[Reto Febrero] Ori and the Blind Forest

¡Hola! Recientemente me apunté a la actividad de retos de videojuegos de Nao Sharp. Para poneros rápido en contexto, debemos escoger un videojuego en base a una serie de retos mensuales, y este mes los dados dictaminaron que debía jugar uno con temática de fantasía. Tenía pendiente desde hace tiempo este jueguito, así que escogí para el mes de febrero al buen Ori.

Aviso: Ninguna de mis reviews contendrán spoilers de la trama.

• Reto: Jugar a un videojuego relacionado con la fantasía o la magia
• Videojuego: Ori and the Blind Forest
• Plataforma de juego: Steam (También está en la Switch y en Xbox one)
• Horas de juego: 12 horas

¿De qué trata?

Nos situamos en el bosque mágico de Nibel, un lugar donde los elementos de agua, viento y calor confluyen de manera armoniosa, llenándolo de vida. Nuestro narrador será la voz del Árbol del Espíritu, que durante una fuerte tormenta verá impotente cómo el viento arrastra a uno de sus hijos, pequeñas motas de luz esparcidas sobre sus ramas, hasta perderse en las profundidades del bosque.

Ese es nuestro pequeño Ori. Un espíritu guardián del bosque de Nibel que despierta lejos de casa, asustado y confuso, y será encontrado por una amable criatura llamada Naru, que lo adoptará como su propio hijo. Juntos viven una austera y feliz vida en familia, hasta que tiempo después un cataclismo asola el bosque, y los suministros de alimentos comienzan a secarse y perecer. La tierra se vuelve infértil, y los árboles ya no ven sus frutos crecer.

Motivado por la llamada del Arbol del Espíritu y la necesidad de sobrevivir, nuestra pequeña criatura se unirá a Sein, la Navi luz y los ojos del Árbol, y ambos comenzarán su aventura para restaurar el bosque de Nibel. Para ello tendrán que recuperar los elementos que fueron sellados durante el cataclismo, paralizando con su detención el flujo de la vida en el bosque, para lograr traerla de vuelta.




¿Cuál es su mecánica?

Ori and the Blind Forest es una mezcla entre plataformeo y metroidvania, aka un subgénero de videojuegos donde nos encontramos con un mundo abierto por el que podemos avanzar de manera no lineal. Ori avanzará por el amplio bosque de Nibel acompañado únicamente de Sein, un haz de luz con el que podremos lanzar rayos para abrirnos paso entre los enemigos. Comenzamos siendo muy, muy débiles, y muchos de los caminos de este enorme mapa estarán sellados al principio. La gracia de esto está en la obtención de habilidades y mejoras, que volverán más sencillo el paso por el mundo a la vez que nos abrirán más caminos con el tiempo.



Un ejemplo de estas habilidades puede ser la capacidad de trepar, volar, dar saltos dobles y similares, que nos ayudarán a llegar a zonas que en sus inicios nos parecerían inalcanzables.

De momento es bastante similar a lo que podrían ofrecerte otras entregas, como el propio Hollow Knight, pero algo que me pareció un plus es la mecánica de añadir a las habilidades generales (las de la imagen de arriba) un sistema de habilidades extra, en el que podrás invertir a gusto del consumidor en aquellas que tú y solo tú consideres más útiles durante tu propia aventura.



Este árbol de habilidades se encuentra dividido en tres ramas, enfocadas cada una de ellas en áreas distintas.

• La línea azul se especializa en habilidades que te ayudan con el movimiento de tu personaje dentro del juego; te otorga un tripe salto en el aire, una barrera que hace que los ataques hagan menos daño, poder respirar bajo el agua son algunas de ellas.
• La línea morada se especializa en facilitarte la exploración. Para aquellos que quiere completar todo al 100% les aconsejo que inviertan en ella; te permitirá ver los items que aumentarán tu maná y tu vida desperdigados por el mapa, así como salas secretas y demás bonificaciones varias.
• La línea roja está enfocada en el ataque, la fuerza y la potencia de tus diversas habilidades generales.

Para poder desbloquear estas habilidades especiales, a diferencia de las generales que te las va dando la propia historia a través de árboles sagrados, tendrás que conseguir vínculos de alma. Estos vínculos de alma se forman con la experiencia que te otorgan los enemigos, así como también te la dan pequeños nucleos de alma que hallarás en tu exploración por el mapa. Al principio cada habilidad cuesta 1 vínculo, pero con el tiempo pasarán a costar 2, ¡o incluso 3, en sus fases finales! El juego está hecho para que, si farmeas por todo el mapa, puedes desbloquear todo el árbol al completo. Pero eso no quita que debas pensártelo bien a la hora de escoger.

¿Qué habilidades te convienen tener en early game para hacerte la experiencia más fácil? El juego te lo deja a tu criterio.





Valoración personal

Ori and the Blind Forest tiene todo lo necesario para vivir una experiencia Disney. Es un juego de aspecto infantil, de colores vivos y con una de las mejores bandas sonoras que vas a encontrarte en mucho tiempo, y que carga consigo un significado profundo de superación, autodescubrimiento e independencia del núcleo familiar. Tiene una gran carga sentimental, y para mí compite con UP en eso de darte una primera cinemática inolvidable. Hace que les tomes cariño tan pronto que es absurdo.



Ori es una criatura adorable. Su aspecto pequeño e indefenso ayuda al jugador a meterse en la vibra de los metroidvania, en ese inicio desde cero, perdido en un mapa que puede resultar abrumador por su extensa amplitud. No somos más que una pequeña mota de polvo en comparación, pero debemos movernos y luchar por sobrevivir. Los enemigos nos golpearán bien con proyectiles, bien abalanzándose contra nosotros rodando o saltando, y deberemos medir bien nuestros pasos si no queremos morir una y otra vez.

Y créeme, vas a hacerlo. Muchísimo.



No te dejes engañar por su aspecto aniñado y su historia fantástica y espiritual; este juego va a poner a prueba tu tolerancia a la frustación y tus reflejos. Lo bueno es que contamos con un autoguardado que puede ser usado casi siempre, siempre que tengamos el maná suficiente como para crearlo, claro (y no encontrarnos cerca de enemigos o en suelo inestable). En definitiva es un juego con cierta dificultad y te va a hacer repetir áreas en multitud de ocasiones hasta que termines memorizando los patrones por completo.

La dificultad de los minibosses es irrisoria. De hecho, ni siquiera considero que los haya. Tienes pequeñas pruebas, pero el verdadero "boss" en sí es el propio bosque. Me explico.

Para restaurar los tres elementos tenemos que conseguir las piedras donde se encuentra sellado su poder. Cuando lo restauras, el bosque reacciona de forma frenética ante dicho elemento, y te verás envuelto en un escape contra reloj que te llenará de adrenalina y donde serán puestos a prueba tus reflejos más que nunca. Sinceramente son las partes donde más he sufrido, pero que más me han maravillado con diferencia. La música de fondo la sigo teniendo en bucle en mi cabeza; tiene un aire esperanzador que te anima a darlo todo por salir de allí con vida.



La historia esta... ¿bien? Me gusta el worldbuilding de Nibel y sus árboles sagrados; antiguas almas que ya no están con nosotros y que le brindan a Ori un último soplo de aquel que fue su poder antaño. Sein le explica como buen guia a Ori todo lo que sabe de estas almas, y le dan ese rollo fantástico que gira constantemente en torno a la naturaleza y su preservación.

Pero en cuanto a la consecución del plot igual esperaba mucho más. Ahí es donde se ve que es un juego más aniñado, más de cuento de hadas, si bien no deja de ser muy tierno y emotivo en el fondo. Experiencia Disney, vaya.



No tiene nada de contenido postgame, y eso es algo que me ha disgustado un poco. En la partida podemos conseguir, como os digo, farmear vínculos de alma para obtener todas las habilidades del árbol, así como vidas y puntos de energía (el maná, vaya). Lo que pasa es que tú eres el que decide cuánto vas a querer dedicarle a mejorar esto; con solo dirigirte a desbloquear lo más general e imprescindible de cada área del mapa para poder avanzar en la historia y tener las habilidades generales es suficiente para finalizar el juego. Yo, como con todo, quería dejar este mapeo intenso un poco para el final...

...y me encontré con que el final era ese, y que había ido con 4/12 vidas desbloqueables y 7/12 puntos de energía desbloqueables. De las habilidades del árbol ni hablemos, que solo completé la linea azul, la mitad roja y la morada ni la toqué.

Tenía ganas de ir a lo speedrun y jugar modo difícil, se ve- *esconde su más de 700 muertes QUE ENCIMA EL HDP DEL JUEGO TE CONTEA*



También decir que me enteré tarde que en la edición remasterizada del juego, que es la que jugué, hay dos habilidades extras que no te las da el juego, son parte de contenido adicional (cabrones-). El caso es que nada más empezar la partida, en 10 mins puedes obtener una de estas, que es un dash que te va a solucionar por completo la vida el resto del juego.

Os lo digo para que no cometáis el error de esta pendeja y vayáis más smooth por el mapa uvu Si queréis, si no podéis ir a lo bruto como yo, bienvenido sea (?)

Por último decir que pese a la longitud del mapa y lo chiquitillo que eres, Ori es bastante ágil y te vas de una punta a otra con más rapidez de la que esperaba. Lo malo es cuando tienes que pasar por zonas escabrosas, pero nada que la práctica no haga... ¿verdad?





Valoración

• Aspecto gráfico: 9/10
• Banda sonora: 9/10
• Mecánica de juego: 7/10 (lo bajo un poco porque no tiene postgame)
• Historia: 7/10
• Dificultad: 8/10

Total: 8

Lo recomendaría totalmente a todo el mundo, sí. Es un juego que se debe probar alguna vez en la vida, y que siento que tiene ese soplo de aire fresco a lo que es el concepto de metroidvania en sí. Tiene combinaciones poco vistas, que funcionan sorprendentemente bien, y una historia que te envuelve desde el primer momento.




¿Y tú? ¿Has jugado a este juego o tienes planeado hacerlo en un futuro? Si ese es el caso, espero que esta review te haya ayudado a decidirte finalmente.

Nos vemos el mes que viene <3