Jealously

La Xtabay forma parte de las leyendas mayas del estado de Yucatán, se cuenta que como la cegua o la Deer woman usa sus encantos sobrenaturales para llevar a hombres a su perdición


Susurros en la jungla, la naturaleza me rodea mientras la noche engulle la luz rojiza del atardecer, la humedad en el aire me da escalofríos y crece la atención en mi interior, ya ha pasado mas de una hora que me aleje de tu lado y sin conocer el terreno, estoy inevitablemente perdido.
Camino sin detenerme, espero realmente encontrar algo conocido, ese pequeño orgullo masculino, consecuente de mi abuelo me hace repetir como si alguien me escuchara.

— Espero que estés segura, espero que lo estés.

Aunque la realidad es que soy yo quien temo por mi, ¿como te podría ocurrir algo si este es tu hogar? vienes tanto a aquí en viajes escolares, practicas y demás que debes de notar si una hoja se a torcido hacia el otro lado. No es que le tema a las arañas, serpientes, caimanes o cocodrilos no estoy seguro de que son, estaba perdido en tus labios danzarines y en como se flexionabas al hablar que termine por perderme eso y la instrucción de que hiciera si me perdía, curiosamente no me arrepiento.
Escucho un sonido, me giro pues estoy seguro que detrás de mi hay alguien, esa sensación en la nuca que surge cuando estas escribiendo algo en la computadora o en el celular y tu mamá a ido por enésima vez si te encuentras bien, cuando la realidad es que solo busca ver que es lo que haces.
Un pájaro sale de un árbol y me hace caer en algo blando con las rodillas que espero con todas mis fuerzas sea lodo, estoy por levantarme sintiéndome estúpido, cuando la veo: Sus ojos grandes y esa mirada sugerente, sus labios de un intenso rojo, carnosos e incitantes, su cabello cae de forma coqueta y con una pose incinuante se acerca a mi, es una mujer hermosa.

—¿Estas solo guapo?— pregunta con una voz empapada de seducción.

—Yo...

—Te haré compañía— declara y se inclina hacia mi acercándose demasiado.

Parte de mi me indica que me entregue a lo que siento, no es como si emergiera de mi este deseo, es como si algo más lo manipulara e hiciera que me arrastrara él, pero en mi interior algo lo enfrenta, me impregna culpa, me lleva a sentir temor, esto no esta bien y no solo por que tiene un extraño y sobrenatural presagio rodeándolo, si no por que todo esto, el que yo haga algo así con alguien, solo existe una sola persona con la que lo haría y este sentimiento me defiende a ser arrastrado a lo que sería mi perdición.

— ¡Quítate de encima de él maldita!— exclama precisamente de quien hablo y la golpea con un tronco en la cabeza haciendo que se impacte contra un tronco.

Es entonces cuando los hermosos rasgos de aquella mujer desaparecen, dejando en su lugar un rostro deforme, frió e inexpresivo, libre de su hechizo seductor me levanto y voy al lado de mi novia.

— Sabia que era la Xtabay...—le indico.

—¿Es la Xtabay?, mira si, lo es...vaya...

La criatura ruge para intimidar, pero basta que mi chica levante la ceja y empuñe de nuevo el mazo para que ella sea la que retroceda y desaparezca entre los arboles.

Entonces me giro hacia ella, sus ojos almendrados debajo de esas gafas, sus tiernos hoyuelos surgiendo de las mejillas, sus labios de un tono rojizo ahora mismo sin maquillar, su pelo tan lindo cayendo aunque esponjado inigualable, nada mengua su belleza, ni llevar todo el día aquí, vaya, es preciosa, sus piernas, su forma de mirar, esa tierna mano tan delicada acercándose a mi para darme una bofetada, espera...eso no es bueno.

Por unos segundos queda marcada en mi mejilla y me mira con un gesto molesto que igual me parece un tanto encantador.

— Eso fue por dejarla llegar tan lejos, mira que estar sobre ti...— me dice con un gesto que esconde una sonrisa— y esto...— me besa lentamente jugando con mis labios— ... es por resistirte, ¿en serio te gusto tanto?.

—Como no te imaginas, mira que resistir magia de una criatura mitológica por solo pensar en tus ojitos.

—Eres un lindo— concluye y me da la mano.— ¿hueles eso?

<<—Demonios, no es lodo lo de mi rodilla— pienso en silencio.>>