Los días en el Host club

****** Ya tenía todo escrito! pero le dí click a un botón y se borró. c*** Ahhh! pero comenzaré de nuevo.
Este fic es para la actividad, espero les guste.
Personajes: Haruhi, Shaka (uno nuevo), Tamaki, Kyouya, Hikaru, Kaoru, Honey y Mori.
Temática de hoy: Escocia

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**Un chico nuevo**​

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Haruhi iba corriendo por los pasillos, ya que estaba llegando tarde al Host club. Pero al caminar tan rápido, se tropezó con un chico, no era reconocido, por lo que supuso que era nuevo. Él tenía los ojos grises, cabello color castaño mezclado con rojo, era de baja estatura, y tenía la misma contextura que Haruhi.​

–Perdona, déjame ayudarte–Dijo levántandola y sacudiéndole el polvo.​

–Estoy bien gracias– Dijo.​

Miró su reloj y se despidió del chico.​

–Que chico más misterioso– Dijo con curiosidad.​

*En el Host club*​

Haruhi había llegado casi a tiempo, Tamaki no estaba molesto con ella, pero el rey tras las sombras, no pensaba igual.​

–Haruhi, llegas 2 minutos tarde. Aumentaré tu deuda, ahora tienes que conseguir 200 clientas más– Dijo escribiendo en aquella libreta que jamás soltaba.​

Haruhi no dijo nada, sólo fué a vestirse con los que le correspondía. Cómo la temática de ése día era de Escocia, los Hosts llevaban puesto, una falda con cuadros, zapatos tipo escoces, boinas verdes y marrones, chaleco y camisa manga larga, y de accesorio una gaita.​

–Ya estoy lista– Dijo saliendo del vestidor, y yendo seguidamente a prepararse para cuando llegaran las clientas.​

–Kyouya, ¿no habías dicho que la falda de Haruhi iba a ser más larga?– Le susurró Tamaki algo molesto al chico.​

–Tamaki, la falda de Haruhi es la más larga de todas, así que por favor no exageres– Le dijo el pelinegro sin quitarle la mirada a su libreta.​

–P- pero! ¡no me gusta que muestre sus piernas!– Dijo molesto y haciendo pucheros.​

**El Host club está abierto**​

–Bienvenida...​

Se escuchaba cada vez que una clienta entraba a la tercera sala de música. Pero para la sorpresa de los chicos, no era una chica...​

–Es él, el chico con que me tropecé– Dijo sorprendida la castaña.​

–Vaya... un chico... Kyouya, ¿sabes quién es él?–Le pregunta Tamaki curiosamente a Kyouya.​

–Sí, es Yoshinori Shaka, del 1-B.–Le responde al rey del club.​

–E! E! ¿QUÉ ES ESTO?– Pregunta espantado el chico.​

–Normalmente no tenemos clientes hombres... pero tú eres bienvenido, ¿a quién escogeras?–Le dice tomándolo de la barbilla.​

–S- Suou Tamaki!– Dice cayéndose al suelo.​

–¿Sabes nuestros nombres?– Pregunta Hikaru.​

–S- sí, son famosos, todos en el Ouran lo saben, y ustedes ya saben el mío. Es- es un placer.– Dice dándole la mano a cada uno.​

–El placer es nuestro...– Dice Tamaki tomando su mano y besándola.​

–Y- yo...​

–Senpai... lo vas a espantar– Le replica Haruhi al rubio.​

–¿Esto es Escocia?– Pregunta él sorprendido por lo hermoso que se veía el salón de música.​

–Pues sí, siempre tenemos este tipo de temáticas, pero esta vez decidimos decorarlo. Por cierto... no quiero ser grosera... pero... ¿que te trajo hasta aquí?–Le pregunta Haruhi al chico.​

–Quería tocar mi violín aquí. Pues era el único lugar donde había silencio.– Le responde el chico, se da la vuelta y se dan cuenta de que traía un maletín con forma de instrumento.​

–¿Tocas violín? puedes tocarlo ahora, ya que todavía no llegan clientas.– Le insiste Haruhi, quien quería escucharlo tocar.​

–De acuerdo– Le afirma. ​

Él comenzó a tocar una canción tan hermosa, que hacía que a los Hosts se les vinieran recuerdos a la mente.​

–Fué hermoso...– Dice Tamaki inspirado.​

–Ah, gracias mi papá me la cantaba, tocarla en mi violín hace que lo recuerde– Dice sonriendo, pero a la vez, caen dulces lágrimas, pues de pequeño tocaba con su padre el violín.​

–¿Es- estás bien? no llores, venga, te traigo algo de agua.– Dice Kaoru yendo a buscar agua.​

–Y yo te traigo pañuelos.–Dice Hikaru yendo a buscar pañuelos.​

–Gr- gracias que amables– Dice secándose las lágrimas y tratando de sonreír.​

–Oye, te propongo algo... ¿que te parecería tocar el violín en el club?– Le propone Tamaki a Shaka.​

–E- eso estaría bien– Dice sonriendo. ​

Y en ese momento Kyouya pensaba... ​

(Sí, una muy buena idea, que toque el violín, las clientas se sentirían a gusto con su música y así le dirían a sus amigas que vengan y ellas les dirían a sus amigas que vengan, y el sistema de puntos aumentaría...)​

–Ten tu agua y tus pañuelos– Le dicen ambos gemelos.​

–Gracias. Estoy muy agradecida con tod-...–Había un pequeño secreto...​

–¿Dijiste agradecida?– Preguntan todos.​

Y en ese instante miran a Kyouya.​

–¿No lo sabían? ya era bastante obvio.​

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FIN DEL CAPITULO 1​

 

**El Caribe**​

–¿No lo sabían? ya era bastante obvio.– Mencionó el rey en las sombras.​

–¡Por favor! ¡no se lo digan a nadie! ¡si se enterarán de que yo...!​

–¿Tú qué?– Preguntó Tamaki.​

–Yoshinori Shaka, muy poco conocida por ser nueva en el Ouran. Se disfraza de chica, por ser fugitiva, su padre, es un millonario mafioso, que años atrás huyó de la ley. Dejando sola a su pequeña y a su querida esposa. Se le ve obligada a disfrazarse de chica, para ocultarse de la mafia, ella y su madre viven lejos de aquí.– Contó Kyouya.​

–¿Cómo sabes todo eso?– Preguntó Shaka.​

Todos en el club quedaron boquiabiertos por lo que acababan de escuchar.​

–Mi familia tiene una estación policial, todavía buscan a tu padre. Si lo encontramos irá directamente detrás de las rejas.– Dijo el Ootori sin compasión alguna.​

–¿Cómo puedes decir eso Kyouya? ¿no sabes por todo lo qué está pasando ésta chica?– Le respondió el Rey del club.​

Shaka salió inmediatamente de allí, por alguna razón se sentía culpable. Y para empeorar, al siguiente día tendría que ir allí a tocar su violín.​

–Kyouya sempai, ¿tu familia compró una estación de policía?– Le preguntaron los gemelos a éste.​

–Sí. ¿Más preguntas?– Dijo él.​

–No.– Dijeron todos.​

Siguieron con sus actividades normales, como siempre, y como si nada hubiese pasado. Al siguiente día la temática sería del Caribe.​

**Al siguiente día**​

Los Hosts tenían planeado todo para las clientas, viajaron a una playa privada de los Ootori, para hacerlo ver más real. El viento... soplaba sus cabellos, el sol... bronceaba sus cuerpos, la arena... cubría sus pies, el mar... los refrescaba. Cientos de clientas llegaron al instante, Honey y Haruhi se encargaron de las bebidas, Kyouya de los camareros de la administración del restaurante donde todos comerían, Mori se encargó de la seguridad de la playa, Tamaki y los gemelos se encargaron de las primeras clientas que venían.​

–¡Oigan chicas! ¡juguemos al voleibol!– Les dijeron los gemelos a las clientas.​

–Hikaru- sama, kaoru- sama. Somos las mejores en voleibol, si les ganamos... ¿no se molestarán?– Preguntaron nerviosas las clientas.​

–No lo creo, llevo más de dos meses practicando, y estoy seguro de que ganaré.– Dijo con confianza Hikaru.​

–Y, a mi no me importa tanto.– Dijo Kaoru con una sonrisa.​

**Conversación de Tamaki con una de sus clientas**​

–Tamaki- kun, ¿fue tu idea venir a esta magnífica playa?– Le preguntó la chica a éste.​

–Claro mi dulce princesa, siempre pienso en lo mejor para que tú y yo disfrutemos un rato a solas.– Le habló con mucho amor éste.​

–Tamaki- kun, te amo.– Le dijo ésta.​

Tamaki quedó impactado, ¿puede que en todo ese tiempo las clientas realmente se enamorarán de algunos de los Hosts? y si eso pasara ¿que harían? ¿romper sus corazones?​

–Ah! ¡se me olvidó que tengo que hacer algo!– Dijo huyendo.​

–¡Pero, Tamaki- kun!– Gritó con tristeza al ver que se fue.​

**Fin de la conversación**​

–¡Kyouya! ¡ayúdame!– Dijo preocupado el Rey del club.​

–¿Qué ocurre Tamaki?– Dijo Kyouya, tranquilamente bebiendo su agua de coco.​

–¿Eso es agua de coco?– Preguntó Tamaki.​

–Sí, pero en fin ¿que querías decirme?​

–¡Una de las clientas acaba de decir que me ama! y yo creo... ¡que lo dijo en serio!​

–Tamaki, luego hablaremos de eso, creo que varias clientas ya te lo han dicho, así que vuelve a trabajar.– Le dio órdenes el vicepresidente del club.​

–De acuerdo...– Dijo desanimado.​

Mientras tanto....​

Haruhi se sentó tranquilamente a descansar bajo la sombra de una palmera, lo malo fue que cuando se descuidó, Honey- sempai se dio un chapuzón, y como no tenía flotador, ni sabía nadar, ya era evidente lo que le iba a pasar.​

–¡¿Honey- sempai!? ¡¡se está ahogando!!– Grita Haruhi preocupada​

De inmediato Mori fue a su rescate llevándolo en brazos. Todos se acercaron a él preocupados, le acobijaron y le dieron chocolate caliente, lo que le hizo sentir mucho mejor.​

–Mmm, chocolate...–Dijo bebiendo -como un bebé- de un biberón.​

–Kyouya- sempai, Shaka no ha venido.– Le dijo la castaña a éste.​

–Ya vendrá.–Dijo él con confianza.​

–¿Le avisaste donde se haría la temática de hoy?– Le preguntó Haruhi.​

–Sí, le avisé.​

Pasaron segundos, minutos, horas, y la castaña de ojos grises no llegaba.​

*A la hora del almuerzo*​

–El cocinero del restaurante no vino. ¿Quién va a cocinar?– Pregunta Kyouya.​

–¡Yo!– Exclamó con emoción Tamaki.​

–Tú no Tamaki, cocinas horrible. ​

(Se va a un rincón)​

–Yo lo haré.– Dijo Mori.–Hikaru, Kaoru...– Dice sus nombres pero no los ve.​

–Están jugando voleibol.– Le responde Honey.​

–¿Todavía?– Preguntó Haruhi.​

–Ya han perdido 3 veces, pero no se rinden.– Le respondió Honey.​

–Entonces, tú, Haruhi, tráeme cangrejos, y almejas. Y si consigues otras cosas, también.– Le dijo Mori únicamente a Haruhi.​

–De acuerdo.​

(Tamaki se levanta)​

–¿Y yo qué hago?– Pregunta Tamaki emocionado.​

–Tú Tamaki... lava los platos. – Le responde él.​

–Ya que...– Dice triste.​

Mientras tanto...​

En un autobús de camino a la playa de los Ootori, iba Shaka, totalmente hambrienta, ése día las actividades en el club comenzaban a las 10 de la mañana, pero como vivía tan lejos, no se llevó ni el desayuno, también por lo olvidadiza que es.​

–Voy tarde... y con hambre. – Dijo poniendo una mano en su estómago (o más bien barriga xD)​

Al llegar, a las 2:05 pm de la tarde, vio que todos ya habían comido en el restaurante, quedo babeando, pero no podía llegar y quejarse.​

–Lamento mucho la demora... hoy les tocaré el ukulele, debido a que le queda mejor, y es una canción muy bonita...​

–¿También toca el ukulele?– Le susurra Tamaki al oído a Kyouya.​

–Al parecer...​

Luego de que todos pasaran un rato agradable, al escuchar su música, y conversar, ya anochecía, Kyouya llamó a su chófer para que llevara a cada una de las clientas a sus respectivos hogares. Hikaru y Kaoru seguían jugando, ya habían perdido 342 veces, pero todavía no se rendían, al llamarles Kyouya, y decirles que ya tenían que irse... se entristecieron.​

–Adiós Hikaru y Kaoru- sama. – Le dicen ambas a éstos.​

–Adiós!– Se despide Kaoru alegre.​

–Adiós...– Dice Hikaru y se tira en la arena.​

Shaka caminaba tranquila y solitaria por la playa, tenía hambre. Pero en lo único que pensaba, era en su padre.​

–Papá... tú me enseñaste a ser fuerte, a no tenerle miedo a nada, ni al enemigo. Me enseñaste que tu debilidad, es tu fortaleza. –Decía cerrando los ojos y recordándolo.​

–Shaka. – Dice Kyouya apareciendo detrás de ella.​

–¡Aaah! Ootori, yo... yo estaba...​

–Toma.– Le dice éste. –¿Tienes hambre no?​

–¿Esto es...? ¡Ootoro! – Dijo alegremente mientras se lo come.​

–Así que... ¿extrañas mucho a tu padre?​

–Eh... pues, la mayoría del tiempo, sí. Pero, sé, que él está bien.​

–¿Cómo lo sabes? – Le pregunta él.​

–No lo sé. Sólo lo siento... gracias por la comida, me voy a casa.​

–No lo sé, sólo lo siento... mmm, interesante...​

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FIN DEL CAPÍTULO 2​