Capítulo 35

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Capítulo 35: "La oscuridad de la noche"
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May tardó unos segundos en procesar lo que Ash le había dicho.

May: (alarmada) ¿¡QUÉ!? ¡ESO NO PUEDE SER! ¡NO ES POSIBLE!

Ash: Pues dímelo a mí porque no puedo ver absolutamente nada.

May se levanta y se gira hacia los costados buscando al vendedor pero este había desaparecido.

May: (furiosa) ¡ESE MAL NACIDO! ¡LO DESTRUIRÉ EN CUANDO LO VEA!

Ash: May, por favor, llévame con Norman. Necesito ir a un médico.

May: Si, si. Tienes razón. En seguida.

May ayuda a Ash a pararse y a sostenerse.

May: ¡APARTENCE TODOS!

May corre entre la multitud llamando a gritos a sus padres. Los encuentra junto con Max en una de las mesas del área de comida.

May: ¡MAMÁ! ¡PAPÁ! ¡MAX!

Norman: Esa debe de ser May. ¿Por qué estará...?

Entonces, Norman ve a May quien estaba trayendo a Ash prácticamente a rastras.

Norman: (alarmado) ¡ASH!

Caroline: ¡OH NO! ¡ASH!

Max: ¿¡QUE DEMONIOS HA OCURRIDO!?

Los tres van rápidamente donde se encontraban ellos.

Norman: (alarmado) ¡Ash! ¿¡Que te sucede!?

Ash: ¿Es... usted Norman?

Norman: Si, claro que soy yo.

Ash: Ocurrió... un accidente...

May: ¡Nada de accidente! ¡Ese maldito vendedor...!

Caroline: May cariño ¿qué esta pasando?

May empieza a llorar.

May: (sollozando) Ash... quiso probar uno de esos tontos inventos y... salió mal... muy mal. Ahora... ya no
puede ver.

Norman: (alarmado) ¿¡QUE QUE!? ¿¡QUIEN FUE EL MALDITO QUE HIZO ESTO!? ¡LO VOY A GOLPEAR
TAN FUERTE QUE HASTA SU MADRE LO VA SENTIR!

Caroline: ¡Cariño! ¡No digas esas cosas! ¡Hay que llevar a Ash a casa y llamar a un médico cuanto antes!

Norman: ¡Tienes razón Caro! ¡Todos devuelta a casa!

Unos minutos más tarde estaban en la casa. Pikachu y Torchic salen a recibirlos.

Pikachu: ¿Por qué han vuelto tan...? (mira a Ash) ¡Ash! ¿¡Que ha ocurrido!?

May: (sollozando) No puede ver nada Pikachu. El... esta ciego.

Ash: Me pone muy feliz que me lo recuerden cada treinta segundos.

Pikachu retrocede un poco.

Pikachu: Ash... no... esto no puede ser. Ash...

Pikachu empieza a lagrimear. Torchic se acerca a él.

Ash: Te escucho llorar Pikachu. No quiero que estés triste por mí. Necesito que seas fuerte ¿de acuerdo?

Pikachu: (sollozando) Si... Ash.

Norman: May, lleva a Ash a su habitación. Yo llamaré a un médico.

May: Si papá.

May ayuda a Ash a llegar a la habitación que comparten. Cuando llegan, May lo acuesta en la cama. Levanta
ligeramente una de las almohadas y Ash recuesta su cabeza en ella.

May: ¿Estas bien así Ash?

Ash: Si. Gracias May.

May: De nada.

Quedan unos segundos callados.

Ash: (sonríe) Soy un verdadero tonto. Es eso lo que estas pensando ¿verdad?

May: Ash yo... jamás pensaría eso de ti.

Ash: Pues deberías. (enojado) ¡Vaya forma más patética de quedarme ciego! ¡Por culpa de un estúpido invento que no servía para nada!

Se calla por un momento y se relaja un poco. Unas lágrimas empiezan a caer por sus mejillas.

Ash: Nunca creí que todo acabaría así.

May: No tiene porque acabar Ash.

Ash: May, te agradezco lo que intentas hacer pero no me des falsas esperanzas. Es imposible para mí
continuar viajando con esto. No se que haré ahora.

May no sabía que responder. Por suerte no hubo falta porque justo entro su padre con el doctor.

Doctor: ¿Es él, señor Norman?

Norman: Así es.

Doctor: Voy a pedirles a todos que salgan de la habitación.

May no quería irse. Su padre pone una mano en su hombro.

Norman: May... vamos. No podemos entorpecer el trabajo del doctor.

May: (sollozando) Quiero quedarme con él papá.

Norman: Lo se hija. Pero si te preocupa su salud lo mejor será que dejemos que el doctor haga su trabajo.

May asiente y deja que su padre la lleve fuera de la habitación. En el pasillo estaban Max, Pikachu, Torchic y
Caroline. Ella abraza a su hija quien empieza a llorar desconsoladamente en su hombro.

Max: (triste) No lo entiendo. ¿Por qué tuvo que ocurrirle esto a Ash?

Pikachu no era capaz de responder. Estaba muy deprimido e impactado por lo que había pasado. Torchic intentaba consolarlo sin mucho éxito.

Max: ¿Qué podemos hacer papá?

Norman: Rezar hijo. Es todo lo que podemos hacer por ahora.

Media hora más tarde el doctor sale de la habitación. Todos lo miran esperando escuchar lo que tenía que decir.

Doctor: Tengo una noticia buena y otra mala. La buena es que el daño no es permanente y podrá recuperar la visión.

May respira aliviada.

Norman: ¿Y la mala?

Doctor: Que para que eso ocurra deberán pasar alrededor de seis meses.

Norman: (alarmado) ¿¡Seis meses!? ¿¡Es una broma!?

Doctor: Quisiera poder ayudar más señor Norman pero no hay nada que pueda hacer. Pueden ir a verlo si quieren.

Caroline: Esta bien. Muchas gracias.

El doctor se retira y la familia entera entra en el cuarto. May va rápidamente al lado de Ash.

Ash: May...

May: ¿Sabes que soy yo?

Ash: Reconocería tu fragancia a un kilómetro de distancia. Cereza. Siempre usas el mismo por las mañanas.

May: Ash...

Ella recuesta su cabeza en el pecho de Ash y siente como él hace un intento por acariciarle el pelo.

Norman: Ash, el doctor dijo...

Ash: Ya lo se Norman. Me alegra saber que puedo recuperar mi visión pero May... No vas a poder participar
de tus concursos por mi culpa. Lo lamento mucho.

May: No me importa Ash. Me encargaré de cuidarte hasta que te recuperes.

Caroline: Todos lo haremos. Puedes quedarte todo el tiempo que necesites.

Ash: Se los agradezco mucho.

Norman: Muy bien. Ahora los dejaremos solos.

Norman, Caroline y Max se van. Queda May con Ash.

May: (sollozando) Ash...

Ash: May... estas llorando ¿verdad? No lo hagas. No me gusta que llores.

May: Pero Ash... es que...

Ash: ¿Sabes que es lo peor de no poder ver nada?

May: No.

Ash: No poder verte May. Ese es mi mayor pesar. Aunque se que voy a poder ver de nuevo pero... en serio lamento que no puedas cumplir tu sueño por mi culpa.

May: Ya te lo he dicho Ash. No me importa eso. Ahora mi prioridad es cuidarte. Te traeré la comida, te ayudaré a bañarte, a cambiarte de ropa. Todo lo que necesites lo haré para ti.

Ash: Gracias May.

Mientra tanto afuera, Norman estaba muy intranquilo.

Norman: (pensando) Tiene que haber algo que pueda hacer para ayudar a Ash. No puede seguir así por seis meses. Pero ¿qué puedo hacer? (idea) Claro, quizás funcione.

Norman empieza a dirigirse a la salida. En el camino se cruza con Caroline.

Caroline: ¿A dónde vas cariño?

Norman: Voy a hacer unas cosas amor. No tardo nada.

Antes de que su esposa pudiera continuar, Norman sale de la casa. Se dirige rápidamente al Centro Pokemon de la ciudad. Al llegar va donde se encuentra la Enfermera Joy.

Norman: Enfermera Joy.

Joy: ¡Hola Norman! ¿Disfrutando del festival?

Norman: Hoy no hay nada que disfrutar.

Joy: ¿Ha ocurrido algo malo?

Norman: El novio de mi hija sufrió... un terrible accidente. Quedó temporalmente ciego.

La Enfermera Joy se lleva las manos a la boca.

Joy: ¡Oh Dios mío! ¡Que terrible! No me quiero ni imaginar lo que debe estar sufriendo su pobre hija.

Norman: Por eso vine aquí. ¿Hay algo que pueda hacer para ayudarle? ¿Cualquier cosa?

Joy: Lo siento Norman. Ahora mismo no hay nada que pueda hacer.

Norman: Ya veo. Disculpe las molestias.

Norman se da vuelta para irse.

Joy: Pero...

Norman: (se gira) ¿Pero...?

Joy: Últimamente se han realizado muchos descubrimientos en el campo de la medicina. Uno de ellos es que Chansey es capaz de usar sus poderes para curar enfermedades graves.

Norman: (esperanzado) ¿Eso significa que...?

Joy: Solo es una posibilidad. Y, además, ninguna de mis Chansey esta preparada para hacer algo como eso. Pero podría entrenarlas para conseguirlo.

Norman: ¿Cuánto tardará eso?

Joy: Un mes, cuanto mucho. Quizás menos con un poco de suerte.

Norman: Un mes... bien. Es mejor que nada. Lo dejo en sus manos Enfermera Joy.

Joy: Haré todo lo que pueda.

Norman abandona el Centro Pokemon y regresa a casa.

Una semana después...

Durante la última semana, Ash estuvo bajo el cuidado intensivo de May. Ella hacía todo lo que él necesitaba.
Se encargaba de alimentarlo, de vestirlo, de bañarlo, entre otras cosas. Pero lo más importante es que se quedaba con él en todo momento. Siempre tomando su mano, siempre haciéndole saber que no estaba solo. Ahora, May estaba terminando de dar de comer a Ash.

May: ¿Cómo estuvo?

Ash: Delicioso May. Cada vez cocinas mejor.

May: Gracias Ash. Solo lamento no poder hacer más para ayudarte.

Ash: ¿Qué dices May? Has hecho mucho más de lo que cualquiera hubiese hecho por mí. De no ser por ti probablemente me hubiera vuelto loco esta semana. Estoy muy agradecido por lo que has hecho y no hay forma de que pueda recompensarte.

May: No necesitas hacerlo Ash. Es mi deber como tu novia.

Ash: Lo se.

Se quedan unos segundos callados. Entonces, sin darse cuenta, May hace una pregunta que quizás no es la más adecuada para la ocasión.

May: Dime Ash ¿qué se siente?

Ash no responde. May se da cuenta del tremendo error que cometió al formular esa pregunta.

May: (avergonzada) ¡Perdón! ¡No debí haber preguntado! ¡Soy una verdadera tonta!

Ash: No May. Esta bien. No te disculpes. ¿Quieres saber que se siente? Pues, es como si estuviera todo el tiempo con los ojos cerrados. Y cuando los abro es lo mismo. El día y la noche son lo mismo para mí. No hay diferencia entre uno y otro. El negro es el único color que soy capaz de ver.

May: Ash...

Ash: Pero, hay algo bueno que he sacado de todo esto.

May: ¿Qué cosa?

Ash: Me he dado cuenta que no solamente eres linda por fuera sino que también tienes un gran corazón.

May: Gracias Ash.

May agarra la cabeza de Ash y deja que repose en sus pechos. Ella estruja sus brazos para tener a Ash lo más
cerca posible.

Ash: May ¿qué haces?

May: Pensé que así te sentirías mejor. ¿No te gusta?

Ash: Me encanta. Puedo escuchar tu corazón. Cada latido es un concierto. Alivia mucho mi pena.

May: Puedes quedarte así todo lo que quieras.

Mientras tanto, en el salón, Norman, Caroline y Max estaban charlando. Pikachu y Torchic llegan.

Torchic: ¿Dónde esta May?

Max: Cuidando a Ash.

Torchic: Claro.

Torchic acompaña a Pikachu y ambos se sientan en una esquina. Pikachu no dijo ni una sola palabra.

Norman: Pikachu lleva así toda la semana

Caroline: (asiente) Lo que le pasó a Ash... le afectó mucho. No creo que vuelva a hablar hasta que Ash recupere la vista.

Max: Hablando de Ash... he estado pensando que... quizás deberíamos llamar a su madre.

Norman y Caroline se sorprenden.

Norman: Pero Max... ¿sabes lo que estas diciendo?

Caroline: ¿No sería mejor si no lo supiera?

Max: Sería inútil ocultarlo. Además... es su madre. Tiene derecho a saberlo.

Norman: Buen punto.

Caroline: ¿Creen que se enoje?

Norman: ¿Enojarse? No. ¿Deprimirse? Muchísimo.

Max: No me sorprendería. ¿Cómo reaccionarían ustedes si algo como eso nos pasara a May o a mí?

Caroline: No digas eso hijo. No sería capaz de soportarlo.

Norman: Si, es cierto. Quizás deberíamos preguntarle a Ash que opina sobre esto.

Max: (asiente) Voy yo.

Max se levanta de la mesa y va a la habitación de May y Ash. Entra sin tocar la puerta.

Max: Ash, necesito hablar con...

Entonces, nota la escena de Ash recostado en el pecho de May. Ella se da vuelta extremadamente sonrojada y mirándolo como deseando que se cayera muerto allí mismo.

Max: (nervioso) Esto... mejor... espero afuera. (pensando) Me va a matar.

Max sale de la habitación y cierra la puerta.

Ash: Max nos vio ¿cierto?

May: (roja) Si.

Ash: Lo mejor será saber que quiere. Por favor May, dile que puede pasar. Intenta no matarlo.

May: Haré lo que pueda.

May empieza a irse.

Ash: Y otra cosa más.

May: ¿Si Ash?

Ash: Lávate la cara antes de ir con tus padres. Estas roja como un tomate.

May: (sorprendida) ¿Cómo lo supiste?

Ash: Noté el gran calor que emanaba de tu pecho. Y aumentó mucho cuando entro Max.

May: (roja) De acuerdo. Lo haré.

Ash: Una última cosa.

May: Dime.

Ash: (sonríe) Te amo.

May: (sonríe) Yo también.

May sale y se encuentra con Max. Lo mira como queriendo asesinarlo con la mirada.

May: (muy molesta) Ash dice que puedes entrar.

Max: (nervioso) De... acuerdo.

May se va al baño y Max entra en la habitación.

Max: Hola Ash.

Ash: Hola Max.

Max: Perdón por haber interrumpido.

Ash: No pasa nada. Aunque me sorprende no haber escuchado tu grito de dolor.

Max: No se como me salve de eso. Ella en serio parecía dispuesta a matarme.

Ash: (ríe) Me imagino. En fin, tú querías decirme algo ¿no?

Max: Si. Mis padres y yo estuvimos hablando y se nos ocurrió que quizás deberíamos llamar a tu madre.

Ash: Para que sepa esto que me pasa.

Max: Exactamente.

Ash: ¿Quieren saber que opino?

Max: Si. ¿Qué dices?

Ash se lo piensa por un momento.

Ash: Max, ¿crees que serás capaz de llevarme al salón?

Max: Creo que sí.

Ash: Bien. Si eres tan amable me gustaría ir.

Max ayuda a Ash a pararse y ambos avanzan lentamente en dirección al salón. Mientras tanto, los padres de May le habían contado también sobre esta idea de llamar a la madre de Ash.

May: No quiero ni imaginarme como reaccionará. Yo casi muero de un infarto. Pero... ella es su madre.

Norman: Si... va a ser una gran impresión para ella.

Caroline: Al menos sabemos que es algo temporal. Quizás esa noticia le de algo de paz a su corazón.

May: Y ¿qué esperan para llamarla?

Norman: A que Ash nos de su permiso.

Ash: (llegando) ¿Me llamaron?

Los tres miran sorprendidos hacia la puerta. Ash, apoyándose en Max, entra en el salón.

May: ¡Ash! ¿Qué estas haciendo aquí?

Ash: Solo quise estirar un poco las piernas. Max, ¿puedes dejarme en el sillón?

Max: Claro.

Max ayuda a Ash a sentarse en el sillón. May se sienta a su lado y le toma la mano.

Caroline: ¿No preferirías estar acostado querido?

Ash: Gracias Caroline pero estoy ciego, no inválido. Puedo caminar perfectamente. O lo haría si no corriera el riesgo de tropezarme con todo. Pero no nos desviemos del tema. Querían saber que pienso sobre avisar a mi madre de mi lesión ¿no?

Norman: Si. ¿Qué quieres hacer Ash?

Ash deja unos segundos de suspenso antes de responder.

Ash: Quiero que venga aquí.

Todos se sorprenden mucho.

Caroline: Ash ¿estas seguro?

Norman: Ya sería una gran impresión que te viera así por teléfono. No quiero ni imaginarme como reaccionará si te ve en persona.

Ash: Justamente por eso quiero que venga.

May: No te entiendo Ash.

Ash: Quiero que mamá me vea. Así, como estoy. Quiero que ella pueda abrazarme y desahogarse todo lo que necesite. Creo que así le será más fácil sobrellevar todo lo que implica mí... condición.

Max: Visto de ese lado, creo que concuerdo con Ash.

Caroline: Si, tiene mucha razón.

Norman: Decidido. Llamaré a Delia y la invitaré a pasar un tiempo aquí. Espérenme. No tardo nada.

Norman abandona el comedor y va al videoteléfono de la casa. Marca el número de la casa de Ash. Unos segundos después...

Delia: Residencia Ketchum.

Norman: Saludos Delia. Soy Norman.

Delia: ¡Hola Norman! Me alegra verte. ¿Cómo esta todo por ahí?

Norman: (nervioso) Bueno... no puedo quejarme.

Delia: Supongo que no será solo una llamada de cortesía.

Norman: Adivinó. Ya veo de donde heredó Ash el intelecto.

Delia: (ríe) Me halagas demasiado. Tiene más de su padre que de mí.

Norman: Volviendo al motivo de la llamada. Mi esposa y yo estuvimos hablando y queríamos invitarla a pasar unos días aquí con nosotros.

Delia: (sorprendida) ¿En serio? ¿Qué dijo Ash?

Norman: El es quien más quiere verla. (en voz baja) Aunque no pueda.

Delia: (confundida) ¿Dijo algo Norman?

Norman: (nervioso) No, no. No dije nada. En fin ¿qué dice? ¿Quiere venir a Petalburg?

Delia: Me encantaría. Tengo muchas ganas de pasear por lo ciudad. No tuve mucha ocasión de hacerlo la primera vez que fui.

Norman: Seguro que Caroline se alegra de escuchar eso.

Delia: En fin, voy a preparar mis cosas. Probablemente llegue mañana por la mañana.

Norman: La estaremos esperando.

Delia: ¡Nos vemos!

Delia corta. Norman respira aliviado.

Norman: Por poco y la cago.

Norman regresa al salón donde todavía estaban todos reunidos.

Ash: ¿Y?

Norman: Tu madre llegará mañana por la mañana.

Ash: Ya veo.

Caroline: Tendremos que preparar todo.

Norman: Si. Ash...

Ash: Diga Norman.

Norman: Ella desea mucho verte.

Ash: (sonríe) Ojala pudiera decir lo mismo. May, ¿me ayudas a volver a la habitación?

May: Por supuesto.

Ash y May se retiran y van a su habitación. A la mañana siguiente ya tenían todo preparado para recibir a
Delia. May aún se encontraba con Ash, ayudándolo y dándole de comer. En ese momento suena el timbre y Caroline abre. Delia estaba en la puerta.

Caroline: ¡Hola Delia! ¡Gracias por aceptar nuestra invitación!

Delia: ¡Gracias a ustedes por invitarme!

Caroline: ¡Pasa! ¡Siéntete como en tu casa!

Delia pasa y sigue a Caroline al salón. Allí se encontraban Norman y Max.

Norman: ¡Hola Delia!

Max: ¡Hola señora Ketchum!

Delia: ¡Norman! ¡Max! ¡Que gusto me da verlos!

Norman: El gusto es nuestro. Siéntese. ¿Quiere algo de comer?

Delia: No, gracias Norman. Comí algo antes de llegar aquí.

Norman: Ya veo.

Delia: Más importante ¿dónde esta Ash?

Los tres miran hacia abajo sin saber que responder.

Caroline: Pues... veras Delia... el está...

Justo en ese momento, se escucha la voz de May.

May: ¡Estamos yendo para allá!

Ash y May llegan al salón. Delia se levanta para abrazar a su hijo pero se detiene al ver que llegaba apoyado
en May.

Delia: ¿Ash? ¿Qué sucede hijo?

Ash: Hola mamá. May, ¿podrías dejarme en el sofá?

May: Claro.

May ayuda a Ash a sentarse en el sofá. Este tenía los ojos cerrados.

Ash: Siéntate mamá. Hay algo que debo decirte.

Delia se sienta enfrente de Ash.

Delia: Hijo me estas preocupando. ¿Qué sucedió?

Ash: Verás mamá. Hace poco más de una semana... sufrí un terrible accidente. Un accidente que... me dejó
totalmente ciego.

Todos esperaban ver la reacción de Delia. En principio, ella no quería creer lo que su hijo le decía.

Delia: (nerviosa) Es una broma ¿verdad Ash? Debe serlo ¿no?

Ash: No mamá. (abre los ojos) No es una broma.

Si la palabra horror pudiera expresarse en una cara, esta sería la cara de Delia al ver los ojos totalmente blancos de su hijo.

Continuará...
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