DIABÓLICA OBSESIÓN (Diabolik Lovers y tu) Cap 17 Comienzo

Comienzo
Sólo hay un hecho que debes comprender plenamente. El hecho de que nunca se puede escapar de nosotros. -Reiji Sakamaki.

La propia prisión es un ser vigilante y vengativo. Solo el hombre que ha conocido la libertad

Puede definir su prisión.

La oscuridad, la luz... y una energía para combinarlos.

Un hombre encapuchado de negro, tomó a la chica en sus brazos y la introdujo dentro de la torre. Un pequeño fuego ardía en la chimenea, apenas logrando tocar el frío de la cavernosa sala. El suelo era de piedra sólida, pero no tenía ninguna marca. Una mesa era lo único que poseía la austera cámara, cubierta con textos y papeles sueltos.

Él sabía bien que los vampiros aún buscaban maneras de encontrar a la joven , a pesar de que todos sabían que quienes harían la diferencia entre el triunfo y la derrota, eran los de sangre pura, es decir los Sakamaki no los Mukami, donde quiera que estuviera ellos serían atraídos hacia la chica, debía apurarse.

A los ojos de sus mayores estaban fallando. Durante años habían buscado a la mujer que completaría el eden. Aquella a la que conocían por el sobrenombre de Eve.

Una forma encogida se levantó de una silla, al costado de la mesa. Con una

nudosa mano extendida. Y la otra mano con manchas por una enfermedad en el

hígado estaba agarrando un bastón de madera. "Venid" dijo el monje.

El misterioso hombre de negro se adelanto y se posisiono de rodillas, tocándose con la punta de los dedos la frente en un gesto formal de respeto.

"Levántese".

Se levanto y sintió todo el peso de la mirada del monje sobre el.

Este entrecerró sus legañosos ojos hacia el chico. "El tiempo se acorta", dijo. No necesitaba decir nada más.

El más joven se aclaró la garganta. Su largo cabello negro estaba suelto y un mechón

caía sobre su oscuro ojo. Era hermoso, oscuro e intenso. Se decía que podía

seducir a cualquier persona, hombre o mujer.

Tenemos una pista de su poder ellos aún la buscan, Mi Lord".

Los ojos del ansiano se estrecharon aún más. "Pensé que me habían dicho

que su poder había sido completamente transferida a el Rey Vampiro".

"No en totalidad. Todavía mantiene un delgado hilo con los hijos de este".

No sabían mucho sobre lo que buscaban, salvo que era una

mujer. El problema era que entre los vampiros se encontraban dos chicas, eso ya era un problema. ¿Cuál de ellas era la verdadera Eve?

Especularon que había sido considerablemente, o tal vez irreparablemente,

dañada psíquicamente debido al desconocido trauma en su pasado. Lo que

había sucedido había obligado a su magia a salir de su cuerpo. Desde entonces se había visto obligado a absorberla.

"Con todo respeto, pedimos su permiso para partir de inmediato antes de que ellos la encuentren".

El nombre del chico era Dai le era adecuado ya que era como el día, amigable y lleno de luz, pero también tenía un carácter que podría crecer y volverse tan caliente como el sol.

El viejo estaba probando ese temperamento ahora.

Tensos momentos pasaron. Por último, el golpeó el suelo. "Te he

convocado aquí para remarcar el hecho de que el destino de nuestro mundo

descansa en sus manos. Eve se desespera. Buscan maneras de

involucrar a la magia de los clanes sin la suya, y eso sería arriesgado. "Vayan"

ordenó. Con su rostro se puso de aspecto demacrado y pareció de repente, incluso mayor de su edad ya antiguo. "Y mejor que la encuentren en esta ocasión". Susurro para si mismo.