Carta a mi misma

Publicado por Chiss en el blog Chiss. Vistas: 265

Soñar es mi ruta de escape. Todo el tiempo tengo la sensación de que me encuentro en el lugar equivocado y que "quiero ir a casa". No sé porque termino diciendo eso pero creo que es una manera de decir que necesito un lugar donde me sienta a gusto, donde pueda ser yo sin ocultarme como hago siempre que estoy con alguien, pero aún así ni cuando estoy sola dejo de repetir esa frase "quiero ir a casa". Es como si tratara de escapar de esta realidad. Tal vez. No estoy muy segura, Pero siempre que sucede algo que me incomoda trato de escapar, es lo primero que pasa por mi mente, "quiero ir a casa". Casa, hogar, me gustaría encontrar algo o alguien a que llamar de esa manera, pero sigo encerrándome en mi, levantando paredes para que nadie pueda pasar, queriendo quedarme sola, que los que me rodean se vayan, desaparezcan. Quizás no quiero salir lastimada, cuando pienso en esto sé que soy la clase de persona que no podría perdonar totalmente una traición y por eso no dejo que nadie sepa lo que pienso, lo que siento. Estoy otra vez huyendo. No quiero que quienes quiera me dejen. No sé de donde saqué esta idea. No recuerdo que alguien lo haya hecho, soy así desde que tengo memoria, o mejor dicho soy así en mis recuerdos, aunque hay cosas que no recuerde. Pero aún esto no me impide ser como soy e igual los alejo. Engaños, mentiras, "todo esta bien" repito para no preocupar. Si, lo sé, soy egoísta, queriendo cosas imposibles. No quiero que se preocupen por mi, pero aún así quiero que lo hagan. Como me gustaría que alguien, aunque sea solo una persona se de cuenta que mi "todo esta bien" en realidad es algo que me digo para mi, y no una respuesta a su pregunta, que mi sonrisa es falsa, que mis ojos tiemblan para no liberar mis lágrimas, que mi garganta se siente seca y mi estómago se me revuelve, que mi cabeza da vueltas y mi corazón parece a punto de romperse. Pero solo sonrío, digo "estoy bien" y nadie vuelve a preguntar, sin notar mi nerviosismo. Suspirando me repito "quiero ir a casa". Pero esto, esta sensación dura un momento, luego río, me enojo, hablo, más escucho, vuelvo a reír, juego, me porto como una niña, me pongo seria, hago alguna travesura y sonriendo suspiro "quiero ir a casa". Soñar me apasiona, me permite reír, olvidar, sonreír, y sentirme "en casa". Me llena de optimismo. Se que no puedo vivir solo soñando, pero cuanto daría por hacerlo. Me siento bien cuando sueño, me deja un sabor dulce en la boca, ganas de cantar con todo lo que dé mi pulmón, ganas de correr hasta el cansancio, de saltar lo más alto posible, de bailar, de reír. Me llena el corazón ahuyentando todo pensamiento negativo, o más bien dándome ganas de reírme de él.
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