Familia... destructora.

Extrañamente todo estaba en silencio y tranquilidad, lo que asustaba de sobre manera a la ciudad, ¿Qué estuvieran tranquilos y callados? ¿Ellos?. Quienes pasaban frente a ese gran edificio salían corriendo, no era un gremio, era un bar... con los mejores magos del mundo.

Pero para ellos, que eran miembro, no era solo un gremio, no... era el hogar de todos y cada uno de ellos, crecieron en el y junto a ellos estaba al único hombre que consideraban como su verdadero padre. Por ello estaban ahí, esperando que aquella persona apareciera.

—Ara, Ara el maestro se está tardando mucho —comentó una albina con su peculiar despreocupada sonrisa y su mano en la mejilla. Mirajane.

—¡Mocosos! —se escuchó el gran estruendo al abrirse las puertas de golpe.

—¡OH ya llegó! —fue la exclamación en general de todo los miembros del gremio.

—¡El consejo está enojado! —todos tragaron en secó y se miraron unos con otros. Eso explicaba su desaparición, por varios minutos se hizó el silencio hasta que el pequeño hombre suspiro— ¡Que me importa! Vamos a celebrar su 200 llamadas al consejo —exclamó feliz.

—¡Si! —gritaron todos levantando sus copas de cerveza.

El gremio volvió a sus andadas, se podían escuchar gritos, madera crujir y romperse, metal chocar entre si y sin contar con el hecho de la magia. Makarov Dreyar, el actual... y al parecer único maestro sonrió agradecido de tener en su gran familia a esos “mocosos”.

There's no money, There's no possessions,
Only obsession, I don't need that shit,
Take my money, Take my obsession, ​

Como el padre de todos tenía el deber de cuidarlos, enseñarles y llevarle por el actual camino en el que ahora estaban, sabía que ellos hacían lo correcto... aunque algunos destrozaban todo en su camino... bebió un sorbo de su cerveza y miró a su lado. Una gota de sudor recorrió su cabeza.

—Ésto va a costar mucho —pensó resignado. Su hermoso gremio volvía a ser destrozado por esos mocosos. —¡Deténganse inconscientes! —gritó saltando de un pie y luego el otro— Si siguen así destruirán el gremio...

—Na, na abuelo... eso no importa— decía el peli azul en ropa interior— ¡Natsu devuélveme mis interiores! —gritó al darse cuenta lo que el peli rosa hizo.

—Jajaja eso nunca hielito —se burló el peli rosa divertido mientras quemaba dichos interiores.

—Grey sama desnudo...—murmuraba la peli azul con corazón por ojos— Grey sama...

El maestro suspiro sentándose resignado, ya no podía hacer más, le importaba muy poco lo que hicieran sus mocosos. Eran revoltosos, ruidosos, molestos, fastidiosos.... no son el ejemplo a seguir.

—Bueno... no importa —se cruzó de brazos y durante lo que quedaba de día observo con cautela lo que hacían sus revoltosos— ésto es ser una familia...

Y él lo sabia, no había dinero, joyas, piedras preciosas, diamantes y oro que pudieran comparar a ese fuerte lazo que tenían todos como una gran familia del gremio Fairy Tail.... ¡Pero eso no significaba que debían destruir su hermoso gremio!

—¡Mocosos, limpie esté desorden!.
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Actividad: Actividad - Una canción, un drabble | Página 3
Canción: Papa Roach - Between Angels And Insects
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