Cosas raras dentro de una historia aún más rara

Son obvias las diferencias entre su antecesora, Tama and Friends, y:

Uchi Tama?! Uchi no Tama Shirimasen ka?

Y es que la otra era más infantil -según los pocos capítulos que pude ver- porque a ésta le metieron aspectos sobrenaturales y a fuerza la obsesión por las redes sociales. Aunque hubiera sido más ‘normal’ que simplemente los humanos fueran los más pendientes para obtener seguidores pero ¿Las mascotas obsesionadas por ese aspecto? Como que no tenía mucha lógica. También llegaron a interactuar con un perro robótico, lo cual se me hace muy, pero muy curioso.

Quizás lo más raro aún es que Beh tuviera poderes, con eso de abrir portales dimensionales, transportarse en el tiempo y espacio. De todas maneras el más tierno e inteligente sin duda es Nora, el gato callejero con un triste pasado.

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Aunque no niego que hay eventos interesantes, como eso, de que cuando Tama cree que es un mapache; el primer amor de Tora; la pelea para ser el más fuerte del distrito; Pochi tratando de ser genial como un lobo y muchas otras historias más.

No obstante, creo que la historia más aburrida fue la de Gon, porque fue bastante mala con esas risas de fondo, pero no tanto como la de Crazy Cats que se la pasan cantando -lo bueno es que podías saltar esos fragmentos ya que no eran relevantes- y lo más innecesario de todo fue la ocasión en la que se reúnen en la Casa de Baños.

Pero bueno, lo que más me molestaba es que el propietario de Tama fuera muy perezoso como para buscar a su gato cuando se ausentaba unas cuantas horas -lo cual es exagerado- y en lugar de preguntar a sus conocidos decide colocar los carteles de "extraviado".

En fin, si la dejé de ver hace algunas semanas, fue debido a que me incomodó esa conversación entre las diferencias de las partes de su cuerpo. Además como que se me hacía raro que cuando se encontraban en su aspecto humano actuaban como personas, pero de repente adoptaban el comportamiento de animales.

Nota: En algunos capítulos intentan informar acerca de lo que consumen tanto gatos como perros (sobretodo tratan de reivindicarse explicando a cerca de lo que están hechos los pasteles que le dan a Momo); el cambio de pelaje; además de lo dañina que puede ser la hierba gatera.