No te preocupes por mí [SesshXKag]

Re: No te preocupes por mí [SesshXKag]

Hola a tod@s bueno tengo q decir q pues ya mañana salgo de viaje y pues será un laargo viaje u.u, en fin me cambio de ciudad, para volver a retomar mis estudios, ya hae un par de años q estaba sin nada n.nU q verguenza no? pero bueno iniciare de nuevo mis estudios,así que pues no creo q continue tan seguido con mi fic, primera la zona a la k voy no tiene para poner inter ToT y el k hay ahi es leeeentisimo,ademas no me dejaran llevarme mi pc ToT al menos por un rato n.nu, y pues no se cuando haga el sig capitulo lo unico q puedo asegurarles es q lo acabare lo juro,no me gusta dejar fics incompletos y bueno los 7 q he hechio los acabé y este no será la excepcion,buen0o se k no sera el fin del mundo pero espero me tengan paciencia de aki por lo menos en q me adapto y me acomodo alla, bueno pues aqui les traigo el cap 7, algo corto pero nbo tenia nada mas escrito espero les guste.

No te preocupes por mí…​

Cap.7Familia.​

Eran las 3 de la tarde cuando regresó de nuevo al hospital, su hermano estaba comiendo, al menos ya había recuperado fuerza, solo faltaban un par de días para darlo de alta, o quizá menos…

Souta la vio entrar y le sonrió.

-¿Cómo te fue?-preguntó.

-Bien, gracias-respondió-¿Y Sango?

-Vino temprano, pero alguien le llamó y tuvo que irse-explicó.

-Vaya…-era algo raro, Sango no trabajaba esos días…

-Vendrá más tarde-le dijo Souta.

-Si, lo sé…

-Bueno ¿quieres que hablemos…?-se refería a sus dudas.

-En casa, estará mejor…-dijo ella.

-Sí así lo quieres, estará bien…-sonrió.

*--*--*--*--*​

La fiesta no era tan mala, había muchos ex compañeros de la carrera, a algunos los conocía desde la prepa, y otros como Miroku los había conocido desde primaria, no los consideraba amigos, a nadie ni al mismo Miroku, pues para él decir amigo era un lazo muy fuerte, y no estaba seguro que con alguno de los presentes en la fiesta, compartía ese lazo, siempre estaba solo, Miroku si estaba con él hasta en el trabajo, pero no siempre fraternizó tanto con él.

No, la fiesta no era mala, el malo era él, seguía sintiéndose ajeno al ambiente…

-Vamos Inuyasha, baila con las chicas-le decía Miroku-es una fiesta, no un funeral…

-No tengo ánimos para bailar-dijo él.

-No pensé que el divorcio te cayera tan mal, amigo…-le dijo dándole una palmada en el hombro, a fin de cuentas él fue el abogado.

Inuyasha no dijo nada, pero pronto vio que Miroku se enderezaba, no entendía el ¿Por qué?

-Te dejaré solo un momento, ya llegó la persona que espero-le dijo, mirando a la puerta.

-Claro-dijo sin mirarlo, sabía que ese era otro de los delirios de Miroku, mujeres…

*--*--*--*--*​

-¿Tomarás las vacaciones?-le preguntó seguro su amigo.

-No lo sé…-inseguro.

-Piénsalo Sesshomaru, ya es tiempo de descansar un poco ¿no crees?

-No si quiero llegar a director del hospital-le dijo serio.

Jaken suspiró resignado, Sesshomaru llevaba ya 3 intentos para director y no lo lograba aún, tal vez le faltaba más tiempo…

-Por lo que veo para ti no existe el dicho, “la tercera es la vencida” ¿cierto?

-Nunca te rindas amigo…-sonrió-eso me enseñó mi padre, y eso haré siempre…

-Oh sí, y hablando de tus padres ¿Qué sabes de ellos?-indagó.

-En realidad ya casi nada-desinteresado.

-¿Nada desde que te…?

-Si desde que se empeñaron en que debo hacerme cargo de sus bienes pero estableciéndome que debo casarme…-dijo en tono cansado.

-Es lógico amigo…-dijo Jaken-Ya tienes 38 años, un par de años más y serás de 40, entiéndelos eres su único hijo, al menos varón…

-Sí lo sé, pero mi padre no debería ser tan…no sé, mi hermana Yui, ya le dio 2 nietos ¿Qué más quiere?

-No olvides que ellos ya no son Taisho, ahora ella pertenece a los Thompson ¿lo olvidas?-le aclaró.

-Eso no cambia que lleve mi sangre-serio-y tiene el mismo derecho que yo de ocupar las empresas, al menos eso creo yo…

-Tu padre no es de esa idea…-dijo Jaken-él quiere preservar su apellido, así que ¿Quién mejor que su hijo varón, no crees?

-Nadie le asegura que seré padre de varones-le dijo-además casarme es algo que no está en mi lista de planes, ni siquiera con Kagura lo pensé…

-¿Ah no?-extrañado y sorprendido-¿Entonces…?

-Lo que te dije aquella vez de si aceptaría pasar el resto de mi vida con Kagura, si fue cierto más nunca hablé de un matrimonio.

Jaken sabía ¿Por qué lo decía? Supo del primer y único matrimonio de Sesshomaru, y lo mal que quedó después de su divorcio, tanto moral como económicamente, y a raíz de eso su amigo optaba por la unión libre, o de ser posible relaciones sin compromisos…

-Bueno ojalá tus padres desistan de su idea…-cortó Jaken el tema.

-Ojalá…-dijo Sesshomaru.

-Bueno y volviendo al primer tema ¿para cuando las vacaciones?-sonrió.

-No cambias-sonrió también…

*--*--*--*--*​

Aome seguía ahí en el cuarto de Souta, pensando que pronto ya estaría su hermano dado de alta, y podrían solucionar sus problemas, Souta también se veía ensimismado en sus pensamientos, Aome lo notó.

-¿En qué piensas Souta?-le preguntó.

-Eh pues cosas…-dijo él, algo extraño para Aome pensó que lo sorprendería o algo así pero parecía que no.

-Mmm ¿Qué cosas? ¿Alguna chica, o lo que me dijiste ayer?-preguntó.

-Ambas

-Vaya ¿o sea que también una chica?-le guiñó el ojo.

-Te estás pareciendo a Sango…-le dijo asustado.

-Eso no es verdad, ¡malvado!-le dio un codazo.

-¿Lo ves?-rió-eso dolió.

-Pues casi te lo mereces…-le dijo, siguieron riéndose un rato, hacía mucho que ellos no se divertían como cuando niños, solo que no pudo seguir hablando recibió una llamada de Sango.

Souta se quedó callado, oyendo lo que hablaba, y por un lado pensando en lo que debía hacer en cuanto saliera del hospital, por fortuna nadie atentó contra su vida en esos días que estuvo inconsciente, era una de las miles ventajas al cambiar de identidad. Y por otro lado pensaba en su compañera de trabajo…

-Bien no te preocupes, tú diviértete, nos vemos mañana…-le dijo Aome al colgar.

-¿Qué pasó?-preguntó Souta.

-Sango está en una fiesta, vendrá mañana.-explicó.

-Vaya…

-Sí al parecer un amigo la invitó-dijo sin prestarle atención.

-Oye Aome ¿Y tú porque no sales a fiestas con amigos?-preguntó de repente.

-Sabes que la única amiga que tengo es Sango, y de amigos pues, estoy conociendo a un doctor, es quien atiende tu caso, pero pues no creo que dure mucho la amistad, nada más y también Inuyasha-dijo con cierta molestia.

-¿Inuyasha? ¿Mi cuñado?-dijo un poco animado.

-No es tu cuñado-advirtió, pero sabía que su hermano le guardaba aprecio a Inuyasha- pero sí, Inuyasha regresó a México, atendí su divorcio, y me pidió que fuéramos amigos…

-No creo que esa sea su única intención…-dijo Souta.

-Pues pierde su tiempo, yo ni loca volvería con él…

Souta la notaba molesta al hablar con él, y eso significaba que Aome aun sentía algo por Inuyasha, pues le seguía doliendo su abandono, podría ser que Aome lo siguiera amando, o le guardara odio, aunque él estaba más seguro de la primera.

-No me lo tomes a mal hermana-le dijo serio-no debería dolerte o incomodarte hablar de Inuyasha, han pasado casi 10 años desde que te dejó, lo encontraste de nuevo y seguro te explicó sus razones ¿cierto?

-Sí, me dijo que no estaba preparado en aquel tiempo y se sentía presionado por mí…

-Bueno el hecho es que no tiene nada de malo que te lo hayas encontrado de nuevo, es bueno que te haya explicado lo que pasó, pero por la forma en que hablas de él, puedo decir que aún lo quieres…

-No, estás equivocado, yo no siento nada por él, me dolió que me dejara, pero no siento nada por él…

-Eso sería bueno que no sintieras nada por él, pero sinceramente no te creo del todo, no voy a decir que soy tu hermano y te conozco, sabes que no-se refería a que se criaron separados-pero te diré que soy hombre, y también he tenido mis experiencias amorosas, así que en base a eso te hablo…

-Sí yo lo sé, pero no siento nada por él-repitió.

-Bueno si tú lo dices…-poco convencido-¿Y qué me cuentas de tu amigo el médico?

*--*--*--*--*​

Sango vio a Miroku sentado con alguien que parecía reconocer, antes de entrar a la fiesta le había llamado a Aome, para preguntar por Souta, le alegraba que todo siguiera bien.

Miroku fue a encontrarla, y le agradeció que hubiese asistido.

-Gracias a ti por invitarme-dijo ella.

-Bueno…ehm ¿quieres algo de beber?-ofreció.

-Sí, un refresco por favor…

-Bien, no tardo.

Sango se acer4có a la mesa en donde Miroku había estado y…

-¿Inuyasha?-extrañada al reconocer al hombre que estaba ahí, aunque lo veía decaído.

-Eh…-alzó la vista-¿Te conozco?-extrañado.

-¿No me digas que no me recuerdas?-rió-¡soy yo Sango!

-Ah…Sango-medio animado-¡Que milagro!-la abrazó-no te reconocí, cambiaste mucho.

-Tú también cambiaste, dicen que los años no pasan en vano…-sonrió.

-Sí ya lo creo, ¿Cómo estás? ¿Y cómo llegaste aquí?-extrañado de verla ahí.

-Un amigo, mira es el de allá-señaló a un joven de camisa azul que estaba con las bebidas.

-Ah, Miroku-rió-que pequeño es el mundo, no creí que tú y Miroku se conocieran…

-Ah, sí es que lo conocí el día en que fue con Aome para tramitar tu divorcio…

-Vaya no sabía que se conocían-dijo una tercera voz, era Miroku.

-Ah sí, es que soy amiga de Aome-dijo Sango con naturalidad.

-¿Quién es Aome?-extrañado Miroku.

-Una historia larga de contar Miroku-dijo Inuyasha-pero Sango me dio gusto verte, no pensé que te volvería a ver.

-Ni yo…pero espero un día podamos hablar como antes, cuando estabas con Aome…

-Sí yo igual, aunque lo dudo…

El único que no entendía nada era Miroku, ¿Quién rayos era Aome? ¿Y cómo Inuyasha conocía a Sango?

-Bueno yo los dejo, ya me retiro-dijo Inuyasha.

-¿Qué?-extrañado Miroku-¿Por qué te vas tan pronto?

-Tengo unas cosas que hacer, pero ustedes diviértanse, Miroku nos vemos el lunes, Sango, espero verte pronto.-se despidió.

-Claro-dijo Sango-bueno te dejo mi tarjeta por si un día quieres hablar

-Gracias-le dijo al recibir la tarjeta.

Ya cuando Inuyasha se fue…

-¿Cómo se conocieron?-preguntó Miroku.

-Es algo largo ¿no te importa?

-Tengo tiempo de sobra…

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Por otro lado, un auto BMW Mercedes del año, acababa de llegar a una enorme mansión, los recibió el mayordomo.

-Señor y Señora Taisho ¡que gusto verles!-saludó el anciano.

-Gracias Onigumo-dijo el señor-¿Cómo ha estado todo por aquí?

-Todo bien señor Inutaisho-sonrió el hombre.

-¿Y Sesshomaru? ¿Dónde está mi hijo?-preguntó la mujer.

-Oh bueno, hay cosas que han cambiado-dijo serio el mayordomo-el joven Taisho ya no vive aquí desde hace casi 2 años-explicó.

-¿Cómo?-extrañado el señor Taisho.

-Dijo que quería ser independiente y buscó un apartamento cerca de su trabajo.

-¡¿Y porqué no me lo dijo Onigumo?!-molesto.

-El joven me pidió discreción…

-¿Discreción?-molesto-¡por esa discreción podría despedirlo!!

-No te molestes querido, nuestro hijo sabe lo que hace-dijo la mujer.

-Pues yo no lo creo, pero aún así me va a oír ese muchacho, ¿muchacho? Ya es un hombre-se corrigió.

-Puede retirarse Onigumo-dijo la mujer, viendo que su esposo estaba molesto.

Entraron a la casa y la servidumbre los saludó, se encontraron con la nana, ella les dijo que los únicos que iban de vez en cuando a ver la casa era su hija Yui y los niños, el señor Taisho no preguntó nada de ellos, pero su esposa sí, así que la nana le mostró algunas fotos de sus nietos.

No era que Inutaisho no quisiera a su hija y nietos, los quería eso sí, pero estaba molesto por as acciones de Sesshomaru, ya iba para casi 40 años y lo veía de mal en peor, sin esposa ni hijos, y sin lograr aún el puesto de director en el hospital, para él eso era pérdida de tiempo, Sesshomaru debía dedicarse a administrar las empresas de su familia, para eso lo educó, pero parecía que su hijo no compartía ese punto de vista…
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Bueno es todo ya por el momento y pues espero me esperen un poco, tratare de poner cap cada semana, pero será ya cuando este bien ubicada alla cuidense byee!!!!

 

Hola!!! Bueno primero gran disculpa por el tiempo tardado pero pues estoy de regreso con la historia, y pues espero la acepten de nuevo. por cierto otra disculpa para EvaBeatriz perdon por la demora y por cierto tuve dos cuentas en CZ por unos problemas q tuve al tratar de acoplarme a la pag jejeje, pero bueno se ha fusionado, Kiara danny con Inudanny, y pss ahora igual me cambie el nombre por Gali Lozano, aún así siempre todo fue obra mía con varios seudonimos en otros foros pero bue...Eva ojala puedas ver la continuacion porque ya no te encuentro por aki jeje bueno a leer ^^

Cap.8 Reunión Familiar.​

No esperaba que su padre lo llamara, hacia tiempo que sólo recibía llamadas de su madre, de su padre no, desde que decidió convertirse en médico y luchar por el puesto de director en el hospital.

“Cometes un grave error, tu lugar es en la empresa, pero si insistes con esa estupidez olvídate que tienes padre” Recordó que esas fueron las palabras de su padre en su última charla, su padre lo había apoyado en la medicina solo para que consiguiera su doctorado, eso le daría más prestigio a las empresas pensaba su padre, pero jamás se imaginó que su hijo querría ejercerlo totalmente.

—Padre no esperaba tu llamada—dijo formalmente Sesshomaru.

—Me lo suponía—dijo el Sr. Taisho algo molesto—El motivo de la llamada es para decirte que tu madre y yo estamos en la ciudad, nos gustaría que vinieras a vernos, tu hermana ya fue avisada y vendrá a cenar con nosotros.

—De acuerdo ¿A qué hora es la cena?

—Siete en punto, aquí te esperamos—dijo su padre y colgó.

No le sorprendía el formalismo de su padre, siempre era así, pero igual recordaba que de niño su padre era muy consentidor con él, no daba muestras de afecto en público, pero recordaba los momentos que pasaba con él, ahora simplemente su padre estaba molesto por sus decisiones, empezando por lo de ser medico.

Salió del consultorio y se fue a hacer su recorrido para checar a sus pacientes, pronto en menos de un par de horas ya estaba con su último paciente el joven Higurashi, lo observó de momento parecía que ya se estaba recuperando pues lo vio leyendo tranquilamente, y a su lado veía a Aome recostada en el sillón durmiendo.

— ¿Y bien, cómo se ha sentido amigo?—preguntó Sesshomaru.

—Muy bien doctor, ¿Cree que ya me puedan dar de alta?—preguntó el joven.

—Eso será el lunes—dijo tranquilo.

—Uhm…lo decía porque ya no deseo hacerle pasar noches incomodas a mi hermana…

Sesshomaru se le quedó viendo por un momento a Aome, la convencería de hacerse un chequeo general ya que era verdad que casi no dormía… No pudo pensar demasiado pues pronto ella despertó.

—Sesshomaru ¿Pasa algo con Souta?—preguntó un poco adormilada.

—No, él está en perfectas condiciones pero me preocupas tú—dijo serio.

— ¿Yo porqué?—extrañada.

—Hermana ¿Por qué será? Casi no duermes—reclamó Souta.

Aome lo miró con una mirada que casi le decía ¿Y todavía lo preguntas?—Si es por eso, despreocúpense los dos ya me acostumbré a trabajar mucho y dormir poco—sonrió.

—De cualquier modo me gustaría que me permitieras hacerte un chequeo general, no tardará—dijo el doctor.

—Pero si yo me siento bien…

—Hermana ve a hacer ese chequeo, digo si es que el doctor puede hacerlo ahora, porque pescarte otro día…

—Sí, tengo tiempo de sobra ¿Qué dices Aome?—preguntó.

—Bien, vamos a hacer el chequeo—dijo con un poco de fastidio.

Souta sonrió al verlos salir al consultorio del doctor, esperaba que el chequeo no sacara nada fuera de lo normal.

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De nuevo solo en su gran jaula de oro, pensaba cuando llegó a su residencial Inuyasha.
Ya era un poco tarde, el sol se estaba poniendo, miró el teléfono y sólo por un instante le surgió la necesidad y el deseo de llamarle a Kikyo.

—Sólo preguntaré si llegó bien de su viaje—dijo auto justificándose por su acto.

El teléfono sonó tres veces, jamás se le habían hecho tan largos los ring del teléfono al sonar. —Diga—dijo la voz de su ex mujer.

—Kikyo…s-soy…

—Inuyasha, cariño ¿Qué pasó?—preguntó la joven.

—Sólo quería saber si habías llegado con bien a Holanda—dijo algo nervioso.

Kikyo hizo algunas afirmaciones en holandés—Cariño pensaba llamarte mañana ya que supuse estarías ocupado en la oficina.

—Ya…aún así me alegra saber que estás bien y contenta—dijo con algo de añoranza, notaba el timbre de su voz lleno de júbilo, y ¿Cómo no? Tantos años lejos de su familia y de su tierra.

Siguieron charlando, por un lado a Inuyasha le agradaba que aún le hablara como si aún estuvieran casados, cariño, amor, mi vida, cielo, cosas así… escuchó atentamente lo bien que la habían recibido sus familiares, habían preguntado por él, y sobre su divorcio no estaban muy de acuerdo ya que le tenían aprecio sus suegros y cuñados, pero confiaban en que pronto ambos regresaran o en su defecto, ambos encontraran su felicidad en alguien más…

*--*--*--*--*​

—Bien, lo único que tienes es cansancio, aunque supongo que es por las desveladas que has tenido en este tiempo que Souta estuvo inconsciente—dijo Sesshomaru.

—Entonces estoy bien, y ustedes que hacen tanto alboroto—dijo en forma de reproche Aome—Además estoy acostumbrada a dormir poco.

—Ya somos dos—dijo Sesshomaru. En ese justo momento sonó su celular, era el recordatorio de la cena, y aparte su turno había concluido.

— ¿Ya ha terminado tu turno?—preguntó Aome, ya que sabía que cuando sonaba así su celular indicaba el cambio de turno.

—Eso y una poco apetecible reunión de familia—dijo secamente.

—Vaya, parece que no te llevas bien con tu familia ¿cierto?—preguntó, ya que esos temas no los habían tratado aún.

—Algún día te contaré, y si gustas te los puedo presentar.

—Claro estaré ansiosa—dijo Aome.

—No te incomodaría si fuera ahora—dijo Sesshomaru de repente.

— ¿No crees que primero deberías hablar con ellos primero? Por lo que sé llevas años sin verlos, seguro tendrán mucho que hablar—dijo Aome un poco sorprendida.

—Tienes razón—dijo reconociendo que fue demasiado precipitado—Bien Aome intenta dormir un poco más y nos vemos mañana—sonrió.

Aome asintió, y Sesshomaru se dispuso a ir a la supuesta reunión. Mientras Aome se regresaba con su hermano.

*--*--*--*--*​

Llegó a la mansión Taisho con algunos minutos de retraso pero a tiempo. Sonrió al ver a sus sobrinos jugando en la sala, eran dos jovencitos uno de doce años y el otro de diez años, Daisuke era el mayor, y era el que más parecido le daba a su cuñado sobre todo en su cabello rojizo y sus ojos azules; y su sobrino menor Iker de cabello castaño claro y ojos café claros, él era quien más tenía parecido con su hermana.

— ¡Tío!—Exclamó Daisuke y se abalanzó hacia él— ¡Que gusto que vinieras, hace años que no nos visitas!—dijo en forma de reproche. Mientras Iker sólo se limitó a darle un saludo cordial sin tanta efusividad. Sin duda Daisuke tenía el carácter de su madre y claro Iker el de su padre, aunque en el físico fuera al revés.

—Chicos ¡Cuánto han crecido!—dijo con asombro Sesshomaru— Iker ¿No me darás un abrazo?

El chico se sonrojó un poco y le dio un abrazo un tanto tímido, pero Sesshomaru lo acercó a él y acercó a Daisuke, abrazando a ambos sobrinos—Me alegra verlos, y discúlpenme pero ser medico no es tan fácil como uno cree.

En ese momento una voz interrumpió— ¡No puedo creerlo sí viniste bichito!—dijo una mujer de unos treinta años, cabello castaño y ojos café claros, y ambos se abrazaron.

— ¿Y qué te hizo pensar que no lo haría bichita?—preguntó.

—Mmm déjame ver—dijo pensativa—Una que me dejaste esperándote en navidad, dos en año nuevo igual, tres no quieres pisar esta casa, cuatro la relación con papá…

—Cinco mi trabajo de tiempo excesivamente completo—dijo burlón.

Las bromas pararon al ver una pareja de edad algo avanzada y un hombre pelirrojo, sus padres y su cuñado. Sesshomaru pasó de alegre a serio cuando vio a su padre. Pero aún así saludó cálidamente a su madre y formalmente a su padre y cuñado.

—Al fin llegaste—dijo su padre secamente.

—Lamento el retraso, pero tuve un paciente que checar de última hora—dijo como explicación a lo que su padre hizo mueca de disgusto.

—Bien familia, vamos a cenar—dijo su madre.

La cena comenzó un poco tensa, los únicos que hablaban eran Yui, Sesshomaru y su madre, mientras Bill el esposo de Yui, y su suegro cenaban en silencio, los niños sólo se dedicaban a escuchar la plática de su tío quien les contaba sobre una operación riesgosa que realizó apenas un par de semanas.

—Y bien Sesshomaru—dijo su padre captando la atención de todos— ¿Has conseguido ser director del hospital?—preguntó secamente.

—Para mi desgracia padre, tendré que esperar unos años más, ser director de hospital es un papel muy importante y delicado.

—Llevas años metiendo solicitud ¿Y no te das por vencido?—dijo de forma cansina Inutaisho.

—Nunca me doy por vencido, tal vez aún no me gane ese papel, pero soy un cirujano reconocido y no sólo en el hospital, si no también en otros países.

—Pierdes tu tiempo hijo mío—dijo fríamente—Si bien quisieras, ya estarías manejando las empresas de la familia como debe de ser.

—No es un ramo que me importe.

—Debería, pues gracias a esas empresas somos lo que somos, y gracias a ello te mantuve y pagamos tu carrera, es el patrimonio de todos nosotros, incluyendo el de tus sobrinos—dijo mirando a sus nietos.

—A ver señores—dijo la Sra. Taisho de forma seria—Esto es una cena, y en la cena está prohibido hablar de problemas, cariño si tienes algo que hablar con Sesshomaru referente a la empresa, sería mejor que fueran al despacho a tratarlo.

Ambos varones asintieron, la verdad es que la Sra. Taisho a pesar de tener un carácter amable, también tenía su lado estricto, y eso se notaba en la forma en que mantenía el orden en su casa.

—Pero espero que no decidan hacerlo justo ahora—dijo Yui—Vamos papá, tantos años sin verle y ahora justo que acaba de llegar preocupándose ya de la empresa—sonrió dulcemente.

—Tienes razón cariño—sonrió Inutaisho.

—Por cierto cuñado—Habló Bill—Tenía entendido que tenías una novia, pensé que la presentarías pero veo que no la trajiste.

Toda la familia se sorprendió al escuchar eso, sus padres sonrieron pensando que quizá pronto su hijo sentaría cabeza.

—Tal como decías cuñado, tenía—dijo Sesshomaru, restándole importancia—Y sí “tenía” pensado presentarla ante la familia—hizo énfasis en la palabra “tenía”—Pero no siempre todo sale como uno quiere.

Nadie comentó más nada acerca del tema, y siguieron cenando hablando de otras trivialidades. Pronto al terminar la cena se despidieron los Thompson, quedando solamente los tres Taisho.

—Bien, supongo que ahora si querrán hablar de los asuntos de la empresa ¿verdad?—dijo la Sra. Taisho. Inutaisho asintió y Sesshomaru se resignó—Bien, hijo me dio gusto verte de nuevo, espero podamos hablar después—lo abrazó—Buenas noches.

—Bien ahora si podemos hablar con calma—dijo su padre, mientras iban al despacho.
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N.A: Bueno espero haber mejorado con el tiempo ^^U Gracias en serio por sus comentarios :) chau!

 

O-O bueno de haber visto q tenia respuestas habria subido antes x) pero no me notificio el foro u.u en fin :) Aquí la conti :) Ivana sé que es un lío hasta yo me lio JAJAJA pero me agrada que te guste =), Saori q gusto saber q eres tu eva n.n y pues me alegra que te haya gustado y hum bueno menos palabra a leer =).

Cap.9 Plazos.​

—Bien ahora si podemos hablar con calma—dijo su padre, mientras iban al despacho.

— ¿De qué quieres que hablemos padre?—dijo Sesshomaru al estar en el despacho.

—Bueno no es un tema nuevo, así que supongo que sabes que he venido para que de una buena vez asumas el lugar que te corresponde en las empresas, y no aceptaré negativas—dijo serio—Además que también hay que hablar sobre ¿Cuándo me darás un heredero? Mira diría que me importa más que te cases, pero si no quieres únicamente te pediré que me des un heredero por lo menos y tienes de plazo dos años para conseguirlo.

Su padre le había dicho todo eso así tan tajante y sin rodeos que lo miró no asombrado, pero si muy desconcertado, no era novedad que le exigiera que se hiciera cargo de los negocios, y que le dijera que estaba desperdiciando su tiempo al no contraer matrimonio con nadie, pero ¿darle un plazo para tener un hijo? En verdad su padre estaba urgido…

—Escucha papá acepto que tengo que asumir el papel de la empresa, lo sé y no estoy de acuerdo por que mi camino es la medicina—dijo seriamente—Acepto que también debo formalizarme con una mujer, sólo que no ha llegado la indicada, pero de eso a que me des un plazo para tener un hijo…

—Dos años no es mucho tiempo, es más creo que es lo conveniente.

—No hables como si se tratara de un objeto, es una vida, más bien dos por la madre—dijo molesto.

—Con ella se podría negociar, si es que no quieres formalizar nada serio—dijo así sin más.

— ¡No es un maldito negocio!—se exaltó— ¿Cómo pretendes que compre a un ser? Y además ¿Cómo crees que se puede negociar tal cosa?

—Sesshomaru sabemos muy bien que hay miles de mujeres que aceptarían darte un heredero a cambio de una buena suma de dinero—dijo fríamente—Aunque claro se harán exámenes para que asegurarnos que no vendrá un producto dañado física o moralmente.

Sesshomaru bufó molesto, no imaginaba a su padre hablar de la vida de un ser que aún ni siquiera estaba concebido, así fríamente como si fuera un objeto, un negocio a tratar nada más. Estaba claro que él no quería formalizar nada aún, más que nada por no hallar a una mujer indicada además de no querer repetir el infierno que vivió en su prematuro matrimonio.

—Sabes, aceptaré hacerme cargo de las empresas—dijo lo más tranquilo que pudo—Deja que pase lo que queda del año y me haré cargo del negocio.

— ¿Ya desististe a la idea de ser director del hospital?—sarcástico.

—No, pero tienes razón en que las empresas me conciernen y mucho, ya que es nuestro patrimonio, no sólo mío también de mi hermana, sobrinos y mi madre; así que como ya he esperado mucho por éste sueño y nada más nada, no seré egoísta y me haré cargo para tu tranquilidad y para no afectar a la familia.

—Ese es mi hijo, sabía que algún día recapacitarías y tomarías la decisión correcta—lo palmeó en la espalda.

—Pero una cosa padre, eso de negociar la vida de un ser no lo permito, no estoy de acuerdo y espero que entiendas eso, si tanto quieres un heredero puedes preparar a uno de los niños—se refería a los hijos de su hermana—Y si tanto te importa el apellido, podemos hablar con Yui y Bill, te aseguro que aceptarán ya que al menos tendrían asegurado el futuro de uno de los chicos, ya el otro se encargaría del patrimonio de su padre.

—No es mala idea hijo, ya la había pensado—dijo el Sr. Taisho con seriedad—Pero aún así prefiero mil veces que tú me des un heredero.

—No te darás por vencido ¿cierto?—fingió una sonrisa burlona.

—En absoluto y lo sabes. Y como dije tienes dos años para lograrlo—dijo tranquilamente.

*--*--*--*--*​

Había salido de la casa de sus padres muy molesto, resignado ya por tomar el lugar que le correspondía en las empresas, y es que durante años lo había pensado y le había dado vueltas en la cabeza y al final se puso de plazo cuatro intentos para ser director y si los cuatro los fallaba entonces asumiría su papel. De suerte faltaba medio año para que hicieran una elección para director no en ese hospital sino en otro, en el cual su propio director lo había puesto como candidato. Sería un nuevo hospital, así que elegirían personal de varios hospitales para abrirlo.

En total eran veinte candidatos para el puesto en ese hospital, de diferentes hospitales, incluso hasta de otros estados, eso sí eran sólo los mejores médicos, y no tanto por curar a sus enfermos sino que se evaluaba su ética y forma de trabajo con los demás.

—Seis meses nada más—se dijo mientras pensaba en las decisiones que tomaría en adelante. Entró a su casa y se dispuso a descansar un poco, aunque no pudo del todo pensando en el último plazo, el de formar una familia o bien tener un heredero—Que patético eres Sesshomaru—se dijo a sí mismo—Mira que a tus casi cuarenta años tu padre aún siga rigiendo tu vida, y tú muy obediente también…—suspiró con pesadez.

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Aome ya estaba preparada para recibir a su hermano en su casa, al fin era el día en que lo darían de alta, por un lado estaba emocionada, ya que hacía tanto tiempo que los habían separado así que no se conocían bien, así que por ese lado estaba un poco nerviosa, pero no lo hizo notar.

—Buenos días—saludó a su hermano, que ya esperaba impaciente salir del hospital.

—Hola cariño—le dijo su hermano.

—Vaya se ve que ya estás listo para irte—dijo al verlo vestido ya con ropa normal y una maleta a lado de la cama.

—Sí, ya sólo falta que firmes el alta, y ojalá Sesshomaru no tarde de más—dijo haciendo mueca de disgusto y preocupación.

—Buenos días—saludó la ronca voz de Sesshomaru— ¿Cómo te sientes Souta?

—De maravilla doc, y me sentiré mejor si ya firman el alta—dijo burlón.

—Pues a eso venía, pero antes te haré un chequeo general, aún así no olvides que debes guardar reposo unos días más así que tu trabajo y pendientes pueden esperar al menos una semana—dijo.

Souta asintió un poco desanimado, él esperaba ya retomar sus actividades, más que para él como agente era de suma importancia hacerlo lo más rápido posible.

—Todo está en orden—dijo al finalizar su chequeo—Sólo nos queda firmar el alta y es todo tuyo Aome.

Aome sonrió, y pronto firmó el papel que Sesshomaru le dio. Al terminar de firmarlo, Sesshomaru sintió como si una parte de él se fuera con ese papel, esa parte era Aome, ya el problema había terminado, Souta estaba bien…no había forma de verse de nuevo.

Los acompañó a la salida, dándole indicaciones a Aome y a Souta sobre lo que tenía que hacer en esa semana y lo que no debía hacer. Pronto se encontraron frente al auto de Aome. Les ayudó a meter las cosas, no era algo que hicieran los médicos con sus pacientes, pero eso era lo de menos para él tratándose de Aome.

Suspiró con pesadez al ver que Souta se subió, y Aome haría lo mismo, así que decidió que lo mejor era regresar, así estaba por hacerlo cuando…

—Sé que quizá no necesitas asesoría para un divorcio ya que no estás casado pero igual puedo asesorarte en otras cosas, te dejo mi tarjeta, si necesitas algo llámame—le dijo Aome mientras lo tomaba de de una manga con su mano izquierda y con la derecha le estiraba su tarjeta.

—Claro que lo haré Lic. Higurashi—dijo de forma coqueta sin querer—Igual si un día te sientes mal, ya sabes donde encontrarme.

—Eres cirujano—rió suavemente—No me imagino buscándote por un problema de tos o gripe.

—Tengo estudios de medicina general, así que no sería problema—dijo sonriendo—Aún así Lic. Higurashi también le dejo mi tarjeta—sacó una tarjeta de su bata y se la entregó.

—Ok Doctor Taisho, un placer conocerlo y cuente con ello, seré una paciente leal, aún si no es su ramo—dijo burlona.

Ambos se sonrieron, pero una vibración en su bata hizo que se rompiera el momento, leyó el mensaje viendo que le tocaba atender una urgencia. Se despidió rápidamente y se dirigió a su misión.

— ¡Guau! ¿Qué fue eso hermana?—dijo Souta interesado al ver a su hermana ponerse al volante.

—Nada importante—dijo tratando de hacer como si no fuera nada—Unas indicaciones para que te recuperes pronto.

— ¡A otro perro con ese hueso!—dijo Souta riéndose a carcajadas—En fin hermanita tendrás que agradecerme ya que gracias a mí encontraste a mi futuro cuñadito y por lo que veo él estará de acuerdo—sonrió burlón pero se quejó de dolor al sentir un golpe en sus costillas— ¡Oye con cuidado todavía me duelen!

—Para que sigas burlándote—dijo Aome con una sonrisa macabra en su rostro.

*--*--*--*--*​

De nuevo en su oficina atendiendo sus asuntos de la empresa, se sentía un poco fastidiado, nunca antes se le había hecho tan pesado su trabajo y eso que era lo que más amaba.

Suspiró con pesadez al ver que tenía muchos archivos que revisar, pero ¿De qué se sorprendía? Llevaba años con la constructora. Hizo la computadora aun lado frustrado, en eso entró su amigo Miroku.

—Veo que este día no amanecimos tan bien ¿cierto?—dijo al verlo sentado mirando hacia el techo, y con una mano en la nuca. Lo conocía bien y sabía que así era cuando se encontraba molesto por algo.

—Creo que llegué a la vejez antes de tiempo—dijo fríamente—Tantos años con estos problemas y ahora resulta que me incomodan.

—Deberías vacacionar—dijo Miroku—Además no le eches la culpa a la vejez, más bien admite que tu divorcio dejó daños secundarios en tu vida.

—Era lo mejor—dijo—Se estaba volviendo costumbre…

—Eso es lo que tú crees, pero por como lo veo…parece que no fue así y al final algo surgió de esa unión solo que no lo ves amigo mío—dijo con una sonrisa en su rostro, ya sabía que Inuyasha se molestaría por esa afirmación, o se sorprendería.

—Como sea—dijo restándole importancia—Era costumbre nada más, y si estoy como estoy es porque no sé como buscar a Aome, me dio tanto gusto verla de nuevo…

—Amigo ya no somos niños de secundaria, además quedaron como amigos ¿no?—dijo Miroku.

—Sí, en efecto…

—Pues búscala…—dijo como si fuera tan fácil.

—El que sea mi amiga, no la obliga a involucrarse conmigo, además conociéndola sé que eso es lo que piensa, soy su amigo más no tengo por qué hostigarla.

—No es hostigamiento—se rió Miroku—Es solo una cita de dos viejos amigos que un día fueron novios, y vuelven a ser amigos, es todo…

—Miroku—fastidiado—No sigas, Aome no es como todas las mujeres…

—Bien Inuyasha, si tanto miedo te da hablarle solo, pues organizare una cita doble—sonrió ampliamente—Vaya ¿Por qué no lo pensé antes?—Inuyasha lo miró extrañado, ya creía que su amigo estaba perdiendo la poca cordura que creía tener—Salimos los cuatro, tú con Aome y yo con Sango, ya verás que si le digo a mi Sango que me ayude convence a su amiga a que salga con nosotros, bueno más bien contigo.

— ¡Por favor!—se burló Inuyasha—Sango es su mejor amiga, y no cae en semejante cosa…

—Verás que sí, además Sango y yo ya estamos saliendo, y créeme sé como convencerla, igual tu fuiste amigo de ella…

—Si pero siempre defendía a Aome.

—Pues lo intentaré Inuyasha, y amigo desde ahora te digo que si Aome acepta tendrás que pagarme una ronda en Starbucks bar ok.

— ¿Ya empezamos con las apuestas?—dijo nervioso.

—Así es, si Aome va a la cita me pagas la ronda y si no va pues yo…

—Dejas de joderme la existencia con que te haga paros con “X” chica ok, ya me cansé de que me tomes como comodín—bufó.

— ¡Uy que genio!—se burló—Y yo que lo hacía para hacerte más ligera tu soltería y así encontrarás en alguna de mis chicas a la ideal—dijo como si nada, mientras Inuyasha lo fulminaba con la mirada.

—Nunca hemos tenido los mismos gustos Miroku—dijo molesto.

—Concuerdo contigo en eso, como no lo pensé…

—Por cierto Miroku—dijo mirándolo con burla—Sé de buena fuente que Sango es excesivamente celosa y si se entera de que tú la engañas, créeme no te alcanzará la vida para semejante castigo—sonrió imaginándose a su amigo siendo torturado por la psicóloga al descubrirle una infidelidad.

—Inuyasha soy muy hábil no se dará cuenta, en fin quedamos en eso, si gano me invitas al bar y sino gano pues me consigo a otro que me ayude a mentirle a mis chicas…—dijo muy tranquilo—Y descuida Sanguito no me matará, soy sigiloso en lo que hago—sonrió con arrogancia. No por nada tenía una larga trayectoria de vil mujeriego desde sus muy tiernos ocho años, que claro a los doce se consagró como mujeriego total. Así que ya creía saber a que problemas se enfrentaría y como evadirlos…Amplió su sonrisa recordando todo eso, total psicóloga, doctora, ama de casa, eran mujeres y él sabía como tratar con las chicas.

—Eres un caso perdido amigo—dijo con fastidio Inuyasha y se concentró volviendo su vista al computador, mientras Miroku seguía en su mundo de fantasías.
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N.A: Bueno sin mas por el momento ya en estos dias pongo el 10, y ehm llevo apenas hasta el doce, me tardare un poco por k tengo un niño en casa T-T y creanme es dificil (lo de niño es entre comillas de niño no tiene nada u.u salvo el caracter y berrinches u.ú) Pero bueno creanme que no lo abandonaré y por cierto les hago la invitacion a que lean mis fic Indebidamente enamorada y Remembranzas =) bueno ya me voy antes que mi "niño" me quite de aqui bye ^^

 

Hola chicas, gracias por su inmediata respuesta y

Saori: Lo sé es rara la forma en que pongo a sessh, pero digamos q lo tuve q acoplar a gustos de chicas en otro foro (bueno en k hubiera mas sesshoxkag) Y que en parte a Sessh lo puse más sumiso con su padre xD pero le iré cambiando el caracter eso sí, en este cap, veras un sessh muy muy muuuuuuy fuera de lo normal xD aún así me alegro que te guste ^^

Ivana: Jajaja, si como ves ya les urge descendencia a los suegros xD! jaja me alegra que te esté gustando y espero éste cap más ;) P.D: Tambien espero con ansias la paliza de Miroku muajaja


Bueno aki vamos ^^:

Cap.10 Te ofrezco mi hombro.​

Llegaron a casa de Aome y pronto lo acomodó en una habitación que tenía desocupada, la de su padre.

—Hermano espero no te incomode quedarte en el cuarto de papá, ya que tengo también el de visitas pero tú eres mi hermano—dijo Aome—Y bueno siéntete como en casa.

—No me incomoda hermanita—se rió—Gracias, al menos tengo otro recuerdo más del viejo.

Una vez instalado en la habitación, Souta se decidió a hablar con su hermana de una buena vez, le quedaba poco tiempo para explicarle y ponerla a salvo, aún no había indicios de que estuvieran tras ella, alejarse de ella tantos años la salvó de muchos incidentes detestables, eso y la gran masa de mentiras que había en la familia.

—Bien creo que te dejaré un momento para que descanses—escuchó decir a su hermana, sacándolo de sus pensamientos.

—No Aome, creo que será mejor que hablemos de una vez sobre lo que te dije en el hospital—serio— Sé que no entenderás muchas cosas, pero es conveniente que lo sepas, ojalá no te hubiese dicho nada así estarías más a salvo, pero…igual si no lo sabes estás en doble peligro.

—Bien, esto es inevitable—suspiró Aome—Te escucho entonces…

Lo que escuchó la sorprendió aún más de lo que se había sorprendido al tener en sus manos los resultados de la investigación que le pidió a Hojo. Era una sarta de mentiras tan grandes las que había vivido…que ya no sabía ¿Qué pensar?

—Hermana… ¿estás…estás bien?—preguntó Souta al ver a su hermana como ida cuando finalizó parte de su relato…

— ¿Debería estar mal?—preguntó con ironía.

—Creo que no fue buena idea decirte todo esto ahora…

—Descuida Souta, ya he investigado por mi propia cuenta y muchos de los datos concuerdan con lo que dices pero…—su voz sonaba frustrada— ¿Cómo hicieron para hacer creer a los demás que yo estaba muerta? Bueno mi otra identidad, Paola, Pamela lo que sea ¡carajo!—apretó sus puños con coraje, lo miraba con una mezcla de coraje, confusión, tristeza…

—Eso se debió al atentado que sufrimos los cuatro en el auto, claro que ninguno de nosotros lo recordará, éramos muy pequeños, yo era un crío de once meses y tú una niña de tres años…

—Entiendo—dijo molesta— Pero… ¿Acaso también era válido hacerme creer que… ¡por Dios el hombre que amé como padre no era más que mi tío!?

—Mi padre tuvo suerte de ser gemelo ¿no crees?—preguntó un tanto preocupado por las reacciones de su hermana.

Aome no respondió, no sabía ¿Cómo sentirse, qué pensar, qué decir? Ese hombre amable que siempre creyó era su padre, no era más que el hermano gemelo de su padre, ¿Cómo pudo su padre condenarlos así? Se creyó todo el juego, porque su “padre” mostraba dolor de haber perdido a su mujer, de no saber de ella y de su hijo por un descontento que tuvieron. Sintió coraje con su tío por haber actuado así, aún a su muerte… lo recordó moribundo, agonizando pidiéndole que se cuidara, y jamás le dijo la verdad ¡que ironía! Se suponía que la gente cuando siente de cerca su hora de muerte es cuando revela muchas cosas… ¿Por qué su tío no lo hizo?

De momento recordó el pequeño “sacrificio” que hizo al casarse con Kouga por darle gusto al que creía era su padre, lo maldijo internamente por todas las mentiras, porque él también era partícipe en ese juego. Maldijo haber nacido en esa familia, todos sus misterios, todo el dolor causado al estar lejos de su madre y hermano…

—Escucha Aome—la voz de su hermano la sacó de sus pensamientos—No culpes al tío Daigo—hizo una pausa para ver su reacción—El nombre de nuestro padre es Daisuke, cuando sufrimos el accidente tú entraste en un estado de shock muy crítico, no hablabas, y tanto nuestros padres como mi tío estuvieron de acuerdo en que te quedaras a su lado; No era el plan hacerte creer que Daigo era tu padre, pero cuando saliste del shock no recordabas gran cosa y te apegaste a Daigo como si fuera papá por su gran parecido, fue entonces que pensaron que era la mejor forma de protegerte, igual no recordabas el nombre de papá ni el de mamá, ni a mí…

Aome lo escuchaba tratando de recordar algo a esa edad, pero era imposible, a menos que se sometiera a una especie de tratamiento con un psicólogo en el cual le hiciera recordar ese suceso.

—Si mi tío supo fingir que extrañaba a mamá y a mí, no era que fingiera, las personas que viste en esa foto no eran más que su mujer fallecida e hijo también fallecido…La tía Ayame y el pequeño Daniel, ellos murieron en un accidente causado el mismo día y hora que en el de nosotros, pues como no sabían con exactitud ¿a quién atacar? atacaron a ambas familias sólo que Daigo se encontraba trabajando y en el accidente murieron aparte de su mujer e hijo su hija Aome que era un par de meses más grande que tú, en sí tú terminaste supliendo ese papel, Aome es quien está en la tumba que lleva tu nombre…

Aome salió de la habitación, no pudo soportarlo más…no quería escuchar más…por esa razón había sido fácil el engaño. Souta vio a su hermana salir preocupado, esperaba que lograra asimilar toda esa información tan confusa y a la vez de la cual resultó un muy buen rompecabezas formado en aquel tiempo por sus padres…

Recordó el día en que recibió la noticia por boca de sus dos padres, tenía sólo ocho años, lo afectó tanto que tuvo que ir varias veces a un psicólogo para asimilar las cosas, claro un psicólogo que conocía bien a sus padres…cosa que supo hasta que cumplió dieciséis años pero para ese entonces ya había aceptado bien su papel.

*--*--*--*--*​

Aome se encontraba frustrada y confundida, pensó en llamar a su amiga Sango pues pensaba que necesitaba a alguien profesional para esto pero deshizo la idea sabiendo que se confundiría igual…

Decidió salir sin avisar nada, tomó su auto y recorrió un poco la ciudad sin saber a donde ir, su mente estaba hecha ovillo de pensamientos, ideas y algunos recuerdos por todo lo que habló con su hermano. Pronto sin saber ¿Cómo? Estacionó su auto en una cafetería muy bien conocida para ella, sí la del hospital en que estuvo su hermano, no entendió ¿Por qué paró ahí? Pero decidió entrar, de igual modo entre tanta gente agobiada por la salud de sus familiares, y ella agobiada por las revelaciones, encajaría perfecto en el panorama sin que nadie le preguntara nada o la mirara de forma extraña.

Pidió un café americano, y se sentó en una mesa del rincón junto a una ventana, a meditar en lo que tomaba su café.

*--*--*--*--*​

Su operación había salido bien, por fin sentía que la confianza y el gusto por su profesión regresaban de nuevo, eso lo hizo sentirse aliviado, con más ganas de ganar esa votación de la cual sería efectuada en medio año más.

Ya había acabado su turno pero decidió irse a tomar un café antes de irse, ya se le había hecho costumbre, más cuando estuvo Aome en ese tiempo. Una rutina nueva no le afectaría, aunque no sería igual por la parte faltante ella.

Pidió un capuchino y se fue a sentar a la mesa que solía compartir con Aome, al menos podría revisar ciertos expedientes que tenía pendientes. Al irse acercando se incomodó un poco de que la mesa estuviera ocupada, pero conforme se iba a acercando…

— ¿Aome?—preguntó extrañado.

Cuando Aome alzó su mirada, se preocupó al ver que al parecer estaba llorando, aunque era un llanto en silencio, vio que ella apartó su mirada evitando que le viera más en esa situación, y limpiando sus ojos conteniendo el llanto.

— ¿Estás bien?—preguntó preocupado— ¿Puedo sentarme?

No dijo nada, sólo asintió, él iba a sentarse frente a ella, pero decidió sentarse junto a ella, igual ella no le vio, estaba más ocupada en contener el llanto ante la presencia de Sesshomaru, pues le resultaba vergonzoso, desde hacia años que no lloraba y menos delante de alguien.

Sintió que unos brazos la rodeaban, sintiendo la calidez del cuerpo de Sesshomaru, se sorprendió un poco, más cuando Sesshomaru hizo que ella recargara su cabeza en su hombro…

—No tienes porqué avergonzarte de que te vea llorar, tampoco tienes porqué contenerte Aome—le acarició la cabeza—Si no quieres decirme está bien, no sé ¿Qué es lo que tienes? Pero puedes llorar abiertamente si quieres, nadie te cuestionará, aquí hay mucha gente con penas, así que no te verán y si lo hacen no te dirán nada…

—Sesshomaru yo…—las palabras no le salían con facilidad.

—Tranquila Aome, si quieres llorar hazlo, te ofrezco mi hombro y si quieres yo lloraré contigo también, puedes desahogarte abiertamente nadie te dirá nada y tampoco te preguntaré nada después…—ambos se miraron fijamente por un momento, Aome no pudo decir más, sus ojos comenzaron a bañarse de lagrimas, escondió su cara en el pecho de Sesshomaru y lloró abiertamente abrazada a él.

Sesshomaru no sabía que problema tendría ella para estar así pero notaba que era uno muy fuerte, podía sentir mucho dolor en ella, la abrazó con fuerza pegándose más a ella, y lloró igual con ella, nunca en su vida había llorado con otra persona, sintiendo la pena ajena como propia, él no sabía que pasaba pero casi podía sentir su dolor como si fuera de él mismo…

La gente que veía la escena, pasaba de largo, algunos pensaron que entendían el dolor, muchas de esas personas en la cafetería era gente que estaba al borde de perder a un ser querido, otros lo acababan de perder, para otros con más suerte ya se había salvado su familiar y sólo esperaban que los dieran de alta…

Nadie se percató que Sesshomaru era doctor, pues ya iba vestido de civil. Los únicos que miraban conmovidos la escena eran los que atendían el lugar, ya estaban acostumbrados a presenciar escenas así, y siempre por lo regular era por la pérdida del paciente por el cual el familiar estaba ahí.

*--*--*--*--*​

Miroku había logrado convencer a Sango de hacer la supuesta cita doble, no tuvo que rogarle tanto, pues al contarle el plan a la joven, le pareció muy buena idea, más que nada porque ya no quería ver tan sola a su amiga. Aún así…

—Miroku yo haré que Aome acepte ir, pero no pienso a ayudar a Inuyasha a reconquistarla, estoy de acuerdo con que Aome debe salir más seguido, pero no me meteré en su vida personal amorosa—dijo Sango.

—Pero van en plan de amigos amor ¿Qué tiene de malo?—dijo Miroku.

—Sabemos que no es en plan de amigos corazón, así que no me taches de ingenua que de eso ni una pizca tengo—dijo Sango—Acepto que me gustaba ver a Aome con Inuyasha, pero han pasado ya muchos años y muchas cosas han cambiado.

— ¿Qué quieres decir con eso?—extrañado— ¿Es que Aome ya no siente nada por Inuyasha? Sería extraño siendo que por lo que sé de ti, ella adoraba a mi amigo.

—Si pero como te dije, el tiempo pasa y te cambia, no sé que sienta Aome por Inuyasha, y tampoco lo pienso averiguar.

—Ok cariño pero entonces ¿Si me ayudarás con la cita?—preguntó ansioso.

—Lo haré, sólo que no me hago responsable de los resultados ok.

—Ok, ¡gracias cariño eres la mejor!—la besó fugazmente en los labios, sonriendo de oreja a oreja.

—Miroku…dime que el motivo de tu felicidad por que yo te ayude no se debe a que apostaste con Inuyasha…—dijo la joven sabiendo ya el resultado.

—Me conoces corazón, siempre apostamos…—seductor.

— ¿Y de qué trató la apuesta?—un poco molesta, esperando que no comprometieran de más a su amiga.

—Descuida, sólo que si Aome aceptaba ir a la fiesta Inuyasha me pagaría una cena—esto último lo mintió—Y si Aome no aceptaba pues yo dejaba de molestarlo por un tiempo…

Sango suspiró aliviada, se rió un poco y lo miró como si se tratara de un niño pequeño.

—A veces eres tan infantil querido—le sonrió y lo abrazó recordando que al menos el que él haya salido con ella no se debía a una apuesta, más que nada por la depresión por la cual pasaba Inuyasha, y recordando también otras apuestas que le descubrió después en esos días, muy infantiles la mayoría.

—Bueno infantil o no, así me quieres—susurró a su oído sonriendo arrogantemente, y haciéndola estremecer con su aliento.

—Sí, supongo que tendré que trabajar con mi síndrome de Wendy y a ti con el de Peter Pan-burlona.

—Bien entonces es hora de irnos al país de nunca jamás, para que seas la mamá de todos los niños perdidos que tengo—bromeó y en su abrazo la cargó, llevándola a la habitación—Espero que aceptes por las buenas, ya que de igual forma pienso llevarla Srta. Wendy…

—Mientras me prometas que me defenderás de las garras del capitán Garfio acepto Peter Pan…—sonrió de forma coqueta siguiéndole el juego.

—Palabra de Peter Pan, ¡no dejaré que el Bacalao te aparte de mi lado Wendy!—sonrió seductoramente, dicho esto ambos se besaron con pasión dejándose llevar por el momento…

*--*--*--*--*​

Después de unos minutos en el que Aome se desahogó y Sesshomaru la acompañó, Aome ya se había calmado, sintiéndose un poco apenada por la situación vivida con el doctor.

—Sesshomaru gracias…—dijo Aome aún con su cabeza en el hombro de él y tomando su brazo izquierdo con ambas manos, un poco nerviosa.

—No fue nada—sonrió él—Gracias a ti por la confianza…

Y como prometió no le preguntó nada sobre ¿Qué había pasado para ponerla así? Por dentro moría por preguntarle, pero le había dicho que si quería llorar lo hiciera y él no preguntaría nada después…Miró su reloj darían las nueve de la noche en punto.

—Aome es un poco tarde, creo que sería bueno si me permites llevarte a tu casa, seguro Souta te estará esperando…—dijo un tanto incómodo por arruinar el momento, pero no podía seguir así, y tampoco quería parecer un aprovechado por la situación.

Aome asintió, y se dirigieron a la salida, Aome llevaba su auto.

—Bien te llevo en tu auto, el mío está en el estacionamiento pero puedo mandar por él más tarde—dijo Sesshomaru y Aome asintió, le dio las llaves de su auto y pronto le fue indicando el camino a casa.

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N.A: Y como dice porki, esto es to, esto es todo amigos xD algo así pues bye.

 

Ok aqui la conti ^^ a ver q les parece jeje?

Cap. 11 Secuestro.​

Al llegar a casa de Aome, ambos se sorprendieron de ver patrullas afuera de su residencia, Aome sintió que su corazón le latía con fuerza en ese momento sólo pensaba en su hermano, al detener el auto salió corriendo seguida de Sesshomaru, algo le decía que no andaba bien.

— ¿Qué pasó aquí?—preguntó al acercarse a un oficial.

—Srta. Retírese nadie puede entrar…

— ¡Está es mi casa! Exijo saber ¿Qué pasó aquí?—molesta, pero al ver que en el suelo había tres cuerpos cubiertos con una bolsa negra palideció. Sin importarle los gritos del oficial y de Sesshomaru corrió hacia el primer cuerpo que tuvo a su alcance. Con un poco de terror decidió descubrir el cuerpo se alivió al ver que no era su hermano, pero no disminuyó su miedo al ver dos cuerpos más, no alcanzó a verlos ya un oficial la había detenido.

—Srta. Es mejor que salga.

— ¡Está es mi casa, estaba mi hermano! ¿Dónde está Souta?—alterada, pronto Sesshomaru se acercó a ella y la abrazó, después un oficial fue hacia la pareja contándoles los detalles y preguntándoles algunas cosas.

Luego en compañía de Sesshomaru la dirigieron a los cuerpos, sintió terror antes de verlos pero ninguno era su hermano, se alivió un poco por eso pero a la vez sintió pánico, al parecer su casa había sido tiroteada y no encontraban a su hermano. Pronto un oficial dijo haber encontrado un celular, con un video.

— ¡El celular de Souta!—dijo al reconocerlo Aome, Sesshomaru la miraba serio pero con preocupación en sus ojos, y los dirigieron a una cabina donde se suponía estarían otros agentes para hacerles preguntas.

Cuando entraron a la cabina, vieron a un hombre alto vestido con uniforme negro que tenía siglas de la PJM con el celular en las manos, al verlos se presentó como el agente Torres de la Procuraduría de Justicia de México (PJM).

—Su hermano grabó unas palabras dirigidas hacia usted antes de que atacaran el lugar, y también se grabó el momento del tiroteo…

—Quiero verlo…—decidida.

—Escuche tal parece que esto fue un secuestro, secuestraron a su hermano…—dijo el oficial.

Aome se quedó fría al escuchar eso, pero era demasiado obvio, se recuperó un poco de su impresión—Quiero ver el video—cortante.

El oficial asintió y le pasaron el celular, las palabras que dijo su hermano nunca se lo olvidarían.

—“Hermana si estás viendo esto, quiere decir que mis planes no resultaron como quería, debí saber que la noticia te destrozaría por completo, pero lo peor de todo es que te involucré de más, e hice lo que no quería poner en riesgo tu vida, lo lamento…—dijo mostrando cierta culpabilidad y tristeza en sus ojos, pero luego se recobró mirando decidido la cámara—Aome—su voz se volvió seria y dura—Pase lo que pase, digan lo que digan, no pagues nada ni hagas nada para salvarme, vendrán por mí en unos minutos más, no pienso escapar ya que seguro si lo hago te esperarán y te llevarán—cerró sus puños con fuerza—Por favor escucha esto, cuando estés con los oficiales busca al agente Robles, él sabe de éste caso y el pasado de papá y mamá, y también busca a la agente Stephie Prados, pídele que te lleve a mi departamento y busca debajo de mi cama, hallarás un paquete con instrucciones, ahí te diré que ir haciendo, no te preocupes por mí, todo esto ya lo tenía contemplado y repito hagan lo que hagan no intentes salvarme…Te quiero hermana, no lo dudes…—le sonrió a la cámara.”

Pronto oyó como voces se escuchaban a lo lejos acercándose cada vez más ala habitación de su hermano, lo vio ponerse en guardia con su arma…

“Recuerda hagan lo que hagan no intentes salvarme, esto ya lo tenía contemplado, no te preocupes por mí”

Fueron las últimas palabras en su video, y vieron como tres tipos abrían la puerta, escucharon disparos y vieron caer a los tres hombres que habían ido por él, pero luego entraron cinco más, uno fue herido en el brazo, pero después oyó quejarse a su hermano y vio como los tipos se acercaban a él, vio a su hermano dando batalla en todo momento, le quitaron su arma y vio que le daban un golpe en la nuca con un arma, cosa que lo aturdió, pero no pudo hacer más, fue atado rápidamente y le taparon la boca también, y después entró un hombre vestido de gabardina negra y traje negro, con un sombrero negro al estilo gánster de los años veinte o treinta, podían ver que su cabello era de un color negro y sus ojos no fueron vistos llevaba lentes oscuros.

“—Higurashi es un gusto que no hayas huido como siempre, aunque debo admitir que esperaba llevarme a tu preciada hermana, así al menos mis hombres y yo nos habríamos divertido un poco—dijo el gánster—Y por cierto gracias por eliminar a esa basura—señaló a los hombres que su hermano hirió y sin sentimiento el hombre terminó de matarlos, ante la mirada suplicante y asustada de esos tres hombres—Vámonos—dijo con voz cortante a los demás. Se acercó al hombre que su hermano hirió en el brazo y le dijo—Tienes suerte de que sólo te diera en el hombro, sino ya estarías haciendo compañía a esos tres idiotas Juromaru.

El tipo lo miró con odio—Musou—gruñó con molestia y el hombre siguió su camino los demás lo siguieron con Souta en sus brazos, ya que se necesitaron tres hombres para poder llevarse a Souta.”

De suerte nadie se dio cuenta que el celular había grabado todo, pero al oír los nombres se dieron cuenta que el celular de Souta les dio una pista importante para buscar.

—Por lo que investigaron mis compañeros—dijo el oficial—Estamos tratando con gente asociada a la mafia japonesa—los miró esperando su reacción—Sabíamos bien que nuestro compañero el oficial Nava estaba trabajando en este caso desde hace muchos años, seguramente aún antes de entrar a la academia de policías, necesitaremos su colaboración para poder resolver esto cuanto antes y aunque el oficial no quiera ser salvado, trataremos de hacerlo—dijo decidido.

Aome deseaba que en verdad su hermano se salvara, no podía permitir que muriera y menos así—Oficial Torres—dijo mientras él ya nombrado oficial y Sesshomaru la veían expectantes—Ignoraba todo esto de mi familia, pero ayudaré en lo que pueda, sólo tráiganlo a salvo, con vida…—al decir esto su voz se quebró, Sesshomaru la abrazó de inmediato.

—Tenga por seguro que así será—le dijo el oficial—En un momento llamaremos a los agentes Robles y Prados, son los que sabían un poco más sobre el caso—dijo y salió de la cabina dejando solos a Sesshomaru y Aome.

— ¿Estás bien?—preguntó Sesshomaru al estar solos, no había dicho nada en ese tiempo porque trataba de entender todo el material que había visto, además de las cosas que había presenciado.

—Lo lamento—suspiró con pesar Aome.

— ¿Por qué?—extrañado.

—Por mi culpa estás pasando algo que seguro es incómodo para ti, ya ni quiero pensar ¿Qué pensarás sobre mí? Con eso de que mi hermano fue secuestrado por mafiosos y…—trató de ahogar el nudo en su garganta que se hacía presente cada vez más recordando el video y las palabras de su hermano— ¡Debí quedarme con él!—gritó con impotencia— ¡Debí pedirle una disculpa por haber actuado como lo hice al saberlo todo! Debí tratar de protegerlo de inmediato—esta vez sus lágrimas se hicieron presentes.

Sesshomaru la abrazó de nuevo y sintió como ella se sostenía de sus brazos como si sintiera que se fuera a caer—Tu hermano es muy valiente, se sacrificó él por protegerte…

Aome se soltó a llorar, mientras sentía que Sesshomaru la seguía abrazando sin decir nada.

*--*--*--*--*​

Después de haber tenido una noche pasional en compañía de su “Peter Pan” Sango se despertó y se dirigió a la cocina no sin antes dirigirle una mirada tierna a su amante que seguía dormido, realmente parecía un niño estando así…

Se dirigió a la cocina, y tomó un vaso de leche, sí sonaba infantil pero la necesitaba, decidió prender el televisor y ver algunas noticias en lo que el sueño hacía su reaparición.

Puso el canal de noticias, justo en ese momento indicaban que se había denunciado una balacera en una residencia, y pasaron al reportero a cargo de la noticia.

“Así es Javier Y nos encontramos en la mansión Higurashi, perteneciente a la abogada Aome Higurashi, donde se suscitó una balacera en la cual resultaron tres muertos, aún no han sido identificados”

Fueron pasando las escenas de la casa de Aome, y los cuerpos que habían perecido en el ataque, Sango se alarmó y trató de llamar a Aome, más esta no contestaba su celular.

*--*--*--*--*​

Sesshomaru y Aome iban saliendo de la delegación, habían hablado largo tiempo con los compañeros de su hermano, y también el secuestrador había hecho su primer llamada.

Flash Back.​

Aome seguía escuchando los detalles sobre el caso que su hermano llevaba trabajando y que lo guió al secuestro, los policías le habían dicho que no tardarían en hacer la llamada los secuestradores; Sesshomaru estaba a su lado, estaba algo sorprendida y apenada, ya que en ningún momento la dejó sola, y aunque él no entendiera del todo lo que pasaba, tampoco preguntaba sólo escuchaba.

Al celular ya lo habían coordinado para que cuando llamaran se supiera en que lugar se encontraban los secuestradores… Aome miró a Sesshomaru, este iba a decir algo apenas cuando el celular comenzó a timbrar.

Los oficiales le hicieron la seña de que contestara…

— ¿Diga?—preguntó tratando de ocultar sus nervios.

— Aome Higurashi—afirmó la otra voz, que era la de un hombre.

—Así es…

—Como sabrás tenemos a tu hermanito en nuestro poder y ¡adivina!—dijo en tono de burla.

— ¿Cuánto quieren por él?—preguntó molesta.

—No cariño—se burló—El dinero nos sobra, pero ustedes tienen algo que nos pertenece y que tu hermano ni tu padre nos quisieron devolver.

— ¿Qué cosa?

—Tu hermano tiene unos papeles que nos pertenecen y que son muy importantes para el jefe, será mejor que los busques y nos lo entregues cuanto antes, eso si no quieres tener de vuelta a tu hermano pero en pedacitos—amenazante—Eso, a menos que seas tan insensible como tu hermano que dejó morir a tu padre, de la misma forma que él está ahora y todo por no entregar los papeles, dime ¿acaso es más importante esos papeles que la vida de tu hermanito?—burlón.

— ¿De qué hablas? ¡Yo no sé nada de esos papeles! Mejor dime ¿Cuánto dinero quieren?—dijo Aome extrañada y ala vez ganando tiempo para saber la ubicación de ese teléfono.

—Es una lástima que no lo sepas, pero descuida te motivaremos a encontrar esos papeles cuanto antes, por cierto dile a esos idiotas que dejen de intentar localizarme, estoy en un teléfono público muy alejado así que no vale la pena—se burló, los policías al escuchar eso por el alta voz se miraron molestos—Es demasiado no pedir policías ya que el pequeño César es uno de ellos, pero preciosa mañana te llamo para ver como va tu búsqueda y recuerda te motivaremos a encontrar esos papeles, y como pista sólo te diré que son documentos que datan de los años veinte…—dicho eso colgó.

Fin del flash back.​

Desde esa llamada Sesshomaru la notó algo retraída, no podía volver a la mansión así que le sugirió ir a su departamento, para que intentara descansar, aunque dudaba que lo hiciera…

—Sesshomaru gracias por tu ayuda—dijo Aome.

—De nada Aome y puedo ayudarte más, sólo que tienes que explicarme ¿Qué pasa? Aunque haciéndome una idea de lo que escuché, esto involucra más a tu hermano y tu familia que a ti, y desde años atrás…

—No quiero involucrarte de más.

—No me siento involucrado, sólo que puedo ayudarte mejor si me permites tengo contactos que podrían servirnos para buscar esos papeles…

—Es mejor que no, gracias por ofrecerme tu casa, pero creo que será mejor ir con Sango…—trató de irse.

Aome sintió que alguien la agarraba del brazo antes de irse y vio a Sesshomaru con una mirada seria pero denotaba preocupación.

—Escucha, no me molesta haber pasado por esto, no me importan las consecuencias, quiero ayudarte—dijo decidido y mirándola fijamente—En serio, quiero ayudarte—repitió.

—Podría ser peligroso para ti, podrías resultar herido si me ayudas—dijo Aome.

—Es un riesgo que estoy dispuesto a correr…

—Pero si no me conoces ¿Por qué hacerlo?—confundida.

Sesshomaru no sabía que decirle, simplemente le nacía ayudarle y lo haría aunque ella no quisiera de eso estaba seguro.

—Bueno es lo menos que podrías dejarme hacer—dijo con seriedad—De igual modo la policía ya me embarcó—dijo recordando que tanto a ella como a él les habían pedido su colaboración y claro él no se negó aunque no supiera nada en sí—Y sobre Sango sería mejor que no la envolvieras en esto, ya que entre más gente lo sepa más peligroso será para ellos…

Aome seguía sin decir nada, no quería más riesgos para los demás pero Sesshomaru tenía razón, el que lo supiera Sango sería una mala idea, quizá también tratarían de atacar a su mejor amiga, ante esa idea negó con la cabeza deshaciéndose de la idea, puede que Sango siempre estuviese con ella en todo momento de alegría, tristeza, importante o aburrido, pero no la expondría a semejante peligro, era mejor hacer lo que su hermano intentaba alejarse por bien de ella…

—Bien Aome, si no quieres que te ayude lo entiendo, no insistiré—dijo Sesshomaru al no obtener respuesta—Le diré a los oficiales que te lleven con Sango y yo me voy a mi departamento—indiferente.

—Espera Sesshomaru—dijo apenas y este volteo a verla—Aceptaré tu ayuda, tienes razón es mejor que sólo lo sepamos tú y yo por el momento, bueno eso si aún sigue en pie tu oferta de ayudarme…

Sesshomaru sonrió con satisfacción y asintió.

—Espero no traerte más problemas—susurró caminando junto a él.

—Es un riesgo que estoy dispuesto a correr—dijo de forma arrogante, cosa que extrañó a Aome, jamás había visto lo orgulloso que era el doctor Taisho, y tampoco entendía ¿Por qué se alegraba, si él no tendría ningún beneficio, al contrario…? Aome negó con la cabeza, los hombres eran difíciles de entender…pero no podía negar sentirse aliviada al saber que al menos contaría con él para rescatar a su hermano.
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N.A: Fue todo por el momento chicas ^^.

Saori: Gracias por tu comentario, y bueno digamos q me da por explicar las cosas xD jaja en fin a ver q tal éste cap :)

Ivana: Jaja los suplentes X xD ntc! vale q bueno q te haya gustado y ehem..lo complikare un poco mas pero espero ir esclareciendo el fic y sus misterios xD

Uhm es todo y nos vemos dentro de poco :)

 

Cap.12 Pruebas.​

Después de haber llegado al departamento de Sesshomaru, y de no poder descansar aunque quisiera por estar pensando en todo lo sucedido, al igual que debía ir al departamento de su hermano para buscar las cosas que le dijo que buscara.

A la mañana siguiente la oficial Stephie fue a buscarlos para llevarlos al departamento de Souta, Aome se sorprendió ya que nunca lo había ido a visitar a su departamento, que se encontraba a una hora de la ciudad, era un barrio marginado donde se ubicaba.

Por un momento a Aome y Sesshomaru se les cruzó la idea que ese lugar era muy peligroso como para que Souta haya querido rentar ahí, a Stephie no le sorprendió, sólo el hecho que su compañero viniera de familia adinerada, y que él haya querido vivir de forma exageradamente modesta para su nivel.

El cuarto sólo consistía de una habitación, un baño y otro cuarto donde era la sala, comedor y cocina. Buscaron debajo de su cama que era individual, hallaron una caja de zapatos de color verde agua, al abrirla se encontró con fotos y algunas cartas.

En la tapa de la caja tenía una dirección escrita, Mc Allen Texas ¿Qué tenía que ver la dirección con la caja? Vio una foto de una mujer de cabello castaño claro y ojos color miel, con dos niños a su lado, uno era una bebé de aproximadamente un año y un niño de cuatro o tres años quizás, también estaba una mujer madura sonriendo y de cabello castaño oscuro, usando lentes de sol, ambas mujeres eran muy bellas; la bebé se veía hermosa sus ojos eran de color azul, y su cabello era rizado y de un color entre rubio y castaño, el niño usaba también unos lentes de sol con borde rojo, su cabello era azabache y su piel clara. Estaban sentados en un muy bonito jardín, dedujo que la foto fue sacada en verano, pues se veía que habían puesto una alberca y los niños vestían su traje de baño y flotadores.

Volteó la foto “Junio del 2000 Hailie 11 meses. Derek 2 años 10 meses” la letra sin duda era de su hermano, y la fecha era de hacía unos once años…por un momento imaginó que su hermano la había hecho tía y ella sin saberlo.

— ¿Encontraste lo que dijo tu hermano?—preguntó Sesshomaru.

—Sí pero no son documentos, sólo cartas y fotos…—Sesshomaru tomó la fotografía que ella tenía en sus manos.

—Así que eres tía—sonrió.

—Creo que me acabo de enterar—dijo mientras miraba otra foto, en donde su hermano mucho más joven tomaba en brazos a un recién, y los adornos de la casa decían ¡felicidades fue niño! “Derek 11 de agosto de 1998” Así que su hermano padeció la paternidad precoz, suspiró con pesadez, estaba feliz, sorprendida y a la vez angustiada, si algo le pasaba a su hermano sin duda esos niños quedarían…

— ¿Encontraron lo que buscamos?—interrumpió Stephie desde la sala-comedor-baño del departamento.

—No del todo, sólo fotos y recuerdos—dijo Aome cerrando la caja y al cerrarla cayó una nota.

“Aome, hermana si es que llegas a ver esta caja te pido de favor que entregues esto a la dirección indicada, encontraras muchas respuestas a tus dudas cuando llegues allá, por cierto busca un poco y encontrarás una maleta esa es para la policía son mis investigaciones, sólo una cosa hay un sobre de color amarillo tiene la fecha de 1920, ese sí no se los entregues aún si es posible que no lo vea (ni tampoco esta nota) Stephie hasta que yo te indique en la próxima pista. Te quiero hermana y mucha suerte.

Atte. Tu hermano menor.​

PD: ¡Felicidades desde hace 13 años eres tía! Y adivina ¡Ella es seis años mayor que yo juju!”​

—Te mataré—dijo mientras con su mano derecha hacía bola la nota, mostrando enojo.

— ¿Pasa algo?—preguntó Sesshomaru extrañado por lo que escuchó.

—No, nada grave, Souta se salvará de los secuestradores y de eso me encargaré, pero no se salvará de mi castigo—dijo con voz tétrica, cosa que asustó a Sesshomaru más no lo hizo notorio.

Sin que Sesshomaru se diera cuenta guardo la nota echa bola y busco la supuesta maleta, era una maleta deportiva de color negro, con la palomita de la marca NIKE grabada en sus costados de color blanca. Abrió la maleta y encontró el sobre amarillo, Sesshomaru iba a avisarle a Stephie del hallazgo pero Aome le hizo una seña para que no lo hiciera, y le dio a guardar el sobre. La miró interrogante.

—Te contaré más tarde—le susurró al oído y asintió, guardo el sobre en su saco, al menos ese día se le ocurrió ir de traje y su saco tenía una bolsa en el interior del mismo para guardar algún papel, y el sobre de tamaño carta quedó bien pasando desapercibido y confundiéndose con la espalda de Sesshomaru al acomodarse de nuevo el saco. Pronto Stephie entró y vio la maleta.

—La acabamos de hallar, creo que esto es lo que buscábamos—dijo Aome—Son datos de sus investigaciones, y también tiene fotos.

*--*--*--*--*​

El hallazgo de la maleta fue algo impactante para los policías, era un orden cronológico de las fechas en que su padre había pertenecido a la mafia japonesa y algunos negocios que había hecho aparte con otros sicarios y narcotraficantes. En ella resaltaba el nombre de Naraku Gushiken, en sí la mafia era principalmente dominada por esa familia, pues había más nombres y todos eran hermanos de ese hombre, y lo más sorprendente fue encontrar datos sobre los sucesores de cada uno de los hermanos Gushiken. Ahí fue que encontraron el nombre de Musou y Juromaru, los tipos que habían secuestrado a Souta.

Claro en esos datos ellos aparecían como pequeños de cinco años, ese material había sido obra de Daisuke Higurashi. Pues también hallaron un cuaderno que más bien parecía narrar ¿Cómo era que la organización trabajaba? Todo en base a los negocios o bien crímenes que Daisuke había cometido. Direcciones, puertos, teléfonos, sólo esperaban que muchos de esos datos no hubiesen cambiado, ya que en los últimos años la batalla entre la policía y las mafias había sido tan intensa que muchas cosas habían cambiado.

Aome no entendía mucho las explicaciones de los oficiales, pero el caso era que eran pruebas muy buenas para ir atrapando a esos tipos, aún así se necesitaban más pruebas frescas, pero al menos ya tenían algo.

Su celular sonó de repente, suspiró al ver que era Sango.

— Sango—contestó.

— ¡Aome por Dios mujer! ¿Cómo estás? ¿Por qué no me has hablado? Me tienes con el alma pendiendo de un hilo por no saber de ti, te he marcado incontables veces desde que vi las noticias ¡y no contestas!—reclamó.

—Sango lo lamento pe…—no la dejó acabar.

— En fin, ¿estás bien? ¿Por qué tirotearon tu casa? ¿No te hirieron? ¿Los muertos quienes eran? ¿Dónde estas? ¿Con quien estás? ¿Por qué no me contestabas y porqué no me llamaste Aome? ¿Necesitaras terapia para superar el trauma?

—Sango…—dijo con cierta molestia.

—Aome no me has contestado nada, ya dime ¿Dónde demonios estás?—le gritó y Aome perdió la paciencia.

— ¡Podrías callarte! ¿Cómo quieres que responda si no me dejas hablar?—reclamó, mientras escuchaba que su amiga al fin le dejaría explicar—Agradezco tu preocupación amiga, estoy bien, no contesté ni hablé porque me la pasé en la delegación toda la noche y apenas saldré de ella, no estoy detenida sólo estoy diciendo lo que vi, no sé por qué tirotearon mi casa, afortunadamente no estaba ahí cuando pasó y llegué cuando todo había acabado y no me hirieron obviamente, los muertos eran unos criminales seguro fue con ellos el enfrentamiento…

—Pero entraron a tu casa…

—Seguro querían asaltarme, y pues no sé quizá los otros matones también tenían el mismo plan y al verlos empezó el conflicto, pero estoy dando parte a las autoridades para que investiguen y me aclaren, sigo en la delegación como decía y estoy con…con Souta—mintió—Y no, no necesito terapia aún así gracias.

Sesshomaru se sorprendió de lo que le dijo a Sango, y por un lado pensó que era lo correcto así no metería más gente en esto.

—No, Souta no está herido estaba conmigo cuando pasó todo, y no, no te lo puedo pasar está dormido, no, es mejor que yo te busque después amiga, me salió un caso al extranjero y me iré hoy mismo con Souta así que cuando regrese te buscaré…—decía Aome.

— ¿Estás loca? ¿Cómo se te ocurre viajar con lo que ha ocurrido?— Sesshomaru escuchó esa parte, sin duda a Sango le había impresionado lo que Aome le decía sobre su caso al extranjero.

—Es mi trabajo, y no me detendré por pequeñeces y antes que lo digas Souta está de acuerdo y no necesita terapias tampoco, y por ésta vez será mejor que no me despidas yo te llamo llegando allá…

*--*--*--*--*​

Sango suspiró resignada, en verdad su amiga había perdido la cabeza, nadie en su sano juicio que hubiera sufrido ese susto de encontrar su casa con patrullas, tres muertos a causa de un tiroteo, pensaría en viajar, claro nadie excepto Aome.

Sólo esperaba que Souta estuviera bien y no se pusiera mal debido al impacto que vio, además de apenas haber salido del hospital…

*--*--*--*--*​

Lo de irse al extranjero pensó que lo decía para que Sango no la buscará pero cuando le dijo que planeaba irse a Mc Allen a dejar lo que le pidió su hermano y que tomaría el vuelo de esa misma noche, si se sorprendió pero esperaba eso de ella, al menos no en ese día pero si lo esperaba…

— ¿En verdad quieres acompañarme?—preguntó Aome cuando llegaron del aeropuerto al departamento de Sesshomaru, y justo la sorprendió pidiendo también un boleto para él, después hizo varias llamadas en el camino para pedir un permiso de faltar a su trabajo unos días, y lo extraño es que escuchó al director del hospital muy feliz porque al fin tomara vacaciones, tan así que le habían dado tres semanas. Aún así prefirió no decirle nada al respecto.

— ¿Y todavía lo preguntas?—dijo Sesshomaru un tanto burlón y a la vez temiendo que ella no quisiera que le ayudara en todo eso, más al ver ella misma lo que hizo de llamar a sus superiores para inventarles que debía viajar a Japón porque la salud de su madre estaba frágil y no sabía ¿Cuánto tardaría? Claro que su jefe se había puesto ¿Feliz por pedirle vacaciones? Aunque al saber los motivos se notó preocupado y por eso le dio las tres semanas, eso lo había sorprendido él pensaba que su jefe lo odiaba, total si ella no lo dejaba acercarse directamente, él lo haría por su cuenta, después de todo ya empezaba a gustarle todo el misterio de esa familia.

—Ah lo sé, sólo que no me lo esperaba—dijo Aome.

—No olvides que prometí ayudarte y eso hago, así que sólo deja que me de un baño rápido y nos vamos—dijo él.

—Está bien.

— ¿Segura que no quieres ir a tu casa por ropa, o comprar algo para el viaje?—preguntó.

—No, no creo que tardemos y de ser así, tengo una casa cerca de Mac Allen—contestó.
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N.A: Hasta el momento es todo, ehm graias por comentar y nos vemos pronto ando trabajandoe n el 13 xauu!! =)