silencio.

— No molesten a Naruto, seguro lo hará bien. — dijo Sakura y tenía una mano en el hombro del nombrado.

— Sakura-chan — y la abrazó de la cintura fuertemente.

— Naruto, ya cálmate. — dijo la pelirrosa. Pero le acariciaba el cabello para tranquilizarlo. Él la soltó. Sasuke que estaba en la mesa de la derecha miró la escena. Sus ojos negros era sumo desprecio al muchacho rubio, pero aún mas desprecio a la chica pelirrosa.

— Sasuke…— intentó calmar a su hermano. “Por qué se atormenta, hermanito. Eso fue hace tiempo. Por qué no lo olvidas y ya.” Pensó el Uchiha mayor.

— No me hables…— cortó el muchacho y siguió con su comida.

— Ya par de tortolos, bésense y ya. — bromeó Suigetsu. — Esas escenas son tan malas. — Kiba Sai y Kankuro rieron con èl.

— Una palabra más y se romperé todos los colmillos. — advirtió Sakura.

— Mi tío me defenderá.

— No lo haré. — respondió desde la mesa de Itachi. Todos rieron, hasta Neji sonrió un poco.

— No me amas tío. No me amas! Eres el hermano de mi madre y no me amas. — se quejaba el peliblanco. Más carcajadas se hicieron saber.

— Ya cállate, pareces un mocoso malcriado. Compórtate como un joven de 19 años. — reclamo triunfante Karin.

— Es más todos son unos mocosos. — recalcó Temari. Shikamaru la observó y le sonrió.

— Ah claro y es por eso que tiene de novio a un mocoso. — dijo Sai. Tan sincero y sin medir las consecuencias. Ino le tapó la boca y miró a su amiga enfadarse.

— Él no quiso decir eso, verdad amor. — Ino lo le hacía escudo para que no golpearan a su novio. Temari se había levantado de su puesto roja de la ira. Ino le destapó la boca para que se retractara.

— Mi amor pero sabes que es verdad. Hasta tú mismo dices que Temari una roba cuna. — Temari enfureció.

— Creo que debemos irnos. — dijo Naruto a Sakura, ambos asintieron. Neji se llevó a Hinata. Y aso creo que todos captaron el mensaje. — Estuvo deliciosa la comida, me voy. — dijo el rubio de ojos azules.

— No me dejen. Problemático. — Shikamaru sudo frió. Sabía que su novia enojada mínimo el también sale afectado.

Si no hubiera sido porque hubo una alerta de incendio en toda la isla, hubiese sido una lucha de mujeres. El incendio había sido provocado en la sala de los jaeger al parecer una reparación, pero todo fue controlado. Todos los chicos regresaron a sus entrenamientos regulares, para uno era descanso.

— Ahora sí Sakura-chan, cuéntame porque tus ojos están tristes.

— No estoy triste.

— Mientes— ambos estaban en el cuarto de la chica ya que esta le tenía que entregar los últimos documentos para que oficialmente sea un Namikaze. La chica se levantó de la cama donde estaba sentada y se dirigió a la ventana.

— Solo me siento cansada. — y coloco su mano sobre la ventana. Cerró sus ojos ocultando su iris jade. Y no pudo soportarlo, una gota de lágrima rodó por su mejilla. — Solo estoy realmente cansada de todo esto. — Naruto la abrazó por la espalda. — Yo no hice nada para que eso pasara, te lo juro Naruto que yo no tuve nada que ver. — se volteó se abrazó a el chico rubio. — Yo gritè todo lo que podía, te digo la verdad Naruto. Yo no quería hacerlo. Estaba asustada. No lo provoqué. — ella gritaba contra el pecho del muchacho, él no entendía nada de lo que pasaba.

— ¿Sakura-chan dime que te pasa, que te sucedió?

— Naruto, juro que yo no lo provoque, te juro que no fue así. Yo no quería dañar a esa familia. Te lo juro. Créeme Naruto.

— Sakura-chan, yo te creo pero no entiendo. No logró comprenderte. — le decía mientras le acariciaba el rostro y le limpiaba las lágrimas. — Dime preciosa, que pasó. Si hay algo en lo que yo hacer para verte sonreír dímelo. Házmelo saber y debo confesarte que tenemos poco tiempo de conocernos, sin embrago yo te quiero. — La pelirrosa abrió sus ojos de la sorpresa, mezclada con afecto.

— Yo también te quiero Naruto. — y se abrazaron por un rato. — Ven, sentemos. Cierra bien la puerta.

— Claro, Sakura-chan. — ella se sentó en su cama, el muchacho a su lado la miraba expectante.

— Hace siete años cuando mi padre y madre seguían con vida, nosotros vivíamos junto a el primo de mi padre que tenía una esposa y dos hijos mayores que yo. Pues yo quería mucho a mi tìo e incluso era mi padrino. Mis padres, junto con la esposa de tío e fueron a una misión ya que ello eran cabo, aunque eran Jaeger controlaban lo que es la sociedad y entrenaban a los soldados. — ella respiró. — Mis primos se habían sido reclutados y pues me quedé al cuidado de mi tío por una semana. En la tercera noche yo dormía y siempre dejaba la puerta de mi cuarto abierta pero olvide que esa no era mi casa. — se tapó la boca para suprimir un gemido de dolor. — creo que eran las una o dos de la madrugada. Sentí que alguien me tocaba y trataba de quitarme la ropa. Yo gritaba el nombre de mi tío y no venía. Estaba en la completa oscuridad. El agresor me dijo: ”Tranquila Flor de Cerezo esto no dolerá.” …ese hombre me violó. — Naruto quedó sin poder respirar. Sin pensarlo dos veces se abalanzó para abrazarla a su amiga.

— Quien fue el maldito que te hizo eso, Sakura-chan — el muchacho sentía tanta ira e impotencia. Su amiga fue…ni siquiera podía pensar en esa palabra. Fue ultrajada cuando tan solo tenía doce años.

— Fue la única persona que me decía así, el hermano de mi padre. — El rubio la abrazó tanto que creo que la estaba ahogando. “Su tío, que persona haría eso.” “Ese maldito monstruo”.


Después de veinte minutos que Sakura lloró, lo que no había desahogado en años. Solo lo sabían dos personas en este mundo. Ella le comentó que ese misma madruga hubo un ataque de Kaiju y sus padres murieron, toda su familia. La pelirrosa fue rescatada por un Jaeger que le dio los primeros auxilios ya que estaba a punto de morir desangrada por lo que hicieron, su tío murió ahogado por los gases tóxicos que desprendían ese monstruo. Ese ataque fue a la cuatro de la mañana, esa madruga que marchitaron a una niña.

— Por eso que amo como a una madre a Tsunade-shishio.



9 semanas antes del próximo ataque Kaiju

Naruto en las últimas semanas ha estado entrenando con Gaara y monitoreado por Jiraya. Primero eran pruebas físicas que ya las había terminado, después seria las mentales y al final la practica con el simulador de jaeger. Y después se complementarían todas. El rubio en cada entrenamiento ponía todo su empeño. Su entrenamiento era un poco diferente al del resto. Tenía que realizar sus ejercicios en una sala especial de veinte metros cuadrados con la gravedad aumentada tres veces. Le decían que era porque su jaeger muy fuerte. Entonces tenía que igualarlo. Hacía de todo un poco, pesas, ejercicios de cardio, trotaba todas la mañanas recibiendo aire puro. Pasaba tiempo con todos sus amigos. Nadaba con Suigetsu, trataba de pintar como lo hacía Sai, recolectaba flores con Ino ya que al él también les gustan las flores. Entrenaba con las armas junto con Tenten. Competía con Rock Lee en comida. Discutía con Kiba porque ambos les gustaba Hinata. Un día ayudo a Shino a buscar insectos en la selva que estaba en otra isla. Practico dos veces con Neji el arte de su familia. Aunque no pudo dominarlo. “Es demasiado sobrio y ordenado” concluyó Naruto “Soy más dinámico y explosivo.” Ya se había frustrado de intentar ganarle a Shikamaru jugar Shogi, era demasiado listo para él.

Hasta había descubierto que Karin era su prima, ella se llama Karin Uzumaki. Por eso es que tenía un poco de afinidad. Él trataba después o antes de su entrenamiento conversar con ella de la tierra natal de su madre. Primero ella no quería pero después cedió. Naruto insistía tanto en pasar con ella porque era la única familiar de sangre que tenía. Así mismo la pelirroja al pasar tiempo con él y conocerlo también le tomó cariño. Hasta ella lo defendió de las burlas que le hacia Suigetsu. Naruto siempre se despedía de Karin antes de dormir. Él se sentía muy agradecido de haber encontrado a su prima-hermana. “Gracias por seguir con vida” le repetía cada día.

— No seas tonto, primo. — ella se iba dejándolo solo pero ya lo quería.


En su amistad con Sakura había progresado muchísimo, que al parecer sin que ellos se dieran cuenta, sus amigos creían que eran novios. Ella ajenos a lo que pensaban ellos seguian siendo buenos amigos. Supo que desde le día que Sakura perdió a sus padres, Tsunade la acogió como su sobrina aunque no lo fuera. También tenía una buena relación con Kakashi y su esposa Hanare. Jugaba con el pequeño hijo de Rin. Y descubrió que Shikamaru tiene una debilidad por el hijo de su difundo maestro que se llamaba Asuma Sarutobi. Con Temari hablaba pero parecía que siempre estaba enojada, incluso ella le llegó a escuchar, cuando sin medir sus palabras, dijo: “No sé como soportas a esa chica mandona y engreída, Shikamaru”. Pero el Nara intervino y no lo mataron, pero claro se ganó una cachetada que Sakura hizo todo lo posible para bajarle la hinchazón. Con Itachi también ha conversado y se enteró que sus padres también fallecieron. Le contó también por qué Sasuke era así de frio.

— Cuando él tenía cinco años hubo un ataque Kaiju donde mis padres fueron a luchar y quedaron gravemente heridos. Sasuke se siente culpable porque el día que tenían que operar a mis padres, él tuvo un accidente con un parasito de Kaiju que se había quedado en unas alcantarillas, lo mordieron y para salvarlo tenía que donarle suficiente sangre que le reemplazaría la suya que estaba toda contaminada.

— ¿Se puede reemplazar toda la sangre?— el pelinegro asintió.

— Siempre y cuando sea compatible. Y además estaba la general Tsunade y pudo salvar la vida de mi hermano.

— ¿Pero y tus padres…?

— Mis padres optaron por salvarle la vida y claro cuando le extrajeron toda la sangre en buen de sus cuerpos para dársela a Sasuke su vida se acabaron en dos segundo después que se acabó todo.

— ¿Te lo contaron?

— Yo estaba allí todo el procedimiento, Sasuke estaba con anestesia. Y lo único que me dijeron durante esos largos diez minutos de sufrimiento que protegiera a mi hermano. Que hiciera todo lo posible para que fuera feliz. Y por tanto he fracasado en ello, desde ese día se volvió un niño aislado y frio. Pero todo es mi culpa, fracasé como hermano.

— Pero no tiene la culpa, Itachi. Fueron esos malditos Kaiju. — el pelinegro negó con la cabeza.

— Yo era un súper dotado en la artes de manejar Jaeger lo conduje desde los doce años, apenas si estuve con Sasuke. Entrenaba día y noche con la meta de derrotar a los Kaijus y cuando Sasuke cumplió quinces años ya era tarde, su frialdad no se podía cambiar. Lo dejé solo y al cuidado de una niñera pero no se podía. Todo es mi culpa. — Naruto lo observó. — Hice muy mala el papel de hermano, siempre le decía que para la próxima.

— Itachi, a decir verdad no experimente directamente el dolor de perder a una padre y madre, yo me sentí muy mal pero…comprendí que ellos me amaron demasiado y se aferraron a ese sueño de cerrar la brecha. Me siento muy agradecido de haber nacido para poder derrotar a los kaijus con toda mi fuerza. — el rubio sonrió de manera amplia. — Las últimas semanas he tratado de acercarme a Sasuke, voy a hacer su amigo Itachi, te lo prometo.

— Te lo agradecería, haz lo que yo no pude hacer.


Y así conoció más a fondo la vida del pelinegro solitario. Con la única persona que no ha podido tener contacto seguido era con Hinata. Con la mujer que le roba los sueños, con la chica de curvas tan atrayentes. Las veces que la ve es en la hora del almuerzo y Neji no deja que se acerque. La Hyuga lo saluda siempre con una dulce sonrisa. Ha intentado sacarle la información a Tenten que se han hecho muy amigas.

— Naruto ya déjame de preguntarme eso, no le pasa nada. Solo está entrenando más. — decía siempre muy evasiva.

— Es por eso que le ví la otra vez unos moretones en su antebrazo. — la castaña sorprendida asintió. — Dile que no se esfuerce demasiado. Y que prometió cocinarme ramen.

— ¿Por qué no le escribes por el celular?— Tenten adelantaba su paso rápidamente. El rostro de Naruto se le iluminó.

— No lo había pensado.

— Que estúpido, no entiendo porque Hinata le gustas. — lo dijo por lo bajo.

— ¿Qué dices?

— No, Nada. Nada. Me tengo que ir. — “casi meto la pata”. Y así ella se perdió entre lo pasillo.

“No había pensado escribirle por mail. Hinata”.



21 de Agosto - 7 semanas antes del ataque de Kaijus

Ya había pasado su entrenamiento físico y mental, llegó la hora de la práctica. Seguía con las amistades pero seguía sin ver Hinata, o comía en su cuarto y Neji no la dejaba sola. Y notó que Tenten también estaba alejada de Hinata.

— Naruto, es mejor que dejes ese gusto que sientes por Hina

— ¿Por qué? La primera semana estábamos tan bien. Y no me contesta los mails, le envía un par de audios y un video que grabé junto con Ino cuando florecieron las lilas. No entiendo. Y además también le envié un video aurora boreal que vimos junto a Karin.

— ¡Ya! Naruto hablas tan rápido de tantas cosas. Solo aléjate de Hinata. — Sakura ya se libraba de él. Pero el rubio la agarró del brazo no muy fuerte.

— ¿Sabes algo que o no sé? ¿Dímelo Sakura?— ella no le daba la cara. — Por favor…ella en serio me gusta…por favor.

— ¿Por qué tiene que ser así conmigo?— ella se zafó de su agarre y lo llevó al final del pasillo donde estaba el balcón. — Solo lo diré una vez, Hinata se va a casar. — era la segunda vez que su respiración se cortó.

— ¿Es mentira verdad? Estas haciendo todo esto para cobrarme la vez que te empuje a la piscina…o tal vez por la vez que me comí tu flan de coco.

— No seas baka…esto es serio. Te digo la verdad. — el muchacho apretó fuertemente el barandal. — Lo siento.

— ¿Con quién se va casar?— ella no lo miró y vio un atisbo de tristeza. — Sakura-chan…

— Itachi

Por eso aquella vez había visto llorar a la pelinegra, por eso aquella vio a Itachi entrar a su cuarto. ¿Será que ellos…?. No podía ser, Neji no lo permitiría. Y por eso Itachi compró chocolates hace dos días.

— Si te preguntas por que se casa con Itachi es para tener herederos fuertes, es una estrategias de la familias para salvar el mundo. Imagínate Uchiha y Hyuga las grandes cadenas filiales y conexión neuronal.

— No, pueden hacerlo.

— Si pueden. Sabes por demás la sensibilidad que tiene Hinata por el mundo, la necesidad de Itachi de salvar al mundo…todos queremos librarnos de esos Kaijus.

Y así Naruto estuvo muy triste durante tres días, y hoy era el día de la práctica con su Jaeger, después del simulador ahora venía la práctica real. Hinata…Hinata… se repetía el rubio todas las noches. Le dijeron que para ese día su mente debería estar sin ninguna preocupación…eso lo imposible por olvidar un momento a la pelinegra de hermosos ojos perlas.

— Es la hora Naruto, tu rendimiento fue excelente, has vencido a todos los otros jaeger físicamente. — gritaba Tsunade. — Ahora practicaras con el trio InoshikaCho. Tu examen de salud física y mental están normales.

— Recuerda Naruto, no te dejes llevar por tus recuerdos. Deja los pasar. — aconsejaba Kakashi acompañado de su esposa Hanare que lucía un vestido violeta.

— Te estaré apoyando Naruto-chan. — le animaba Rin con su hijo dándole de la mano.

Los otros Jaeger los estarían observando en el exterior y también estaría Hinata con su familia. “La familia Hyuga”. Una de las familias con línea filial más fuerte y que decir de su puente neural.

— ¡Naruto-onichan! ¡Tú puedes!— le gritaba su nuevos amiguito que lo conoció hace nueve días. Konohamaru Sarutobi, ese niño de doce años que lo seguía a todas partes. Y qué decir de sus dos amigos.

— Preparado Naruto…comencemos. — diò la orden Shikaku.

Naruto no había visto su jaeger, poco a poco fue entrando el lugar donde lo tenían. Lo más increíble que había visto pensó el rubio cuando se abrieron las puertas. Un Jaeger en forma de zorro rojo con naranja, cinco metros más alto que el de Gaara. De aspecto tenebroso, intimidante y con un aura oscura. Jaeger, soldados y demás personal de la zona 0 quedaron sorprendido. Solo lo que estuvieron hace casi diecinueves años lo apreciaron tantas veces.

— Te presento a Kyubi, el ex jaeger de Kushina. — concluyó Inoichi.

Naruto, solo, se abrió paso entre la rampa y subió por el ascensor hasta la cabeza de Kyubi.

— Naruto-kun…— susurró Hinata cerrando los ojos fuertemente deseando que todo salga bien para el rubio. Itachi la tomó por los hombros.

— Lo hará bien. — le susurró a su oído. Ella asintió. — Sabes que tengo un plan para acabar con esta boda.— ella lo miró sorprendida. — No es que sea malo para mí casarte contigo Hina. Pero ambos solo sentimos cariño de amigos. Todavía no me llega el amor.

— Comenzando conexión. — dijo Sakura al lado de Tsunade. Ella recién llegaba y venia agitada. — En 3, 2, 1. ¡Ya!


Naruto acomodado bien con ayuda de Gaara, estaba preciso para iniciar conexión. Naruto sintió que todo su cuerpo se alivianaba, que su sangre fluía más rápido. Y de repente todo se puso rápido. Al segundo vio el día que le celebraron su cumpleaños en Ichiraku cuando tenían siete años. Cuando Iruka peleó con otro señor para defenderlo en segundo año de secundaria. Y unos recuerdos que no habían sido de él.

— ¡Yo seré quien derroté a todo eso Kaijus! — gritaba una niña de doce años pelirroja y de ojos grandes violetas. Estaba al parecer en un salón de clases. Y todo el salón rió.

— Una niña huérfana no logra nada…tu familia no es nadie. Solo los Uchiha pueden— le reclamaba un muchacho pelinegro.

— Cállate Fugaku estúpido. Algún día tendrás que pedirme perdón y cuando llegue te ignoraré.

— Tu tonta tomate, vete con tu aldea. — le insultaba un niño de ojos perlas. — Tú no eres nadie. — y entonces la niña se enfureció. Y saltó sobre las bancas y los golpeó a ambos niños.

— Yo seré más fuerte que ustedes, yo seré quien salve al mundo. — gritaba mientras lanzaba puñetes a los chicos. En vano lo niños trataban de defenderse.

— ¡Hiashi!— gritaba una pelinegra

— ¡Fugaku!— otra niña de ojos perlas intentaban separarlos junto con la otra.

— ¡Kushina!— dijo un niño rubio, ella paró al instante. Estaba encima de los niños, pero las lágrimas corrían por sus mejillas redondas y sonrojadas. Las dos niñas ayudaron a cada niño a levantarse, todos ensangrentados. — No tenías que haberlos golpeado. — Ella se levantó temblorosa, le dolían los puños de tanto pegar, y al parecer se zafó el índice derecho. Los niños del curso de abrieron paso ante la pelirroja que se colocó con la cabeza gacha en frente del rubio un poco más alto que ella.

— Siempre es mi culpa, todo es mi culpa. Pero si ellos empezaron a molestarme. — sorbió la nariz. — Ese Uchiha y Hyuga creen que me voy a dejar de sus insultos. Por mi lado pueden morirse. Ojala que toda su familia se las coma los Kaiju. — le gritaba furiosa al ojiazul que la miraba con comprensión, pero al mismo tiempo de decepción. — Odio la forma en que me miras, crees saberlo todo. Tu Minato al que todo le sale bien, al que no reprueba nunca, el querido de los profesores. Más que a todos, eres la persona que más detesto. — y solo la observaba. — Y odio más esa forma tan apacible tuya, no dices nada, no te enfadas. No me gritas…— ella lloraba aún más fuerte. — Quítate. Pensé que éramos amigos. Para mí eres un tonto. — la niña salía hecha furia pero antes … — Algún el clan Uchiha y Hyuga tendrá que temer ante un Uzumaki. Eso lo prometo. — y salió del aula en azote de la puerta.


Madre…padre…estos son los recuerdos de mi madre. Es verdad no he visto ni una sola foto suya…madre…que linda era de niña.

Después vieron más recuerdos de ella, cuando le declaró su amor hacia Minato a los quince años. La fuerte amistad que después tuvo con sus enemigos de infancia. El entrenamiento fuerte que ella realizaba. Como entraba en acción en su jaeger Kyubi. La boda de sus padres.

— Mi pequeño cosita linda, rubio como su padre. — daba mimos la pelirroja de veinticinco años aun bebé tenía en brazos. — Mira nuestro hijo Minato. — estaban en cuarto de hospital.

— Tiene tu calidez Kushina…mi hijo. Naruto. — y se abrazó a su esposa.

— Una foto, foto para el recuerdo. — insistía Jiraya que presenciaba la escena junto a Tsunade. Se quedaron en esa posición. — Listo. Deja que salga. — era una cámara instantánea. — Que lindo mi ahijado. Le voy a enseñar muchas cosas…

— No seas estúpido Jiraya, que le vas a enseñar a beber y el mundo de mujeres. — le retaba la rubia.

— Ni te atrevas viejo, o te despellejo. — contraatacó Kushina.

— Mi amor, Jiraya-sama no se refería a eso, ¿verdad?— Minato sudaba frio por su esposa se estaba enojando.

— Ojala que Naruto no salga con tus modales Kushina y con tu personalidad…ojalà que sea como mi pupilo. Minato, el dulce, tierno, amable y respetuoso Minato. — se burlaba Jiraya. — No como la Habanero sangrienta.

— Minato, sácalo de aquí antes que lo mate…— susurraba la pelirroja.

— Yo lo hago por ti querida. — dicho y hecho Tsunade lo arrastro de las orejas. — Dan acompáñame. — le dijo un hombre que estaba callado.

— Va a ser muy guapo. Eso lo sé. Va ser fuerte como sus padres. No se dará por vencido fácilmente. Será amable, espontáneo, divertido. — Minato la observaba con ternura mientras acariciaba su sedoso largo cabello rojo. — Le gustará el ramen, tanto o más que yo. Deseo que se enamore y se case con una buena mujer como su madre y que le haga las comidas que él quiera. Que lo ame así como me amas tú Minato. — y de sorpresa besó a su marido. — Deseo una vida tranquila para él, que no tenga que crecer para luchar contra los Kaiju. — y empezó a llorar. — Mi pequeño Naruto, tú padre y yo lucharemos sea como sea para que tu no vivas encerrado en muros. Y disfrutar del mar como se merece. Mi Naruto…te amo tanto. — y se abrazaron.

— Naruto, lo que deseo para tì es que siempre escuches, se paciente y empático. Lucha por lo que quieres. Y…— Pero al instante sonaron las alarmas de Kaijus.

— Que pasa, el próximo no vendría dentro de seis meses. — dijo asustada la mujer.

— A de ser simulacro…tranquila no le pasará nada a nuestro hijo.

— Minato hay cinco Kaiju acercándose en diferentes puntos, dos de nivel tres, uno de nivele dos y el otro de nivel uno. Tenemos que alistarnos…— decía Dan.

— Pero…mi hijo.

— Ve, mi amor. Yo lo cuidaré. Te estaré observando. — le reconfortó. — Además mi hombre es muy fuerte. — eso sonrojó al rubio.

— Te amo. — le dijo finalmente y besó la nariz del pequeño que se removió. — Acompaña a tu madre mientras no estoy.— Y así Minato junto a Dan salieron.

— Mi pequeño Naruto, no te preocupes que tu padre es el más fuerte del mundo. Ya verás que dentro de una hora regresa.

Y el recuerdo seguía, los cuatro jaeger peleaban pero tres más de repente a parecieron. Y todo se complicó. Kushina veía como los pilotos iba muriendo y solo quedaba en pie el jaeger de su marido y Dan que era compañeros. Kushina se sentía impotente y sintió que tenían que ir.

— Tengo que cerrar esa brecha….— se dijo para sí, le dolía todo el cuerpo por el parto. — Mi hijo, regresaré pronto, traeré a tu padre.

— No, no te vayas, madre. Madre. Quédate conmigo. No me dejes. Madre. Te amo. No me dejes. Por favor quédate. No quiero estar solo. Te necesito…— gritaba Naruto tratando de tocar a su madre en recuerdos.


— El chico se está aferrando a los recuerdos y está perdiendo el control de Kyubi. — advirtió Inoichi.

Naruto se ha quedado sumergido en recuerdos de su madre, que fueron pasados a través del jaeger de zorro.

 

CAP#5

— ¡Naruto!¡Naruto! No te aferres a eso recuerdos. Naruto. — gritaba por el micrófono. Sakura repetía su nombre una y otra vez.

— Activo un misil. — dijo desesperada Ino. — En esa dirección esta Konoha.

— Todos lo jaeger en sus puesto, formación de contención. — ordenó Tsunade. — Si ese misil impacta…acabara con la vida de esa ciudad. — Los amigos de Naruto se prepararon para hacer conexión con sus jaeger.

— Te dije que él no serviría para esto. — dijo Sasuke. — Tendré que matarlo. — Sakura abrió sus ojos sorprendida.

— No sería capaz…Sasuke…no lo hagas. — le rogó.

— Humph…lo mataré. — y se fue.

— Hinata sé que no te sientes muy bien, pero tenemos que proteger a la ciudad. — dijo Neji.

— No te preocupes, estoy mejor. Vamos.

— Tenten es hora de demostrar el resultado de nuestro entrenamiento. La llama de la juventud ardera sobre mí. — animaba Rock Lee. —

— Sí, aunque espero todo salga bien.

— Shika, ten cuidado. Por favor. —

— No te preocupes, Temari. — Esto será muy problemático, pensó para sí el Nara.

— Hermano vamos. — llamaba Shin a pelinegro que se besaba con su novia.

— Cuidado mi amor.

— Tú también mi hermosa Ino.

— Comí suficiente como para luchar. El trio InoshikaCho al ataque. — gritó Choji con un pastel en la boca.

— Shino demostremos que lo nuevos podemos.

— Claro Kiba.

— Apúrate viejo , se está escampado la diversión.

— Cálmate Suigetsu— reclamó su tío.

— No debiste decirle eso a Sakura.

— No me digas nada Itachi, metete en tus asuntos con esa niña. — le recriminó su hermano menor.


Cuando todos estuvieron en su Jaeger y Gaara hacia todo lo posible por retener a Naruto. Pero era muy fuerte. Se oía el sonido de las maquinas chocarse.

— Conexión completada. — Y así los jaeger salieron y trataron de derrotar a Naruto. Y así se activó un misil que se dirigiò hacia Konoha.

— El equipo de trio, el de Kiba y el de Rock Lee detengan ese misil. Suigetu, Itachi, Neji, Gaara cuento con ustedes. Temari ve a despajar la zona costera de los barcos.

— Madre, padre…porque se fueron…yo quería que estuvieran conmigo en mi cumpleaños, navidad. Disfrutar de tu ramen casero…Madre…— mientras él se aferraba a su sueño el Kyubi gritaba, rugía dispuesto a liberarse. — No quiero estar solo…Madre, quiero verte…no me dejes…

El rubio vio el momento exacto en que sus padres fueron absorbidos por la brecha del abismo, contuvo la respiración y siguió a sus padres. Naruto, fue directo a la brecha y una luz lo cegó.

—El equipo de trio, el de Kiba y el de Rock Lee detengan ese misil. Itachi, Neji, Kisame y Gaara cuento con ustedes. Temari ve a despajar la zona costera de los barcos.

En la vida real los jaeger pudieron destruir el misil. Pero claro el trio InoshikaSho se llevó la peor parte ya que como eran los más experimentados tuvieron que acercarse demasiado al misil que tiene un campo que daña el acero. Su jaeger quedó si un pierna. Los tres tenían leve dolores de cabeza y espasmos de dolor.

Lo que todavía no podían hacer era poder controlar al Kyubi. Gaara era el que más se acercaba y luchaba con todo. El Kyubi ya se había apoderado de la mente de Naruto. Este le lanzò un gancho en la cabeza del jaeger de Gaara haciéndolo retroceder de dolor. Fie tan fuerte que hasta el pelirrojo sufrió una herida en su frente. El equipo Uchiha lanzaba derechazos y patas pero era muy difícil poder atinarle, el Kyubi era rápido.

— Maldita sea…lo mataré…mataré a ese imbécil. — se repetía Sasuke, su hermano mayor podía sentir el odio, envidia que sentía su hermano menor hacia Naruto.

— No lo mataremos, lo vamos a dejar inconsciente. Entendido. — esta vez Itachi habló tan serio y firme que el pelinegro menor solo tuvo que obedecerlo.

— Humph

Neji podía sentir el temor de Hinata para no dañar al rubio. Pero tenía que hacerse.

— Hinata, recuerda que ya no es Naruto el que lo controla. — trató de confortarla. — Si has escuchado la historia de eso jaeger especiales. — Ella asintió. Hablaban por un corto periodo de minutos ya que estaban recargando energía para un ataque. — Tanto el jaeger de Gaara como el de Naruto eran antes Kaiju que le hombre pudo controlarlos ya que lo criaron. Ese cuerpo de acero solo es el molde del cuerpo que tenía antes el Kaiju, por eso solo lo conduce una persona. Se fusionan la mente del Kaiju con la humana. — Hinata abrió los ojos en sorpresa, lo había olvidado. — Y si no vamos con todo, perderemos a Naruto y el Kaiju ya no lo podremos controlar. Con eso empezarà la destrucción del planeta.

— Lo siento, Neji. — ella sonríe. — Lucharemos juntos.

— Exacto.


Ya habían pasado más de veinte minutos luchando con el Kyubi hasta que de repente se detuvo y colapsó. Se sumergía poco a poco al fondo del océano, y solo se podía ver su cabeza. Todos totalmente exhaustos regresaban a la base.

……Por intercomunicador…..

— Me duele todo el cuerpo, no sabía que alguien fuere más fuerte que yo. — se quejaba el peliblanco. Iba junto a su jaeger con su tío caminaban a través del mar. Puesto que estas máquinas podían tocar el suelo pero solo las zonas costeras.

— Suigetsu, todos son más fuertes que tú. — le recriminaba Karin por el intercomunicador que tenía desde la base.

— Bruja roja, no molestes. — pero ella ya había colgado. Su tío se reía. — No me parece nada gracioso.

— Ino, te sientes mejor. — le hablaba Sai a su novia.

— Me duele la cabeza y las manos pero ya falta cinco minutos y llegó a la base, amor.

— Por favor si alguien tiene una herida grave dígalo. Que lo helicópteros de rescate irán cuanto antes. — decía Tsunade. Todos dijeron que no era nada grave. — Muy bien regresen a la base.

En la cabina de la Base.

— Me preocupa Naruto, usted creé que despierte. — decía Sakura a Kakashi.

— Sakura ya traen la jaeger y lo pondremos a observación.

— A simple viste tuvo un cierre de su menoría y recuerdos. También sobrecarga de información. — dijo Shizune.

— Ese chico le dije que pasara de largo los recuerdos, mocoso desobediente.

— Pero, yo también hubiera hecho lo mismo, Naruto no tenía a nadie y el conocer a sus padres de repente debió ser una alegría y al tiempo también tristeza, por eso se aferró. — Dijo Rin compasiva y temerosa por la vida del chico.

— ¿Ahora qué harán con Naruto?— preguntó Sakura a todos los del consejo, todo el mundo calló. Y Kakashi le tocó el hombro, y negó con la cabeza.

— Tendremos que sacarlo del programa y enviarlo de vuelta a su ciudad.

— No, Tsunade shishio. El sueño de Naruto poco a poco se estaba cumpliendo. Por favor le ruego que no. — imploraba la pelirrosa con ojos llorosos. — Él va a sufrir…— susurró.

— Estoy de acuerdo con ella mi general. — otra vez se interpuso Rin abrazando a la Haruno. — Si tan solo…

— Otra oportunidad…? — completó el líder del Familia Hyuga. — Puso en peligro la vida de sus compañeros, la ciudad y hasta la del planeta. Sabemos muy bien que el Kyubi es el más fuerte de todos los Kaiju. No podemos arriesgarnos de nuevo. — todos lo de la sala lo escuchaban, fue duro para la pelirrosa pero era la verdad. — La vida de mi hija y sobrino no volveré a arriesgar porque un joven es débil. La vida se arriesga para salvar a la humanidad. — completó. Sakura iba a hablar pero fue detenida por el su maestro.

— Tiene razón Hyuga. Rin sabes muy bien que no se puede cometer errores, no podemos sacrificar vidas en vano. — dijo contundente la general. —Está decidido entonces Naruto Namikaze queda expulsado del programa de Jaeger. Ahora Sakura te necesito para curar a tus compañeros y…— fue interrumpida.

— General, un Kaiju de categoría 4 se acerca muy rápido. —dijo Inoichi, todo el mundo sintió algo en común. Miedo. Tsunade dejó caer su taza de café por la sorpresa.

— A todos lo jaeger un Kaiju de categoría 4 se dirige hacia ustedes, manténganse alerta. — gritaba la rubia de coletas. “Estos malditos monstruos, se suponía que parecerían dentro de 7 semanas”

— No se dirige hacia ello Tsunade-sama— dijo Shizune— va hacia el joven Naruto.



Ya faltaba tan solo tres kilómetros para llegar a la base todos lo jaeger, iban a la cabeza lo que lucharon contra Naruto y más al frente estaban los helicópteros que llevaban al Kyubi.

— No tenemos fuerzas suficientes…— dijo asustado el peliblanco.

— Neji-nisan…— dijo Hinata con claro temor. Su primo le sonrió.

— Yo te protegeré pase lo que pase.

— Sasuke será mejor que hagamos la posición de tortuga y salir vivos.

— Yo estoy listo.

— Bien pensado Itachi. Todos formémonos. — recalcó Gaara.

Entonces los enormes Jaeger empezaron a formarse en un círculo. Esperaron un rato y al fin ese Kaiju salió de entre el fondo del mar. El equipo Uchiha estaba en el centro del círculo. Ya que ello eran lo más rápido. Al saltar el Kaiju también saltó el Nova Imperion. En el aire los Uchiha sacaron su espada y le dieron de llenó en el corazón que estaba en la mitad de su tórax del Kaiju. Pero fue tan raro. Sasuke vio como todo pasó tan lento. Viò que el Kaiju Raiju (lit. Bestia relámpago)parecido a una fusión entre una iguana marina y un cocodrilo. Tiene una mandíbula tripartida y su cabeza verdadera la esconde dentro de su “cráneo”, arrancó la cabeza de su jaeger quedando expuesto, ya nada funcionaba, no podía luchar. Ambos cayeron a un costado de los otro jaeger que al parecer se lanzaron para quitarles de encima a la bestia de categoría 4, no hicieron mucho todos estaban muy agotados.

Sasuke estaba si su estabilizador, si su casco. Su hermano mayor se liberó de sus ataduras del estabilizador y socorrió a su hermano. Mientras el Kaiju estaba ocupado con los otros jaeger el pelinegro mayor quería salvar Sasuke.

— Que haces, vete. Tú equipo está intacto. Puedes irte. —gritaba Sasuke. Itachi le diò un mirada fría. El mayor le diò su collar que siempre llevaba en pecho a parte del de soldado.

— Prometí que te protegería. Les prometí a nuestros padres. Sabes una cosa, eras el consentido de todos. — dijo con una sonrisa típica de él. Le puso su casco y su esfera con que controlaba al jaeger. — A pesar de todo, sigues siendo mi hermano pequeño. No importa que llegues a ser, siempre te amaré. —puso dos dedos en la frente de su hermano, le sonrió. Itachi presionó la esfera y Sasuke fue jalado por una fuerza hacia arriba que lo sacó fuera de la cabina de su Kaiju. Lo último que vio fue a su hermano devorado por el Kaiju. Sasuke gritó de una manera que jamás lo hizo.

— ¡Itachi!— ese fue el dolor en forma de gritó que Sasuke puedo hacer. No le quedó nada. Ahora se quedó completamente solo. EL Kaiju tipo 4 se dio a la fuga, ninguno de los jaeger pudo alcanzarlo.


Gaara recogió a Sasuke del mar en donde fue lanzado…

En la mirada de Sasuke solo había temor, dolor y odio….

Sakura e Hinata lloraban por la muerte de su amigo… el amable Itachi…

Los soldados sintieron el pesar por la muerte de otro compañero…

El mundo se sentía cada vez más desprotegido, perdieron a un soldado poderoso…

Sasuke perdió a su familia, hermano. Todo en una sola persona…




Dos días después (5 días, 6 semanas antes del supuesto ataque Kaiju)

— Donde estoy, me duele la cabeza. — dijo Naruto quien recién se levantaba de haber perdió el conocimiento. Sus ojos se abrieron paso en cuarto de paredes blancas. Viò a su derecha y encontró a Hinata dormida. Estaba recostada a cerca de su brazo. Vio su rostro tan hermoso. Miro hacia la ventana y notó que estaba oscuro, el reloj de la pared de frente marcaba la tres de la mañana.

“¿Se quedó a dormir aquí? ¿Por mí? ¿Y qué hago aquí? Cierto…los Kaiju, el Kyubi, mi padre…mi madre.

— Hinata…Hinata— la llamaba y ella se removió. La chica abrió sus ojos y levantó cabeza.

— Naruto-kun, me alegra que este bien. — habló muy bajo y con unas lágrimas rodando su piel de porcelana de las mejillas. — Que felicidad…— pero ella se mantenía en su lugar. Él tenía ganas de abrazarla y besarla. Se acomodó mejor y logró abrazarla. Ella sorprendida. — Naruto-kun…

— Hinata, no te alejes de mí por favor. No quiero. No me importa si te vas a casar con Itachi. No quiero que te cases con él. Tú me gusta mucho Hina. — le hablaba al oído tan suave y sincero, tan cálido que le produjo un cosquilleo en la nuca a la chica haciéndola por demás sonrojar. — Sé que soy egoísta…pero te quiero. — y sin esperar respuesta él la tomó del rostro y la besó. Fue un beso fuerte. Ella sintió que se le escapa el alma y no podía mover sus labios, ella no sabía besar. Él se removía lento pero al no recibir respuesta por parte de la chica supo que cometió un error. — Discúlpame. — y se alejó. Hinata estaba tan pasmada que no podía reaccionar.

— N-no. No dejes de b-besarme. — lo dijo sin siquiera pensarlo. Esta se sonrojó aún más. El rubio igual no procesaba la respuesta. — Quiero decir…decirte que…tú me gustas mucho.

— En serio, pensé que…bueno que querías a Itachi.

— Esas son cosas de familia…además él…— su mirada se entristeció.

— ¿Qué pasó con Itachi?— ella negaba con la cabeza y otra vez empezaba a llorar. — ¿Cuándo? ¿Qué…que pasó?

— Lo devoró un Kaiju…— Itachi no, él es un hombre muy fuerte…no. ¿Sasuke?

— Cuéntame Hina. — y él le tomó de la manos. Ella asintió y le contó todo. — Entonces fue mi culpa…todo lo que pasó y pasará es por culpa mía.

— No, no. Nadie sabía que ese Kaiju aparecería. Fue de la nada.. — intentaba consolarlo. Y lo atrajo hacia sí y puso su cabeza entre sus pechos. Eso hacia su madre cuando ella estaba asustada. Para poder escuchar lo latidos. Le acariciaba el corto cabello rubio. Siempre quiso hacer eso. Enterrar sus finos dedos en la cabellera del rubio. El tacto fue…increíble.

El joven lloraba pero ya más calmado. Oía con claridad los latidos de la chica, que eran lentos pero iban en aumento. Otra cosa que notó desde el inicio. Fueron sus senos. “La señorita Hyuga tiene muy buena figura…y unos bellos senos.” Se le vino a la mente lo que le decía siempre Suigetsu. A decir verdad nunca lo negaba, nunca negaba que sentía tanto atracción física hacia ella tan fuerte que a veces se volvía loco.

— No te sientas culpable. Yo creo en tì Naruto-kun, sé que vencerás a los Kaiju. Y que la muerte de todas las personas que fueron antes que nosotros no es vano. Confió en que tú nos liberarás. — él la miró y quedaron muy cerca, sus nariz se tocaban. Él se quedó sumergido en esos ojos tan brillantes, tan llenos de vida y ella en esos dos pozos azules tan claros y tranquilos. — Yo te apoyaré. — dijo al final la chica, antes que èl de nuevo la atrapara en sus besos, esta vez ella respondió pero torpemente. Ella ante tal vergüenza se quiso alejar pero no la dejó.

— No, quiero más. Quiero besarte más. — dijo con voz ronca. Ella negó con cabeza.

— Yo no sé cómo…— y ella agachó la cabeza.

— Pero si eras novia de Itachi…— ella volvió a negar con la cabeza.

— Solo fingíamos, nunca pasó nada entre nosotros. Ambos nos queríamos como amigos. — esto alegro de sobremanera al rubio. ¿Entonces no la han besado? Y mejor aún ¿Entonces ella es virgen?. Se golpeó mentalmente por pensar en lo último.

— Entiendo fue tu primer beso. — ella negó. Esto dejo sin capacidad de reacción al muchacho. — ¿Quién te besó?— ella se sonrojó.

— Fue Neji-nissan— esto heló al chico. El correcto Neji, el genio Hyuga besando a su prima. Esto no podría ser…pero si a Sakura le pasó eso…entonces…Hinata y Neji. Hinata pudo ver la cara de desconcierto total del rubio. — No es lo que parece, fue cuando teníamos seis años, y accidental. Tropezamos y pues…pasó pero en fueron tan solo segundos que nos quedamos helados y Neji me pidió perdón de rodillas. — ella sonrió ante este recuerdo.

— Qué bueno…pensé que…no importa. — Entonces otra vez prosiguió a besarla. — ¿Quiere ser mi enamorada?—Ella se sorprendió. Se alegró pero le duró poco.

— Si quiero pero no se puede…

— ¿Por qué?— ella no lo miraba.

— Tsunade-sama…dijo que estabas expulsado del programa. — esto fue un golpe directo para el muchacho. Ella lo abrazó. — Quiero que te quedes, Naruto-kun.

— Voy a hacer lo necesario para quedarme— y puso su nariz en la coronilla de la muchacha e inhaló el tan atrayente aroma de la mujer que tenía enfrente. “No pienses en ello”—y Sasuke?— dijo para cambiar de tema.

— Sasuke-kun esta más alejado que nunca. Sakura tampoco ha podido acercarse. — le comentó. — Nunca pude comprender porque dejaron de quererse, eso me causo mucha tristeza porque por única vez pude ver a Sakura con una sonrisa tan grande, tan llena de vida desde que la conocí cuando ella tenía doce años. — Naruto solo enlazó cosas. “Que mirada tendría en ese instante Sakura-chan…”

— ¿Ellos fueron novios?

— Bueno no sé qué exactamente fueron…pero Sasuke no la trataba como la trata ahora. Y ella era feliz estando al lado de él. — recordó la ojiperla. —Itachi y Sakura eran las dos únicas personas a las cuales Sasuke escuchaba…pero de un día al otro Sasuke trató tan mal a Sakura que yo sentía el dolor de ella.

— ¿Y hace cuando fue eso?— ella pensó por un momento.

— Fue hace seis meses antes que vinieras.

— ¿Sasuke es muy rencoroso? ¿No lo crees?— esa pregunta sorprendió a la chica. — Yo me entiendo Hina. Gracias por decírmelo.

— Bueno…— se tornó un silencio total. Naruto rió.

— Hinata puedo sentir claramente tu temblor. No tiene por qué temerme, no te comeré. — ella se sonrojó, ambos lo hicieron.

— No es miedo, es que estoy nerviosa. — ¿esta así por mí?.

— ¿Hinata, crees que Sasuke me odie?— le preguntó él.

— No lo sé…

— Creo que lo hace y mucho, apuesto que quiere matarme. — y se rió. Ella se preocupó. — ¿Supongo que lucharemos hasta que nuestros huesos se rompan.

— Naruto-kun…no…por favor. No quiero que te lastimen.

— Eso no pasara pequeña…— y besó su frente. — Y como así estas aquí.

— Neji-nissan me ayuda solo dijo hasta las cinco de la mañana para que llegue bien a mi dormitorio.

— ¿Neji?¿Por qué lo haría?¿Además conociéndolo como deja que te quedes con un chico a solas?

— Eso es lo mismo que le pregunté…— ella sonrió de manera sutil pero encantadora. Se acercó más a él y juntó su frente a la de él. — “A pesar de que es testarudo, despistado, torpe… no me molesta tanto que te enamores de él. Porque tiene una fuerza de voluntad fuerte y sus metas son parecidas a la mía con la única diferencia es que él no tuvo a nadie que lo apoyara desde pequeño. Y además yo confío en él.” Eso es lo que dijo. — Naruto no podía creer que Neji había dicho todo eso, un genio como él ponía su plena confianza en lo torpe que es.

— No lo defraudaré, venceré a cada Kaiju del planeta. Pero por ahora tendré que entrar de nuevo al Kyubi. — ella asintió.

— Sé que Tsunade-sama también confía en tì.

— Gracias. — un beso selló el agradecimiento. — ¿Me guardarías un secreto?— ella lo miró embelesada y luego asintió. — Conocí a mi madre…

 

CAP #6

5 días después (6 semanas exactas para el ataque de Kaiju)

5:30 am - 29 de agosto - parte oeste de la zona 0

— Si está cansada puede parar — dijo Neji. El muchacho iba trotando con su típico traje de soldado solo que esta vez estaba solo con su camisa blanca y la chaqueta no la traía. Y se podía ver las marcas de la medalla que tenía por debajo de la camisa. Una chica con una coleta alta y cabezo castaño venía detrás de él. Pero ella iba a cada paso más lento. Ella llevaba su chaqueta puesta.

— No, seguiré. — dijo con su último aliento para después caer de rodillas en el suelo y con las manos apoyándose hacia el frente. Esta tan sudorosa que las gotas de sudor caían con fuerza en el suelo. Ambos chicos estaban trotando desde la cuatro de la mañana. Y decidieron trotar por el bosque que quedaba en la isla. Que a pesar de ser una isla era realmente de mucha extensión. El bosque era espeso.

— Tenten — el ojiperla se agachó y le tocó un hombro. — Estas temblando demasiado…y ya basta de hacerte la fuerte. — ella levantó la mirada. — Sé que te duele la pierna.

— ¿Te lo dijo Rock Lee?— él asintió. — Ese bocón…lo mataré. — frunció los labios, ese gesto hizo sonreír al serio Hyuga. El muchacho la ayuda a levantarse, ella se incorporó. Neji la tomó de la cintura y la sentó en una piedra grande que estaba a unos pasos de ellos. — Me golpeé el otro día practicando con mi jaeger pero ya sanará.

— Si te dolía pierna porque quieras venir a trotar.

— Pensé que no querías ir solo. — le dijo ella mientras se sacaba la chaqueta que le hacía dar más calor. — Porque vi que se lo pediste a Rock Lee pero él iba a dar su entrenamiento duro con Gai-sensei.

— Ah sí? fue porque quería invitarlo. — debajo de la chaqueta, Tenten solo llevaba una blusa roja de tiras finas hasta el ombligo. Neji la observó. Sus pechos subían y bajaban por el esfuerzo, su rostro perlado de sudor que la podía ver aún a pesar de la poca luz de esa hora. Hasta ahora no se había fijado mucho en una mujer…ha habido mujeres en su vida y que no decir que ha disfrutado pero nunca nadie ha llegado a enamorarlo. Desde los dieciséis años ya había tenido relaciones con una joven mayor él por tres años.

— A pesar de estar sudada me empezó a dar un poco de frió. — rió la chica ya que sintió una corriente fría recorrerle el cuerpo. Esto no pasó desapercibido por Neji, ya que antes que ella dijera eso pudo deleitarse la mirada viendo los pezones de la joven erizarse debido al frió.

“Nunca en mi vida he querido tanto estar con una mujer…y mucho con una que no se viste nada sexy”— pensó Neji para sí mirando hacia otro lado.

Tenten no sabía nada de lo que pasaba mente del muchacho pero si se diò cuenta el joven miró sus pechos.

— Debí haberme puesto un sostén, no una top. Así por lo menos pareciera que tuviera un poco más. — se dijo en la mente. — Solo quiero pasar tiempo contigo aunque me ignores. Pensò ella.

— Siento por tratarte mal hace días atrás. — dijo el ojiperla repentinamente.

— No pasa nada. Bueno sigamos. — ella se levantó pero fue un cimbrón. — Auch…

— Terminaremos hasta aquí el entrenamiento— Tenten asintió. — Es muy temprano ¿Qué quieres hacer?— la joven negó con la cabeza. El desayuno recién está listo a las seis de la mañana.

— Ya sé, sígueme. — el muchacho la siguió. — Hace un par de días Ino me enseño este lugar son…

— Aguas termales— le completó Neji.

— ¿Lo conoces?

— Claro, ni que fuera despistado. Y no sé para qué vamos.

— Yo sì — se encaminó primero y luego de cinco minutos se abrió a su paso una cascada hermosa de tres metros que caía fuertemente en un pequeño conjunto de agua. Salía vapor de la superficie. Ella se lanzò de lleno al agua. Neji con una ceja alzada la vio sumergirse y luego salió a la superficie. — ¡Nejì ven! ¡Esta deliciosa!— ella nadó hasta la orilla y recostó su cabeza allí. Tenten sabìa que por ningún concepto Neji se metería al agua. El genio Hyuga no lo haría, ella no sabe desde que momento empezó a sentirse atraída al muchacho de ojos perlas. Pero cada vez que lo vei entrenar, correr, trotar, boxear sus hormonas se alborotaban. Lo que le más le gustaba de Neji físicamente era su cabello, sus ojos y ese torso tan bien trabajado que tenía.

Neji mientras veía la espalda de Tenten tan fina, tan pequeña que tuvo que tomar aire y mirar hacia otro lado. Estaba sudado pero no quería meterse. “Por un instante quisiera ser un poco menos serio” se dijo para sí. Sonrió.

— Tenten, la esperaré hasta que se refresques

— ¿Por qué lo harías?— preguntó la chica, tan roja como tomate. No lo veía.

— Por el simple hecho que no puede caminar bien. — le recordó. Esto la avergonzó. “Por qué siempre tengo que quedar como unatonta cuando esta él” pensó la ojichocolate. Pasaron alrededor de veinte minutos y ella recién estaba entrando en etapa de relajación, pero no podía. Neji tenía cosas que hacer y ella también, quizás en su día libre.

Ella salió del agua termal y notò que Neji se había recostado en una roca lisa con las manos bajo su cabeza. Ella pensó que pudiera estar dormido. Ahora que recordaba no había visto dormir al castaño…caminó un poco con cautela y las gotas de agua caían a su paso. Se arrodilló junto a él sin hacer le menor ruido. En efecto el muchacho estaba dormido. Tan apacible, sus duras facciones estaban relajadas, su respiración tan suave, un mechón castaño estaba sobre su frente. Tenten se mordió el labio, tenía una enormes ganas de tocarlo “¿Podré?” se dijo para sì. Lentamente acercaba su mano y una gota de agua rebelde se deslizó por su mano hasta la punta de su dedo y cayó en el ojo del muchacho que al sentir este contacto lo cerró aún más. La joven se quedó helada.

— Lo siento…— el chico la miró y tomó la mano de ella. Al contacto ella tembló…estaba tan frío. — Neji, estás muy helado. No debiste quedarte dormido. — Se preocupó.

— ¿Y que podría hacer usted para calentarme?— esto no se lo esperaba, sino hubiera sido Neji el que se lo hubiera dicho ya hace rato que le daba sus golpes. Pero él se refería a su temperatura.

— Pu-pues podrías meterte a las aguas termales— titubeó sonrojada.

— No…mejor es así. — ella lo observó y de repente sintió un suave jalón. Neji la acercó hacia su cuerpo. Ambos quedaron acostado, Tenten encima del pecho del muchacho sintiendo su corazón latir tan lento . La mano que tenía sujeta de la chica la llevó hasta su rostro. La joven alzó la mirada y quedó muy cerca de la barbilla de Neji. — Es muy cálida Tenten…— le dijo, ella por cuenta propia acariciaba la mejilla del muchacho, y este la tomó de la cintura haciendo un ademán para que ella quedará a la altura de su rostro. Tenten no sabía que pasaba…pero lo que si sabía era que le gustaba. — Permiso…para besarla— le dijo Neji. La joven quedó pasmada…”eso no podría estar pasando…de seguro había muerto en un ataque Kaiju” pensó ella pero no era así. Él la miraba con hambre. Ella asintió y cerró los ojos fuertemente. En su vida se había interesado en chicos, solo uno la pudo besar pero a la fuerza. Neji sonrió al sentir el nerviosismo de la muchacha pero primero con su mano libre tomó un mechón de cabello largo de ella poniéndolo detrás de su oreja. De un movimiento rápido ella estaba abajo, él arriba. Tenten soltó un gritito de la impresión pero no abrió los ojos, creyó que si los abría esto no estuviera pasando.

— Neji…— suspiró el nombre de su chico.

— Es realmente hermosa — tras esto le selló los labios con un beso tan frenético al principio que la joven pensó que no podía respirar. Pero ella supo igualarlo. Neji agarró su cintura y la acercó más hacia él. Tenten con mano libre lo tomó por la nuca. Estaban tan cerca…que cada uno sentía el latido del corazón del otro.

— Neji…— ella suspiró de nuevo su nombre entre besos. — Tú…tú me gustas…— él se detuvo al instante. “No debí decirlo” se recriminó ella. Él la miraba con sorpresa…el sabia de los sentimientos de la chica, se daba cuenta de todo. Pero no pensó que se lo diría. Pues él se aprovechó de ese sentimiento que ella sentía para poder besarla.

— No podemos estar juntos…son las reglas de mi familia. — le soltó rápido, directo. Ella ya lo sabía pero porque negarse a ella misma a quererlo así sea de lejos.

— No pretendo atarte Neji…solo quiero quererte. — así le gustaban las chicas a Neji, que sean directas sin rodeos ya que le cansaba eso.

— Está consiente que no podrá decírselo a nadie. — Ella asintió. — Entonces…sigamos. — ella entendió que siguieran el beso, pero el joven se puso de pie. Le extendió la mano, ella la tomó encantada.

— Gracias

— Me gusta más con el cabello suelto— le comentó mirándola a los ojos. Ella por reflejo se llevó una mano al mechón largo que caía sobre su pecho. — Será mejor que se ponga mi chaqueta. — ella se sonrojó pues sintió que esos ojos perlas las escaneaban por completo. Ella se puso lo que le entregó, le quedaba como dos tallas más grandes. Pero igual “Tiene su aroma”.

— No te preocupes te la daré lavada.

— No, quédesela.

— No…yo…

— Por favor — le dijo y ella asintió. Se lo pidió tan dulcemente. — Vamos — Le indicó a la chica que se subiera en su espalda.






3:00 pm – 30 de Agosto

— Me siento realmente feliz que Naruto-kun haya compartido su secreto conmigo. — pensaba Hinata mientras se dirigía a su cuarto, pues la habían llamado que tenía una visita. La chica saludaba a quien se pasara por su lado con una espléndida sonrisa. — Por fin me he vuelto muy cercana a él. Cada día que me visita, ve mis entrenamientos hace que quiera ser más fuerte. De alguna manera Kakashi-sensei y Rin-sensei lograron convencer a mi Tsunade-sama para que Naruto-kun se quedara. Podré tenerlo a mi lado…pero ahora entrena mucho junto con Sakura que lo ayuda en su control mental. — pensó la ojiperla. Entro a su cuarto y de la nada una sombra la abrazó.

— ¡Hermana!— le dijo una niña de doce años de edad. Una castaña de ojos perlas. Vestía una yukata en color verde agua. — ¡Hermana ya tengo la suficiente edad como para practicar! — dijo ella tan feliz. Hinata sonrió.

— Me alegra mucho Hanabi. — y la abrazó acomodándola en su pecho. — Pero sabes muy bien que me preocuparé más. — la niña infló los cachetes en señal de enfado, se separó de su hermana mayor. Esto fue gracioso para Hinata.

— Ya no soy tan pequeña…yo también quiero luchar contra los Kaiju…quiero que mi mami se sienta orgullosa de mí. — La mayor se sorprendió.

— Entonces da tu mejor esfuerzo, mi pequeña hermana. — después de esto Hanabi le informo que dormiría en el cuarto de la derecha. Su padre Hiashi las visitó y dijo que hay se iba, tenía muchas cosas que hacer en el clan.

— Quedaran al cuidado de Neji, hazle caso Hanabi. — la nombrada se sintió como una bebé. — Puedes retírate, tengo que hablar con tu hermana mayor.

— Pe-pero…— iba reclamando ella, pero su padre la observó serio. — Esta bien. — una vez que la niña salió del dormitorio el señor Hyuga se aclaró la garganta y empezó.

— Hinata voy hacer claro contigo, sé que te estás viendo con el Namikaze. — esto heló a la muchacha, estaba arrodillada igual que su padre sobre una almohadilla. El hombre sorbió un poco de té que le había servido su hija.

— Padre…yo…

— Espera, sabes muy bien que estabas comprometida con un Uchiha pero lamentablemente el primogénito falleció. — recordar esto causo melancolía en el corazón de la ojiperla. A pesar de tener a su lado al rubio, él notaba lo mal que se encontraba por la muerte de amigo…el buen Itachi. — Por consecuencia tendrías que casarte con Sasuke Uchiha

— Padre…no…— se atrevió a reusarse, ella nunca había contrariado el dominio de su padre sobre ella. Lo dijo suave pero firme. — Me gusta Naruto-kun — un silencio se formó, la joven no supo cuánto duró. Hasta que su padre habló.

— No te había contado antes esto antes pero eres el vivo retrato de tu madre— la muchacha alzó la cabeza pues u mirada estaba gacha. — No solo has heredado la belleza de mi esposa, su inteligencia y su perseverancia. Yo te observaba siempre en tus entrenamientos, como cuidabas a Hanabi, como te empeñabas en llevarte bien con Neji y te reusabas constamente a tratarlo como tu servidor…tú los trataste como lo que es, tu primo. Eso me alegra, porque de alguna cumplí la promesa que le hice a mi hermano gemelo justo antes de morir. — Hinata no creía todo lo que su padre le estaba diciendo, ella se sentía tan invisible ante su padre, pero ahora se sentía como algo transparente. Pudo notar que su padre bajaba la mirada. — Yo no fui capaz de proteger a mi hermano gemelo, no fui lo suficientemente fuerte. Ahora verte como luchas junto a Neji…tan juntos y eso me alegra.

— Padre…— ella ya estaba derramando unas cuantas lágrimas.

— Hoy vi a Neji con tu amiga

— ¿Con Tenten?— su padre asintió.

— No estoy en contra pero debes decirle que haga las cosas como se deben hacer. — ella no entendió pero igual asintió. — Y también dile al Namikaze que haga las cosas bien ya que yo quiero que mi hija llegue pura al matrimonio. — esto sonrojó de sobremanera a la chica, esto tampoco era cómodo para su padre. Pero tenía que decirse. — Si no lo cumple, yo mismo lo mataré.

— Gracias padre. — ella se levantó y abrazó por la espalda su padre. — Te amo. — besó su mejilla. El señor tan quieto como siempre, pero agradeció que su hija lo hiciera.

— Además estoy seguro que lo que dijo su madre se cumplirá. — Hinata claramente estaba confundida. — Ese pequeño tomate rojo no solo dice que lo Uchiha y los Hyugas se doblegaran ante un Uzumaki…sino que ahora su hijo se lleva a mi preciada hija. — ambos rieron.

Por primera vez Hinata Hyuga se sintió reconocida por su padre…

Por primera vez Hiashi Hyuga dejó salir todo lo que se guardaba…

Por primera vez ambos Hyugas sintieron que su lazo era más fuerte que nunca…

 

CAP #7

10: 00 pm – 1 septiembre

— Ya te he dicho que no quiero verte.

— Yo si quiero verte, Sasuke— susurró una muchacha detrás de un joven que estaba sentado sobre el balcón de la terraza del edificio de los dormitorios de hombres. — Llevas días evitándome y entrenando como loco, déjame examinarte porque sé que te torciste el tobillo.

— Aléjate mí, eres una verdadera molestia. — ella hizo caso omiso, solo se sentó en el suelo. Pasaron como media hora y ninguno de los dos se movió. — No perdonaré al bastardo de Naruto. — dijo por fin. Hubo un silencio la chica tomó aire. “Tengo que hacerlo” “Tengo que decirle.”


Flash Back

— Quizás el teme me odie, estoy haciendo todo lo posible para volverme fuerte y vengar la muerte de Itachi. Pero cada vez que me acerco, él quiere matarme. — sonrisa. — Pero Sasuke también está dolido por tu causa, Sakura.

— Por mi culpa…

— Sí, no le has dicho nada de tu pasado. Él ya sabe todo de mí, cada día en cada pelea que tenemos se lo digo.

— Yo…

— ¿No has dejado de amarlo, verdad? Pues entonces sé sincera con él, tal vez así logremos curar el vacío que dejó Itachi.

— ¿Cómo lo hacemos?— dijo la pelirrosa con su corazón latiendo a mil. El amor que sentía por Sasuke era prácticamente imborrable.

— Ero-sannin nos ayudará.

Fin Flash Back.


— Sé que no encuentras con quién enlazarte— esto causo enojo al pelinegro que bajó de la baranda y se agachó hasta que dar a la altura de la pelirrosa. La tomó por brazo tan fuerte y la miró con esos ojos tan llenos de dolor, ira y desesperación.

— Me oyes, nunca vuelvas a decir eso. Sakura. — ella tenía que mantenerse firme.

— No puedes, nadie soporta tus recuerdos, nadie soporta…

— Cállate…

— Oí que tu jaeger está muy mal porque necesita de un conductor de buena salud mental

— Cállate — le estaba colmando la paciencia, sino dejaba de molestarlo.

— Entonces el único sobreviviente del clan Uchiha no sirve para nada — había preparado las cosas más hirientes para decirle a Sasuke…pudo ver que su ojos cayeron en sumo dolor.

— ¡Cállate!¡Cállate Sakura! ¡Crees que me siento bien el haber perdido a Itachi! — la tomó de ambos codos y la levantó en forma violenta. — ¡Sabes que! Odio al idiota de Naruto por tratar de acercarse a mí, odio más cuando se echa la culpa de la muerte de mi hermano. — Sakura puso las manos sobre las muñecas de Sasuke, le dolían los hombros, el chico la agarraba fuerte. Pero tenía que soportarlo un poco más. Su corazón se paralizó cuando por primera vez en su vida…vio llorar al Uchiha. — La maldita culpa la tiene esos Kaiju, se llevaron todo lo que yo más quería. — la pelirrosa sintió que el joven no ponía fuerza entonces ella con sumo cuidado, mientras oía sollozar al pelinegro, se acercó a él y lo abrazó. Cuanto tiempo ha pasado desde que sintió el aroma de Sasuke…a un menta tan refrescante que le inundaba su pecho…tan helado como él. — Odio más cuando tú decides quedarte…odio que me aguantes…soy una mala persona para tì, Sakura.

— No, no lo eres. Me quedare a tú lado. Te lo prometo. — y así el muchacho descargo todo el dolor que le atravesaba como un puñal en el pecho. — Sasuke…yo siempre te amaré. — él correspondió el abrazo, estaban tan unidos que parecieron una sola silueta. — Tú tienes que perdonarme. — el muchacho dio una negativa con la cabeza.

— No, mi flor de cerezo. — Sakura abrió los ojos ante la sorpresa. Era la segunda vez que se lo decía. Èl tan brusco como siempre tomó su cara entre sus manos y la besó, con hambre, con desesperación como si pensara que ella desaparecería para siempre.

— Sasuke-kun — dijo con alegría…hace ya tiempo que no lo llamaba así. Sasuke sintió como su vació se llenaba poco a poco…aunque igual faltaría una pieza. Una corriente fría recorrió el cuerpo de Sakura.

— Deberías ir a dormir — ella asintió. — Te acompaño. — ella caminó pero entrelazó sus dedos con los del chico. Este sonrió con suficiencia. Llegando al cuarto de Sakura, pero sintió que no podía dejar al Uchiha solo.

— Sa-Sasuke-kun…no te vayas. — el nombrado miró su sonrojo. Él se negó pero la chica lo jaló hacia su cuarto. Él era obstinado pero ella lo era aún más. — No puedo dejarte solo…simplemente ya me cansé de verte sufrir. Pasaron unos quince minutos y ella estaba lista para dormir.

— Dormiré en sofá…

— No…conmigo.

— Sakura ya no puedo causarte más daño…— ella sonrió. Esta con un blusón rosa fuerte hasta sus tobillos, de tiras cortas en los hombros.

— Solo dormiremos…Sasuke-kun. — y en realidad solo durmieron. Sasuke dormía abrazado a la pelirrosa, sentía su aroma que lo tranquilizaba. Sakura notó que en cierto punto de la madrugaba Sasuke temblaba y decía el nombre de sus padres en leves susurros. Ella lo calmaba acariciándole el cabello. — Estoy aquí Sasuke-kun…lo estaré siempre. Ya no habrá secretos entre nosotros.



1pm

— Ya no puedo comer más…me causa nausea el pollo. — decía Hanare con un mano sobre su boca como tratando de alguna forma para el vómito. Estaba almorzando junto a sus dos amigas.

— ¿Hanare desde cuando te siente así?— preguntó preocupada Kurenai.

— Como hace una semana o algo.

— Puede ser que esté embarazada. — comentó Rin, junto a ella estaba su niño de cuatro años que disfrutaba de su comida.

— Yo…no…— Hanare estaba tan sorprendida…ella no podía. — Me alegraría que fuera eso pero ya saben que no puedo. — Ella había sido novia de Kakashi durante cuatro años donde èl estaba tan ocupado con sus misiones y el trabajo de jaeger pero ella estuvo a su lado todo el tiempo. Cuando ella cumplió veinticinco años se casaron. Y desde entonces has pasado tres años. Él la acepto a pesar de saber que ella no podía tener hijos a causa de sus fibromas.

Flash back

“Hanare, sé que no he sido buen novio estos últimos años, siempre estaba en misiones y ocupado. No te veía tan seguido pero aun así te quedaste a mi lado. Eso te lo agradezco. Siempre esperándome hasta muy tarde mi llegado, la primera en recibirme después de una lucha, la última en acostarse hasta que yo me quedara dormido. Me alegro que no te hayas ido…por eso te acepto, aunque sé que te sientes incompleta— Hanare sollozó, estaba en el altar, con su hermoso vestido de blanco de cola larga. — Pero tú para mí eres la mujer más completa y generosa que yo jamás hubiera encontrado. Por eso, te amo. — él la beso.

— ¡Sì! ¡Que vivan los recién casados!— gritaba feliz el mejor amigo de Kakashi.

Fin FLASH BACK

Hanare rió ante ese recuerdo de su difunto amigo y el día de su boda que fue de ensueño. “Pero no puedo tener hijos” ella lloró.

— Vamos cariño…no te pongas así. — la calmaba Kurenai que se levantaba y la abrazaba.

— Lo sè, lo sè. Pero lo que más que encantaría es poder darle un hijo a Kakashi…aunque sea solo uno. — Rin veía a su amiga llenarse de dolor y recordó el gran cariño que su mejor amigo le tenía a su hijo. Ambas amigas tenían sus propios hijos, Kurenai una mujer de dos años y Rin un niño de cuatro.

— Igual mañana vamos a hacerte exámenes completos para ver tu estado de salud. — le dijo Rin

— Sí — dijo Hanare. Ella se limpió las lágrimas y agradeció a Kurenai por el abrazo. — ¿Donde esta Mirai?

— Shikamaru está con ella.

— La quiere mucho— dijo Rin.

— Sí, pero a veces Konohamaru se pone molesto porque le presta más atención a Shikamaru que a él que es su primo. — todas rieron.






4 pm – Oficina de la general.

— Naruto, está haciendo un buen trabajo estos últimos días. Ya puede controlar al Kyubi. — le dijo Jiraya a Tsunade. Ella estaba sentada en la silla de su escritorio mientras bebía un sake.

— Si ya me he dado cuenta. Ese chico es más persistente que su madre y padre juntos. — ella rió. — Aunque que rapidez que se acoplaron…incluso estaba preparada para otro desastre.

— Si, Naruto sorprende a todos.

— Sasuke ha mejorado su condición pero necesita un compañero para conducir su jaeger. Él se está desperdiciando.

— Lamento mucho la perdida tan grande que sufrió la humanidad con la muerte de Itachi, pero el mundo sigue. Además creo que el Sasuke se ha vuelto más fuerte mentalmente. — Jiraya bebía también sake. — ¿Qué debemos hacer…con quien podríamos enlazarlo?.

— ¡No!— Tsunade golpeó su escritorio. — Ni pienses en ello…eso no.

— No te has dado cuenta que ella es la que más estabilidad emocional tiene entre Naruto y Sasuke…en ese aspecto de controlarse es la mejor de todos los jaeger que están aquí. Bien lo sabes. — esto enojó a la general. — Su coeficiente intelectual la ayudaría bastante. — ella se volvió a sentar y se pasó una mano por la cabeza en señal de preocupación.

— Jiraya, si la someto a eso puede revivir tan claro lo que le pasó. No quiero que su mente quede en el limbo y la perdamos. Recuerda que ella no es de una familia con puentes neuronales fuertes. Solo es una chica normal.

— Una chica normal que se has esforzado por ser la mejor y demostrando que puede hacerlo…— la rubia negó. — Ella ha entrenado a la nueva generación de los jaeger, ha supervisado cada nivel de ellos…ha visto batallas donde la vida humana se pierde y aún así ella se mantuvo fuerte. — él se levantó y caminó hasta ponerse detrás de ella colocándole una mano el hombro.

— Sakura…no quiero perderla…

— ¡Por fin! Sé que la quieres como a una hija…a pesar de que a Naruto lo conozco desde hace poco lo he empezado a querer rápidamente. — la rubia miró a su mejor amigo. — Pero Sakura realmente tiene la fuerza y la inteligencia necesaria para vencer cualquier obstáculo. Deja que se libere del peso de su corazón. — De hecho Jiraya sabía lo que tenía Sakura, que le había pasado cuando niña, eso le comentó su mejor amiga cuando ni ella mismo podía perdonar al infeliz que le hizo eso. — Entonces…déjala que se convierta en un jaeger. — Tsunade sonrió.

— Acepto, quiero ver que tan fuerte es mi Sakura.




3 de septiembre – 10:15 pm – Departamento de Kakashi.

— ¡Ya llegué!— gritó Kakashi que estaba sentado en el bordillo de la entrada del vestíbulo de su departamento mientras se sacaba los zapatos. Vestía su típica ropa de militar. Entonces sintió que alguien se aproximaba. — Buenas noches, Hanare.

— Bienvenido…— ella lo dijo con una vos temblorosa. El hombre de cabellos plateados se volteó preocupado y vio a su esposa llorando. De inmediato se levantó preocupado.

— ¿Qué tienes, amor?— la tomó de su rostro. No le gustaba que su esposa llorara. — Estoy feliz, Kakashi. Estoy realmente feliz. — esto desconcertó al Hatake. Su mujer le diò un repentino beso en la boca. Èl le correspondió también. Se separaron y ella le entregó un papel que tenía entre sus delicadas manos. — Léelo. — aún sin comprender él lo hizo. Ella entusiasmada entrelazó sus propias manos y se las llevó al pecho. Kakashi terminado su lectura se puso muy pálido, sus ojos brillaron como cuando Hanare acepto casarse con él.

— Estas…embrazada…— lo dijo para él como afirmando creyendo que fuera mentira. Ella se sonrojó. — Estas embrazada…mi esposa. — él la levantó del suelo cargándola en brazos. — Hanare gracias…gracias mi amor. — ella se abrazó al cuello varonil. — Pero…tus

— Sí lo sé. Fui con Tsunade-sama y me dijo que ella nos ayudaría en todo. — La general además de ser jaeger es también una doctora.

— Por eso es que me insistía tanto en volver temprano a casa. — no dejaban de abrazarse. — Yo te protegeré Hanare y a nuestro hijo.