Madurar es Saber Diferenciar una Estrella entre Mil Luciérnagas.

Vaya, tanto tiempo ha pasado desde que publiqué aquí. Dos años ¡Wow!
Me pongo a leer mi blog y me doy cuenta de cómo cambió todo: cambié yo, mi forma de pensar, mi escritura, en inclusive las personas que me inspiraban al escribir.
Cuando empecé a redactar fanfics y mis pensamientos en sí, estaba iniciando el colegio. Tenia miedos y formas de ver el mundo completamente diferentes a las que tengo ahora.
— ¡Oh no! No quede en el curso de las chicas con las que estuve siete años en la escuela, ¡Estaré totalmente sola! — Ahora me emociona saber que estaré sola siguiendo Técnico mientras que mis amigas seguirán Ciencias.
— ¡Mejores amigas! — Niñas... SI EXISTE, no era lo que pensaba pero si existe, no es la que siempre saldrá contigo en el recreo y nunca te traicionará, aunque ahora casi ni nos veamos y me haya dando un golpe de realidad tremendo, supongo que lo somos. Solo estoy segura de que tengo grandes amigas y una hermana.
— Nunca hemos hablado, pero tiene algo que me gusta — Mira si no llego corriendo hacia ti y me lanzo a tu espalda, no me gustas realmente.
— Tengo el corazón roto, nunca volveré a amar — Yo pensaba así y me avergüenza tanto. AMARÁS, siempre y aunque no quieras. Es un impulso humano y debes vivir con ello.
La chica que existía hace dos años... existe, aun es sentimental, infantil, apasionada, torpe y miedosa; sólo es dos años más grande y cono una mente más madura.
En estos dos años aprendí muchas cosas, pero la más importante definitivamente es:
Madurar no es dejar de reir por tonterías y dejar de jugar; madurar es saber diferenciar una estrella entre mil luciérnagas.

Luxy-chan fuera ;)