¿Pero a que precio?
Publicado por Brunchi en el blog Brunchilandia 2021. Vistas: 131
Ver todo a través de la gente más cercana a ti, calcular que sería conveniente hacer y que no, hace que todo siempre se complique. Porque a fin de cuentas siempre optas por no hacerlo, ya que hay muchos contras que te aseguran que el riesgo será grave para ti.
A pesar de ver a través de la familia y que los pasos se sigan repitiendo una y otra vez, se intenta siempre evitar aquel dejavú, ¿pero a que precio?
Al tomar en cuenta las palabras sabias de los adultos te quitas mas la aventura de experimentar y correr un riesgo que quizás sea bueno hacerlo. O quizás no.
En mi caso, siempre observo todas las probabilidades, doy calabazas a todos los chicos con que voy a salir por el simple hecho que veo peligro en ellos, y justo al consultar con la confianza plena con mis padres termino negando la oportunidad. No sé que tan bueno sea hacer lo que hago pero sé que a las largas me voy a arrepentir y me voy a volver una amargada que siempre temió romperse un hueso.
Siempre he intentado ser sincera con mis padres, confiar en sus consejos, ¿pero hasta que punto podré? Todo lo que me dicen es mas oscuridad del mundo, y ni siquiera me alientan a arriesgarme por la vida. Si bien, estoy de acuerdo que digan que primero la carrera ante todo. Pero... ¿Que ocurre con las experiencias íntimas? ¿Con gozar pleno con tu libertad? ¿Arriesgarse? Creo que como veo todo lo malo y veo todo lo que podría pasar desde asesinatos, violaciones como desmembramientos, dejaré de creer en el mundo. Dejaré de pensar en experimentar, y más aún de tener curiosidad por la vida. Al fin y al cabo desde toda perspectiva, la vida de nuestros padres se repite en nosotros. Y si no son de los padres, son de los hermanos mayores.
Lo gracioso, es que me pregunto ¿como es llego a ser tan anticuada y sigo sin novio?. Pues la respuesta es tan obvia, no logro dejar de ver la oscuridad y romper las reglas y consejos, para tan solo vivir el placer de la libertad y placer, para luego llegar a casa y que mis padres o seres queridos estén convulsionando de los nervios y preocupaciones hacia mi persona.
Creo que por ese motivo tampoco quiero casarme, para llegar a eso, primero debe haber amigo, luego mejor amigo, novio y por último prometido. Yo sinceramente veo que no lo tendré, si ya me preocupo y soy prevenida por cada detalle, y mas aun con el clima, creo que no habrá quien para calmarme y ser capaz de amarme por sobre todo. Y bueno llegar a mi, por encima de todos mis "no podré" y mis calabazas.
Es frustrante de cierta manera, pero creo que prefiero estresar a mis seres queridos mediante mis estrés de la Universidad, a ser un estrés y preocupación por posibles suposiciones de muertes mientras estoy fuera del hogar y sus cálidos brazos.
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