Otro "cosas sobre mí" profundo para la colección

Viendo que mucha gente aquí en FFL está haciéndolo, me quiero sumar a esta iniciativa de hacer un "x cosas sobre mí" mucho más íntimo y personal. Como bien decía en su entrada Liza, hacer esto me parece bonito, más aún cuando te sumas a otrxs que ya lo han hecho. Demuestra, de algún modo, confianza. Y siempre es bonito devolver la confianza, ¿no?

Así que vamos allá. No sé si haré 20, 30, 50 o 100 cosas, ya iremos viendo. ¡Lo que salga!

Spoiler: al final fueron 30 (?


1- Considero que he tenido una adolescencia de mierda. Y muchos factores han contribuido a ello, pero vaya... que los años de instituto, concretamente, han sido horribles para mí. Me sentí atrapado en un mundo de apariencias y de estereotipos que no encajaba para nada conmigo.

2- Ahondando más en este tema, no diría ni por asomo que he sufrido bullying, porque no ha sido el caso; pero sí que lo he pasado mal en momentos puntuales. Nunca fue un acoso, pero he vivido ciertos momentos en los que personas que no conocía de nada me gritaban "¡Marica! ¡Se te ve la pluma!" por la calle, o que incluso un compañero de clase que (pese a ser radicalmente opuesto a mí) consideraba amigo en ese momento se mofase en mitad de toda la clase por ese mismo motivo.

3- Mis padres son los mejores padres que podría pedir, más amigos que otra cosa, y mi familia en general siempre ha sido buena conmigo y me han brindado mucho apoyo. Pero, con todo, nunca fui capaz de contarle a alguien cuando era más joven cómo me sentía en todo este sentido. Ni mi sexualidad, ni el hecho de que me sentía ahogado completamente en la microsociedad que había en el pueblo donde me crié... sí, contaba alguna cosa puntual a mis padres, pero os digo que, si ellos sabían por lo que estaba pasando, era solo porque me conocían demasiado como para que no se me notase.

4- Y en parte, lo anterior es porque yo creía que estaba bien. Del mismo modo que creía que era hetero. O sea, no me malinterpretéis, yo tuve mis primeros contactos sexuales con chicos, me atraían sexualmente los chicos, y era perfectamente consciente de eso. El punto es que me lograba autoengañar TANTO que yo de verdad creía lo contrario. Era una situación en absoluto sana, en la que yo había creado una burbuja de mentiras a mi alrededor tan, tan grande, que me la creía yo mismo. Hasta el punto de que, respecto al tema de la sexualidad, llegaba a forzarme a mí mismo a ver porno hetero, a sabiendas de que no disfrutaba con eso.

5- De hecho he llegado a ser homófobo conmigo mismo. Que sonará raro, pero a día de hoy soy consciente de que lo fui, y esto no fue en el instituto, sino en la universidad, con 19-20 años, que fue cuando salí del armario. Para empezar dije al principio que era bisexual, porque era demasiado "duro" para mí reconocer que era gay, por mucho que supiese en realidad que lo era. Y, con todo, era muy plumófobo, y decía cosas como... "para estar con un chico con pluma estoy con una chica". Cosas que, para empezar, eran mentira (?), y para seguir, ahora me avergüenza haber pensado. Yo mismo me sentía como ¿culpable? por sentirme atraído por chicos, y supongo que ese es el motivo por el que me costó tanto aceptarlo y tuve que pasar por la "fase" de decir que soy bisexual, cuando no lo era. Cosa que, niños y niñas, no creáis que a todos les pasa, eh, que la bisexualidad EXISTE. Es que hasta para eso tuve que ser mal ejemplo, oye (?). La cosa es que no tengo unos padres o familia homófobos en absoluto, y bueno, mi entorno escolar no era precisamente gayfriendly, pero yo personalmente no me juntaba con gente que me inculcase ese rechazo, así que, ¿por qué demonios tuve tantos prejuicios conmigo mismo? Es que no logro entenderlo ahora que soy prácticamente activista (?

6- Considero que en los últimos años he madurado mucho como persona y he dejado atrás gran parte de mis inseguridades, prejuicios y demás. Pero sí que retengo parte de ellas: aún soy algo inseguro para ciertas cosas, soy muy sensible emocionalmente y tengo algo de miedo al rechazo.

7- Culpo mucho de mi adolescencia y de mis problemas personales a mi pueblo como concepto. Porque viviendo aquí fui, realmente, profundamente infeliz: siempre la misma gente comportándose de la misma forma, teniendo los mismos gustos y exigiendo que encajase en un sitio moldeado o, de lo contrario, sería discriminado. Me sentía preso. En la ciudad en la que ahora estudio y vivo... todo es distinto, porque la gente no es siempre la misma, porque hay muchas opciones para empezar de nuevo, y porque encontré gente con la que encajo, no gente con la que no tenía más remedio que encajar. Verdaderamente afirmo con rotundidad que irme a estudiar a Sevilla ha sido lo mejor que he hecho en toda mi vida. No me imagino qué habría sido de mí si no hubiese salido de mi pueblo.

8- Perdí la virginidad con tan solo 14 años. Y fue con el que se suponía que era mi mejor amigo en aquel entonces. De hecho, a los 12 ambos tuvimos ya un primer contacto sexual, así que bueno, se puede decir que soy tremendamente precoz. Desde aquella vez, nunca dejamos de tener encuentros ocasionales (a las espaldas de todo el mundo, claro), hasta hace unos 5 años, que se acabó definitivamente.

9- A este "mejor amigo" mío, a día de hoy, no lo veo mucho, pero sigo teniendo una buena relación con él. El punto es que esa relación es buena ahora. Antes, incluso mientras sucedían los encuentros sexuales, considero que él me "maltrataba" de cierta forma. Yo siempre estaba a su sombra, y siempre debía seguirle a todas partes. Si alguna vez tenía una camiseta como la suya, me criticaba por imitarle y por "no tener personalidad", pero si algún día me alejaba un poco o me enfadaba, "siempre estaba a la defensiva" y "no se me podía hablar". Estaba completamente sometido a él, y lo conozco desde siempre, desde pequeños, así que fue algo que se fue forjando con los años.

10- Este chico, de hecho, no salió del armario hasta hace poco, y aun a día de hoy no es público para todo el mundo. Su familia, hasta donde yo sé, no lo sabe, y el entorno del pueblo no lo sabe; solo se sabe de cara a Sevilla, más allá de la ciudad, nada. Y de hecho, mientras éramos más pequeños, pese a que teníamos sexo continuamente, él era un verdadero cazacorazones, que cada fin de semana estaba con una chica distinta. Y solía echarme en cara que él ligaba y yo no y hacer mofa de ello, incluido delante de otros. De hecho, alguna vez, en algún momento de intimidad, habíamos comentado algo tímidamente sobre otro chico... y él aprovechaba para echarme en cara que era gay y no quería reconocerlo. ¿A que es absurdo completamente? Pues a mí me parecía lo más normal del mundo. Era como si tanto él como yo borrásemos de nuestras mentes el hecho de que ÉL TAMBIÉN SE ACOSTABA CONMIGO. Como si de verdad pensásemos que él era un hetero triunfador, ambos. Madre mía, estaba lobotomizado o algo (?

11- Ya estando en Sevilla, una vez (y la primera vez en la que estuve con otro chico que no fuese mi amigo) tuve un encuentro sexual esporádico con otro chico al que no conocía de nada, en mitad de la calle. Bueno, en fin, escondidos y apartados de las miradas de la gente, pero en la calle al fin y al cabo. Hubo intercambio de miradas, gestos, y... en fin, no pude controlarme. Y después de eso, el chico fue muy amable conmigo, me preguntó mi nombre, me ofreció darme su contacto para que pudiésemos hablar y conocernos mejor, en fin... pero yo lo rechacé. Recuerdo estar super asustado, recuerdo pasarlo fatal y sentirme sucio. Al llegar a casa, me metí en mi cuarto y me pasé todo el día llorando. Yo me consolaba con que no era gay, sino que solo me gustaba mi amigo; eso era lo que calmaba mi estúpida mente homófoba. Y aquello, que fue un impulso imposible de controlar, demostraba lo contrario. Y yo me sentí super avergonzado.
... llega a ser a día de hoy, y con lo bueno que estaba el muchacho (?), le doy mi teléfono pero vamos, me falta tiempo (???
... si estuviese soltero, claro te quiero Pablo no me dejes.

12- Siguiendo el tema sexual (ya casi termino con las cosas sexuales, I swear), cuando lo dejé con mi último "novio", que entrecomillo porque no fue tal, aunque casi, me sentí muy, muy, muy mal. De hecho pasaba por una etapa muy mala en mi vida en ese momento, la "ruptura" no fue más que otro detonante adicional. Y recurrí al sexo fácil como "despecho", supongo. En esa época, me acosté con... unos 4 chicos en el lapso de poco más de 1 mes. No es que me arrepienta de ello, pero tampoco me hace sentir orgulloso especialmente, porque sé que lo hice solo porque fue mi forma de suplir la falta de cariño que sentía en ese momento.

13- Por todo lo anterior, debo reconocer que yo, prácticamente, he tenido mis primeros contactos sexuales y la mayoría de ellos sin amor, solo de forma casual y meramente sexual. Y no es que eso sea malo... pero por culpa de eso, yo prácticamente no había conocido lo que era el sexo con amor, lo cual sí que era muy triste.

14- Me acompleja un poco mi cuerpo, concretamente mi peso. No estoy gordo, pero tampoco delgado (de hecho me sobran un par de kilos, eso seguro (?)), y me gustaría adelgazar, pero... no suelo tener las fuerzas para hacer ejercicio o hacer dieta.

15- La falta de energías es algo que llevo viviendo desde hace un par de años, desde que terminé la carrera, prácticamente. Siento que abandonar mi rutina de clases y pasar a másteres y a otras cosas distintas a lo que estoy acostumbrado me ha jugado una mala pasada. Ahora muchas veces no hago absolutamente nada, y me siento vacío por ello. Aunque sí que haga alguna cosa (voy a clases de inglés y doy clases particulares, y estoy a la espera de incorporarme al programa de doctorado), yo no puedo evitar sentirme inútil, y eso me quita energías y ganas de hacer cosas, y se convierte en un círculo vicioso.

16- En ese sentido, tengo mucho miedo por el futuro. Mis intenciones y mis planes están claros: quiero ser profesor de universidad y, a ser posible, avanzar un poco como escritor. Pero pensar en que pueda fracasar y encontrarme sin saber qué hacer por toda mi vida por no lograr lo que pretendo, o terminando en un trabajo que no me llene, o simplemente logrando lo que quiero pero descubrir que no me gusta tanto como pensaba... todo eso me aterra.

17- Tengo miedo a perder a mis amigos. Mis amigos de verdad son los que conocí en la universidad, y... como tales, dejé de verlos a diario cuando acabé la carrera. Seguimos hablando y mantenemos contacto, quedamos a menudo y tal, pero... ver que cada uno de nosotros estamos llevando caminos separados hace que me dé miedo pensar en que los terminaré perdiendo. Mis amigos son el motivo por el que Sevilla fue tan terapéutica para mí, por el que mi vida dio un vuelco de 180º... así que lo último que quiero es perderlos, y tengo a menudo la sensación o el presentimiento de que terminará pasando.

18- Estuve de Erasmus un año en Pisa, Italia, y... fue de las peores experiencias de mi vida. Sentí una soledad enorme y me sentí como si me hubiesen vuelto a encerrar en la cárcel de la que logré salir al salir del pueblo. Tanto fue así que tuve que dejar la erasmus a medio camino, porque no podía soportarlo. Me arrepiento muchísimo de haber tomado la decisión de irme, y no lo volvería a hacer nunca.

19- Lo anterior me hace tener también miedo; ¿acaso tan grande se está haciendo mi zona de confort en mi vida, mi nueva zona de confort? ¿Y si el futuro me depara que tenga que alejarme de Sevilla y de mi gente ahí? ¿Podré soportarlo? Son pensamientos que a menudo me atosigan.

20- Lloro mucho y con mucha facilidad. A veces por alegría, a veces por empatía, pero... la mayoría de las veces es por mí mismo. Es decir, si yo, por ejemplo, tengo algún conflicto con mi pareja, os aseguro que el 90% de las veces voy a acabar llorando, y voy a llorar por algo que atribuyo a mí mismo. Porque me culpo, porque considero que estoy estropeando algo, etc.

21- De lo anterior deriva que soy muy autocrítico conmigo mismo, es cierto. A veces creo que demasiado. No puedo evitar pensar que otras personas matarían por estar como estoy yo, por tener lo que tengo yo, etc. Y, con todo, yo me siento muchas veces incompleto, vacío, inseguro; y sé que es porque me autofustigo mucho, pero no puedo evitarlo.

22- No sé si será por lo mismo (?), pero tengo el presentimiento de que no voy a llegar a ninguna parte como escritor. Sé que soy bueno, y seguramente libros míos sean mejores que algunos best-seller promedios, pero... también tengo un pálpito que me dice que nunca llegaré a ser conocido, que nunca triunfaré en la escritura. Y es algo que no digo nunca porque intento apartarlo de mi mente, pero lo siento de verdad. No sé por qué, solo sé que lo siento así. Por mucho que me digan siempre lo contrario y que me alaben y digan lo bueno que soy y lo lejos que voy a llegar.

23- Supongo que, en general, tengo miedo a eso, al fracaso, pero a un fracaso a una escala un poco mayor: tengo miedo a no ser nadie, a no aportar nada al mundo. A pasar al olvido y que nadie me recuerde por lo que hice. Que cuando me muera los que me conociesen digan "era un buen hombre", pero no "hizo grandes cosas".

24- Aunque es algo que odio profundamente y reprimo bastante bien, a veces no puedo evitar sentir algo de envidia, o, bueno... algo así. No es que envidie a otros por cosas que yo no tengo, sino que me comparo con otros y me frustro por ser peor o pensar que soy peor.

25- Dependo mucho emocionalmente de las personas con las que tengo un vínculo estrecho. Sí, sé que ya se deducirá de todo lo que he dicho, pero oye (?

26- El mismo amigo del que os hablé antes me generó también un complejo con este foro que, reconozco, aún arrastro un poco, aunque ya no tanto. Y es que, cuando estaba en CemZoo en la zona de fics, principalmente, yo se lo comenté a él (tendría unos 13 años), y básicamente se mofó de mí, diciéndome que era un friki por meterme a "foros de manga" y que vaya rarito era. Eso fue lo que provocó que dejara CemZoo y no volviese hasta los 16 a FFL. Y ya luego en FFL, mantuve muchísimo tiempo en secreto que estaba en el foro porque tenía miedo de que me pasase lo mismo con aquellos a los que se lo comentase. Ya mis amigos lo saben y tal, pero... reconozco que sigo un poco tocado con el tema.

27- Aunque no me gusta ser el centro de atención, porque me pone nervioso, sí que necesito que me presten cierta atención individualmente. Es decir, que si hago algo, la gente se interese por eso. Supongo que arrastro ese miedo a ser ignorado, a ser invisible... un poco como siempre he sido en mi adolescencia.

28- Doy muchísimo valor a la ilusión, tanto a la mía propia como a la de otros, a veces incluso más de lo que es sano. Si algo me ilusiona y no sale bien, o alguien no le da la importancia que le doy yo, me deprimo mucho y se me viene abajo todo el ánimo. Y lo mismo si por mi culpa mato la ilusión de otro, o si logro generar desilusión a alguien, que se desinterese por algo que debería motivarle: ese es el motivo por el que nunca me perdonaré cosas como haberle quitado las ganas a Juanjo de participar en la sección de Udan. Curioso que por culpa de que tenía ilusión yo porque participase la gente, le haya quitado a él la suya.

29- Los videojuegos son muy importantes para mí porque, desde siempre, han sido mi forma de escapar de la realidad, y me funcionan para relajarme y para desconectar. Inclusive cuando no tengo nada que hacer, juego videojuegos: llenan el vacío en mí, sea el tipo de vacío que sea: por tristeza, por aburrimiento, etc.

30- Y bueno... no se me ocurre nada más ahora mismo, así que la cosa número 30 va a ser la despedida. Decir que, aunque fue casi de casualidad que regresé a este foro, es, también, una de las mejores cosas que pude haber hecho. Porque me ha dado horas y horas diversión, grandes amigos, y hasta al amor de mi vida. Así que, a todos los que estéis leyendo esto, gracias por contribuir a hacer de este sitio la familia que es.