Sobre Venus

Vertientes van y vienen en un vago sentido del humor, sintonizándose en la vibración del motor del deseo del ente a seguir... entre burlas y consejos mal dados sobresaliendo el ritmo fuera de control de un temible y loco soñador, que busca la paz dentro de la nostalgia y la duda en la bulla, más sin embrago pudiéndose librar de heridas agonizantes, entra sin pensar al corazón del espinal, sacrificándose en un acto estúpido de amor, solo por alcanzar una vez mas al monte venus que puede oler su excitación desde el descanso de este.

En busca de sexo, con un poco de alcohol buscando a la venus con un libre e indomable motor con un arnés y una cuerda floja arriesgando todo por un cielo inalcanzable para los mortales, pero para un espíritu de fe no será imposible...tocando así la punta del Zeus.

Bufándose en su cara del placer humano de no solo por tener sexo con alcohol, si no tener sexo con amor y la embriagues del alcohol con el alucinante humo de un cigarrillo a medio terminar una noche de Total amor.