Una nueva etapa.

Síp, empieza una nueva etapa en mi vida y, aunque tenga muchos sentimientos negativos ahora mismo, en el fondo, estoy emocionada.

No sé porque pero cuando entro a este blog, me apetece contar lo que me sucede. Normalmente, cuando por la noche me pongo más triste, al día siguiente intento pensar como si nada hubiese pasado y lo tomo todo con nuevas energías, me guardo lo triste e intento olvidarlo.

Pero hoy no, hoy me apetecía contarlo. Tampoco creo que alguien lo vaya a leer so qué más da.

Como algunos sabrán, o a lo mejor no, pero es raro porque yo soy muy pesada con los temas, he acabado bachillerato y por lo tanto es momento de empezar la universidad, esa nueva etapa que tanto tiempo llevo esperando.

Y hey, también soy muy pesada con esto pero ¡oh! llevo desde 4º de la ESO muy segura de querer estudiar traducción. Ahí me di cuenta que quería estudiar idiomas, que yo quería estudiar traducción, y decidí que así sería, a pesar de que todo el mundo me dijese que era difícil y que era mucha nota. ¡Qué demonios! ¡Yo podía con eso y más!

Y pude, realmente, pude, pero no fue suficiente.

Ya he contado mi opinión al respecto pero creo que es momento de dejarlo escrito, para dejar constancia siempre, porque me expreso mejor así, porque me siento más segura... porque necesito desahogarme completamente.

No sé.

No sé que he debido hacer mal o que ha pasado para merecerme esto pero en fin. Vale, no soy la hija perfecta, ni la alumna perfecta, joder, no soy una buena persona y yo lo admito. Nunca he dicho esto por querer escuchar lo contrario, no, yo siempre he pensado que no soy una buena persona, hay muchas cosas que hago y que sé que no están bien, lo sé.

Aun así, no sé, destino o lo que sea, tenía una ilusión, una ilusión muy grande, tenía ganas de llegar a ser eso. Iba a estar bien, ¿no? Estar en la carrera que quería y... ¿además siendo una de las más altas de Granada? ¡Joder que chollo! Si conseguía eso, no solo estaría feliz si no que la gente podría estar orgullosa, no sé, mis padres lo estarían, yo estaría orgullosa de mí misma por una vez en mi vida.

Pero nope.

Claro que nope.

Quizás sí fue culpa mía, quizás tuve que estudiar más, quizás un poco más de esfuerzo y hubiera superado a esas 6 personas. Quizás...

Pero nunca lo admitiré, no delante de las personas que quiero y que quiero hacer orgullosas. No, nunca admitiré que, en el fondo, sé que es mi culpa, que tenía que haber hecho más, porque podía más.

No, yo seguiré diciendo que ha sido por quitar plazas para el doble grado. Parece lógico al fin y al cabo: si hubiera habido más plaza, hubiera entrado, ¿no?

Quizás no. Quizás todo estaba destinado a que no estuviese ahí.

Pero hey, me alegro por esas 83 personas que han sido capaces de sacar más de un 12,7. Hey, en serio, felicidades, os lo merecéis. Seguramente habéis trabajado más que yo por conseguir esa nota, y si no la he alcanzado, es por algo, desde luego.

No os echo la culpa, en el fondo, no se la echo a nadie, solo a mí.

Pero bueno, no pasa nada, aquí estoy, ya me he matriculado en estudios ingleses. No es con lo que he soñado, pero algo se puede sacar. Y es una carrera, de qué me puedo quejar, hay gente que ni puede entrar en una, ¿no?

Y sin embargo, ahí estaba yo anoche, a las 6 de la madrugada, no pudiendo dormir y con las lágrima llenando mis ojos. Y sinceramente, ni yo sabía por qué pero estaba llorando.

Es estúpido, lo sé, pero me afectó.

Fue duro para mí.

Sí, lo sé, yo lo decía, sabía que iban a aceptar a pocas personas, sabía que no iba a entrar pero... soy estúpida, no hay más. Soy una estúpida ilusa, que a pesar de decir eso, en el fondo... en el fondo seguía esperando un milagro. Pero erala definitiva, y ya no podía esperar más.

Y todas esas esperanzas, las pequeñas esperanzas que aun albergaba, se desvanecieron en un abrir y cerrar de ojos.

Y estaré siendo exagerada, no lo dudo en ningún momento, pero cuando una cosa te sale mal... ¿no empiezas a pensar en todo lo demás que te sale así? Porque... eso me pasa a mí.

Y sí, a las 6 de la madrugada me encontraba llorando porque me sentía alguien inútil, alguien de quien no sentirse orgulloso, alguien que solo decepciona y... sinceramente, me sentía muy mal.

Quiero decir, normalmente tengo una mala opinión de mí misma, pero anoche... no sé. No suelo llorar por esas cosas, y ahí estaba, llorando.

Quise pensar que la regla tenía la culpa.

Sea como fuere, creo que estoy mejor.

Hoy he ido a hacer la matrícula, el lugar es agradable. La gente parece simpática, pero conociéndome, será difícil adaptarme. Aunque eso en cualquier lugar, soy como soy.

Me he despertado mejor, sí, aunque sigo sintiendo cierta pena. Sigamos echándole la culpa a la regla, ¿sí? Y, no sé, sí, me siento emocionada. Triste, decepcionada, cansada... sí, pero emocionada, también. Tengo expectativas. Aunque no sea con lo que soñaba, quizás es suficiente para ser feliz. Quizás, ¿quién sabe?

¿Algo más? Creo que nada más.

Personita que has leído hasta el final, si es que hay alguien, siento que hayas tenido que aguantar eso, me alegro de que seas tan fuerte~
Y quiero recalcar, porque no me gustaría ser ese tipo de persona, esto no lo hago por llamar la atención ni por recibir palabras de ánimo, no, porque he recibido bastantes y lo único que han hecho ha sido ilusionarme más cuando no debían. No, lo único que quiero es desahogarme de una vez, escribir aquí lo que no soy capaz de decir nunca a nadie, y sentirme un poco mejor conmigo misma, si es posible.

Oye, quizás empiece una nueva etapa en muchos sentidos, no solo académico.

Eso sería lindo.