Este inhumano mundo que crece cada vez más...

Publicado por Suicide Girl en el blog Suicide Girl World. Vistas: 374

Hoy quisiera compartir esto con ustedes:

Hubo una oscura época en la historia de Japón que ellos no quieren recordar, llamada ''Edo'' cuyo gobernante fue Tokugawa, durante ésta época hubo muchas guerras y por consiguiente un nivel de pobreza crítico, gracias a esto muchos japoneses de muy bajos recursos trataban de hacer todo lo posible para conseguir un poco de dinero. AHORA BIEN, el escrito que voy a poner a continuación trata sobre las medidas crueles a las que llegaron.

Para que más o menos sepan de lo que trata y no se pierdan, les diré esto: ''La historia trata sobre una practica que se daba en pequeños circos situados en los bosques japoneses, en donde se secuestraba niños y se los mutilaba para transformarlos en fenómenos para entretener al publico, haciéndolos hacer payasadas y hasta hacerlos tener relaciones entre ellos. Las mutilaciones iban desde hacerles injertos de otros cuerpos y hasta de animales o sino convertirlos en caníbales y si los niños durante los actos mostraban tristeza o alguna señal de maltrato, al final de los actos quemaban sus rostros con algún tipo de ácido y les cubrían las cicatrices con flores.

Hace tiempo ya que había visto esto y la verdad, no logró salir de mi cabeza, siempre que pienso en ello la melancolía se apodera de mi, me siento decepcionada y estupefacta a la vez, al pensar cuan inhumano fue, es y será el mundo... Es mi opinión, sólo les pido que si lo van a leer, cada palabra, siéntanla como si fueran esa persona o imaginen cuanto dolor pudieron haber pasado, comentad qué les pareció; Gracias.

He aquí el dichoso escrito:
Si no quieres saber la verdad, regresa por donde viniste ahora. Si continuas leyendo esta triste historia, no podrás decir que no te lo advertí.

Apuesto que piensas que los circos son todo diversión y juegos. Apuesto que piensas que todos los “Fenómenos de circo” son gente como tú y yo, que se divierten muchísimo actuando, como tú lo haces viéndolos. Apuesto que piensas que esos “Fenómenos” siempre han sido así: deformes y “diferentes”.

¿Piensas que ese payaso con dos cabezas nació así?

¿Piensas que la cantante con las piernas de cabra tiene esas partes de animal porque realmente nació sin piernas?

¿Piensas que ese chico de apariencia normal con el cabello como el cielo a media noche es solamente otro artista, que escapó de casa?

Pero a ti no te importa. No te das un segundo para pensar como los fenómenos son realmente. Lo que los fenómenos se hicieron a sí mismos para unirse al circo. Apuesto cualquier cosa a que no conoces el dolor y sufrimiento que pasan.

No has escuchado sus gritos y llantos en la noche. No los has escuchado pidiendo morir. No has olido el hedor a carne podrida.

No sabes nada. Ni una sola cosa. Pero eso es lo que voy a decirte. Si no quieres saber la verdad, o no eres lo suficientemente fuerte para saber, da marcha atrás.

Vamos a empezar con como estos fenómenos se unieron. Pero unirse no es el término apropiado, ¿no? No cuando cada uno de los “fenómenos” era perfectamente humano, y fueron secuestrados cuando eran solo niños que querían ir a ver el circo por sí mismos. Eso es: Secuestrados.

Robados de las calles a pesar de haber escuchado sus gritos, llantos y suplicas por ayuda. Sus patadas, sus golpes, haciendo todo lo que posible para escapar. Sólo para terminar sin esperanzas y convertirse en conejillos de indias.

Antes del circo, había un niño huérfano con cabello azul oscuro que finalmente había encontrado un hogar con una madre que lo amaba. Claro, debió haber sido bastante pobre. Claro, puedo haber tenido una vida dura. Claro, pudo haber muerto en las calles de todas formas.

Pero ese maldito circo… Ese maldito circo arruinó todas sus posibilidades y oportunidades de vivir una vida… De vivir como una persona normal, en lugar de ese animal sediento de sangre.

Pero no. Por supuesto que no. Tuvieron que llevárselo. Tuvieron que llevárselo a la edad de nueve años. Sólo era un niño cuando se le fueron inyectados todos esas… todas esas cosas.

¿Y sabes qué clase de cosas le hicieron?

Lo volvieron loco. Literalmente, perdió la razón. Se convirtió en un legítimo caníbal. Habiendo estado encantado de comer otro ser humano. Un ser humano. De hecho, prefirió que todo se sirviera frío, crudo y que fuera humano.

Disfrutaba sentir un remolino de sangre en la boca y que esta chorreará por su barbilla. ¿Acaso no es esa una imagen encantadora?

¿Y sabes por qué ese pequeño chico fue elegido para experimentar con él? ¿Por qué él, un pobre chiquillo que hubiera muerto en las calles, había sido elegido? Porque era un niño que aún no había vivido su vida para llenarla con buenos recuerdos, en vez de pensamientos relacionados con carne, sangre y más carne.

Había una vez una pequeña cantante con el cabello color turquesa pálido. Esa chica era de una amorosa familia, con una madre, un padre y dos pequeños hermanos menores con los que siempre jugaba. La familia de la chica era considerada entre muchos como rica, y quizás fueron sus extravagantes ropas hechas con los más finos materiales lo que llamo la atención del Maestro de Ceremonias.


¿Sabes lo que la hicieron a esa chica? ¿Tienes alguna idea? Te lo diré. Le amputaron las piernas y no de una manera gentil. Entonces la chica que alguna vez fue conocida por su cara perfecta y perfecta voz, cambio para convertirse en la chica con las piernas de cabra.

Sólo intenta imaginar el sufrimiento y el horror que le trajo a la diva que lloraba consigo misma cada noche, me hace daño por dentro y me dejan con ganas de llorar. El dolor… El dolor debe ser tan insoportable…

Me sorprende que hayas llegado tan lejos. Debes tener un corazón fuerte. Pero te lo diré otra vez: Puedes darte la vuelta e irte. Porque te puedo asegurar, las cosas no mejoraran pronto.

¿Ese payaso con dos cabezas? Antes de convertirse en un fenómeno de circo, ¿Sabes de quién se trataba? ¿Lo sabes? Claro que no. Nadie lo sabe. Hasta ahora.

Ese fenómeno eran dos pequeños niños; un par de gemelos idénticos; un niño y una niña que eran inseparables desde su nacimiento. Ellos eran mejores amigos, y siempre estaban juntos. ¿Y sabías que tenían una mamá y un papá? Esos niños tenían una familia. Tenían amigos. Tenían un increíble futuro por delante. Todo por no haberse alejado lo suficientemente rápido. Porque eran niños.

¿Y sabes que sucedió después? ¿Después que sus gritos fueron apagados, y fueron encadenados y atados a una mesa de metal? Fueron masacrados vivos. Tenían extremidades amputadas mientras estaban conscientes. Y entonces realmente se volvieron inseparables. Realmente siempre estarían juntos, hasta el momento de sus muertes. Porque esos dos niños se volvieron uno solo. Los cosieron.

Trozos de carne quedaron esparcidos alrededor de ellos durante todo el proceso, y el hedor de la sangre y la muerte se quedó en sus fosas nasales por mucho tiempo después de eso. Tanto tiempo después… Sólo porque eran niños alegres. Pero eso no es todo. Ni siquiera estamos cerca del final.

Hay muchos más. Tantas almas torturadas. Tantos niños que murieron durante las mutilaciones. Tantos otros niños que deseaban con todo su corazón estar muertos. Tantos… Tantas almas desafortunadas que habían caído en las garras del Maestro de Ceremonias.


¿Sabes lo que pasaba si cometían el mínimo error? ¿Si se negaban a hacer algo para el show? ¿O incluso si pisaban un escalón con el pie equivocado? Oh no, no tienes ni idea. Pero mira, eso es porque el Maestro de Ceremonias los castigaba apartándolos de los ojos de cualquiera que pudiera ver esos actos pecaminosos.

¿Que era ese castigo? te preguntarás. Ácido. Si, has leído bien: ácido. Has cualquier cosa que haga enojar al Maestro de Ceremonias y tendrás esa sensación ardiente del ácido derramado sobre tu cuerpo desnudo. Cada, Última, Gota.

¿Crees que eso es malo? Se pone peor. No mucho, pero se vuelve peor. Yo sé; es difícil de creer. Como si la mutilación no fuera lo suficientemente mala. ¿Y el ácido? Es mucho más de lo que alguien debiera aceptar, sean o no humanos. Pero mezcla los dos, y se obtienes el peor dolor de todos. Que te pudras. Si, es cierto.

Mezcla la mutilación y el ácido, y voila; eres un ser vivo que respira, aunque estas muriendo, carcomiéndose desde dentro. Ni siquiera puedo empezar a explicar el horror y la agonía de lo que se siente que tu cuerpo decaiga, y ser consciente cada segundo de ello.

Quieren tener una muerte rápida. Incluso si es en una hora o en tres, ese dolor sería mucho mas fácil de soportar que el infierno que pasan. Pero ellos no intentan quitarse la vida; No, nunca. Por mucho que deseen que su sufrimiento termine, continúan adelante.

¿Por qué? Porque el circo es muy divertido. Es por eso. Muy divertido de hecho… Y esa es la verdad. Cada palabra. Cada maldita y sangrienta palabra. ¿Cómo es que sé todo esto? Te preguntarás...

Es porque yo soy el Maestro de Ceremonias.
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