Long-fic ¡desafíos, citas, celos y problemas!

Capítulo 4: ​

Un beso no le hace mal a nadie. ​

Las miradas asesinas de Gaara y Kankuro estaban pegadas a la de Shino que solo se limitó a desviar su mirada y poner sus manos en los bolsillos. Las miradas intensivas entre estos producían la tensión en el ambiente.

Naruto estaba, como de costumbre buscando los papeles de los próximos en tener citas. Kiba a su lado observaba atento a todo lo que hacía el rubio. Las caras de todos estaban atentas a los dos jóvenes quienes buscaban los papeles, estaban nerviosos; a los tres chicos que ya habían tenido citas no les había ido lo suficientemente bien.

—Bien —el rubio sacó los papeles para luego leerlos—, el siguiente es Shikamaru.

El moreno abrió los ojos muy asombrado, no quería saber con quién le tocaría, con que chica problemática tendría que cruzarse.

—La cita tiene que ser con Ino.

Las caras se dirigieron hacia el chico que solo soltó un bostezo. Que odiosamente fastidioso sería eso. Los demás se pararon del lugar y comenzaron a irse, pero él solo se quedó sentado.

—Shikamaru —su amigo se sentó a su lado—, debes ir.

—No pienso hacerlo.

—¿Qué? —Los ojos de Chouji estaban asombrados por la respuesta de su compañero— ¿Es así como te comportarás? Hasta yo lo hice, pensé que lo harías.

Sonaba enojado y frustrado, nunca había visto a Chouji así… tenía razón, no podía no hacerlo después de haber dado su palabra de entrar en el juego…

—Está bien. Iré a buscarla —dijo mientras se paraba de la banca—. Tsk, problemático.

Caminó con las manos en los bolsillos un buen rato mientras miraba al frente para poder encontrar a su compañera.

Se dio cuenta de la presencia de Kiba y Naruto siguiéndolo como si fueran invisibles, pero realmente se notaba a lo lejos que ellos estaban detrás de unas ramas.

Siguió su paso hasta encontrarse con ella. Tal cual como siempre, hace varios días que no la veía. Sus ojos verdes azulados estaban igual que siempre y su esbelta figura siempre tan sueva y blanca. Su cabello rubio era empujado por el aire y ella se tomaba el flequillo con una mano.

—Vago —le dijo mientras se acercaba—, ¿qué haces?

—Esto… —contarle la historia sería una vergüenza delante de ella— estaba en… nada.

Ella lo miró algo confundida, estaba extraño. Cada dos segundos miraba hacia otro lado, para evitar la conversación.

—Shikamaru —su voz estaba ronca—, ¿qué sucede?

—Nada, es solo que —paró en seco lo que diría, la había encontrado. Estaba peleando con Sakura— ahora no puedo, tengo que irme.

Pasó de largo y se dirigió hacia la rubia que estaba sola esta vez, después de que Sakura se fuera hecha una furia.

—¡Ino! —le gritó para que no se fuera antes de alcanzarla.

—Shikamaru —la chica lo miró con una sonrisa en la cara—, ¿qué sucede?

—Esto… —no sabía que decirle— acompáñame a la pradera.

La rubia solo asintió con la cabeza y lo siguió mientras él caminaba.


Naruto y Kiba miraban atentamente lo que sucedía, no le había costado nada al moreno pedir una cita, era rápido. Detrás de Naruto y Kiba venía Temari, no quería meterse en la vida de los demás, pero era raro ver al moreno así, con una chica a solas y a Naruto y Kiba siguiéndolo. Aquí había gato encerrado.


Algo tenía que hacer, pero la verdad le daba algo de flojera tener que salir con una chica así que se limitó a soltar un bostezo. Ella lo observaba atentamente, realmente su compañero era extraño, nunca la había traído a la pradera; algo se traía entre manos.

—Bien, dímelo —le dijo mientras lo miraba pícaramente y el solo abrió lo más que pudo sus orbes negros.
El moreno se puso la mano en la coleta sin saber si decirle o no, esto realmente se ponía complicado.


Temari se acercó a Kiba y Naruto, se paró atrás de ellos y se inclinó a su lado para observar e interrogarlos.

—¿Qué sucede?

—Yo también quiero saber —la voz de Sari se escuchó al lado de la de Temari.

Ahora estaba aún más confundida. Los chicos se dieron vuelta y vieron a las dos chicas, ambas mirándose fijamente.

—Shikamaru e Ino tienen una cita —dijo Naruto mientras se reía.

—Imbécil, no tenías que decirlo —lo golpeó Kiba en la cabeza.

¿Una cita? ¿Desde cuando ese vago inservible tenía citas?



—Está bien, te diré —le comenzó a decir Shikamaru a la rubia—. Esto es un desafío, tener una cita contigo y salir bien parado de esta.

—¿Eso es todo? Me lo hubieras dicho antes… —la chica solo soltó una risa y se acercó a él— soy una buena actriz, no te preocupes, yo te ayudo.

Dicho esto, la rubia solo tomó al Nara por la chaqueta verde y lo pegó a sus labios, dándole así un beso que el moreno no esperaba provocando las miradas sorprendidas de todos los que se encontraban detrás de los matorrales.


Bien, hasta aquí llego con este capítulo ^^ Odio esta pareja, con toda mi alma, pero que se le va a hacer así quisieron los papeles u.u
1.- ¿Qué les pareció?
2.- ¿Alguna parte favorita?
3.- ¿Creen que Ino sienta algo por Shikamaru?

 

Capítulo 5: ​

Degenerado.​

—Bien, ya se han ido los que estaban espiándonos— dijo la rubia mientras se removía el pelo y se alejaba del moreno—. Ha sido un magnifico engaño jeje. Bastó con tapar nuestras bocas con mi cabello para hacerles creer que nos habíamos besado, son unos inútiles.

La muchacha reía muy divertida, pero al moreno no le parecía muy divertido lo que acababa de hacer su compañera. Seguramente ahora todos hablarían de él e inventarían cosas que no eran ciertas sobre él e Ino.

—Que problemático.

Dicho eso el moreno partió a su casa despidiéndose de su compañera. Solo quería llegar a dormir y descansar, nada más.



Al día siguiente se encontraban todos sentados en las bancas, como siempre. Naruto y Kiba solo se miraban y miraban al Nara mientras pensaban en lo pasado el día anterior.

Flash – Back

La rubia se acercó lentamente y puso su mano por el cuello de Shikamaru provocando que su pelo callera por encima de los brazos del moreno.


—¿Qué haces? —susurró por lo bajo el moreno mientras la observaba atentamente.


—¿No querías que te ayudara? —Intentó no mover la posición que había adoptado a cinco centímetros de los labios del hombre que tenía en frente— ¡solo quédate así unos segundos más!

Los dos jóvenes observaban atentos la imagen entre el moreno y la rubia. Era una imagen que para algunos valía oro, pero para otros simplemente era algo común que sucedía todos los días.


—Oigan, salgamos de aquí —la rubia de las coletas observó de reojo y comenzó a darse la vuelta—. La gente normal no espía la intimidad de otras personas.


—P-pero… —la chica del pelo café fijó su mirada en los jóvenes y luego se dispuso a caminar detrás de la blonda.


—Temari tiene razón, después de todo ya vimos lo suficiente. —Las palabras de Kiba fueron suficientes para que Naruto se pusiera en pie para irse con ellos.


Flash – Back

—Está bien, por primera vez en este desafío hay alguien que ha podido superar la cita —dijo el chico moreno mientras su perro le ayudaba—, ha sido Shikamaru.

Los ojos de todos voltearon a él provocando que volteara la mirada algo enojado y frunciera el ceño.

—¡No importa, no importa! —Gritó de repente el rubio de los ojos azules— ¡Yo seré el próximo en tener una cita de sueños, ya lo verán!

Algunas risas salieron de las bocas de sus compañeros mientras el rubio comenzaba a sacar rápidamente la bolsa de los nombres con las ganas de salir él para tener una cita, ojala fuera con alguna chica muy sexy y linda.
El rubio sacó contento los papeles, pero al sacarlos solo hizo una cara de desaprobación y se cruzó de brazos mientras dirigía su mirada indignada hacia el cielo.

—Los siguientes son— el chico del pelo café le quitó los papeles a su compañero rubio mientras los leía—, Sai debes salir con Temari.

Los ojos del chico del pelo negro estaban muy abiertos y expresaban sorpresa, realmente apenas sabía cómo comunicarse con los más cercanos, no tenía idea que decirle a una mujer en lo absoluto.
La mirada asesina de los hermanos Sabaku No estaba pegada a él, haciéndole saber que no tenía posibilidades con la rubia ni aunque él quisiera.

Apenas se supo quién era el siguiente, todos se fueron del lugar a sus hogares, menos algunos… Naruto y Kiba iban detrás de él, siguiéndolo. Los hermanos de la arena estaban caminando por las calles de Konoha, no muy cerca de él, pero tampoco muy alejados. Y algunos de los chicos observando a lo lejos, no los pudo distinguir, solo supo que eran dos y estaba en la pradera.

Vio a lo lejos a la blonda sentada en una banca tranquilamente, se había terminado recién su pan de arroz y ahora se estaba poniendo en pie.

—Esto… —estaba nervioso, era obvio. Nunca había hecho nada igual— ¿puedo acompañarte? Solo si no te molesta claro…

La chica lo observó fijamente, realmente era extraño, aunque de todas formas le caía bien, incluso a veces le daba algo incomodidad dejarlo solo. Era una persona como cualquier otra, solo que intentaba acercarse a los demás y eso no tenía nada de malo.

—Como quieras, no tengo problema —Solo le dio una sonrisa para intentar sacarle la tensión al ambiente.


—Malcriada —pronunció Gaara mientras observaba a su hermana fijamente—, se atreve a caminar con cualquiera por la calle —su hermano solo asintió con la cabeza mientras lo seguía de cerca.

—Shikamaru, ella aceptó salir con él —dijo Chouji mientras volteaba la cabeza rápidamente para despertar al moreno que dormía en la pradera.

—¡Imposible!

—Naruto, no es tan malo como dijiste —dijo Kiba mientras se escondía entre las tiendas de la aldea.

—Todavía no ha empezado —el rubio soltó una risa eufórica mientras seguía caminando al lado de su compañero— ¡Ahora viene lo mejor!

Kiba se pasó muchas cosas por la mente, quizás Sai era muy bueno teniendo citas, incluso mejor que él. ¡No, eso no podía ser! Quedaría en ridículo si alguien como él tuviera una mejor cita, no se la podía creer, ese energúmeno, ¡un chico más atractivo que él!, estaba a punto de soltar las lágrimas cuando…


—Déjame decirte algo —el chico del pelo negro sacó un libro y leyó detenidamente dos líneas y lo volvió a guardar.

—Dime… —dijo la rubia mientras lo observaba atenta, le costaba comunicarse se le notaba, incluso debía leer para no ponerse nervioso, por un momento llegó a pensar que eso era algo tierno para un adolecente.

Las miradas de los seis jóvenes que estaban observando se voltearon a los dos jóvenes que estaban parados a mitad de calle. Sai le diría algo y Temari hoy estaba de buen humor, eso era malo, quizás se dejara llevar por un par de palabras lindas que le dijera Sai y…

—¿Quieres ver un pene grande?

La mirada de Kiba ya no era de curiosidad ahora era de asco, asombro y muchas otras expresiones imposibles de decir. Naruto solo se burló escandalosamente. La mirada asesina de los hermanos de la arena le deseaba la muerte al chico del pelo negro mientras se dirigían a él rápidamente.

—¡Bastardo, a una mujer no se le dice eso! —el moreno de la coleta se paró lo más rápido que pudo seguido de su amigo Chouji.

Pero nadie llegó a la hora al lugar donde se encontraban los dos jóvenes. El chico del pelo negro ya tenía dibujado en su rostro el zapato de Temari.

-PIERDETE.

Realmente estaba enojada, pero no tanto como sus hermanos que llegaron en milésimas de segundos dándoles las dos patadas seguidas. Pero eso no era todo en su cara se dibujó un combo dado por el moreno de la coleta y una mordida de perro hecha por Akamaru.

Temari vio el libro tirado en el suelo y lo recogió, algo curiosa leyó el libro: “Hacer feliz a una mujer eróticamente.”

Realmente ni siquiera sabía elegir libros.

Bueno lo dejo hasta aquí para no hacerlo taaaan largo ^^ Espero que les halla gustado